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Preferencias sobre el estilo de liderazgo del entrenador y cohesión grupal

 

Licenciado en Ciencias de la actividad física y del deporte en la Universidad de León

Estudiante actual de grado de educación primaria en la Universidad Europea de Madrid. Estudiante

de Master en formación de profesorado y enseñanzas secundarias en la Universidad de León

Alejandro Rodríguez García

jandrinrubio@hotmail.com

(España)

 

 

 

 

Resumen

          La preferencia de liderazgo que los jugadores prefieren en su entrenador y la cohesión grupal son dos indicadores del rendimiento de un equipo deportivo. Este estudio busca conocer la preferencia del estilo de entrenador que los jugadores quieren para su equipo y el tipo de cohesión grupal que se da en dicho grupo, analizando las relaciones existentes entre ambas variables dividiéndolas en grupos de edad y según la pertenencia a un equipo u otro. Participaron 36 jugadores de 2 equipos, uno de categoría senior (La Robla) con 20 jugadores y otro de categoría juvenil (Pinilla) con 16 jugadores a los que se le aplicaron la Leadership Scale of Sport (LSS) y Group Environment Questionnaire (GEQ). Los datos obtenidos indican que los jugadores de menor edad puntúan más alto en todas las dimensiones, a su vez el equipo de El Pinilla puntúa más alto en todas las dimensiones del LSS y las subescalas del GEQ que la Robla, habiendo mucha significación sobretodo en la cohesión grupal, esto puede tener relación con la clasificación de ambos equipos estando El Pinilla mucho mejor posicionado en su liga. Nuestros resultados parecen confirmar que determinadas características del liderazgo de los entrenadores y la cohesión grupal influyen en el rendimiento de los equipos deportivos, y también que la edad influye en el liderazgo y en la cohesión de grupo.

          Palabras clave: Liderazgo. Cohesión de grupos. LSS. GEQ. Futbolistas.

 

Recepción: 17/11/2014 - Aceptación: 02/12/2014.

 

 
EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 19, Nº 199, Diciembre de 2014. http://www.efdeportes.com/

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Introducción

Alejandro Rodríguez García    En los últimos años la aplicación de la psicología del deporte ha experimentado un gran auge debido a los beneficios que esta ciencia aporta al contexto deportivo. Sin embargo, en deportes de equipo, destrezas como la comunicación, cohesión, liderazgo y cooperación son fundamentales permitiendo realizar intervenciones psicológicas que benefician al equipo, con el fin de conseguir los objetivos planteados por éste y lograr al tiempo la consolidación del mismo. (Losada, Rocha, Castillo, 2012)

    Tras la realización de la revisión bibliográfica he establecido que la cohesión y el liderazgo son dos conceptos diferentes que están inmersos en el funcionamiento de los equipos deportivos, y por regla general se han hecho investigaciones de forma independiente.

    Hay muchas definiciones que hacen referencia al término de liderazgo, pero la que más aceptación tiene es la siguiente y nos dice que se entiende por liderazgo la capacidad de una determinada persona para influir en el comportamiento de los individuos y grupos, de manera que esto ayude a alcanzar sus objetivos (Martín, Márquez, 2007), está ultima parte de la consecución de los objetivos desde mi punto de vista guarda una estrecha relación con la cohesión grupal.

    Uno de los máximos exponentes en la investigación del liderazgo es Challedurai (1980, 1990), que con su trabajos con el desarrollo del modelo multidimensional del liderazgo, también estableció dentro de los equipos deportivos que con respecto al liderazgo debemos diferenciar entre líder formal e informal. El líder formal está definido por estructura jerárquica del grupo, y reconoce la autoridad de quien está situado en una posición de mando superior (Peus, Weisweiler y Frei. 2009 citado en Arce, C., Torrado, J., Andrade, E. y Alzate, M. 2011). A su vez el líder informal es el que ejerce el mando entre su grupo de iguales (Neubert, 1999 citado en Arce, Torrado, Andrade, Alzate, 2009). Con respecto a esto cabe decir que el líder formal suele ejercer un tipo de liderazgo democrático y el informal uno autocrático (Arce, Torrado, Andrade, Alzate, 2009), en lo respectivo a nuestro estudio nos vamos a centrar en el liderazgo del entrenador.

    En lo que respecta a la evaluación del liderazgo del que va a versar nuestro estudio, es conveniente diferenciar entre el liderazgo formal representado por el entrenador, y el liderazgo informal del deportista que ejerce ese rol entre sus compañeros de equipo (Arce, Torrado, Andrade, Alzate, 2009). El liderazgo formal del entrenador tiene una gran referencia en el modelo de Chelladurai, que lleva asociada una herramienta de evaluación denominada Leadership Scale for Sports (LSS - Escala de Liderazgo en el Deporte; Chelladurai & Saleh, 1980). Esta escala tiene tres versiones: Una referida a “las preferencias de los deportistas”, donde el deportista indica de forma precisa cuáles son sus preferencias respecto a los comportamientos que debe desarrollar el entrenador de forma genérica; una segunda referida a “la versión de las percepciones de los deportistas”, donde se cuantifica la valoración realizada del deportista de las conductas del entrenador; y una tercera versión con especiales implicaciones sobre nuestro estudio, nosotros vamos a utilizar la primera versión. Nuestra versión se compone de 40 ítems y cinco dimensiones (Crespo, Balaguer y Atienza, 1994): 1. Entrenamiento e Instrucción: Hace referencia a la preferencia por un entrenador que se centra en la mejora de rendimiento en los deportistas a través, de instrucciones, entrenamientos técnicos, tácticos y físicos. 2. Conducta Democrática: Preferencia por un entrenador que aboga por una escala de comportamientos que conllevan una mayor participación de los deportistas en las decisiones. 3. Conducta Autocrática: cuando los jugadores prefieren un entrenador que toma las decisiones de forma independiente y la autoridad personal del entrenador. 4. Apoyo Social: Escala referida al grado en que los jugadores prefieren una actitud del entrenador que por el bienestar de los deportistas, que haya buenas relaciones interpersonales entre los miembros del grupo y en definitiva por un clima grupal positivo. 5. Feedback Positivo: la preferencia de los jugadores por comportamientos relacionados con el reconocimiento y refuerzo positivo ante el buen rendimiento del deportista. (Crespo, Balaguer y Atienza, 1994)

    En lo que a cohesión de grupo se refiere, el máximo exponente lo encontramos en la figura de Carron y los muchos colaboradores que ha encontrado en la realización de sus obras (1978, 1981a, 1981b, 1982, 1985, 1987, 1991), sin embargo el primer referente, según García-Mas (1995), lo podemos encontrar en la figura de Martens, que fue el primero en definir el término cohesión grupal, para posteriormente volverlo a definir junto a Petersen (1971).

    Algunos estudios, como los mencionados por Salazar (2006, citando a Martens y Peterson, 1971), relacionan la cohesión con el rendimiento deportivo, determinando que los equipos que muestran un alto grado de comunicación, solidaridad y metas comunes, tienen una mayor probabilidad de alcanzar el éxito grupal y un mejor rendimiento. En la investigación realizada por Garrón y Dennis, (2001; citado en Balaguer, Castillo y Duda, 2003) se concluye que, la cohesión proporciona mayor aprendizaje, productividad, comunicación, satisfacción con el deporte y con los compañeros, sentimientos de seguridad y adherencia al deporte.

    En cualquier caso, el cuerpo de investigaciones más sólido relacionado con la cohesión en el ámbito deportivo ha estado dominado por los trabajos surgidos a partir del Modelo conceptual de cohesión de Carron (1982), un modelo que diferencia cuatro tipos de factores que actúan como antecedentes de la cohesión en el deporte: los personales, los ambientales, los de liderazgo y los de estructura de funcionamiento de equipo. (Iturbida, Elosua, Llanes, 2010)

    Al parecer, la interacción de estos cuatro factores genera un proceso dinámico que encauza la cohesión en dos direcciones: hacia la tarea, con un itinerario asociado al logro de metas y objetivos de rendimiento; y hacia lo social, con un itinerario vinculado a los aspectos más interpersonales del grupo (afiliaciones, compañerismo, apoyo social, etc.). Pero aún hay más. Carron y sus colaboradores (1985) diferencian entre las percepciones que los sujetos tienen del grupo considerado como un «todo», y las percepciones que tienen sobre la atracción que el grupo ejerce sobre ellos. La primera dimensión la denominan Integración del grupo, y la segunda Atracción individual hacia el grupo. (Iturbida, Elosua, Llanes, 2010)

    El test por el que nos vamos a decantar es el Group Environment Questionnaire (GEQ), un test de dieciocho ítems distribuidos en cuatro subescalas(1-atracción hacia el grupo tarea, atracción hacía el grupo social, integración grupo tarea, integración grupo social) ideado por Carron, Widemeyer y Brawley (1985) es una herramienta de evaluación psicológica que posee las bases teóricas y las propiedades psicométricas más sólidas cuando se trata de determinar el grado de cohesión de un determinado grupo.

    El objetivo principal de este estudio es relacionar las variables liderazgo del entrenador y cohesión de grupo en 2 equipos diferentes, y establecer las relaciones existentes entre variables según grupos de edades en los que dividiremos la muestras y según la pertenencia a un equipo u otro.

Objetivos

    La principal motivación a la hora de realizar este estudio, radica en haber sido jugador de futbol durante varias temporadas, además este año estoy ejerciendo de entrenador en un equipo de categorías inferiores, lo cual me facilitará obtener una muestra extensa y fiable.

    La muestra de mi estudio estará compuesta por 2 equipos uno de categoría de base correspondiente al Atlético Pinilla de categoría juvenil y el otro al club deportivo de La Robla de categoría senior. En los 2 equipos las situaciones son muy dispares. El Atlético Pinilla juvenil la temporada pasada terminó como último clasificado de la segunda división provincial juvenil, mientras que La Robla concluyo tercera su primer año de andadura en primera división de aficionados tras el ascenso el año anterior. Este año las situaciones son opuestas, ya que al Atlético Pinilla tras 6 partidos está posicionado en primer lugar con todo victorias en su haber, mientras que La Robla, tras 8 partidos disputados solo ha logrado una victoria, 2 empates y el resto derrotas.

    En ambos equipos ha habido cambios, en primer lugar cabe decir que los entrenadores no son los mismos, en lo respectivo a la plantilla, en La Robla ha habido 3 bajas y 5 incorporaciones, y en el Pinilla ha habido 6 bajas y 8 incorporaciones.

    El principal motivo del cambio radical y de dinámica inversa versa en la dirección del equipo y menor medida en las bajas e incorporaciones de jugadores, siendo el objeto del presente estudio analizar el liderazgo establecido por el entrenador y el nivel de cohesión existente entre los jugadores, centrándonos tanto en la consecución de los objetivos como en las relaciones interpersonales, ya que La Robla se caracterizaba por un buen ambiente de vestuario en el cual había compañerismo, actividades fuera del equipo… mientras que en el Atlético Pinilla la situación era contraria, sobre todo en lo que respecta al entrenador que apenas se implicaba con su equipo. Cabe decir que ambos equipos al inicio de la temporada tenían como objetivo promocionar de categoría, en el caso del Pinilla a primera división provincial y en el caso de La Robla a regional preferente.

    Los objetivos de dicho estudio de manera más clara y concisa son los siguientes:

  • Observar las preferencias de los futbolistas hacía las actitudes de liderazgo y cohesión de grupo que debe mostrar el entrenador

  • Agrupar a la muestra en diferentes grupos de edad y ver cómo influye el liderazgo y la cohesión en los diferentes grupos de edad

  • Agrupar a la muestra en función al equipo que pertenezcan (Pinilla y La Robla), y determinar con los resultados referentes a liderazgo y cohesión grupal si esto puede influir en la clasificación de los 2 equipos en sus respectivas ligas.

Metodología

Participantes

    El estudio fue llevado a cabo sobre los integrantes del equipo senior de La Robla y el equipo juvenil del Atlético Pinilla. El equipo de La Robla, está integrado por 20 futbolistas cuyo rango de edad oscila entre los 20 y 37 años, dicho equipo milita en la categoría senior denominada primera división provincial aficionados de León. El equipo juvenil del Atlético Pinilla, está conformado por 16 futbolistas cuyo rango de edad oscila entre los 16 y 19 años en este momento, el equipo milita en segunda división provincial. Cabe decir que en la muestra no se han tenido en cuenta a los posibles jugadores juveniles en el caso de La Robla y cadetes en el caso del Pinilla que puedan jugar en momentos puntuales de la temporada. En conclusión la muestra va a estar formada por 36 futbolistas, con un rango de edad entre 16 y 37 años.

Instrumentos

    El instrumento de medida utilizado para la evaluación del liderazgo del entrenador es el cuestionario denominado: Escala de Liderazgo en el Deporte (LSS) elaborado por Chelladurai y Saleh (1980)

Para valorar la cohesión grupal del equipo se utilizó el cuestionario de Entorno de Grupo (GEQ) elaborado por Widmeyer, Brawley y Carron (1985).

Procedimiento

    El martes 12 de diciembre se pasaron los cuestionarios de liderazgo y cohesión de grupo, al equipo de La Robla en dicha localidad, previa explicación aclaratoria de los objetivos que tenía el estudio, el cuestionario fue pasado a la totalidad de los 20 miembros del equipo, los cuestionarios fueron entregados nada más concluir el entrenamiento y fueron rellenados in situ y entregados el mismo día, de esta manera pude asegurarme de que todo el mundo lo realizase con mi supervisión y de esta forma podría resolver cualquier duda

    A su vez, el Lunes 18 acudí, a la finalización del entrenamiento del atlético Pinilla, para suministrarles los cuestionarios, una vez que el equipo finalizó el entrenamiento, les expliqué en qué consistía el estudio y en esta ocasión se llevaron los cuestionarios a casa y el entrenador me los proporcionó el Viernes 22, en este caso solo pude obtener 16 cuestionarios, estando la plantilla conformada por 18 miembros.

Análisis estadístico

    Para el análisis estadístico de los datos obtenidos se utilizó el programa estadístico informático IBM SPSS Statistics en su versión 22.0, a través del cual, una vez finalizada la base datos, se procedió a agrupar los ítems correspondientes a las diferentes subescalas de ambos cuestionarios (LSS 5 y GEQ 4), para así facilitar la extracción de los resultados.

    Hubo que invertir, los valores de algunos ítems de la escala Likert del cuestionario GEQ para su correcto análisis, pues las premisas venían propuestas de forma inversa.

    Una vez agrupados los ítems se procedió a aplicarles un análisis descriptivo, extrayéndose las medías de las dimensiones del LSS y las subescalas del GEQ y las agrupamos por grupos de edad y pertenencia a un equipo u otro. Posteriormente, mediante una comparación de medias, con ANOVA, de dichas frecuencias, extraeríamos los datos que nos iban a servir para dar validez a las hipótesis planteadas en el apartado de objetivos.

Resultados

Tabla 1. La siguiente tabla muestra la media de los diferentes dimnesiones y subescalas que desarrollan

 los cuestionarios administrados a los jugadores estando la muestra dividida en grupos de edad

    En lo respectivo al grupo de edad de menos de 18 años cabe decir que en las dimensiones del liderazgo los jugadores tienen preferencia hacía el feedback positivo y al entrenamiento y la instrucción en mayor medida, en un segundo plano de preferencia tenemos la conducta democrática y el apoyo social como dimensiones valoradas y la dimensión menos valorada por los sujetos es la condcuta autocrática. En lo que respecta a la cohesión de grupo los menores de 18 años se posicionan en una postura de preferencia hacia las dimensiones de atracción grupo-social e integración grupo-tarea, por el contrario integración grupo social y atracción grupo tarea son las dimensiones menos valoradas.

    El grupo de edad que va de los 18 a los 22 años, en los estilos de liderazgo del entrenador a diferencia del anterior grupo la dimensión entrenamiento e instrucción es la más valorada, quedando en un segundo plano el feedback positivo como la segunda dimensión más valorada, en segundo lugar y con una valoración similar tenemos el apoyo social y la conducta democrática, la dimensión menos valorada vuelve a ser la conducta autocrática como en el grupo de edad anterior. En lo referente a la cohesión grupal la dimensión integración grupo-tarea es la más valorada y en segundo lugar la atracción grupo-tarea, distando esto mucho de los resultados del grupo anterior, la atracción grupo social que en el grupo de edad anterior era la más valorada ahora pasa a un segundo plano siendo la dimensión menos valorada, a la integración grupo social también se la presta poca valoración

    A su vez el grupo de edad de más de 23 años, en las dimensiones del liderazgo, la dimensión entrenamiento e instrucción como en el grupo anterior vuelve a ser la más valorada, en segundo lugar tenemos la dimensión del feedback positivo, en tercer lugar tenemos con similar valoración el apoyo social y la conducta democrática respectivamente, como en todos los grupos la conducta autocrática vuelve a ser la que menos valoración obtiene. Atendiendo a la cohesión grupal cabe decir que hay un cambio en la tendencia siendo la subescala atracción grupo-tarea la más valorada, en segundo lugar se posiciona la atracción grupo-social que era lo más valorado en menores de 18 años, a la integración grupo-tarea no se le da tanta importancia como en otros grupos de edad, en este grupo de edad la integración grupo social vuelve a ser lo menos valorado al igual que en el grupo de edad anterior.

Gráfico 1. El siguiente gráfico nos muestra los valores de la media de cada dimensión del liderazgo y la cohesión de grupo de la tabla 3. 

Cabe decir que se produce significación1 entre la conducta autocrática en el grupo de edad de menos de 18 años y entre el grupo de 18 y 22 años, 

también tenemos significación en el feedback positivo en los grupos de edad de menos 18 años y el grupo de más de 23 años. 

Por otra parte también se produce significación entre el grupo de 18 años y el de 18 y 22 años en la subescala atracción grupo social. 

A su vez la última significación se da en la integración grupo tarea entre los grupos de edad de menos de 18 años y más de 23 años.

 

Tabla 2. Liderazgo y cohesión de grupo en función del equipo. La siguiente tabla nos muestra los valores medios 

de cada dimensión de los cuestionarios administrados, los equipos analizados son La Robla y el Atlético Pinilla

    En lo que respecta a La Robla, con una muestra de 20 jugadores, en lo que respecta al liderazgo cabe decir, que la dimensión entrenamiento e instrucción es la más valorada por los jugadores, mientras que la menos valorada se corresponde con la conducta autocrática, en un término medio se sitúan las dimensiones feedback positivo, apoyo social y conducta democrática respectivamente. Si hablamos de la cohesión grupal diremos que las dimensiones por la que más se decantan los jugadores son la atracción grupo-tarea y la integración grupo-tarea respectivamente con valores similares, la atracción grupo-social y la integración grupo-social son las dimensiones menos valoradas.

    En el Atlético Pinilla, de categoría juvenil, en las preferencias de liderazgo sobre el entrenador, la dimensión más valorada es el feedback positivo y el entrenamiento y la instrucción se sitúa en segundo lugar, el apoyo social y la conducta democrática se sitúan en un término medio, y al igual que en La Robla la dimensión menos valorada vuelve a ser la conducta autocrática. Atendiendo a la cohesión grupal, aquí hay un cambio de tendencia con respecto al equipo de La Robla ya que las dimensiones atracción grupo-social e integración grupo-tarea pasan a un primer plano y la atracción grupo-tarea e integración grupo-social son menos valoradas.

    Cabe decir que todas las dimensiones y subescalas del Atlético Pinilla tienen más valoración que las del equipo de la Robla lo cual podría explicar las diferencias de clasificación de ambos equipo, ya que el Atlético Pinilla lidera la tabla de su competición y La Robla se sitúa en la parte baja en su competición.

Gráfico 2. Media de liderazgo y cohesión de grupo según el equipo. Muestra los resultados de la tabla número 4, y en el podemos ver reflejadas las dimensiones del liderazgo y las

 subescalas de la cohesión grupal. Es llamativo que el equipo del Pinilla puntúa más alto en todas las dimensiones que el Atlético Pinilla, esto puede suponer un dato muy revelador

    A su vez se produce significación con (P=0,000) entre la dimensión feedback positivo de La Robla y el Pinilla, también entre la dimensión atracción grupo social con una significación (P≤0,05), otra significación (P=0,000) la tenemos en la integración grupo tarea y por último hay significación entre integración grupo social (P≤ 0,01).

Tabla 3. Podemos observar la significación en las correlaciones existentes entre las cinco dimensiones de liderazgo propuestas en el cuestionario LSS, con las cuatro 

subescalas que podemos encontrar en el GEQ referente a la cohesión grupal. Esta tabla muestra las correlaciones existentes para la muestra al completo

    El entrenamiento y la instrucción correlacionan significativamente con la dimensión del liderazgo de conducta autocrática de forma negativa, debido principalmente a que esta conducta autocrática suele ser la dimensión menos valorada por toda la muestra, por el contrario el entrenamiento y la instrucción es una de las más valoradas.

    También hay significación entre el entrenamiento y la instrucción y la dimensión apoyo social, ya que ambas dimensiones generan un aumento de la solidaridad entre miembros del equipo o futbolistas.

    Otra correlación se corresponde a la orientación del entrenador hacia el entrenamiento e instrucción con la atracción grupo social, ya que el entrenamiento genera relaciones grupales positivas.

    A su vez la dimensión apoyo social del entrenador tiene significación con el feedback positivo que este ejerce, ya que el apoyo social que este proporciona es positivo al igual que el feedback positivo.

    El feedback positivo se correlaciona con la subescala de cohesión de integración grupo social.

    Por último la integración grupo tarea se correlaciona de forma significativa con la integración grupo social, ambas dimensiones de la cohesión grupal nos dan como resultado un buen compañerismo con el equipo.

    A su vez se producen correlaciones con menor grado de significación entre las dimensiones entrenamiento e instrucción y feedback positivo, atracción grupo social y feedback positivo e integración grupo tarea y feedback positivo.

Discusión

    La muestra al completo se centra en que prefieren a un entrenador que promueva su liderazgo hacia la dimensión entrenamiento e instrucción y hacia el feedback positivo, y la dimensión que menos se valora es la conducta autocrática. Esto va en consonancia con los resultados de otro estudio donde dichas dimensiones son también las más valoradas, y la conducta autocrática también es la que menos se valora (Márquez; Ardua, 2007), en esta misma línea, los resultados de Hoigaard, Jones & Peters (2008) con la escala LSS, nos enuncian en su estudio que las dimensiones feedback positivo y entrenamiento e instrucción son las más valoradas y la conducta autocrática la menos valorada, he de decir que la muestra de este estudio es muy similar a la nuestra en lo respectivo a la media de edad de la misma, en esta misma línea también tenemos el estudio de Challedurai (1984) realizado con diferentes deportistas y donde las dimensiones más valoradas también coinciden con las de nuestro estudio

    En lo respectivo a la cohesión grupal la muestra se orienta hacia la integración grupo tarea y en menor medida a la atracción grupo social. En la misma línea, Balaguer, Castillo y Duda (2003), en su estudio, las subescalas más valoradas son también la atracción grupo social y la integración grupo tarea. Sin embargo, en el estudio de Craciun y Rus (2009) observamos pequeñas variaciones en las preferencias de cohesión grupal siendo la subescala más valorada atracción grupo social y en segundo lugar atracción grupo tarea, lo cual dista de lo anterior.

    El grupo de edad con sujetos menores de 18 años se orienta en el liderazgo hacía el feedback positivo y en la cohesión grupal a la atracción grupo social, las dimensiones menos valorados son conducta autocrática en el liderazgo e integración grupo social en cohesión. Los resultados de Márquez y Ardua (2007), en la que sus grupos de edad están divididos por categorías (infantil, juvenil y absoluta), en la categoría juvenil que coincide con nuestro grupo de edad de menos de 18 años, dicha categoría se orienta principalmente hacia el entrenamiento y la instrucción y al feedback positivo al igual que en nuestro estudio. En lo que respecta a la cohesión grupal, si atendemos al estudio que se centra en categoría cadete de Balaguer, Castillo y Duda (2003), la subescala más valorada es la integración grupo tarea a diferencia de nuestro estudio donde la dimensión más valorada es la integración grupo social.

    El grupo de edad con sujetos de entre 18 y 22 años se orienta en el liderazgo al entrenamiento y la instrucción y en la cohesión grupal a la integración grupo-tarea, las dimensiones menos valoradas en el liderazgo se corresponden a la conducta autocrática y en la cohesión a integración grupo social. Este grupo agrupa jugadores de la categoría juvenil y de la categoría senior, la mayoría de estudios consultados en lo referente al liderazgo se orientan hacia el entrenamiento y la instrucción y el feedback positivo y en la cohesión, hay más disparidad en los resultados.

    El grupo de edad de más de 23 años, en el liderazgo se orienta hacia el entrenamiento y la instrucción y valoran menos la conducta autocrática. Y en la cohesión se orientan hacia la atracción grupo tarea y lo menos valorado es la integración grupo social. En este grupo de edad cabe decir que muchos autores, como: Márquez y Ardua (2007), Craciun y Rus (2009) nos enuncian que los jugadores a medida que van cumpliendo edad prefieren las conductas autocráticas en los entrenadores, en nuestro estudio esta circunstancia no sucede, ya que en todos los grupos de edad es la dimensión menos valorada, aunque si es cierto que va aumentando el porcentaje de valoración a medida que avanzamos en cada grupo de edad.

    La Robla se orienta en liderazgo hacia el entrenamiento y la instrucción y valora menos la conducta autocrática y en cohesión se orienta hacia la atracción grupo-tarea y valora menos la integración grupo-social, el Pinilla en liderazgo se orienta hacia el feedback positivo y valora menos en su entrenador la conducta autocrática, en cohesión grupal se orientan hacia la atracción grupo-social y valoran menos la integración grupo-social, cabe decir que la Robla no está realizando una buena temporada en la primera división de aficionados de León, estando posicionado en el penúltimo puesto de la clasificación, uno de los objetivos de este estudio era comparar el liderazgo entre un equipo con una mala clasificación y otro bien clasificado y establecer si las conductas de liderazgo y cohesión grupal influyen en los resultados del equipo, para corroborar esto utilizaremos el estudio de Hoigaard, Jones & Peters (2008), donde la muestra de los jugadores de futbol, se dividen en 2 grupos, uno con jugadores que tienen un entorno positivo (buenos resultados, equipo bien situado en la tabla… y otra muestra con jugadores en la situación contraria) aquí los jugadores correspondientes al entorno positivo se orientan hacía el entrenamiento y la instrucción y el feedback positivo, al igual que en los 2 equipos analizados en nuestros estudio, sin embargo la dimensión menos valorada es el apoyo social, circunstancia que en nuestros equipos no ocurre ya que ambos lo que menos valoran es la conducta autocrática en un entrenador. Por el contrario en la muestra con un entorno negativo lo que más se valora vuelve a ser el feedback positivo y el entrenamiento y la instrucción al igual que ocurre en nuestro estudio con La Robla, por el contrario lo menos valorado es la dimensión conducta autocrática al igual que en nuestros 2 grupos, aunque en nuestro estudio el Pinilla cosecha éxitos.

Conclusiones

    En lo referente a los grupos edad, no he encontrado estudios en la bibliografía con una división por grupos de edad similar a la realizada en mi estudio, cabe decir que el grupo de edad de menor edad (menos de 18 años) tiene puntuaciones más altas en todas las dimensiones del LSS y del GEQ, lo cual es muy esclarecedor, este grupo de edad valora mucho la pertenencia al grupo social, circunstancia que cambia en los otros grupos de edad donde esto se valora menos a medida que los jugadores cumplen edad. Cabe decir que la preferencia de una conducta autocrática del entrenador se va valorando cada vez más con los años y la atracción grupo tarea predomina en la cohesión grupal.

    La muestra la hemos dividido en 2 equipos, uno con jugadores juveniles del Atlético Pinilla de categoría juvenil y otra con jugadores de La Robla de categoría senior, El Pinilla puntúa más alto en todas las dimensiones del LSS y en todas las subescalas del GEQ que el equipo de La Robla, esto puede relacionarse con que el Pinilla este situado en primer lugar de su liga y La Robla se sitúe en la penúltima posición en su liga, aunque se necesitaría un estudio en mayor profundidad (muestra mayor y estudio de tipo longitudinal) para corroborar esto.

    Por último decir que un equipo/grupo (particularmente éste después de haberlo contrastado con otros estudios) trabaja unido en pro de un fin común siempre y cuando las actitudes mostradas por quien está llamado a liderar dicho proyecto, sean las que hacen referencia a:

  • Contar con la opinión del deportista.

  • Un alto grado de conocimientos relativos al entrenamiento y al deportista.

  • El refuerzo a cada acción sea positivo.

Nota

  1. La significación la mostramos con las estrellas, en base a estos parámetros: con P≤ 0,05 colocamos 1 estrella, cuando P≤0,01 colocamos 2 estrellas y si P=0,000 colocaremos 3 estrellas.

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EFDeportes.com, Revista Digital · Año 19 · N° 199 | Buenos Aires, Diciembre de 2014
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