La gerencia del servicio deportivo | |||
Administrador de Empresas Universidad Nacional de Colombia Investigador en Gestión Deportiva |
Javier Sánchez Torres jasatos@yahoo.es (Brasil) |
|
|
|
|||
http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 10 - N° 86 - Julio de 2005 |
1 / 1
Introducción
Las nuevas megatendencias sociales han orientado el consumo humano hacia la diversión y la recreación humana1, demandas que han sido suplidas en gran parte por varias organizaciones publicas y privadas como escuelas de formación deportiva, clubes, ligas, federaciones, complejos deportivos, cajas de compensación y otras, que han encontrado en la prestación de servicios deportivos una nueva fuente de ingresos pero que muchas veces no se satisfacen realmente las necesidades y deseos de los clientes.
Es imprescindible para la puesta en marcha de un programa de servicios deportivos referirse en primer lugar al por qué las personas desean realizar una actividad deportiva, cuales son sus necesidades, sus deseos y gustos a la hora de escoger sus actividades recreativas; o si por otra razón se presentan segmentos que necesiten la actividad física por otras razones, como lo podría ser mejorar su salud. El nivel sociocultural de la población, así como el clima y las políticas gubernamentales en la región son variables que se deben analizar, también las características de la oferta, tanto de otras organizaciones como en la propia.
¿Por qué el ser humano practica el deporte?El principio de "Psicología del ejercicio" (Riera, 1997) busca establecer las razones o factores que determinan que los individuos mantengan estilos de vida activos, en la que se considera al ejercicio como "variable dependiente"; este modelo se detalla en la figura 1. mostrando que el ejercicio depende de varios factores entre los que se tienen tres principales o ejes fundamentales: el tipo de población, el tipo de ejercicio y la historia natural de ejercicio; y dos tipos de factores relacionados con la realización de pautas de ejercicio, los cuales son: los denominados psicosociales (estatus sociológicos) y los psicológicos (pensamientos, actitudes y auto eficacia). Desbordes (2001) refuerza esta teoría aduciendo que el consumo deportivo tiene sus raíces en la cultura, ya que el deporte genera status sociales de diversas clases, permitiendo afirmar y aplicar identidades sociales y acceder simbólicamente a una cultura valorada.
La adhesión mantenimiento del ejercicio o su abandono son consecuencia de un proceso complejo que varios psicólogos y sociólogos han tratado de definir mediante varias teorías que no se tratarán debido a su profundidad; pero hay dos factores básicos que resalta Blasco (1997) y que deben tenerse en cuanta a la hora de gestionar un programa de actividad física: los factores que determinarían la falta de tiempo o de cansancio en el individuo y los de ausencia de recursos en el individuo.
En cuanto a la primera categoría se observan dos tipos de sub-factores: los que se refieren a la obligaciones sociales del individuo (responsabilidades laborales y obligaciones laborales), y los que se refieren a la infraestructura de ámbitos urbanos; estos son aspectos determinantes para practicar o no un programa de ejercicio (Blasco, 1997).
Figura 1. Adaptado de Riera, 1997En cuanto a los factores de infraestructura urbana, la fácil disponibilidad de medios de transporte sustituye a una actividad física natural y saludable como caminar, unido a los largos recorridos para llegar a los diferentes sitios de la ciudad que impiden de cierta manera tener tiempo para realizar una actividad física.
En lo que se refiere a los factores de "ausencia de recursos" , Blasco los divide en tres clases: los debido a interacción social, estos son ausencia de apoyo familiar o del núcleo cercano; los relacionados con las infraestructuras, estos es el no tener cerca escenarios deportivos o que se le ofrezcan otros lugares como el cine; y por último los relacionados con el individuo, como lo es tener pocas habilidades para practicar ejercicios, la perdida del estado físico y por consiguiente dolor muscular al practicarlo.
Weinberg y Gould (1996) determinan cuatro factores básicos que generalizan para la práctica del ejercicio y la actividad física:
Factores personales:
Estas son las características personales que pueden influir en la dedicación al ejercicio físico, siendo el historial previo de actividad física, el conocimiento y las actitudes hacia el ejercicio, y las características de personalidad.
Factores situacionales:
Son aquellos que pueden ayudar o entorpecer la participación regular en la actividad física, incluyéndose en estos factores, el entorno social (la familia y los amigos), el entorno físico (el tiempo climatológico, las presiones derivadas de los horarios y distancias de los escenarios deportivos, etc.).
Factores conductuales:
Son el status social, ocupacional, adicciones, etc.
Factores programáticos:
El éxito o el fracaso de los programas de ejercicios puede depender de diversos factores estructurales, tales como la intensidad de práctica, la individualidad de la práctica, y las cualidades del instructor o entrenador.
Tácticas para aumentar la demanda de servicios deportivosFinalmente se expondrán cinco enfoques generales de la psicología deportiva para lograr que los clientes permanezcan continuamente demandando los servicios que se ofrecen especialmente cursos de formación deportiva, gimnasios y sesiones de ejercicio relacionadas con la terapia y el mejoramiento del estado físico.
Enfoques ambientalesPor lo general, algo del entorno físico actúa como señal convenida para los hábitos de conducta. Si se quiere favorecer el ejercicio físico, una de las técnicas a utilizar consistirá en proporcionar señales que a la larga acaben estando relacionadas con él (Weinberg y Gould , 1996).
Indicaciones: son señales convenidas que inician una conducta. Pueden ser verbales, físicas o simbólicas. Los efectos de la supresión de una indicación sobre la conducta de dedicación pueden ser adversos, por esto se deben mantener los carteles, señales y demás a la vista de los practicantes para estimular su permanencia en el programa. Estas indicaciones deben eliminarse de manera progresiva (desvanecimiento), ya que el uso cada vez menor de estos apoyos, hace que las personas aumenten su independencia.
Firmar una declaración con intenciones: Otra forma de cambiar la conducta con respecto al ejercicio físico es hacer que firmen una declaración de intenciones por la que se comprometan a acatar el régimen de ejercicios. Las investigaciones hechas al respecto demuestran que las que firman presentan una mayor asistencia que las que no lo hacen. Por lo tanto, el hecho de que ciertas personas prefieran no firmar una declaración de intenciones puede ser un signo de que necesitan medidas especiales para potenciar su motivación.
Opción percibida: poder elegir de entre varias actividades parece favorecer la dedicación posterior, las personas a las que se les dio dicha opción exhibían niveles superiores de dedicación que las que no dispusieron de la misma, lo cual demostraba ser cierto incluso cuando solo percibían la posibilidad de elegir(cuando en realidad, el experimentador estaba manipulando sus opciones de actividades.)
Enfoques de refuerzo
El refuerzo, sea positivo o negativo, es un poderoso determinante de la acción futura. Para aumentar la dedicación al ejercicio, se pueden ofrecer incentivos o recompensas para seguir con el programa o por los logros alcanzados.
Recompensas por la asistencia y la participación. Un refuerzo positivo consiste en premiar la asistencia. En general los resultados de los estudios sobre el tema indican que se estimula la asistencia o la dedicación inicial, pero no tanto la mejora a más largo plazo. Para alentar la dedicación en períodos de tiempo prolongados, los incentivos adicionales o el refuerzo han de suministrarse a lo largo de todo el programa.
Feedback: proporcionar feedback individual durante una sesión es más eficaz que elogiar a todo el grupo al final.
Autorregistro/autorecompensa: si una persona aprende a controlar su propia conducta y a recompensarse en caso de ser ésta positiva, potenciará su dedicación al ejercicio. Las personas pueden premiarse a sí mismas por lograr un objetivo específico o simplemente ser constantes y seguir adelante.
Enfoques cognitivos y de establecimiento de objetivos
El establecimiento de objetivos puede utilizarse como técnica motivacional y como estrategia para mejorar la conducta referente al ejercicio y dedicación al mismo. Martín (1996) afirma que objetivos flexibles establecidos por los propios participantes se traducían en una mayor asistencia y un mejor mantenimiento de la conducta durante tres meses en comparación con los derivados de objetivos fijos y establecidos por los instructores.
Los pensamientos de cognición en los que las personas se concentran cuando están realizando ejercicios físicos son también importantes. Cuando el centro de atención está en el feedback interno del cuerpo (por ejemplo cómo se sienten los músculos o la respiración), se denomina asociación; cuando el foco está en el entorno (por ejemplo un paisaje), se le conoce como disociación (distracción.) Las personas que disocian presentan una asistencia significativamente mayor que aquellas cuyo pensamiento es asociativo. Al parecer centrar la atención en el entorno en vez de hacerlo en las propias sensaciones es provechoso para las tasas de dedicación.
Enfoques de toma de decisiones
La implicación en las decisiones sobre la estructura de un programa puede mejorar la participación a largo plazo. Las discusiones en grupos pequeños sobre la implicación en los ejercicios son más eficaces que en un enfoque de conferencia amplia. La discusión sobre la implicación potencial en un programa ayuda a la gente a llevar a cabo la decisión de integrarse en un programa (Weinberg y Gould , 1996).
Otra técnica para involucrar a los participantes es el uso de una toma de decisiones para hacerles conocedores de las ventajas y los costes potenciales de un programa de ejercicios. En la confección de una toma de decisiones las personas anotan por escrito las consecuencias anticipadas de la participación en ejercicios en lo referente a:
logros para uno mismo
pérdidas para uno mismo
logros para personas o cosas importantes
pérdidas para personas o cosas importantes
aprobación de los demás
desaprobación de los demás
auto aprobación
auto desaprobación
Enfoques de respaldo social"En nuestro contexto, el respaldo social alude a una actitud favorable de una persona hacia la implicación de otra en el programa de ejercicios. Las interacciones sociales y familiares pueden influir en la actividad física de muchas formas. Todos los estudios realizados al respecto, muestran el importante papel que desempeña el respaldo social en el estímulo a la adhesión en los programas de ejercicios físicos" (Weinberg y Gould , 1996) .
Nota
La comida, la moda y recreación aparecen como deliciosamente superficiales y divertidas". (Montoya, et al. 2004).
Bibliografía
Andes Fernando de Andrés. La evaluación de la gestión de un centro deportivo, editorial Aguado,2000.
Blasco Tomás. Actividad física y salud. Barcelona: Editorial Martínez Roca, 1997.
Campos Carlos. Gestión deportiva, en EF deportes, revista digital, Buenos Aires - Año 5 - N° 22 - Junio 2000.
Debordes Michel, Ohl Fabien, Tribou Gary, Estrategias del marketing deportivo, análisis del consumo. Editorial Paiditrobo, 2001.
Martín Andrés. Manual práctico de Organizaciones deportivas. Madrid: Gymnos, 1996.
Montoya Iván Alonso, Montoya Luz Alexandra, Castellanos Oscar, Análisis de los enfoques organizacionales de las tendencias económicas, culturales, sociales y tecnológicas. En revista Escuela de administración de negocios Nº 50, enero - abril de 2004. páginas 112-131.
Weinberg Robert y Gould Daniel. Fundamentos de Psicología del deporte y el ejercicio físico. Editorial Ariel, 1996.
revista
digital · Año 10 · N° 86 | Buenos Aires, Julio 2005 |