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Introducción

    “La Educación es mucho más que Educación Física, pero es muy poco sin ella”. (Hammeleck, 1976)

    Con este pensamiento, intencionalmente las autoras han querido comenzar este artículo, porque como profesionales de la Cultura Física comparten y defienden lo que de manera implícita aborda dicho comentario.

    No es secreto para muchos, la influencia que como disciplina de la Pedagogía tiene esta asignatura dentro del Plan de estudios desde las edades iniciales hasta la Educación Superior. Sin embargo, sin temor a pifias, extendería su impacto hasta la tercera edad o el adulto mayor, pues en determinados contextos foráneos, se brindan servicios de Educación Física Comunitaria para grupos etarios muy variados, más allá de los concebidos en los diferentes subsistemas del sistema nacional de enseñanza en Cuba, o sea, se hace más amplio su alcance, aunque haya similar concepción en cuanto a su esencia.

    Para ello ha de verse como una disciplina que se nutre de muchas ciencias, entre ellas, la Pedagogía. Dicho sea de paso, esta última aborda y aporta entre otros aspectos, los relacionados con los componentes del proceso enseñanza- aprendizaje, también conocidos como categorías de la Didáctica y de los cuales se sirve la Educación Física.

    Dichas categorías casi siempre suelen agruparse en dos dimensiones, los componentes personales: profesor, alumno, grupo (estos últimos según la interacción) y entre los componentes no personales se hallan: el objetivo, contenido, el método; también los medios de enseñanza, las formas de organización y la evaluación.

    Precisamente es hacia las formas de organización en la clase de Educación Física que se centra este estudio, o más que todo, la invitación que hacen las autoras al análisis y reflexión por cada lector a partir de determinados ejemplos que se mostrarán más adelante.

    Es conocido que desde la Didáctica, las formas de organización, responden a ¿cómo organizar el enseñar y el aprender? Puede defenderse la premisa de que la forma organizativa, como componente del proceso de enseñanza-aprendizaje, o categoría didáctica, está llamada a ser el componente integrador.

    Se condensa en el modo de interrelación del resto de los componentes, sin dejarla de tener en cuenta por supuesto, dígase componentes personales y no personales del proceso. Le corresponde a las formas organizativas, reflejar las relaciones que se suscitan entre profesor y alumnos, en una dimensión vital, con dos categorías inherentes: la espacial y temporal del proceso de enseñanza-aprendizaje.

    Para ello se dispone del criterio de Álvarez de Zayas (1999, p. 12) quien la define como: “Componente del proceso que expresa la configuración externa del mismo como consecuencia de la relación entre el proceso como totalidad y su ubicación espacio-temporal durante su ejecución, a partir de los recursos humanos y materiales que se posea, la forma es la estructura externa del proceso, que se adquiere como resultado de su organización para alcanzar el objetivo.”

    Para dicho autor la forma alcanza dos dimensiones, la espacial que comprende la relación entre el docente y los alumnos o la relación solo entre alumnos. En cuanto al aspecto temporal se concreta por los niveles de sistematicidad estructural.

    Es el marco externo que se produce a partir del desarrollo de condiciones educativas que favorecen la relación entre los sujetos en el proceso pedagógico para lograr los objetivos educativos y que establecen el lugar, tiempo, orden, sucesión e interacción necesarios entre los distintos componentes del proceso. (Calzado, 2004)

    Otra definición la brinda Labarrere (1988) es “Forma de organización de la enseñanza es: las distintas maneras en que se manifiesta externamente la relación profesor-alumnos, es decir, la confrontación del alumno con la materia de enseñanza bajo la dirección del profesor.”

    En síntesis, se considera la forma como el orden que adopta el proceso para alcanzar el objetivo, en el que se destaca primero que todo la relación profesor estudiantes.

    Después de haberse hecho una selección de algunas definiciones relacionadas con las formas organizativas, es interés de las autoras, exponer qué plantea la Gimnasia Básica al respecto.

    Desde la Gimnasia Básica se define la clase de educación física como la forma más conocida y frecuente en la que ordinariamente participan masivos grupos de alumnos. Es por ello que no puede dejarse a la espontaneidad la organización de los alumnos, se precisa de manera encomiable su planificación, minuciosa e integral.

    Es cierto que las formas de organización para la realización de ejercicios físicos han sido objeto de análisis por estudiosos del tema, en vista de posibilitar una utilización racional del tiempo de trabajo en la clase, una correcta adecuación de los contenidos, por supuesto, en consonancia con las condiciones materiales y la meta o propósito a lograrse.

    Según consultas bibliográficas realizadas, puede definirse como formas básicas organizativas: formas que se utilizan en las clases de Educación Física para organizar al grupo de alumnos, atendiendo a la distribución, colocación, ordenamiento y las formas de proceder al realizar las actividades programadas. (Colectivo de autores de EIEFD, p. 23)

    Para el colectivo de autores antes citado, estas formas básicas de organización se clasifican según la:

1. Distribución o división

2. Colocación o formación

3. Ordenamiento o alineación

    La primera de ella responde a la interrogante: ¿cómo están los alumnos para realizar los ejercicios? Es decir contempla que puedan estar separados o integrados en la actividad práctica.

    Ejemplos de esta tipología de forma organizativa son: el grado, equipos o grupos, secciones (simples o de rendimiento), parejas, tríos e individual.

    De igual modo ante la pregunta: ¿Cuál es la relación espacial de los practicantes hacia el área de práctica o el aparato a utilizar? Entonces puede mencionarse, la segunda forma básica de organización. La misma explica que los alumnos pueden estar en filas, hileras, círculos, semicírculos, dispersos, en bloque, escalonada (9, 6, 3, lugar), etc.

    Como tercera forma básica de organización se alude la de ordenamiento o alineación y se refiere a la “relación de los alumnos entre sí y la participación de ellos para la realización de las actividades. Las formas de ordenamiento son: juntos (formación cerrada), A distancias (formación abierta) y en giros o flancos.” (p. 18)

    Del mismo modo, Fleitas (1990, p. 117) define como procedimiento organizativo: “las formas de organizar a los alumnos para proceder a realizar las actividades programadas en la clase, utilizando para ello diferentes formaciones.”

    Por lo que se hace evidente según los autores consultados que, tanto las tradicionalmente llamadas formaciones como los procedimientos organizativos, pueden constituir o constituyen formas básicas de organización. ¿Comparte la misma apreciación?

    Sin embargo, ¿la relación espacial de los practicantes hacia el área de práctica o el aparato a utilizar, es lo que me garantiza el proceder práctico de la actividad? Entonces, bien pudieran llamarles a las filas, hileras, círculos, semicírculos, dispersos, en bloque, escalonada (9, 6, 3, lugar) procedimientos organizativos en la Educación Física. ¿Cree válido esta reflexión? Analice lo que antes aseveraron los autores consultados.

    De igual modo, atendiendo a la clasificación de (Fleitas, 1990) los procedimientos organizativos de trabajo son el individual y en grupo, este último abarca el procedimiento frontal, las secciones, estaciones, circuitos, onda u ola y recorrido; pero, ¿en determinadas actividades prácticas de Educación Física pudiera darse el caso en que varíen su función, es decir, los llamados procedimientos organizativos pasarían a ser formas organizativas y viceversa? Esta interrogante la comparten las autoras para que cada lector analice y reflexione sobre la temática en cuestión.

    Asimismo si se tiene en cuenta la definición de Fleitas, I. (1990, p. 59) en relación con el término formaciones: “es la disposición de alumnos o grupo de ellos con la finalidad de poder trabajar en grupo y ordenadamente. Pueden ser abiertas, cuando el grupo se mantiene formado en filas, hileras o círculos con intervalos normales entre ellos, y cerradas cuando estando en filas, hileras o círculos, se mantienen con intervalos cerrados” entonces puede plantearse que dichas disposiciones ocurren una vez que se han determinado las formas organizativas a emplearse.

    Antes de ejemplificar las actividades prácticas que proponen las autoras, es importante conocer que en cada una de ellas, una vez dada la orden según la creatividad del docente y en consonancia con un correcto uso del idioma, entonces están creadas las condiciones para explicarles cómo han de proceder para la ejecución práctica.

Ejemplos de actividades desde la clase de Educación Física

Actividad Nº 1

• Forma organizativa: la sección simple, organizándose a los alumnos por el sexo.

• La tarea consiste en: Ejecutar saltillos con ambos pies.

• Voz de mando: Por sexo a agruparse, o en Dos secciones por sexo, a agruparse) Entonces la sección Nº 1 procederá a la realización de la tarea desde un círculo y la sección Nº 2 procederá desde una hilera.

• La sección 1 (chicas): En un círculo con brazos laterales y manos sobre los hombros de sus compañeras, realizarán los saltillos.

• La sección 2 (chicos): En una hilera con las manos sobre los hombros de su compañero, realizarán los saltillos.

Actividad Nº 2

• Forma organizativa: Estaciones, organizándose a los alumnos de acuerdo con el total del grupo. Cantidad de alumnos: 25.

• Voz de mando: En cinco estaciones a agruparse. Entonces una vez conformados los subgrupos, el docente explicará cómo ha de procederse en cada estación para la realización de la tarea.

  • La estación Nº 1: Desde dispersos en su espacio, procederán a saltar con suizas. (Cada alumno con una)

  • La estación Nº 2: Desde una fila procederán todos dados de manos, deben correr una distancia determinada (ida y vuelta).

  • La estación Nº 3: Desde un círculo todos cogidos de manos, procederán a empujarse a la vez.

  • La estación Nº 4: Desde una hilera procederán a saltar por encima de un banco sueco, todos a la vez.

  • La estación Nº 5: Desde un semicírculo procederán a lanzar y atrapar la pelota en el lugar.

Actividad Nº 3

• Forma organizativa: Ondas, organizándose a los alumnos de acuerdo con el total del grupo. Cantidad de alumnos: 25

• Voz de mando: En onda a agruparse (con igual cantidad de participantes).

  • Una vez conformada la Onda, con igual cantidad de filas e hileras, entonces se definirá cómo proceder a la ejecución práctica de la actividad. Los alumnos pueden proceder desde las filas, o desde hileras, según defina el docente.

Actividad Nº 4

• Forma organizativa: Circuito, organizándose a los alumnos de acuerdo con el total del grupo.

• Voz de mando: En un circuito de 6 zonas a agruparse. Una vez conformados los subgrupos, entonces se explicará cómo proceder para realización práctica en cada zona.

  • La zona Nº 1: Desde dispersos se desplazarán en cuadrupedia invertida.

  • La zona Nº 2: Desde parejas realizarán peleas de enanos (gallos).

  • La zona Nº 3: Desde un círculo realizan abdominales de tronco.

  • La zona Nº 4: Desde una hilera procederán a saltar con un pie bordeando obstáculos.

  • La zona Nº 5: Desde un semicírculo procederán a realizar planchas (apoyo mixto al frente)

  • La zona Nº 6: Desde una fila caminarán en semicuclillas.

  • La zona Nº 7: Desde tríos se procederá a transportar a un compañero. (La silla)

  • La zona Nº8: Desde cuartetos se agarrarán por la cintura evitando que avance el alumno que está delante.

    ¿Comparte los criterios de las autoras del artículo o difiere en su punto de vista?

    De cualquier manera el debate está abierto, solo la propuesta se hizo con un solo fin: remover las neuronas, intranquilizarlas y provocar reflexiones en torno al contenido escogido.

Bibliografía

• Álvarez de Zayas, C. (1999). La escuela en la vida. La Habana: Editorial Pueblo y Educación.

• Álvarez Ordaz, I. (1983). Los ejercicios de organización y control, material mimeografiado. La Habana: Departamento de Gimnasia. ISCF.

• Brikin, A. T. y otros (2008). Gimnasia. La Habana: Editorial Pueblo y Educación.

• Colectivo de autores (2003) Gimnasia Básica. Apuntes para la asignatura. (Compilación). La Habana: EIEFD.

• Fleitas Díaz, I. y otros (1990). Teoría y Práctica General de la Gimnasia. La Habana: Ediciones ENPES.

• García Otero, J. Didáctica. Temas complementarios. (Compilación). Facultad de Ciencias de la Educación. Universidad Pedagógica “Enrique José Varona”.

• Zilberstein Toruncha, J. Silvestre Oramas, M. Una didáctica para una enseñanza y un aprendizaje desarrollador. ICCP.

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EFDeportes.com, Revista Digital · Año 20 · N° 207 | Buenos Aires, Agosto de 2015   Lecturas: Educación Física y Deportes - ISSN 1514-3465 - © 1997-2015 Derechos reservados