Problemas teóricos y crisis actual en la Educación Física
Pierre Parlebas (Francia)

Mariano Guiraldes (Presentador)
Ruth Edelstein (Intérprete)


Queridos colegas, me encuentro muy contento de estar aquí con ustedes y cuando veo a tantos jóvenes delante de mí vuelvo a encontrarme con aquellos buenos viejos tiempos en los que yo mismo era estudiante de Educación Física. Por otra parte, a lo largo de esta charla que vamos a tener ahora, voy a darles bastante a menudo mis propias impresiones qué fue para mi ser estudiante de Educación Física.

Vamos a hablar de los problemas teóricos de la Educación Física actual y fundamentalmente de la crisis actual de la Educación Física. Voy a proceder en este sentido, planteándome preguntas.

Educación Física y ciencia
La primera pregunta que se nos plantea es la siguiente: la Educación Física es una ciencia?. En este sentido, mi respuesta es categórica: la Educación Física no es ni será jamás una ciencia. La Educación Física es una práctica, una práctica pedagógica, una práctica en el transcurso de la cual ustedes, los profesores, ejercen una influencia en los alumnos que les han sido confiados. En consecuencia no es una ciencia.

Pero, puede alcanzar la Educación Física algo que concierne a las ciencias?. Si la Educación Física no tiene nada que ver con la ciencia, en este sentidos, la Educación Física no tiene ningún lugar en las universidades. Si, por el contrario, tiene relaciones con la ciencia, es necesario entonces, que los estudiantes tengan una formación científica mínima. En este sentido mi respuesta es positiva. Es deseable que la Educación Física sea científica.

Es en cierto sentido como la Medicina: el médico no es un investigador científico pero utiliza los conocimientos científicos para curar, para cuidar al enfermo. En consecuencia, es necesario que él adquiera estos conocimientos científicos.

Lo mismo sucede con el estudiante de Educación Física. El profesor es un practicante. Pero puede estar esclarecido por los conocimientos científicos. Mi respuesta en consecuencia es clara: la Educación Física no es una ciencia pero cada vez más debe ir apoyándose en los conocimientos científicos.

Sobre este punto, cuando yo era estudiante este acuerdo no existía. Pero hoy día las cosas han avanzado mucho y en todos los países hay una investigación científica en lo que concierne al campo de la Educación Física y el deporte.

Pero esto no resolvió todo el problema, ya que se plantea una pregunta: cuáles son los conocimientos científicos que ustedes, estudiantes de Educación Física necesitan?. ¿Cómo concebir la investigación científica en Educación Física?. ¿Cómo formar a los estudiantes?. ¿Con qué perspectivas?. ¿Con qué especialidad?.

Actualmente hay dos posiciones opuestas. ustedes van a encontrarse frente a esta opción. La primera concepción consiste en yuxtaponer disciplinas científicas. Es la enseñanza que yo mismo recibí en el Instituto Nacional del Deporte de París. Los lunes por la mañana teníamos clases de anatomía; por la tarde clases de psicología; los martes por la mañana clases de sociología; los jueves, clases de estadística. En este sentido había una yuxtaposición de disciplinas diferentes.

Estas disciplinas, teóricamente, estaban hechas para ser útiles. Pero yo como estudiante, jamás utilicé estos conocimientos. Las ciencias que yo utilicé estaban en el campo. Como practicante, como docente, no estaban para nada apoyadas en estos conocimientos científicos teóricos.

Lo que yo recibía en Medicina o en Psicología prácticamente no me servían de nada para enseñar el salto en alto, fútbol, natación o gimnasia. Teníamos conocimientos teóricos totalmente separados de las prácticas del campo y sin embargo, es hoy en día una concepción dominante enseñar disciplinas diferentes que teóricamente hablan de Educación Física y de deporte. Pero lo hacen desde un punto de vista que les es propio.

Yo soy sociólogo. Cuando un sociólogo habla del deporte lo hace desde el punto de vista del sociólogo. No se le puede reprochar nada. Pero el punto de vista del sociólogo no es el de un profesor de Educación Física. Diré inclusive, que no tiene nada que ver. El médico o el sociólogo describen un fenómeno de una manera neutra, sin tomar partido, no buscan progresos. En tanto que el profesor, el docente, está ahí, en el campo, con niños, con adultos, tiene objetivos. Su objetivo no es adquirir conocimientos sin obtener resultados. ¿Y resultados sobre qué?. Sobre las conductas, sobre la acción sobre los comportamientos de los niños. Ahora bien, esto no se da por la yuxtaposición de psicología, de sociología, de informática.

Asimismo, hay una segunda concepción que es la que yo trato de desarrollar. Este es el planteo que yo hago. No hay contentarse con acumular en el punto de vista exterior. Es necesario impulsar una disciplina original que desarrolle lo que nosotros llamamos 'su propia pertinencia', que examine en consecuencia la práctica física desde un punto de vista motriz.

Por supuesto que podría recurrir a la ayuda de la sociología, de la psicología, de la biomecánica. Pero mi problema es elucidar lo que subyace a todo comportamiento motor, acción motriz. Tratamos de desarrollar una nueva disciplina que es la Ciencia de la Acción Motriz que a veces llamamos Praxiología Motriz, que viene de praxis (acción) y logos (discurso). Se trata de desarrollar un campo de conocimiento científico que tome como objeto el gran conjunto de las actividades físicas, que ponemos bajo la etiqueta de la Acción Motriz.

Vemos que los dos aspectos se apoyan ambos en la ciencia, pero con una gran divergencia. El primer punto de vista acumula conocimientos exteriores, el segundo punto de vista desarrolla un enfoque propio.

Actualmente, estas dos posiciones están en lucha. La que domina actualmente es la primera. Hay que decir que es la más cómoda. Porque una vez que uno es psicólogo hace psicología; una vez que uno es biomecánico, hace biomecánica. Esto es lógico. Pero es lógico en una universidad de biomecánica o de psicología. Pero no lo es en un centro de actividad física.

Yo, personalmente, digo que hay que cambiar. No hay que contentarse con puntos de vista exteriores. Hay que desarrollar puntos de vista propios. Pero esto es muy difícil para desarrollar, porque hay que cambiar de punto de vista y porque también muchas veces hay que enfrentarse con colegas de otras disciplinas. Porque el biomecánico va a decir "soy yo el que conoce de biomecánica"; el psicólogo va a decir "soy yo el que conoce de psicología".

Si, por supuesto, está bien. Pero yo les digo: con nuestros estudiantes, no se trata de hablarles de biomecánica o de psicología, sino de enseñarles lo que es la práctica de la actividad física.

Esto supone hacer nuevas síntesis. Es más difícil pero mucho más estimulante. Creo, por ejemplo, que en el campo de la investigación es mucho más interesante. Muchas veces me encuentro haciendo investigaciones sociológicas y psicológicas clásicas. Me interesa. Pero encuentro mucho más excitante el trabajar sobre la Acción Motriz. Es mucho más nuevo, se hacen descubrimientos, no se repite lo que otros ya han dicho.

En conclusión, hay que crear una disciplina nueva. ¿Es ésto una utopia?. Muchos me dicen sí, esto es un chiste. Pero estas personas no conocen bien el mundo científico, porque se han creado muchas disciplinas científicas. Por ejemplo, cuando yo era estudiante, la psicología no tenía la preminencia que tiene en la calle, era una disciplina secundaria. Hoy en día es una disciplina floreciente, porque los psicólogos han sabido imponerla. Pero hay otras disciplinas que se han creado, como la ergonomía, la proxemia (la ciencia del espacio), la kinésica (la ciencia del movimiento), la pragmática (que es la ciencia que estudia las conversaciones, el diálogo, los intercambios). Estas disciplinas son todas ellas muy recientes.

En cuanto a la Educación Física tenemos que tener la audacia, el coraje de crear nuestra propia ciencia, lo cual de ninguna manera significa que hay que repudiar las otras disciplinas, en absoluto. Tenemos que seguir trabajando con los biomecánicos, los sociólogos, los psicólogos. Tenemos necesidad de ellos, sobre todo en este momento. Es necesario que constituyamos equipos de trabajo con ellos, con los estudiantes, pero con la siguiente idea: las personas que van a dirigir estas investigaciones ya no serán ni biomecánicos, ni médicos, ni psicólogos. Serán que son profesores de educación física.

Muchos no se contentarán con plantear preguntas, sino que llevarán adelante las investigaciones y ellos mismos serán los que interpretarán los resultados.

De esta manera, como se plantea la crisis actual, este primer aspecto creo que está resuelto. Todo el mundo reconoce la importancia de la ciencia, pero no estamos de acuerdo sobre el papel despectivo acordado a tal o cual ciencia. En este sentido mi posición es radical, esta forma de acumular conocimientos exteriores conduce inevitablemente a un callejón sin salida.

Aproximadamente hace un siglo que procedemos de esta manera y ya hace unos 20 años que la Educación Física está en la universidad. En este sentido, bajo este punto de vista, es un fracaso. Desde el punto de vista científico, no hay verdadera integración de la Educación Física con la universidad y con la gente. Es imposible, podemos desarrollar sociología, la biomecánica, la psicología pero no es de ésto que se trata la Educación Física. Me parece fundamental desarrollar un campo de conocimiento autónomo y original para la Educación Física.

La Acción Motriz
Ustedes entienden muy bien que al hablar de la Acción Motriz tenemos el denominador común de todos los deportes, de todas la actividades físicas. Hagan danza, expresión corporal, gimnasia, atletismo, están todos en el campo de la acción motriz. La Acción Motriz es lo que da la identidad a la Educación Física; también le da su unidad y finalmente, su especificidad. Lo que hace que todas las personas que trabajan en al campo de la Acción Motriz sean llamados motricistas.

Este es el primer punto que quería abordar con ustedes Y hay que entender bien que si vamos en este sentido todos los estudios inevitablemente van a sufrir una transformación. En las universidades francesas trabajamos de este modo. No en muchas pero sí en algunas. Por supuesto que a nuestros estudiantes le damos una formación de base en estadística, en biomecánica, en psicología. Pero desarrollamos un tronco común de base en Acción Motriz. Y es allí verdaderamente donde nuestros estudiantes aprenden su profesión, en relación por supuesto, con las prácticas de campo. Es allí donde adquieren estos conocimientos científicos que tocan muy de cerca a su formación y a su profesión.

Por ejemplo, si trabajamos en comunicación lingüistica, trabajamos sobre el lenguaje. Eso no es específico para la Educación Física. Nosotros en el campo vivimos lenguajes particulares que son lenguajes gestuales, corporales. Este es el campo de la Acción Motriz. Hay que entender cómo es posible que en una cancha de fútbol, 22 jugadores se comprendan entre sí sin hablarse; cómo en patinaje artístico, los patinadores, los artistas, transmiten mensajes sin palabras. Esto verdaderamente forma parte de la Acción Motriz.

Tenemos que entender cuáles son las técnicas por las cuales este mensaje motor va a pasar. En este caso hay una multiplicidad de desarrollos científicos para desarrollar. En ese campo común de base del que les hablaba, enseñábamos algo de esto. Este tronco común puede llevar varios años. Puede tomar seguidamente el camino de la especialización, pero en lugar de dar una enseñanza fragmentaria a nuestros estudiantes, habrá una enseñanza mucho más inteligible, mucho más coherente, más unificada para transmitir las nociones de la Acción Motriz.

Los programas de Educación Física
Otro de los problemas que se plantean es la necesidad de imponer un programa de Educación Física. Es que tenemos que preguntarles a ustedes, pedirles a ustedes, nuestros profesores, que enseñen tal o cual actividad a tal edad, luego la otra y luego la otra?. ¿Todos los argentinos tienen que aprender lo mismo?. ¿Todos tienen que aprender voley, rugby, basquet, saltos?. ¿Hay un orden para seguir, o hay que enseñar lo que está de moda?. ¿O solamente lo que uno mismo conoce?.

Este es un problema importante. No sólo es un problema de la profesión sino que es un problema nacional. En este sentido también hay varias posibilidades. En algunos países hay programas extremadamente estrictos, donde todo está previsto: a tal edad, esta actividad; tal mes, tal contenido. En otros países no hay ningún programa. No sé por otra parte qué es lo que sucede en Argentina en este aspecto.

Pero en Francia este problema se plantea y esta es la respuesta que yo sugiero. Por supuesto que voy a partir del análisis de situaciones motrices. Yo digo: ustedes los profesores tienen a su disposición centenares de miles de actividades posibles. Ustedes no las conocen todas y tampoco van a poder enseñarlas todas juntas. O sea que ustedes se ven condenados a hacer una elección.

¿Qué tipo de elección?. Me parece que es importante analizar todas las actividades y extraer distintas categorías de ellas. Tratar de identificar grandes familias coherentes de actividades. Una vez que uno ha identificado grandes dominios de Acción Motriz, y éstos son suficientemente homogéneos, no vale la pena enseñarlo todo, sino tomar 2 ó 3 representantes de estas grandes familias.

Hemos analizado el conjunto de las prácticas y hemos encontrado de siete a ocho grandes dominios de acción. Esto puede servirnos como referente para la confección de programas. La idea es que los niños tendrán que tener un conocimiento general de todas estas grandes familias.

Esto supone ciertas presiones. El profesor no deberá contentarse con uno o dos de estos fenómenos. Debe abarcar todo el campo de las actividades. Pero le permite un cierto margen de elección según sea que tiene un grupo de alumnos varones, niñas, la edad de ellos, el medio geográfico en el cual se desenvuelven.

La interacción motriz
¿Cómo identificar estas grandes familias de acciones motrices?. Este es un problema precisamente de la ciencia de la Acción Motriz. No puedo por supuesto detallar ésto aquí, pero sí voy a darles algunas ideas al respecto.

Hay que elegir criterios operativos, criterios objetivos. Lo que cuenta no es mi opinión sino que pongo los elementos a la crítica de los demás.

Por ejemplo, primer criterio verificable sería la interacción con los demás. Cuando en la acción motriz no tengo interacción con otros es una actividad psicomotriz, por ejemplo, el salto en alto, las barras paralelas o el potro, la halterofilia. Pero cuando hay una interacción con otros hay una transformación en la acción motriz: es una acción sociomotriz. Ven ustedes que hay una dicotomía entre la acción psicomotriz y la acción sociomotriz. Esto no es una fantasía, no se trata de mi gusto personal. Todos pueden filmarlo, observarlo. Esto constituye dos campos diferentes: el campo psicomotor y el campo sociomotor.

Pero aún así esto sigue siendo algo grosero. Por ejemplo, la interacción sociomotriz puede ser de cooperación o de antagonismo. Si tomo por ejemplo un encuentro de box o un set de tenis o un asalto de esgrima, estoy en el campo de la interacción de oposición, que se caracteriza por una acción motriz muy particular: ataque, defensa, agresividad.

Pero si considero por ejemplo una actividad como puede ser la vela o la actividad de patinaje artístico en parejas, o por ejemplo una práctica de alpinismo con sogas. Es ésto una interacción motriz, pero una interacción motriz de cooperación. Hay entonces una dicotomía entre interacción de oposición e interacción de cooperación. Vemos que hay dos familias de interacción motriz muy diferentes.

Cuando ustedes tienen a sus alumnos en judo o en alpinismo, se encuentran en dos universos muy diferentes. Entonces en este aspecto, la intervención de ustedes como educadores tiene consecuencias muy variadas. Y es necesario que ustedes estén bien al tanto de cuáles son las consecuencias de sus intervenciones. Es esta la manera en que definimos las dos grandes familias de Acción Motriz.

Relación con el espacio
He hablado de criterios de interacción. Pero voy a tomar un último ejemplo: voy a tomar la relación con el espacio.

El espacio puede ser standarizado, inmóvil o estar cargado de imprevistos. Por ejemplo, el espacio de este gimnasio es un espacio standarizado. Ustedes ya lo conocen antes de entrar en el campo, no hay obstáculos, las dimensiones ya han sido previamente trazadas. Este espacio no supone incertidumbre, al igual que el espacio del atletismo o el espacio de la gimnasia.

Cuando la actividad es psicomotriz, en este caso, aumentan los automatismos motores. Las enseñanzas que ustedes transmiten son las enseñanzas automatizadas, por ejemplo el salto en alto, es una actividad muy compleja, que en el entrenamiento va automatizándose. Sucede lo mismo con las barras paralelas o el salto en largo, el lanzamiento de jabalina. Es muy diferente en lo que concierne a los deportes de vida en la naturaleza. Cuando se bajan los rápidos en un torrente, o por ejemplo al hacer esquí en nieve virgen, o cuando, o al hacer surf, tienen ante ustedes un medio que va cambiando permanentemente, con obstáculos que surgen de repente. Ustedes no pueden desarrollar esas prácticas con los ojos cerrados. Hay que tomar permanentemente información porque hay mucha incertidumbre y ustedes deben tomar decisiones y adoptar inmediatamente una estrategia. Es una acción motriz muy particular.

Ven muy bien que la conducta motriz, por ejemplo en kayac o en canoa es muy diferente del lanzamiento de bala o del salto con garrocha. Son dominios de acción motriz muy diferentes. Ustedes ven muy bien que el trabajo que hacemos es analizar todas la técnicas pero ver más allá de la técnica lo que hay de verdaderamente profundo en la acción motriz.

El espectador ve muy bien la técnica pero ustedes como expertos deben ver detrás de la técnica todos los problemas de principios de acción, de las conductas motrices de los atletas y de los jugadores. Esto supone una competencia en la acción motriz.

Hay que identificar los grandes dominios de la Acción Motriz, y hacer que los programas descansen en estos dominios, en estos campos.

Especialización o polivalencia
Otro de los problemas que se plantea es: hay que ser especialista o polivalente?. Muchos dicen: "hay que ser un experto en fútbol y nada más que en fútbol". O en gimnasia o natación. Otros dicen que hay que aprenderlo todo. ¿Dónde se encuentra la verdad?.

Hay dos problemas diferentes: para los niños y para ustedes, ustedes en tanto estudiantes o profesores. Veamos este primer caso. En Francia en cierto sentido lo hemos conocido todo. Cuando yo mismo era estudiante, queríamos saberlo todo. Practicábamos todo: pasaje de vallas, lanzamiento de jabalina, voley, vida en la naturaleza, natación en todos sus estilos, la barra fija, las barras paralelas. Era demencial. Después, seguidamente le pedimos a nuestros estudiantes que fueran hiperespecializados. La idea es que se vuelvan campeones en su especialidad. Es cierto que entre nuestros alumnos han salido muchos campeones, profesores de Educación Física. Pero está bien claro que ni la primera ni la segunda son las más adecuadas como soluciones.

Es necesario que nuestros estudiantes tengan una formación abierta. Es necesario que el profesor de Educación Física tenga un conocimiento sobre el conjunto de las distintas prácticas. Que conozcan los principios de Acción Motriz en todas las familias. Este es el tronco común de base, teórico y práctico. Pero puede muy bien ser interesante tanto para profesores como para alumnos tener una o dos prácticas dominantes y muchas veces también una especialización muy fuerte. No es obligatorio, pero puede muy bien ser interesante.

Yo creo que hay que dejarle a los estudiantes, a los profesores la posibilidad de elegir esta especialización si así lo quieren. Pero es necesario que tenga una formación científica sobre toda la extensión del campo. Es necesario que esté esta base polivalente, y para los alumnos en algún sentido de la misma manera. Cuando son muy jóvenes hay que presentarles todo el conjunto de la práctica. Y seguidamente ellos mismos podrán elegir lo que más les guste.

Los objetivos en la Educación Física
Otro problema se plantea: el objetivo del profesor de Educación Física será solamente enseñar técnicas deportivas?. Si, digo si, por supuesto, hay que enseñar técnicas. Sin técnicas no tenemos verdaderamente conocimiento profesional, pero sobretodo, no hay que quedarse solamente en las técnicas. El objetivo del profesor es, con ayuda de sus técnicas tocar, alcanzar la personalidad del alumno. Desarrollar su dominio emocional, desarrollar su inteligencia motriz, desarrollar sus capacidades emocionales. Por la intervención del cuerpo y de la acción se hacen surgir nuevas maneras de entrar en contacto con los demás.

Hay que adoptar una pedagogía de la educación. De esta manera los profesores se convierten en educadores.

Tenemos nosotros una oportunidad extraordinaria. Los niños y los adolescentes adoran hacer actividades físicas, por supuesto, si se las proponemos de manera agradable. Nuestro objetivo no es aprender técnicas pero sí con ayuda de estas técnicas que son indispensables, tocar, alcanzar estas dimensiones de la personalidad.

Que el niño y el adolescente experimenten el placer del actuar de la acción. El deporte, la actividad física, es una fuente extraordinaria de placer físico, es la ocasión de expandir su personalidad. Si ustedes están actualmente aquí y si yo estoy aquí es que en algún momento todos hemos experimentado una pasión. Hemos sentido esta pasión por la actividad física. Hay que hacer que los niños sientan esta pasión por la actividad física. Es un trabajo de ustedes como educadores, pero por supuesto que para hacerlo hay que conocer muy bien su profesión y por supuesto, la Acción Motriz.

Deporte y Escuela
Me quedan sólo dos pequeños puntos para tratar. El primero: hay que enseñar solamente, únicamente deportes?. Algunos dicen: hay que enseñar solamente deportes. Otros dicen: hay que enseñar todo salvo el deporte. Mi respuesta tendrá más matices. Mi sentimiento personal es que uno no puede dejar de tener en cuenta al deporte. Los niños miran la televisión, ven constantemente los Juegos Olímpicos, los atletas, los jugadores de fútbol. No podemos privarlos de esas actividades. Pero según mi opinión, no deberíamos quedarnos solamente con estas actividades.

El deporte es un subconjunto del conjunto mayor de las actividades. Hay muchas otras actividades. Por ejemplo los juegos tradicionales, las actividades libres, actividades de juegos de países extranjeros, ejercicios gimnásticos. Todo esto según mi opinión debería ser presentado a los niños según los objetivos pedagógicos que ustedes tengan. En consecuencia el deporte forma parte del bagaje de ustedes pero junto al deporte hay muchas otras actividades físicas.

Y en último término, el profesor de Educación Física, sólo debe enseñar en la escuela?. ¿O solamente fuera de la escuela?. Es evidente que la tarea primera que tiene el profesor es enseñar a los chicos, pero por supuesto, el profesor de Educación Física puede intervenir fuera de la escuela. Esto me parece no sólo posible sino deseable. Podemos intervenir también en los clubes, en las asociaciones, en las colonias de vacaciones, en los centros de tiempo libre. Esto le da a ustedes salidas laborales.

Nosotros como profesores, estamos muy preocupados con este tema de la salida laboral de ustedes estudiantes. Es una manera, además, muy importante de penetrar en el tejido social. Por eso es tan importante que nuestros futuros profesores tengan una formación muy sólida. Es necesario que sean capaces de analizar las situaciones, adaptarse por ejemplo, a los deportes de alto nivel, a la actividad del joven, a la práctica de las chicas, a la práctica de los discapacitados, a las actividades de la tercera edad. Pera ello siempre es necesario una formación científica de base en Acción Motriz.

Si solamente formamos en el campo de las técnicas los profesores estarán desfasados al cabo de pocos años, porque las técnicas cambian y ya no sabrán qué enseñar. Pero si tienen una información científica sobre la Acción Motriz, podrán manejar todas las situaciones, todas las prácticas, todos los deportes nuevos que van a surgir. Tendrán los medios intelectuales, científicos, para analizarlos. Serán excelentes pedagogos, excelentes entrenadores en prácticas que ellos mismos no habrán practicado. Por eso la insistencia en esta formación científica de base para la enseñanza.

Les agradezco mucho su atención y estoy a total disposición para escuchar sus preguntas.



Lecturas: Educación Física y Deportes. Año 2, Nº 7. Buenos Aires. Octubre 1997
http://www.efdeportes.com