Una mirada desde el ajedrez al baloncesto A look from chess basketball |
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*Licenciado en Tecnología de la Salud en Terapia Física y Rehabilitación **Licenciado en Cultura Física y Deporte. Entrenador deportivo Entrenador superior de baloncesto, de categorías juveniles del Estado Vargas (Venezuela) |
Orlando del Portal Beyries* Lic. Oscar José Vizcaya** |
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Resumen En el ajedrez la acción de atacar desde la defensa es una conocida estrategia que consiste, esencialmente, en movimientos de distracción suficientemente pensados para que el contrario no pueda ver por dónde va el peligro. Para ello, la observación del juego para pensarlo sobre la base de las alternativas posibles, ayuda al proceso de anticipación en cuanto a las soluciones, tanto para propuestas defensivas como para las ofensivas del equipo rival. Si se asumen las coincidencias tácticas entre el ajedrez y el baloncesto, entonces, lo ideal sería que se pensara detenidamente el juego o más bien las acciones del juego, antes de efectuarlas. Claro está, en el baloncesto, la rapidez con que se piense y se reaccione, lo diferencian del ajedrez, que permite una observación y una reacción con mucho más tiempo. De cómo entrenar en la capacidad de anticipación del juego, trata este artículo. ¿El objetivo? Es poder jugar un partido que antes nos hemos imaginado. Palabras clave: Baloncesto. Ajedrez. Observación Alternativa.
Abstract In chess the action of attacking from the defense is a know strategy. That consists essentially in distraction movements thought enough so the opposite cannot see which way the danger is going. For that, the observation of the game to think about the basics of possible choices helps the process of anticipation of solutions as well for the defense or the offensive of the rival ream. If the tactical coincidences between chess and basketball are assumed, then the ideal would be to think thoroughly the game or rather the actions of the game, before bringing them about. Of course, in basketball the speed or thinking and reaction differ of that in chess, which allows an observation and reaction with much more time. On how to train in the capacity of anticipation of the game try this article. The objective? To play a game that prior to we have imagined. Keywords: Basketball. Chess. Observation. Alternative.
Recepción: 05/08/2015 - Aceptación: 12/09/2015
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EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 20, Nº 208, Septiembre de 2015. http://www.efdeportes.com/ |
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Introducción
Hay detalles que son fundamentales en el tratamiento de la observación del juego de baloncesto: La visualización: al imaginar lo que deseamos, creamos en el cerebro los circuitos para funcionar, entrenamos nuestra propia imaginación, la observación nos ayuda a jugar antes para disfrutar después. Esto educa al jugador en la utilización de la información y fomenta su imaginación y posterior puesta en práctica. Trabajar con metas, objetivos y finalidades a corto, mediano y largo plazo. La meta puede ser lograr defender de una manera determinada, la suma de metas es lo que nos da la finalidad.
La transmisión de la información es de vital importancia, si tu no dices y el no hace, es que tu no dices, sin embargo, existe falta de comunicación, en este caso es que la velocidad, intensidad y momento no son los adecuados.
La observación de juego nos ayuda a abrir puertas medio cerradas o cerradas, si con todo lo que sabes, con el cómo eres, con el cómo juegas, con todo lo que has conseguido hasta aquí, es el momento de reforzarse, empezar a usar lo que no se sabe; trabajar por lo que aún no se es; entrenar en lo que no se hace para algún día ampliar el norte y escalar a nuevas posiciones en el juego.
Si se asumen las coincidencias tácticas entre el ajedrez y el baloncesto, entonces, lo ideal sería que se pensara detenidamente el juego o más bien las acciones del juego, antes de efectuarlas. Claro está, en el baloncesto, la rapidez con que se piense y se reaccione, lo diferencian del ajedrez, que permite una observación y una reacción con mucho más tiempo.
Desarrollo
Del pasado, al presente y al futuro: la observación de juego nos permite adoptar acciones en el presente, para aprovechar lo mejor del pasado y con el objetivo de alcanzar el futuro deseado: unir las tres dimensiones, gestionar expectativas, aprender del pasado, encontrar el camino, saber antes de caminar como es el camino, son funciones de la observación. A veces la experimentación de cuando algo nos sucede a veces en la vida y creemos haberlo vivido antes. Un ejemplo válido y clásico en el baloncesto es cuando pedimos un tiempo muerto y damos instrucciones a nuestros jugadores sobre diversas situaciones de juego; si el jugador no es capaz de hacerlo a una velocidad alta pero controlada, no se obtiene el éxito deseado.
Atacar desde la defensa
Una buena parte de la estrategia utilizada por el baloncesto, hace tiempo que se utiliza en el ajedrez. En el mismo, se ataca desde la defensa. Esta estrategia que se utiliza en el ajedrez y que consiste en el engaño de mostrar una acción de juego para hacer otra; guardarse fichas; hacer movimientos de distracción para no mostrar por dónde va el peligro; empezar haciendo una cosa para luego hacer otra acción de juego, es vital para el resultado final.
Sin embargo, un jugador no es un peón. El jugador interpreta y actúa, anticipando lo que el otro va hacer, limitándole, conociéndole. La intuición con el inconsciente adaptativo nos hacer tomar decisiones en milésimas de segundos, unas veces más acertadas que la reflexionadas, pero la acción de un deporte como el baloncesto que se juega en equipo, al contrario que el ajedrez, permite que la piezas se muevan casi a la vez de manera sincronizadas , con velocidad, intensidad e interacción.
A pesar de las diferencias, podemos comprobar que existen coincidencias desde el punto de vista táctico y también diferencias, como por ejemplo que nos encontramos ante un deporte de dos dimensiones y secuencial (ajedrez) contra uno de tres dimensiones y simultáneo (baloncesto).
¿Quién va antes, la defensa o el ataque? ¿Quién dirige a quién?
Una bonita guerra de engaños y trucos donde el entrenador es el protagonista: la práctica de enseñar una cosa para hacer otra a nuestros jugadores, enseñarlos a defender sorprendiendo, a los ataques sorpresivos al rival, entre otras, son tácticas que se enseñan en la práctica ideal del baloncesto actual. Es el jugador, son su inteligencia intuitiva, con los ejercicios y el entrenamiento diario, quien desarrolla su capacidad de anticipación y es capaz de ver, antes de que se produzca, una posible acción adversa y actuar para que no se produzca.
El baloncesto cada vez es más rápido. Se han visto entrenadores que creen que se puede entrenar esta anticipación, esa intuición, y luchan incluso ahora para que la toma de decisiones tanto en ataque o en defensa sea lo más activa posible; se ha visto en la comunidad de entrenadores que no hablan de botar, pasar y tirar, sino que entrenan en criterios para dejar la libertad al jugador de tomar la mejor decisión, en consideración planteada en el juego.
Toma de decisiones en defensa
Desde la más básica, en la que un jugador defiende otro y le obliga a ir a la banda.
Si un defensor después de estudiar que el ataque siempre empieza por la derecha y le obliga a empezar por la izquierda.
En situaciones donde el atacante elige entre dos bloqueos, negarle uno y que sólo tenga opción al segundo, pudiendo anticipar esa salida.
Ver a jugadores norteamericanos, españoles, serbios, rusos, sudamericanos, entre otros, cambiar los desplazamientos defensivos realizándolos corto-largo, moviendo primero el pie base y luego el pie hacia dónde va logrando cerrar caminos y obligando a cambios de mano que pueden ser motivos de 2c1 desde el lado débil.
Esta idea sucede mucho en el poste bajo, cuando el pívot echa el balón al suelo y le llega el 2c1 desde el otro lado.
Son situaciones de toma de decisiones en defensa que aunque puedan ser del propio jugador, en la mayor parte de los casos son decisiones colectivas y de mucha influencia del entrenador.
No obstante, hay una toma de decisiones más individuales, como la intuición de jugadores estelares de estar en un sitio antes de que llegue el pase, o la de jugadores habilidosos que para esconderse en las líneas de pase y aparecer, o abandonar a su defensor para atacar al balón, cerrar caminos para que no pueda jugar, entre otras acciones.
¿Jugar con conceptos o con movimientos?
Está claro que el baloncesto actual demanda de mucha mente. Una de las palabras clave es la anticipación, definida como capacidad de anticipar a lo que va a suceder.
Jugar por conceptos significa que el equipo sabe lo que sus compañeros van a realizar, teniendo la posibilidad de anticipar lo que va a suceder y facilitar así su lectura de juego. Pese a todo, las tendencias actuales se dirigen hacia una fusión de los dos. ¿Cuántas veces hemos visto finalizar un movimiento con juego por conceptos? ¿O empezar con juego por conceptos y enlazarlo con movimientos?
Muchos movimientos no tienen un único camino pues hay diversas formas de utilizar diversos caminos y tener algo en común llegar a lo que se buscaba, son muchos movimientos tienen múltiples caminos de elección: romperlo en determinadas situaciones de ventajas generando otros que se realizan con juegos por conceptos, o viceversa.
Juego por conceptos y por movimientos cada vez van más de la mano, por eso deberíamos hablar de estructuras de juego que envuelven a ambas.
Criterios de adaptabilidad
La suma de las partes es superior al todo: 1+1 = 3
Bajo esta premisa, se indica que los movimientos /juegos por conceptos se hacen y adaptan a los jugadores. El todo envuelve a los jugadores para que estos crezcan: 5 = (1+1+1+1+1)
El jugador se adapta a los movimientos /juego por conceptos que el entrenador utiliza. En los primeros se facilita al jugador que desarrolle su juego y se le da mucha importancia al mismo. ¿Es posible adaptarse a todos los jugadores? Intentando responder esta cuestión se entraría en detalles de definición de roles de juego.
Con el juego por conceptos se permite a los jugadores implementar su juego con situaciones que les exigen crecer y utilizar otros recursos.
El equilibrio y saber utilizar ambos aspectos es la clave, pero como todos sabemos, el equilibrio en cada equipo está en un punto distinto, y cuando parece que ya se ha encontrado, éste se vuelve a desestabilizar, obligando a recorrer el camino sin final en busca del equilibrio, para que el juego de un equipo siempre conduzca a algo positivo. Será mal síntoma el día que un entrenador diga que ya está todo preparado o todo hecho. Se busca la perfección continuamente.
Capacidades de los jugadores
En un baloncesto cada día más global, donde muchos equipos realizan los mismos movimientos de manera diferente, la riqueza del juego pasa por la capacidad de los jugadores de crear a partir de las facilidades que le dan las estructuras de juego. Entre ellas:
La capacidad de respuesta que el equipo genera a todo tipo de soluciones defensivas que presenta el rival.
La capacidad de actividad que se refiere a la relación directa que hay entre velocidad de acción (del propio movimiento, de las respuestas) y el "timming" de juego.
La capacidad de coordinar e interconectar todas las ideas tácticas, para nos den los resultados requeridos.
La capacidad de sorprender: en el baloncesto actual, donde la palabra anticipación es fundamental, jugar por series; con movimientos mudos después de tiempos muertos; después de saques de centro, esconder un movimiento; iniciar el movimiento de varias maneras diferentes, resulta fundamental.
Y la defensa, ¿qué hace la defensa?
Se tienen entrenadas las posibles respuestas a las situaciones de juego que se pueden encontrar, las tenemos integradas en nuestro repertorio, pero, ¿a qué velocidad? Porque, una cosa es saber lo que hay que hacer y otra muy diferente es hacerlo a una velocidad de ejecución elevada. Puede suceder que la defensa mande sobre el ataque, pero, ¿está el jugador capacitado para resolver los problemas que la táctica colectiva actual presenta?
Muchos equipos hacen "lo mismo", esta es la famosa frase. Cada vez más equipos utilizan los mismos movimientos; sin embargo, ¿acaso no hay mucha gente que conduzca?
La calidad de un movimiento, de un juego por conceptos, la dan los jugadores. El cómo interpreta la misma pieza que todo el mundo interpretó alguna vez y al igual que Fernando Alonso, a qué velocidad son capaces de hacerlo.
Pero la interpretación (el cómo la hacen), la velocidad (con qué rapidez) es lo que realmente valida que un recurso, que en principio es semejante (el qué) y cuando se realiza con diferentes jugadores y a diferentes velocidades parece muy distinto.
La importancia de los pequeños detalles, la gran importancia de los jugadores.
El jugador o los movimientos
Muchas veces este debate puede parecer un pulso entre el entrenador y los jugadores. Nada más lejos de la realidad. Un entrenador debe marcar los límites de la libertad, pero dentro de ese campo, debe dejar libertad a la creatividad del jugador (dejar espacios para que el jugador se realice). Tanto si es una u otra la elección, una cosa es clara: Sin jugador no hay movimientos. A pesar de ello, muchos entrenadores defienden que el movimiento está antes que el jugador en la escala de prioridades, y esgrimen para ello que el equipo está antes que el individuo; lo que no se dice es que los movimientos son parte de su propio ego. Lo importante, por tanto, es que el entrenador facilite y ayude al jugador a poder realizar todo su juego. Los movimientos deben ayudar al equipo y dar ventajas y facilidades a los jugadores para poder realizar su juego; ahora bien, esta relación no es estática ya que los jugadores mejoran los movimientos y los movimientos hacen que los jugadores sean mejores
¿Quién se defiende de quién? ¿Quién ataca a quién?
Suele decirse que el ataque es defendido y por qué no, que la defensa ataca al ataque, o que sea el ataque quien se defienda de la defensa. Aquí hay tres conceptos que se mezclan para ver quién manda sobre quien, o quien va antes. La primera es un criterio de calidad de ejecución: una buena defensa puede anular a un ataque o viceversa, pero, ¿y si los dos son buenos?
Entonces se entraría en determinar quién es capaz de realizar su parcela mucho más rápido, pero, ¿Y si en el último caso la calidad y la velocidad son semejantes? Para ello hay un factor de corrección que resulta clave, que es la capacidad de sorprender, engañar la lectura del contrario desde el punto de vista ofensivo o defensivo.
Al final lo importante es jugar y tener lecturas rápidas y sencillas (intuición), todo lo que se ha estado viendo: defensas mutantes, equipos que defienden en zona durante los ocho primeros segundos de ataque del rival para luego ajustar en individual, defensas individuales que en los últimos segundos cambian en todos los bloqueos, defensas de evolución que empiezan en individual para encerrarse en zona 2-3, para salir en últimos segundos a mixta Triángulo+ 2 o caja +1… Ante esto, ¿cómo atacaría un equipo? ¿Cómo podría enfrentarse a todo este mundo de defensas cambiantes?
Conclusiones
El desarrollo del juego de baloncesto, tal cual sucede en el juego de ajedrez actualmente, depende del grado de inteligencia que debe tener el jugador y es por ello que recae en la responsabilidad del entrenador la ubicación y la orientación a los jugadores en las diversas estrategias de juego con procesos lógicos de aprendizaje.
Bibliografía
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Giles, Marcelo y equipo (2007). “Las prácticas de enseñanza del deporte: del alto rendimiento a la formación, el camino inverso. Informe técnico.” Código: 11H/419. Programa de Incentivos a la Investigación del Ministerio de Educación de la Nación, Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, Universidad Nacional de La Plata.
Giles, Marcelo y equipo (2008): “Las prácticas de enseñanza del deporte: del alto rendimiento a la formación, el camino inverso. Recorrido metodológico.” Ponencia presentada en las “1ras Jornadas de Cuerpo y Cultura”, Departamento de Educación Física, Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, Universidad Nacional de La Plata.
Giles, Marcelo y equipo (2008). “Las prácticas de enseñanza del deporte: del alto rendimiento a la formación, el camino inverso. Aproximaciones teóricas.” Ponencia presentada en las “1ras Jornadas de Cuerpo y Cultura”, Departamento de Educación Física, Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, Universidad Nacional de La Plata.
Krzyzewski, Mike (1987). Duke’s Motion Offense. EEUU: Duke University Press.
Weineck, Jurgen (2005). Entrenamiento Total. Barcelona: Editorial Paidotribo.
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