Ejercicios específicos para el desarrollo de la fuerza en el voleibol | |||
Colegio Peruano de Entrenadores de Voleibol (Perú) |
Msc. Conrado Reyes Savón José Carlos Carvajal Linares Msc. Ernesto Despaigne Paumier Esp. Salvador Menéndez Gómez Lic. Grismel Portuondo Barthelemy |
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Resumen Los ejercicios se elaboraron sobre la base del análisis de los resultados de la investigación científica durante muchos años de trabajo práctico de los autores con voleibolistas de 10 a 20 años. Al abordar las capacidades motrices específicas en su integración tributan al rendimiento de los gestos técnicos, según Moras (2000: 88) quien puntualizó “Las características del voleibol obligan al jugador a desarrollar, además de altos índices de fuerza explosiva, elevadas prestaciones de resistencia a la fuerza explosiva”. Se tuvo en cuenta las características actuales que manifiestan en el voleibol, entre las que se destacan la marcada disminución de la edad promedio, incremento del volumen e intensidad de las cargas de entrenamiento, dominio de las habilidades técnico táctica y las modificaciones ocurridas en las reglas tienen gran incidencia cambios originados en la dinámica de juego. Tales modificaciones más que mejoras técnico-táctica persiguen atraer la atención de los espectadores. Palabras clave: Voleibol. Fuerza. Ejercicios.
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EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 16, Nº 161, Octubre de 2011. http://www.efdeportes.com/ |
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Muestra y metodología
Muestra
La investigación fue realizada en la Lima - Perú. Se tomo como muestra a las 16 atletas de voleibol femenino de la categoría juenil que constituye el 100 %, ocho entrenadores, representa el 100 %.
Métodos científicos que se utilizaron en la investigación son:
Métodos teóricos
Análisis - síntesis: Para la caracterización del proceso de entrenamiento de voleibol en la formación técnico táctica, desde la información obtenida de la literatura consultada, documentación especializada, complementaria y los datos obtenidos con la aplicación de los métodos empíricos.
Inductivo - deductivo: para interpretar los datos empíricos, establecer los nexos, vínculos, relaciones entre los conocimientos obtenidos, distintos momentos y etapas de la investigación.
Análisis de documentos: Se realizó a los distintos documentos, como: planes de preparación metodológica, superación de los entrenadores para establecer comparaciones y detectar las analogías y diferencias entre ellos.
Sistémico - estructural - funcional: Para la elaboración de los ejercicios con un enfoque coherente de los elementos que conforman el proceso de entrenamiento deportivo de voleibol desde el punto de vista técnico.
Métodos empíricos
Observación: obtener la información sobre la preparación técnico táctica de las diferentes actividades que realizan entrenadores y atletas durante el proceso de entrenamiento, como: Unidades de entrenamiento, competencias preparatorias y oficiales.
Encuesta: se realizó con el objetivo de obtener información del colectivo técnico de entrenadores de alto rendimiento.
Entrevista: se realizo con el objetivo de obtener de forma directa la información necesaria para diagnosticar el problema y valorar la aplicación de los ejercicios
Criterios de especialistas: para corroborar la factibilidad de los ejercicios para el desarrollo de fuerza en la formación técnico táctica integral en el proceso de entrenamiento de las voleibolistas.
Matemático - estadísticos: para el procesamiento de los datos obtenidos del análisis de los resultados.
Definiciones de concepto de fuerza como capacidad física
Desde el punto de vista de la física, la fuerza es la influencia que al actuar sobre un objeto hace que este cambie su estado de movimiento, expresándose como la definiera Newton. Es el producto de la masa por la aceleración; expresado en la fórmula y las magnitudes correspondientes: F = M x A (Kg. m/s 2), mientras en el sentido biológico es la capacidad de superar o contrarrestar resistencia mediante la actividad muscular.
La fuerza queda englobada dentro de las llamadas capacidades de condición motriz. Actualmente se define desde las perspectivas físicas y biológicas. La fuerza muscular es la capacidad motora que le permite al hombre vencer una resistencia u oponerse a ella, mediante el trabajo muscular.
La fuerza muscular es una de las cualidades físicas más importante, ella determina en grado considerable la rapidez de los movimientos y desempeña un gran papel en el trabajo cuando éste exige resistencia y agilidad.
Para aumentar el nivel deportivo, la cualidad fundamental que determina la calidad del deportista es precisamente la resistencia a la fuerza. Cuando los músculos se ponen en acción con cierta frecuencia de tiempo y como resultado de la adaptabilidad del hombre se elevan internamente los mecanismos del cuerpo para realizar actividades físicas deportivas con rendimiento.
El desarrollo de la fuerza no sólo aumenta la masa muscular del organismo e incrementa la capacidad para acelerar los movimientos corporales, sino que al realizar ejercicios para fortalecer el sistema neuromuscular, las miofibrillas se activan y se engrasan en dependencia del tipo de fuerza desarrolla (Esto está dado por el volumen y la intensidad de dichas cargas, además de la frecuencia con que tienen lugar dicho estímulo), esto trae por consiguiente, una mayor disposición para realizar las contracciones musculares con alto grado de rendimiento.
Las condiciones que aseguran el perfeccionamiento de la estructura biodinámica y el incremento de la eficacia del gesto técnico en los voleibolistas, están dados en el aumento de su potencial motor y la capacidad energética de producir un esfuerzo explosivo de fuerza en un tiempo limitado. La eficiencia completa del entrenamiento de la fuerza explosiva reactiva y su correspondiente resistencia específica sólo se alcanza en combinación con las formas de entrenamiento de la fuerza máxima.
Los voleibolistas deben prepararse para alcanzar su máximo potencial de fuerza, paulatinamente en los equipos de primer nivel en el alto rendimiento, debe de lograrse la correspondencia necesaria de aquellas capacidades motrices que respaldan un determinado nivel de rendimiento competitivo de Voleibol y no el máximo de fuerza como condición aislada de una capacidad física.
Estructura tipológica de la capacidad de fuerza
Fuerza máxima: Es la fuerza superior que el sistema neuromuscular puede aplicar en presencia de una contracción máxima arbitraria.
Fuerza rápida: Es la capacidad del sistema neuromuscular para superar resistencia con alta velocidad de contracción.
Resistencia a la fuerza: Es la capacidad de resistencia al cansancio que posee el organismo en ejercicios de fuerza de larga duración.
Factores que condicionan el desarrollo de la fuerza
Tipo de fibra muscular: Se diferencian dos tipos fundamentales en los músculos esqueléticos, las blancas o de contracción rápida y las rojas o de contracción lenta.
Ordenación de las fibras: Existen, con respecto a este punto, distintas disposiciones de las fibras en los músculos, por esto pueden existir:
Músculos fusiformes: con fibras paralelas a un eje y mayor distancia entre tendones. Esto permite movimientos amplios y veloces pero poco potentes.
Músculos peniformes: donde las fibras forman ángulo a uno o ambos lados del tendón, son músculos de fuerza.
Coordinación intermuscular: La coordinación intermuscular se refiere a los movimientos coordinados entre los diferentes músculos que componen un grupo muscular (ejemplo: musculatura flexora y extensora de las piernas.
Coordinación intramuscular: Se refiere a la relación que establecen entre sí las estructuras contráctiles del músculo para lograr el esfuerzo necesario para vencer una resistencia específica.
Longitud de los brazos de palanca: Estos son términos puramente biomecánicos que se refieren fundamentalmente a una ley física con la cual se establece, que mientras mayor sea el brazo de palanca, más fácil será vencer la resistencia externa planteada. Y por el contrario mientas menor sea este brazo de palanca mayor será la velocidad de contracción para superar esta resistencia.
Sección transversal del músculo: Si seccionamos transversalmente un músculo se apreciar a simple vista una distribución ordenada de las estructuras que componen este. Mientras mayor sea esta sección transversal o diámetro del músculo, mayor será el número de estas estructuras y por tanto mayor será la fuerza a aplicar en el momento dado.
La edad y el sexo: Estos dos factores se explican prácticamente por sí solos, si analizamos desde un punto de vista fisiológico podemos decir que con la edad va disminuyendo el número de fibras musculares y por ende el diámetro y la fuerza del músculo va en descenso. Esto esta condicionado por factores hormonales que influyen en el desgaste, por así decirlo, del organismo.
El sexo esta muy ligado también a estos factores mencionados, a los cuales se les unen otros de índole genética que dan una mayor predisposición para el desarrollo de la fuerza en los hombres que en las mujeres; aunque actualmente se ha comprobado que un entrenamiento dosificado y regular puede reducir a gran escala estas diferencias.
Además, los registros de fuerza en el hombre, aumentan rápidamente desde los 12 hasta los 19 años, siendo proporcional al aumento del peso. Continúa aumentando masa lentamente hasta los 30 y declina en forma creciente hasta los 60. En las mujeres las posibilidades de fuerza aumentan generalmente hasta los 30 años.
Estados emocionales: Estos factores emocionales están ligados a la psicología como ciencia y dan cierta predisposición positiva o negativa, (volitiva por ejemplo), para realizar los esfuerzos físicos que demanda el mejoramiento de esta capacidad.
Temperatura: Cuando se realiza un trabajo de calentamiento previo, el músculo se encuentra en mejores condiciones para realizar un trabajo más rápido y potente.
Períodos óptimos de entrenabilidad de la fuerza atendiendo a la edad
Según conocimientos científicos y aspectos prácticos, el inicio de la entrenabilidad de la fuerza se sitúa en los niños entre 7 y 9 años. Para el incremento de la fuerza antes de los 10 años se deben diferenciar varios aspectos:
Complementariamente se puede realizar un entrenamiento muscular constructivo (fuerza máxima) con intensidades de hasta el 40%, teniendo en cuenta el efecto que pueda provocar sobre el sistema esquelético (visto esto en el entrenamiento en edades tempranas.
En estas edades no se observa un aumento de la sección transversal de las fibras musculares, debido a un nivel bajo de testosterona intracelular.
Entre 8 y 11 años inicialmente se deben aplicar ejercicios métodos y medios para mejorar la fuerza explosiva.
Se debe basar sobre todo en la coordinación intra e intermuscular.
Se debe encaminar al mejoramiento de la fuerza relativa
Características anatomo - fisiológicas:
El músculo infantil es sumamente elástico, con suave tono y poca definición. Muy bien irrigado, permite una rápida recuperación luego del esfuerzo.
Las articulaciones son muy móviles y elásticas.
Los huesos largos presentan cartílagos de crecimiento en sus extremos. Son flexibles y se encuentran en proceso de osificación.
La columna vertebral ha terminado de establecer sus curvas normales recién en la segunda infancia (seis a diez ‑ doce años).
El sistema nervioso responsable de la estimulación muscular y de las respuestas correspondientes permite observar:
En el niño pequeño (hasta los seis años) el tiempo de reacción y la ejecución total de los movimientos son lentos, por encontrarse las vías nerviosas en pleno proceso de maduración y diferenciación. A partir de esa edad se produce un fenómeno de aceleración y desarrollo motriz que culmina alrededor de los diez años con una acentuada mejoría en el tiempo de reacción y una alta frecuencia en la transmisión de impulsos nerviosos.
La coordinación dinámica general se estructura paulatinamente siguiendo etapas sucesivas de maduración y experiencia motriz, las cuales no pueden ser alteradas o pretendidamente aceleradas. Las respuestas motrices ante cualquier estimulo de movimiento son globales y unitarias.
Las conductas motoras del niño implican la utilización de grandes sinergias musculares, por falta de capacidad de análisis de los músculos necesarios para dar una respuesta económica y óptima.
Planificación del entrenamiento de fuerza dentro del plan de preparación física
Cada vez con mayor frecuencia los entrenadores dirigen sus máximos esfuerzos hacia la planificación más dinámica de las cargas deportivas, expresadas en una relación adecuada entre los componentes de la preparación del deportista. En este sentido existe actualmente gran preocupación a nivel nacional e internacional.
También se insiste en la individualización del entrenamiento deportivo. De acuerdo con Harre, Mateeve, Herrera, y Ranzola, este principio consiste en la adecuación de las cagas, métodos y el resto del medios de entrenamiento deportivos a las capacidades morfofuncionales del jugador. La individualización, entre otros aspectos, considera:
Edad biológica
Años de vida deportiva.
Especialización por funciones de juego.
Estado psicofuncional del atleta
Cuando no se tenga en cuenta estos aspectos en la planificación del entrenamiento, se dan en el atleta alteraciones que le impiden exponer con claridad su esencia del juego es decir su rendimiento.
Preparación de fuerza general
Esta dirigida al desarrollo de la resistencia de la fuerza, pero tomando como resistencia el propio peso corporal del atleta, a través de los ejercicios de desarrollo físico general con lo que se logra elevar el desarrollo de las capacidades coordinativas al tener un mejor control de su cuerpo. Se caracteriza el trabajo de fuerza general por un elevado volumen, con lo cual se establecen las bases para el ulterior desarrollo de las fuerzas en su manifestación resistencia.
Las sesiones de trabajo se caracterizan por poseer un mayor volumen, no siendo así el trabajo de intensidad que porcentualmente es bajo (50 – 70 %). Los ejercicios auxiliares con peso juegan un papel determinante al realizarse en esta etapa el máximo de ejercicios (8 – 10) con 10 – 12 repeticiones, estos en gran medida son el complemento para el trabajo de gran volumen característico de esta etapa.
Preparación de fuerza especial
Los medios especiales alcanzan su clímax, el trabajo con pesas sufre grandes cambios, pues estos van dirigidos al desarrollo o grupos musculares específicos, los ejercicios especiales deben ir sustituyendo a los ejercicios auxiliares en la medida que se acerca la etapa competitiva. El carácter tan intenso que presenta esta etapa, su duración es corta, de 3 a 4 semanas, no es necesario que la dinámica del trabajo tenga mucha variación, la intensidad es el elemento determinante.
Preparación competitiva
Su carácter por tanto es individual, atendiendo a las particularidades del atleta, no obstante existe una tendencia a reducir el volumen principalmente mediante el numero de ejercicios por sesión (2-3) y (4-5) clásicos y auxiliares respectivamente así como la frecuencia semanal del trabajo con peso (2-3). El objetivo central de la misma es modelar el entrenamiento para la competencia principal, la reducción de la carga de entrenamiento debe producir una supercompensasción en los días señalados de la competencia principal.
Recomendaciones
Las pruebas disponibles sugieren que el entrenamiento de fuerza puede producir mejorías significativas en niños como en adolescentes, y que los programas de este tipo pueden realizarse de forma segura si se respetan varios aspectos importantes de seguridad.
Debe enseñarse al niño la técnica adecuada para cada ejercicio.
Deben evitarse intensidades de entrenamiento altas, y no deben realizarse intensidades máximas antes de que el niño llegue a los 16 años de edad.
Deben evitarse los movimientos rápidos, súbitos y balísticas durante el ejercicio.
Deben realizarse ejercicios de calentamiento antes de las sesiones de entrenamiento, y ejercicios de flexibilidad y enfriamiento después de ellas.
El entrenamiento de fuerza debe usarse como forma suplementaria de actividad física, y no en sustitución de la actividad normal del niño.
El equipo utilizado para los ejercicios debe ser seguro y adecuado para el tamaño del niño.
Los programas de entrenamiento de fuerza deben diseñarse para satisfacer las necesidades del deporte concreto practicado por el niño o el adolescente.
No debe iniciarse ningún programa de este tipo sin la supervisión adecuada de un profesional acreditado en el campo de fuerza y preparación física.
Todas las progresiones de la intensidad del entrenamiento deben hacerse muy gradualmente, los ejercicios deben realizarse en toda la amplitud de movimiento de cada músculo de manera controlada.
Los ejercicios para el desarrollo de la fuerza muscular y la velocidad de contracción pueden dividirse en cuatros grupos. El primer grupo abarca los ejercicios con pesos pequeños, ejecutados a velocidad máxima. El segundo, los que realizan con pesos relativamente elevados. El tercer grupo incluye ejercicios de saltos sin pesos y con diversos grados de elevación del peso corporal. El cuarto grupo esta formado por los ejercicios especiales relacionados de forma directa con los fundamentos técnicos del voleibol.
Lanzamiento de pelota medicinal de 1 Kg. (féminas) y 2 Kg. (masculino)
En la etapa preparación inicial se utilizaran los ejercicios de los grupos primeros, tercereo y cuarto. Se incluyen ejercicios con pelotas medicinales, mancuernas, ejercicios acrobáticos y saltos generales. Los pesos utilizados no deben ser mayores de 2 Kg, y los ejercicios de realizaran con la mayor velocidad. Para los voleibolistas es de gran importancia el desarrollo de la fuerza y la velocidad de contracciones musculares que toman parte en la ejecución de los procedimientos técnicos. La fuerza y la rapidez no solo deben desarrollarse en el sentido general. Sino en los marcos de la estructura de los fundamentos principales del juego.
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