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El cuerpo protagonista y el cuerpo espectador
en el marco de la actividad física institucionalizada
Elías Rolando Schnaidler

http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 7 - N° 37 - Junio de 2001

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    La práctica de la actividad física al interior de las escuelas primero, y luego en los ámbitos comunitarios (nuevos centros de conquista y arrebato de la cultura popular), tenían la misión de disciplinar los nuevos jóvenes argentinos. Es oportuno volver a citar las reflexiones de la Lic. A. Aisenstein en este sentido:

    "La primera hipótesis propone que el modelo didáctico de la Educación Física Escolar, pone su acento en la transmisión de valores y en la disciplina. Esto es si se acepta como función de la escuela transmitir contenidos sustantivos a través de todas sus áreas y, a la vez integrar las nuevas generaciones a la cultura de la sociedad, la idea anterior sugiere que, a través del modelo didáctico de la Educación Física, la escuela cumple solo con la segunda de dichas funciones. Se juzga además que esos elementos - transmisión de valores y disciplina - forman parte de la función y el contenido de la Educación Física desde principios de siglo".(Aisenstein, 1995)

    Pero lo que caracterizaba a la Educación Física escolar en sus inicios, era la práctica de marchas, formaciones, ejercicios gimnásticos globales, todo ejecutado en función de un modelo (el profesor) y grupos homogéneos de acción (los alumnos).

    La actividad deportiva no era una práctica cotidiana al interior de la escuela. Si bien su origen se remitía a los grupos acomodados de la educación inglesa de finales del siglo pasado, en la Argentina pasa de ser una práctica de grupos acomodados ingleses y argentinos, a formar parte rápidamente de los baldíos y demás escenarios populares de criollos e inmigrantes de otras nacionalidades; basta con recorrer las formaciones de jugadores de fútbol en los primeros años del siglo XX, para observar como las clases populares se fueron apropiando de su práctica.

    Entonces, si para el disciplinamiento fue necesaria una estrategia de la mano de la promoción de las actividades físicas para el control y la "socialización" de las masas, el deporte no fue siempre la herramienta. Si volvemos a considerar la dinámica de la hegemonía para sostener las condiciones de dominación de una clase sobre otra, encontramos la necesaria rapidez en la resignificación de las conquistas producidas por las clases dominadas (Medias y bajas), para su apropiación por parte de la burguesía, provocando la lejanía de sus antiguos dueños. "En pocas palabras, el deporte que nació de juegos realmente populares, es decir, producidos por el pueblo, regresa al pueblo a la manera de la música folklórica, en forma de espectáculo producido para el pueblo" (Bourdieu, 1990)..

    Es posible ver así a la promoción del deporte en nuestras Escuelas como una forma de reactualizar los modos de disciplinamiento y control en el actual contexto, que requiere otras modalidades de participación en la vida social capitalista.


La reactualización de los modos de disciplinamiento y control

    Contó Nicolás Preziosa: "Al lado del café de los Angelitos, en Rincón 32, estaba el club policial. Allí iba Gardel, hacía gimnasia, un poco de soga y jugaba a la paleta. A paleta o a mano limpia. Un día le pregunté porqué lo hacía y me respondió: para quemar los roschepu, pibe".

    Guiburg sostiene que: "le gustaba jugar a la pelota vasca. Lo hacía en la Young men pero también en un frontón que había en Anchorena y Rivadavia, donde nos daban unas alpargatas que tenían sudores del tiempo de Garay" (Rev. La maga, N° 11, pág. 28 y 29).

    Osvaldo Soriano contó que: "Cortázar era de Banfield, pero no le gustaba el Fútbol: le gustaba el Boxeo. No le gustaban los deportes colectivos. Y no entendía de Fútbol. Recuerdo que un día me habló mal del Fútbol. Yo le había comentado mi pena porque San Lorenzo se había ido al descenso. Le dije que estaba hecho mierda, que ese día lloré como si se hubiera muerto mi vieja. No me entendió".(Osvaldo Soriano, charla con E. Rafael, Julio de 1991).

    "…Cada uno elegía un jugador por turno, se ponía la pelota en el medio y uno decía: - Aureri, a lo que le contestaban: - Diez. Recién después, movíamos la pelota. Esto quería decir: - Are you ready? Y Yes?. Los ingleses trajeron esas ceremonias junto con el Fútbol pero nosotros, a pesar de ser anglos - éramos anglobrutos -, lo habíamos castellanizado porque no sabíamos que quería decir." (R. Hanglin, Rev. La Maga, N° 162, pág. 5).

    Relatos de diferentes personalidades referidos a épocas diferentes y contextos diferentes. Relatos cargados de sentido popular y lúdico en relación con la práctica deportiva. Integrantes de una sociedad que contaba con el espacio, los medios, y el "permiso" para ejercer su poder sobre actividades populares. No es la intención precisa de esta presentación, la descalificación de la actual relación popular con el Deporte, pero la simple observación de los procesos actuales hacen visibles las diferencias.

    Hoy es posible identificar un juego de interrelaciones entre la actividad deportiva comunitaria y la escolar, interrelación que originalmente recibía la justificación de otorgar coherencia a las diferentes didácticas y metodologías que era necesario aplicar para una eficaz formación motriz en los niños.

    Así entonces, ese docente de Educación Física, capacitado en los principios del Deporte "Formativo", podía obtener dos espacios claros de incumbencia laboral: La Escuela y El Club.

    Las consecuencias, fácilmente detectables son que:

  • Si los modos del juego se realizan en espacios diversos, con desniveles y aprovechando obstáculos, como posibilitadores de nuevos desafíos, las instituciones tanto públicas como privadas, instalan prolijos playones de usos múltiples.

  • Si la actividad infantil se caracteriza por la riqueza en heterogeneidades de integrantes y de materiales necesarios para fundar el juego, las instituciones, dividen por edades (y en algunos casos por sexo), e "intereses" y se convoca a jugar siempre con un solo elemento.

  • Si el juego recurre siempre a la ficción estableciendo una relación visionaria con la realidad, las instituciones reglamentan las formas de juego en una dirección concreta: la futura incorporación de las técnicas y las reglas del Deporte.

    La descripción de estas realidades se encuentran atravesadas (especialmente hoy, de la mano de la implementación de las políticas neocoloniales de dominación) por la deportivización de la cultura corporal del movimiento. Y esta es una cultura corporal cargada de ambigüedades, donde articulan la pasión por la práctica de los juegos y los deportes y la resistencia de las clases populares a la aceptación acrítica de los principios de la cultura dominante.

    "El deporte refuerza la hegemonía de la clase dominante, pues existen elementos que también indican un sentido de resistencia. Queiroz (1985) en un análisis sobre los desfiles de las Escolas Do Samba de Río de Janeiro, es preciso al preguntarse al final de su estudio: ¿Cual es el elemento dominante?. En este caso la autora opta por el argumento de la reproducción. Más parece no ser fácil establecer criterios para decidir cuando un elemento de la práctica cultural refuerza o resiste a la dominación.

    Sería mejor hablar de ambigüedades. (…) la cultura popular es capaz de ir del conformismo a la resistencia y capaz de ir de la resistencia al conformismo. Esta ambigüedad determina radicalmente una lógica y práctica que se desenvuelve sobre la dominación." (Bracht, V. 1997).

    La actividad escolar entonces, no es ajena a estos procesos. Aún más, cuando es legitimada al interior de la misma, la práctica de la actividad deportiva, la organización de encuentros competitivos, la selección de "talentos". El ejercicio de la cultura hegemónica nos habitúa en el sentido de ejercer las diferencias, para llevarlas a la práctica.

    El modelo de actividad deportiva que hoy resulta ser dominante al interior de la escuela es la del deporte espectáculo, y esta caracterización es totalmente funcional a los nuevos requerimientos del modelo neoliberal: La reactualización de los modos de control y disciplinamiento sobre el cuerpo, para la formación de consumidores del deporte, y para conseguir buenos consumidores, es necesario contar con buenos espectadores. Esta parece ser la función de la práctica de actividades físicas en la formación escolar. La disciplina no abandona sus antiguos principios de orden y disciplinamiento. La vigencia de los programas de estudio son un claro ejemplo, reordena su función histórica en relación a los nuevos mandatos de la cultura hegemónica.


Bibliografía utilizada.

  • AISENSTEIN A. 1996. La Educación Física en el nuevo contexto educativo. En busca del eslabón perdido.

  • ALTHUSER L. 1970 Ideología y aparatos ideológicos de Estado. Nueva Visión Buenos Aires.

  • BORON A. 1992 Estado, Capitalismo y Democracia en América Latina Imago Mundi Buenos Aires.

  • BOURDIEU P. 1991- ¿Cómo se puede ser deportista? Sociología y cultura- Grijalbo México

  • BRACHT V. 1997. Sociología crítica del deporte: Una introducción. UFES. Brasil.

  • CHOMSKY N. - DIETERICH H. 1996 La Sociedad global. Educación, mercado y democracia U.B.A. Buenos Aires.

  • DE CARVALHO M. 1991- A miseria da Educacao Física- Papirus- Brasil

  • DENIS D. 1980- El cuerpo enseñado Paidos- Barcelona

  • GINER S. 1984 Historia del pensamiento social. Ariel. Barcelona.

  • GIRALDES M. 1994 Didáctica de una cultura de lo corporal. Gráfica Guadalupe, Buenos Aires.

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  • LE BOULCH J. 1978. Hacia una ciencia del movimiento humano. Paidos. Buenos Aires.

  • LE BOULCH J. 1986 La educación psicomotriz en la escuela primaria. Paidos. Buenos Aires.

  • LE BOULCH J., PARLEBAS P. GOMEZ R. 1995. Los problemas principales de la Educación Física actual. Mesa redonda en: Congreso de Educación Física y Ciencia. U.N.L.P. Buenos Aires.

  • MENDES H.-MILSTEIN D. 1997 Informe final proyecto de investigación. Cuerpo y Orden escolar - Facultad de Ciencias de la Educación U.N.C. (inédito)

  • PAVARINI M. - PEGORARO. J. 1995- El control social en el fin de siglo Cuadernos de posgrado.-Universidad de Buenos Aires

  • PEDRAZ M. V. - BROZAS POLO M. P. 1996 La disposición regulada de los cuerpos. Propuesta de un debate sobre el status de los juegos tradicionales. Apunts N° 48 Barcelona, España.

  • PEDRAZ M. V. 1997 Poder y cuerpo. El (incontestable) mito de la relación entre ejercicio físico y salud Educación Física y Ciencia- Universidad Nacional de La Plata.

  • ROJAS SORIANO R. 1983 Métodos para la investigación social. Una proposición dialéctica. Folios Ediciones. México

  • SANCHEZ F. El cuerpo en el capitalismo Ficha de cátedra - U.N.C.

  • TAMARIT J. 1997. Escuela y representación social. Universidad Nacional de Luján. Pcia. De Buenos Aires.

  • TAMARIT J. 1997 Escuela crítica y formación docente. Miño y Dávila. Buenos Aires.


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