efdeportes.com
Fanatismo autorreflexivo.
Propuesta metodológica y conceptual

   
Antropólogo Universidad de Antioquia, Medellín
(Colombia)
 
 
Juan Fernando Rivera Gómez
juferigo@yahoo.com
 

 

 

 

 
    Este articulo, recoge de manera metodológica y conceptual, los planteamientos que soportaron la propuesta investigativa de mirar el fútbol desde lo social y antropológico, desde el autor como parte y arte de la investigación, en una mirada del fenómeno del fútbol como manifestación social en la que el autor fue parte del colectivo futbolero. Este articulo es parte fundamental de otros ya publicados como: "Personajes, lugares y tiempos: El partido de fútbol como manifestación social"., ¿Quiénes hacen un partido de fútbol?"., "El partido de fútbol como ritual"., "El arbitro: entre el odio y la necesidad", "La tribuna como otro terreno de juego"., y "El fútbol: fiesta, guerra simbólica y guerra materializada". Artículos ya publicados en la revista EFDeportes y que hacen parte de la monografía de grado.

Parte de la introducción de la monografía de grado en antropología titulada:
"Gol eterno: El partido de fútbol mas que noventa minutos, toda una
vida de pasión y etnografía". Universidad de Antioquia, Medellín 2003.
 

 
http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 11 - N° 96 - Mayo de 2006

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Definido como el fenómeno social más importante del siglo XX, el fútbol es el deporte que cuenta con mayor número de adeptos. Su practica no conoce fronteras. El globo se mueve al ritmo del balón, desde los patios de la elite, hasta las polvorientas calles de barrios marginales. Aquellos estudiantes del siglo XIX que unificaron las reglas de lo que consideraron un simple juego de pelota, nunca podrían llegar a imaginarse las dimensiones que adquiriría su iniciativa. Hoy para bien o para mal el fútbol es sinónimo de pasión, sentimiento, odio, lucha, negocio e incluso hasta vida. Whal; 1997

    Pocas cosas en la vida pueden moverse tan rápidamente de un extremo a otro en fracción de segundos, mas aún cuando esos extremos están tocando una gran cantidad de sentimientos y pasiones de millones de personas alrededor del mundo, siendo el fútbol y en particular los partidos de fútbol, el motor principal de esta dinámica.

    En este sentido, es pertinente observar el fútbol como ese hecho social de grandes dimensiones que aparte de ser un juego en su esencia misma, ha desbordado esta concepción idealista y se ha profesionalizado a un grado tal que aparte de convertirse en el deporte con mayor número de seguidores y practicantes alrededor del mundo ha tocado también aspectos propios de la vida cotidiana, que en cierta medida le han conferido ese apelativo de fenómeno y hecho social tan aplaudido por la masa y tan abucheado hasta hace poco por los intelectuales.

    Esta investigación, surge de un interés personal y académico de ver esa otra cara que este fenómeno presenta, la cara de lo simbólico, de lo social, de aquello que desborda los parámetros de lo netamente oficial y concebido como "futbolístico" dentro de esta manifestación deportiva y social.

    Dicho interés, está atravesado por dos circunstancias particulares: la primera que deviene de una experiencia personal como aficionado al fútbol y particularmente como hincha del Club Atlético Nacional, lo cual me incitó a que las experiencias vividas durante más de diez años inmerso en el mundo futbolístico pudieran dar algún fruto como amante y "conocedor" de las dinámicas particulares que allí se suscitan, desde las más íntimas como el accionar interno de una "Barra Brava" de fútbol y las diversas interpretaciones y manifestaciones que allí se dan, hasta las más populares y conocidas por el público en general; Y la segunda, que tiene como directa responsable la disciplina antropológica, la cual me brindó la oportunidad de descubrir la posibilidad de mirar desde diversos puntos de vista las diferentes manifestaciones culturales de la sociedad, incluyendo el fútbol, e incluso de ver desde todos los ángulos posibles la vida misma.

    Es así como surge esta investigación, desde la opción de recuperar toda una experiencia de vida y "modelarla" desde la antropología con el fin de dar cuenta del fútbol no solo como un juego y/o deporte, como comúnmente se ha catalogado, sino como el fenómeno social de gran relevancia en el que se ha convertido.

    En este sentido, la investigación tiene como punto de partida, el concepto que he denominado "La autoridad etnográfica", el cual tiene como propósito hacer valer lo autobiográfico como una posibilidad de texto antropológico, donde la metodología del diario de campo intensivo me permite abordar esta temática académica recuperando la memoria del investigador como investigado, dando cuenta también del origen consciente e inconsciente del interés por la temática, además del peso crítico que da el no solo haber observado como antropólogo, sino el haber vivido como individuo y como colectivo el fenómeno estudiado.

    Así, este concepto, muestra en primer lugar un marco conceptual y teórico acerca del abordaje de esta metodología, para posteriormente plantear un viaje en el tiempo desde el año 1978 hasta el 2001, donde una gran cantidad de experiencias van dando cuenta no solo del proceso vital mismo, sino del porqué en determinado momento se me ocurrió la idea de que tanto fútbol como antropología podrían ir de la mano para construir una alternativa investigativa que en este momento arroja los resultados, además, del porqué el nombre del concepto, dando cuenta de la "autoridad" vivencial y moral de hacer una investigación con esta temática y al mismo tiempo devolverle tanto a la antropología como al fútbol, investigaciones frescas e interpretativas, de las que tanto necesitan.

    Posteriormente, luego de encontrar en esa gran cantidad de experiencias, cuestionamientos muy precisos, me surgió la pregunta clave de esta investigación: ¿Cuál es la real dimensión de un partido de fútbol?, la cual a su vez tiene como trasfondo otros cuestionamientos como: ¿Quiénes hacen un partido de fútbol?, ¿Dónde se juega el partido de fútbol?, ¿Cuáles son los tiempos de un partido de fútbol?, preguntas estas que dan pie a otro concepto ya expuesto llamado "Personajes, lugares y tiempos", el cual trata sobre la conceptualización y abordaje de dichos factores, donde se pretende "romper", o mejor, transformar aquellas visiones clásicas que la oficialidad del fútbol nos ha mostrado como el partido.

    Así, los conceptos de cancha y tribuna que conforman el estadio como el lugar del partido, los noventa minutos como el tiempo del partido, y algunos personajes que se "necesitan" para la ejecución del mismo, se van a ver complementados por otros lugares, tiempos y personajes que también hacen parte del partido y que quizá la oficialidad del fútbol no los considera "tan relevantes" desde la jerarquía propia del orden futbolístico, pero que al mirar este fenómeno desde una perspectiva mas holística e integral, si hacen parte del partido y por ende entran a jugar y a ejecutar una gran diversidad de manifestaciones y comportamientos que este presenta.

    En este sentido, el gran partido de fútbol, va a estar cruzado por tres momentos que lo conforman y que hacen de este un todo integral, que vincula lo netamente futbolístico como lo "extrafutbolístico" que al final de cuentas no sería tan "extra" como se ha pensado; dichos momentos son: el antes, el durante y el después del partido, momentos estos que tienen además de una gran diversidad en cuanto a tiempo y espacio a nivel individual y colectivo, también vinculan diferentes personajes que se habían pensado tenían un papel "pasivo" en la dinámica de un partido desde lo oficial, pero desde esta mirada social cobran la relevancia que en este tienen, viendo este fenómeno en su real dimensión.

    Si bien entonces, este mirar el partido de fútbol desde una posición más amplia, da una primera luz hacia el conocimiento de la real dimensión del mismo, es necesario que esos personajes, lugares y tiempos que en este capítulo se identifican desde sus roles específicos, comiencen a integrarse dentro de una esfera más general, es decir que empiecen a actuar desde su posición, pero inmersos en un conjunto más amplio que al final termine de dar cuenta del partido como un fenómeno social de gran expansión y con uno de los poderes de convocatoria mas relevantes en la sociedad, el cual incluso en cierta medida da cuenta de ella.

    Es así, como el tercer y ultimo concepto titulado "El partido de fútbol como ritual", expone como éste, puede ser analizado desde dicha perspectiva, donde además de cumplir con ciertos parámetros establecidos por Víctor Turner (1980) como propios de un ritual, da cuenta también del cómo el partido puede ser interpretado desde esta posición, la cual puede ayudarnos a comprender aun mas la esencia misma de esta manifestación deportiva y social.

    Aquí, los lugares, tiempos y personajes categorizados en el capítulo anterior desde posiciones particulares e individuales entran en juego e interactuan entre sí, mostrando como el partido de fútbol y por extensión aquellos quienes hacen parte de él, al romper con la cotidianidad, al tener un marco espacial - temporal definido, al tener un escenario programado que se repite periódicamente a lo largo de un tiempo cíclico, al poseer y ejecutar palabras y gestos particulares y codificados, y al poseer en cierta medida una configuración simbólica que lo complementa, están representando y ejecutando un ritual, que podría decirse es mucho lo que hace y dice de una sociedad por medio de las manifestaciones que allí se pueden observar.

    En este orden de ideas, este concepto permite completar esa idea amplia, holística e integral del partido de fútbol, en todos sus tiempos, lugares y con todos los personajes que tienen que ver con este, ya no desde su posición y rol especifico, sino como partícipes de una ceremonia denominada partido de fútbol, en la cual, si bien cada uno en el ámbito individual cumple los rasgos propuestos, es desde sus respectivos colectivos y en la interacción con los demás colectivos de los otros personajes que se puede, desde el ritual, conformar y articularse a esa dimensión sincrética y amplia de lo que representa y da a entender un partido de fútbol.

    Esta mirada del partido como ritual, permite dar a conocer esta manifestación como una posibilidad de interpretación de la sociedad, en cuanto representa, refleja y en algunos casos confronta diferentes manifestaciones propias de esta, demostrando una vez más la capacidad social que el fútbol tiene como algo integrado a la sociedad y de gran relevancia en al ámbito de los estudios sociales en el presente.

    Esta es esta una invitación a adentrarse en este mundo hasta hace poco desconocido, el de los partidos de fútbol, mundo este tantas veces criticado y poco entendido, donde se puede dar a entender que es realmente lo que pasa cada vez que en determinada ciudad o en determinado país un día de la semana se ve cruzado por aquello que algunos han llamado "un opio del pueblo" pero que en últimas no resulta ser tan opio y pasa a ubicarse en un plano tan necesario y tan cargado de representaciones y manifestaciones de diversa índole propias de la sociedad contemporánea, ya que a través de este, se pueden observar una gran cantidad de "cosas" de lo social y por lo tanto este debe transformarse en un objeto de estudio propio de la academia.

    Esta propuesta investigativa, pretendió mostrar el partido de fútbol desde un espectro muy amplio, el cual debe conocerse a fondo para luego poder tener los suficientes argumentos morales, teóricos y conceptuales para estudiarlo y analizarlo desde cualquiera de sus posibles variables de estudio e interpretación: fútbol y violencia, fútbol y política, fútbol y economía, fútbol e ideología, fútbol y... Al conocer cual es la real dimensión del partido de fútbol podremos entender su esencia y su carácter social en todo su furor, antes, solo seguiremos haciendo cada vez más simplista y prejuiciada la visión que de este juego, deporte y/o espectáculo nos han vendido y hemos tenido.

    Para ésta investigación, fue clave construir y manejar supuestos teóricos y conceptuales precisos que permitieron llevar a cabo los objetivos planteados para ella. En la que conceptos como identidad, interacción social y simbólica, y territorialidad, son los que sustentan esta investigación1.


Identidad

    Comúnmente la identidad se ha examinado desde la concepción de lo étnico, las fronteras y los limites, donde la cuestión del territorio en el ámbito regional y nacional es uno de los mejores exponentes de esta perspectiva; así, la apropiación psíquica, material y hasta sentimental de diferentes aspectos que atan a un individuo o a un grupo a una estructura determinada, desde el establecimiento de límites y fronteras con respecto a los "otros" es lo que se ha concebido como identidad; Néstor García Canclini en su texto Consumidores y Ciudadanos nos habla de la identidad así:

"...se estableció que los habitantes de un cierto espacio, debían pertenecer a una sola cultura homogénea y tener por lo tanto una única identidad distintiva y coherente. La cultura propia se formaría con relación a un territorio y se organizaría conceptual y prácticamente gracias a la formación de colecciones de objetos, textos, rituales con los que se afirmarían y reproducirían los signos que distinguen a cada grupo... donde todo lo compartido por quienes habitan dicho territorio - lengua, objetos y costumbres - los diferencia de forma nítida de los demás" (1995: 92-93)

    Así, se ve como esta definición de identidad es la que durante mucho tiempo se manejó e incluso hasta hoy todavía se retoma, y no es que sea equivocada, solo que se presenta rígida e impermeable, como los mismos limites y fronteras que esta pretende establecer; si bien la nacionalidad, la lengua, los objetos, la historia, las costumbres, etc., son diferentes manifestaciones de la identidad de un grupo, no deben concebirse estas como únicas, impermeables y estáticas, ya que esto chocaría con nuevas alternativas de construir identidad en las sociedades actuales y del tema especifico de esta investigación.

    Es el mismo García Canclini, quien más adelante en su texto, muestra el complemento de esa tradicional concepción de identidad, la cual se acerca mas a las pretensiones de esta investigación, en cuanto señala la impermeabilidad pero al mismo tiempo la permeabilidad de la identidad.

"La identidad aparece en la actual concepción de las ciencias sociales, no como una esencia intemporal, sino como una construcción imaginaria. La globalización disminuye la importancia de los acontecimientos fundadores y los territorios que sostenían la ilusión de identidades ahistóricas y ensimismadas. Los referentes identitarios se forman ahora mas que en las artes, la literatura y el folclore, que durante siglos dieron los signos de distinción de las naciones..." (García; 1995: 95)

    Vemos pues como la identidad no es algo inmóvil o quieto, esta tiene igualmente una dinámica particular interna y externa, así las diferentes concepciones de identidad constantemente están en continuo movimiento y cambio, donde la apropiación de la que se habla de diferentes aspectos materiales, naturales, sentimentales, etc., por parte de un individuo hacia algo, puede estar determinada regularmente por los contextos de espacio, tiempo, situación y emoción particular de determinado momento, donde además, es tal su dinámica, que lo que en un momento identifica dentro de un grupo, en otro momento me puede identificar con otro, y así constantemente.

    Lo que pretendo decir, es que si bien el concepto de identidad se puede presentar muy ambiguo y resbaladizo, lo cual ya nos crea una confusión; identificar y unificar dentro de lo diverso, hay ciertos conceptos, percepciones o manifestaciones que permiten más maleabilidad que otras más generales y más arraigados que identifican y particularizan individuos y colectivos.

    Finalmente, podría decirse que la identidad aparte de ser enumerada en esa gran cantidad de aspectos y factores que aprehendemos, como el lenguaje, la alimentación, el vestir, las artes, las letras, lo político, lo económico, lo social, en una palabra todas aquellas producciones y actos materiales e inmateriales de una sociedad que nos sirven para reconocernos como individuos, es también un punto o un factor de referencia con otros individuos y con otros grupos.


Interacción social

    Cuando se abarcan temáticas investigativas que demandan categorizar e identificar una gran cantidad de personajes, adscritos a tiempos y lugares específicos y participes de un espectáculo tan amplio y diverso como lo es un partido de fútbol, el concepto de interacción social da pistas más que claras acerca del cómo se suceden estas relaciones sincréticas, además del qué las antecede y qué permiten expresar después, teniendo como base una concepción más profunda e interpretativa de este concepto, con el fin de poder mirar desde diferentes ángulos el cómo dicha interacción nos permite dar cuenta de la forma en que los seres humanos nos movemos entre nosotros mismos.

"Este concepto hace alusión a las relaciones humanas, donde el resultado de esta no solo depende de las propiedades de los elementos de personalidad, sino también de las leyes que rigen su encuentro (leyes de interacción humana).

Para entender la interacción social, es necesario prestarle atención además de las personalidades, a factores como el papel social y las normas culturales que también afectan la interacción social, donde incluso hay ocasiones donde los seres humanos suscitan la misma conducta.

"Algunas veces los tipos de conducta idéntica, son provocados por las características individuales externas de los "otros", como su papel social y su pertenencia a un grupo étnico."

Así, por ejemplo, la reacción de una persona puede ser la misma ante todas las personas de autoridad, o todas las mujeres, o todos los desconocidos, o todos los famosos, etc., donde alguna propiedad externa e interna, causa una reacción, independientemente del modo en que ese "otro" se comporte. También hay reacciones constantes ante ciertos grupos sociales tales como las multitudes, las reuniones de sociedad o los grupos formados solo por hombres, o mujeres o mixtos2, donde la personalidad individual no afecta en esos casos la respuesta del colectivo3" (David L. Sill. Enciclopedia Internacional de las Ciencias Sociales. Vol. 6. Aguilar, España, 1975. Pág. 190)

    Para poder comprender el concepto de interacción social, es necesario tomar en cuenta los factores contextuales propios del individuo y del grupo, donde estos, influencian notablemente las dinámicas particulares de identidad e interacción; así, los contextos expuestos dentro de esta investigación acerca de los partidos de fútbol, sus lugares, sus símbolos, sus sujetos, sus tiempos, etc., se ven tocados por contextos espaciales, temporales, circunstanciales y emocionales, que intervienen en todo este proceso de interacción.


Interacción Simbólica

"Para el interaccionismo simbólico lo que los hombres dicen y hacen, es el resultado de su interpretación del mundo social que depende más del aprendizaje que del mismo instinto biológico. Los seres humanos comunican lo que aprenden por medio de símbolos, el más común de todos es el lenguaje.

El objeto de la investigación interaccionista es la captura de la esencia del proceso de interpretación, o de atribución de significados a sus símbolos.

Para H. Blumer, los seres humanos, establecen el significado de dos formas:

  1. El significado puede entenderse como atribuido a un objeto, evento o fenómeno intrínsecamente.

  2. El significado puede entenderse como una agregación psíquica, que se impone a los objetos y eventos por parte de las personas.

Las tesis centrales del interaccionismo simbólico serian:

  • La tesis central de todo dato lo constituyen las interacciones humanas.

  • Las perspectivas de los participantes y su habilidad para captar el papel de "los demás" (empatía) son centrales en la formulación de esta teoría.

  • La manera como los individuos definen la situación, determina la naturaleza y el significado de sus actos." (Ruiz; 1999: 43)

    Ahora bien, a partir de esta definición de interacción simbólica, es claro observar como la lingüística, entra a jugar un papel fundamental en cuanto a la interpretación de los símbolos de que habla el interaccionismo simbólico, su particularidad de acuerdo a códigos establecidos, y contextos propios, además de la mutabilidad e inmutabilidad de estos.

    Así, la salida a esta "problemática", la presenta Ferdinand de Saussure, cuando plantea el circuito de la palabra y su teoría en pos de la interpretación de los signos y símbolos.

    De acuerdo con lo anterior, el circuito de la palabra se plantea en tres planos:

  1. Plano psíquico: acá es donde se concibe la idea, donde la memoria, se contextualiza de acuerdo a modelos, referentes, estados cognoscitivos, creencias, intereses, necesidades, entre otras concepciones y estados previamente establecidos de acuerdo a contextos temporales, situacionales, espaciales, y emocionales propios y del momento.

  2. Plano fisiológico: acá se da la codificación de la información procesada anteriormente por el cerebro, el plano fisiológico corresponde a los órganos propios para la vocalización y la emisión de sonidos, por símbolos y signos codificados, así, la lengua, los dientes, las cuerdas vocales, la boca, etc., son lo que se encargan del registro de la codificación de la intención o idea emitida por el plano psíquico.

  3. Plano físico: este es el resultado y el punto final e inicial del circuito de la palabra, y también donde los símbolos interactuan, acá se presenta el acto del habla propiamente dicho, este debe ser entendido por el receptor, quien lo recibirá en el plano físico por los símbolos emitidos, pasará al plano fisiológico, en el oído, y luego al plano psíquico, en el cerebro, para seguir luego continuamente con el circuito. Acá los símbolos emitidos deberán de ser consensuados por los hablantes, para así poder comprender lo que se pretende decir, o hacer. (Saussure; 1998: 37)

    El planteamiento anterior, se explica desde una de las formas de expresión de símbolos y por ende de interacción social y simbólica, sin embargo es clave observar que este mismo circuito, y sus planos se pueden aplicar a otras manifestaciones humanas en pos de la emisión de símbolos y signos, que de una u otra forma están en constante uso en aras tanto a la comunicación, como a la corporalidad, la música, la pintura, etc., y a partir de allí, interactuar en el ámbito individual y grupal.


Territorio

Uno de los problemas fundamentales en el estudio de cualquier relación sociocultural y, al mismo tiempo, de los mas desentendidos en su verdadera significación antropológica, es el de la territorialidad. Su trascendencia radica en que el territorio es el sustrato espacial necesario de toda relación humana, y su problemática estriba en que el hombre nunca accede a ese sustrato directamente, sino a través de una elaboración significativa que en ningún caso está determinada por las supuestas condiciones físicas del territorio. Si como se ha escrito en mas de una ocasión, entre el medio ambiente y la actividad humana hay siempre un termino medio, una serie de objetivos y valores específicos, un cuerpo de conocimientos y creencias, en otras palabras un patrón cultural, resulta fácilmente comprensible el carácter antropológico de este problema. La relación del territorio a una cuestión cartográfica es una simplificación altamente abstracta que no responde a las exigencias empíricas verificables del concepto de realidad humana. (García; 1976:13)

    Desde una perspectiva política, geográfica y económica, una definición solamente física del territorio es totalmente valida, sin embargo, existen otros tipos de territorios, aquellos que el ser humano mental y simbólicamente construye, y que están en constante movimiento, de acuerdo a la interacción simbólica y social de los individuos y de los grupos.

    Amarrado a este concepto, aparece el de territorialidad, el cual se puede abordar desde el plano biológico, como una condición innata y un mecanismo a través del cual se ejerce control sobre un territorio en aras de la protección.

    Sin embargo, desde el planteamiento de esta investigación, el territorio, no subyace solamente desde la condición biológica, política, económica y geográfica, si bien estos aspectos, hacen parte de esa construcción primaria del territorio, acá se pretende mas bien acentuarse en torno a las diferentes construcciones mentales y simbólicas que los individuos participantes de la relación cancha - tribuna - otros tiempos y lugares, dentro de la dinámica de un partido de fútbol, hacen de diferentes lugares, donde algunos limites preestablecidos, se transforman, en los limites propios que se establecen de acuerdo a las concepciones y manifestaciones de los sujetos.

    Otra definición de territorio, la hace el abogado Colombiano Carlos Alberto Perdomo Castaño:

"Se conoce como el espacio delimitado en el que se establecen las relaciones entre los habitantes y las autoridades o gobernantes, siendo parte integrante de la nación. Se encuentra delimitado por unos limites geográficos y topográficos establecidos por tratados internacionales aprobados por el congreso de la república con la ratificación del presidente". (Perdomo, 1994: 27)

    Desde esta definición se aprecia nuevamente la relación entre lo geográfico y lo político, sin embargo se agrega un nuevo factor como es el de lo autoritario sobre todo en el aspecto político, lo que manifiesta y latentemente está presente.

    Ahora bien, desde esta investigación, el concepto de territorio, es algo que se construye, si bien se retoman claramente los conceptos antes planteados en las definiciones propuestas, a estos se les debe agregar la concepción de los territorios y los limites que se crean por parte de los sujetos ejecutantes y participantes en la relación cancha - tribuna, donde en los otros tiempos y lugares que se articulan a esta relación, se crean y construyen estos limites territoriales y simbólicos, donde igualmente se observan aspectos característicos de la vida cotidiana como: autoridad, política, economía, espacio, tiempo, entre otros.

    Así, diferentes manifestaciones en cuanto a la conceptualización de tiempos y espacios, están en constante transformación y movilidad, en esta medida el territorio, está influenciado por los diferentes contextos que convergen en la dinámica de un partido de fútbol, así, retomando nuevamente el concepto de identidad, esta está mediada por la movilidad de esos limites y territorios que de acuerdo a contextos específicos se presentan, es así, como nuevamente el antropólogo José Luis García, nos apoya este concepto.

El termino territorialidad connota una serie de asociaciones entre las cuales sobresale por su carácter primario, la de realidad espacial. Sin embargo estos dos conceptos - espacio y territorio - deberían diferenciarse adecuadamente, pues tanto extensiva como intensivamente denotan significados distintos. El espacio constituye uno de esos conceptos polisémicos, que por sí solo, sin precisiones calificativas, se vacía a causa de su generalidad. El espacio de las ciencias físico - matemáticas no tiene mucho que ver con el que sitúa el psicólogo en la base de sus investigaciones, y este a su vez discrepa del concepto como noción epistemológica, geográfica o sociológica. Por ello una reflexión sobre las distintas formas espaciales nos alejaría innecesariamente de nuestro propósito. Que el espacio real sea euclídeo o no lo se, que tenga limites o carezca de ellos, que esté sujeto a expansiones o a otras leyes físicas determinadas o que, en fin, en su acepción geográfica sea el producto de algunos movimientos geológicos o cósmicos es algo que vale la pena conocer, pero que en cualquier caso modificaría muy poco las conclusiones de una antropología del territorio. (García; 1976:25)

    Ahora bien, para terminar, el concepto de territorio desde esta investigación, se retomará desde la contraposición y contraste entre la tradicional concepción de territorio desde la perspectiva geográfica y de la organización territorial, además del cómo se organizan y reorganizan los territorios no desde una visión tradicional como la geográfica, sino desde la flexibilidad de las construcciones mentales y simbólicas que se hacen, de acuerdo a contextos espaciales, temporales, circunstanciales y emocionales propios, para desde esta comparación y confrontación, analizar cómo cada uno es intervenido por el otro, y así poder observar cómo desde esta relación dialógica, se construyen nuevas concepciones con sus manifestaciones propias.

    Seguidamente, luego de realizar la conceptualización teórica pertinente de esta investigación, es necesario indagar acerca del estado de arte que sobre la temática propuesta se ha realizado, tanto en el ámbito nacional como internacional, con el fin de poder tener un punto de partida propio para ser desarrollada con fundamentos teóricos y conceptuales firmes y sólidos.

    Esto, obliga a que la revisión bibliográfica del estado actual de la investigación, tenga un carácter de interdisciplinariedad que permita explicar e interpretar los fenómenos del interaccionismo simbólico y social, la creación de identidades, la concepción de los limites materiales e inmateriales, la apropiación y construcción de espacios; es decir, todas aquellas representaciones sociales, simbólicas, materiales, psicológicas, entre otras, que desde el objetivo de interpretación y explicación, de estas simbologías en torno a un eje central, se conciben dentro del planteamiento del problema de esta investigación.

    Así pues, abocando de nuevo el sentido de interdisciplinariedad, es posible hablar de entrelazar los textos científicos, con los textos históricos, y anecdóticos que alrededor del tema del fútbol se han escrito. Y como lo expresaba el mismo Edmund Leach "... desde la experiencia vital, como la mejor etnografía..." convocado por la concepción de autoridad moral y etnográfica, para el abordaje del tema propuesto.

    Sin embargo, en contraposición con otras investigaciones en antropología y en las ciencias sociales como tal, esta propuesta es algo posiblemente novedosa en el ámbito regional y nacional dentro del cual se hace, lo que a su vez me crea mas responsabilidad, motivación y obligación para el desarrollo de un trabajo serio y constructivo, en pos de responder a la necesidad que actualmente se tiene a escala nacional e internacional de observar y analizar este fenómeno desde sus connotaciones sociales particulares.

    Sorprendentemente, tras investigar acerca de lo que se había hecho sobre el tema, se obtuvieron resultados más halagadores de lo que se pensaba. Fue así, como me tope con diferentes investigaciones sobre el fútbol desde la perspectiva planteada en este proyecto, la lista de autores, portales, documentos y textos cada día de investigación fue creciendo mas y mas, lo cual si bien podía plantear cierta confusión teórica iban marcando una hoja de ruta interesante en la búsqueda del estado de la investigación, la cual debería ir en el mismos sentido de los supuestos teóricos y conceptuales planteados y bajo los intereses y expectativas que se planteaban desde lo individual, colectivo y académico.

    Es también sorprendente, ver la gran cantidad de textos y trabajos que desde Latinoamérica se han venido produciendo con el paso del tiempo, mostrando la importancia manifiesta y latente que este deporte tiene en las dinámicas sociales de los individuos y del colectivo social en general, no en vano gran cantidad de los textos consultados, referenciados y leídos durante este tipo de investigaciones son en gran medida de corte sociológico, sociológico, antropológico y mediatico de nuestros países latinoamericanos.

    Es entonces desde el poder de convocatoria del fútbol, desde sus representaciones, y en general, desde su universo, desde donde se planteó, cómo el fenómeno del fútbol se convierte en una forma de creación, afirmación y reafirmación de identidad y de representación social, la cual se plantearía paralelamente con las diferentes alternativas, que tradicionalmente, se nos han presentado y quizás así poder construir no solamente identidad, sino también estructurarnos y movernos dentro de las diferentes dinámicas sociales de nuestras sociedades contemporáneas.

    Ahora bien, el cuestionamiento acerca de la real dimensión de un partido de fútbol, es el que amarra toda esta problemática que trato de desarrollar, en este sentido fue pertinente trazarse unos objetivos que encauzaran la investigación hacia su termino esperado, es pertinente entonces para esta investigación identificar y analizar en los partidos de fútbol, las diferentes expresiones que se dan en la relación cancha - tribuna como dos terrenos de juego, donde los sujetos participantes de esta, involucran otros tiempos y lugares a los comúnmente definidos como los del partido de fútbol, articulando y utilizando símbolos propios de la vida cotidiana.

    Así, es necesario precisar las nociones de cancha y tribuna, desde la perspectiva de los sujetos participantes, estableciendo los limites y concepciones que de estos dos terrenos de juego se hace, por parte de dichos personajes, los cuales serian: espectadores, hinchas, futboleros, jugadores, directivos, periodistas, árbitros, policías y vendedores, lo que a su vez da pie a identificar las dinámicas propias que se establecen por parte de estos.

    Finalmente es una de las tareas más globales de esta investigación demostrar que el partido de fútbol a parte de ser un juego y/o deporte, es algo que mueve y convoca simbologías políticas, económicas, ideológicas y sociales en torno a sí mismo, que lo convierte en un movimiento social y cultural de cohesión, de acuerdo a la articulación que los participantes de un partido de fútbol, hacen de los otros tiempos y lugares, lo cual debe demandar mas interés por parte de las ciencias sociales, como una forma alternativa de interpretación de nuestras sociedades, capaz de incentivar y liderar procesos de identidad y de expresión, y así, impulsar proyectos de investigación desde esta perspectiva, apoyado en el poder de convocatoria que este tiene.

    Metodológicamente, esta investigación, respondió a los métodos y técnicas propios de la investigación cualitativa y etnográfica, donde se utilizaron: la observación, la observación participante, la conversación, las entrevistas, los informantes privilegiados, las historias de vida, las perspectivas emic y etic, y la etnografía centrada en el estudio de problemas concretos, investigación longitudinal, diario de campo, fotografías, grabaciones de audio, pesquisa y revisión bibliográfica, entre otras que se requirieron durante el desarrollo de la misma.

    Durante la segunda etapa del proyecto, es decir el trabajo de campo propiamente dicho, los métodos y técnicas antes planteados, entraron en su etapa crucial y protagónica en aras del cumplimiento de los objetivos propuestos.

    En las diferentes etapas del proceso de la investigación, la observación acción participante, se da a través de experiencias de acercamiento a los diferentes sujetos participantes de la relación cancha - tribuna - otros tiempos y lugares, en diferentes momentos y espacios particulares con el fin de establecer aspectos precisos correspondientes a los objetivos de esta investigación, donde además se me demandó no solo observar sino participar dentro de estos. Así, se realizaron visitas periódicas a los estadios de Medellín y Bogotá, donde se asistió a varios partidos de fútbol, con los equipos de estas ciudades, y a partir de ahí analizar el antes, durante y después de estos, observando las dinámicas propias que cada partido de fútbol conlleva.

    Así, las conversaciones y entrevistas son conceptos que se articularon a este proceso de investigación, acción, participación; involucrando, además de lo antes planteado, construir diálogos precisos con los actores, en torno a las manifestaciones puntuales y otras "no tanto" que surgieron dentro del marco de esta investigación, esto me llevó a acercarme de manera mas intima a cada uno de los personajes antes propuestos, y analizar su papel dentro de un partido de fútbol, teniendo en cuenta su estado de adhesión y su rol particular, en aras de determinar las diferentes manifestaciones del orden social y cultural que estos hacen en la vida cotidiana.

    Hipotéticamente, podría decirse que desde este proyecto, algunos hinchas y futboleros dirigentes de las barras más representativas de los equipos de fútbol a estudiar, personajes reconocidos de los medios de comunicación, jugadores, directivos, policías de diferentes rangos y vendedores ambulantes tanto adentro como afuera de los estadios, fueron involucrados para profundizar en torno a la interpretación y análisis de la relación antes planteada entre cancha y tribuna, donde además se podrá ver como el fútbol desde su condición de fenómeno social, involucra tiempos y lugares complementarios, y utiliza símbolos particulares.

    Estos métodos y técnicas dirigidas directamente hacia el trabajo con los sujetos, demandan además una estrategia precisa de llegada a campo, es decir, procurar de que el encuentro entre el investigador, y los investigados, sea lo más productivo posible para ambos, y también que sea lo menos traumático posible, así, la metodología emic y etic permite establecer dos puntos de vista propios, donde ambos tienen la misma relevancia y se trabajaron desde una concepción de relación dialógica, retomando nuevamente el concepto de investigación, acción y participación. Así, se pretendió que de acuerdo a contextos particulares tanto los actores como el investigador, se pudieran ubicar en el otro extremo, convirtiendo lo emic en etic y viceversa, esperando como resultado, una permanente integración, para que el investigador, fuera parte del fenómeno y el investigado fuera parte activa de la investigación.

    Dentro del desarrollo de este proyecto, surgieron, durante la ejecución del mismo, intenciones de etnografías centradas en el estudio de problemas concretos; y si bien como lo expreso en los objetivos, se tratará de despertar interés por parte de las ciencias sociales en torno a este hecho, es claro que la temática de esta investigación puede en determinados momentos despertar diferentes intereses a parte de los propuestos.

    Sin embargo, esta se centró en la identificación, interpretación y análisis de los diferentes aspectos simbólicos particulares de grupos concretos y personajes dentro de estos mismos, lo cual apoya el concepto de que en los partidos de fútbol con toda su dinámica propia y contextualizada, inserta consciente o inconscientemente diferentes símbolos particulares de la vida cotidiana, donde incluso la política, la economía, lo ideológico, lo social, etc., se ve influenciado y dinamizado en la dinámica de un partido de fútbol.

    Así, diferentes herramientas se utilizaron para poder dar cumplimiento a la propuesta metodológica acá planteada, donde una de las herramientas más convencionales y precisas como el diario de campo, se utiliza durante la ejecución de esta investigación de forma permanente, manteniendo un control escrito acerca del desarrollo de esta, rompiendo con el viejo mito o costumbre de que el diario de campo solo se hace durante el trabajo de campo, este, se realiza desde el comienzo de la investigación hasta el final de la misma, donde esté abierto a registrar la información pertinente que permitió lograr los objetivos propuestos.

    Ahora bien, el desarrollo de la metodología antes propuesta, con sus diferentes niveles para la recolección de la información, pretendió acceder de manera precisa y concisa al fenómeno del fútbol y en concreto al de los partidos como un espacio y un tiempo propio para la expresión de diferentes manifestaciones; donde esta propuesta metodológica, tuvo el fin de que al construir la información, no se quedara ningún aspecto por más pequeño que pareciera por fuera de la codificación y análisis de la información, en pos de que los resultados fueran los esperados, y los objetivos ejecutados y cumplidos.

    Es esta pues una propuesta metodológica y conceptual que antes que convertirse en un modelo rígido, invita a entrar en un terreno de juego lleno de pluralidades y diversidades de acercamientos, de una manifestación que si bien hasta hace poco había sido reducida a una mera actividad lúdica, nos muestra una nueva visión de interpretación de la sociedad y del ser humano contemporáneo, donde razón, corazón, juego, deporte y sociedad conforman un solo equipo, en aras a que así, posiblemente tengamos una nueva alternativa de mirarnos e interpretarnos, en el continuo deseo de investigar y conocer que nos caracteriza.

    Invito pues a quienes se atreven en este momento a hurgar en esta investigación de acercamiento entre deporte y pensamiento a que viajen por la ruta de la vivencia, la experiencia y el análisis de una manifestación que aunque se pretenda estar aparte de ella siempre vamos a saber que existe y que cada día de una jornada futbolera esta moviendo miles de seres humanos ávidos de expresarse, de representarse y sobre todo de sentirse, en torno al verdadero significado de lo que se siente cuando se ama una camiseta.

Hay algo en el fútbol que no permite cuestionamiento: convoca, aglutina, propicia el dialogo y la discusión. Resulta difícil mantenerse al margen de una actividad que desde sus niveles mas primarios, de barrio, de calle, de playa, hasta el avallasante espectáculo de multitudes que representa un Campeonato Mundial, logra acercar la gente para que se encuentre en un animado debate. Se trata de un juego que posee el don maravilloso de hacer sentir la vida...

Vislumbro en el fútbol todo lo que significa ser un equipo. Como juego colectivo, este implica generosidad, y entrega, dos ingredientes de la vida en comunidad que hemos perdido los colombianos. Veo en la historia reciente del fútbol colombiano una luz que nos ha enseñado mucho de la vida, queriendo proyectarla en un juego de pensamiento, deseo y sueño. Como decía un artista colombiano, el fútbol con lo menos que se juega es con las "patas", pues requiere inteligencia, destreza, habilidad, dominio del cuerpo y del cerebro, capacidad de improvisación y amor por lo que se hace. (Busquets; 1998)4


El concepto de autoridad etnográfica

El estilo que dominaba las etnografías "clásicas" era el realismo etnográfico. La meta del autor era presentar un informe preciso, objetivo y científico de una forma de vida diferente, escrito por alguien que tuviera un conocimiento de primera mano, este conocimiento provenía de una "aventura etnográfica" que implicaban la inmersión en una lengua y una cultura ajenas. La autoridad de los etnógrafos procedía - tanto de su papel como científicos como de ser las voces del "nativo" o del "otro" - del hecho de su experiencia personal (Kottak: 1996; 27)

    El concepto de autoridad etnográfica, se concibe desde el investigador como ese personaje que hace parte de esa información de primera mano, y que las voces que este expresa no son mas que las propias y las del grupo social dentro del cual ha estado inmerso; donde el "otro" es "otro" y "él mismo".

    Los métodos y técnicas etnográficas en antropología presentan varias herramientas claves para la construcción de información, las cuales durante esta investigación se vislumbran tanto metodológica como conceptualmente. La propuesta de la perspectiva emic (visión del (los) investigado (s))y etic (visión del (los) investigador (es)), presentan una vía que si bien puede en algunas ocasiones presentarse como de doble filo, se comporta como una reflexión investigativa, cuando se toma posición en ambos polos.

    Este capítulo, recoge aspectos precisos en torno al como abordar la investigación planteada de acuerdo a una gran cantidad de vivencias personales a priori a la conceptualización y desarrollo del trabajo de grado, vivencias que a a, conllevarían a plantear una reflexión desde la antropología acerca de un hecho vivido y ahora estudiado.

    Así, el concepto de autoridad etnográfica, moral y vivencial permite tener un acercamiento mas intimo y directo al problema planteado, donde el investigador se compenetra de manera más rápida al estudio de su caso y por ende la propuesta que el investigador sea sujeto y objeto de su propia investigación se muestra cada vez mas clara; sin embargo esto puede presentarse en todos los momentos como algo peligroso, donde razón y corazón establecen una relación fuerte y frágil al mismo tiempo, y los principios éticos son los lazos que unen o desunen en determinados contextos.

    El hecho de tener bien claro lo vivencial y anecdótico de lo académico, demanda una diferenciación y establecimiento de términos y marcos teóricos y conceptuales que permitan mostrar los quiebres y las uniones, que en el proceso o relación vida - antropología se presentan desde la óptica de aventurarse a elaborar un trabajo investigativo en un tema quizá muy bien conocido por ser parte activa de una experiencia de vida, pero al mismo tiempo puede hacer que se piense en obviar cosas que al final no son tan conocidas como se piensan.

    De manera metodológica y conceptual, retomo los planteamientos propuestos por el antropólogo Jaime Arocha Rodríguez5, quien apoyado en la propuesta del sicólogo norteamericano Ira Progoff, plantea la elaboración del diario de campo intensivo como un método y técnica en el abordaje de una investigación de corte antropológico con una alta carga autorreflexiva.

    Jaime Arocha, plantea que en esta tarea de autoreflexionar en torno a un trabajo investigativo, articulando un proceso de vida o una parte de una vida, debe plantearse como una tarea de "pensarse a sí mismo, a partir de descripciones autobiográficas", donde igualmente se establece un primer proceso en tres niveles: la inscripción, la trascripción y la descripción, lo que a su vez, conlleva a plantear y realizar lo que el mismo Jaime Arocha denomina "una arqueología de la propia identidad".

    En este sentido, el proceso propuesto de inscripción, trascripción y descripción, involucra un constante juego y devenir entre dos polos, el de la razón y el corazón y se debe mantener un equilibrio constante entre ambos polos por indagar en los rincones más profundos del corazón y de la razón, aquellas vivencias, y datos necesarios para realizar esa arqueología de la identidad propia, en aras a rescatar aquellos momentos de la vida que de una u otra forma cobran relevancia en la investigación.

    Dicho proceso, está atravesado al mismo tiempo por una secuencia "lógica" de procedimiento, para poder acercarse a vivir y experimentar el proceso interior de autobiografiarse con intenciones investigativas y quizá no investigativas, o mejor, académicas y no académicas.

    La información debe constituirse, basándose en el movimiento pendular planteado por Gregory Bateson donde el péndulo es la mente humana, y se mueve en las direcciones de razón y corazón constantemente y bajo esta perspectiva autobiográfica, este no debe detenerse en ningún momento o espacio, ya que la vida es una constante construcción y movimiento de ese péndulo de un lado a otro.

    Para la constitución de esos referentes y momentos claves de un recorrido de vida que en determinados contextos espaciales, temporales, circunstanciales y emocionales desatarían en una pregunta investigativa desde la antropología; el profesor Arocha; propone cuatro momentos claves dentro de los cuales se inscribe, transcribe y describe la información requerida por ese informante de primera mano de la investigación, quien aquí es realmente el propio investigador. Dicho proceso se cumple así:

  • El ahora: "aquí se indaga y se reflexiona, por el ahora del individuo y que es lo que implica y significa la intención del momento", o en otras palabras, la pregunta de investigación e intencionalidad y delimitación del proyecto.

  • Los mojones: "estos, son momentos históricos trascendentales, que son hitos personales y se indagan en el proceso del movimiento pendular entre corazón y razón".

  • Las encrucijadas: "momentos de decisiones complicadas que implican o implicaron que al escoger una vía, se tenga que cerrar y/o sacrificar la otra, la opuesta". Acá podría pensarse el momento y las circunstancias por las cuales se escoge un equipo determinado para ser hincha y no otro, que regularmente es el rival de patio.

  • La imagen de periodos: "ejercicios de actualización de la propia experiencia y/o de un fenómeno trascendental" permiten una posterior periodización y establecimiento de "categorías" de la experiencia de vida.

    La ejecución y reflexión en torno a este proceso es la que permite y me permitió en este primer concepto, poder realizar la experiencia autobiográfica denominada "etnografía de toda una vida de fútbol", la cual recupera cada uno de los momentos planteados, donde el ahora es la intencionalidad de una propuesta investigativa de corte monográfico; los mojones, los momentos claves de toda mi vida en el ambiente futbolístico activo y pasivo; las encrucijadas los referentes históricos que de una u forma me llevaron a escoger unas vías diferentes de otras o los lazos afectivos hacia alguna divisa, representados en la elección del equipo, o los equipos del corazón, y la decisión de abandonar la barra por principios éticos con la antropología entre otras decisiones trascendentales; y la imagen de periodos que en últimas sería el resultado de toda esta experiencia planteada y expuesta de manera escrita en esta investigación y registrados además en seis cassettes de audio, con momentos históricos y anecdóticos que quizá queden solo como anecdóticos por siempre o que quizá en otro "ahora" y con otra intención sean parte de esos datos claves y relevantes.

    El anterior proceso aparece no numerado, sino referenciado, en el sentido de estar en constante retroalimentación, lo que implica que ese continuo movimiento pendular de Bateson y retomado por Arocha, el balance y movimiento incesante entre corazón y razón, hace que regularmente se viva el ahora, los mojones, las encrucijadas y las imágenes de periodos, donde de un punto se puede ir a otro en relaciones dialógicas y multilineales.

    Ahora bien, siguiendo con los planteamientos del profesor Arocha, este proceso debe ser complementado por tres nuevas etapas que van inmersas en el mismo ejercicio autobiográfico y reflexivo, y que se inician desde la misma concepción de la pregunta o la intención en el momento "del ahora", así:

1. Egosistema: Durante este periodo de mí ahora, ¿cuáles han sido los sueños que con mayor frecuencia he tenido?, ¿Cuáles las ensoñaciones?, ¿Cómo ha sido mi cuerpo?, ¿Qué cambios ha experimentado?, ¿Qué experiencias particulares ha tenido?. Desde la estética, desde la espiritualidad, ¿cómo lo he percibido?.

    Esta serie de preguntas que plantea el profesor Arocha, que si bien no son todas las que se pueden formular, son una demostración de una primera relación que se establece en este proceso investigativo, autobiográfico y auto reflexivo, lo cual quizá es lo que yo considero como uno de los pasos mas complejos, el constante juego de "uno contra uno", donde se "pelea" y se cuestiona uno mismo, como persona y como antropólogo en el momento de mirarse interiormente, diacrónica y sincrónicamente, lo cual resulta en determinadas ocasiones hasta angustiante, ya que verse a si mismo es muy difícil, e incluso ni cuando lo hacemos a frente a un espejo se tiene una imagen real, ya que el espejo invierte la imagen, y aunque el dialogo "uno contra uno", es en si muy beneficioso en este tipo de propuesta, debe complementarse con el siguiente paso.

2. Ecosistema: Durante estos meses que conforman mi ahora, he estado rodeado de objetos y de otros seres vivos. De ellos ¿cuáles han pertenecido a mi cotidianidad?, ¿Cuáles a mi trabajo?, ¿Cuáles a mi mundo estético?, ¿Cuáles a mi mundo social y político?, ¿Cuáles a mi mundo espiritual?. La ausencia de ellos, ¿qué me ha producido?.

    Luego del juego de "uno contra uno", el siguiente paso para complementar los resultados obtenidos en esa mirada de mí mismo desde la perspectiva propia, entran a jugar valores, objetos y personas "externos" al individuo y en este caso a mí mismo, es decir acá por fin confronto los datos obtenidos en el primer paso, en la medida que si bien ya realicé un primer autoanálisis de mi personalidad, muchas veces algunos tabúes, comportamientos y contextos particulares tratan de poner mascaras que imposibilitan ver ciertos aspectos que solo se dan a conocer en la interacción con las otras personas y objetos que me rodeen para que de una u otra forma den información acerca de una "realidad" mas cercana al momento que se vive y la intencionalidad dada, y que a su vez ayudan a tener claro, quizá, cómo algunos objetos, personas, valores u otras representaciones, su intervención y vivencias de interacción, permitan establecerse como mojones o momentos históricos relevantes.

3. Sociosistema: A esta categoría pertenecen los interrogantes relacionados con quienes nos rodean. La pregunta fundamental es, durante ese periodo, ¿quiénes fueron las personas más importantes?... Sin embargo cabe preguntarse ¿para entonces que estaba pasando con la familia?, ¿con los amigos personales?, ¿con los compañeros de trabajo?, o quizá con seres con quien no tenía una relación directa o no conocía en persona, pero cuyos actos afectaron la conformación del periodo.

    Para terminar el proceso, esta etapa muestra que si bien, la relación con objetos y con uno mismo aporta gran cantidad de información pertinente para el ahora, la interacción social entra a jugar un rol fundamental, en el sentido que al preguntarse por aquellos personajes que directa o indirectamente estuvieron cerca en el proceso investigativo o quizá muy lejos, como en mi caso, Jaime Arocha e Ira Progoff, muy en la distancia, son relevantes en la realización de esta experiencia autobiográfica y reflexiva, y son claves en la delimitación de muchos mojones, conceptos y fundamentos, en el momento de establecer y conocer el porqué y la influencia directa o indirecta de estos personajes en las decisiones que en las encrucijadas me llevaron a tomar una vía y dejar otra, por ejemplo, la elección del equipo o equipos del corazón, o la decisión de retirarme de la barra y otras que en la autobiografía se establecen.

    Haber estado inmerso en la dinámica del fenómeno ahora estudiado, y vivir directa e indirectamente todas las implicaciones que este ofrece, me permite incluso de manera "egocéntrica", tomar una posición clara acerca de la problemática en diferentes ámbitos, esto, debido a un recorrido de vida de varios años, durante los cuales consciente e inconscientemente se recopilaba información acerca de las dinámicas propias de un partido de fútbol y de las reales dimensiones que este tiene.

    Algunas de estas informaciones durante los primeros años (1986 - 1997) radicaban solo en la esfera de lo vivencial y lo anecdótico, debido incluso a mi "militancia" como espectador e hincha, inmerso en una barra brava; luego, durante los años posteriores (1998 - 2001) las vivencias se transformaban y comenzaban a despertar un interés mas allá de lo meramente anecdótico; la influencia de la universidad u otros aspectos, me comenzaban a incitar a que desde la antropología se podría hacer un análisis de ese fenómeno en el cual yo estaba inmerso, proceso este que incluso comencé a vivir aún como espectador, hincha (barrista) y futbolero, donde se refuerza el porqué yo puedo hacer esta investigación desde los postulados de la autoridad moral, etnográfica y vivencial.

    Así pues, la etnografía y el hecho de que el trabajo de campo quizá llevaba mas de 15 años elaborándose por ser una experiencia de vida, me llevarían a pensar que la autoridad etnográfica, al momento de llevar a lo académico, un hecho particular de vida, no solo estructura al investigador de manera personal, sino que ayuda a que la antropología cada vez deje de ser menos simplista y fría, para que pase a ser mas autorreflexiva con ella misma, para no quedarse en lo superficial, sino que pueda llegar a interpretar e identificar realidades mas profundas.


Un recorrido de vida por lo investigado

    Este titulo, que recoge algunos de los planteamientos de Edmund Leach quien decía que "... la mejor etnografía es la propia experiencia vital...", se constituye en una fuente de información primaria que se debate entre el discurso académico y antropológico y entre lo vivencial y lo anecdótico. Dicha propuesta se fundamenta en un recorrido o retrospectiva del investigador como investigado durante un transcurso de vida dedicada y ejecutada al y en el hecho a estudiar, donde tras relatos vivenciales se extrae lo que pueda ser pertinente según el caso, como información de primera mano para la investigación.

    En el caso de este proyecto, la etnografía se apropia de este recorrido de vida como un suceso trascendental y de inmersión al ambiente futbolístico durante mas de 15 años vividos desde el punto de vista del corazón, del apasionamiento por un deporte, por un equipo; trascendiendo al plano de una inquietud investigativa desde la antropología, donde los tiempos y lugares vividos y referenciados desde la actividad lúdica y aficionada del fútbol, se convierten en tiempos y lugares de reflexión y análisis como hecho social y por ende antropológico.

    Así, el haber tenido un amplio recorrido como sujeto y objeto del hecho que hoy me convoca a ser parte y arte del mismo, hace que una gran cantidad de información que antes se portaba como anécdota, pueda ser considerada como una vivencia etnográfica y conceptual que permita ser abordada como información integral del desarrollo del proyecto.

    A continuación se estableció un recorrido e historia de mi vida en el fútbol; recorrido que quizá podría tratar de establecer una comparación con los conceptos de ritos de paso, buscando hacer énfasis en identificar las tres fases de los ritos de transición propuestas por Víctor Turner, separación, marginalidad y agregación, en cada uno de los pasos de una etapa a otra.

"... en la primera fase las personas abandonan el grupo y comienzan a pasar de un status a otro, en la tercera fase se reintegran a la sociedad habiendo completado el rito, la fase marginal es la más interesante, se trata del periodo entre uno y otro estado, el limbo durante el cual las personas han abandonado un lugar o estado, pero todavía no han entrado, o se han unido al siguiente. Llamamos esto la fase liminal del rito de transición..." (Turner: 1974)

    Es importante ver como el establecimiento de este tipo de metodologías, propone una buena forma de recuperar lo vivencial como posibilidad histórica de análisis, donde esta vivencia pueda convertirse en un hecho académico y bibliográfico que aporte a las constantes discusiones académicas desde cada disciplina, en una propuesta de poder analizarnos e interpretarnos nosotros mismos para poder analizar e interpretar los "otros", caso este muy constante en las investigaciones sociales.

    Es esta pues una propuesta para que aquellos a quienes nos apasiona un tema o que hayamos vivido inmersos en manifestaciones de orden "fanático" en el buen sentido de la palabra, comencemos a pensarlas y analizarlas desde una mirada académica y se propongan métodos de análisis que hagan de esa pasión futbolera, religiosa, musical, etc., un buen insumo de análisis académicos que nos "libere" de presiones internas y externas y en cierta medida pueda devolver a esta afición algo de lo mucho o poco que a nivel personal nos haya dado.

"...Mientras escribía sobre mi vida, y aun hoy todavía, no dejo de sentir cierto recato al colocarme como objeto de estudio porque implica hacer pública mi intimidad. Estas dudas y este recato provienen de los silencios a los cuales nos acostumbramos en la clandestinidad, de la poca importancia que concedíamos a lo cotidiano en los espacios políticos y de una formación académica dentro de la cual no era usual que una autobiografía tuviera legitimidad como documento antropológico" (Vásquez; 1998: 267)


Notas

  1. Esta propuesta conceptual es la que a juicio personal es la más correspondiente en pos de los objetivos de la investigación, para tratar de responder a estos, sin embargo no es una marco conceptual rígido sino flexible, esto con respecto a contextos e intereses específicos.

  2. Es desde este concepto de variadas reacciones, de acuerdo a contextos específicos, que se trabaja en torno a las diferentes manifestaciones que se dan por parte de los sujetos participantes de un partido de fútbol, donde la individualidad de estos y su inmersión dentro de un colectivo particular, permiten observar los diferentes procesos de identidad e interacción social y simbólica que se pretenden analizar.

  3. Recuérdese el concepto de transformación o mimesis del interés individual, en cuanto se está adscrito a un colectivo, donde lo individual se transforma a los intereses colectivos.

  4. Parte de la presentación del texto Juego Limpio, dirigido por Gustavo Álvarez Gardeazabal.

  5. Profesor asociado al Departamento de Antropología, investigador del Centro de Estudios Sociales (CES), de la Facultad de Ciencias Humanas, Universidad Nacional de Colombia, sede Bogotá.


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