efdeportes.com
Kitesurf: en los límites del agua y del aire...

   
Diplomada en Educación Física
Licenciada en Pedagogía
 
 
Carmen Alvarez Diz
alvarezdiz2@yahoo.es
(España)
 

 

 

http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 10 - N° 77 - Octubre de 2004

1 / 1

1. Introducción

    Los pronósticos meteorológicos no caben ya en el bolsillo. Las horas pasan y apenas hay viento. Hoy parece más implacable que salvaje... lo buscamos incansablemente esos días en los que su majestuosidad se transforma en una máquina capaz de hacernos volar sin contemplaciones. Aquí está, impenetrable y vacío.

    De forma inmediata, del interior del mar emerge estrepitosamente la implacable ola. Elegante, sin igual. Vehículo para soltar la adrenalina acumulada en la espera. Desde la orilla se mitigan las ansias observando como testigos la fuerza del kitesurf. El kiter se levanta sobre la tabla y se aferra a una barra, conectándose a través de las cuerdas a una cometa hinchable. Se trata de entender la teoría del viento y lograr cierta estabilidad para inmortalizar las navegadas...y de la Caja de Pandora sacar todo lo aprovechable.


2. Y todo empezó...

    La historia comenzó en los años 80 cuando Cory Roeseler, proveniente de Oregon, Estados Unidos, se propuso desarrollar su sistema de kiteski, a través del esquí de agua. Mientras tanto, en Francia, los hermanos Bruno y Dominique Legaignoux probaban con tablas, esquís y distintos tipos de velas y cometas sin sospechar que años más tarde su invento tendría un rotundo éxito y con ello se convertirían en los precursores de esta disciplina.


3. Material

Equipo mínimo

  • Casco: Se recomienda usarlo para protección evitando así golpes en la cabeza. Si la versión utilizada no tiene visera, también se recomienda usar lentes.

  • Líneas de vuelo: Tiene una longitud de 20 a 40 metros. El sistema puede ser de 2 a 4 líneas, de acuerdo con el grado de dificultad. Estas cuerdas deben ser capaces de soportar, por lo menos, el doble del peso de la persona que practica el deporte. Unas líneas cortas te permiten manejar con mayor rapidez y control la cometa. La medida aconsejable es de 20 m.

  • Barra de control: Empleada para controlar la dirección del kite, donde van atadas las dos líneas. Dispone de un mecanismo de emergencia que permite la liberación de la persona en caso de emergencia.

  • Arnés: Fija el cuerpo del deportista al kite. Existen dos tipos: de silla o el de cintura.

  • Kite o cometa: Su tamaño y forma varían de acuerdo a su uso y nivel. Existen cuatro tipos:

    Inflables: Son las más utilizadas y tienen buena capacidad para ir contra el viento y flotar en el agua durante un largo período. Su estructura beneficia el despegue desde el agua.
    Tipo Foils: Se asemejan a un parapente y generalmente son más resistentes a los impactos.
    Tipo Arch: Son un híbrido entre los kites inflables y los foils y son menos frágil y estables.
    Tipo Framed: Son semejantes a las cometas de juguetes y tienen un armazón de fibra.

  • Tablas direccionales: Son las más adecuadas para aprender, pues ofrecen estabilidad al deportista. Se asemejan a las tablas de surf y usualmente tienen acabado en resina o plástico.

  • Tablas bidireccionales: Tienen una estructura simétrica y disponen de dos fijaciones para los pies, ubicadas en el medio de la tabla.

  • Tablas de wakeboard: Tienen poca flotación y sus quillas son muy pequeñas. Se asemejan a las tablas que se usan en snowboard. Debido a su tamaño pequeño, son empleadas para hacer una variedad de acrobacias.

  • Chaleco: Se usa como salvavidas, pues la tabla no está diseñada para flotar.

  • Vestimenta: Short y wet suite -especie de camisa de lycra para protección del sol-.


4. Roturas más frecuentes del material

    En el pueblo de Lajares, al norte de Fuerteventura se encuentra el único taller especializado en la reparación de cometas de toda la isla. David Casas, el dueño del taller nos indica cuáles suelen ser las roturas que con mayor frecuencia llegan a su lugar de trabajo.

En el taller, encontramos una máquina de coser industrial para hacer las costuras de la cometa. El hilo es de poliéster con el que se cose los distintos tipos de costuras: zig-zag triple, zig-zag sencillo y lineal. Lo importante es que los puntos no sean demasiado seguidos, porque al ser el material tan fino puede quebrarse con facilidad.


Tipos de roturas:

A. Uniones entre las fundas de los tubos de aire y la cometa.
Reparación: Descoser el tubo por completo y unir la rotura, primero con una cinta estrecha (unos 5mm.), evitando arrugas y uniendo perfectamente las dos partes de la tela hasta conseguir la forma original. A continuación, se repite la misma operación con una cinta más ancha, pegándola por ambos lados de la cometa. Y sobre esa cinta ya podemos coser. Se tardaría unas 4 horas en todo el proceso.

B. Pinchazos de tubos.
Reparación: Se saca el tubo de la funda. Al hincharlo intentamos encontrar el punto de rotura. Si no se encontrara, se sumerge en agua para facilitar la labor. Una vez localizado, se le pone un parche especial para cometas.

C. Roturas de sables.
La cometa dispone de una serie de sables de carbono cuya misión es estabilizar el perfil. Si se rompe alguno hay que sustituirlo por uno nuevo.

D. Roturas de líneas.
Al igual que lo que sucede con los sables, si alguna línea se rompe hay que cambiarla.

    David Casas, el kiterepair, se encargó del arreglo de las cometas durante la celebración de los cinco eventos celebrados del 17 de julio al 1 de agosto de 2004, todos ellos valederos para campeonato del mundo. Los jueces puntuaron en los windsurfers y kiters los saltos más originales, las maniobras más técnicas y las mejores cabalgadas sobre las olas.

    En las pruebas de estilo libre de kitesurf (PKRA Freestyle Grand Prix), del 28 de julio al 1 de agosto, en categoría masculina, los tres primeros puestos correspondieron a los siguientes kiters:



  1. Martín Vari, (Argentina)

  2. Aarón Hadlow, (UK)

  3. Etienne Lhote, (France)

    En categoría femenina el podio correspondió a:

  1. Kristin Boese (GER)

  2. Ingrid Köllbicher (AUT)

  3. Petra Goeschl (GER)


5. En busca de los mejores vientos...

    Siguiendo a De Sola y Lago (2004), prestaremos especial atención a los vientos, pues dependiendo de donde vengan, tendremos que hacer un surf u otro.

  • Offshore (Viento de tierra). No se recomienda navegar en kitesurf y menos aún, meternos en el mar cuando hay olas pues si tenemos un problema nos iremos mar adentro.

  • SideOffshore (Viento de tierra, pero un poco de lado). Suele ser una de las condiciones más peligrosas, pues el viento viene un poco de tierra, pero también una de las más fáciles a la hora de surfear. Normalmente, la cometa tenderá a subirse y siempre hay que tirar de la mano que tienes adelantada para que baje y se mantenga en la posición deseada.


  • SideShore (Viento totalmente de lado). Es la dirección soñada, pues las olas las agarras de frente y los saltos suelen ser excelentes.


  • SideOnShore (Viento de lado y un poco de mar). También es una buena dirección pues el Surf es muy sencillo. Sólo hay que colocarse en la pared de la ola y dejar el kite a media altura y dedicarnos a correr la ola haciendo giros.


  • Onshore (Viento de Mar). El Surf en estas condiciones es muy complicado pues al romper la ola te tirará hacia debajo de la cometa y eso hará que te desvente.

    La técnica no es complicada; la dificultad está en encontrar las condiciones idóneas para nuestro propósito.


6. Achille Lequertier, un aventurero extremo

    Lequertier, promotor de escuelas de kitesurf y experto en este deporte introdujo en la isla de Fuerteventura el kitesurf. Fueron franceses los que llevaron el material a la isla. Era muy primitivo, cometas con dos líneas, sin frenos, básico, sin seguridad.

    El 12 de junio de 2004 compitió, quedando en primera posición en la primera carrera en la que participaron tanto windsurfistas como kiters. Se trataba de una competición mixta en la que , 120 participantes intentaron superar sus propios límites; la velocidad como reto. La organización del evento corría a cargo de IRONMAN LANZAROTE y la distancia a recorrer, de isla a isla, de Lanzarote a Fuerteventura. Lequertier y su cometa -en primera posición- tardó 19 minutos en hacer el recorrido, a una velocidad aproximada de 25 a 30 nudos.

TABLA DE EQUIVALENCIA

El 17 de julio de 2004 , organizado por la Asociación Youth-United, una salida desde Playa Blanca (Lanzarote) hasta el Cabo de Juby (Tarfaya) fue su siguiente reto náutico. Doce participantes, entre ellos 5 kiters, 12 windsurfistas y 1 hodie cat salieron en busca de las costas marroquíes. Un equipo de 150 personas constituían la logística.

    Sólo llegaron dos. Lequertier, uno de ellos. Incluso sin acompañarle las condiciones meteorológicas. Poco viento; tan sólo alcanzó una velocidad de 15 nudos, lo que le hizo recorrer la travesía en 5 horas, cuando con viento favorable se realiza en 3 horas y media.

    Y la fauna marítima acompañando el evento. Delfines, ballenas, tortugas marinas...incluso bandadas de pájaros atraídos por los colores de la cometa.

    La recaudación obtenida se destinó a financiar proyectos de ayuda a personas con discapacidad.

No es un deporte peligroso -afirma- sino que hay que practicarlo con las condiciones adecuadas de seguridad y aprender de expertos. En el norte de Fuerteventura es donde se encuentra su escuela de kite, magma kite school, junto con otras que cubren las necesidades de iniciarse en este deporte como son la escuela Flagbeach o Sixties, en la playa del Burro o en el sur, la escuela Pro Center René Egli. Las edades críticas para la práctica del kitesurf se encuentran entre los 7 y los 12 años.

    Se trata de un deporte muy técnico que cada vez practican más mujeres. Incluso en la actualidad, el porcentaje de éstas supera en número a las aficionadas al windsurf.

    Y en palabras de Achille Lequertier, es un deporte que da mucha libertad, y a diferencia del windsurf, puedes disfrutar de lo que ocurre alrededor sin que la vela te impida despertar esas emociones. Y la magnitud de los saltos no está sujeta a las olas, ya que se puede volar en lagos o en montañas.


7. Y en la nieve... Snowkite!

    Cambiemos radicalmente de entorno sin perder de vista las bases técnicas del kitesurf. Algunas leyendas hablan de que el origen del kitesnow se remonta a algunos siglos atrás cuando pueblos del norte de Europa se desplazaban a una velocidad impensable con la ayuda de cometas.

    Pero es sobre todo en Suiza donde hay que situar los orígenes y el desarrollo de este deporte. Desde principios de los años 60, en la región de St. Moritz, un grupo de aventureros se hacían remolcar por una especie de paracaídas con el fin de subir las pendientes nevadas, para más tarde bajarlas volando...estos paracaídas serían reemplazado por parapentes. Más adelante, en 1991 Stéphan Popprath, organiza en el lago helado de Silvaplana, la primera carrera de larga distancia que se convertirá en el primer campeonato del mundo de tracción sobre nieve.

     En Suiza, Québec, Noruega... la dimensión internacional del kitesnow es indudable, constituyendo, en la estación más fría un foco de creciente expectación además de un fuerte potencial de desarrollo.


Recogidas en Gravedad Zero, nº 3. Autor: T. Ligonnet

Las cometas tipo parapente de 2 ó 4 líneas están mejor adaptadas para la nieve, debido a la independencia que proporcionan a la hora del despegue y del aterrizaje. En lo referente a la superficie de la cometa, se aconseja elegir una talla menos en relación a la que utilizaríamos en el agua.

Evitar el viento que desciende de las montañas se convierte en un auténtico seguro de vida, ya que , en la mezcla de viento y pendiente la velocidad alcanzable puede ser extremadamente grande. El viento debe ser paralelo a la pendiente, entonces la posición de zenith estará no justo encima nuestra, sino detrás.

    Al no hundirnos, la necesidad de viento es menor en la nieve que en el agua; pero cuidado con el grosor del hielo... nos pueden sorprender los peligros que entraña una rotura de los lagos helados y las fuertes emociones que se esconden en los lugares más recónditos de nuestras montañas.


8. Comentarios finales

     Tanto con el kitesurf como con el snowkite siempre tienes algo que aprender. No hay límites para tu creatividad. La imaginación se pone a prueba en el aire... un nuevo movimiento supone una descarga de adrenalina tal, que no consigues pronunciar más de tres palabras seguidas. Y es ése el impulso para seguir superándote.

     La práctica de estos deportes con profesores acreditados y en condiciones óptimas constituyen la base de un aprendizaje seguro y sin riesgo.


Bibliografía

  • Atlas Mundial (1993). Edit. Planeta de Agostini. Barcelona.

  • Gravedad Zero (2004). Revista de Kiteboarding. Nº 3. Abril, 2004

Otros artículos sobre Aventura en la Naturaleza

  www.efdeportes.com/
http://www.efdeportes.com/ · FreeFind
   

revista digital · Año 10 · N° 77 | Buenos Aires, Octubre 2004  
© 1997-2004 Derechos reservados