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¿Por qué en Europa no quieren
los Juegos Olímpicos de Invierno del 2022?

 

Profesional en Ciencias del Deporte y la Recreación

Universidad Tecnológica de Pereira. Especialista en Dirección

y Gestión Deportiva. Escuela Nacional del Deporte. Cali

Magíster en Administración. Universidad de Antioquia, Medellín.

http://www.autogol.org/

Mauricio Hernández Londoño

mauroh06@gmail.com

(Colombia)

 

 

 

 

Resumen

          Las diferentes versiones de los Juegos Olímpicos bajo la denominación de la Juventud o de Invierno demandan grandes inversiones públicas por parte de las ciudades y países que buscan albergarlos. La candidatura es un proceso complejo, incierto y costoso. En los primeros días de Octubre, la ciudad noruega de Oslo retiraba su candidatura por falta de apoyo del parlamento nacional. Los costos de los últimos Juegos de Invierno en la ciudad rusa de Sochi y la participación ciudadana en ciudades desarrolladas son algunas razones para que las personas en las ciudades europeas estén rechazando las candidaturas. Por su parte, el COI (Comité Olímpico Internacional) se ve obligado a buscar nuevas ciudades con poder y dinero para realizar los Juegos y cumplir sus demandas. La elección de los Juegos Olímpicos de Invierno del 2022 deja al Comité dos opciones en ciudades poco democráticas, donde los ciudadanos no pueden manifestarse.

          Palabras clave: Oslo 2022. Grandes eventos deportivos. Juegos Olímpicos de Invierno. Comité Olímpico Internacional.

 

Recepción: 16/10/2014 - Aceptación: 04/11/2014.

 

 
EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 19, Nº 198, Noviembre de 2014. http://www.efdeportes.com/

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    A menos de un año de la elección de la sede de los Juegos Olímpicos de Invierno en 2022 varias ciudades en Europa han rechazado la candidatura, la última en hacerlo fue la ciudad noruega de Oslo, quien retiraba su candidatura en octubre del 2014.

    Para que una ciudad sea sede de un Gran Evento Deportivo (como lo son los Juegos Olímpicos) es necesario que aplique en un proceso que tarda años; este proceso se llama la candidatura y básicamente, es la manifestación y el compromiso del gobierno local y nacional con el propietario jurídico del evento, en el cual, el primero garantiza todas las condiciones para realizarlo con las condiciones que el segundo estipula. Este proceso es complejo y costoso, el cumplimiento de las garantías que organismos deportivos internacionales como el COI (Comité Olímpico Internacional) o FIFA (Federación Internacional de Fútbol Asociado) exigen años de preparación. En Europa se hizo popular la cultura de realizar Grandes Eventos Deportivos para movilizar bienes y servicios, además para justificar la construcción de vías e instalaciones de gigantes proporciones.

    Las ciudades aplican a una candidatura por muchas razones; algunas para resaltar son la promoción de la ciudad o el país; prepararse para otras candidaturas o repetir una postulación; mejorar su infraestructura, promover la regeneración urbana y la edificación de relaciones alrededor del mundo. Una candidatura es considerada exitosa cuando la ciudad postulante es seleccionada, sin embargo, cuando no es exitosa se corren riesgos de inflación, vivienda costosa, elefantes blancos y deudas públicas. La mayoría de las veces los beneficios de estos Grandes Eventos son sobreestimados y los costos subestimados. Para controlar el costo de la oferta, el comité de la candidatura tiene que involucrar un gran número de partes interesadas que puedan contribuir a garantizar una reducción sustancial de los costos.

Montreal. Canadá. Sede de los Juegos Olímpicos de Verano en 1976

Recuperada en octubre de 2014. Disponible en http://olympiccityproject.com/gallery/

    Los primeros días de octubre se conoció que el parlamento noruego no apoyaba la organización de los Juegos Olímpicos de Invierno del 2022 y la ciudad se vio obligada a retirar la candidatura. Oslo no es la única ciudad europea que renuncia a los Juegos Olímpicos de Invierno, ciudades como Estocolmo –Suecia-; Krakow –Polonia-; Munich –Alemania- y Davos -Suiza- también presentaron sus ofertas para los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022, pero se retiraron por carecer de apoyo popular o político, mientras que la oferta de Lviv –Ucrania- fue rechazada por los conflictos internos ocurridos en el país.

    La última sede de unos Juegos Olímpicos de Invierno tuvo un costo de 51 billones de dólares en la ciudad rusa de Sochi (2014) y esta es una de las razones por las cuales ciudadanos suecos, polacos, alemanes y noruegos le dijeron que no a los Juegos Olímpicos de Invierno del 2022. El retiro de estas candidaturas dejan dos pésimas opciones al Comité Olímpico Internacional: Beijing y Almaty. China y su régimen comunista y Kazajistán, país que se denomina democrático con el mismo presidente desde la separación de la Unión Soviética en 1991.

    De acuerdo con reporteros del Washington Post (1), Beijing solo tiene 120 millas de montaña utilizable para el esquí. Como los ciudadanos no pueden darse el lujo de votar las decisiones del gasto público como en otras ciudades; el gobierno está prometiendo la construcción de un tren de alta velocidad, lejos de los escenarios utilizados en los Juegos Olímpicos de Verano del 2008. El costo de los Juegos parece no importar al gobierno chino; después de haber gastado 44 billones de dólares en los Juegos Olímpicos de Verano del 2008, cifra que supera con creces los 14.2 billones reportados por Londres en los Juegos Olímpicos de Verano en 2012, mantienen su aspiración para los Olímpicos de Invierno del 2022.

Escenario para Voleibol de playa en Beijing, sede de los juegos Olímpicos de Verano de 2008. 

Foto de abril de 2012. Disponible en http://peopleus.blogspot.com/2012/12/chinese-architecture-old-and-new.html

    Del otro lado, Kazajistán, una república “democrática”, que cuenta con el mismo presidente desde 1991; acogió una enmienda constitucional en 2007 que aplica para todos, menos para su actual presidente. El mismo reporte citado por Early Lead en The Washington Post (1) cita que el Instituto Mundial para la Investigación y el Desarrollo Económico, acusa al presidente Nazarbayev de corrupción, porque su familia controla empresas clave en el país y por haber desviado un billón de dólares a sus cuentas privadas, producto de las ganancias de la exportación de petróleo.

    Es una lástima que las personas de ciudades como Beijing y Almaty no puedan manifestarse ni decir nada respecto a los Juegos Olímpicos de Invierno del 2022. Las capitales más desarrolladas de Europa y del mundo están cuestionando las enormes inversiones públicas que deben hacer sus ciudades para cumplir las garantías que el COI (Comité Olímpico Internacional) exige. Esta organización y sus miembros no tienen reparo en encontrar nuevos lugares para realizar los juegos, nuevos países tienen poder y dinero para cumplir con sus ostentosas demandas.

    Algunos ejemplos que reflejan mejor esta tendencia sumados al de Almaty son los de Gaborone, en Botswana (África); aspirante a los Juegos Africanos en 2019 y postulante por los Juegos Olímpicos de la Juventud de 2022; Buenos Aires, sede de los Juegos Olímpicos de la Juventud 2018, aspirante a los Juegos Olímpicos de Invierno en 2026, y Monterrey, México, aspirante a los Olímpicos de la Juventud en 2022.

    En la medida en que aumente el conocimiento ciudadano y la evaluación imparcial de los riesgos e impactos de eventos como los Juegos Olímpicos de Invierno y Verano, las ciudades democráticas a través de sus ciudadanos podrán manifestarse; en Europa, por ahora, a los Olímpicos de Invierno del 2022, las personas dicen: No, gracias.

Referencia

  1. Washington Post. http://www.washingtonpost.com/blogs/early-lead/wp/2014/10/02/oslo-drops-2022-winter-olympics-bid-leaving-ioc-with-two-bad-choices/

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