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Actuación ofensiva ante situación
de fuera de juego en el fútbol

   
*Profesor de Fútbol de la Facultad de Ciencias del Deporte.
Universidad de Extremadura. Entrenador de Fútbol. Nivel II.
**Licenciado en Ciencias de la Actividad Física y Deporte.
Entrenador de Fútbol. Nivel II.
***Licenciado en Ciencias de la Actividad Física y Deporte.
Entrenador de Fútbol. Nivel II.
****Licenciado en Ciencias de la Actividad Física y Deporte
Entrenador Nacional de Atletismo.

 
 
José Pino Ortega*
Diego Muñoz Marín**
Francisco Selva Medrano***
Pedro Ángel Ávila Fernández****

jpino@unex.es
(España)
 

 

 

http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 8 - N° 49 - Junio de 2002

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1. Introducción

    Actualmente los equipos de fútbol no utilizan el fuera de juego de forma sistemática como parte de su sistema defensivo si bien es cierto que es un recurso táctico de fácil aplicación en ciertas fases del juego. Sobre él los jugadores adquieren ciertos conocimientos básicos a lo largo de su carrera futbolística pero no llegarán a conocer su verdadera finalidad sino se entrena como cualquier recurso táctico.

    En su esencia y según la regla XI el fuera de juego sería utilizado para eliminar la ventaja espacial de un equipo de cara a la portería contraria por lo cual puede ser considerado como un recurso táctico defensivo. Pero no sólo pueden mejorarse aspectos defensivos entrenando situaciones de fuera de juego, sino que también los entrenadores deberían entrenar la parte ofensiva que lleva implícita este concepto táctico, es decir, no sólo los jugadores deben saber utilizar el fuera de juego como recurso táctico defensivo sino que también deben tener recursos tácticos ofensivos para contrarrestar situaciones de fuera de juego por la defensa contraria.

    Por ello desde la perspectiva ofensiva se deben considerar los siguientes aspectos que enumeramos a continuación y clarificamos en la figura 1:

  • Evitar la presión al poseedor del balón, jugador que realiza en pase.

  • Evitar la defensa individual sobre el receptor

  • Contrarrestar la defensa individual movimiento de salida

  • Contrarrestar la situación adelantada del portero

  • Evitar la presión grupal: presión al pasador del balón

  • Evitar la presión grupal sobre los posibles receptores.

  • Contrarrestar el movimiento de salida de la línea defensiva.

  • Contrarrestar el movimiento de retroceso.

Figura 1.

    Como observamos en el figura 1, los diferentes apartados no son independientes unos de otros sino que en función de las situaciones que se den en el desarrollo del partido deberemos tener en cuenta unas u otras.


2. Evitar la presión al pasador

    Si se quiere contrarrestar el fuera de juego, uno de los principales factores de eficacia es evitar la presión al pasador. En muchas ocasiones ocurre que el movimiento de desmarque de un jugador se realiza perfectamente, pero al jugador en posesión del balón esta presionado, y por tanto no puede realizar el pase correspondiente.

    Para evitar la presión al pasador del balón se deben realizar los siguientes conceptos de juego (figura 2):

  1. Circulación del balón.

  2. Circulación de jugadores.

Figura 2.

    El objetivo fundamental del poseedor (jugador respuesta) debe ser asegurar la conservación del balón al tiempo debe intentar obtener una situación favorable, mientras que el objetivo básico de los compañeros de poseedor (jugadores estímulo) del balón es contribuir a la obtención de una situación favorable que facilite la toma de decisión del poseedor del balón. A partir de estos objetivos generales, se producen distintas alternativas para cada protagonista, que desembocan finalmente en acciones técnico/tácticas que constituyen los elementos principales de desarrollo de los medios tácticos de grupo.

    La circulación del balón implica la realización de la búsqueda constante de líneas de pases, entre el poseedor del balón y sus compañeros. A mayor número de líneas de pase mayores son las posibilidades de pase del poseedor del balón.

    Para evitar la presión del adversario, se deben ofrecer al poseedor del balón línea de pase por delante así como por detrás.


3. Evitar la defensa individual sobre el receptor

    En este apartado analizaremos la actuación del jugador que está en fase de ataque en función de las posibilidades de intervención del defensor:

3.1. El posible receptor no está en posesión del balón, estando éste en posesión de un compañero

Figura 3. Situación del atacante ante oponente directo.

    El poseedor del balón ha realizado el pase hacia su compañero.

Figura 4. Actuación defensiva y ofensiva ante oponente directo tras pase del poseedor del balón.

3.3. El pase realizado por el poseedor del balón ha llegado a su compañero

Figura 5. Actuación defensiva y ofensiva ante oponente directo tras recepción del pase.


4. Contrarrestar la defensa individual movimiento de salida

    El desplazamiento individual es de vital importancia cuando en la realización del fuera de juego se utiliza una defensa en semicírculo o diagonal (figura 6), dado que en ambos casos únicamente hay un jugador en la última posición. Por ello éste debe estar muy atento a la situación de juego.

Figura 6. Tipos de defensas.

    En la defensa en diagonal, se dejan dos espacios libres grandes, uno detrás la línea y el otro en la zona lateral del último defensor.

    En la defensa en semicírculo se dejan dos espacios, uno a cada lado del defensa que ocupa la zona central.


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