Importancia de la preparación teórica en el entrenamiento deportivo Importance of theoretical preparation in sports training |
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*Profesora Principal de Esgrima UCCFD “Manuel Fajardo” **Profesor Principal de Béisbol UCCFD “Manuel Fajardo” ***Entrenador de Esgrima del CD “Príncipe” (Cuba) |
MSc. Grettel Polo Bugallo* MSc. Pablo Terry Álvarez** EPG. Adolfo Polo Jiménez*** |
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Resumen En la actualidad son muchos los entrenadores que no le prestan la atención debida al papel que juega la Preparación Teórica para el desarrollo de sus deportistas y para el logro de altos rendimientos. Se subestima su importancia y en ocasiones se desconoce en qué forma se debe llevar a cabo y cuantos aspectos puede comprender, lo que conduce inevitablemente a mantener a los miembros de los equipos con los cuales entrenan en un estado de desinformación que perjudica grandemente las actitudes que adoptan los mismos ante el esfuerzo diario y en gran medida, retrasa el proceso de aprendizaje y perfeccionamiento motor. Dentro del sistema de preparación del deportista la preparación teórica ocupa un lugar especial. La misma es parte imprescindible del entrenamiento deportivo, ya que toda acción que lleve a cabo el ser humano de forma consciente debe poseer una base orientadora que le sirva de pauta y es precisamente a través de la preparación teórica que logramos que los deportistas, por una parte, comprendan la esencia del tipo de esfuerzo que se les exige y se apropien de la forma de realización más eficiente de la acción y por otra, entiendan la naturaleza del proceso de su formación y los fenómenos que inciden en el mismo. Palabras clave: Preparación teórica. Esgrima. Rendimiento. Entrenamiento.
Abstract At the present time they are many the trainers that don't pay the due attention to the paper that plays the Theoretical Preparation for the development of their sportsmen and for the achievement of high yields. Their importance is underestimated and in occasions it is ignored in what he/she is formed it should carry out and how many aspects he/she can understand, what leads inevitably to maintain the members of the teams with which train in a state of disinformation that harms the attitudes that adopt the same ones in the face of the daily effort largely and in great measure, it retards the learning process and improvement motor. Inside the system of the sportsman's preparation the preparation theoretical squatter a special place. The same one is indispensable part of the sport training, since all action that carries out the human being in a conscious way should possess a base that serves him as rule and it is in fact through the theoretical preparation that we achieve that the sportsmen, on one hand, understand the essence of the type of effort that you/they are demanded and appropriate in the way of more efficient realization of the action and for other, understand the nature of the process of its formation and the phenomena that impact in the same one. Keywords: Theoretical preparation. Fence. Yield. Training.
Recepción: 24/09/2015 - Aceptación: 09/01/2016
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EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 20, Nº 214, Marzo de 2016. http://www.efdeportes.com/ |
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Introducción
A pesar de que la importancia de la Preparación Teórica es aceptada por todos, llama la atención que cuando se revisan libros de texto y manuales que tratan sobre los aspectos generales del entrenamiento deportivo, los capítulos dedicados al resto de las preparaciones poseen multitud de páginas, con numerosas informaciones teórico prácticas, mientras que a la preparación teórica, incluso los autores de gran renombre y de indiscutible aporte, le conceden apenas dos o tres cuartillas, referidas por lo general a consideraciones generales, que no ayudan mucho al entrenador en su labor concreta en este campo.
El objetivo de la preparación teórica, según el criterio de los autores, es garantizar que los deportistas desplieguen sus esfuerzos más conscientemente a partir del conocimiento racional del proceso de entrenamiento. Partimos de la reflexión siguiente:
A pesar de que esta máxima es comprensible, son numerosos los entrenadores que no le dan a la preparación teórica la importancia que se merece.
Algunos consideran que es preferible dedicar todo el tiempo posible al entrenamiento físico, ya que son de la opinión que el mismo le va a garantizar el desarrollo de capacidades y habilidades necesarias para alcanzar buenos rendimientos.
Otros utilizan la preparación teórica como una tarea más de entrenamiento, llevándola a cabo de forma esporádica tres o cuatro veces al año.
También encontramos entrenadores que la realizan con mayor frecuencia, pero centrando la atención sólo en alguno de sus contenidos fundamentales y realizándola de forma expositiva, a fin de poder transmitir ideas centrales.
Teniendo en cuenta esta realidad, deseamos comentar algunos aspectos generales a tenerse en cuenta en el momento de planificar las actividades de preparación teórica con los deportistas y los campos de acción que constituyen contenidos básicos de la misma, no sólo para poder constatar lo abarcador de su influencia, sino también lo necesario de su inserción frecuente dentro de la planificación del Macrociclo de entrenamiento, ya que son tan variadas las esferas que deben ser tratadas y discutidas teóricamente con los deportistas, utilizando diferentes vías para su verdadera comprensión, que nos obliga a aceptar su importancia y su frecuencia periódica en el trabajo con equipos deportivos.
Desarrollo
Para que alcance los fines propuestos, toda actividad de preparación teórica debe tener en cuenta diferentes aspectos generales a cumplir, entre los encontramos como de mayor importancia:
El desarrollo en el deportista del interés cognoscitivo sobre contenidos generales y específicos del proceso de entrenamiento.
El perfeccionamiento de la verbalización correcta de los contenidos de la acción.
El contenido de la clase teórica debe coincidir con el objetivo central del Mesociclo y el tipo de tareas a realizarse dentro del mismo.
La actividad de preparación teórica debe anteceder al inicio de la práctica de la tarea física a desarrollarse.
Si la clase teórica de información es importante y necesaria, ya que el entrenador podrá en ella transmitir los contenidos que considere más adecuados, atendiendo al tipo de preparación que se esté llevando a cabo en ese momento, o al fenómeno en el cual desea profundizar, con la ayuda de medios auxiliares como son el video, las láminas de secuencia de movimiento, etc., la discusión grupal no puede ser relegada a un segundo plano. Ella constituye el complemento adecuado para muchas clases teóricas de información y también pueden utilizarse sola, al abordar una temática de interés de todos. La misma es imprescindible dentro de la preparación del deportista y deben encontrarse dentro de los medios con que cuenta el entrenador para desarrollar el principio de concientización del entrenamiento ya que la misma:
Permite a los deportistas aprender a defender criterios, a expresarse correctamente, a reconocer su desinformación, a ser más críticos y autocríticos.
Favorece un amplio procesamiento mental de aspectos teórico-prácticos vinculados a las tareas diarias.
Contribuye a aprender a escuchar opiniones muy diferentes a las propias y a saber defender los criterios.
Permite una mejor autovaloración de sus estados y adquisiciones.
Sobre todo: Favorece la apropiación del conocimiento y la reflexión a partir de métodos participativos.
Durante la realización de las discusiones grupales con el equipo el entrenador deberá:
Actuar como facilitador, estimulando al equipo para que exprese sus ideas.
Fomentar el debate y no “frenar” o criticar la opinión equivocada. Respetar toda opinión, pero promover la reflexión con datos concretos.
Estar preparados para escuchar criterios erróneos, pues ello dependerá de la información que aportó el entrenador anterior o a la falta de información que en que él mismo ha incurrido con sus deportistas, a criterios escuchados por estos en otros lugares, etc.
Entre los campos de acción de la preparación teórica encontramos como los más relevantes y de mayor contribución en la toma de conciencia del deportista por el tipo de trabajo a desarrollar la importancia y repercusión de la tarea dada en su preparación, la forma de llevarse a cabo, los indicadores de una buena ejecución, su forma de recuperación y la base psicoreguladora. Veamos algunas de las interrogantes imprescindibles a dilucidar en una actividad de preparación teórica con el equipo:
¿Por qué es importante en su preparación?
¿Con qué objetivo se utiliza?
¿Sobre qué planos musculares actúa?
¿Qué capacidad condicional o coordinativa desarrolla?
¿Qué componentes psicológicos favorece? etc.
¿Cómo debe llevarse a cabo?
¿Con qué actitud?
¿Con cuál nivel de atención?
¿Con qué intensidad de trabajo?
En el caso de un elemento técnico:
¿Con cuál patrón motor?
¿Cómo es la distribución de los esfuerzos?
¿Cuál es el momento de mayor fuerza?
¿Cuál es el orden en la secuencia de movimiento?
¿Cuál es la dirección y la amplitud de los movimientos por sectores del cuerpo durante la dinámica de la acción?
En el caso de una combinación táctica:
¿Cuál es el objetivo de la misma?
¿Ante qué situaciones se utiliza?
¿Cuáles acciones comprende?
¿Qué responsabilidad individual tiene cada atleta en la acción?
¿Cuáles son los indicadores que nos marcan que se está llevando a cabo de forma correcta?
¿A qué nivel de fatiga conduce?
¿Qué frecuencia cardiaca se debe alcanzar?
¿Qué se considera una buena eficiencia en su realización?
¿Cómo debe ser la recuperación de este tipo de carga?
¿Qué medios de recuperación pueden llevarse a cabo?
¿Cómo se realizan?
¿Cómo se desarrollan los procesos psicológicos necesarios para alcanzar buenos rendimientos en la tarea de entrenamiento?
¿Con qué tareas?
¿Cómo se realizan las mismas?
Analicemos brevemente la importancia de cada uno de estos aspectos:
a. ¿Por qué es importante en su preparación?
¿Con qué objetivo se utiliza?
¿Para qué es necesario incorporar en el entrenamiento esta tarea? ¿Por qué debe el deportista correr esa cantidad de kilómetros, que tanto le agotan, o realizar incontables repeticiones de un fundamento técnico, o qué papel juega esa acción táctica que se pretende perfeccionar para la consecución de una acción o un objetivo dentro del asalto? .Ello será lo primero que habrá que explicar cuando comencemos a desarrollar una tarea dada, sobre todo si es nueva, porque los objetivos que se comprenden movilizan mejor las disposiciones del sujeto para los esfuerzos.
¿Sobre qué planos musculares actúa?
¿Cuáles son los grupos de músculos o partes del cuerpo que se involucran en el trabajo de la acción dada? Especialmente en las tareas para desarrollar la fuerza como capacidad condicional en brazos, piernas, tronco, etc., así como en movimientos eminentemente técnicos, es conveniente que el deportista comprenda qué zona del aparato locomotor interviene directamente en el ejercicio dado, pues refuerza el aspecto anterior, es decir, apunta a la comprensión del objetivo a alcanzar.
¿Qué capacidad condicional o coordinativa desarrolla?
Si vamos a comenzar un Mesociclo especialmente dedicado al desarrollo y/o perfeccionamiento de determinadas capacidades condicionales, ¿por qué el deportista no va a tomar conciencia de ello? No se debe subestimar la importancia que cada uno de los miembros del equipo le puede conceder a percatarse que el trabajo del período en el cual se encuentra está dedicado a la resistencia, a la flexibilidad, a la velocidad, etc. Estará más centrado en su tarea, comprenderá con mayor celeridad las características de las cargas que se le imponen y ante las cuales debe movilizar toda su voluntad y atención.
¿Qué componentes psicológicos favorece?
Ya sea un deportista adolescente, un juvenil o un adulto, al explicársele que la tarea orientada favorece el desarrollo de la distribución de la atención, la perseverancia o la calidad de la percepción de la distancia, le permitirá además ampliar sus conocimientos y comprender que dicho esfuerzo no va tan solo encaminado a un logro físico, técnico o táctico, sino que además influye positivamente en el perfeccionamiento de aquellos componentes psicológicos que le sirven de base a la ejecución adecuada del movimiento deportivo. Dicho conocimiento no es superfluo; es un elemento más de su formación y educación como deportista de altos rendimientos.
b. ¿Cómo debe llevarse a cabo?
¿Con qué actitud?
¿Podemos enfrentar la ejecución de una tarea deportiva de forma indiferente o sin estar dispuestos a dar lo mejor de sí? .Ello sería perder el tiempo y llevar a cabo un desgaste de energía sin resultado alguno. Es necesario orientar la entrega total a la ejecución de cualquier acción que se ejecute en el terreno, pues el día de la competición es precisamente ésta la actitud que se requiere y para ello debemos estar acostumbrados a darlo todo en cada momento.
¿Con cuál nivel de atención?
¿Exige la acción una distribución de la atención entre varios estímulos o acciones simultáneamente o por el contrario, requiere de una gran intensidad de atención concentrada, en el compañero, en el contrario, en una zona del cuerpo, en una meta dada? En muchas ocasiones los errores de movimientos concretos, de acciones o de estrategia pueden ser causados por el desconocimiento del deportista de hacia dónde debe ir dirigida su atención, que es la actividad de la personalidad que refuerza el resto de los procesos psicológicos y las acciones del hombre.
¿Con qué intensidad de trabajo?
¿Debe el deportista movilizar absolutamente todas sus reservas para alcanzar la máxima intensidad de trabajo o es posible llevar a cabo la tarea a mediana o baja intensidad para alcanzar los resultados esperados? .Cuando desconoce este aspecto puede dedicar gran energía a una acción que no la requiere, con la consiguiente fatiga, sin que ello garantice en modo alguno el cumplimiento de las orientaciones recibidas o por el contrario, puede ejecutar los movimientos desplegando muy pocos esfuerzos y nunca estará a la altura de sus compañeros o de lo programado para dicha tarea.
c. ¿Cuáles son los indicadores que nos marcan que se está llevando a cabo de forma correcta?
¿A qué nivel de fatiga conduce?
El deportista debe conocer de antemano y reflexionar sobre el nivel de los esfuerzos a que se encuentra sometido y por ende, la magnitud del cansancio a que se enfrenta. El pensar que se siente agotado debido a que las cargas orientadas por el entrenador son superiores a las exigidas para ese tipo de trabajo, disminuye la confianza en el mismo y provoca una actitud desfavorable que limita sus disposiciones de rendimiento. El opinar que dicha carga es demasiado baja para el momento del ciclo dado y el tipo de trabajo que realiza también conduce a esta actitud. El sujeto que se entrena debe saber exactamente, previa la movilización e sus esfuerzos, el nivel de fatiga que experimentará, para que no le tome de sorpresa y así, cuando comience a experimentar dichos cambios (cardiorrespiratorios, en su aparato locomotor), no desista en perseverar en la ejecución de la tarea, sino que por el contrario, reaccione de esta forma: “Esto es lo que explicó el entrenador que debía sentir cuando estoy trabajando bien. Debo superarlo, pues es necesario.”
¿Qué frecuencia cardiaca se debe alcanzar?
Durante la aplicación de las cargas de trabajo, especialmente las planificadas para el desarrollo de las capacidades condicionales, uno de los medios de control lo constituye el registro de las pulsaciones que alcanza el deportista. El entrenador acostumbra a orientar una tarea que provoque una alteración cardiovascular que debe oscilar entre un rango determinado para que se produzca el efecto deseado. No basta con controlar las pulsaciones, sino que es elemental explicarle previamente al deportista, dentro del contenido de una actividad de preparación teórica, los rangos esperados y su importancia, lo que favorece la participación consciente del deportista en su propio entrenamiento.
¿Qué se considera una buena eficiencia en su realización?
¿Cuántas acciones (toque directo, toque con pase, etc.) se deben realizar exitosamente N de X intentos para que se considere un dominio eficiente del mismo? ¿En cuántos segundos (minutos) se debe vencer una distancia, atendiendo al nivel de entrenamiento, la edad, etc. para que el deportista se encuentre entre el grupo de los más aventajados? ¿Qué características debe tener la ejecución para que cumpla con los aspectos básicos de una buena ejecución? Ello también pertenece al arsenal de información que el deportista debe poseer antes de iniciar una nueva etapa de trabajo, el aprendizaje o perfeccionamiento de un fundamento técnico – táctico, etc.
En el caso de un elemento técnico:
¿Con cuál patrón motor?
¿Cuál es la imagen del movimiento que posee el deportista para realizar su acción? ¿La misma es correcta o posee errores o lagunas que le dificultan la acción? ¿Cuál es la técnica ideal? ¿Se le ha explicado y demostrado – a través de las ejecuciones del propio entrenador, de láminas, esquemas, vídeos, etc. – lo cual contribuye a su claridad? ¿Conoce las fases del movimiento y los detalles técnicos que corresponden a cada una de ellas? Ello es imprescindible para una buena ejecución, pues la representación (mental) del movimiento, la imagen del mismo, es el patrón por el cual se va a guiar a la hora de llevar a cabo cualquier movimiento. Es necesario recordar que el deportista no realiza sus acciones por lo que el entrenador le explica o demuestra, sino por lo que se ha quedado en su memoria de lo explicado y demostrado, por lo tanto, por su patrón motor, por la imagen que posea.
¿Cómo es la distribución de los esfuerzos?
Si es una acción cuya ejecución requiere de un breve tiempo: ¿qué elementos son más rápidos y cuáles más lentos? ¿Posee un ritmo continuado? En el caso de una tarea a realizarse en un plazo de tiempo mayor (especialmente las cíclicas) ¿Cuál es la frecuencia de pasos – en los primeros metros, en aquellos que median hasta el alcance de la máxima velocidad, en la etapa que se necesita mantener a toda costa dicha velocidad alcanzada, en aquellas acciones en que no se necesita gran velocidad, sino un ritmo estable es determinados momentos y un aumento o disminución del mismo en otros, etc.?
¿Cuál es el momento de mayor fuerza?
Si se va a efectuar un salto: ¿En cuál momento específico se concentra toda la energía del deportista? ¿Cómo lo logra? Si se trata de un salto volante en el arma sable ¿Toda su potencia física debe concentrarla en el despegue? ¿Acaso un deportista puede llegar a dominar la técnica de estos movimientos desconociendo previamente estos aspectos?
¿Cuál es el orden en la secuencia de movimiento?
¿Qué se lleva a cabo primero y qué después? ¿Cuáles son las partes de la acción que se ejecutan simultáneamente? .Los errores en la comprensión de la secuencia de las acciones, que constituyen errores de representación, de patrón mental, conducen a deficiencias en la realización de las mismas que son en muchos casos inadvertidos durante bastante tiempo por el entrenador y por el propio deportista, lo que obligan a múltiples repeticiones que, en innumerables casos, no conducen al logro de un buen dominio técnico y sólo son percibidos cuando se observan en cámara lenta las filmaciones o se llevan a cabo estudios diagnósticos de la calidad de la representación motora del sujeto. El incorporar este aspecto en la preparación teórica de forma sabia y precisa, contribuye notablemente a eliminar dichas deficiencias.
¿Cuál es la dirección y la amplitud de los movimientos por sectores del cuerpo durante la dinámica de la acción?
¿Hacia dónde se gira en determinado momento? ¿En cuál eje se rota? ¿Cuál es la separación adecuada de las piernas para que se garantice el equilibrio del cuerpo? ¿En qué dirección se sitúa el tronco (u otra parte del cuerpo)? ¿Hacia dónde deben apuntar los codos, los brazos, etc.? ¿Cuál es la amplitud del movimiento del brazo derecho – de ambos brazos? ¿Cuál es la amplitud de la flexión de las piernas? Dirección y amplitud son parámetros fundamentales de los movimientos deportivos que deben encontrarse muy bien establecidos en el patrón motor del sujeto, si se pretende un dominio técnico perfecto.
En el caso de una combinación táctica:
¿Cuál es el objetivo de la misma?
¿Para qué se lleva a cabo dicha combinación táctica? ¿Qué se persigue con ello? ¿Por qué es importante dentro del contexto del combate? La comprensión de este aspecto es el primer elemento que debe tener claro el atleta en el momento de comenzar a entrenar la misma o cuando se pretende perfeccionarla, pues de lo contrario podrá ejecutarla en el entrenamiento de forma exitosa, pero no podrá seleccionarla como recurso acertado en el momento más oportuno dentro del partido, cuando esta combinación se precise, dada la situación concreta de juego. Muchos entrenadores le conceden mayor atención a la práctica de acciones tácticas, destacando “sobre la marcha” su intencionalidad” o no haciendo hincapié en la misma y después se muestran muy sorprendidos o disgustados cuando en la competencia sus jugadores no aplican lo entrenado en las sesiones diarias y no pueden aceptar que es su total responsabilidad el no haber logrado este objetivo con su equipo y ello los conduce a dar indicaciones a gritos y de forma constante a sus deportistas desde fuera del terreno, ya que éstos, por sí solos, no son capaces de reaccionar con la celeridad con la ejecución de la combinación aprendida y practicada anteriormente.
¿Ante qué situaciones se utiliza?
Muy relacionado con el aspecto anterior, resulta imprescindible que los atletas se les explique teóricamente - en forma clara y precisa - ante cuáles situaciones del combate se utiliza como recurso la acción que se entrena. Es muy útil durante el análisis de vídeos, que se detenga la cinta y se le pregunte a los deportistas cuál es la situación que observan en las acciones del contrario y qué respuesta táctica se requiere para contrarrestar las mismas, e inclusive repetir la imagen para contribuir a grabar esta relación situación de juego – respuesta táctica. Ello favorece la codificación dentro del mapa conceptual del atleta de qué hacer en el momento necesario. Pero sin contar con los recursos tecnológicos también puede cumplirse con esta tarea. En una actividad teórica donde se expliquen acciones tácticas determinadas, el abordar con simples esquemas este aspecto y reiterar los casos concretos que requieren de dicha respuesta por parte de uno o varios atletas, favorecer la discusión, la participación de todos, alcanza similar objetivo.
¿Cuáles acciones comprende?
Una combinación táctica puede realizarse involucrando a determinado número de atletas y por lo tanto, de acciones diversas. Es necesario puntualizar el tipo concreto de acción a realizar por los mismos, las peculiaridades de dicha acción, la dirección y velocidad de los desplazamientos individuales, etc.
d. ¿Cómo debe ser la recuperación de este tipo de carga?
¿Qué medios de recuperación pueden llevarse a cabo?
¿Qué acciones o con cuáles estímulos vamos a lograr obtener la recuperación deseada? ¿Cuáles se realizan al culminar la parte principal de la sesión de entrenamiento? ¿Cuáles son recomendables que se lleven a cabo en el hogar o en el albergue de la institución? ¿En qué horarios? ¿Por qué son importantes? ¿Qué se persigue con los mismos? ¿Qué le sucedería al deportista de no tener en cuenta estos aspectos o no realizarlos de forma adecuada? .Si el deportista no comprende la esencia y la importancia de cada tipo de medio de recuperación orientado por el entrenador, puede no prestarle atención a esta parte necesaria de su trabajo diario, con la consiguiente e innecesaria fatiga acumulada, lo que limita sus rendimientos y puede dañar su salud.
¿Cómo se realizan?
¿De qué forma se llevan a cabo los ejercicios respiratorios? ¿Con qué ritmo e intensidad de inspiración y expiración? ¿Cuál es el ritmo de los movimientos del cuerpo? ¿Cómo se ejecutan los medios de relajación mental? ¿Qué música se debe escuchar para que los sistemas vegetativos reduzcan su frecuencia? ¿Qué temperatura debe tener el agua del baño del deportista después de su trabajo o cuando se dispone al sueño nocturno? ¿Qué duración debe tener éste? Existen numerosos medios de recuperación del deportista que el entrenador utiliza y orienta para realizar fuera de los terrenos, pero no basta con su ejecución mecánica, sino que es importante la comprensión exacta de la tarea, pues un error de este tipo puede conducirnos a perder inclusive una medalla en una olimpiada.
e. ¿Cómo se desarrollan los procesos psicológicos necesarios para alcanzar buenos rendimientos en la tarea de entrenamiento?
¿Con qué tareas?
La preparación psicológica es parte integrante de la formación del deportista. Un entrenador competente y eficiente en su labor no la desdeña e incorpora tareas de intervención en aquellas esferas que presente deficiencias en el que hacer de su equipo y que se haya constatado a través del control psicológico, realizado por él o por un especialista en este campo, en el caso que cuente con éste. Es recomendable que el deportista conozca aquellos componentes psico-reguladores que permiten el éxito de sus acciones y para ello hay que hablarles de los mismos, explicar su importancia en cada caso y sobre todo, cuáles tareas se incorporan en el entrenamiento para su desarrollo.
No se trata de convertir al deportista en un científico o en un psicólogo. Contribuirá mayormente a la aceptación de las orientaciones encaminadas a estos fines el comprender que dichas tareas se incorporan para mejorarles sus posibilidades de percibir objetos en movimiento o fijos en la distancia, sus cualidades de voluntad, sus motivos de rendimiento, su capacidad para percibir a compañeros y contrarios que se desplacen por sus laterales, la posibilidad de poseer una mejor imagen de los movimientos, etc. No tiene por qué ignorarlo, pues forma parte de trabajo diario y de los pasos a seguir para convertirlo en un deportista de altos logros.
¿Cómo se realizan las mismas?
Al igual que es imprescindible que los miembros del equipo comprendan la forma de ejecutar una acción deportiva dada, la forma de llevarse a cabo las tareas de intervención psicológica debe ser motivo de reflexión por parte de ellos. Garantiza una mejor disposición para éstas tareas y les brinda mayor confianza en sus perspectivas.
Analicemos algunos de estos fenómenos, a manera de ejemplos, que, a nuestro juicio, también constituyen campos de la preparación teórica:
Importancia de la fijación de objetivos de rendimiento a corto, mediano y largo plazo, de común acuerdo con el entrenador y teniendo en cuenta los pasos a seguir para su alcance, así como la forma de control de los mismos.
Objetivo y relevancia del control del entrenamiento (test pedagógicos, pruebas médicas, biomecánicas, fisiológicas, bioquímicas, psicológicas, etc.). Análisis e interpretación conjunta de los resultados obtenidos.
Dinámica de los estados de tensión psíquica en entrenamientos de altas cargas y competitivas, sus causas, formas de manifestación y regulación.
Importancia de la cohesión del equipo, clima psicológico de trabajo y su impacto en el buen desenvolvimiento de las tareas colectivas.
Reflexionemos ante un ejemplo concreto de los mencionados anteriormente: ¡Qué lamentable resulta que un atleta, ante las sucesivas derrotas competitivas por exceso de nerviosismo, se autovalore como cobarde y con ello pierda la confianza en sus posibilidades! ¿Es acaso culpable de desconocer que, ante la expectativa de la competición, es normal un nivel de activación superior al de entrenamiento y que cuando éste aumenta demasiado, le provoca inquietud, descoordinación, alteración del control muscular, de la percepción temporal y espacial? ¿Quién es el verdadero responsable? El entrenador, que no incorporó dentro de los contenidos de la preparación teórica la caracterización de las tensiones psíquicas y sus manifestaciones.
Son disímiles los campos de acción y las tareas generales que es menester cumplir dentro de la preparación teórica para que el deportista posea la información correcta sobre todas las metas que debe enfrentar en el entrenamiento y comprenda por qué debe llevarlas a cabo, así como también para que eleve su nivel de comprensión sobre los múltiples aspectos que inciden en el logro de un buen rendimiento. Si el propio entrenador no posee los elementos necesarios para brindar una acertada información al respecto, siempre puede acudir a la ayuda de otros especialistas en las ramas dadas, los cuales, en un lenguaje adecuado, podrán hacer llegar el mensaje requerido a los deportistas para contribuir a su formación teórica. Con ello el entrenador no pierde su papel rector en la conducción del proceso de formación del equipo, pues para el resto de los especialistas de las ciencias aplicadas al deporte está muy claro que el artífice principal del rendimiento de los deportistas, su guía y organizador, es el entrenador.
Conclusiones
Consideramos de suma importancia la incorporación de la preparación del deportista la preparación teórica la cual proporciona un amplio conjunto de conocimientos que le son necesarios al deportista para obtener mayores resultados y elevar su capacidad intelectual. Esta se vincula con el resto de los componentes de la preparación deportiva para coadyuvar a la elevación de la eficiencia de la actividad deportiva en el desarrollo armónico de la personalidad de los deportistas.
La preparación teórica de los esgrimistas garantiza la formación del sistema de conocimientos generales y especiales, de estudio y comprensión de las regularidades psicológicas, fisiológicas, higiénicas, técnicas, tácticas y otras del entrenamiento deportivo, contribuye a la adquisición de amplios conocimientos y realización de las tareas educativas, así como a la educación y normas de conducta.
Los conocimientos teóricos se adquieren en las conferencias especiales, informes y charlas, así como también en el proceso de las clases prácticas y durante el aprendizaje de la metodología de enseñanza de la técnica y la táctica de las acciones, durante el análisis de la conducta y las acciones del esgrimista en los combates efectuados en las diferentes competencias.
Bibliografía
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EFDeportes.com, Revista
Digital · Año 20 · N° 214 | Buenos Aires,
Marzo de 2016 |