Evaluación de la fuerza en la escalada deportiva.
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http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 5 - N° 21 - Mayo 2000 |
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En la siguiente gráfica observamos los resultados de la prueba que nos mide la fuerza isométrica de los dedos. El 60% de los escaladores fue capaz de realizar la prueba utilizando el agarre más pequeño, mientras que ninguno de los sujetos del grupo de deportistas logró realizar la prueba utilizando este agarre, ni el siguiente más ancho. Sólo un 14 % del grupo de deportistas pudo realizar el test, aunque en su manera más sencilla.
La siguiente gráfica nos muestra los resultados de la prueba de medición de la fuerza-resistencia genérica (intervención simultánea de los grandes grupos musculares), en ella podemos ver que el grupo de deportistas que practican otras modalidades es claramente superior al grupo de escaladores.
Los valores conseguidos en la prueba de fuerza-resistencia específica, referida a los grupos musculares que intervienen en los movimientos de agarre en la escalada, nos revelan una clara superioridad en favor del grupo de escaladores, que logran mantenerse en el test durante 2min, 48 seg. frente al minuto y medio del grupo de deportistas.
La gráfica del test de fuerza dinámica (dominadas en un minuto), nos muestra una clara superioridad del grupo de escaladores frente al otro. En algunos casos se ve una diferencia muy grande, incluso entre los mismos escaladores.
La gráfica correspondiente a los resultados de la prueba de recuperación ante el esfuerzo (referida al esfuerzo de los músculos del antebrazo y flexores del brazo), nos muestra una diferencia muy significativa a favor del grupo de escaladores. Éstos logran una media de 20 series de 5 dominadas con recuperación incompleta, frente a las 8 series que logran los sujetos del otro grupo. Individualmente se observan unas diferencias grandes entre los sujetos de ambos grupos; en el grupo de escaladores los resultados oscilan entre las 165 series del sujeto que logra la más alta puntuación y las 6 del que menos y en el de los deportistas los resultados oscilan entre las 18 y las 4 series.
3. ConclusionesAnalizando los resultados obtenidos en este estudio, orientados a la determinación del perfil del escalador medio en los aspectos referidos a la fuerza muscular, se ha llegado a las siguientes conclusiones:
La fuerza máxima genérica de los diferentes grupos musculares no es significativamente mayor que la de los deportistas que practican otras modalidades deportivas. Se ve solamente cierta superioridad en los grupos musculares del tren superior.
Los deportistas que practican otras modalidades tienen una mayor fuerza máxima en los grupos musculares de las piernas.
Los escaladores presentan valores significativamente más altos en las pruebas de medición de la fuerza máxima específica en brazos, antebrazos y dedos.
Los deportistas que practican otro tipo de deportes presentan valores superiores en la fuerza-resistencia genérica, ante ejercicios globales en los que intervienen todos los grandes grupos musculares.
Los escaladores presentan una fuerza-resistencia específica mucho mayor que el otro grupo de estudio en lo referente a ejercicios de brazos, antebrazos y dedos.
El grupo de escaladores dobla los resultados en el test de fuerza dinámica al grupo de deportistas, en lo referido a dedos, antebrazos y flexores de los brazos.
Los escaladores presentan una recuperación ante el esfuerzo claramente superior ante ejercicios de dedos, antebrazos y flexores de los brazos.
Se observan en este mismo grupo resultados bastante altos en los valores de fuerza relativa (en relación al peso corporal), sobre todo en los ejercicios en los que se involucran los grupos musculares del antebrazo y flexores del brazo, en los cuales mueven cargas equivalentes al 118% de su peso en la máquina de dorsales y del 160% en el test de fuerza máxima específica (peso corporal más carga, en tracción sobre regleta de tres falanges).
Los escaladores que alcanzan un mayor nivel de dificultad en pared son los que obtienen mejores resultados en los tests, por lo que se puede deducir que un correcto entrenamiento de estas capacidades unido a un adecuado trabajo en pared nos ayudará a mejorar el nivel de dificultad en la escalada.
Bibliografía
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revista digital · Año 5 · N° 21 | Buenos Aires, mayo 2000
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