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Introducción

    Las premisas de la Educación por Encuentros está representada por el magnífico verso de Miguel Martí Pol "¿Quién, sino todos?". A lo largo de toda la vida, a través de la Educación por encuentros podría asegurarse el acceso de todos y liberar al ser humano de la ignorancia y la manipulación.

    Educación es "dirigir con sentido la propia vida", es tener tiempo para pensar y elaborar respuestas propias, es no actuar al dictado de nadie. La Educación por encuentros permite a todos los interesados acceder a las fuentes del saber y poder participar... y, por tanto, ser verdaderos ciudadanos del mundo. La apuesta es convertir la Educación por encuentros en el instrumento de una educación sin distancia, democrática y adaptada a cada uno, impartida en todas partes y sin exclusiones. Es la base de una educación universal, abierta y sin fronteras.

    La Educación Superior actual, se enfrenta a realidades que le impone la revolución del conocimiento, y el desarrollo de la autonomía del aprendizaje, exigiendo que individuos adquieran nuevas habilidades, donde se eleven sus niveles de capacitación en función de demostrar cada vez, mayor independencia intelectual.

    Todo ello nos sitúa ante un gran dilema: ¿Cómo preparar al estudiante desde la concepción de un currículo flexible para que puedan llegar a la actualización de saber, saber hacer, poder hacer y por demás convivir?

    Realmente la respuesta pudiese esta en organizar el proceso de enseñanza-aprendizaje, a partir de la utilización de estrategias de intervención, que les permita a los estudiantes, desde un marco diverso, acceder a los conocimientos.

    Francamente consideramos, que el curso por encuentros pudiese ser una vía eficaz para el logro de este reto, que tiene hoy ante sí, el proceso de municipalización de la Educación Superior. Consideramos que para aplicar la técnica por encuentros, se hace necesaria la capacitación de los profesores que asumirán el nuevo modelo pedagógico, de manera que se logre la unidad de influencias en la formación de los profesionales.

    Sobre este tema se han realizado algunos estudios. En la década de los años 90, la Dra. Cándida Orizando Crespo, el Licenciado Roberto Caballero, entre otros, elaboraron documentos de consulta, que hoy retomamos por la necesidad y la vigencia en la práctica educacional de la Universidad de hoy.

    La carrera de Licenciatura en la Cultura Física se incluye dentro de las nuevas transformaciones que se están operando en la Educación Superior. Para enfrentar este reto, cuenta con un claustro diverso, de nivel profesional reconocido; pero que necesita profundizar en elementos metodológicos necesarios para aplicar con calidad la técnica por encuentro. Además los estudiantes universitarios de hoy, necesitan elaborar sus propios conocimientos, desarrollando así su independencia cognoscitiva e intelectual, teniendo como guía y facilitador del proceso pedagógico al maestro. Ante esta importante urgencia del tema en cuestión, cabe preguntarse: ¿Cómo orientar a los docentes para que utilicen con eficiencia y resultados la técnica por encuentro?

    Partiendo de la fundamentación teórica encontrada, sobre la técnica por encuentro, esta comunicación tiene como objetivo abordar las orientaciones metodológicas, haciendo énfasis en la clase por encuentro, momento básico en el proceso pedagógico, embebido en las nuevas condiciones de la Educación Superior.

Desarrollo

    La Clase por encuentro es la forma de organización de la docencia, la cual constituye una unidad organizativa, con enfoque de sistema, donde se realizan un conjunto de actividades docentes previstas para el contacto directo y esporádico entre profesores y estudiantes con una dirección especial y procedimientos específicos.

    Dentro del marco de intervención presencial, la clase no puede convertirse como alertaba Martí: en cursos dilatados, ni en oportunidad para ofrecer información atropellada.

    Tenemos que considerar tres elementos de base:

• Elemento contextual: Espacio de aprendizaje interactivo, en parejas, pequeños grupos.

• Elementos motivacionales y comunicativos: Los cuales en esta etapa juvenil deben estar dirigidos a la formación de intereses para la autoeducación, los cuales se definen no sólo por el interés del alumno de acumular y profundizar en sus conocimientos, sino por dominar los métodos y procedimientos para su obtención en forma individual e independiente y portador de estilos comunicativos que le faciliten su enriquecimiento y expresión.

• Elementos de la dinámica de intervención operativa:

  • Acercarnos al contenido planteando situaciones de aprendizajes intencionados, centrados en la práctica productiva y en la reflexión metacognitiva.

  • Selección de métodos y estrategias que promuevan al aprendizaje autorregulado y significativo.

  • Uso de recursos que potencien el desarrollo.

  • Evaluación para la mejora: utilizando variables como la coevaluación, la biteroevaluación y la autoevaluación.

    Cuando se planifica el curso por encuentros es necesario diferenciar la estructura de la 1ª Clase y la última del resto, las cuales mantienen una estructura similar.

    En el 1er encuentro: Se realiza el encuadre de la asignatura que conlleva a:

• Análisis del programa objeto de estudio: objetivos, temáticas, formas de evaluación.

• Presentación de la Base Material de Estudio a utilizar.

• Orientación de las características de la técnica por encuentro.

• Orientación de los contenidos correspondientes al 1er encuentro.

• Orientación de la primera guía de estudio: esta debe caracterizarse por el nivel de precisión., pues se introduce al alumno en este nuevo método de estudio.

    Debe dársele al alumno vías que le permitan organizar el trabajo independiente:

• Localizar información

• Recopilar material y/o datos.

• Confeccionar fichas

• Hacer cuadros sinópticos

• Realizar gráficos

• Elaborar resúmenes

• Resolver problemas

• Hacer localizaciones

• Construir

• Diseñar

• Comparar

• Interpretar

• Interrelacionar

• Diferenciar

• Elaborar conclusiones

• Redactar informes.

    Todas estas vías permitirán que el trabajo independiente garantice que el estudiante piense, elabore, aplique, resuelva situaciones problémicas, incluso cree, en fin se apropie de procedimientos para acceder al conocimiento.

    En los encuentros siguientes deben prevalecer 3 momentos fundamentales:

1er momento: Aclaración de dudas sobre el tema anterior.

• Rememorar los objetivos y contenidos de la guía.

• Valoración por intercambio.

• Dialogar sobre el uso de métodos y estrategias de aprendizaje seguidas y de los medios empleados para la obtención del conocimiento.

2do momento: Comprobación de la autopreparación.

Comprobar: No significa que los alumnos expongan las respuestas de la guía, ni si cumplieron con su deber o no.

¿Qué es comprobar?

• Verificar transferencia del aprendizaje sobre la base de actividades productivas y creativas, que conlleven esfuerzo intelectual no la mera reproducción del material.

• Ofrecer apoyos y diversificaciones de la ayuda en correspondencia con el desarrollo potencial de los estudiantes.

• Proponer actividades variadas partiendo del conocimiento de:

  • ¿Cómo organizarnos?

  • ¿Qué estrategia de aprendizaje se seleccionaría?

  • ¿Cómo expondremos nuestras ideas?

  • ¿Cómo evaluarnos?

    Este marco debe propiciar a los alumnos:

• La oportunidad de discutir en el colectivo.

• Corrección de errores asimilados en el estudio.

• Reorientar y adicionar la información complementaria.

• Realizar generalizaciones.

• Aplicar la información recibida a situaciones de vida.

• Consolidar los conocimientos asimilados.

3er momento: Recibir contenidos esenciales y orientación de la guía de estudio.

    No es monopolizar la información, es orientar determinados núcleos teóricos o ideas rectoras; como dijera Martí "esparcir e impregnar las ideas, gérmenes que despertarán el apetito del saber".

    El tratamiento al contenido presupone:

• Dar al estudiante una comprensión clara del asunto y plantear las líneas directrices que van a constituir el punto de partida del trabajo.

• Reactivar las experiencias previas de los estudiantes con el asunto a tratar.

• Ofrecer una visión de conjunto del tema, sin agotar toda la materia.

• Determinar los objetivos que se persiguen.

• Indicar las fuentes de información donde pueden encontrar el tema objeto de estudio.

    En esta etapa es medular la labor. Este momento garantiza la evaluación del contenido para el cual pueden utilizar como variantes:

• Pregunta oral.

• Pregunta escrita.

    Preguntas orales y escritas combinadas.

• Preguntas problémicas

• Defensa de tesis, pensamientos, ideas.

• Trabajo extraclase.

    En todos los casos se debe garantizar que la forma de evaluación seleccionada implique un grado de generalización acorde con los objetivos propuestos y contribuir a un diagnóstico dinámico, continuo e integral del estudiantado.

    Además deben ir dirigidos a determinar en qué medida el aprendizaje realizado es significativo y cómo logra implicarse en la formación de motivaciones, sentimientos, actitudes y valores. Conclusiones

1. El curso por encuentro constituye una vía eficaz para materializar los nuevos propósitos que tiene hoy la educación superior: independencia cognoscitiva.

2. Para lograr éxitos en la aplicación de la técnica por encuentro, es necesario contar con docentes de experiencia y de alto nivel científico pedagógico.

3. Garantizar guías de calidad y la bibliografía adecuada y fundamental de la asignatura.

4. Cuando se estructura adecuadamente la clase por encuentro, propicia el crecimiento personal de los estudiantes. Esto se logra en la medida que se apropien de procedimientos que le permitan acceder a los nuevos conocimientos.

Bibliografía

• Caballero Carrillo Roberto. El encuentro como unidad organizativa.

• Castellano Simons Doris y otros. Aprender y enseñar en la escuela. Editorial Pueblo y Educación, Ciudad Habana, 2001.

• Monografía: Sede Universalización. Santa Clara, 2001.

• Orizondo Crespo Cándida: artículo: Algunas consideraciones acerca del encuentro.

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revista digital · Año 10 · N° 75 | Buenos Aires, Agosto 2004   © 1997-2004 Derechos reservados