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Introducción

    La violación de las normas de convivencia, el maltrato al entorno, a la propiedad social y las conductas impropias en lugares públicos, forman parte de la convivencia ciudadana cubana en la actualidad; por lo que la lucha por el bienestar de nuestro pueblo y la formación ciudadana de las nuevas generaciones es un objetivo primordial.

    En Cuba, a través del tiempo, se realizan disímiles esfuerzos por parte de la comunidad educativa y la sociedad en general con el propósito de perfeccionar las conductas ciudadanas del pueblo y en especial de la niñez, entre ellos: libros de texto para las escuelas, formación de docentes, talleres para capacitación de padres, programas socio-políticos que impulsan las diferentes instituciones entre los que se destacan el INDER con los proyectos recreativos comunitarios y las distintas publicaciones y programas televisivos que tributan a este fin.

    En el presente trabajo se abordan algunos aspectos que revelan la significación social que tiene la Recreación Física Comunitaria en la formación ciudadana de los jóvenes, respondiendo a la demanda tecnológica del Sectorial de Deporte en el municipio Bayamo especialmente en el Área Funcional de Recreación. Diversos estudios demuestran la presencia de múltiples manifestaciones de violencia e indisciplina social en Cuba destacándose entre ellos Artiles de León (1998), Proveyer (2000 y 2002). Igualmente, Díaz Tenorio (2002), estudios de juristas como Martínez (2001), Turiño y otros (2001) y Reyes Blanco (1999) reconocen las indisciplinas sociales como un problema por la incidencia de delitos, la delincuencia juvenil y los menores con problemas de conducta.

    En la prensa nacional se publican trabajos periodísticos que señalan la presencia de indisciplinas sociales en el contexto social cubano, lo que denota la insuficiente formación ciudadana en un grupo significativo de jóvenes aún cuando superan el duodécimo grado de enseñanza.

    En nuestro medio cultural y académico, aún resultan insuficientes los estudios relacionados con el comportamiento social de los individuos. Se destacan los trabajos de Socorro (1999), Hernández Álvarez, (2006), Velázquez Buendía (2007), quienes abordan el tema de la prevención de la violencia en el deporte, no así en una de sus principales causas: la insuficiente formación ciudadana.

    En la literatura universal y cubana se destacan los objetivos educativos y socializadores, de la Recreación Física comunitaria no obstante en la comunidad “Palmarito” del municipio Bayamo se observa:

• Escasa definición y comunicación de normas y expectativas de conductas por los jóvenes practicantes de actividades físico- recreativas.

• Actitudes y conductas familiares favorables a las indisciplinas sociales en los jóvenes.

• Insuficiente preparación teórico metodológica de los profesores para, desde la recreación física, favorecer la formación ciudadana.

• Los programas para el desarrollo de la Recreación Física Comunitaria no cuentan con orientaciones metodológicas que sirvan de guía al profesor para favorecer la formación ciudadana.

• No existe en el combinado deportivo un proyecto de actividades físico-recreativas encaminado a favorecer la formación ciudadana.

• Actitud de rechazo a la institución escolar que limita las posibilidades de influencia educativa.

    Situación que presupone como problema CTS:

• ¿Qué significación social tiene la relación ciencia-Recreación Física Comunitaria en la formación ciudadana de los jóvenes?

    Atendiendo a las peculiaridades del problema se declara como objetivo CTS:

• Reflexionar en torno a la significación social de la relación ciencia Recreación Física Comunitaria para la formación ciudadana de los jóvenes.

Desarrollo

    El desarrollo de la sociedad actual sería impensable sin los aportes de la ciencia y la tecnología, hoy ellas influyen en los poderes políticos-militares, en los recursos humanos, en la gestión empresarial, en los medios de comunicación, en el deporte, la recreación y en especial en la formación ciudadana.

    A la luz de nuestros días y a partir de los criterios de Núñez Jover (2007) la ciencia puede ser analizada como sistema de conocimientos que modifica nuestra visión del mundo real y enriquece nuestro imaginario y nuestra cultura; se le puede comprender como proceso de investigación que permite obtener nuevos conocimientos, los que a su vez ofrecen posibilidades nuevas de manipulación de los fenómenos; es posible atender a sus impactos prácticos y productivos, caracterizándola como fuerza productiva que propicia la transformación del mundo y es fuente de riqueza.

    Después de lo anterior expuesto se infiere que la ciencia es una forma específica de la actividad social estrechamente vinculada a los fenómenos culturales, es la sociedad y su desarrollo, quien la enlaza como proceso dialéctico con la tecnología.

    Define Núñez Jover (2007) la tecnología como “el conjunto de saberes inherentes al diseño y concepción de los instrumentos (artefactos, sistemas, procesos y ambientes) creados por el hombre a través de su historia para satisfacer sus necesidades y requerimientos personales y colectivos”.

    Si bien la ciencia se ocupa de conocer y comprender los objetos y fenómenos ya existentes, la tecnología trata de crear productos y servicios que aun no existen, pero que son necesarios a las exigencias sociales.

    Consideraremos como tecnología el conjunto de conocimientos científicos y empíricos, habilidades, experiencias y organización requeridos para producir, distribuir y utilizar bienes y servicios.

    La intensión no es solo dilucidar entre muchas teorías, sino enmarcar la tecnología en el desarrollo de los procesos alrededor de los cuales se aplican los procedimientos, las acciones de los inventos e innovaciones que elabora el hombre para vivir, en este caso métodos y procesos técnicos que permiten la mayor implementación de la Recreación Física Comunitaria con todo su andamiaje educativo, midiendo sus resultados y desarrollando tecnología que facilite su implantación, con la debida formulación de proyectos.

    Para los fines del presente trabajo se asume lo expresado por Arias García (2006), cuando define tecnología como la “…actividad que utiliza los conocimientos generados por la ciencia aplicada para satisfacer necesidades mediante la producción de bienes y servicios”.

    En la actualidad vemos la amplitud que alcanza el desarrollo de las mismas, cómo se hace presente en el continuo accionar del hombre. Como bien señala Bosque Jiménez (2002), en su artículo La Educación Científico-Tecnológica en la formación Profesional del Licenciado en Cultura Física: “…la ciencia y la tecnología interactúan, de forma cada vez más compleja, con la sociedad y que estas interacciones dan lugar al surgimiento de diversas problemáticas de tipo social, económico, educacional, ético, sociológico, histórico y epistemológico que son objeto de estudio del pensamiento contemporáneo”.

    Las reflexiones antes realizadas aseguran que la formación ciudadana requiere además de los conocimientos de la ciencia, de la producción tecnológica, es decir, de las metodologías y programas como herramientas, que insertados a la práctica cotidiana de los sujetos y en especial de las nuevas generaciones permitan obtener resultados relevantes y satisfacer la necesidad de conducir el proceso a un nivel cualitativamente superior.

    Se considera necesario reflexionar en algunas definiciones aportadas por la ciencia en este campo.

    En la enciclopedia Océano se plantea que una persona es considerada “ciudadano” cuando en su conducta admite que existen otros ciudadanos en su entorno, se adapta al conjunto de normas de convivencia, lo que constituye una necesidad para que pueda subsistir la sociedad organizada, caracterizada por la cooperación y ayuda en la lucha por la existencia y adaptación al entorno.

    Toro (2001) completa esta definición agregando que es una persona capaz, en cooperación con otros de crear o transformar el orden social. Este elemento es esencial pues la ciudadanía no se reduce al proceso de socialización sino que implica la capacidad de transformar el orden social cuando este no produce dignidad.

    Pero para llegar a ser un ciudadano capaz de adaptarse al conjunto de normas de convivencia, de cooperar en la lucha por la existencia y adaptación al entorno, se requiere de una adecuada formación ciudadana acorde a las normas socialmente establecidas, de lo que se infiere que la sociedad y su conjunto de instituciones debe actuar de forma intencionada en dicho proceso.

    Balmaseda (2000) define la formación ciudadana como base y fundamento de la formación integral del hombre en el que van siendo cada vez más complejas las obligaciones ciudadanas al tener una marcada acción dirigida a la esfera volitiva del ser humano, a la esfera de la responsabilidad social, la formación de sentimientos, valores éticos y sobre todo el respeto a la individualidad.

    En la Carta Metodológica del Ministerio de Educación (1996), dirigida a metodólogos y profesores, la formación ciudadana se define como: “...la educación de una actitud responsable para una convivencia social presente y futura incluye la educación patriótica, ambiental, sexual, jurídica, moral, hábitos y normas de cortesía y el conocimiento del sistema político e institucional del país”.

    Es decir, todos aquellos elementos que dotan al sujeto de modos correctos de comportarse en la sociedad en general, ante cada una de las instituciones, sus miembros y ante las propias necesidades e intereses que como ciudadanos tienen.

    Como se aprecia en esta definición se asume la formación ciudadana como resultado de los procesos educativos en todas sus dimensiones y como socialización, elementos estos que de una forma intencionada se pueden desarrollar desde la Recreación Física Comunitaria.

    En este mismo sentido, Cuan (2001), aventura una nueva definición: “Proceso de interiorización consciente de los valores establecidos por la sociedad que se expresa en profundas convicciones en los individuos, especialmente en su forma de actuar, en su responsabilidad ante las tareas planteadas, en el cumplimiento de sus deberes y derechos ciudadanos, en el propio respeto individual como resultado de las necesidades, motivaciones e intereses que posee”.

    Esta definición se centra excesivamente en el proceso y resultado hacia el interior del sujeto pero no refleja la acción formativa desde el exterior, de la escuela, familia y comunidad con sus procesos en los que se inserta la Recreación Física Comunitaria. Para los fines del presente trabajo se utiliza esta definición, pero con la connotación de que la formación ciudadana es proceso y resultado.

    En tal sentido los valores que seamos capaces de formar y fortalecer en los ciudadanos y en especial en las nuevas generaciones desempeñan un importante papel regulador expresado en profundas convicciones, en el cumplimiento de deberes, el respeto “al otro” y a sí mismo.

    La formación ciudadana es la condición para una convivencia humana, ordenada y pacífica en una sociedad determinada, porque se sustenta en una ética que pone orden y claridad en las relaciones sociales, facilita la elección y la solución de conflictos, las relaciones de los ciudadanos entre sí en los planos de igualdad, respeto a los derechos de los demás y aceptación de deberes propios.

    En este propósito están llamadas a colaborar todas las instituciones y organizaciones con funciones educativas de la comunidad, entre las que se destacan la Recreación Física Comunitaria. Esta realiza disímiles esfuerzos con el propósito de perfeccionar las conductas ciudadanas del pueblo en general, y en especial de la niñez y la juventud en aras de mantener el equilibrio deberes-derechos ciudadanos.

    En tal sentido la Recreación Física comunitaria desempeña un rol significativo al no ser únicamente la forma agradable de pasar el tiempo libre; sino el aprovechamiento de este tiempo de forma positiva en la sociedad, de manera tal que contribuya al desarrollo de la personalidad del hombre, la recreación está ligada por tanto con la educación, auto educación, higiene física y psíquica, la diversión y la cultura en general.

    La Recreación Física Comunitaria favorece la capacidad para captar o percibir los problemas sociales desde la óptica individual, incorporándose a su solución con eficacia y conciencia de deberes y derechos ciudadanos. Beneficia el fortalecimiento de los valores identidad, tolerancia, responsabilidad y participación, tan necesarios para la formación ciudadana.

    La Recreación Física como medio de socialización puede fomentar relaciones que permitan el desarrollo pleno de cada uno a partir de sus potencialidades y necesidades en correspondencia con el modelo de sociedad a la que pertenece. En síntesis, crea condiciones que favorecen el desarrollo de una formación ciudadana entre los miembros de la comunidad y en especial en las jóvenes generaciones.

    Como bien se manejó en otro momento del presente trabajo el proceso de formación ciudadana (PFC) constituye en la actualidad, una evidencia del ascenso progresivo en el debate internacional y nacional, del compromiso consciente con el desarrollo de modos de actuación ciudadana que integren los saberes científicos con los saberes populares, para mantener una sabiduría activa, sostenedora de bienestar colectivo y fortalecedora del desarrollo social.

    Como resultado de ese debate, emana la necesidad de constituir espacios abiertos que propicien la formación de ciudadanos como participantes activos, competentes y flexibles, para enfrentar los retos actuales del desarrollo científico técnico, desde el fortalecimiento de capacidades endógenas, la consolidación en un marco de justicia de los derechos humanos, el desarrollo sostenible, la democracia y la paz.

    La relación entre ciencia y tecnología en el campo de la Recreación Física Comunitaria se hace hoy cada vez más evidente. Los aspectos técnicos (estructuración de los ejercicios y movimientos, medios de enseñanza, equipamientos, etc.) que conforman una buena parte del soporte objetivo de la actividad, unido a elementos científico-tecnológicos (teorías, modelos, metodologías, procesos, etc.) constituyen aspectos desarrolladores de una cultura específica de la Recreación Física, la cual dada sus potencialidades educativas puede:

• Ayudar al desarrollo de sentimientos del vínculo cívico con los demás ciudadanos con los que comparte proyectos comunes y con cualquier ser humano.

• Beneficiar la participación responsable y comprometida en el desarrollo de proyectos de transformación positiva de la comunidad en el ámbito local y personal.

• Reforzar el desarrollo de acciones de bien social.

• Permitir el desarrollo de la capacidad de resolver problemas de la comunidad en los diferentes contextos de actuación a partir de la actividad profesional y social, por solo citar algunos ejemplos.

Conclusiones

1. La práctica sistemática de actividades físico-recreativas con jóvenes garantiza un mejor empleo del tiempo libre y favorece la formación ciudadana en su entorno comunitario.

2. La significación social de la relación ciencia-actividades físico- recreativas requiere convencer desde la ciencia que estas activan al sujeto desde lo cognitivo, lo afectivo y lo conductual para la formación ciudadana.

Bibliografía

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• Bosque Jiménez, J. (2002). La Educación Científico-Tecnológica en la formación profesional del licenciado en Cultura Física. EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Nº 47. http://www.efdeportes.com/efd47/tecno.htm

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• Estévez Cullell, M. y col. (1996). Formación en recreación. Cuadernos de Divulgación "Recreación" de Recreando, Córdoba.

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EFDeportes.com, Revista Digital · Año 20 · N° 204 | Buenos Aires, Mayo de 2015   Lecturas: Educación Física y Deportes - ISSN 1514-3465 - © 1997-2015 Derechos reservados