Introducción
La historia de nuestro país demuestra ser un gran semillero en múltiples
deportes, beneficiado por sus diferentes zonas geográficas, lo que permite
tener una alta gama de deportistas aptos para todo tipo de deportes, ya sean
individuales como colectivos. La sierra con su riqueza en cuanto a la
alimentación con hierro, permite a sus habitantes una gran cantidad de
hemoglobina en sangre, lo que permite de igual manera una mejor oxigenación y
fibras musculares rojas, permitiendo a los practicantes dedicarse a deportes de
resistencia; Fondo, Medio Fondo, Marcha, Box, Ciclismo, Triatlón, Natación,
entre otros.
La costa y sus deportistas direccionados a deportes como; Velocistas, Box,
natación, triatlón, los deportes de defensa personal, etc. Nuestro Amazonia,
demostrando los últimos tiempos adelantos deportivos con referentes muy
valiosos tanto a nivel nacional como internacional entre los que aparecen;
Antonio Valencia, Enner Valencia, Ángela Tenorio (La vice campeona mundial,
de 17 años, dejó la Amazonía para ir a Quito y fomentar sus dones), etc.
Desde que el Comité Olímpico Internacional (C.O.I.) comenzó a admitir que la
preparación de los deportistas de alto rendimiento fuera concebida y llevada a
cabo por entrenadores y demás personal especializado, la dirección técnica y
científica de los atletas inició un camino de desarrollo tecnológico que
abrió las puertas a trabajos científicos multidisciplinarios en los sistemas
de entrenamiento de los atletas, es así como con la participación de la URSS
en los Juegos Olímpicos de 1952 en Helsinki se inicia un proceso de
tecnificación e investigación imparable y consustancial con las nuevas
exigencias del deporte moderno, donde una de las direcciones fundamentales se
refiere a la detección y selección de talentos deportivos (Romero, 1984;
2006).
De manera que a escala mundial desde hace algunos años se tiene la certeza de
que el éxito de la superación deportiva y de los resultados que alcanzan los
deportistas, depende en gran medida de la selección científica de aquellas
personas con posibilidades reales para este fin, donde debe incluirse factores
claves como los condicionantes socioeconómicas, históricas y culturales
(Calero y Suárez, 2011).
La selección permite la iniciación temprana de los niños en disciplinas
deportivas en las que puedan desarrollar su talento y obtener la recompensa
máxima por sus esfuerzos, evitando las frustraciones que provocan la falta de
éxito. Este proceso de selección de posibles talentos deportivos, debe
conllevar a iniciar cuanto antes a aquellos que presenten condiciones
potencialmente positivas para llegar a obtener un alto rendimiento deportivo en
la edad adulta (Calero y Suárez, 2005).
A pesar de todos estos acontecimientos y del desarrollo deportivo en cuanto a
las presentaciones internacionales en donde sobresalen múltiples deportistas de
manera aislada, algunos sin procesos formativos (Alex Quiñonez), entre otros,
no deja de sorprender estos resultados, que nos llevan a engaño porque pensamos
de manera equivoca que estamos trabajando bien, pero al observar resultados en
el alto rendimiento encontramos una realidad diferente, aparte de Jefferson
Pérez, (hoy en el retiro) no vislumbramos otro referente con las mismas
proyecciones y nivel de competencia.
El alto rendimiento exigente como es, no permite la improvisación, al
contrario, exige que los procesos sean de manera progresiva y total, desde el
seleccionamiento mismo que sirve de adaptación a los niños o jóvenes que se
quieran dedicar por entero a las prácticas de cualquier deporte.
En Ecuador no contamos hasta hoy con estadísticas que permitan ser referencias
de los atletas que consiguieron logros deportivos, tenemos: Martha Tenorio,
Yolanda Quimbita, Rolando Vera, José Voltaire Villafuerte, Ítalo Estupiñan,
Alex Aguinaga, entre otros.
Todos estos referentes gloriosos para nuestro deporte culminaron la actividad
sin dejar huellas de su formación que sirvan de evidencias a seguir o para
mejorar partiendo de una realidad dada.
Las escuelas de formación existentes son negocios que desperdician el talento
de los niños y jóvenes que permanecen en ellas hasta cumplir con la mayoría
de edad, no hay criterio valido para concretar las aspiraciones de los muchos
niños, jóvenes aspirantes a ser considerados. Los grandes clubes con sus
aspiraciones meramente mercantiles, desdicen la misión de su creación y la
capacidad de admisión en sus filas no llega a concretar un porcentaje mínimo
de esta gran ciudad.
Por lo que el autor se plantea el propósito de proponer un modelo de selección
de talentos que constituya el instrumento metodológico adecuado para llevar a
cabo dicha labor a partir de una caracterización multilateral e integral de
estos, en las áreas deportivas.
El modelo concibe la determinación del Talento Futbolístico a partir de la
evaluación de cuatro dimensiones principales, que se descomponen en indicadores
de carácter ludo-motrices, antropométricos y psicosociales, que permiten
emitir juicios de valor acerca de los componentes esenciales que definen las
aptitudes y cualidades de un niño futbolísticamente talentoso.
En este proceder se conjugan los métodos del deporte, la morfología, la
sociología, la psicología y el deporte específico, ajustándose de forma
objetiva a las características, exigencias, expectativas y tendencias actuales
que se manifiestan en este deporte. Para la realización de esta investigación
se han empleado métodos científicos tales como: histórico-lógico, análisis
de contenido, modelación, medición, criterio de expertos, encuestas,
entrevistas y técnicas estadístico-matemáticas, permitiendo conceptualizar el
problema con profundidad y recopilar toda la información necesaria para la
contrastación empírica.
El modelo posibilita el estudio de las particularidades individuales de cada
niño, lo que evidencia las posibilidades del mismo para optimizar el proceso de
selección deportiva en el fútbol del Guayas.
Antecedentes
históricos y actualidad del tema
Aunque en general la selección de talentos deportivos es un tema
bastante descuidado, particularmente en nuestro país, hay que subrayar que no
es esta una de las tendencias más recientes dentro de la preparación del
deportista como sistema.
La práctica nos demuestra que en términos generales, el mundo del deporte
presta poca atención a la problemática relacionada con el talento y los
individuos excepcionales. El convencimiento de que el talento surge de forma
espontánea o la selección al criterio del entrenador (ojímetro) condujo a
muchos a pensar que no era necesario invertir tiempo y recursos en estas
cuestiones. Por ello, es vital conocer aquellas variables que, a opinión o no
de los expertos, inciden significativamente en el éxito del proceso de
selección deportiva en particular, y en el proceso de dirección del
entrenamiento deportivo en general (Calero, Fernández y Fernández, 2008),
siendo una de las herramientas de importancia, los análisis a través de
prospectivas estratégicas (Calero y Fernández, 2007).
En el mundo del deporte, la problemática relacionada con el talento deportivo
se ha observado a veces con cierta dosis de escepticismo.
También debe ayudar a concretar los intereses y las expectativas de un gran
número de niños y adolescentes que, iniciados en el deporte por motivaciones
externas y expectativas de éxito, pueden llegar a abandonar el mismo si no
perciben posibilidades reales de concreción de sus aspiraciones, pues el
fracaso en la competición se relaciona con un descenso de la motivación hacia
el deporte (Malina y cols., 1982). Esta situación podría evitarse si existiera
una orientación previa hacia objetivos más accesibles y posibilidades claras
en los clubes aspiración de todo niño y/o joven.
Esta diferenciación inicial entre posibles talentos deportivos y jóvenes
deportistas, optimiza el proceso de entrenamiento y formación deportiva
específica de ambos, por cuanto a los que demuestran una buena aptitud se les
puede planificar una vida deportiva de forma ordenada y metódica que
favorecería la aceptación del nivel de sus posibilidades y de su rol en el
deporte (Galilea y cols. 1986), y a aquellos que presentan menos aptitud
deportiva se les encauzaría hacia objetivos menos competitivos, favoreciendo
igualmente la aceptación de su nivel y su desarrollo potencial, lo cual podría
evitar la frustración y el consiguiente abandono deportivo, tomando como
ejemplo la forma de masificación Cubana (Calero, 2012), y la aplicación de
diferentes pruebas científicas, donde se incluyan hasta pruebas del rendimiento
técnico-táctico (Friol, Calero, Díaz y Guerra, 2012).
La formación de un deportista de alto nivel competitivo, está estrechamente
vinculada a la labor de selección y seguimiento de niños y adolescentes con
potencialidades especiales para el deporte, donde al considerarse las etapas de
la maestría deportiva en función de la edad, permite fundamentar la
orientación, iniciación y especialización oportuna, posibilitando planificar
racionalmente el proceso de superación deportiva así como preservar a los
jóvenes deportistas contra la preparación forzada y la intensificación
excesiva de las cargas de entrenamiento y de competición (Volkov y Filin,
1989).
En la actualidad el problema de la selección deportiva ha cobrado mayor
interés porque las exigencias que desde el punto de vista competitivo se están
planteando son cada vez mayores y obligan a una selección más temprana,
catalogándose como la primera etapa en el proceso pedagógico de entrenamiento,
la que influye en el posterior desarrollo deportivo del niño, sigo pensando que
a la clasificación conocida debe ser agregada una más, la adaptación,
todo niño debe pasar por un proceso de adaptación no solo al deporte, sino
también al nuevo entorno, nuevos compañeros, el entrenador, los padres, el
balón, etc. Para lograr éxito en este proceso, útil sería implementar las
acciones pertinentes para instrumentar los resultados a obtener, u obtenidos en
dicho proceso, acciones que permitirán una mejor toma de decisiones acertadas
(Iglesias, Calero, Fernández, 2012).
Para Esa Peltola (Asesor en identificación de talentos para la Comisión
Australiana de Deportes, 1993), la identificación de talentos constituye el
primer paso en el camino de principiante hasta atleta de elite internacional, lo
que justifica que las grandes potencias deportivas del mundo inviertan grandes
esfuerzos en promover esta actividad a temprana edad.
Según Aravena (1996), la selección de los niños que se inician en el
aprendizaje de un determinado deporte, caracterizado por el progresivo y cada
vez más exigente proceso de formación y competición es una afortunada idea,
en la que hay que enfatizar para lograr buena probabilidad de éxitos.
En opinión de Víctor López (1993), todas las disciplinas se beneficiarían de
la identificación de talentos a una edad temprana, representando un impacto
inmediato en el deporte de elite y especialmente en los deportes en que se exige
alto nivel técnico, debido a la necesidad de desarrollar patrones motores
correctos a una edad temprana.
En la actualidad se sabe que una rigurosa evaluación previa de las aptitudes y
capacidades con que se incorporan los niños y adolescentes a la práctica
deportiva, asegura razonables probabilidades de éxito en el proceso competitivo
futuro a la vez que evita la iniciación equivocada en determinados deportes
para los que no se poseen las aptitudes requeridas.
Sin embargo, cuando se hace un análisis de los sistemas, métodos y modelos de
selección que se utilizan en el mundo, se percibe cierta relación entre estos
y la estructura y organización deportiva existente en los diferentes países.
En aquellos que presentan un sistema deportivo más sólido, sustentado sobre la
base de un desarrollo socioeconómico superior, la selección adquiere mayor
relevancia y connotación, lo que indica que esta actividad también tiene un
carácter sociocultural (Calero, Suárez, 2011).
En nuestro país no se le ha conferido gran importancia a esta actividad, lo que
se evidencia en los resultados de las competencias internacionales. Haciendo
falta criterios científicos propios de nuestra realidad y la elaboración
criterios de test específicos de seleccionamiento como manifestó el presidente
Fidel Castro Ruz, en la inauguración de la EIDE "Mártires de
Barbados", el 6 de Octubre de 1977 cuando expresó: "Las pruebas se
deben hacer en todas las escuelas y entre todos los alumnos de la provincia. No
es lo mismo seleccionar entre 10 mil que seleccionar entre 120 mil. Es necesario
organizar las pruebas con todos, para que no perdamos una sola facultad, para
que no vayamos a perder un solo campeón".
El Ministerio de Deportes no ha trazado una estrategia deportiva que prevea un
grupo de lineamientos, objetivos y proyecciones para el trabajo investigativo
muy bien definidas, dentro de las que destaquen como línea importante
la selección de talentos deportivos, ya que sin una adecuada selección y
seguimiento de los niños que en estos momentos constituyen la reserva deportiva
para los próximos Ciclos Olímpicos, no habría garantía para la continuidad
histórica de los éxitos del movimiento deportivo Guayasense y
Ecuatoriano.
Relevancia
de la investigación
Está dada en que se aborda la problemática de la selección de talentos a
partir de una concepción sistémica, con un enfoque holístico, mediante la
aplicación de un modelo teórico diseñado al efecto, donde se articulan e
interrelacionan criterios e indicadores que permiten llevar a cabo la
evaluación del talento futbolístico de manera más integral, lo cual
constituye una novedad científica en el ámbito de este deporte.
En el modelo se sistematizan y conjugan los métodos de la metrología
deportiva, la morfología, la sociología y el deporte específico, ajustándose
de forma objetiva a las características, exigencias, expectativas y tendencias
actuales que se manifiestan en este deporte, conteniendo los componentes
fundamentales que definen las aptitudes y cualidades de los niños para el
mismo, superando los modelos tradicionales, caracterizados por análisis
aislados y unidimensionales, lo que representa desde nuestra perspectiva una
aportación teórica importante.
También pueden destacarse como aportes del presente trabajo: la
sistematización teórico – conceptual llevada a cabo para la definición de
los criterios que deben ser tenidos en cuenta para la selección en el fútbol
de forma particular, la determinación de los perfiles de exigencia para el
futbolista Guayasense y Ecuatoriano, el establecimiento de las fases que
componen el proceso de selección deportiva en el contexto conjugando los
conceptos y argumentos teóricos asociados a los términos: identificación
(adaptación), detección, captación y selección deportiva.
Definición
del problema
No obstante las reflexiones anteriores, uno de los problemas que ha presentado
Ecuador y Guayas en los últimos años, es que solo una pequeña parte (muy
pocos) de los niños y jóvenes que ingresan en las escuelas de Iniciación
deportiva resultan ser talentos y alcanzar luego altos resultados deportivos.
Se aplicó la técnica “Lluvia de Ideas”, con un grupo de entrenadores y
especialistas de fútbol de la Provincia y el País, con el propósito de
conocer sus criterios y opiniones en cuanto a las causas que provocaban el poco
o nulo criterio de que el proceso de selección de talentos, se realizaba sobre
bases científico - metodológicas sólidas, argumentándose que el método
actual de selección hace una caracterización incompleta del aspirante, al no
tomar en cuenta criterios antropométricos y psicológicos familiares y otros
que ofrecen juicios de valor importantes con vista a la selección; en la
valoración de las capacidades motrices no se tiene en cuenta la maduración
biológica (edad biológica) y el desarrollo antropológico del niño, además
no se ofrecen indicaciones metodológicas precisas que permitan realizar las
acciones de selección con la objetividad necesaria, evidenciándose falta de
capacidad discriminativa para individualizar a los aspirantes y develar el nivel
de sus potencialidades futbolísticas.
Por otra parte, entrevistas realizadas, tanto de forma individual como
colectiva, con jefes de cátedra de fútbol, metodólogos, subdirectores
deportivos y miembros de la Dirección de Alto Rendimiento, han permitido
verificar que esta actividad constituye un problema que requiere ser tratado con
una nueva perspectiva, por lo que, se hace necesario emprender una labor de
búsqueda de nuevos elementos que permitan optimizar este proceso, superando las
principales limitaciones que en este sentido se presentan y logrando la eficacia
necesaria en dicha actividad.
Se considera como elemento determinante, el rendimiento del niño, teniendo en
cuenta el criterio de los entrenadores basado en su experiencia empírica, lo
cual es un elemento negativo en este sentido, ya que tiene un bajo nivel
predictivo al no considerar que en el desarrollo, la maduración y el
entrenamiento hay variables biológicas y psicológicas susceptibles de
cambios y transformaciones, y los que muestren los mejores rendimientos en un
momento puntual pueden no ser los más dotados (“falsos positivos”), hay que
tener presente que con este método hay muchos niños que se pierden, ya que por
diversas razones no pueden mostrar sus verdaderas potencialidades durante los
partidos de competición, por lo que no podemos conformarnos con una selección
de talentos basada en la consideración de un solo factor, ya que si bien es
cierto que no se puede desestimar la experiencia de los entrenadores, hay que
tener presente que este método resulta insuficiente y se hace necesario contar
con métodos más objetivos y precisos basados en el análisis científico.
Como vía para seleccionar posibles talentos en las áreas deportivas también
se utiliza la aplicación de pruebas físico-técnicas las cuales fueron
introducidas en nuestro medio por el profesor Dusan Draskovic, cuyos resultados
se realizaron con referentes Europeos y no reflejan nuestra realidad, otros
evalúan mediante la comparación con normativas históricamente establecidas,
las cuales carecen de relevancia, representatividad y modernidad, debido a que
no se ajustan a las características de nuestra población y además no se
actualizan periódicamente.
El Programa de Preparación del deportista actual prevé la valoración y
evaluación del talento a partir del cumplimiento de las tareas rectoras de cada
etapa (Acostumbramiento, iniciación, aprendizaje, perfeccionamiento y
rendimiento) como se muestra a continuación; adaptando a lo aconsejado por
Dussan Draskovic.
Etapa de Acostumbramiento o adaptación (U – 6, 7 y 8):
-
Capacidad
de coordinación.
-
Intención
por el tiro a gol.
-
Sentido
de la posesión del balón.
Etapa de Iniciación (U – 9, 10 y 11):
-
Velocidad
de reacción.
-
Ocupación
racional del terreno.
-
Sentido
de la anticipación y la interceptación.
-
Sentido
de la posesión y control del balón.
-
Inclinación
por el juego colectivo.
-
Dinamismo
y perspicacia en situaciones de juego.
Etapa de Aprendizaje (U – 12, 13 y 14):
-
Rapidez.
-
Sentido
de espíritu de equipo.
-
Virtuosidad
técnica.
-
Sentido
de improvisación en el dribling.
-
Eficiencia
en el marcaje.
-
Cohesión
en el bloque defensivo.
-
Conmutación
del ataque a la defensa.
-
Hostigamiento
del adversario para retardar o recuperar el balón.
-
Determinación
y espontaneidad en las situaciones de gol.
Etapa de Perfeccionamiento o competición (U –
15, 16 y 17):
-
Velocidad
/ Fuerza.
-
Eficiencia
técnica y perspicacia en el juego rápido.
-
Conmutación
de la defensa al ataque.
-
Alternancia
entre pases cortos y largos, en profundidad y laterales.
-
Sentido
de la demarcación y juego sin balón.
-
Apropiada
cobertura del espacio o al compañero en acción.
-
Precisión
y potencia en el tiro a gol.
Etapa de Alto Rendimiento (U – 18, 20 y 23):
-
Resistencia
/ Velocidad.
-
Polivalencia
en el juego.
-
Alternancia
entre maniobras elaboradas y combinaciones improvisadas.
-
Alternancia
entre la retención del balón y la aceleración del juego.
-
Aprovechamiento
de las situaciones de gol.
Metodología
que se plantea para la evaluación del talento de juego
Para la valoración del talento de juego se tomará en consideración los
aspectos relacionados, correspondientes a la etapa en cuestión, así como los
indicados en las etapas antecedentes. La evaluación comprenderá en cada
aspecto (según criterio del entrenador) la puntuación a escala de 1, 2, 3, 4 y
5, las evaluaciones serán consideradas acorde a las etapas (edad del niño),
Dussan, presentaba una batería de 21 pruebas a realizar, partiendo de la
flexibilidad, hasta la resistencia aerobia.
La sumatoria de los puntos otorgados, divididos por el número o cantidad de
aspectos evaluados determina la evaluación del talento de juego, donde 3 puntos
resultará el mínimo para otorgar la condición de aprobado.
Como se puede apreciar las orientaciones que desde el punto de vista
metodológico se ofrecen son a nuestro modo de ver muy limitadas para una tarea
tan compleja como la selección de talentos futbolísticos, ya que aparecen una
serie de indicadores de carácter cualitativo de los que no se precisa su
contenido ni tampoco los criterios para su medición.
Además esta concepción puede juzgarse como reduccionista, ya que se limita a
la valoración del talento desde un perfil muy estrecho, basado solo en la
observación y análisis de la conducta motriz del sujeto, o sea, que
únicamente se toma en cuenta aquellos rasgos que son directamente observables y
perceptibles durante la actividad del juego, dejando de considerar otros
aspectos de la personalidad del niño como sus posibilidades de rendimiento
motor (eficiencia física), constitución física (variables antropométricas),
condiciones psicológicas, sociales y familiares, que no deben soslayarse a la
hora de evaluar el talento deportivo.
Por otra parte, se debe tener en cuenta que el establecimiento de las tareas
rectoras correspondientes a cada una de las etapas o estadios, en que se ha
concebido la vida del futbolista resulta algo muy convencional y rígido, ya que
no significa que todos los niños comprendidos en esas edades posean el mismo
nivel de maduración, conocimientos y experiencias previas.
Sintetizando las principales dificultades detectadas durante el diagnóstico
efectuado en la fase exploratoria de esta investigación, se pueden destacar las
siguientes:
-
La selección se realiza fundamentalmente en el marco de los Juegos
juveniles y escolares Provinciales (competencias), a partir de la
experiencia empírica de los entrenadores.
-
En el Programa de Preparación del Deportista (PPD) no se ofrecen
indicaciones metodológicas precisas sobre cómo realizar esta selección.
-
Carencia de un enfoque integral para la caracterización multilateral de los
aspirantes.
-
No se tiene en cuenta criterios antropométricos y psicofamiliares.
-
Al valorar las capacidades motrices no se considera la maduración
biológica y el desarrollo antropológico.
-
Insuficiente capacidad discriminativa del procedimiento actual para
individualizar a los aspirantes y develar sus potencialidades
futbolísticas.
-
Las normativas para evaluar las pruebas físico - técnicas carecen de
relevancia, representatividad y modernidad.
-
En la determinación del talento de juego, aparecen indicadores de carácter
cualitativo que no se precisa su contenido ni tampoco los criterios para su
medición.
-
Las tareas rectoras (PPD) resultan muy convencionales, ya que no significa
que todos los niños comprendidos en esas edades posean el mismo nivel de
maduración, conocimientos y experiencias previas.
Después
de estas valoraciones se hace evidente que el problema que nos ocupa está dado
en: la insuficiente capacidad del procedimiento de selección actual para
caracterizar de forma multilateral a los aspirantes a ingresar en las escuela de
Iniciación deportiva en el deporte de fútbol, lo que limita la determinación
de sus potencialidades futbolísticas para el Alto Rendimiento, la falta de
propuesta de los clubes profesionales para motivar a sus entrenadores a realizar
el debido proceso de Seleccionamiento.
Objetivo
General
Proponer
un modelo de selección de talentos futbolísticos, que permita integrar a
todos aquellos niños más dotados para el Alto Rendimiento, basado en un
enfoque holístico (integral) a partir de la caracterización de su potencial de
juego, condiciones motrices, antropométricas y psicofamiliares.
Objetivos
Específicos
-
Caracterizar el proceso de selección de talentos deportivos en general y en el
fútbol en particular.
-
Determinar los factores incidentes en el rendimiento deportivo en el fútbol
(perfiles de exigencia de la actividad competitiva).
-
Validar mediante contrastación empírica el modelo de selección diseñado.
Investigaciones
precedentes en Ecuador
Como
trabajos precedentes en la labor de selección en nuestro país aparecen los de
Dusan Draskovic, (1989) sobre criterios de selección para la práctica del
futbol en niños desde 6-7 años, mientras que René Romero (1984) incursiona en
la capacidad de rendimiento deportivo en el proceso de entrenamiento y la
valoración de posibles talentos, los cuales, numerosos técnicos del deporte
ecuatoriano han adaptado sus postulados a las características del Ecuador.
Conclusiones
A modo
de conclusión y sintetizando lo antes expuesto, se expresa: que la selección
no se realiza sobre bases científico - metodológicas sólidas, por lo que los
niños ingresan a las escuelas deportivas y a los clubes sin poseer las
condiciones iníciales necesarias que exige este deporte.
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