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Habilidades sociales del profesor de Educación Física

Social skills of the Physical Education teacher

 

Diplomada en Magisterio de Educación por la universidad de Murcia

Graduada en Primaria y Educación Infantil

con mención en Ingles y Audición y Lenguaje

por la Universidad Camilo José Cela de Madrid

Licenciada en Pedagogía y Psicopedagogía

por la Universidad Filosofía y Ciencias

de la Educación de Valencia

Josefa Martínez Ayala

facorra17@gmail.com

(España)

 

 

 

 

Resumen

          El profesor de Educación Física debe asumir la responsabilidad social e individual de una comprometida práctica en sus sesiones. Debe fomentar el desarrollo de las habilidades sociales y personales de sus alumnos y promocionar el proceso de enseñanza/aprendizaje, enriqueciéndoles con estrategias que incorporarán a la vida cotidiana y dotándolos de suficientes recursos para el desarrollo de las capacidades que afianzaran su desarrollo integral, físico y psíquico.

          Palabras clave: Habilidades sociales. Desarrollo integral. Socialización. Educación física.

 

Abstract

          The physical education teacher should take social and individual responsibility for a committed practice in their sessions. It should encourage the development of personal and social skills of students and promote the teaching and learning process, enriching them with strategies that will be incorporated into everyday life and providing them with sufficent resources for the development of capacities that were guaranteeing their comprehensive, physical and psychic development

          Keywords: Socials skills. Integral development. Socialization. Physical education.

 

Recepción: 27/10/2015 - Aceptación: 02/12/2015

 

 
EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 20, Nº 211, Diciembre de 2015. http://www.efdeportes.com/

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1.     Introducción

    El ser humano está influenciado por el mundo que le rodea y necesitamos ayuda de nuestros semejantes para cubrir nuestras necesidades. El “otro” es en gran medida nuestro maestro, ya que, de él aprendemos diferentes instrumentos, estrategias y aprendizajes que nos permitirán desenvolvernos de forma positiva y efectiva ante situaciones generadas en nuestro entorno a lo largo de toda la vida y progresar en nuestros aprendizajes.

    La influencia de nuestro entorno, dentro del contexto social, desemboca, en la propia socialización, identificada como, la relación entre el individuo y la sociedad, en el pensamiento de Durkheim (1971), que formula aportes destacados en el análisis de la educación, reflexionando sobre la práctica y la teoría educativa en sus escritos pedagógicos.

    Ante la socialización, definida como un proceso de transformación que el ser humano realiza a consecuencia de la interacción con sus semejantes y que favorece su desarrollo integral, es necesario también, desarrollar “habilidades sociales”.

2.     Conceptualizaciones

    En primer lugar, describiremos el término de “habilidad” como la aptitud, destreza o capacidad que posee un individuo para realizar con éxito una actividad o tarea. Muchas habilidades son adquiridas a través del aprendizaje de un programa motor.

    Una de las definiciones que nos aporta el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, se refiere a la “capacidad y disposición para hacer algo”.

    Uniendo los términos de habilidad y socialización, obtenemos el término “habilidad social”, entendida como la conducta necesaria para poder interactuar y relacionarnos con cualquier individuo de manera efectiva y recíproca.

    En el desarrollo de las habilidades sociales es primordial la relación, la interacción y el juego con el otro.

    Meichenbaun, Butler y Crudson (1981), destacaron que la habilidad social debe considerarse dentro de un marco cultural determinado y que depende de factores como la edad, la clase social y la educación.

    Además debemos tener en cuenta que cada situación se rige por un criterio diferente de conducta según en el contexto en el que se desarrolla y las características que presenta cada individuo, como pueden ser: sus creencias, sus valores, actitudes y sus capacidades.

    Es decir, que no solo depende del marco cultural donde se desarrolla, ni del contexto, la edad, clase social o la educación, sino de la conducta socialmente habilidosa que el individuo ha desarrollado.

    He aquí algunas definiciones dadas por diferentes autores sobre conducta socialmente habilidosa o habilidad social, que aunque son publicaciones sucesivas de diferentes autores y años, mantienen un nexo de unión invariable en el tiempo, que es, la capacidad de emitir conductas y la expresión de sentimientos.

    Veamos dichas definiciones:

    “La capacidad compleja de emitir conductas que son reforzadas positiva o negativamente, y de no emitir conductas que son castigadas o extinguidas por los demás”. (Libet y Lewinshn, 1973)

    “La conducta interpersonal que implica la honesta y relativamente directa expresión de sentimientos”. (Rimm, 1974)

    “La habilidad de buscar, mantener o mejorar el reforzamiento en una situación interpersonal a través de la expresión de sentimientos o deseos cuando esa expresión se arriesga a la pérdida de reforzamiento o incluso al castigo”. (Rich y Schroeder, 1976)

    “Es la capacidad para interactuar con los demás en un contexto social dado de un modo determinado que es aceptado o valorado socialmente y, al mismo tiempo, personalmente beneficioso, mutuamente beneficioso, o principalmente beneficioso para los demás”. (Combs y Slaby, 1977)

    “La capacidad de expresar interpersonalmente sentimientos positivos y negativos sin que dé como resultado una perdida de reforzamiento social” (Hersen y Bellack, 1977).

    “La expresión manifiesta de las preferencias (por medio de palabras o acciones) de una manera tal que haga que los otros las tomen en cuenta” (MacDonald, 1978).

    “Un conjunto de conductas sociales dirigidas hacia un objetivo, interrelacionadas, que pueden aprenderse y que están bajo el control del individuo” (Hargie y Saunders, 1981).

    “Conjunto de conductas identificables y aprendidas que emplean los individuos en las situaciones interpersonales para obtener o mantener el reforzamiento de su ambiente” (Kelly, 1992).

    “Son un conjunto de conductas emitidas por el individuo en un contexto interpersonal que expresa sus sentimientos, actitudes, deseos, opiniones o derechos de un modo adecuado a la situación, respetando esas conductas en los demás y que, generalmente resuelve los problemas inmediatos de la situación mientras minimiza la probabilidad de futuros problemas”. (Caballo, 1993)

    “…las conductas o destrezas sociales específicas requeridas para ejecutar competentemente una tarea de índole interpersonal. Implica un conjunto de comportamientos adquiridos y aprendidos y no un rasgo de personalidad. Son un conjunto de comportamientos interpersonales complejos que se ponen en juego en la interacción con otras personas”. (Monjas, 1999, p. 28)

    Como podemos apreciar, las habilidades sociales son un conjunto de comportamientos aprendidos y adquiridos de forma interpersonal y compleja de competencia social, no siendo un rasgo de la personalidad sino un rasgo del comportamiento.

    A modo de resumen, las habilidades sociales según Caballo, V (2009), son:

  1. Son específicas a la situación. Su significado dependerá de la situación en la que tenga lugar.

  2. Se juzga según las conductas verbales y no verbales utilizadas y mostradas por cada individuo, siendo estas aprendidas.

  3. Implica un comportamiento sin causar daño a la otra persona con la que se interactúa.

3. Componentes de las habilidades sociales

    De forma general señalaremos los componentes de las habilidades sociales, siendo:

Conductuales

    Son aquellas que nos sirven para expresar nuestras opiniones, ideas, sentimientos en diferentes contextos.

    Destacamos varios tipos:

  • Componentes no verbales, como la mirada, los gestos, la postura, movimientos de cabeza, apariencia, automanipulaciones, expresión corporal…

  • Componentes paralingüísticos, como la voz, las pausas al hablar, los silencios, la fluidez del habla…

  • Componentes verbales como, alabanzas, autorrevelación, rechazo, atención personal, el humor, verbalizaciones positivas y negativas, empatía, respeto, formalidad, claridad, retroalimentación…

  • Componentes generales como, el afecto, tomar y ceder el turno o palabra, la escucha…

Cognitivos

    Son las informaciones seleccionadas de las situaciones vividas a lo largo de la vida, que modificamos, analizamos y evaluamos según los estímulos que hemos recibido y según nuestro propio conocimiento a través de los procesos cognitivos que realizamos.

    Esto nos lleva a realizar representaciones creadas por nosotros mismos, entre las que se encuentran:

  • La calidez en la comunicación.

  • La privacidad, estableciendo relaciones más especiales de comunicación.

  • La restricción, que influye según el tipo de personalidad, respetando normas o impidiéndolo provocando malestar al alrededor.

  • La distancia, bien sea por objetos, por metros o por proximidad física o psíquica. Facilitando o dificultando la interrelación entre individuos a través del tacto, la voz, etc.

    Volviendo a Caballo (2009) puntualiza que estas variables están determinadas por:

  • Las estrategias de codificación, siendo estas las transformaciones de los estímulos que aparecen en las distintas situaciones, entrando en juego la interpretación, la percepción, la atención y la categorización, además de la forma en la que se codifica y se selecciona la información que más tarde será utilizada.

  • Competencias cognitivas, siendo estas las capacidades de aplicación de la información y de la resolución de problemas, acciones e interpretaciones.

  • Valores, referidos a los valores sujetivos esperados, pudiendo ser estos, agradables, desagradables, positivos o negativos.

  • Expectativas, entendidas como predicciones ante consecuencias esperadas de una conducta determinada. Como ejemplo la autoeficacia.

  • Sistemas de autorregulación. Denominados por Caballo como, los objetivos y patrones de actuación que nos marcamos y que están condicionados por la autocrítica y la autorrecompensa y no por los objetivos impuestos. Sirva como ejemplo la autoobservación, las atribuciones personales o la autoestima y automotivación.

Fisiológicos

    Los elementos fisiológicos que influyen en las habilidades sociales según diferentes autores son:

  • La tasa cardiaca.

  • La presión sanguínea.

  • Actividad de las glándulas sudoríparas.

  • Actividad eléctrica en la contracción muscular.

  • La tasa respiratoria.

4.     Intervención educativa

    Es un hecho que cada individuo posee un determinado desarrollo de las habilidades sociales y que está relacionado directamente y proporcionalmente con el aprendizaje obtenido en sus experiencias y en relación con el medio que le rodea. Al igual que cierto es que también poseemos cierto déficit de las mismas debido a ausencias de aprendizajes en diferentes contextos o por malos aprendizajes o dificultades en los mismos o en el proceso de aprendizaje, debido a modelos inapropiados, inhabilidad social, sistema educativo precario o inadecuado, a situaciones desagradables o traumas, etc.

    Por todo ello, es necesario que las intervenciones del maestro o profesor en las aulas, deber revisarse continuamente para poder llevar a cabo una correcta práctica docente, ya que si el profesor no parte de unas habilidades sociales adecuadas no podrá evitar sentimientos negativos como la frustración, mal humor, rabia, agresividad, etc., y por ende no podrá transmitir a sus alumnos la tranquilidad, el optimismo, la comprensión, la motivación, entre otras muchas.

    En la escuela se educa para la vida y el maestro debe facilitar a los discentes todos los instrumentos necesarios para un desarrollo integral y debe sacar el mayor provecho de sus intervenciones y de sus alumnos, así como de la relación entre compañeros, entre alumnos, involucrándose de lleno.

    El profesor de Educación Física es un privilegiado por pertenecer a un área propicia para el desarrollo integral del alumno, ya que, el aprendizaje a través del juego y las actividades deportivas es un caldo enriquecido en valores, desarrollo personal, autoestima, comportamiento cívico, cooperación, superación, respeto de sí mismo y de los demás, al igual que del entorno, reforzamiento del autoconcepto, entre otros, asi como el desarrollo de todas las capacidades y habilidades necesarias para su completo desarrollo físico y psíquico necesario para una calidad de vida social y personal y una perfecta integración en el mundo social, obteniendo estrategias de supervivencia para un sinfín de contextos y situaciones diferentes, que le ayudaran a conseguir el éxito en su caminar.

    Teniendo en cuenta la interacción continua que el profesor de Educación Física tiene con sus alumnos, este debe de considerar los aspectos que favorecen dicha interacción, ya que, para el alumno es el modelo a imitar. El libro “Cuidando al Formador. Habilidades Emocionales y de Comunicación” (Bimbela Pedrola y Navarro Matillas, 2007) incide en aspectos clave de la actividad docente. Estos aspectos son referidos entre otros a:

  • El dominio de los conceptos a tratar en sus sesiones, demostrando al alumno su competencia como maestro.

  • Tener conocimiento: de sí mismo, de sus posibilidades y limitaciones, de sus virtudes y defectos… autoconocimiento real.

  • Tener vocación profesional y entusiasmo por enseñar y aprender.

  • Descartar actitudes absolutistas como todo o nada.

  • Autoevaluación constante del proceso de enseñanza y aprendizaje.

  • Observar y analizar la evolución de sus alumnos, para sumar esfuerzos.

  • Preparar pormenorizadamente sus intervenciones, ajustando

  • adecuadamente los contenidos, tareas o actividades, material y espacio, teniendo en cuenta en cada momento la diversidad del alumnado y sus características personales.

  • Consideración el efecto que nuestra intervención educativa produce en nuestros alumnos.

  • Procurar no interrumpir el acto comunicativo entre profesor- alumno, para no interferir en el mensaje que nos quieren mandar. Debemos mantener la atención durante todo el proceso comunicativo.

  • Debemos evitar dar soluciones prematuras a los problemas de resolución.

  • Evitar por todos los medios no hacer catalogaciones al alumnado, sino hacer referencias a lo que hace o dice, así no potenciaremos sus dificultades.

  • El profesor de educación física debe ser específico, concreto, breve y preciso en su comunicación con el alumnado, evitando así confusiones y malas praxias, que afectaran negativamente en su aprendizaje.

  • Debe cuidar la comunicación no verbal, estando esta acorde con la comunicación verbal, manteniendo el contacto visual normal, mostrando afecto y respeto, modulando el tono y el volumen de la voz, adecuando la expresión facial.

  • Cuidar el momento de interacción en la corrección de conductas

  • evitando ridiculizar ante el resto de compañeros.

  • No olvidar que el alumnado aprende por observación, imitación, ensayo e información.

    Las dimensiones conductuales más aceptadas en la actualidad en un profesor de Educación Física son: la escucha; iniciar, mantener y finalizar una conversación; el saludo, la presentación y la despedida; defender los derechos; expresar amor, agrado y afecto; expresar y recibir emociones; dar y recibir retroalimentación; cooperar y compartir con el alumnado y colaboradores; hacer y recibir cumplidos; buena oratoria y dicción para hablar sus alumnos y afrontar las críticas, entre otras.

    El profesor de Educación Física debe tener en cuenta todos los modelos de habilidades sociales para poder hacer efectiva su transmisión del saber con el mejor resultado posible para él y sus alumnos. He aquí los diferentes modelos:

  • Modelo cognitivo: basado en la habilidad para organizar cogniciones y conductas enfocadas a conseguir las metas sociales que son comúnmente aceptadas en la sociedad en la que vivimos.

  • Modelo de aprendizaje social: basado en un aprendizaje por medio de todas aquellas experiencias interpersonales sostenidas por las consecuencias sociales a causa del comportamiento.

  • Modelo de la teoría de roles: basado en el papel desarrollado por las expectativas del propio rol y el de los demás.

  • Modelo conductista: basado en la capacidad de ejecutar conductas que ejercen un refuerzo positivo a otros o que eviten los castigos.

  • Modelo de psicología clínica: basado en la capacidad social de expresar sentimientos, pensamientos y creencias, en ausencia de ansiedad, es decir, con asertividad, libertad emocional, autoafirmación, autonomía y seguridad.

  • Modelo de percepción social: basado en los procesos selectivos de la información en la interacción social y la posterior interpretación.

5.     Conclusiones

    Las habilidades sociales más destacadas que el profesor de Educación Física debe poner a disposición de su alumnado, en el proceso de enseñanza/ son:

  • Las habilidades para manejar sentimientos, conociendo y expresando los suyos propios y aceptando y compartiendo los de sus alumnos, mejorando la interacción entre ambos y las vías comunicativas para un mayor resultado de su acción docente.

  • Las habilidades alternativas a la agresión, fomentando la petición de permisos, la colaboración entre iguales, la defensión de los derechos, el autocontrol, el respeto, la negociación, impedir el ataque físico…

  • Las habilidades para el manejo del estrés, respondiendo al manejo de situaciones difíciles o embarazosas, fomentando la deportividad, responder positivamente a la persuasión, manejar las acusaciones y la presión del grupo, dar respuesta adecuada al fracaso, manejar favorablemente los mensajes contradictorios…

  • Las habilidades de planificación, fomento de las metas, acorde con las posibilidades y limitaciones, así como la toma de decisiones, la recogida de información, la toma de la iniciativa, la ordenación de los problemas que aparecen según su importancia y potencializar la concentración para la realización de tareas o actividades propias de la disciplina.

    A modo de resumen, el profesor de Educación Física, dado su contexto y la exposición diaria que realiza ante sus alumnos, debe de adquirir determinadas actitudes sociales para transmitir adecuadamente los conocimientos a sus alumnos, es decir, debe de ser un buen conferenciante y atender a determinadas reglas para conseguirlo. Estas son:

  • Naturalidad y sinceridad, para ser uno mismo y decir lo que cree.

  • Tener entusiasmo y energía para transmitir la información al alumnado.

  • Tener confianza en sí mismo para transmitirla e inspirarla en los alumnos.

  • Saber escuchar y hablar con fluidez, adecuando la velocidad y el tono de voz, evitando perturbaciones para no causar sensación de inseguridad, sino de competencia y de interés, invitando al discente a la escucha.

    Ibarra (2006) afirma que el rol del profesor ha sufrido numerosos cambios condicionados por la sociedad actual, debiendo ejercer de mediador y facilitador de herramientas para que los alumnos construyan sus propios conocimientos y no ser un mero transmisor de la información.

    Por ello es necesario que el profesor de Educación Física tenga no solo una formación específica del área que desempeña sino una formación pedagógica que le ayude a tener una comunicación cercana, una relación efectiva y cognoscitiva, llegando a desarrollar las habilidades sociales y académicas para el dominio de sus clases, tanto del contenido como del alumnado. La capacidad pedagógica del docente se refleja en el uso de estrategias y estilos de enseñanza adecuados en cada momento madurativo de su alumnado.

Bibliografía

  • Bimbela Pedrola, J. L. y Navarro Matillas, B. (2007). Cuidando al formador. Málaga: Ed. EASP.

  • Birkenbihl, M. (2003). Formador de formadores. Madrid: Editores Spain Parainfo, S.A.

  • Caballo, V. E. (2009). Manual de evaluación y entrenamiento de las habilidades sociales. Madrid: Siglo XXI.

  • Durkheim, E (1971). Educación como socialización. Salamanca: Sígueme

  • Goldstein, A.P. y col. (1989). Habilidades sociales y autocontrol en la adolescencia. Barcelona: Martínez Roca.

  • Habilidades emocionales y de comunicación. Granada: Junta de Andalucía

  • Ibarra, L. (2006). El Rol del Profesor. La Habana: Universidad de la Habana.

  • Kelly, J.A. (1992). Entrenamiento en las Habilidades Sociales. Bilbao: Biblioteca de Psicología.

  • Meichenbaum, D., Butler, L. & Grudson, L. (1981). Hacia un modelo conceptual de competencia social. En J.M. Smye (Comp.), Competencia Social. Nueva York, Guilford Press.

  • Monjas, M. y González, B. (2000). Las habilidades sociales en el currículo. Madrid: Centro de Investigación y Documentación Educativa-CIDE.

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