1 / 1

El "reloj detenido en el tiempo". Escenario actual

    La lógica del desarrollo actual del deporte y los rendimientos atléticos dictan la necesidad de dirigir una parte de las investigaciones al descubrimiento de todo lo que pudiera de una forma u otra amenazar, interferir o frenar la formación de los atletas. No de un atleta cualquiera, sino del que realmente exige el futuro: inteligente, creativo e independiente. Tras estas intenciones nuestros estudios han detectado la existencia del fenómeno que he denominado "El Reloj detenido en el tiempo". (Figura 1)

Fig. 1. Fenómeno del reloj detenido en el tiempo.

    Este fenómeno pone al descubierto el siguiente escenario. Se observa una gigantesca producción de artículos, revistas, libros, cursos, reuniones metodológicas, investigaciones, ejercicios, métodos, tipos de controles, sistemas de planificación, etc., destinada al desarrollo físico o de la condición física de los deportistas. En materia de preparación física se han desarrollado tanto los medios y los métodos de entrenamiento que existen libros en los que desde su título se aprecia la cantidad existente, por ejemplo, " 1000 ejercicios para la condición física ". Otros libros muestran el profundo tratamiento de las capacidades por separadas, por ejemplo, los libros de Fuerza, Velocidad y Resistencia. Unos terceros divulgan la amplia gama de métodos, variantes, fundamentos fisiológicos y bioquímicos para el desarrollo de la condición física, incluso se perfeccionan sus variantes y ellas tratan de ser extensivas al alcance de los objetivos de otras preparaciones, aspecto que no siempre se logra. Este caso puede observarse en la planificación de la unidad de entrenamiento donde en la parte de métodos, en lo que corresponde a la preparación táctica, se ubican métodos de la preparación física o técnica.

    El apego a la preparación física ha sido tan fuerte que en los aspectos de planificación del entrenamiento se definen desde el macrociclo los volúmenes de trabajo para la preparación física general y especial, y no así para el resto de las preparaciones donde incluso se presentan unidas (preparación técnico-táctica y teórica-psicológica). Esto es un enfoque reduccionista de la preparación del deportista al tratar de unir lo que es diverso. Es justo recordar que cuando se habla de preparación técnico-táctica, por lo general, existe "un príncipe y un mendigo". ¿Quién es uno y quién es otro? Evidentemente la preparación táctica es el mendigo en términos de medios, métodos, evaluación, e incluso de corrección, porque lo que se corrige está a un nivel técnico en la mayoría de los casos.

    En este sentido, mientras sigamos viendo las cosas de manera mezclada y no relacionada, pasará como con la preparación psicológica que es la cenicienta entre los componentes, porque se dice "que está en todas las preparaciones y que se realiza desde que estamos frente al alumno" o desde que le decimos "vamos, vamos que tu puedes". Por supuesto que esto es otro enfoque reduccionista en el entrenamiento deportivo y un problema epistemológico. Se trata de ver la preparación psicológica a través de la palabra exclusivamente y no mediante hechos concretos como las intervenciones, las aplicaciones de métodos de desarrollo y de evaluación.

    El caso más extremo encontrado en la práctica ha sido el de nombrar las etapas de la preparación del período preparatorio en el modelo de planificación de Matveev, como "Etapa de Preparación Física General y Etapa de Preparación Física Especial".

    Cada día, producto del desarrollo y sistematización del conocimiento se aprecian nuevos enfoques, concepciones e interpretaciones acerca de la preparación física; el planteamiento de las llamadas "Direcciones del entrenamiento" de Forteza, A. constituye un ejemplo de ello. Consideramos esta investigación como un aporte que nos pone a pensar acerca del problema de la definición de los contenidos de las preparaciones a la luz de los modelos contemporáneos de planificación del entrenamiento. No obstante, soy del criterio que deben enriquecerse, en cada especialidad deportiva, las direcciones en torno al resto de las preparaciones, porque en las presentadas por el autor, de doce direcciones, se aprecian ocho vinculadas a la preparación física (anaeróbio-lactácido, anaeróbio-alactácido, aerobio-anaerobio, aerobio, fuerza al máximo, rapidez, fuerza-velocidad y fuerza-resistencia) y solo tres al resto de las preparaciones (técnica, técnica efectiva y técnico-táctica). La otra dirección corresponde a la competencia.

    Por ende, cuando comparamos la atención que ha recibido lo físico con el resto de las preparaciones (técnica, táctica, psicológica y teórica), apreciamos que ha sido una atención de "cinco estrellas". Es de aclarar, que en materia de atención, el aspecto técnico, en gran medida, también ha sido beneficiado por encima de lo táctico, lo psicológico y lo teórico.

    Esto significa que la inmensa mayoría de nuestro proceder teórico, metodológico, científico y práctico ha promovido la formación del deportista con que contamos en la actualidad: físico y volitivo. (Figura 2)

Fig. 2. Efecto del paternalismo hacia la preparación física.

¿Cuáles son algunas de las causas que provocan este fenómeno?

    A nuestro modo de ver, existen diferentes causas, pero la procedencia o antecedentes atléticos de los profesionales y las condiciones que exigen las preparaciones son dos aspectos determinantes en la generación del fenómeno. Por una parte, cabe decir que muchos de los grandes científicos y teóricos del Entrenamiento Deportivo tuvieron algo que ver con deportes cuyo resultado depende en gran medida de la capacidad física (natación, atletismo, entre otros), digámoslo así, más del músculo que de la mente. Ellos con sus valiosos aportes sembraron en nosotros el "síndrome del paternalismo hacia la preparación física", hasta el punto que existen profesionales que admiten que la preparación física es el núcleo o el eje alrededor del cual gira el resto.

    En este sentido, el criterio de los autores cubanos Forteza, A. y Ranzola, A. esclarece el camino de la negación de esta posición cuando al respecto plantean ... " la preparación técnica es el elemento más específico de las preparaciones ". Unido a ellos, es nuestro criterio, que la preparación técnica, además de ser la que provee al deportista de posiciones, movimientos y acciones, dentro de todo el sistema " es la esencia, la razón de ser de los deportes, su identidad, el núcleo integrador, es la preparación a la que todas deben rendir tributo. Entonces, para el funcionamiento del sistema la preparación táctica proporciona la habilidad intelectual para emplear con éxito los elementos técnicos (posiciones, movimientos y acciones) en dependencia de las situaciones y condiciones. La preparación psicológica aporta fuerza mental, estabilidad psíquica para la calidad de las ejecuciones técnicas. La preparación teórica constituye el fundamento, el por qué de las ejecuciones técnicas, y por su parte, la preparación física imprime vitalidad a todo este sistema, garantizando que la técnica se ejecute de acuerdo a las exigencias de la actividad específica con rapidez, fuerza, resistencia, coordinación y flexibilidad.

    Otra de las causas, mencionadas con anterioridad, radica en las condiciones que demandan las preparaciones. El desarrollo físico requiere, entre otras cosas, de las repeticiones de los ejercicios en dependencia del tipo de capacidad que se trabaje. Sin embargo, el desarrollo de la preparación táctica, psicológica o teórica no es posible sin una labor profunda del pensamiento por parte de los entrenadores. Ellos están obligados a crear condiciones que favorezcan el crecimiento de la inteligencia, la creatividad y la independencia, tarea, que sin duda, aún no todos están preparados para enfrentarla. De aquí se desprende que darle tratamiento a lo físico ha resultado más fácil. Con esta idea queremos plantear que el acto de concepción del trabajo físico implica mucho menos esfuerzo intelectual del profesor que el trabajo táctico- psicológico- teórico. Puede decirse que con el conocimiento acumulado hasta el momento acerca de la preparación física, el entrenador está en condiciones de cumplir exitosamente con los objetivos de la preparación para cada etapa.

    Como dijimos anteriormente, ya tenemos un deportista físico y volitivo, ahora corresponde formarlo en actitudes inteligentes, creativas e independientes. Las soluciones para enfrentar el reto podrán ser disímiles, pero lo importante es poner a funcionar el reloj, que no ha estado detenido para todos en el mismo lugar, a partir de la consideración de un tratamiento tan o más profundo de las preparaciones, fundamentalmente, tácticas, psicológicas y teóricas.

    Hasta el momento nos hemos movido en la arista del problema, ahora nos corresponde fundamentar y proponer una alternativa de solución, en este caso específico, nos referiremos a la TÁCTICA.

Fundamentación de la necesidad de enfrentar el fenómeno del "reloj detenido en el tiempo"

    Las características del escenario actual en el sistema de preparación de los deportistas no han resultado ajenas y ni desconocidas para otros investigadores. La presencia del fenómeno del "reloj detenido en el tiempo" ha constituido tema de reflexión y estudio, fundamentalmente, desde el año 1995 hasta la fecha donde se aprecia una actitud alentadora y crítica en los investigadores, pues sus aportes teóricos y prácticos han servido para unir criterios y fortalecer los estudios futuros. En este sentido es justo destacar los criterios y resultados más recientes de algunos autores en torno a la temática de la táctica, como componente afectado por el fenómeno.

    El deporte en Colombia, específicamente, el fútbol tampoco escapa de la influencia nociva de este fenómeno. Al respecto Hernando Fabio Martínez y Melquiceded Blandón Mena (2003) estiman que "el enfoque de enseñanza que ha prevalecido en Medellín / Colombia se ha caracterizado por dirigir las actividades de aprendizaje hacia la automatización de los fundamentos técnicos del fútbol, de forma que se ha orientado sólo hacia el logro de objetivos en la esfera motriz. De estas circunstancias nace el privilegio que se le ha brindado a la experiencia como única vía de adquisición de los conocimientos tácticos; lo que trae como consecuencia un lento e inapropiado desarrollo del comportamiento táctico, así como la incomprensión del juego". Esta situación constituyó un motivo de inspiración para los investigadores, los cuales realizaron un estudio con el fin de demostrar que la enseñanza (teórico / práctica) proposicional de la táctica en el fútbol es más apropiada que la enseñanza (práctica) tradicional, pues permite mejorar la asimilación, comprensión y el comportamiento táctico del fútbol en niños de 8 a 10 años de edad.

    En esta misma lógica de pensamiento en cuanto a la preocupación por la prevalencia de los métodos de enseñanza analítica centrados en el profesor y basados en las repetición de los elementos técnicos en contextos aislados del juego real, Lanza, Antonio (2004), propone el empleo de "bloques de enseñanza" con incremento de la complejidad en situaciones de juegos en terreno reducido como una alternativa para el aprendizaje de los fundamentos tácticos que sustentan las acciones de juego en el fútbol. Tras la aplicación de la alternativa se observó en los niños investigados un nivel cualitativamente superior de aplicación de los fundamentos tácticos del juego, así como mejoras en la ejecución técnica.

    Andux, Calixto (2004) en su trabajo destinado al tratamiento de la preparación táctica como una dirección determinante del entrenamiento en los juegos deportivos destaca que "hasta el momento, en los diferentes niveles del alto rendimiento, la preparación técnica ocupa un lugar privilegiado en el entrenamiento de los juegos deportivos, su proceder metodológico se orienta a la formación del hábito motor... Si se cumplen las tres etapas o fase de formación técnica, entonces ¿Cuándo se cumplen las etapas de la formación táctica?, ¿Por qué se debe seguir repitiendo y solo repetir sin ningún sentido táctico el movimiento técnico en los equipos estelares?". Ante esta situación el autor demuestra en su trabajo que partiendo de la preparación táctica como condición rectora y dirección determinante del entrenamiento de los juegos deportivos, se logra de manera efectiva el desarrollo cognitivo, de actitudes y de la estructura del movimiento.

    A los efectos del reto que se ha impuesto cobra gran vigencia la idea de Dewey resaltada por los autores colombianos mencionados "La habilidad o destreza práctica y las modalidades de eficacia técnica sólo pueden utilizarse inteligentemente, es decir no mecánicamente, cuando la inteligencia ha desempeñado algún papel en su adquisición".

    Tomando como fundamento los criterios de los autores mencionados y esta sabia idea de Dewey, presentamos una alternativa de tratamiento de la preparación táctica en los deportistas la cual permite formar atletas inteligentes, creativos e independientes a partir de la manifestación de estas actitudes en el proceso de adquisición de las habilidades tácticas específicas para cada deporte. Un aspecto importante de la alternativa lo constituye el método y sus procedimientos los cuales representan el elemento integrador para el funcionamiento de la alternativa.

Alternativa metodológica para el tratamiento de la preparación táctica

    Los elementos que conforman la alternativa metodológica se agrupan en seis aspectos, que funcionalmente se denominan de la forma siguiente:

    Un punto de partida importante lo representa la definición de táctica. Teniendo en cuenta las críticas que realizamos, a mi modo de ver, es funcional para el entrenamiento deportivo definir la táctica ante todo como una habilidad preferentemente de tipo mental, manifestada no solo en el saber hacer algo (elemento técnico), sino también de crear las condiciones para ejecutarlo (Morales, A.) y tomar la decisión de manera efectiva (Buceta, J.). Al aceptar esta definición nos estamos exigiendo que todo el proceso de desarrollo esté dirigido al objetivo de formar y potenciar habilidades de tipo mental en los deportistas. La estrategia en cambio va a una concepción más amplia.

    Como aspectos psicopedagógicos que sirven de base y fundamento al proceso se destacan las fases, la estructura y las condiciones de ejecución de la acción táctica para el aprendizaje. Las fases son las clásicas de F. Mahlo, ampliamente divulgadas en la literatura especializada: Percepción y análisis de la situación, solución mental y solución motriz. Por su parte, la estructura de la acción táctica consta de tres momentos: Preparación de la acción, ejecución de la acción y continuación de la acción (Morales, A. 2001). Estos momentos surgen a partir de la necesidad de no solo dedicar fuerzas a la enseñanza-aprendizaje de las acciones, sino también a la creación de condiciones para ejecutarlas y para responder en caso de no resultar efectivas. La práctica demuestra que una de las causas principales de la baja efectividad de las acciones tácticas radica en la pobre habilidad del atleta para crear condiciones para su ejecución.

    En cuanto a las condiciones de ejecución de las acciones tácticas para su aprendizaje es válido plantear que en este (el aprendizaje) debe ir de lo simple a lo complejo, del lugar al movimiento, del acercamiento al alejamiento, de la realización del movimiento lento al moderado al rápido, de la iniciativa a sin ella, de la realización individual a con compañeros y con adversarios, de la ejecución con ayuda a la sin ayuda, de la fijación a la variación o combinación, de lo conocido a lo desconocido, en fin, de la enseñanza a la consolidación, al perfeccionamiento. Todas estas condiciones funcionan y se enriquecen en dependencia de la especialidad deportiva.

    Un aspecto determinante en la operatividad del concepto de táctica lo representa la definición que debe hacer el entrenador de las exigencias, el contenido y los medios. Las exigencias se corresponden con las características de la actividad, el contenido representa el qué debemos desarrollar y los medios las vías o recursos necesarios los cuales no solo deben ser concebidos en condiciones especiales, como generalmente ocurre, sino también generales, como en el caso de la preparación física. A nuestro modo de ver esta es una de las causas que influye sobre el desarrollo de habilidades tácticas en los atletas, el hecho de que se pretende iniciar un aprendizaje sin base. Por ejemplo, un contenido pudiera ser la habilidad de fintear como elemento de engaño al adversario. Uno de los ejercicios generales, el juego de los agarrados, que desarrollará las bases para la realización del ejercicio especial amague de pase a un compañero-previsto-falso y ante el intento de interceptación del adversario pasar al compañero previsto-verdadero.

    Es realmente el pensamiento táctico la premisa esencial del proceso de desarrollo de la táctica. Sus particularidades operatividad, rapidez, flexibilidad, previsión, y por sobre todo efectividad caracterizan el tipo de pensamiento que debe prevalecer en los deportistas. Unido a estas particularidades se debe trabajar el desarrollo de la creatividad, específicamente a partir de tres situaciones: encontrar una nueva solución a una situación, encontrar diferentes soluciones a una misma situación y ejecutar diferentes variantes de una misma solución (Betancourt, J.).

    Por su parte, la enseñanza problémica, que significa plantear el aprendizaje, o llevar el conocimiento al alumno en forma de problemas para que la labor del pensamiento sea más activa (Becquer, G.). Aquí soy de la opinión que también debe ser planteado en términos de necesidades o intereses, como se plantea en el aprendizaje significativo. Por ejemplo, se enseñó una nueva acción ofensiva y surge la interrogante: ¿Cómo defendernos de esa acción?

    El aspecto integrador de la alternativa metodológica que estamos proponiendo lo representa el método y sus procedimientos, pues en ellos se materializa toda la teoría que hasta el momento se ha abordado. Todos ellos se desencadenan a partir de la ecuación siguiente:

Situación + Solución = Efectividad Táctica

    Mediante esta ecuación se asume que es inconcebible hacer referencias a la táctica sin tener en cuenta la creación de situaciones concretas, sus soluciones más racionales y que en definitiva son las que marcan las pautas y los diferentes niveles de efectividad táctica. De la ecuación se deriva un único método con diferentes procedimientos.

    El método permite, como su nombre lo indica, regular no solo las situaciones sino también las soluciones en función de los objetivos que se plantee el entrenador. Para ello se emplean, fundamentalmente, cuatro procedimientos:

Modelación: Consiste en la abstracción de situaciones o soluciones de juego o combate que se dan con más o menos frecuencia en dependencia de la categoría de edad, nivel competitivo, características de los adversarios, etc...

Problematización: Cada situación es un problema que hay que resolver, y la solución se convierte al mismo tiempo en un nuevo problema.

Progresividad: La complejidad de las situaciones y soluciones aumenta en dependencia de los objetivos, volumen técnico y capacidad intelectual de los atletas.

Reciprocidad: Obliga al atleta a pensar no solo como él sino también como adversario, de manera que cada situación que cree el atleta, él mismo debe ser capaz de solucionarla.

    Por último, los aspectos preventivos giran en torno a los consejos que unido a la necesidad de desarrollo de la táctica tienen que formularse para entrenadores y atletas con el objetivo de garantizar el éxito en cada solución de la situación. Ejemplo de consejos pueden servir los siguientes:

• No veas el error como un fracaso, sino como una oportunidad de reflexión para lograr la victoria.

• No trates de realizar tantas acciones y vela porque las que realices tengan éxito.

• Lo que valoras en el adversario aprende a valorarlo en ti de igual manera.

    En este artículo se ha presentado y explicado brevemente la propuesta de alternativa ya que en próximos trabajos expondremos cómo se ha aplicado concretamente en los deportes. Además, profundizaremos en la aplicación del método y sus procedimientos.

Conclusiones

• El fenómeno del "reloj detenido en el tiempo" constituye una realidad que ha caracterizado nuestro proceder pedagógico, y un reto cuyo enfrentamiento ha de estar marcado por actitudes inteligentes hacia el enriquecimiento de los conocimientos en torno a las preparaciones tácticas, psicológicas y teóricas.

• La preparación táctica no resulta un componente más de la preparación del deportista. Es un proceso de formación de habilidades mentales que puede tomar como elemento integrador para su desarrollo al método. Saber hacer, saber crear y saber decidir es sinónimo de atleta inteligente, creativo e independiente. Esta debe ser una de las aspiraciones en el nuevo milenio.

Bibliografía

• Andux, C. La preparación táctica como dirección determinante del entrenamiento en los juegos deportivos. Resúmenes del Congreso Internacional, Matanzas, Mayo del 2004.

• Becquer, G. La enseñanza problémica en la Educación Física. Habana, 1996.

• Betancourt, J. y colectivo de autores. La creatividad y sus implicaciones.

• Buceta, J.M. Psicología del Entrenamiento Deportivo. Dykinson-Psic. 1998.

• Fabio Martínez, H. y Blandón Mena, M. Enseñanza proposicional para la formación de la táctica en el fútbol. Revista Digital EFDeportes, Nº 65, Octubre del 2003.

• Lanza, A. Los juegos en terreno reducido. Una alternativa para el aprendizaje de fundamentos tácticos que sustentan las acciones de juego del fútbol. Resúmenes del Congreso Internacional, Matanzas, Mayo del 2004.

• Mahlo, F. La acción táctica en el juego. Ciudad de la Habana: Editorial Pueblo y Educación, 1985.

• Morales, A. y Alvarez, M. Preparación del Deportista. Dirección y Rendimiento. Libro en proceso de Edición. 2001.

• Morales, A. El fenómeno del reloj detenido en el tiempo. 2000.

• Morales, A. Los métodos de la preparación táctica. 2001.

	http://www.efdeportes.com/ · FreeFind
revista digital · Año 10 · N° 79 | Buenos Aires, Diciembre 2004   © 1997-2004 Derechos reservados