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La formación de profesores de Educación Física en tiempos |
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Profesora de Educación Física. Licenciada en Ciencias de la Educación. Master en Didáctica, UBA. |
Nancy Ganz |
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Trabajo presentado en el IIIº Encuentro Deporte y Ciencias Sociales y 1as Jornadas Interdisciplinarias sobre Deporte. UBA - 13 al 15 de Octubre 2000 |
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http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 6 - N° 29 - Enero de 2001 |
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Se presentan a continuación algunos elementos sobre los que nos es urgente debatir a la hora de reformas y mejoras en los desempeños reales profesionales en nuestro campo. Estamos haciendo mención a conceptos estructurantes de la formación como son la formación en investigación y la profesionalización. En las Jornadas del año anterior (1999), había enunciado algunas cuestiones en lo referente a la investigación en Educación Física, continuando en la misma línea intento referirme ahora a la formación en investigación desde los Institutos y a la revalorización de modelos alternativos de profesionalización.
La Ley de Educación Superior. 24.491/95 en su Título: de la Educación Superior no universitaria, (Cap. 2. De las instituciones de educación superior no universitaria.), explicita en su art. 21: (...)". Las provincias y el gobierno de la Ciudad , arbitrarán los medios necesarios para que sus instituciones de formación docente garanticen el perfeccionamiento y la actualización de los docentes en actividad, tanto en los aspectos curriculares como en los pedagógicos e institucionales, y promoverán el desarrollo de investigaciones educativas y la realización de experiencias innovadoras.
En la Resolución Nro. 63 del C.F.E. de Octubre del 97 encontramos que:
(...) "La función promoción e investigación y desarrollo asociada a las de formación y de actualización y perfeccionamiento, tiene el propósito de introducir la perspectiva y las herramientas de la investigación en el análisis de las situaciones cotidianas de las escuelas, como así también en el diseño, la implementación y la evaluación de estrategias superadoras. Permite recoger, sistematizar, evaluar y difundir experiencias innovadoras de docentes y escuelas. Contribuye, además, a la generación de marcos conceptuales que fundamentan diferentes cursos de acción.
Los saberes, las prácticas pedagógicas y la investigación educativa, constituirán ejes complementarios para la construcción y mejoramiento de las prácticas profesionales en las instituciones que forman docentes y serán consideradas actividades interdependientes. Reflexión y acción formarán parte de un mismo proceso. La recuperación de la propia experiencia desde el enfoque de la investigación y el compromiso de los actores involucrados constituirán un elemento significativo para la modificación de las prácticas docentes".
Finalmente en Resolución 116 del C.F.E del 16/11/99, se menciona que…
"...los Institutos de Formación Docente deberán diseñar estrategias superadoras, que permitan la puesta en práctica de acciones de investigación educativa, articuladas con las de formación y capacitación. Y (…) se orientará hacia un concepto de investigación aplicada …proporcionando un campo fértil para la mejor utilización de la capacidad técnica y profesional de los institutos, y facilitando su integración con la comunidad también propiciada por el acuerdo del Consejo Federal de Cultura y Educación al poner dicha capacidad al servicio conjunto del sistema contribuyendo a la solución práctica de los problemas específicos de las escuelas y de los docentes".
La enunciación de estos apartados legales no nos dan cuenta ni definen por sí mismos la compleja tarea social que encierra el concepto de investigación
Cuándo nos preguntamos qué es investigar, estamos pensando:
Por un lado, una investigación supone la formulación de una pregunta, que requiere o busca una respuesta precisa. La pregunta constituye el objetivo de la investigación, lo que se quiere conocer. El proceso o camino para obtener la respuesta es lo que habitualmente llamamos la estrategia o el diseño de la investigación como un conjunto ordenado y secuenciado.
El proceso de investigación es también un diálogo entre el campo de las ideas (que están en la mente del investigador) y el campo de los datos (que están en la realidad concreta). En este sentido, podemos decir que una investigación comienza en el campo de las ideas (cuando el investigador formula una pregunta o enuncia una hipótesis); continúa en el campo de los datos (aquellos que den cuenta de la pregunta o la hipótesis), culmina nuevamente en el campo de las ideas (al leer o interpretar los datos y, de ese modo, obtener la respuesta a la pregunta o la verificación o refutación de una hipótesis o la generación de nuevas preguntas).
Podemos decir también que investigar es descifrar lo real, esta afirmación que es cierta para cualquier campo de la realidad es especialmente atinada cuando hablamos de la realidad social y educativa: investigar los social y lo educativo es descifrarlo; esto quiere decir, los datos que la realidad aporta no hablan por sí solos, no se manifiestan de una manera trasparente y unívoca, hay que decodificar lo que dicen.
En este proceso de desciframiento hay dos herramientas imprescindibles: el encuadre o marco de referencia y los métodos cuantitativos y cualitativos de recolección, análisis e interpretación de los datos.
Investigar es ejercitar el pensamiento crítico sobre la realidad. Esto significa un continuado ejercicio de formulación de preguntas sobre la realidad y búsqueda de respuestas cada vez más precisas.
No hay pensamiento crítico si no hay pregunta; tampoco lo hay si no cuestionamos a las respuestas que hoy tenemos a esas preguntas. Si la realidad es cambiante y compleja, debemos procurar respuestas que den cuenta de esos cambios y de esa complejidad, no quedarnos en las respuestas de ayer o en los simplismos.
Ejercitar el pensamiento crítico supone también descartar nuestros prejuicios y nuestros estereotipos. Si los mismos operan como afirmaciones rígidas e incontrastables, la perspectiva de la investigación nos obliga en convertirlas en afirmaciones a ser comprobadas por la realidad. Y esto es una nota fundamental de la investigación: el criterio de validación de una afirmación es exclusivamente la prueba empírica, la realidad concreta. Las preguntas no se responden en el campo de la realidad, las hipótesis solo se prueban en el campo de la realidad.
La función de la investigación está definida en la Resolución A-141 como promoción e investigación y desarrollo asociada a las funciones de formación y de actualización y perfeccionamiento. En este sentido, tiene el propósito de introducir la perspectiva y las herramientas de la investigación en el análisis de las situaciones cotidianas de la escuela, como así también en el diseño, la implementación y la evaluación de estrategias superadoras.
Toda investigación procura producir conocimiento sistemático acerca de algún recorte de la realidad y todo investigador espera que su tarea aporte al mejoramiento de la situación estudiada. Sin embargo es posible establecer una diferenciación básica: en algunos casos, el interés por la mejora es indirecto; el investigador centra su tarea en el propio proceso de indagación. En otros, la tarea de investigar está orientada de manera directa en la necesidad de incidir en los procesos analizados. La investigación en el ámbito de los IFD, tal como está planteada en la definición precedente, procura producir conocimientos con el objetivo de mejorar las prácticas pedagógicas.
Catalina Wainerman y Ruth Sautu (1997) En la trastienda de la Investigación señalan que: la formación de investigadores es una tarea lenta, un proyecto de investigación tiene una duración mínima de un año, y en promedio, dos (por qué no más). No se debe pretender formar investigadores de hoy para mañana. Esto impone responsabilidades a las instituciones ya que tienen que crear institutos de investigación y promover seminarios de presentación y discusión de los resultados de los estudios que sus miembros llevan a acabo. Tienen que requerir de sus docentes que hagan investigación y que incluyan a sus alumnos en su realización, tienen que formar bibliotecas actualizadas teniendo conciencia que sin ellas no hay investigación de buen nivel.
La investigación en los IFD; además, se plantea como trabajo de un equipo que planifica su tarea en función de:
Decisiones institucionales respecto de la instalación de la función, su contenido y alcances
El reconocimiento de las particularidades (en términos de logros y dificultades) del universo a investigar (las escuelas, el contexto en general, etc.)
Y de las líneas de trabajo priorizadas a nivel nacional, provincial e institucional
De este modo, la investigación es un proceso de producción de conocimientos, y la investigación educativa se propone la construcción de nuevos conocimientos sobre las concepciones, procesos y prácticas que subyacen al accionar educativo.
En este sentido la promoción y el desarrollo antes mencionado apunta a:
La difusión de innovaciones detectadas y sistematizadas en el ámbito de la práctica educativa, a través de dos mecanismos: la inclusión de sus resultados en el curriculum de la formación inicial y continua y la difusión de los mismos en los encuentros, publicaciones, etc.
Si el papel de la investigación educativa es siempre importante, esta relevancia se enriquece al articularse con las funciones de capacitación y formación. La investigación no es sólo un instrumento para el conocimiento, sino también una poderosa herramienta para su transformación. De allí que su desarrollo es imprescindible para la indagación de los problemas educativos a la vez que permite reorientar políticas institucionales y de la práctica pedagógica, esto sería ubicar a la investigación como una actitud del quehacer docente en el establecimiento de un diálogo entre el campo de las ideas y el campo de la práctica.2
La institucionalización de tareas de investigación de los IFD deberá pensarse como un proceso con diferentes instancias o etapas de acciones a desarrollar durante un período de tiempo definido. La duración que demande este proceso será diferente para cada instituto, ya que dependerá de varios factores, entre otros de: la situación inicial, de su experiencia acumulada y del grado de integración de esta función al diseño del proyecto educativo institucional. Este proceso implica incorporar evaluaciones sistemáticas que permitan el seguimiento y ajuste de la implementación de las tareas de investigación.
Lecturas: Educación Física y Deportes · http://www.efdeportes.com · Año 6 · Nº 29 sigue Ü