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Cándido Andrade López, gloria deportiva del béisbol yaguajayense

 

Filial Universitaria Municipal de Cultura Física

Yaguajay, Sancti Spíritus

(Cuba)

MSc. Mislaydi Castro Abreu

Lic. Daily García Echevarría

MSc Modesto García Ramos

MSc. Francisco Calero Sierra

mislaydi@uniss.edu.cu

 

 

 

 

Resumen

          El objetivo de esta investigación fue caracterizar la trayectoria deportiva y social de este atleta cubano desde su comienzo como jugador hasta la actualidad. La población la constituyeron 6 personas las cuales pueden aportar elementos que enriquecen los resultados de la investigación, además de brindar información al respecto ya que permanecieron mayor tiempo junto a su trayectoria o tienen referencias de esta.Se utilizaron diferentes métodos y técnicas: Histórico-lógico, hermenéutico-dialéctico, historia de vidas, entrevistas semiestandarizada, y datos fotográficos. Se obtuvo como resultado, una vasta información que permitió ordenar cronológicamente los hechos que marcaron la vida deportiva de Cándido Andrade López desde sus inicios como pelotero, hasta la actualidad, destacándose los más relevantes de su vida deportiva, este hombre ha sido un ejemplo vivo de voluntad, dedicación y esfuerzo.

          Palabras clave: Béisbol. Historia. Cuba. Cándido Andrade López.

 

 
EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 19, Nº 199, Diciembre de 2014. http://www.efdeportes.com/

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Introducción

    El Béisbol es considerado unos de los deportes más populares. Las evidencias que existen muestran que se han practicados juegos con un palo y una bola desde las primeras civilizaciones.

    Según algunos historiadores Cuba fue el primer país de Latinoamérica donde se practicó, cuando formaron el Club de Béisbol en la Habana en 1868, pero este fue prohibido por los gobernantes españoles. En diciembre de 1874 se registra el primer juego documentado en la isla, según publicó el periódico “El Artista”, entre los equipos El Habana BBC y el Matanzas BBC, en los terrenos del Palmar de Junco en la provincia de Matanzas.

    En Yaguajay, pequeño poblado de la provincia de Sancti Spíritus, la juventud de la época neocolonial para poder practicar Béisbol, tenía ante todo que sacrificar su tiempo libre, arreglando el terreno por las tardes. Garantizaban todo, recogían botellas para venderlas con el objetivo de recaudar fondos. Después que cada conjunto tenía el dinero para comprar las pelotas, construían los bates de forma rústica. Y como no es de extrañar, en aquella época se jugaba la pelota con condiciones mínimas ya que las autoridades del territorio nunca apoyaron el desarrollo deportivo, pero algunas personas adineradas si lo hicieron.

    Desde que se conoce este juego comienza a ganar popularidad a pesar de las condiciones con que contaba para su desarrollo y en la actualidad puede afirmarse que la pelota es el espectáculo deportivo nacional de mayor atracción, aumentando su auge tanto en número de practicantes como en calidad, así como en espectadores de todas las edades y sexos, llegando a ser el deporte nacional de Cuba.

    Transitando por las dos etapas (antes y después del triunfo de la Revolución cubana en 1959) destaca una figura yaguajayense que con el de cursar de los años fue olvidada, Cándido Andrade López, haciéndose imprescindible investigar sobre la labor de este atleta para que su actuar sirva de conocimiento de todos los que se interesen por este deporte y su historia:

    Por lo que se plantea el siguiente problema científico: ¿Cómo contribuir al conocimiento de la historia deportiva de Cándido Andrade López desde su comienzo como atleta hasta la actualidad?

  • Objetivo general: Historiar la trayectoria deportiva y social de Cándido Andrade López desde su comienzo como atleta hasta la actualidad.

  • Población: Para el desarrollo de este estudio investigativo se utilizó una población de 6 personas las cuales pueden aportar elementos que enriquecen los resultados de la investigación de Cándido Andrade López como atleta y como persona poseyendo conocimientos sobre el tema. De ellos tres son familiares, un periodista y dos fueron atletas entrenados por el investigado. Pertenecen tres al sexo masculino y tres al sexo femenino con edades comprendidas entre 40 y 75 años de edad.

  • Métodos y técnicas: histórico-lógico, hermenéutico-dialéctico, historia de vida, entrevistas semiestandarizada.

Desarrollo

    La desnutrición, insalubridad, el parasitismo y la ignorancia eran características de la época neocolonial. La comunidad Obdulio Morales, ubicada en la costa norte, a 1 Km al norte noroeste de la cabecera municipal de Yaguajay, provincia de Sancti Spíritus, quien vio nacer a Cándido Andrade López, no estaba exenta de la situación que existía en el país, donde el obrero agrícola no disponía, como promedio, de 25 centavos diarios para comer, vestir y calzar. No existían carreteras, apenas algunos caminos, solo contaban con la línea para poder transportarse en el trencito del central. La mayoría de los pobladores vivían en bohíos de techo de guano y de piso de tierra, sin letrina sanitaria, ni agua corriente.

    Cándido Andrade López nació el 4 de septiembre de 1935 en el central azucarero de dicha comunidad hijo de Eufemio Andrade Rojas, trabajador azucarero, y de María López Carbó natural de Narcisa. Era una familia humilde que vivía en una pequeña casa. Se sustentaban con el trabajo del padre el cual laboraba los tres meses de zafra u ochenta días por aquel entonces e ingresaba al hogar solo $ 4, salario que obtenía como trabajador de las calderas.

    En tiempo muerto se marchaba a la provincia de Camaguey para trabajar en la actividad agrícola. Su madre se dedicaba a los quehaceres del hogar y a la educación de sus hijos. A pesar de la situación difícil de la familia y con el esfuerzo del padre todos sus hijos fueron a la escuela y llegaron hasta 5º grado, aunque solo Cándido pudo llegar hasta 7º grado, siendo por entonces un privilegio.

    Bajo esta precaria situación en la que vivía sumergida el país, comenzó a jugar pelota cuando contaba con 14 años de edad en los solares del central, los cuales eran nombrados como la Carbonera, El Horno de Cal, el Cuadrito del Refriadero y el de Carlos el barbero, todos ellos ubicados en áreas aledañas al ingenio. Jugaba con sus amigos para el equipo de Orientales. Entrenaban de forma empírica porque le gustaba, utilizando para ello su tiempo libre y los recursos que tenían a su alcance.

Reseña de los principales resultados alcanzados por Cándido Andrade López en el deporte

    Desde los 14 años, Cándido practicaba el deporte, este era su pasión. Adoraba jugar a la pelota y sacrificaba para ello sus ahorros y todo el tiempo que disponía, aunque no contaba con entrenadores que lo guiara. Jugaba en los campos, todos los domingos, en lugares como Seibabo, Júcaro, Mayajigua, Centeno, Caliene, etc. Su equipo viajaba para competir con diferentes novenas, en el tren del central que tenía como recorrido Caibarién-Chambas, ya que no había carreteras por ese entonces y solo existía el trencito como medio de transporte.

    Siendo categoría juvenil, comienza oficialmente como atleta de Béisbol y juega dos campeonatos interprovinciales libres, en Placetas. El primero formando parte del equipo “Las Sirenas” y el segundo integrando el equipo deportivo de “Yaguajay”. Igualmente formó parte de una Liga azucarera perteneciente a Morón, donde se hacían partícipes todos los equipos de la región Camagüey. En este evento formó parte nuevamente del equipo de Yaguajay, el cual estaba integrado por algunos peloteros que se destacaron en esa etapa como fueron: los hermanos Díaz Quesada (Kiko, Raúl y Miguel), Braulio (Yayo) y Pedro Abreu, los Rodríguez (Felipito, Papito y Pepito) fue dirigido por el legendario Tito Isla, gran torpedero nacido en la localidad.

    Integró el equipo juvenil de Caibarién en el año 1952 para los juegos provinciales, donde se desempeñó como tercera base y jardinero. Ese año quedaron campeón provincial, destacándose la labor de Cándido Andrade López en esa faena. Por su desempeño exitoso es elegido para representar al equipo de Villa Clara en la nacional juvenil de Béisbol con el central Washington a la edad de 17 años. En esa oportunidad participaron siete equipos, siendo para la época, un evento de gran envergadura y connotación.

    Al año siguiente en el 1953, en otro torneo juvenil representó al periódico deportivo “El país”, radicado en la Habana, lo dirigía Manuel Braña, en las dos ocasiones su manager fue “Cocaína” García, quien fuera atleta profesional con el “Club Habana”.

    En el 1954 incursiona en la Liga amateurs libre “Pedro Betancourt”. En esta ocasión su actuación fue como lanzador, donde tuvo como compañero de equipo a Aloma, de Cienfuegos quien jugaba como jardinero y receptor; además de Diepa que se desempeñaba en el campo corto.

    En el mes de febrero del año 1955, Napoleón Reyes, jugador y manager de un equipo de la liga profesional cubana, viajó a Yaguajay con su conjunto para enfrentarlo contra la selección de la localidad. Al transcurrir el juego observó detenidamente y con mucho interés a Cándido Andrade mientras se desempeñaba en el “raighfilders”, le llamó la atención por el brazo que tenía y lo invita a la Habana para realizarle algunas pruebas físicas y de rendimiento. Ya estando en esta ciudad, después de ver sus potencialidades y siendo evidente la calidad que poseía como atleta y las perspectivas futuras, le hacen un contrato para jugar en las Ligas Menores, con los “Cubans Ray King”, equipo sucursal de los famosos Rojos de Cincinnati, con solo 20 años de edad.

    El país contaba con cuatro equipos profesionales Marianao, La Habana, Almendares y Cienfuegos del cual formó parte. Los entrenamientos de Las Ligas, eran muy fuertes, Cándido tenía implícito el talento y el deseo de jugar, pero no estaba acostumbrado al rigor de los ejercicios. El cambio fue brusco, si a esto se le adiciona que en ese instante pasa a ser oficialmente lanzador y no estaba adaptado a este tipo de trabajo. Los primeros entrenadores de pitcheo fueron Jimmy Braga y Johnny Bandermir, este último se desempeñó como “pitcher” de los famosos Rojos del Cincinnati, perteneciente a la Liga Nacional en Estados Unidos en este equipo contaba con un compañero espirituano que jugó con él.

    Para competir se transportaban en guaguas y los hospedaban en hoteles importantes de la ciudad en que jugaban. El atleta profesional en esa etapa tenía que cuidarse el solo, velar por su descanso y su alimentación, ya que solo le exigían por el cumplimiento del contrato. Había que comprarse todo lo que necesitaban, con excepción del traje para jugar, que se entregaba al manager o al dueño del equipo cuando se acaba el campeonato. Después que el atleta devolvía todos los aditamentos prestados para las competencias y entrenamientos, es que se le pagaba el dinero acordado.

    Sus actuaciones fueron observadas detenidamente por las personalidades en la materia y estas le sirvieron de punto de partida en sus aspiraciones para el ascenso a la Liga Internacional. Dentro de su desempeño se puede citar que mantuvo un promedio de 0.75 carreras limpias por juegos. Sin permitir que corredor alguno le llegara a tercera base. Andrade participó en ocho juegos siendo abridor en seis y relevista en dos de ellos y una lechada en su actuar. En total lanzó 47 innings y dos tercios, con 170 veces al bate, 11 carreras permitidas de las cuales solo cuatro fueron limpias. Ponchó a 25 bateadores contrarios, resaltándolo la prensa como pitcher estelar en el futuro del equipo de Cienfuegos.

    A pesar de ser negro, pobre y sin un apellido connotado, hecho que no se podía negar en una época marcada por el racismo y la discriminación, Cándido sobresalía por su talento para el deporte del diamante y eso tampoco se podía esconder a pesar de que muchos no lo aceptaran y en ocasiones quisieran cerrarle algunas puertas, mientras otras indiscutiblemente se abrían solas para él.

    Recibió diferentes contratos en Ligas Internacionales como fueron D, C, A y AAA, jugando en Cuba y en varias ciudades de los Estados Unidos de América.

    Anualmente los “Cubans Sugar Kings” realizaban giras de 30 días en la que enfrentaban equipos representados por diferentes centrales del país, estos hechos eran muy seguidos por la prensa de la época por la connotación que tenía y la preferencia del pueblo. Bajo el título “Esta tarde en Tinguaro inician su gira los novatos de los ‘Cubans’”. El periódico anunciaba a los jugadores que la iniciarían para la cual fletaban un ómnibus en este caso por “Flecha de Oro”.

    El equipo estaba formado por 20 jugadores, el manager Toni Castaño, el jefe de los “Scouts”, Armando Llano y el “Scouts” Corito Varona. En esta etapa no existía entrenador de bateo ni de pitcheo, los manager tenían que actuar como coacher de tercera, como psicólogo y como masajista de forma integral. Entre los peloteos estaba José Casaña, como “catcher” y mientras estaban de recorrido buscarían entre los talentos quien ocupara otro puesto que estaba vacante. Los “infilders”: Borrego Álvarez, Felipe Valdés, Leonardo Cárdenas, Martín Rosell y Julio A Durán. Jardineros: Toboso, Winchy Álvarez, Oreste Hernández y Antonio González. Lanzadores: Cándido Andrade, Rafael López, Humberto Márquez, Ramón García, Andrés Ayón, Heliodoro Moreno, Jorge Talavarera, Silvio Castaño y Manuel Montejo.

    En la tercera gira anual realizada por los novatos al interior de la República, mostraron un record de 25 triunfos, seis derrotas y un empate, saliendo triunfante en 20 de los últimos 22 Cándido Andrade. Un total de nueve lechadas consiguieron sus lanzadores del equipo, cuatro de ellas por el sensacional “pitcher” derecho Andrade.

    En otra ocasión viajó con los Cubans en el 1956, siendo un novato de 21 años, en esa ocasión estuvo un mes entrenando en Canadá, en Toronto Montreal, en Rochester, en Búfalo y en Cincinnati donde realizaban diferentes encuentros con equipos importantes.

    Después de jugar la serie de los Cubans contra “Las Agujas” se unieron dos de sus peloteros jóvenes que habían registrado bonitas campañas ese verano. Leonardo Cárdenas, torpedero estrella y Cándido Andrade “pitcher” de primera línea. En los Savannah Sugar King de la Liga Internacional triple A, tuvo como manager a Prestón Gómez y como compañeros de equipo a Leonardo Cárdenas, Elio Chacón, Pompeyo Tabadillo, Nino Escalera y Emilio Cueche, todos ellos venezolanos.

    En agosto de 1957 ya estaba contratado por el Tucson Baseball Club en Arizona perteneciente a la Liga Internacional “Sugar King” en Estados Unidos, permaneciendo en este país por un espacio de seis años, en el que jugaba solo en verano por seis meses, al concluir el mismo regresaba a Cuba donde podía ser contratado por algún club de la liga cubana. No podía aceptar contrato alguno sin la autorización de dicho Club que tenía como manager general a Paul J. Miller. También de la propia Liga Internacional lo podían enviar a otros países como Nicaragua y Colombia.

    Estando en Cuba se realizaban tres o cuatro juegos a la semana, los domingos se hacía de día y entre semana de noche, el lunes era “Día de Dama” es decir las mujeres no pagaban la entrada al estadio, cuestión esta para incentivar la presencia femenina en los partidos. Esta Liga se jugaba en el estadio del Cerro, actualmente el Latinoamericano.

    Diferentes periódicos de la época, tanto de la prensa cubana como la de los Estados Unidos, publicaron el desempeño de Cándido Andrade López desbordados en elogios y comparaciones con jugadores de grandes resultados y mayor experiencia: “Andrade tiene un promedio asombroso de carreras limpias permitidas 0.42 o sea que todo hace pensar que en lo sucesivo y aunque todo parezca disparatado el novel serpentinero verde podrá ser tan útil a los Elefantes como Pascual y Ramos”. (…) “La formidable demostración de Cándido Andrade ha descubierto que los sureños tienen un serpentinero de calibre más, probado en la campaña cubana. Decimos esto porque Andrade había pitcheado muy bien en la liga de clasificación A que no es lo mismo que triunfar en nuestra contienda invernal”. (…) ”…mezcló sus lanzamientos hábilmente, empleando muchas curvas, tirando cambios y desarrollando velocidad y con este notado repertorio tuvo engañados a sus rivales durante siete actos”. (…) “Pocas veces hemos visto un novato que domine también los cambios de velocidad y administre tan bien su repertorio como Cándido Andrade. Luce destinado a obtener unas cuantas victorias para los pativerdes…” (…) “…pero en su amargura el revés de Cienfuegos puede sentirse satisfecho por la estupenda demostración del joven Andrade…” (…) ”…Andrade reveló que tiene facultades y que estaba perfectamente justificada la selección que de él hizo el piloto Castaña al concederle la responsabilidad de abridor”.

    Bajo el título:”Enviado Andrade a la reserva”, una sorprendente noticia: la alta dirección de los Elefantes de Cienfuegos decidió enviar a la reserva al sensacional novato Cándido Andrade. Después de la formidable demostración que rindiera el pasado miércoles frente a la fuerte toletería del Marianao, permitiendo solamente dos “hits”, aunque perdió la decisión final por un error del “centerfielder” Jackson, se creía que Andrade permanecería en el Cienfuegos como “pitcher” abridor.

    El periódico Prensa Libre publicó el sábado 9 de febrero de 1957 en la página 18: “En total los novatos de los Cubans han celebrado 25 encuentros de los cuales han ganado 17, perdido siete, registrando un empate. El recluta Antonio González está causando sensación ocupando el liderato de los bateadores, con promedio ofensivo de 382, así mismo el serpentinero Andrade ha logrado cuatro victorias seguidas dos de ellas por la vía de los nueve ceros”. Otros periódicos lo muestran dentro de las grandes promesas del montículo junto a Carrillo, Evelio Hernández y Castellanos.

    El domingo 29 de septiembre de 1957 a las 12.30 p.m. el Club Eva y el team del Central Vitoria le brindarán a la gran esperanza de los Cubans Cándido Andrade, gran homenaje con un doble juego con la fuerte novena de Falla que es aclamada por los todos los fanáticos por haber derrotado al Club de Vitoria.

    El diario cubano “Ataja” página 5 viernes 24 de octubre de 1958 en su artículo “Ojos del Base Ball” por el periodista Dagoberto Peñalver: “Volvió a conectar bien el Cienfuegos mientras sus rivales eran contenidos; pero a pesar de ello perdieron. Cándido Andrade lanzó un gran juego, pero sus compañeros no ligaron sus batazos. Fatal el chiquillo que estuvo a cinco “outs” de lograr un no “hits” no “run”…” y en próximos párrafos agrega: “Al Cicotte no estuvo tan hermético como Andrade, pero supo imponer su clase en los momentos más difíciles…”

    Como atleta de la Liga Profesional en EE.UU., su primer equipo fue en la “Liga de Pensilvania” al sur de New York, representativo de las Ligas Menores de la clase D. Tuvo a Johnny Vandermil como manager. Después pasa para el Arizona, México League, en Baja California frontera de Estados Unidos con México Liga Clase C; al año siguiente estuvo en el Savannah equipo que pertenecía al estado de Georgia en Clase A aquí compartió equipo con Alberto Álvarez receptor de Cienfuegos.

    “Si Cándido Andrade lanza 14 entradas más manteniendo ese paso de carreras limpias, será ‘campionpitcher’. El muchacho tiene 0.94 por juegos en 58 entradas. Pero 0.72 es el mínimo”.

    En su juego 19 el estelar Andrade ponchó a 12 bateadores para obtener un triunfo de 6-1 contra los Phoenix. Candy como gustaba llamarle la prensa y los fanáticos, lució tan brillante como siempre, según relata Richard Canley y Carl Porteren diferentes periódicos de la prensa extranjera.

    En Arizona, tuvo su mejor actuación ganando 20 juegos consecutivos contra equipos sucursales. ”Douglas Copper Kings fue el último conjunto donde se pudo ver su deslumbrante actuación ganando (8-4) y se proclamó como primer “pitcher” en la Liga Arizona-México en obtener esos resultados. El partido se efectuó en el terreno “Hi Corbett” con 396 espectadores. Además de su buen desempeño como lanzador impulsó un estrepitoso triplete para empatar el marcador.

    Formó parte de la “Sally League Clase A”, jugando con el equipo de Savannah. En una ocasión ganó 15 juegos y perdió ocho, se destacó además por ponchar a 173 bateadores, otorgó 72 bases por bolas en 257 innings de actuación, registrando su mejor campaña en los Estados Unidos, siendo otro astro más que surge por la vía de los Cubans.

    Por sus resultados se desborda en elogios la prensa estadounidense no sin dejar por sentado el color de su piel y el lugar de origen, hecho que demuestra el racismo existente en la época cuando se publica: “Lanzador negro cubano mantuvo su récords inmaculado en el Grayson, al realizar el record perfecto contra los Tigres, trabajando ocho “inning” sin permitir “hits”. También conecta jonrón, hecho que le permite quedar como tercer jonronero del juego y segundo de los Piernas Rojas del Savannah, esta victoria mantiene a este equipo en una excelente posición”. En este espectáculo participó una impresionante cifra de 1.234 fanáticos. Artículo escrito por Tom Coffee.

    Se seleccionan a cinco integrantes del equipo para el “All Stars” de la Liga del Atlántico Sur, liderando la votación Cándido Andrade entre los “pitcher”, seguido por Bob Dobzanski, Bob Wellman, Chico Cárdenas y Chico Álvarez.

    Contaba con un compañero espirituano que jugó profesional, Catalino Ramos, que se desempeñó como director de la Academia de Béisbol de Santa Clara. Cándido le dio apoyo técnico desempeñándose como entrenador de pitcheo. Con ellos trabajaban también Pedro More, Pablo García y Joaquín Pérez hermano de Pedro Pérez entrenador de pitcheo de varios equipos Cuba. También tuvo como compañero de trabajo a Pedro Carrillo, Yiqui Quintana, Sergio Borges director de varios equipos Cuba, Arnaldo Rachax, Juan Suárez, Gallego Sánchez, Cojimbar González y Reinaldo Díaz Cola apodado como Macho Cola y que de algún modo llegaron a ser figuras importantes en la pelota.

    Después dirigió la provincial en Yaguajay y no podía salir al terreno: “estuvimos aislados nadie nos buscaba, no me daban licencia, ya eso ha cambiado”.

    En este tipo de Béisbol según refiere la prensa, el valor no tiene mucha importancia sino el nombre y el apellido y Cándido Andrade es un muchacho de Caibarién que fue estrella con los Savannah de la Sally League clase A y es una estrella en ciernes. Aunque su apellido sea Andrade y muchos no quieran aceptarlo.

    Como entrenador fue contratado por Catalino Ramos, el jefe de la academia de Las Villas. Va a trabajar para allá por un período de cinco años hasta el año 1976, que se realiza la nueva división político-administrativa y comienza a laborar en la academia de Tuinucú y luego es llamado para dirigir el equipo espirituano. Le resultaba un poco difícil dirigir la “Pelota Grande” como le llama orgulloso, aunque en honor a la verdad no lo hizo nada mal, ya que obtuvo el título de oro para los espirituanos por única vez hasta la fecha en el año 1979. El año anterior el equipo espirituano había obtenido el lugar 15 en el campeonato, a pesar de tener buenos peloteros en su conjunto.

    Después de 1980 continúa como entrenador de los mejores atletas de pitcheo perteneciente a la Academia Provincial de Béisbol en Sancti-Spíritus, donde labora hasta su jubilación.

Conclusiones

    Cándido Andrade López nació rodeado de los males que oprimían la sociedad de la época neocolonial, en un pequeño poblado que tenía como principal fuente de empleo al central azucarero y lo relativo al cultivo de la caña.

    Jugó en las Ligas Internacionales ascendiendo por la clase D y C, por sus brillantes resultados llegó a la cúspide del Béisbol de la época formando parte del Savannah de la Sally League clase A y posteriormente los Cubans Sugar King clase AAA, conquistando luego para Sancti Spíritus el único título que se ha logrado en las series Nacionales de Béisbol, en el año 1979.

    Excelente atleta, de gran talento y potencialidades físicas, de destreza inigualable. Formidable como entrenador, alcanzó para el pueblo espirituano la alegría de sentirse campeón en una serie nacional, hecho que no ha podido repetirse desde entonces.

Recomendaciones

    Continuar este tipo de trabajo investigativo con otras figuras del deporte en la provincia de Sancti Spíritus.

Bibliografía

  • Águila, A. (1979) Optimista la dirección de Sancti Spíritus. Escambray (Sancti Spíritus) 26 de enero: p. 8.

  • Aldereguía, M. (1957) Homenaje a Cándido Andrade. Imprenta El Arte (Yaguajay) 29 de septiembre: p. 1.

  • Campos, H. (1979) La disciplina, el por qué de los triunfos de Sancti Spíritus. Granma (La Habana) 15 de febrero: p. 5.

  • Coffey, T. (1958) Five Redlegs Chosen on Sally All–Star Team. Savannah Morning News (Augusta) June, 29: p. 4.

  • Galdós, L. (1979) Lucharemos por tener el campeonato nacional. Escambray (Sancti Spíritus) 18 de diciembre: p. 4.

  • García Marrero, C. M. (2006) Aportes de la familia Gourriel Delgado. Trabajo de Diploma Sancti Spíritus FCCFD “José Martí Pérez”.

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