Algunas consideraciones generales para el entrenamiento de la resistencia en los deportes con pelota |
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Facultad de Cultura Física Sancti Spíritus (Cuba) |
Lic. Pedro Cañizares Rodríguez Lic. Joel Ernesto de la Paz Avila joelpa@suss.co.cu |
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http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 8 - N° 55 - Diciembre de 2002 |
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Introducción
La resistencia es la capacidad del organismo de sostener un esfuerzo eficazmente el mayor tiempo posible (Averhoff y León, 1981), y su entrenamiento tiene dos direcciones fundamentales: el aeróbico y el anaeróbico. En el primero no existe deuda oxigénica, mientras que en el segundo, el organismo soporta durante tiempo prolongado una deuda de oxígeno.
Los límites de la resistencia aeróbica se alcanzan cuando se necesita producir energía en condiciones anaeróbicas. En los juegos con pelotas, estos dos tipos de resistencia están íntimamente relacionados y no es fácil determinar cuando comienza una y cuando finaliza la otra.
Por eso, algunos autores recomiendan emplear de dos a tres meses del plan de entrenamiento alternando un trabajo aeróbico con otro de acondicionamiento muscular-articular integrado por ejercicios a un volumen grande con intensidades bajas y medias, lo cual permitirá posteriormente, luego de tener una buena base, realizar entrenamientos anaeróbicos de potencia y velocidad sin mayores riesgos de lesiones (Rodríguez García, 1990).
El entrenamiento individual en los deportes con pelotas juega un papel fundamental para la acción colectiva posterior durante la competencia, pues hay que tener en cuenta que todos los organismos no tienen las mismas posibilidades de adaptación; y es aquí donde la educación y mejoramiento de esta capacidad puede determinar un desenvolvimiento y rendimiento óptimos del equipo en una confrontación competitiva.
Experiencias efectuadas en diferentes deportes han permitido dividir por zonas el trabajo realizado, relacionando este con las concentraciones del lactato, los cuales se manifiestan de la siguiente forma:
No obstante a lo abordado hasta aquí, queremos enfatizar en la multilateralidad del trabajo, la cual en los deportes colectivos, donde los atletas en determinados momentos utiliza una u otra cualidad física para lograr la victoria. Todos conocemos que el entrenamiento provoca cambios bioquímicos, los cuales se manifiestan como reacciones adaptativas del organismo a los distintos trabajos musculares. Las variadas formas de entrenamiento provocan cambios bioquímicos en cada cualidad física, por eso es que por medio del entrenamiento para mejorar rapidez el organismo adquiere características multilaterales, pues no solo el trabajo va a mejorar la rapidez sino que crea condiciones bioquímicas y funcionales para mejorar la fuerza y la resistencia. El entrenamiento de fuerza además de mejorar esta cualidad, crea condiciones para la adquisición de la rapidez, sin influir notablemente en el desarrollo de la resistencia. El entrenamiento de resistencia favorece solo el mejoramiento de esta; a pesar de esto debemos tener presente que esta cualidad, por no ser creadora de bases bioquímicas para las demás cualidades, es que se recomienda no trabajarla con más del 80% de intensidad en los deportes de fuerza rápida y con un volumen moderado, ya que el abuso de estos puede traer desequilibrios. Pero podemos olvidar que esta cualidad es importante para el sistema humano, por lograr reservas energéticas de glucógeno. Todo lo antes planteado evidencia que solo se alcanzan elevados resultados en los deportes colectivos o individuales cuando el entrenamiento se haya desarrollado sobre la base de la multilateralidad.
En nuestro artículo abordamos algunas consideraciones del tratamiento que se puede dar o tener en cuenta a la hora de impartir la cualidad resistencia en el programa de entrenamiento, tanto para la resistencia general o resistencia aeróbica, como para la resistencia específica o resistencia anaeróbica. En los deportes con pelotas, el segundo tipo de resistencia se manifiesta en múltiples ocasiones durante un partido, el cual alcanza un dinamismo extraordinario por la calidad del contrario.
No olvidemos además que, el balón como mediador entre los contrarios da la posibilidad que se produzcan durante el juego una serie de interrupciones que van desde la pérdida del balón hasta tiempos solicitados, dando la oportunidad muchas veces de que aparezcan procesos de restablecimientos durante los partidos.
Materiales y métodosLa muestra seleccionada fue de 11 jugadores de fútbol de 2da División; este grupo representa el 50% del total de integrantes de un equipo de este deporte de Perú. Otros materiales que fueron empleados son el cronómetro, balones y el terreno de fútbol que sirve de campo de entrenamiento a este equipo.
Se utilizaron los métodos teóricos, tales como el análisis, la síntesis y la comparación. Además se empleó el método de Karvonen, el cual posibilitó los cálculos necesarios para determinar las zonas de intensidad de cada atleta.
Metodología del Test de Karvonen
Determinar el pulso basal de forma individual durante siete (7) días al despertarse el atleta, calculando la media.
Se aplica un test de carga progresiva, el cual consiste en repetir ocho (8) veces, cada 45 segundos con intensidades descendentes en cada ejecución. Se toma el pulso en diez (10) segundos; la intensidad descendente es de tres (3) segundos en cada ejercicio.
Se determina el porcentaje de intensidad de cada zona, el cual se lleva al sistema decimal.
Se aplica la fórmula siguiente:
Zona X= IxR(fc)+Pb
donde: Zona X es el número de la zona de intensidad; I es el porciento de intensidad llevado al sistema decimal; R(fc) es la reserva de frecuencia cardiaca, la cual se determina mediante la fórmula R(fc)= Pm-Pb, donde Pm es el pulso más alto obtenido en la ejecución del ejercicio y Pb es el pulso basal promediado.
Todos estos métodos nos proporcionaron la cuantificación de los datos y la confección de tablas resúmenes de los mismos, sobre las cuales se llevó a cabo el análisis de los resultados obtenidos y se arribó a conclusiones justas.
ResultadosTABLA # 1: Resultados del pulso basal y el pulso máximo en una ejecución del ejercicio
TABLA # 2: Zona de intensidad de cada atleta y media del grupo
Discusión de los resultadosLa Tabla No. 1 muestra el pulso basal, así como el pulso máximo obtenido por cada atleta en la ejecución de uno de los ejercicios. Aquí podemos observar la media del grupo referente a la ejecución individual del ejercicio planteado. Con este análisis podemos valorar que los datos necesarios para poder determinar las zonas de intensidad individuales y colectivas son precisos y de importancia vital para el trabajo a desarrollar en la resistencia básica y específica.
La Tabla No.2 refleja las zonas de intensidad, no solo las que se orientan por Karvonen, sino que nos da la posibilidad de enmarcarlas en las zonas establecidas por el control bioquímico. En esta tabla se puede apreciar como a las zonas 1 y 2 les podemos llamar Zonas Aeróbicas; a la zona 3 le podemos llamar Zona Mixta y a la zona 4, podemos llamarla Zona Anaeróbica.
Si valoramos ambos resultados obtenidos y analizados, podemos manifestar que el análisis individual juega un papel fundamental para poder proyectar el trabajo del grupo por descansar en él el éxito a lograr en las competencias, donde las manifestaciones de ambos tipos de resistencias están presentes.
ConclusionesDespués de haber analizado los resultados obtenidos a través de la aplicación de los métodos seleccionados para este trabajo, podemos plantear las conclusiones siguientes:
Determinar las zonas de intensidad individual y colectiva nos da la posibilidad de planificar correctamente el trabajo de la resistencia tanto general como específica en los deportes colectivos.
Los datos obtenidos para cada zona de intensidad nos ayudan a aplicar, durante el entrenamiento de base, el trabajo de la resistencia general 3 veces en cada microciclo de entrenamiento, donde la intensidad se mueve entre las zonas 1 y 2. En el entrenamiento específico, de 1 a 2 veces en las zonas 2 y 3 y en la etapa competitiva, 1 vez en las zonas donde sea necesario.
Conociendo las zonas de intensidad, se puede determinar todo tipo de trabajo a desarrollar en las diferentes cualidades físicas desde en punto de vista individual en función de la actividad colectiva para el logro de elevados resultados.
Al dar un adecuado tratamiento de la resistencia también estaremos contribuyendo a la preparación multilateral, creando en el organismo de esta forma condiciones de adaptabilidad positiva frente a la actividad que va a desarrollar de forma específica.
Bibliografía
Averhoff, R y M. León. Bioquímica de los ejercicios físicos. Editorial Pueblo y Educación. C. Habana.1981.
Cañizarez Rodríguez, Pedro. Apuntes generales del control del entrenamiento en el sector escolar y juvenil. Conferencias. S. Spiritus, 1998. 12pp.
Fernández, José R. Consideraciones generales de bioquímica la bioquímica deportiva. Conferencias. Villa Clara, 1989. 87pp.
Pérez Sarría, E. La recuperación en el deporte. XI Congreso Panamericano de Medicina Deportiva. C. Habana, 1985.
Programa de preparación del alto rendimiento. Eventos de fondo. Comisión Nacional de Atletismo. C. Habana, 1999. 7pp.
Rodríguez, R y M. García. El control bioquímico en el deporte. Conferencia mimeografiada para Postgrado “Características bioquímicas en las actividades deportivas”. s.l. s.f. p-75.
revista
digital · Año 8 · N° 55 | Buenos Aires, Diciembre 2002 |