La comunicación bajo las concepciones del entrenamiento táctico. Entrenamiento simplificado de acciones de juego |
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Universidad Ciego de Ávila. Facultad de Cultura Física Departamento de Educación Física y Superación de Atletas (Cuba) |
MSc. José Ramiro Villalobos Trujillo pfo_vlobos@cfisica.unica.cu MSc. Pedro Morell Rico pff_pedro@cfisica.unica.cu |
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http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 10 - N° 78 - Noviembre de 2004 |
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Entrenar es un proceso pedagógico, sistemático encaminado a adiestrar los elementos a ejercitar para la práctica de un deporte; el deportista debe ser dotado de todo el arsenal necesario para enfrentar la competencia de forma eficaz, tomando en consideración los elementos necesarios para enfrentarla.
Es indispensable desarrollar reglas de trabajo que permitan la actividad comunicativa de modo eficaz, para ello no se puede ver el hombre actuar como una maquina capaz de moverse como único parámetro de referencia, es imprescindible verlo en movimiento con otros criterios, tanto cuando actúa de forma aislada como cuando lo hace con la intervención de otros participantes.
En los deportes de equipos en sus actividades de entrenamiento y de competencia hay elementos estructurales que deberán ser valorados y tomados en consideración para su éxito. En estos aparecen los grupos formales y no formales reguladas por las disposiciones e indicaciones de las organizaciones deportivas y las exigencias de los entrenadores que reglamentan el proceso de interacción e interrelación de sus miembros. Es imprescindible para un buen funcionamiento el conocimiento por parte del entrenador de su dinámica de grupo, de sus necesidades y la búsqueda eficiente de métodos capaces de lograr que el atleta trabaje en condiciones de la lógica interna del deporte para el cual se esta preparando precisando los objetivos a corto, mediano y largo plazo.
En los deporte de cooperación - oposición el rol fundamental lo juega la estructura organizativa bajo la cual se agrupa y se desenvuelve el entrenamiento, pero esta no pueden existir sin comunicación, se puede afirmar con certeza que cada acto de comunicación influye de alguna manera en la organización, coincidente con el criterio de H. Koontz y H. Weirich (1994) quienes plantean que en la organización existen cuatro elementos fundamentales a considerar, los cuales son: identificación y clasificación de actividades requeridas, agrupación de las actividades necesarias para lograr objetivos, asignación de cada agrupamiento a un administrador (entrenador) con autoridad necesaria para supervisarla, y la existencia de medidas para coordinar horizontal y verticalmente la estructura organizacional.
Una vez que la estructura organizacional se ha logrado en un equipo deportivo es fundamental la correcta utilización de la comunicación interpersonal como herramienta útil para lograr el cambio y el aprendizaje. Son precisamente los diálogos interpersonales de calidad (por cualquiera de las vías de comunicación) los elementos inductores de esta transformación, presentando dos características simples pero esenciales:
La comunicación para el aprendizaje y el cambio ha de basarse en datos no en conclusiones, es decir, en el entrenamiento concreto en el deporte; esto se debe lograr basado en jugadas simplificadas de juego, en acciones concretas que reflejen realidades comunes, demostrando su valía en el dato de la eficiencia y no en el hecho en sí.
Se ha de invitar a los atletas a que expongan su punto de vista con respecto a los datos que se le presentan, los miembros y participantes en cada acción deberán tomar acuerdos, coordinar entre sí, establecer códigos donde todos expongan sus puntos de vista.
Esta forma de aprendizaje basado en jugadas simplificadas de juego, descansa sobre la bases de que en él están conformado la suma y acumulación de componentes técnicos, tácticos, físicos y psicológicos los que unidos por la propia actividad del ejercicio el atleta se desarrolla en condiciones que se enfrenta en el juego, implicando que se adapte la ejecución motora a su aplicación táctica propia del juego real. Aquí es un elemento que determina en última instancia el carácter táctico del ejercicio, su objetivo concreto para el cual se conformo.
Para entrenar en un deporte hay que trabajar por elevar la disposición y puesta en forma del estado de la capacidad realizadora del deportista capaz de enfrentar la competencia con el máximo de sus rendimientos, por lo que lograra esto en las mismas condiciones que se enfrentara en el juego, estamos al mismo tiempo adaptando al atleta a formar su estado psíquico y mental, físico, técnico y táctico propio de la actividad competitiva para la cual lo estamos preparando.
No es menos cierto que en una competencia el atleta desarrolla un alto ritmo de trabajo acorde a su actividad y una sincronización de sus movimientos, lo que se hace más complejo en los deportes colectivos ya que depende del nivel y el estado de forma deportiva de de sus compañeros; es por ello que se necesita de un elemento que a nuestro juicio juega un papel importante en el éxito y los fracasos de todo equipo deportivo jugando un rol fundamental, hablemos entonces de la comunicación que se establece en la propia actividad de educar.
Cuando entrenamos estamos educando y obligados a enseñar a jugar bien, siendo imprescindible que el atleta domine y llegue a jugar bien sin que en cambio a esto le pidamos un resultado deportivo si no un resultado de lo que estamos enseñando, lo que nos obliga a educar en él la incorporación de su propio repertorio en solución a la situación de juego que se le presenta o crea y al mismo tiempo que haga jugar bien a sus compañeros, exigiendo para ello un puente común que haga de una idea táctica de un jugador la solución táctica de un equipo y con ello la eficacia del juego.
El entrenamiento comunicativo bajo las concepciones tácticas lleva al atleta a una educación de juego con un carácter común, tomando en consideración que lo educamos bajo las concepciones de la lógica interna del deporte en cuestión y como principios básico fundamentales:
Entrenar en condiciones tácticas similares a las del juego.
Entrenar por medio de ejercicios en jugadas simplificadas de juego partiendo de tres momentos fundamentales en el proceso:
Ejercicios de descubrimiento o de introducción en el deporte.
Ejercicios de profundización o desarrollo.
Ejercicios de carácter complejo o de competencia.
Estos dos aspectos que presentamos como principio de trabajo para entrenar bajo estas concepciones se subordinan al objetivo propuesto para la clase, el cual a su ves se toma de gradación de los objetivos del macro, del meso y del micro de entrenamiento.
Esto significa entrenar en las condiciones de la lógica interna del deporte en situaciones tácticas propias del juego; el niño debe aprender desde su inicio que es fundamental en cada técnica aprendida, cómo emplearla, para que sirve, qué esfuerzo físico requiere, qué posición adoptar para ejecutar el movimiento correctamente, cómo ejecutarla según la posición del adversario o el campo contrario, así cómo bajo que condiciones externas del juego voy a desarrollar la táctica, lo que por su puesto requiere de todo un proceso de adquisición de ese conocimiento, siendo los objetivos los elementos delimitadores de la magnitud del conocimiento formado en cada actividad planificada.
En lo anterior, su calidad, dependerá del carácter instructivo del técnico, de su nivel comunicativo para llevar al atleta el contenido que desea formar según la etapa del proceso de aprendizaje que esta desarrollando, por lo que el contenido de su mensaje es clave, sin caer en el exceso de información el niño deberá tener oportunidad de crear su propio algoritmo de sus movimientos, su estilo, sin desvirtuar la enseñanza; es por ello que la representación de lo que queremos enseñar ante los ojos del educando es fundamental, "el niño hace más lo que ve hacer que lo que le dicen que haga"; la calidad de la representación y de la comunicación en el momento de orientación, entre el técnico y los atletas dependerán en mucho de la calidad del canal comunicativo empleado, las estructuras del juego interpretadas y captadas por los atleta serán luego el reflejo en su ejecución. No queremos decir con ello que todo lo dejemos a este proceso, es por ello necesario que se transcurran un momento de descubrimiento y corrección de los patrones lógicos que estamos formando, un momento de profundización o de desarrollo, y un momento con carácter complejo o de competencia para lo cual se deberá seguir como línea, enseñar, consolidar y comprobar; además tener presente que en este proceso de formación el tiempo de cambio de un momento de enseñanza a otro no depende del tiempo de trabajo o de su estructura externa; si no del nivel y el grado de captación que en el mismo se va teniendo, dependiendo de su estructura interna del aprendizaje que va logrando con el colectivo, del estado de comprobación, del vencimiento de los objetivos a corto plazo propuestos.
Para desarrollar esta forma de entrenamiento en primera instancia hay que razonar, deducir y llegar a acuerdo, que elementos son fundamentales para jugar desde la forma más primitiva hasta lo más actual, que elementos técnicos, tácticos, de reglamentos, físicos y psicológicos son los primeros que debemos enseñar; que es fundamental en forma ascendente para educar e ir progresando en la lógica del juego; tener presente para quien lo voy enseñar, que voy a exigir primero y cómo lo desarrollo, que medios necesito para llevarle al atleta los patrones adecuados según la edad para la cual esta concebido, cómo voy incorporando elementos al juego que signifiquen un progreso en lo que quiero lograr de mis alumnos y cómo voy a medir su progreso.
Todos estos y muchos más interrogantes deben ser resueltas antes de acometer la actividad; cada clase deberá estar motivada por el descubrimiento de algo nuevo que despierte en el alumno su interés por aprender. Lo nuevo no significa distanciarse de lo aprendido, si no descubrir elementos que lo acerquen a la realidad lógica del juego, cada momento del aprendizaje deberá ser un eslabón de la cadena que aspiramos, la forma en que se van eslabonando cada elemento aprendido será la clave para progresar en el juego.
¿Cómo se interpretan estos dos principios?Entrenar en condiciones tácticas similares a las del juego
El principio de entrenamiento comunicativo en condiciones tácticas similares a las del juego, es la forma de llevar al atleta desde su inicio a enseñarle los atributos necesarios para poder jugar con la presencia del contrario, requiere de todos los medios en el terreno de juego para el desarrollo real de la actividad, lo que da atributo al educando aprender la táctica común bajo la presión psicológica que se les presentan en el acto de competir.
En el proceso de enseñanza es fundamental que el técnico valore el grado de los ejercicios, el nivel de complejidad según la etapa en la cual se desenvuelve, siendo esto último lo que en última instancia determinará el nivel y el grado de exigencia del ejercicio.
Entrenar por medio de ejercicios en jugadas simplificadas de juego partiendo de tres momentos fundamentales en el procesoAnte todo creemos oportuno conceptualizar que son las Jugadas simplificada de juego: Es el juego sencillo. Ejercicio de una acción, actividad, movimientos, sucesión de gestos de un grupo determinado de jugadores para dar cumplimiento a una acción técnico - táctica sin tomar en cuenta los pasos fraccionados de su aprendizaje; Es la deducción de las estructuras, el contenido, los criterios, los principios y las cualidades de la acción de juego en cuestión, es el arte de jugar, crear y desarrollar la problemática con criterio propio de la colectividad implicada, llegando a su perfección con la corrección en la propia actividad.
Este principio de trabajo nos da la medida de poder llevar el acto de enseñar a jugar desde el inicio del proceso de enseñanza partiendo de tres momentos que necesariamente deben de transcurrir; el educando deberá aprender para poder jugar la lógica interna del deporte practicado, sus reglas aún que estas sea en su forma más primitiva o adaptadas a lo que queremos lograr en ese momento; su rol como jugador; qué hacer cuando tiene el balón o sin este; qué lugar ocupa dentro del terreno enmarcado para desarrollar el juego; cómo actuar en determinadas circunstancias y muchas más interrogantes que van surgiendo en ese mismo proceso de descubrimiento que lo van introduciendo en el deporte para poder jugar.
Los ejercicios de descubrimiento o de introducción en el deporteEs el conocimiento de los elementos que conformarán la acción de jugar, siendo estos precisamente los que el atleta va conociendo desde el mismo momento que inicia su acto de aprender, los cuales incorpora a su forma de jugar de forma progresiva, teniendo en sí su contenido técnico, táctico, físico y psicológico propios del juego.
Los ejercicios de profundización o desarrolloSon aquellas acciones de juego que tienen una implicación desarrolladora, con sus componentes técnicos - tácticos - físicos - psicológicos, que el atleta ejecuta de forma más profunda, con un grado mayor de exigencia y complejidad en la realización y ejecución. Es un momento del proceso de corregir y pulir o moldear lo que estamos enseñando.
Los ejercicios de carácter complejo o de competenciaGrupo de ejercicios encaminados a darle forma a la acción lo más real posible al juego, es el momento de enlace de las diferentes jugadas entrenadas o acciones aprendidas, las cuales se le da un carácter complejo y de desarrollo en competencia semejantes al juego real, teniendo como finalidad la modelación y pulimento de lo que queremos lograr del atleta.
Todo este proceso de enseñanza tiene su base teórica desde su inicio y de carácter constante en cada sección de trabajo. Es fundamental la utilización de medios de representación con los patrones más completo de lo que queremos lograr, para lo cual serán utilizados entre otros: Videos, películas, láminas con fotos, descripción verbal y representación práctica de los movimientos o jugadas que queremos llevar a nuestros educando.
Supuestos básicos en que se sustenta esta forma de entrenamiento
Las personas al practicar una actividad deportiva no siempre tienen el efecto deseado de lo que quieren alcanzar ni las forma en que se estructura sus movimientos de interrelación en la acción del juego. Si logramos adecuar los movimientos técnicos, tácticos, físicos y psicológicos de sí mismos y el de los participantes en la acción a través de la percepción real del juego, los procesos de retroalimentación y concientización hacia la ineficiencia en su ejecución, como aspecto que dificulta su relación con los otros, entonces sentirán la necesidad de cambiar y llevarán a cabo tareas para lograrlo.
La sobre valoración de los sujetos como jugadores influye en la ineficiencia del proceso de aprendizaje. Si el entrenamiento es capaz de adecuar la autovaloración de cada uno de los participantes entonces se facilita la interpretación y asimilación de los conocimientos introducidos para lograr la optimización del comportamiento.
Se requiere repetir los ejercicios o pasos a seguir en el proceso de enseñanza las experiencias en su asimilación en distintas condiciones para que los sujetos formen las acciones mentales necesarias como garantía de la eficiencia del mismo. Si se propician las condiciones en diferentes momentos del entrenamiento para la utilización de los patrones asimilados entonces se garantizará la formación de acciones mentales necesarias que propicien la persistencia y utilización de los conocimientos incorporados.
Como se organiza este proceso de enseñanza
Selección de los ejercicios;
Organización del grupo;
Organización del terreno donde se efectuarán los ejercicios, con los medios necesarios para su desarrollo;
Puntualización de los objetivos y tareas a cumplir;
Explicación y demostración práctica de las tareas a ejecutar, sin caer en detalles previos, pero si dar una idea clara de lo que se quiere lograr;
Delimitar funciones de cada integrante, su objetivo a vencer.
De forma muy breve se puede señalar el desarrollo de este proceso de enseñanza teniendo presente sus dos principios fundamentales que lo rigen, para lo cual es fundamental.
Llevar a los educando los patrones que queremos enseñar por diferentes vías de comunicación, demostrándoles de forma práctica sus fundamentales movimientos de desplazamiento y ejecución técnico - táctica. Se precisa el objetivo de lo que queremos lograr, cual es el nivel de exigencia del ejercicio y las reglas necesarias para jugar que lo acerquen a la realidad del juego.
El alumno deberá experimentar los movimientos que luego debe ejecutar; es fundamental darle oportunidad de que sienta, experimente lo que le estamos mostrando; los atletas disperso en el terreno de juego una ves que ya saben los que deben hacer según el mensaje emitido por el profesor por cualquiera de las vías que se empleen tendrán un tiempo para descubrir en su experimento propio como es la dinámica de lo que estamos enseñando.
En primera instancia, realizar el ejercicio sin contrario activo, al menor ritmo posible e ir aumentando según se progresa, buscando coordinación, momento, ritmo, concentración, compenetración destreza, etc. de la idea que llevamos al colectivo.
De igual forma que lo anterior pero tomando en consideración la oposición del contrario y el desarrollo correcto de la táctica del juego, lo más importante es su temporización, que el atleta se desarrolle en lo técnico - táctico - físico jugando según las reglas establecidas para ese momento del aprendizaje que lo lleven a mejorar sus resultados para cada acción de juego practicada. Es un momento importante en la corrección de los errores técnico - táctico evitando su fijación. El alumno deberá saber describir la tarea encomendada, que hará, cómo lo hará y cuales son sus alternativas para lograr el éxito en su ejecución.
Realizar ejercicios en acciones de equipo parcial, con mayor número de contrarios activos y con el empleo de formas comunicativas dinámicas, sin pausas, con un desarrollo semejante al juego real, entrelazando las diferentes estructuras ya formadas. La exigencia de la tarea deberá estar concretada en perfeccionar los elementos tácticos de equipo, como una cadena eslabonada donde todo es importante, incluyendo los movimientos sin balón del colectivo.
Realizar juego de modelaje ante contrarios, en competencia, donde las diferentes acciones aprendidas se puedan entrelazar desarrollando en el atleta su pensamiento operativo - táctico sin llegar a resultar esto una competencia por el éxito del juego, si no por el resultado del logro de los objetivos propuestos. Es un momento importante en la solución de las tareas de equipo, de su dinámica en la estructura formal que conforma el arte de jugar
Ejemplo para el desarrollo de los contenidos de la preparación
Ejemplo de la distribución del trabajo en el plan de entrenamiento
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revista
digital · Año 10 · N° 78 | Buenos Aires, Noviembre 2004 |