Análisis y modificación de la alimentación de los escolares Analysis and changes in primary school children’s diet
	Graduado en Educación Primaria Mención de Educación Física por la Universidad de Murcia (España)	Manuel Martínez Martínez manuel_martinezmartinez@hotmail.com
	Resumen           La presente experiencia educativa ha sido llevada a cabo en una clase correspondiente al 5º curso de Educación Primaria en la que se intenta modificar los hábitos alimenticios menos adecuados de los estudiantes por otros que contribuyan a un beneficio de su salud. La actuación consistió en el desarrollo de dos sesiones elaboradas tras conocer la forma en la que se alimentan los escolares de dicho grupo. En cada una de las sesiones, podemos diferenciar una breve parte de explicación teórica y una parte principal caracterizada por la práctica de juegos motores que asienten los contenidos previamente explicados y fomenten un estilo de vida activo. La actuación concluye con la entrega de un formulario que me permitió establecer el grado de consecución de los objetivos marcados, comprobando que en su mayoría habían sido logrados.           Palabras clave: Alimentación. Desayuno. Obesidad. Vida saludable. Actividad física.   Abstract           The present educational experience was carried out in a Primary Year 5º class in which the students’ non-desirable eating habits were tried to be changed to become healthier and beneficial for their wellbeing. The activity consisted of the development of two sessions done after knowing their diets and lifestyles. In sessions, a theoretical part and another part consisting in the realization of games can be distinguished. The activity ends with the delivery of a form to be filled in, allowing the assessment of the objectives. The majority of them were achieved.           Keywords: Diet. Breakfast. Obesity. Healthy lifestyle. Physical activity.   Recepción: 23/02/2016 - Aceptación: 27/03/2016
	EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 21, Nº 215, Abril de 2016. http://www.efdeportes.com/

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1.     Introducción

    Esta actuación, llevada a cabo en el 5º curso de Educación Primaria, está relacionada con el estudio de los hábitos alimenticios y sus repercusiones. El objetivo principal que persigue el presente trabajo es hacer que los alumnos conozcan cuáles son los hábitos alimenticios más adecuados para la edad en la que se encuentran, así como modificar, en la medida de lo posible, aquellos que sean incorrectos.

    Otros de los objetivos que se intentaron conseguir con la actuación realizada fueron:

• Conocer los distintos grupos de alimentos, sus funciones en el organismo y las cantidades recomendadas.

• Relacionar estos conocimientos con su estilo de alimentación y ser capaces de modificarlos en caso de que sea conveniente.

• Entender los principales riesgos de una mala alimentación y de un estilo de vida sedentario.

    El motivo de elección de este tema ha sido el creciente problema que supone la obesidad en nuestra sociedad. La obesidad es catalogada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como la epidemia del siglo XXI, por la importancia que ha adquirido en las últimas décadas en relación con la tasa de mortalidad, la calidad de vida de las personas o el gasto sanitario que ha supuesto. La OMS define esta enfermedad como una "acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud" (2015), siendo la causa principal el desequilibrio producido por las calorías consumidas y gastadas, debido fundamentalmente a un aumento en el consumo de alimentos ricos en grasa y azúcares, y la adopción de una vida sedentaria en detrimento de la actividad física. .

    El indicador empleado para determinar cuándo una persona sufre de sobrepeso u obesidad es el Índice de Masa Corporal (IMC), el cual se calcula dividiendo nuestro peso en kilogramos entre nuestra altura en metros al cuadrado (kg/m²). Cuando el resultado obtenido es mayor o igual a 25 determina sobrepeso, mientras que si es igual o superior a 30 determina obesidad, el procedimiento es igual para ambos sexos.

    En cuanto a la población infantil se refiere, y tomando los estudios realizados por Sánchez Cruz, Jiménez, Fernández y Sánchez (2012) con 1.018 niños españoles en edades comprendidas entre los 8 y los 17 años, se puede señalar que el 26% de los infantes sufría de sobrepeso, mientras que el 12,6% padecía de obesidad. Esto quiere decir que el porcentaje de sobrepeso y obesidad en los niños y adolescentes de nuestro país está en torno al 40%, en otras palabras, cuatro de cada diez presentarán un exceso de grasa que podría condicionar su salud.

    La obesidad infantil presenta una serie de riesgos y efectos adversos, como son los que nos muestran Aranceta, Rodrigo, Ribas y Majem (2005), incluyendo tanto factores físicos como psicológicos. Transcurridos los tres primeros años de edad, la obesidad infantil es asociada a largo plazo con un mayor riesgo de obesidad en la edad adulta y con un aumento en la morbilidad y la mortalidad, aumentando el riesgo cardiovascular y de padecer algunos tipos de cáncer, o la persistencia de los trastornos metabólicos asociados, así como una menor tolerancia a la glucosa o alteraciones en el perfil lipídico de la sangre, llegando a provocar en algunos casos hipertensión arterial.

    Al igual que la obesidad, el sedentarismo se ha asociado con un mayor riesgo de patologías metabólicas y cardio-vasculares, que aunque se manifiestan en la edad adulta, tienen su origen en la infancia. Por el contrario, la práctica de actividad física de forma continuada se ha relacionado con una mejora del estado de salud y bienestar (Pellicer, Alonso Roque, García Jiménez y Miñarro, 2012).

    En España, la encuesta nacional de salud realizada por el Ministerio de Sanidad (2006) señalaba que 43,6% de los niños y adolescentes no suelen hacer ningún tipo de ejercicio, presentando el género femenino un mayor grado de inactividad, con un 53,6%, que los niños, con un 34,6%.

    La Organización Mundial de la Salud recomienda una actividad física, para los niños y adolescentes de entre 5 y 17 años, orientada a la mejora de las funciones cardio-respiratorias, de la musculatura y de la salud ósea, además de reducir el riesgo de enfermedades metabólicas. Para ello recomienda la realización de al menos 60 minutos (si el tiempo destinado es superior, mayores serán los beneficios) diarios de ejercicio físico en actividades que presenten una intensidad de moderada a vigorosa. Además señala que esta actividad debe ser en su mayoría de carácter aeróbico (Pellicer, Alonso Roque, García Jiménez y Miñarro, 2012).

    Analizando el párrafo anterior, podemos darnos cuenta de que dos sesiones semanales de 55 minutos cada una, suponen un bagaje bastante pobre para los alumnos en cuanto al nivel de actividad física se refiere, por lo que es nuestra obligación como docentes especialistas en este área inducir al alumno a incluir en su estilo de vida la práctica de actividad física, constituyendo esto como uno de los objetivos principales de la Educación Física.

    Además, me gustaría indicar la importancia de realizar entre cuatro y cinco comidas diarias con un aporte calórico parecido en cada una de ellas, favoreciendo diversos aspectos del metabolismo, y disminuyendo las oportunidades de comer con ansia, tal y como se indica en el Estudio Perseo (2006).

    Otro apartado que merece especial consideración es el desayuno, ya que es de sobra conocido casos de alumnos que van a la escuela sin desayunar o habiendo ingerido apenas un vaso de leche, lo que derivará en una baja energía y en una dificultad de la alimentación, por lo que durante esta actuación me planteo el hacer ver a los alumnos la importancia del desayuno como uno de mis objetivos prioritarios. Para realizar un buen desayuno es preciso levantarse con tiempo, siendo conveniente que contenga alimentos del grupo de los lácteos, cereales, fruta o zumo, debiendo de cubrir al menos el 25% de las necesidades del día.

2.     Desarrollo

2.1.     Contexto y participantes

    Antes de analizar las características del grupo-clase y de sus componentes, me gustaría comentar el contexto en el que está enmarcado el centro en el que se ha llevado a cabo el presente proyecto.

    Este Colegio Público de Educación Primaria e Infantil se ubica en una pedanía de 22.700 habitantes aproximadamente en la ciudad de Murcia..Todas las clases están distribuidas entre los tres pabellones que conforman el centro (pabellones A, B y C). Además, el centro cuenta con dos pistas de fútbol sala, contando en una de ellas con cuatro canastas, una pérgola, una sala de psicomotricidad y un almacén en el que se guardan los distintos materiales de nuestra área de los que se disponen en el centro. El grupo de 5º donde hemos realizado la actuación es un grupo homogéneo desde el punto de vista socio-cultural. Está compuesto en su mayoría por niños españoles pertenecientes a familias con características socio-culturales y económicas similares (clase media-baja). Hay cuatro alumnos de familias inmigrantes (dos de origen sudamericano y dos de origen africano). Existe mucha diversidad en cuanto a los ritmos de aprendizaje, constituyéndose en este sentido como un grupo bastante heterogéneo. Centrándonos en el área que nos acontece, también se pueden identificar alumnos a nivel físico más capaces que otros, pero ninguno presenta ningún tipo de deficiencia motriz que le imposibilite participar en las actividades.

    Por último, mencionar que el grupo-clase presenta un grado elevado de cohesión. Colaboran favorablemente en las tareas grupales con actitud participativa y son solidarios a la hora de ayudar a un compañero en las tareas individuales o compartiendo el material del aula. La cooperación es óptima y los escasos e irrisorios conflictos que surgen, se solucionan fácilmente con ayuda de la maestra tutora.

2.2.     Metodología

    Para poder planificar mi actuación de manera eficiente, me propuse en primer lugar averiguar los conocimientos previos que poseen los alumnos sobre los contenidos a tratar. Para ello, elaboré una ficha que entregué a los discentes una semana antes del desarrollo de las actividades, en la que debían anotar el número de comidas que hacían y los alimentos que ingerían a lo largo de tres días. Gracias al conocimiento de las ideas previas de los alumnos fue más fácil organizar y plantear las actividades. Del mismo modo, me permitió establecer cuáles eran los contenidos en los que debería profundizar con mayor incisión.

    Durante la presentación de la pirámide de los alimentos en la primera sesión, repartí a los alumnos un ejemplo de dicha pirámide para que les sirviera de apoyo visual, con la intención de que, de esta manera, su comprensión y asimilación resultara más sencilla. En esta primera parte de la clase, la presentación y explicación de los contenidos fue realizada de forma expositiva, empleando imágenes como apoyo e intentando mantener la atención de los alumnos mediante la formulación de preguntas que le suscitasen dudas y que permitiesen relacionar lo explicado con sus experiencias.

    El desarrollo de las actividades de carácter motriz, que ocupaban el eje central de la sesión, eran realizadas en su mayoría de forma grupal, con un marcado componente cooperativo. Estos ejercicios fueron juegos modificados para que tuvieran relación con la pirámide de los alimentos.

    En la vuelta a la calma, mientras los alumnos realizaban estiramientos y relajaban su musculatura, hacía un resumen de lo acontecido en la sesión, incidiendo en los distintos grupos de alimentos, las raciones recomendadas y su función en el organismo, además se proporcionó a los alumnos la oportunidad de formular cuestiones.

    La segunda sesión pretendía mostrar a los alumnos los números de comidas que se deben realizar, así como por lo que es más aconsejable que esté compuesta cada una. Se realizó un especial hincapié en el desayuno, ya que es de sobra conocido que muchos de los escolares van a clase sin haber ingerido ningún tipo de alimento o solamente habiendo tomado un vaso de leche. Durante esta explicación se hizo referencia a los cuestionarios rellenados por los alumnos durante la semana anterior, sin nombrar a ningún alumno en particular. Como recurso material se utilizó la pirámide de los alimentos repartida en la clase anterior.

    La parte principal empleó la misma estructura que la sesión anterior. Fueron presentados los juegos de forma sucesiva, comprobando que su compresión había sido la adecuada por parte de los alumnos. Mi papel durante su ejecución fue la de juez arbitrario de los diferentes procesos que se desarrollaban.

    Nuevamente se aprovechó el periodo dedicado para la relajación y la reducción de pulsaciones de los alumnos tras la actividad física realizada, para hacer un resumen de los aspectos más importantes que habían sido trabajados en la sesión, resaltando la importancia del desayuno en nuestro rendimiento, tanto académico como deportivo.

    La actuación concluyó con una nueva ficha que incitaba a los alumnos hacia la reflexión de lo experimentado. Esta última ficha, permitió poder realizar una evaluación sobre la evolución de los alumnos, así como del propio proceso de enseñanza-aprendizaje.

2.3.     Actividades

Sesión 1: La pirámide de los alimentos

Objetivos

• Conocer los alimentos que componen la pirámide de los alimentos, así como sus raciones recomendadas.

• Fomentar el ejercicio físico en relación con un estilo de vida saludable.

• Respetar la diversidad y posibilidades de los demás.

Material: petos y conos.

Espacio: pista de fútbol sala y aula del centro.

Desarrollo: Al iniciar la sesión, y antes de salir a la pista donde se llevará a cabo la parte principal de la sesión, se realizará una explicación teórica de unos 15 minutos sobre la pirámide de los alimentos. Para facilitar su comprensión por parte del alumnado, se les facilitó una imagen a cada uno de dicha pirámide. Durante la explicación se incidió en el tipo de alimentos que incluye cada bloque, así como las raciones, diarias y semanales, recomendadas de cada uno de ellos. Durante la exposición se realizaban preguntas a los discentes con el objetivo de mantener activa su atención y de que pudieran relacionar los contenidos que se estaban presentando con sus experiencias personales.

Calentamiento: Una vez en la pista, se realizan ejercicios de movilidad articular, con la intención de preparar a los alumnos para las actividades que se realizarían a continuación, mientras se repasa la pirámide de los alimentos. (5 minutos).

Juego 1: Los alumnos se desplazarán por el espacio de la forma indicada por el profesor (andando, corriendo, a la pata coja, imitando animales, etc.). En el momento en el que el docente diga uno de los grupos de alimentos vistos con anterioridad, los discentes deberán agruparse en el número de raciones que le corresponda a dicho grupo. Por ejemplo: ¡Frutas y verduras! (3-5 raciones), los alumnos se agruparán formando equipos de 3, 4 o 5 personas. (10 minutos).

Juego 2: Se harán tres grupos, distinguidos por petos de colores distintos, en los que cada uno representará un grupo de alimentos (Carne, pescado, huevos y productos lácteos; Pan, cereales y legumbres; Frutas y verduras). Uno de los equipos deberá intentar pillar a los alumnos que componen los otros dos. Cuando un jugador es pillado debe sentarse en el suelo, a la espera de que un compañero de su mismo grupo le de la mano para salvarlo. A la indicación del profesor cambiarán la función de cada equipo. (5 Minutos).

    Se añadió una variante según la cual dos compañeros del mismo equipo podían unir sus brazos formando una casa para evitar ser pillados. Para poder volver al juego otro alumno debía pasar por debajo de ellos. (5 minutos).

Juego 3: Se dividirá el espacio en tres zonas correspondientes cada una a los equipos originados durante la actividad anterior. Al final de cada una de estas se colocarán una serie de conos de distintos colores, representando cada color un alimento. El juego consistirá en retirar los alimentos del resto de los equipos y llevarlos a tu área. Cuando nos introducimos en la zona de otro equipo podemos ser pillados, en tal caso nos sentaríamos en el suelo a la espera de un compañero nos tocase para salvarnos. Al final del tiempo, se sumará la puntuación de cada grupo determinando el ganador. Hay que señalar que cada cono cuenta con un valor distinto en función del alimento que representa, de este modo, el cono rojo (carne y pescado) valdrá 1 punto, el amarillo (leche) 2 puntos y el verde (fruta y verdura) 3 puntos. (10 minutos).

Vuelta a la calma: Se aprovecharán los cinco minutos que los alumnos dedican a hacer estiramientos y a relajarse tras el ejercicio realizado, para hacer un resumen de los contenidos tratados durante la sesión y posibilitar que los alumnos hagan sus propias reflexiones y elaboren unas conclusiones.

    Los últimos cinco minutos de la clase se otorgarán a los alumnos para que los dediquen a su aseo personal.

Sesión 2: Hacia una dieta equilibrada

Objetivos

• Conocer y adquirir hábitos alimenticios saludables. Entender la importancia del desayuno.

• Respetar las opiniones e ideas de los compañeros.

Material: balones de goma-espuma.

Espacio: pista de fútbol sala y aula del centro.

Desarrollo: Al igual que se realizó en la primera sesión, antes de salir a la pista, se expondrá un contenido teórico, de unos quince minutos aproximadamente, en los que se mostrarán a los alumnos los hábitos de alimentación saludables en relación con cada una de las comidas diarias y su composición, explicando la función que cumple cada uno de los grupos de nutrientes en nuestro cuerpo. Durante la exposición se utilizó como material de apoyo la pirámide de los alimentos empleada el día anterior, y se realizó un especial hincapié en la importancia y la composición del desayuno.

    Los argumentos que se presentaron al alumnado para justificar las razones por las que realizar un buen desayuno fueron:

• Si no desayunamos, nuestro rendimiento físico e intelectual no será el adecuado, ya que no dispondremos de suficiente energía y perderemos nuestra capacidad de concentración.

• Esta comida se realiza entre unas 8 y 10 horas después del último alimento que se le introdujo al cuerpo.

• Tener clase de Educación Física en una de las primeras horas de la mañana es otro motivo de peso a tener en cuenta a la hora de componer un desayuno.

    A continuación se explicó los alimentos que deben componer un desayuno equilibrado, según Clark (2006, p. 31):

• Lácteos, como la leche y el queso, que contienen proteínas de calidad, vitaminas A y D, calcio y vitaminas del grupo B.

• Frutas, que nos aportan hidratos de carbono, agua, vitaminas, minerales y fibra.

• Cereales, que nos proporcionan energía a través de los hidratos de carbono, vitaminas y minerales.

• Se pueden incluir otros alimentos como los huevos o los derivados cárnicos, que nos aportan proteínas de calidad y grasa con la que obtener energía.

Calentamiento: Una vez en la pista, se realizan ejercicios de movilidad articular, con la intención de preparar a los alumnos para las actividades que se realizarían a continuación, mientras se repasan los contenidos que se acaban de ver. (5 minutos).

Juego 1: Se le asignará a cada alumno un rol relacionado con un alimento, excepto cuatro que deberán componer un desayuno equilibrado juntándose con sus compañeros. Los alumnos se irán desplazando por el espacio de la forma que indique el docente. (15 minutos).

Juego 2: Para este juego se dividirán los discentes en tres grupos, dividiendo el espacio de juego en el mismo número de zonas, de modo que obtendremos dos subespacios exteriores y uno situado en medio de ambos. A los jugadores que se encuentran en las zonas exteriores se les proporcionarán tres balones de goma-espuma por grupo y su objetivo será el de golpear a los alumnos situados en el espacio intermedio. Cuando un alumno es golpeado debe acudir a donde se encuentra el profesor para que este le haga una pregunta (Dime una razón por la cual es adecuado desayunar; ¿Son los cereales adecuados en el desayuno?, ¿Tomar solamente un vaso de leche se podría considerar un desayuno equilibrado?, etc.), en caso de que la respuesta sea correcta, el niño volverá al juego y si no lo es, quedará eliminado. A los cinco minutos los equipos intercambian sus posiciones, ganando el ejercicio aquel grupo que consiga mantener más jugadores sin eliminar una vez transcurridas las tres rondas. (15 minutos).

Vuelta a la calma: Se aprovecharán los cinco minutos que los alumnos dedican a hacer estiramientos y a relajarse tras el ejercicio realizado, para hacer un resumen de los contenidos tratados durante la sesión y posibilitar que los alumnos hagan sus propias reflexiones y elaboren unas conclusiones.

    Los últimos cinco minutos de la clase se otorgarán a los alumnos para que los dediquen a su aseo personal.

    Tras la finalización de la última sesión, se repartirá a los alumnos una nueva ficha para que la elaboren en sus hogares, en la que se pide que indiquen que si, tras los nuevos conocimientos adquiridos, consideran oportuno realizar algún tipo de modificación en sus hábitos alimenticios, teniendo en cuenta el primer cuestionario rellenado. Esta última ficha, permitió poder realizar una evaluación sobre la evolución de los alumnos, así como del propio proceso de enseñanza-aprendizaje.

3.     Conclusión

    Como he mencionado con anterioridad, los alumnos ya poseían ciertos conocimientos relacionados con la alimentación y un estilo de vida saludables, debido a contenidos tratados en esta u otras materias, o por otro tipo de actividades (como los "desayunos saludables" que organiza el centro con el objetivo de promover una alimentación equilibrada y adecuada a su edad entre los escolares).

    En cuanto a la consecución de los objetivos que me había marcado, conseguí con bastante éxito que los alumnos comprendiesen la importancia del desayuno en nuestro organismo, así como los alimentos por los que este debe estar compuesto, tal y como me mostraron en la última ficha, en la que la mayoría modificaron este elemento de acuerdo a lo tratado en clase. Del mismo modo, consiguieron comprender la función que cumplen los distintos grupos de alimentos y los nutrientes que nos aportan, aunque fuese de una manera no muy detallada.

    En menor medida conseguí cumplimentar el objetivo por el cual pretendía que los alumnos aprendieran el número aconsejado de raciones de cada uno de los grupos de alimentos que debían tomar, tal y como pude comprobar durante el desarrollo de las actividades debido al gran número de dudas que les suscitaba esta cuestión. Tras el análisis de la primera ficha de las dos que repartí, llama la atención que casi el 40% de los alumnos desayunaba un simple vaso de leche, complementando este hecho con un almuerzo compuesto por un zumo y una magdalena en alguno de los casos. Espero que gracias a lo que se ha tratado en las clases de Educación Física en estas dos sesiones, estos hábitos sean modificados.

    En cuanto al tema y los contenidos tratados durante el presente desarrollo, debo decir que no me supusieron ninguna dificultad, ya que la alimentación saludable es una cuestión sobre la que he estudiado a fondo de manera extracurricular, además de, por supuesto, en mi formación como maestro de Educación Física en la Universidad.

    En definitiva, creo que la actividad fue bastante satisfactoria para todas las partes implicadas y consiguió que en los alumnos se llevaran a cabo gran parte de los objetivos deseados en su planteamiento.

Bibliografía

• Aranceta, J., Pérez, C., Ribas, L. & Serra, L. (2005). Epidemiología y factores determinantes de la obesidad infantil y juvenil en España. Revista de Pediatría de Atención Primaria. Rev Pediatr Aten Primaria, 7 Supl. 1: S 13-20.

• Clark, N. (2006). La guía de nutrición para maratonianos. Barcelona: Paidotribo.

• García Pellicer, J. J., Alonso Roque, J. I., García, J. V. & López Miñarro, P. A. (2011). Educación Física en Educación Primaria I. Diego Marín.

• García Pellicer, J. J., Alonso Roque, J. I., García, J. V. & López Miñarro, P. A. (2011). Educación Física en Educación Primaria II. Diego Marín.

• Hark, L. & Deen, D. (2005). Nutrición para vivir. Madrid: Pearson Alhambra.

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EFDeportes.com, Revista Digital · Año 21 · N° 215 | Buenos Aires, Abril de 2016 Lecturas: Educación Física y Deportes - ISSN 1514-3465 - © 1997-2016 Derechos reservados