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Introducción

    En el año 1853, hallándose la isla de Cuba sometida al cruento despotismo del régimen español, nace José Julián Martí Pérez, en la casa marcada con el número 41 de la calle de Paula, en La Habana Vieja, siendo sus padres Mariano Martí y Navarro y Leonor Pérez Cabrera, natural de Santa Cruz de Tenerife, Islas Canarias.

    La figura histórica de José Martí (1853-1895), es sin duda alguna uno de los pilares esenciales en la génesis del pensamiento revolucionario cubano y en la firmeza irrevocable de los sentimientos patrióticos.

    Encontramos en Martí, al revolucionario inclaudicable que trasciende su época, su tiempo, los límites de su tiempo, al hombre que amó tanto la libertad, como al conocimiento y la cultura. Hombre de un pensamiento democrático, antiescolástico y científico avanzado que defendió la igualdad, su derecho de vivir en una Patria justa y trabajó intensamente a favor de nuestra patria y de América Latina.

    Las inquietudes revolucionarias de Martí se empiezan a manifestar cuando tenía la edad de 16 años que, idealmente, se incorpora a la guerra que hubo de iniciarse el 10 de octubre de 1868.

    Fue condenado por insulto e infidencia a seis años de presidio y trabajos forzados que cumplió en La Habana ,de donde fue trasladado a Fortaleza de Las Cabañas y, de allí, desterrado a Islas de Pinos donde ejerce por primera vez su profesión de maestro, alfabetizando a los hijos de un generoso español: José María Sardá.

    Martí a través de sus ideas supo inculcar el amor a la libertad y a la patria, de él heredamos el sentido de la dignidad personal y el respeto a la libertad del hombre, al decoro individual y su legado moral. Esta ética, este sentido del honor y esta rebeldía frente a lo injusto, tenían un origen social muy profundo. Todas estas cualidades se hallaban en Martí, quien poseía una alta conciencia de la defensa de la identidad del pueblo cubano.

    Las ideas del apóstol alcanzan su más elevada concreción en el líder indiscutible de la Revolución Cubana, Fidel Castro, quien ha puesto en práctica las ideas martinas sobre la educación. Remitámonos a como nuestro país se convirtió en el primer territorio libre de analfabetismo en América y ha seguido avanzando con pasos certeros en materia de educación donde a pesar de los momentos difíciles que hemos vivimos no se ha tenido que cerrar ninguna escuela, ni sacrificar los programas propuestos en este sector, sino por el contrario cada vez surgen nuevas transformaciones con el objetivo de perfeccionar el trabajo en la educación y elevar la calidad del Proceso Docente Educativo.

    El objetivo de nuestro trabajo es analizar la presencia del ideario martiano en el pensamiento de Fidel Castro sobre la educación.

Desarrollo

    La idea Martiana de “preparar al hombre para la vida”, de formar “hombres independientes”, demuestra que la concepción martiana sobre la educación se fundamentaba en que esta debía ser natural, científica, integral, desarrolladora, donde el hombre asumiera una posición activa y protagónica en el proceso de su propio aprendizaje, formando un ser responsable, capaz de actuar y transformar el medio natural y social, con marcados valores morales, es decir, que delimita muy bien los conceptos de instrucción y educación. Al respecto planteó: “Instrucción no es lo mismo que educación: aquella se refiere al pensamiento, y esta principalmente a los sentimientos. Sin embargo, no hay buena educación sin instrucción, las cualidades morales suben de precio cuando están realzadas por las cualidades inteligentes”.

    Estas ideas martianas están presentes hoy más que nunca en el pensamiento de Fidel quien ha hecho referencia en varias ocasiones a la necesidad de que nuestro sistema educacional se corresponda cada vez más con la igualdad, la justicia plena, la autoestima y las necesidades morales y sociales de los ciudadanos en el modelo de sociedad que el pueblo de Cuba se ha propuesto crear.

    En relación a esto nuestro comandante en Jefe planteo: “(...) educar es sembrar valores, inculcar y desarrollar sentimientos, transformar a las criaturas que vienen al mundo con imperativos de la naturaleza, muchas veces contradictorios con las virtudes que más apreciamos, como solidaridad, desprendimiento, valentía, fraternidad y otras.”¹

    Son muchas las ideas martianas que encuentran un lugar importante en el pensamiento de Fidel relacionado con la educación, ejemplo:

    Martí planteo: “La educación es como un árbol: se siembra una semilla y se abren muchas ramas. Sea la gratitud del pueblo que se educa árbol protector, en las tempestades y las lluvias, de los hombres que hoy les hacen tanto bien. Hombres recogerá quien siembre escuelas.”

    Fidel Castro llevó adelante las ideas martianas desde antes del triunfo revolucionario cuando planteó en su histórico alegato “La Historia me Absolverá” como uno de los problemas fundamentales, la educación, al cual se le daría solución después del triunfo y es así como a partir de enero de 1959 en todo el país se comienza la construcción de escuelas en todos los niveles de enseñanza , convirtió los cuarteles en escuelas, decretó el carácter gratuito de la educación, eliminó las escuelas privadas, creó escuelas rurales hasta en los rincones más intrincados de nuestro país y la acción más importante de todo fue la Campaña de Alfabetización y todas las revoluciones educacionales que se han desarrollado a lo largo de la Revolución.

    En el 2002 Fidel Castro valora los resultados alcanzados en la educación cubana al plantear:

    “Lo que comenzó por la alfabetización de un pueblo cuya inmensa mayoría era analfabeta total o funcional, en la que menos del diez por ciento de los adolescentes y adultos alcanzaba el sexto grado y cuya cultura política no rebasaba los límites impuestos por el embrutecedor sistema de explotación económica, la mentira y las ideas enajenantes impuestas a nuestro pueblo, se va transformando en la más extraordinaria experiencia de desarrollo educativo y cultural que ha conocido sociedad alguna en la historia.” ²

    También Fidel ha hecho referencia a la superioridad del Socialismo y del lugar privilegiado del Sistema de Educación Cubano cuando expresó: “¡Nada detendrá ya la marcha incontenible del pueblo cubano hacia una cultura general integral y el lugar cimero en la educación y la cultura entre todos los pueblos del mundo!

    “¡Viva el socialismo que ha hecho posible este grandioso sueño en un país del Tercer Mundo!”³

    La escuela cubana de hoy necesita de la motivación y el protagonismo de los alumnos, así como de la creatividad de los maestros, nuestro Estado en medio del infinito empeño que pone para mantener la calidad del Sistema de Educación refleja la necesidad de revolucionar los arcaicos métodos de enseñanza y promueve el uso de nuevos medios que permitan lograr mayor calidad en el Proceso Docente Educativo, haciéndose eliminar el formalismo en las clases para poner en práctica la enseñanza desarrolladora que desempeña un papel importantísimo en la formación de la personalidad del estudiante.

    En este sentido en el VII Congreso de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, la Dra. Graciela Pogolotti insistió en rescatar el protagonismo del profesor como puntual de nuestro sistema de enseñanza, en relación a esto señaló: “Nosotros tenemos una tradición pedagógica que forma parte de nuestra cultura, y que hay que destacar.”⁴

    Para el logro de estas prioridades se ha responsabilizado la escuela, a la que le corresponde una misión fundamental, es también la que más logra la capacidad movilizadora para involucrar al resto de las demás instituciones sobre todo a la familia en torno alcanzar los objetivos contenidos en la política del Estado.

    Referente a esto el apóstol expresó la escuela ha de ser un lugar útil.” Y Fidel hizo referencia a la necesidad de revolucionar los conceptos de la educación.” Por tanto es tarea esencial del maestro, ejercer conscientemente una influencia educativa en la formación de la personalidad, para ello no solo dominar los contenidos de las asignaturas que imparte, sino que es imprescindible conocer las particularidades psicológicas de los educandos.

    La idea martiana de que “A un pueblo ignorante puede engañársele con la superstición, y hacérsele servil. Un pueblo instruido será siempre fuerte y libre. (…) El mejor modo de defender nuestros derechos es conocerlos bien; así se tiene fe y fuerza: toda nación será infeliz en tanto que no eduque a todos sus hijos” se refleja en el objetivo fundamental trazado por nuestro PCC en relación con la educación donde se recoge lo siguiente:

    “La educación tiene como fin formar a las nuevas generaciones en los principios científicos, ideológicos y morales del comunismo, convirtiéndolos en convicciones personales y hábitos de conducta diaria, promoviendo hombres plenamente desarrollados, aptos para vivir y trabajar en la nueva sociedad.”⁵

    El desarrollo de la educación en el mundo contemporáneo debe contribuir a mejorar la calidad de vida de los hombres y es la escuela, como institución social depositaria de de la cultura, la encargada de gestionar que las generaciones presentes y futuras, tengan la preparación necesaria para vivir y trabajar en la nueva sociedad.

    La Revolución cubana ha tenido siempre entre sus prioridades el desarrollo de la cultura, la educación y la ciencia. La educación tiene como fin, formar un hombre integral que piense, valore y actué a la altura de su tiempo.

    El pueblo cubano junto a su indiscutible líder mantiene la convicción de que un mundo mejor es posible. Una vez más el pensamiento de nuestro Comandante en Jefe está presente al expresar: “Que cada nueva generación esté más preparada para los grandes desafíos del futuro que esperan a nuestra Patria y a toda la humanidad, es el más profundo anhelo de todos los revolucionarios cubanos.” ⁶

    De esta forma la sentencia martiana de “El pueblo más feliz es el que tenga mejor educado a sus hijos; en la instrucción del pensamiento y en la dirección de los sentimientos. Un pueblo instruido ama el trabajo y sabe sacar provecho de el. Un pueblo virtuoso vivirá más feliz y más rico que otro lleno de vicios, y se defenderá mejor de todo ataque”. Encuentra su más genuina expresión en las siguientes palabras de Fidel Castro “La cultura se está revolucionando, hay una explosión cultural en el país, y la idea, que podía parecer un sueño, de ser el país más culto del mundo, con el sentido amplio de la palabra (...); un país poseedor de una cultura general integral, que comprende no solo los conocimientos profesionales, sino los conocimientos relacionados con las ciencias, las letras y las humanidades. Será por amplio margen, en breve tiempo (…), el país más culto del mundo.”

Conclusiones

    Este trabajo investigativo nos ha permitido llegar a la conclusión que es importante profundizar en la vida y obra de Martí como un gran hombre, que supo conjugar su pensamiento revolucionario, pedagógico y científico. Este gran pensador es un paradigma, es expresión genuina del humanismo, con un legado que no se limita solo a nuestro país, sino que tiene un carácter universal. Las ideas de nuestro Héroe Nacional han servido de inspiración a todas las generaciones y reviven en cada logro de la Revolución. Por eso el estudio de su obra tiene gran trascendencia histórica y es parte indispensable de nuestra historia, la historia de la nación cubana.

Notas

1. Castro Ruz, Fidel. Discurso pronunciado en el Acto de graduación de las Escuelas Emergentes de Maestros Primarios. (2/ 9/02)

2. Ibídem

3. Castro Ruz, Fidel .Discurso pronunciado en el acto de inauguración de la Escuela Experimental José Martí. (6/9/02)

4. VII Congreso de la UNEAC. Periódico Granma 2 de abril del 2008.

5. “Plataforma Programática del PCC. Tesis y Resoluciones”, p. 86

6. Castro Ruz, Fidel. Discurso pronunciado en el Acto de Inauguración del Curso de Formación Emergente de Profesores Integrales de Secundaria Básica (9/9/02).

Bibliografía

• Castro Ruz, Fidel. Discurso pronunciado en el Acto de graduación de las Escuelas Emergentes de Maestros Primarios. (2/ 9/02).

• Castro Ruz, Fidel. Discurso pronunciado en el acto de inauguración de la Escuela Experimental José Martí. (6/9/02).

• Castro Ruz, Fidel. Discurso pronunciado en el Acto de Inauguración del Curso de Formación Emergente de Profesores Integrales de Secundaria Básica (9/9/02).

• Castro Ruz, Fidel. Hacia una escuela de excelencia. La Habana: Editorial Pueblo y Educación, 2004.

• Colectivo de Autores. Compendio de Pedagogía: Funciones de la educación y la sociedad. Ciudad de La Habana. Editorial Pueblo y Educación, 2003.

• Diccionario del Pensamiento Martiano.

• Martí Pérez, José. Obras Completas. Editorial de Ciencias Sociales. La Habana, 1973.

• Periódico Granma. VII Congreso de la UNEAC (2 de abril del 2008).

• Plataforma Programática del PCC. Tesis y Resoluciones.

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