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La sistematización cultural, motivación contextual

en los entrenadores de fútbol cubano

 

Licenciado en cultura física y deportes

Magíster en metodología del entrenamiento deportivo

Docente Auxiliar. Entrenador de Alto Rendimiento Futsal y Fútbol

Universidad del Deporte. La Quinta, Holguín

Msc. Edilberto Luís Medina Duran

emedina@hlg.uccfd.cu

(Cuba)

 

 

 

 

Resumen

          El trabajo enmarca el tema del necesario accionar del entrenador de fútbol en relación a la perenne motivación hacia un dominio teórico en torno al tratamiento didáctico para sistematizar la cultura en el contenido del entrenamiento deportivo que le identifiquen categóricamente, el desarrollo de los conocimiento socio culturales, superación permanente de forma integral, aprendizaje y búsqueda de nuevos y superiores conocimientos científicos, contextualización informativa, comunicativa, didáctico-pedagógica con respecto a formas, métodos, procedimientos implícitos del fútbol de alto nivel para poder contactar modelos existentes, todo visto como indicadores que deben caracterizar al entrenador de excelencia a lo cual aspira nuestro deporte en la actualidad. Estas exigencias se dificultan constantemente y se alejan con frecuencia de los niveles reales de actuación de los entrenadores de nuestras instituciones deportivas que comúnmente participan preparan y dirigen los equipos en las principales competencias nacionales.

          Palabras clave: Sistematización cultural. Motivación contextual. Entrenadores de fútbol.

 

 
EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 19, Nº 191, Abril de 2014. http://www.efdeportes.com/

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Introducción

    Es obvio que el deporte esta claramente asentado en nuestra sociedad, ya que, como protagonistas, practicantes o como meros espectadores del mismo, ocupa gran parte de nuestro tiempo libre. En Cuba el encargo social del deporte concreta los altos ideales de Martí y el pensamiento de Fidel, que sustentan nuestro proyecto social. Defiende la conquista de la obra de la Revolución en la esfera de la cultura física y el deporte, reconocida a escala mundial. El cumplimiento de este encargo, demanda de las instituciones deportivas, trabajar con los métodos y técnicas más modernas, la elevación de la calidad de los servicios y trabajar por la excelencia con eficacia y eficiencia. El sistema deportivo cubano tiene los retos fundamentales de desarrollar la aplicación de la ciencia y la innovación tecnológica, elevar la capacidad intelectual y profesional de los recursos humanos para lograr mejor competitividad internacional, desarrollar el deporte para todos, consolidar la educación física, diversificar la recreación, incrementar los resultados del deporte de alto rendimiento como rostro más visible de nuestra patria, profundizar en la conciencia y práctica del ahorro como expresión de la educación económica y realizar el proceso de reordenamiento y actualización funcional de nuestro organismo, a tono con la política orientada por el estado.

    También se trabaja en pos de continuar incrementado la calidad en la organización y desarrollo del sistema de educación deportiva en lo referente a consolidar el modelo de organización y funcionamiento en las escuelas deportivas, garantizando la calidad de la adquisición de conocimientos y de la cultura general integral de los estudiantes-atletas y entrenadores, integrando la formación docente, el entrenamiento deportivo y la formación de valores. Se busca perfeccionar, mediante el control y el rigor, la evaluación profesoral en el sistema de escuelas deportivas y consolidar la formación y superación de los recursos humanos, la capacitación en los subsistemas que abarca el sector deportivo, el diagnóstico de las necesidades y el empleo racional de los recursos con el objetivo de lograr un alto nivel en la maestría técnica-pedagógica de entrenadores, evaluando sus impactos en los resultados de su función laboral y en el nivel de satisfacción de sus intereses y perfiles.

    Resulta trascendental el concepto de nuestro máximo líder al expresar que “La cultura física y el deporte tienen como objetivos principales: la salud, la recreación y la formación integral del hombre” “Por eso es el deporte una maravillosa actividad, que no sólo ayuda a formar el carácter, no sólo ayuda a forjar hombres de espíritu y de cuerpo fuertes, sino que también alienta al pueblo, entretiene al pueblo, entusiasma al pueblo, y hace feliz al pueblo”. “Sin embargo, el país necesita de la educación física y necesita del deporte. La Revolución no podía desentenderse de esa preocupación, estaría descuidando un punto fundamental que hará posible, en el futuro, una ciudadanía más saludable y mejor, como aspiramos a tener”

    “Ser atleta no es una profesión. Al deportista se le debe preparar esmeradamente en el dominio e cualquier especialidad de su vocación, para que, posteriormente pueda ejercerla cuando concluya su vida activa”. “La pasividad deportiva se encauza, con la concepción de crear hábitos y necesidades en la población teniendo en cuenta que su participación deberá lograrse sin la aplicación de métodos burocráticos, ni administrativos, ni mediante formas rígidas.” “El activismo en la cultura física y el deporte, deberá cobrar fuerzas y consolidarse según su importante contribución al movimiento deportivo, el papel positivo que ha jugado así como la dedicación y vocación mostradas, por quienes, durante años lo han hecho posible.” En consecuencia, dada esta influencia que ejerce la actividad deportiva, deben aparecer como una meta fundamental un máximo de potencialidades político, culturales, científicas, técnicas y otras que fortalezcan las cualidades del entrenador en su objeto social y en su modo de actuación, en particular aquellas que se relacionan con uno de los procesos vitales del rendimiento deportivo, la capacidad de de dirección y conducción exitosa de la actividad competitiva del atleta.

    En las actuales circunstancias, el deporte cubano exige de lógicos procesos de cambio y seguimiento en algunos parámetros de desarrollo, de forma que estén a tono a los nuevos tiempos. A diferencia de otras épocas, hoy existen otros enfoques pues ha cambiado sustancialmente el marco, y el contexto, otros factores de influencia psico-social y geopolítico han marcado sustancialmente al ámbito deportivo internacional, no quedando ajeno a su influencia el deporte nacional. En este sentido hemos centrado nuestra atención en recientes resoluciones que permitirían, de forma plena la inclusión de nuestros deportistas en actividades internacionales al más alto nivel con apego a normas vigentes, permitiendo las contrataciones en el extranjero y por consecuencia adquirir los beneficios de sus resultados deportivos. Estas novedosas concepciones permiten el logro de un fortalecimiento de los verdaderos pilares de la formación del entrenador deportivo cubano que diariamente se enfrenta al proceso de dirección pedagógica en el alto rendimiento, puesto que altos niveles de exigencia competitiva, requieren de superiores rendimientos en la dirección del proceso y esto indudablemente está sujeto al alcance inmediato de una vocación y de un talento superior, producto de una constante preocupación por elevar la disposición individual y colectiva en aspectos tan primordiales en el status de entrenador como la sistematización cultural general, el interés y la elevación de su capacidad cognoscitiva, científica, investigativa, académica, política, ética y moral, que en definitiva redundará en una mayor preparación para el accionar y apropiación de los nuevos conceptos en nuestros deportistas.

    En la actualidad, estas exigencias a veces se dificultan y se alejan con frecuencia de los niveles reales de actuación de los entrenadores de fútbol de nuestras instituciones deportivas que comúnmente participan preparan y dirigen los equipos en las principales competencias nacionales, atendiendo a sus perfiles de exigencia y en su formación integral general, factores como la motivación hacia una superación permanente de forma integral, lentos procesos de aprendizaje y búsqueda de nuevos y superiores conocimientos que identifiquen categóricamente al entrenador, además del desarrollo de los conocimiento socio-culturales, pobre actualización y tratamiento metodológico de las principales temáticas referenciales del contexto futbolístico internacional, junto con no contemplarse con seriedad objetiva la actividad científico-investigativa, esencia fundamental de los procesos de desarrollo en el deporte.

    El entrenador deportivo va a ser uno de los elementos más importantes en la puesta en práctica de una estrategia o un modelo psico-pedagógico concreto, ya que es la persona encargada de guiar los procesos de formación y preparación para las actividades competitivas. Por tanto es importante que el entrenador se capacite y actúe en consonancia con la categoría y nivel de sus jugadores, adecuando a éstos todos los contenidos del entrenamiento. El entrenador debe estar sujeto en todo momento en su modo de accionar desde una perspectiva educativa en todas las aristas de desarrollo, por lo que su preparación y formación estarán a tono con cualquier otro profesional de la actividad científica universal, pero además en un campo más específico como es en el desarrollo de una alta maestría en la transmisión de altos conocimientos en técnicas específicas y sobre todo la conducción y formación de la personalidad de sus dirigidos.

    Todos los elementos mencionados anteriormente se relacionan entre sí para concretar una novedosa problemática investigativa, que justifica el lógico proceso de perfeccionamiento y desarrollo de una política acertada en la conceptualización contemporánea del entrenador de fútbol dentro de la conducción de los procesos formación, desarrollo y de dirección de futbolistas eficientes, de forma que tribute a la formación integral del entrenador de estos tiempos y su necesaria imbricación en un incipiente panorama futbolístico mundial que permita alcanzar que el fútbol cubano concrete su anhelada ubicación final en el espacio internacional el cual que si hemos logrado en muchos de los deportes practicados en Cuba con espacios permanentes en campeonatos mundiales y olimpiadas.

Fundamentación

    El rendimiento deportivo de los jugadores es el resultado de una relación entre estos y aquéllos que los entrenan y los atienden, hoy día se exige del entrenador altas calificaciones para ejercer su profesión, lo cual determinan y acentúan su estatus y su influencia en los atletas. Comentaba Jorge Valdano, jugador internacional de la selección argentina, campeón mundial México 1986 en la ponencia presentada en el II Congreso de entrenadores de fútbol de Perlora titulada “Así veo al entrenador de fútbol”, al ser requerido por el Comité Organizador de este Congreso para analizar la figura del entrenador desde su condición de exjugador y cito: “Vi a entrenadores estudiosos que trasladaban recetas y a entrenadores estudiosos que inventaban recetas. Elegí a los que creaban. Vi entrenadores que no tenían recetas, ni imaginaban, ni estudiaban y tuve la sensación de estar perdiendo el tiempo. Vi a entrenadores preparados, sensibles, apasionados y gracias a ellos creo en el futuro de esa profesión. Yo he confiado siempre en el hombre, en sus virtudes, en sus aspectos positivos y por extensión creo en los entrenadores que son capaces de elevar los mejores valores de sus dirigidos, ayudándolos a amar lo que hacen. Dice Martí del General San Martín que: «criaba en cada soldado la condición saliente». No se le puede hacer un elogio mejor a un entrenador. Sé que no es tarea fácil estar al frente de una tropa suspicaz, individualista y vanidosa como las que integramos los jugadores de fútbol y pienso, por eso, que la formación de un entrenador no debe detenerse en lo exclusivamente futbolístico”.

    El entrenador interviene en todos los parámetros de formación y rendimiento del jugador con marcada influencia, avalado en lo fundamental por su potencial de dirección que significa una unión favorable de aptitudes y cualidades que en su interrelación crean las posibilidades psicomotrices necesarias para que el sujeto pueda integrar todos los conocimientos y habilidades en la preparación y dirección de los procesos competitivos en las facetas de desarrollo deportivo y resolver de forma creativa las variadas situaciones que se presentan en los mismos. Continuaba Valdano en el mismo contexto, “Es un principio pedagógico indiscutible que la identidad entre estudiantes y profesores se fortalece si trasciende la historia con el profesor de historia y la geografía con el profesor de geografía. Hay que conocer al ser humano y no solamente la respuesta del ser humano a una materia determinada. Sólo técnicos integralmente preparados abrirán canales de comunicación con sus jugadores, despejando el camino de dificultades e incomprensiones que amenazan enturbiar las relaciones de quienes deben solucionar los mismos problemas desde responsabilidades distintas. Resuelve el que conoce y mejor conoce el que más sabe”. También acotaba, “El que sepa entender la magnitud docente de su función, entenderá que el fútbol es un vehículo de refinamiento cultural tan bueno como cualquier otro, digan lo que digan aquellos que lo desprecian porque no lo conocen, que lo subestiman porque no lo entienden”. Las concepciones y criterios de Valdano, alguien convertido en mi modo de ver en un paradigma del ejemplo futbolístico de la sistematización cultural integral, refuerzan nuestra teoría, sobre la objetividad y dimensión de este elemento y de lo posible a alcanzar por un entrenador bajo patrones de conductas con altas notas e indicadores de actuación profesional y psico-social-cultural.

    En las escuelas de iniciación deportiva cubana, el entrenador de fútbol está obligado de hecho a poseer múltiples cualidades formativas, educativas, alta capacidad de instrucción y desarrollo cognoscitivo, interés por la superación, responsabilidad y sentido de pertenencia así como elevada actitud y control de la actividad psico-pedagógica. El tema en cuestión tiene antecedentes a través de una de las tareas del proyecto (Formación de la Cultura general integral de entrenadores del alto rendimiento en Holguín), dirigido por el autor de este artículo y un equipo multidisciplinario del departamento de teoría y práctica del deporte en la Universidad de la ciencias de la cultura física y el deporte de Holguín -Cuba en el periodo 2005-2007 y los posteriores trabajos de maestrías, presentados por el especialista Melchor Anido titulado “Cultura general integral de entrenadores del alto rendimiento en el Balonmano” y Jiménez con igual temática en el ciclismo, los que sirven de referencias investigativas en la provincia, el diagnóstico realizado infiere, según se pudo constatar que las principales insuficiencias son resultado de no contar con una concepción teórica que permita revelar, desde el contexto deportivo, la comprensión teórica y práctica de la dimensión cultural asociada a la instrucción deportiva y la importancia didáctico pedagógica de una adecuada base cultural educativa en la escuela. Con lo referido se denotan insuficiencias en el tratamiento teórico-didáctico en el proceso de sistematización de la cultura en el contenido del entrenamiento, dada por la contradicción entre los nuevos conocimientos y adelantos pertenecientes a la cultura y su inclusión en el contenido práctico deportivo y su necesaria individualización, así como el deficiente procedimiento para lograrlo. Otras evidencias se muestran en el insuficiente dominio teórico en torno al tratamiento didáctico para sistematizar la cultura en el contenido del entrenamiento deportivo, además de limitada concepción sobre la influencia general de la misma, centrada por lo general en otras aristas e indicadores.

    También se reconocen dificultades en las interpretaciones y puntos de vista didácticos y en la determinación del procedimiento a seguir para la inserción de la cultura en el contenido de la enseñanza práctica desde el entrenamiento deportivo y en el tratamiento de los sistemas de influencias socio-culturales para las actividades deportivas, que incluye además el proceso de entrenamiento, el cual n cuenta con los suficientes elementos de apoyo con referencia a logros de la ciencia aplicadas en el ámbito futbolístico internacional, hecho que conspira contra el logro de un entrenador con posibilidades para actuar dentro de este marco en el fútbol contemporáneo lo cual redunda en una evidente descontextualización informativa, comunicativa, didáctico-pedagógica con respecto a formas, métodos, procedimientos implícitos del fútbol al más alto nivel para poder contactar modelos existentes.

    En general estas insuficiencias y limitaciones,las relacionamos dentro de un contexto en torno a la necesaria sistematización cultural, incidente en su desempeño pedagógico profesional como elementos de gran influencia en el marco formativo educativo del futbolista, visto como un proceso pedagógico dirigido a perfeccionar las capacidades y actitudes de los jugadores, de modo que les permita alcanzar un nivel en su rendimiento acorde a las exigencias del fútbol moderno; la inteligencia, conocimiento y formación cultural de sus entrenadores ofrecerá mayores alternativas para vencer los retos en su labor profesional.

Conclusiones

    Visualizar el accionar de los entrenadores de forma integral en sus manifestaciones éticas y culturales dentro de la escuela y en cada una de sus áreas de trabajo durante las actividades de conducción del proceso, permite una interrelación directa con todo el proceso diario de desarrollo del centro educativo, este procedimiento aportan elementos muy valiosos para el análisis del accionar didáctico pedagógico en las etapas de iniciación y desarrollo del futbolista cubano.

    Por otro lado la necesidad de aplicar estrategias metodológicas capaces de lograr aportes científicos en la proyección conductual de entrenadores, debe coincidir con todo los procesos complejos del mundo actual, exigiendo la necesidad de alcanzar una mayor concatenación entre el sector científico deportivo y académico, con el propósito de propiciar un desempeño mayor en la labor instructiva educativa además de una proyección hacia el campo de la investigación que de respuestas a la lógica de los proceso de introducción y generalización de los resultados en el deporte, generando los avances que este sector requiere para su desarrollo sostenido.

    Bajo estas condiciones se hace necesario el perfeccionamiento de la formación y modo de actuación de los profesionales del fútbol, pues ellos son los encargados de formar a las nuevas generaciones de atletas en las instituciones educativas, como centros importantes de transmisión, adquisición, asimilación y creación de cultura. En la actualidad, es imposible alcanzar un desarrollo social a través de instrucción educación sin tener como centro principal a la cultura, y es que esta última, como fenómeno social complejo, constituye el medio idóneo y eficaz para la preparación, formación y desarrollo de los hombres, aún cuando llegan a la etapa de formación y desempeño como profesionales.

Bibliografía

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