REFLEXIONES EN TORNO A LOS
CONTENIDOS BASICOS COMUNES DE EDUCACION FISICA
Adriana Elena (Arg.)

Esta carta fue publicada en el boletín de la Asociación Docentes de Educación Física (A.D.E.F.), Diciembre de 1996. Se la transcribe literalmente a continuación. Adriana Elena es Profesora de Educación Física y trabaja en el ámbito de las escuelas dependientes del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
A la Comisión Directiva de la ADEF

De mi mayor consideración:
Me dirijo a Uds., como asociada del gremio, para hacerles llegar algunas breves reflexiones sobre "Los CBC en la escuela", documento enviado por el MEC (Ministerio de Educación) a todos los docentes, y las preocupaciones que me surgen de su lectura:

a) Sobre la forma de entrega (o las incoherencias del discurso):
Es conocido que, en función de lo dispuesto por la Ley Federal de Educación, el MEC elaboró, y luego el Consejo Federal de Educación aprobó, los llamados CBC (contenidos básicos comunes).

La idea que sustentó a este documento fue la de legislar sobre los contenidos que debían enseñarse en todo el país, por lo que se consideró a éstos como un insumo para la elaboración de los Diseños Curriculares de cada una de las jurisdicciones, y no como un material para ser utilizado directamente en las escuelas. En los capítulos "Qué son los CBC" y "De los CBC al aula y del aula a los CBC" de estos mismos documentos, se presenta una clara fundamentación de estas ideas.

En la Capital Federal, desde la Dirección de Currículum, comenzaron a elaborarse documentos de trabajo para una actualización que incorporara los CBC, que llegaron desde fines de 1995 a las escuelas. A mediados de este año, sin explicitación de ningún tipo, cada uno de los docentes del sistema educativo de la Capital Federal, recibió también un ejemplar de "Los CBC en la escuela", directamente enviados por el MEC.

Desde la EF me atrevo a sostener que estos documentos confunden, fundamentalmente porque llegan "fuera de sistema" a un sistema que recibió documentos curriculares, los discutió con autores, capacitadores y supervisores, y hace 10 años que trabaja por la construcción conjunta de alternativas didácticas que realmente produzcan una transformación disciplinar.

b) Sobre la Educación Física en los CBC (o el empobrecimiento de la perspectiva disciplinar):
Una lectura atenta de los CBC me permite reflexionar sobre:

Me parece que estos documentos deben ayudar al docente a interrogar su práctica desde conceptos fundados, y no promover "creencias" en la sabiduría de los autores.

c) Sobre los CBC de Educación Física (¿ o un ataque encubierto al futuro de la EF escolar?):
En ningún lugar de todo el documento se hace aclaración alguna sobre la especialización que deben tener los docentes para enseñar las disciplinas incluídas en los distintos capítulos.

Por lo tanto llama poderosamente la atención que llegue, por lo menos a la jurisdicción Capital Federal -pero creo que a otras muchas- un capítulo de EF de 1º ciclo con destinatario ambiguo, pero en el que se puede entrever que es el maestro de grado y no el profesor de Educación Física.

El caso del 2º ciclo es más claro: está dirigido a los maestros de grado:
"De qué manera se puede colaborar con los docentes especiales de EF...?"; "¿Cómo cooperar con la EF....?"; "Con la ayuda del docente de EF de su escuela podrá fácilmente observar las conductas corporales y motrices de sus alumnos en distintas situaciones escolares..." (2º ciclo, pág. 153) Ante esta observación creo indispensable aclarar:

-La sistematización de ideas didácticas que estamos haciendo los profesores de EF de la Capital Federal, nos conduce cada vez más a la claridad de que cuanto más se sabe de la disciplina, mejor se enseña y, por lo tanto, los niños aprenden más y mejor.

Quizás no sea la experiencia, el estado de reflexión o los intereses de los sistemas educativos de otros países que se puedan estar tomando como modelos.

Pero sí sabemos que tenemos una historia, una tradición y una construcción conjunta y comprometida de los docentes de EF de la jurisdicción, que no puede retroceder con la importación de ningún modelo descontextualizado.

Y digo ésto, porque inevitablemante relaciono estas ambigüedades de los CBC con las declaraciones del coordinador de EF en las Jornadas organizadas por el MEC en las que se discutieron los borradores para los CBC de la formación docente (realizada en febrero de 1995 en el Colegio Nacional Buenos Aires y a la que asistí como representante de la capacitación de EF).

En dicha opotunidad manifestó su idea de que no es necesario que haya profesores especializados para dar clase de EF en el 1º ciclo, como sucede en otros países. Y también que adhería al modelo de un profesor por escuela, que tiene el rol de asesorar a los maestros que son los que efectivamente dan las clases. Considero fundamental recuperar para la escuela la importancia de los saberes corporales de los niños y la conciencia de los maestros de tener en cuenta que los sujetos de la educación también son cuerpo. Pero esto se consigue justamente elevando la calidad de la enseñanza de la educación física en la escuela, que tiene reconocida "especialidad" y, entonces también desde encuadres conceptuales con los que el maestro pueda operar, idea que no se parece en nada a la superficialidad de algunas sugerencias de "Los CBC en la escuela": "Proponer a sus alumnas y alumnos actividades corporales preparatorias. Por ejemplo: masajes o sacudimientos de manos antes de escribir, estiramientos y búsqueda de posiciones correctas y cómodas para atender una exposición, desperezamientos libres al comenzar una clase, etc." (1º ciclo, pág. 157)

En definitiva, acerco a Uds estas reflexiones, porque creo que se está desmereciendo la importancia de la EF en la escuela lo que, desde el aspecto gremial es inaceptable y puede arriesgar la inserción de los profesores de EF en las escuelas, sobreexigir la tarea de los maestros de grado, y hacer peligrar el adecuado logro de las competencias corporales, lúdicas y motrices de los niños, cuya no adquisición en estos años de escolaridad es una pérdida casi irreparable.

No olvidemos que, a diferencia de los otros países que se pueden estar tomando como modelo, en la Argentina para muchos niños la escuela pública es el único ámbito para una educación física adecuada y sistemáticamente impartida. Y que arriesgarla sería una forma más de profundizar la segmentación educativa.

Un saludo muy especial y quedo a disposición de Uds.


Lecturas: Educación Física y Deportes. Año 2, Nº 4. Buenos Aires. Abril 1997
http://www.efdeportes.com