Momentos estelares de los 400 metros en la historia de los Juegos Olímpicos |
|||
Profesor de Educación Física Entrenador Nacional de Atletismo (Argentina) |
Jorge de Hegedüs jhegedus@sinectis.com.ar |
|
|
http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 7 - N° 42 - Noviembre de 2001 |
1 / 1
Introducción
La distancia de los 400m se ha constituido últimamente una disciplina atlética que ha llamado mucho la atención y hasta atractiva. Ello se ha debido a las actuaciones espectaculares del atleta norteamericano Michael Johnson, el cual este año se ha despedido definitivamente de la práctica atlética competitiva. Es un hecho que los últimos 10 años la distancia de los 400 metros ha sido dominada prácticamente por este atleta, el cual ha sido campeón olímpico en esta distancia en 1996 (43.49 s, récord olímpico) y también en Sydney, 2000, como también Campeón Mundial en Stuttgart (1993) Göteborg (1995), Atenas (1997) y finalmente en Sevilla (1999) en donde batió finalmente el récord mundial para esta distancia, el cual estaba en poder de su compatriota "Butch" Reynolds desde el año 1987 con 43.29s, reduciéndolo a 43.18s.
La distancia de los 400 metros es una disciplina atlética de origen inglés, pero que rápidamente fue "adoptada" por los norteamericanos. Estos ya tuvieron excelentes corredores en dicha distancia mediante Lawrence E. Myers el cual el 20 de setiembre de 1879 corre las 440 yardas (404 m) en nada menos que 49.1/5 (!) y al año siguiente reduce esta marca a 48.3/4. Más adelante, en 1889, Charles Lennox Tindall corre la distancia en 48. 1/5, Los corredores norteamericanos han hecho grandes demostraciones sobre esta disciplina deportiva hacia fines del siglo XIX, e incluso el primer campeón olímpico (1896, Atenas) fue Thomas Burke el cual se impuso con 54 segundos. Hay que destacar que este registro ha sido sensiblemente inferior a los anteriores, pero una razón importante para ello ha sido la pista de Atenas, la cual, si bien es bella desde el punto de vista arquitectónico (tribunas de mármol, decoradas por bellas estatuas) desde el punto de vista técnico hacía sumamente difícil correr en las curvas debido a que eran sumamente cerradas. Pero, ¿cuáles han sido los momentos estelares para esta disciplina atlética en la historia de los Juegos Olímpicos?. Lo fueron en instancias en las cuales se han superado distintas "barreras": los 49s, 48s, 47s, 46s, 45s y finalmente los 44 segundos. Haremos por lo tanto un retroceso en el tiempo hacia estos distintos momentos.
49 segundos: Estocolmo, 1912En la capital de Suecia se corre por primera vez sobre pista de dos curvas y con andariveles (= calles). Sin embargo esto fue adoptado recién en la carrera final dado que las series se corrieron sin las mismas, originando ello distintos incidentes y con descalificaciones. Por dicha causa los jueces decidieron incluir los andariveles para la final. La misma fue ganada por el norteamericano Charles Reidpath en 48.2s. nuevo récord olímpico. De todas maneras hay que destacar que los tres primeros clasificados corrieron por debajo de los 49 s. El corredor alemán Hanns Braun obtiene la medalla de plata con 48.3 y otro norteamericano, Edward Lindberg logra la de bronce con 48.4s. El triunfo de Charles Reidpath no se constituyó récord mundial dado que dicho registro seguía estando en poder de Maxwell Long desde el año 1900 con el sobresaliente registro de 47.8 (440 yardas).
Ajustada llegada en los 400 m en los J. O. de Estocolmo, 1912. Charles Reidpath de los Estados Unidos se impone con 48.2 (R.O.). Segundo Hanns Braun de Alemania con 48.3 y tercero Edward Lindberg también de los Estados Unidos con 48.4. Por primera vez en la historia de los J. Olímpicos 3 corredores superan los 49 s. Foto: Revista Leichtathletik.
48 segundos: París, 1924Aquí se trata del corredor escocés Eric Lidell ("Carrozas de Fuego"), el cual representando a Inglaterra obtiene la medalla de oro en 47.6 s. récord olímpico. Lidell era nacido en 1902 en China, hijo de misioneros religiosos originales de Escocia. En un principio fue jugador de rugby, pero debido a las excelentes condiciones para correr es que pasó a dedicarse a las disciplinas de la velocidad: 100, 200 y 400 metros. Es por dicho motivo que gana las selecciones para representar a su país en los 400 metros. Lidell obtiene la medalla de bronce en los 200 m. con 21.9 s. el día 9 de julio, y luego, el día 11, entra 2do. en su semifinal de 400m con 48.2s, detrás de Horatio Fitch, el cual hace 47.8. La performance del "escocés volador" fue considerada como de sobresaliente dado que nunca había bajado los 49s. en dicha distancia. Sin embargo en la final, disputada el mismo día 11 por la tarde, (la semi final había sido en horas de la mañana) este atleta demostró que tenía todavía mucho más para rendir al obtener el primer puesto con 47.6s. y corriendo por el andarivel más externo. Esta vez Horatio Fitch hace 48.4, mientras que otro inglés, Guy Butler, obtiene la medalla de bronce con 48.6. Eric Lidell corrió con gran violencia los primero 200 m. registrando un parcial de 22.2 s. para el mismo. Es indudable que aprovechó su gran velocidad dado que era un corredor que tenía registros por debajo de los 11 segundos en los 100 metros. Eric Lidell falleció relativamente joven en un campo de concentración japonés a principios de 1945 padeciendo de cáncer cerebral.
Eric Lidell de Inglaterra se impone en la final de los 400 metros disputados en París (1924). Registró 47.6 s. sobre el 2do. que fue Horatio Fitch, 48.4. El registro de Lidell fue nuevo Récord Olímpico y esta carrera constituyó la primer ocasión en la cual se corrió por debajo de los 48 s. en los Juegos Olímpicos. Foto: Le Fabuleuse Histoire de L´Atletisme de Robert Parienté.
47 segundos: Los Ángeles, 1932Para este evento el corredor favorito era Benjamin Eastman, el cual ya era el récord mundial con 46.4s. (440 yardas). Ello se comprende desde el momento en que había superado su propio récord mundial en nada menos que un segundo. Era considerado como el "rey" de los 400 y 800 metros. Eastman repite varias veces registros por debajo de los 47 segundos y se perfilaba como el seguro vencedor tanto en los 400 como también en lo 800 metros en los próximos Juegos Olímpicos a disputarse en Los Ángeles. Sin embargo poco tiempo antes de los juegos, en los Juegos Intercolegiales surge una figura aparentemente inesperada, un corredor talentoso llamado William Carr. Corriendo "desde atrás" este último vence a Eastman: 47 a 47.2 s. Esto podría haber sido catalogado como un triunfo casual, pero las cosas van más lejos cuando dos semanas más tarde Eastman se enfrenta nuevamente a Carr en su propio territorio, Palo Alto, California. Este último no se asustó al enfrentarse a su rival Eastman en su propia casa dado que corriendo nuevamente desde atrás lo vuelve a derrotar: 46.9 a 47.1 segundos. El asunto se estaba complicando para el corredor californiano. Pero tenía todavía una carta muy importante para jugar dado que también aspiraba a tener el título olímpico en los 800 metros puesto que era el récord mundial para la distancia con 1:50 min. Sin embargo a esta altura surgió otro problema debido a la rivalidad que existía entre su entrenador Dink Templeton y el de Carr, Lawson Robertson siendo este último nombrado como entrenador nacional para los Juegos Olímpicos. En cierta forma Templeton quería "derrotar" a Robertson. Por dicho motivo le pide a su dirigido Eastman que se concentre específicamente para los 400 metros y que no corra los 800 m. en los próximo Juegos Olímpicos. Eastman acepta la propuesta de su maestro y se concentró en la distancia más corta.
En su semifinal Carr hace 47.2 mientras que Eastman hace lo propio imponiéndose con 47.6. La final prometía ser un duelo sensacional entre estos dos corredores. Aunque representaban a un mismo país eran verdaderamente "rivales". En la final Eastman toma una ligera ventaja en casi toda la carrera, pero faltando unos 80 metros Carr lo empieza "apretar", y a poca distancia de la meta lo "quiebra" imponiéndose con un nuevo récord mundial: 46.2. Pese a la derrota Eastman hizo una espléndida carrera dado que iguala su propio primado mundial de 46.4 s. Este último, medalla de plata, reconoció con verdadero aprecio la victoria de su rival Carr y manifestó su reconocimiento ante la victoria de este último. Ambos corredores registraron los siguientes parciales:
100m
200m
300m
400
Suma
William Carr
10.9
22.1
33.8
46.2
22.1 + 24.0
Benjamin Eastman
10.8
21.7
33.7
46.4
21.7 + 24.7
Desgraciadamente al poco tiempo de su triunfo olímpico Carr tuvo un accidente automovilístico que le impidió seguir practicando el atletismo. A esta altura la pregunta pendiente es: ¿qué fue de los 800 metros a los cuales Eastman renunció? En dicha distancia se impuso el corredor inglés Thomas Hampson con 1:49.7, estableciendo con ello un nuevo récord mundial, siendo este británico el primero en "quebrar" la barrera de 1:50 min nada menos que en una final olímpica.
Reñida llegada de los 400m en los J. Olímpicos de Los Ángeles. Se impone el talentoso William Carr de los Estados Unidos con 46.2 (RM y RO) sobre su compatriota Benjamín Eastman, el cual registra 46.4 s. Foto: Le Fabuleuse Histoire de L´Atletisme de Robert Parienté.
46 segundos: Helsinki 1952Después del sensacional triunfo de W. Carr en Los Ángeles, 1932, fueron varios los atletas que mejoraron su registro con el paso de los años. En 1936, en el año olímpico, Archie Williams supera el registro de Carr a 46.1 s. Luego vienen una serie de grandes corredores como el alemán Rudolf Harbig que llega justo a la barrera de los 46 segundos (1939), siendo luego igualada esta marca por el norteamericano Grover Klemmer en una memorable carrera corrida sin andariveles y en la cual 6 corredores superan el límite de los 47 segundos (1941). Posteriormente irrumpe ya Jamaica con Herb Mc Kenley el cual es el primer corredor en correr por debajo de los 46 segundos: 45.9 (1948). Dos años más tarde su compatriota George Rhoden supera el registro anterior llevándolo a 45.8. Todo esto constituía el "aperitivo" de lo que sería Helsinki, 1952. En la carrera final de los 400 metros serían nada menos que dos los corredores que superarían la marca de los 46 segundos para la vuelta de pista. Obviamente se trataba de los dos jamaiquinos anteriormente nombrados: 1ro. George Rhoden y 2do. Herb Mc Kenley, empatando ambos el registro de 45.9 nuevo récord olímpico. La diferencia entre ambos fue mínima. Hay que destacar que otro jamaiquino, Malvin Wint, también representó a su nación en esta final ocupando el 5to. puesto con 47 segundos. Esto ya presagiaba la posta de relevos de 4 x 400 metros que tendría Jamaica en su momento. Esto se cumplió cabalmente cuando en dicha final los isleños ganaron la medalla de oro sobre los Estados Unidos con el registro mundial de 3: 03.9.
Sensacional triunfo de los corredores jamaiquinos en los J. Olímpicos de Helsinki. Se impuso George Rhoden con 45.9 por sobre su compatriota Herbert McKenley el cual registró el mismo guarismo.(ambos RO). 3ro. fue Ollie Matson de los Estados Unidos con 46.8 (987) 4to. el juvenil alemán K. F. Haas, con 47 s. 5to. otro jamaiquino, Arthur Wint con 47.0 s. y 6to. el campeón olímpico de los 800 m. Malvin Whitfield, con 47.1. Foto: Revista Leichtathletik.
45 segundos: Roma, 1960En la final de los 400 metros disputada en la capital italiana ocurrió algo muy parecido a lo sucedido 4 años atrás, aunque esta vez Jamaica no estuvo representada. En esta carrera nuevamente son dos los corredores que superan la barrera, pero ahora es la de los 45 segundos y se produjo casi un empate, al igual que en Helsinki: 1ro. Otis Davis de los Estados Unidos, 2do. Karl Kaufmann representando Alemania. Ambos atletas registraron el mismo guarismo de 44.9 segundos (44.91 y 44.93 según el registro electrónico). Pero como en ese entonces se aceptaban todavía los registros manuales, ambos recibieron el crédito de ser récords mundiales.
Impresionante llegada entre Otis Davis de los Estados Unidos y el germano Karl Kaufmann. Ambos registraron 44.9 s. Este guarismo se constituyó un nuevo Récord Mundial. Foto: Revista Leichtathletik.
44 segundos: México, 1968Los Juegos Olímpicos disputados en la Capital Mexicana pueden catalogarse desde el punto de vista atlético como los juegos de "los récords". Se superaron varios registros sea en los eventos de velocidad como también en los saltos atléticos. Los 400 metros no fueron la excepción a ello. De todas maneras lo sucedido en la ciudad azteca ya venía precedido por un excelente "aperitivo" desde las pruebas selectivas en los Estados Unidos. El 14 de Setiembre del año olímpico Lee Evans corre la final de los 400 metros en 44 segundos clavados, mientras que su compañero Lawrence "Larry" James entra segundo con 44.1 s. Sin embargo aquí se produce un hecho muy curioso dado que el registro de Evans no se aceptó como récord mundial pero sí el de James. Esto se debió a que el ganador de la carrera utilizó unos "spikes" muy especiales dado que no tenían el número de clavos reglamentarios (hasta 8) sino a manera de "cepillo" poseían gran cantidad de pequeños clavitos. Por este motivo Larry James pasó a ser el nuevo recordista mundial con 44.1 segundos. Después de haberse sorteado las distintas carreras preliminares, los favoritos pasaron a la final la cual se disputó el día 18 de Octubre a las 15.50 h. Obviamente la carrera se disputó a una altitud de 2248 metros por sobre el nivel del mar. Esta vez se impuso Lee Evans pero con zapatillas reglamentarias y con el nuevo récord mundial de 43.86 s., mientras que su compañero de equipo "Larry" James hace lo propio dado que entra muy cerca con 43.97 y superando de esta manera su propia marca obtenida en el evento selectivo. El otro norteamericano, Ronald Freeman obtiene la medalla de bronce. El senegalés Amadou Gakou dio la gran sorpresa al lograr el 4to. puesto con 45.01, y ello se debió que hasta el momento tenía 46.7 segundos como mejor registro personal. La lucha entre los dos primeros fue colosal y recién se definió sobre los últimos 5 metros. Evans luego comentó que "Larry corrió 395 metros....y yo por mi parte 402... ahí estuvo la diferencia". Con el paso de los años Evans sirvió como entrenador en distintos países africanos. Desde el año 1968 no han sido muchos los atletas que superaron la barrera de los 400 segundos. Después de Evans y James, Butch Reynolds hizo lo propio con un excelente registro de 43.29 en 1987 en la ciudad de Zürich, Suiza. Luego, en 1988 en ocasión de los Juegos Olímpicos de Seúl, Steve Lewis con 19 años de edad gana la final al propio Reynolds con 43.87, récord mundial "junior". Reynolds entra segundo con 43.93 segundo. También tenemos a Danny Everett con 43.81 s. registro efectuado el 26 de Junio de 1992 en la ciudad de New Orleans. Luego aparece Quincy Watts con 43.50s. en la final de los 400 metros en la ciudad de Barcelona en ocasión de los Juegos Olímpicos. Con ello superaba el récord olímpico que estaba todavía en posesión de Lee Evans desde la recordada carrera en México, 1968. El récord olímpico de Watts fue superado por Michael Johnson en la ciudad de Atlanta en ocasión de la final de los Juegos Olímpicos ahí disputados y con el registro de 43.49 s. Finalmente Johnson, el día 26 de Agosto de 1999, a las 20:45h, corriendo por el andarivel Nro.5 establece en la ciudad de Sevilla el registro de 43.18 segundos, lo que constituye el actual récord del mundo. Resumiendo podemos destacar que hasta el momento 7 atletas han superado la barrera de los 44 segundos, siendo todos "afronorteamericanos". Estamos conscientes que poner objetivos o barreras numéricas originadas en forma artificial desde lapsos creados por la inteligencia humana, constituye un hecho sumamente arbitrario. ¿Por qué 45, 44 o 43 segundos y no cifras intermedias?. De todas maneras estos son los hechos y los registros de Michael Johnson constituyen verdaderos retos para los futuros corredores de 400 metros.
Lee Evans y Lawrence “Larry” James instantes antes de cruzar la meta en la recordada carrera final de los 400 metros en México, 1968. Evans obtiene la medalla de oro con 43.86 (RM) mientras que James la de plata con 43.97. Ha sido la primera vez que se corrió por debajo de los 44 segundos. Foto: Le Fabuleuse Histoire de L´Atletisme de Robert Parienté.
revista
digital · Año 7 · N° 42 | Buenos Aires, Noviembre de 2001 |