La evaluación, una vía para la planificación sobre bases  conocidas en el rendimiento técnico-táctico del judoca
	*Jefe de Alto Rendimiento Universidad Deportiva del Sur (Venezuela) **Máster en Metodología del Entrenamiento Deportivo para la Alta Competencia Entrenador de Judo. Cinturón Negro Tercer Dan Universidad de Ciencias de la Cultura Física y el Deporte “Manuel Fajardo” Facultad de Granma (Cuba) ***Metodólogo de Deportes de Combate Profesor titular de la UCCFD (Cuba)	MSc. José Alejandro Gerardo Pacheco* MSc. Adriel Acosta Mendoza** adrielacosta1974@gmail.com Lic. Arnel Nicolás Marrero Arévalo*** alegerardo29@yahoo.com
	Resumen           El proceso de evaluación es un mecanismo que permite la mejora y desarrollo integral del nivel técnico-táctico de los judokas en Tashi-Waza; sin embargo en la actualidad son insuficientes los procedimientos que sustentan la evaluación del nivel técnico-táctico de los judokas en Tashi-Waza, afectando la posibilidad de ofrecer una valoración integral del nivel técnico-táctico como totalidad, limitando el alcance y efectividad de las decisiones para la mejora, por ello el autor se ha propuesto: elaborar una alternativa metodológica para evaluar el nivel técnico-táctico del Tashi-Waza en atletas escolares de la EIDE de Granma. En este sentido en la metodología empleada se utilizan los métodos de investigación del nivel teórico y empírico; así como métodos estadísticos. Conformaron la muestra 8 atletas del sexo masculino del deporte Judo pertenecientes a la categoría 14-15 años de la EIDE en la provincia de Granma. Los resultados más relevantes fueron, la incorporación de la evaluación de acciones defensivas y contraataques como componentes técnico-tácticos de la actividad competitiva, la elaboración de una alternativa metodológica para evaluar el nivel técnico-táctico del Tashi-Waza, donde se distingue la integralidad de su enfoque. Todo esto ofrece una respuesta a la contradicción entre la necesidad de evaluar integralmente el nivel técnico-táctico de los judokas y la carencia de una alternativa metodológica pertinente para ello, referido a la producción de información caracterizadora y valorativa del funcionamiento del nivel técnico-táctico del Tashi-Waza como totalidad, para su mejora continua. Lo que constituye una valiosa referencia para la evaluación del nivel técnico-táctico de los judokas en este campo.           Palabras clave: Judo. Evaluación. Planificación.
	EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 18, Nº 186, Noviembre de 2013. http://www.efdeportes.com/

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Introducción

    Una de las vías que ha establecido la dirección deportiva nacional en nuestro país, para poder unificar criterios acercas del proceso de planificación, control y evaluación del entrenamiento deportivo lo constituyen los Programas de Preparación del Deportista. Por tal razón, estos se sitúan en la cúspide metodológica respecto al proceso de preparación de nuestros deportistas, de ahí la importancia de mantener actualizados sus contenidos.

    Estos documentos han transitado por varios cambios y adecuaciones en sus contenidos desde el surgimiento de los “Programa para Áreas Deportivas Masivas y Especiales”, en el 1977, los Subsistemas del Deporte de Alto Rendimiento en 1984, los programas de preparación del deportista en 1991, su actualización en 1996 y la última edición de un nuevo programa de preparación del deportista 2007.

    Estos programas puntualizan con acertada exactitud las direcciones principales del proceso de la preparación del judoka. Evidencian las tareas de la preparación técnica, táctica, psicológica y teórica, además ofrece para el proceso de control y evaluación, acciones y normativas con criterios evaluativos para las diferentes categorías y sexos, tanto en el orden físico, como técnico.

    Se plantea que en los deportes de combates, lo que determina el éxito, es el modo en que se usan los recursos de que se disponen.

    Por tanto se puede establecer una relación directa entre la actividad competitiva y una alternativa metodológica que permita evaluar el nivel técnico -táctico de los judokas agrupando un conjunto de elementos que relacionados entre sí constituyan un medidor íntegro, cuyo comportamiento global refleje la realidad competitiva, con el objetivo general de elaborar una alternativa metodológica que permita evaluar integralmente el nivel técnico-táctico del Tashi-Waza en atletas escolares de Granma.

    La contribución práctica de la investigación consiste en la propuesta de una alternativa metodológica para evaluar el nivel técnico-táctico de los judokas en Tashi-Waza, viable y oportuna para mejorar el nivel técnico-táctico, a partir de las exigencias actuales que emanan de la competencia, encaminado a elevar los resultados del deporte y en eso radica su pertinencia.

    La novedad científica radica en la especificidad del contenido de la evaluación, diseñada a partir de las particularidades de la gestión del nivel técnico-táctico y en la integralidad de su enfoque, lo que garantiza la obtención de una información que caracteriza el comportamiento como totalidad

Fundamentos teóricos

    La finalidad del Entrenamiento Deportivo para la Alta Competencia es alcanzar cada día mejores resultados, esta concepción ha variado mucho en la historia del deporte, dado esto por los avances científicos y tecnológicos que se aplican al acontecer deportivo en particular, como son las modificaciones de las reglamentaciones y formas de competición, lo que ha provocado que los entrenadores busquen durante el proceso de dirección del entrenamiento diferentes alternativas metodológicas que permitan evaluar el rendimiento de los atletas y así mejorar los resultados deportivos.

    En este sentido: La Dra. Alejandra O'Farrill Hernández (2001) considera la evaluación como un “acto verificativo” es la aplicación de un conjunto armónico de pruebas motrices, científicamente concebidas y aplicadas, las cuales contemplan el empleo de la medición y la observación como métodos de investigación. Es decir, la evaluación es un sistema complejo, que se concibe para controlar, calificar e informar acerca del estado diagnóstico del atleta, para predecir su conducta futura. Su aplicación tiene como objetivo esencial dirigir de forma adecuada el resultado competitivo, a partir del procesamiento de la información que emana de la aplicación de un acto verificativo.

    Sobre la base de la consideración anterior el autor asume la posición la posición de que un acto verificativo confiere un marcado carácter fiscalizador, que se relaciona con comprobar, examinar, vigilar algo o a alguien, en cambio la función de la evaluación se centra en la valoración cualitativa del proceso de entrenamiento, en la estimación o apreciación del mérito del atleta como mecanismo de mejora continua del nivel técnico-táctico.

    Tal como se ha visto los autores que han definido el concepto evaluación y para los efectos de esta investigación se asume la posición de que la evaluación es un proceso sistemático de recogida de datos, incorporado al sistema general de actuación deportiva, que permite obtener información válida y fiable para formar juicios de valor acerca de la situación, estos juicios, a su vez, se utilizarán en la toma de decisiones con objeto de mejorar la actividad deportiva valorada.

    Existen otros elementos que deben ser tenidos en cuenta en cualquier acción evaluadora, estos tienen que ver con el para qué se evalúa, cuál es el objetivo o propósito de la evaluación, qué se pretende hacer con los resultados de la misma y quién está interesado en hacerlo. Es necesario conocer qué evaluar, o sea, hay que tener claridad conceptual sobre el contenido que se va evaluar, sus dimensiones y aspectos concretos que permitan definir indicadores que puedan ser utilizados para valorar la realidad existente. La garantía para lograr la objetividad en lo que se pretende evaluar incluye definir el cómo se va a obtener y qué métodos y técnicas se utilizarán.

    Lo anterior, no podrá ser logrado si no se tiene en cuenta qué base de comparación será usada para juzgar el valor, es decir, cuáles son los criterios valorativos que servirán de patrón para contrastar, con ellos, la situación conocida.

    Una evaluación que cumpla con lo expresado anteriormente, debe ser:

• Objetiva: La acción evaluadora debe captar lo que sucede en la realidad mediante métodos, procedimientos e instrumentos que eviten que, las ideas preconcebidas y los intereses de quien realiza la evaluación afecten el resultado de la misma.

• Confiable: La evaluación debe ajustarse a la veracidad y estabilidad en la información; así como de los resultados obtenidos.

• Integrada e integral: La evaluación debe ser entendida como una fase más de todo lo que conforma el desarrollo de un proceso y ser aplicada, de forma global o parcial. En este último caso se debe percibir contextualizada e interrelacionada con los restantes elementos del proceso que permitan una visión holística.

• Perfectible: La propia acción evaluadora, en cada experiencia aplicada, debe permitir su mejora y enriquecimiento, tanto del proceso, como de sus resultados.

• Continua y recurrente: Sus efectos no sólo serán conocidos al final, sino durante todo el proceso, a partir de la contrastación de los resultados obtenidos, a través de la retroalimentación.

• Criterial y suficiente: Los criterios evaluativos que se determinen deben clarificar el proceso y evaluar con rigor los resultados.

• Decisoria: Los datos obtenidos y la información derivada deben facilitar la formulación de juicios de valor que permitan fundamentar la toma de decisiones.

• Instructiva y formativa: Se aprende a evaluar cuando se participa de forma directa y creativa en acciones evaluadoras para perfeccionar tanto el proceso como los resultados de la acción evaluativa.

• Educativa: La evaluación debe incidir en la conducta y el comportamiento de las personas, o los colectivos que participan en ella.

    Esta multifuncionalidad se refleja en la diversidad de propósitos que puede motivar una evaluación. Por tanto, se parte del criterio de que la evaluación es un proceso conducente a la mejora cualitativa de cualquier ámbito de la actividad deportiva, pues esta tiene que dirigirse a tres objetivos, derivados de la toma de decisiones inherentes a la evaluación:

• Perfeccionar el sistema de gestión del nivel técnico-táctico en su totalidad.

• Lograr la pertinencia y estabilidad del nivel técnico-táctico.

• Elevar la eficacia del entrenamiento deportivo.

    La evaluación posee diferentes aplicaciones en el entrenamiento deportivo y dependerá del momento en que se utilice para darle uno u otro significado.

    Al respecto, Fraire (1996) citando a distintos autores comunica la existencia de cuatro tipos de evaluaciones que a continuación desglosamos:

• Inicial o de diagnóstico: Tiene como finalidad facilitar la planificación sobre bases conocidas; es decir, teniendo en cuanta las capacidades, estado físico, conocimientos y experiencias anteriores del atleta. Los datos iniciales son fundamentales para ajustar los objetivos y adecuar la programación a seguir.

Las acciones a desarrollar están referidas a los siguientes pasos:

1. Detectar los conocimientos previos de cada uno de los sujetos.

2. Identificar las dificultades con las que se van a encontrar.

3. Identificar la naturaleza específica de la tarea a realizar.

4. Determinar las causas o factores que determinan esa dificultad.

5. Formular un plan de entrenamiento adecuado.

6. Utilizar los resultados obtenidos para diseñar una nueva fase.

• Formativa: La evaluación continua surge al entender el entrenamiento como un proceso de perfeccionamiento continuo, necesitando instrumentos que controlen su evolución.

    En cada etapa precisamos de estos controles que faciliten a los deportistas y entrenadores un conocimiento puntual, para realizar los ajustes precisos sobre lo programado.

    Se trata de integrar el proceso de evaluación en la actividad deportiva, sacando de sus resultados aplicaciones inmediatas que la perfeccionen y determinar en qué grado se consiguen los objetivos previstos.

    Para este tipo de evaluación se empleará básicamente la observación, debiendo contemplar:

1. Los cambios obtenidos gracias al entrenamiento.

2. Sobre la base de unas metas u objetivos explícitos.

3. ¿Qué deben alcanzar los atletas entrenados?

    Sumativa o de producto final: Es la síntesis de los resultados de la evaluación progresiva, teniendo en cuenta la evaluación inicial y los objetivos previstos para cada nivel. Podemos emplear dos estrategias, una marcada por la norma y otro por el criterio.

Metodología

    Para desarrollar el proceso investigativo en el cual se enmarca el tema tratado acerca de la evaluación de los elementos técnico-tácticos se tomó una muestra de 8 atletas del sexo masculino del deporte Judo pertenecientes a la categoría 14-15 años de la EIDE en la provincia Granma, dos de ellos son de primer año y el resto son del segundo año de la categoría.

    Se seleccionaron también 17 expertos del deporte Judo, con un promedio de 23 años de experiencia laboral en el mismo, todos ostentan el grado de cinturones negros (de 1º a 3º Dan)

    Durante el proceso investigativo fueron utilizados métodos de investigación del nivel teórico y empírico; así como métodos estadísticos.

    Del nivel teórico, los principales métodos empleados fueron: el de análisis histórico-lógico, el análisis-síntesis, el hipotético-deductivo, el inductivo-deductivo y el sistémico estructural funcional.

    Los métodos del nivel empírico empleados fueron el experimento, la observación, la medición y el criterio de expertos (Delphi).

    Técnicas utilizadas: La encuesta y el análisis de documentos.

    Dentro del paquete estadístico SPSS versión 11.5 para WINDOWS los más usados estuvieron las pruebas de Hipótesis, aplicando la dócima no paramétrica de Friedman, los estadígrafos de la estadística descriptiva.

    La investigación a un nivel fenomenológico se desarrolló durante el curso (2009-2010). Se caracterizó por una actividad investigativa de revisión, estudio de propuestas existentes o afines que están dirigidas al logro del objetivo propuesto por el investigador, su análisis crítico, estudio diagnóstico de la actividad deportiva objeto de estudio y las formas de evaluar el nivel técnico-táctico de los judokas en Tashi-Waza.

    El experimento se utilizó en cuatro momentos:

• Se realizó el diagnóstico inicial para caracterizar la situación actual del nivel técnico-táctico de los atletas, además de entrevistas a 17 entrenadores para identificar las formas de evaluación del nivel técnico-táctico de los judokas.

• Fase de evaluación inicial (EPEV) con el objetivo de determinar el dominio previo de los elementos técnico-tácticos.

• Fase de evaluación progresiva o formativa (EPE) y (OBT-FD) para determinar si los objetivos se van cumpliendo y las posibles causas de errores de la dirección técnico-táctica.

• Fase de evaluación final o sumativa (ESTAB-FD) para determinar la integralidad del nivel técnico-táctico alcanzado por los atletas.

Concreción de la alternativa metodológica para evaluar el nivel técnico-táctico de los judokas en Tashi-Waza

    Es importante retomar aquí que para los efectos de esta investigación se asume la posición del autor Blázquez (1999) con relación a la evaluación continúa, que la misma es un proceso sistemático de recogida de datos, que permite obtener información válida y fiable para formar juicios de valor acerca de la situación, estos juicios, a su vez, se utilizarán en la toma de decisiones con el propósito de mejorar la actividad deportiva.

    Esto exige tomar partido y asumir una posición en el plano pedagógico, curricular y didáctico para conformar la concepción general que distingue a la alternativa y orienta las vías para su introducción en la práctica pedagógica.

Representación gráfica de la alternativa metodológica para evaluar el nivel técnico-táctico de los judokas en Tashi-Waza

    Como se puede apreciar, está alternativa metodológica para evaluar el nivel técnico-táctico de los judokas en Tashi-Waza es adecuada ya que cumple con las siguientes características:

• Se relaciona con los objetivos de la dirección técnico-táctica.

• Es integral y uniforme; es decir, se relaciona con todo el macrociclo de entrenamiento.

• Está estructurada de manera coherente y continua.

• Es funcional y práctica, y se encuentra al alcance de los entrenadores.

    Por tanto esta alternativa expresa la integración pedagógica entre el proceso de evaluación y la preparación de la dirección técnico-táctica del Tashi-Waza.

Análisis y discusión de los resultados

Resultados de la aplicación de la alternativa metodológica para evaluar el nivel técnico-táctico de los judokas en Tashi-Waza

    La alternativa metodológica se aplicó en cuatro (4) momentos del macrociclo de preparación, la primera aplicación fue en el inicio (1ª semana) de la etapa de preparación especial variado, la segunda en el inicio (1ª semana) de la etapa de preparación especial, la tercera aplicación se realizó en la etapa competitiva al inicio (1ª semana) de la obtención de la forma deportiva y la cuarta se realizó en el inicio (1ª semana) de la etapa competitiva pero en la estabilización de la forma deportiva.

    Planificación de la evaluación que se sugiere:

    La funcionalidad de la alternativa metodológica se produce a través de sus tres fases que se derivan de la evaluación continua: de evaluación inicial, de evaluación progresiva o formativa y de evaluación final o sumativa. En el accionar práctico de la evaluación cada fase consta de sus objetivos, momento, instrumentos y decisiones referentes al resultado.

Primera fase: De evaluación inicial

    Los datos obtenidos como resultado de la evaluación inicial y una vez identificada todas las dificultades de dominio previo del nivel técnico-táctico en Tashi-Waza, facilita al entrenador reformar sus objetivos en la dirección técnico-táctica y al mismo tiempo la planificación sobre bases conocidas, diseñando un plan de entrenamiento adecuado con la finalidad de buscar una mejora de los resultados de evaluación.

    La evaluación inicial (integral) del nivel técnico-táctico en Tashi-Waza permitió establecer juicios de valor acerca del comportamiento de la dirección técnico-táctica como totalidad, donde la información obtenida sobre estos, posibilitó la adopción de decisiones encaminadas a elevar la pertinencia y estabilidad de los recursos técnico-tácticos.

Segunda fase: De evaluación progresiva o formativa

    En esta fase se pudo corroborar que el mejoramiento de los ataques directos y acciones defensivas son de vital importancia en el desarrollo del nivel técnico-táctico del judoka; los ataques directos como medio fundamental en su accionar de cada situación de combate en el Tashi-Waza; las acciones defensivas como elemento inseparable del judoka porque amparan o protegen al competidor de los ataques del contrario y permiten pasar a la ofensiva, o pueden adoptar un carácter pasivo o activo durante el combate.

    Tal como se ha visto durante las contiendas del Judo tenemos atletas que no realizan combinaciones y contraataques; pero sí necesariamente dependen de una fuerte defensa para evitar ser vulnerados al ataque de los adversarios.

Tercera fase: De evaluación final o sumativa

    En esta fase se demostró el éxito de este proceso de evaluación integral donde los elementos técnico-tácticos se encuentran en una necesidad vital de nuestro deporte. Esta necesidad se basó en diversas razones, entre las que se encuentran: el lugar que ocupan los recursos técnico-tácticos como factor estratégico de las competiciones, la complejidad, naturaleza y el contenido en gestión del resultado competitivo y de las especificidades de las diferentes acciones técnico-tácticas que participan en dicha gestión.

    Por tanto se pudo corroborar que esta alternativa metodológica logró dar una visión integral de los atletas que están siendo evaluados.

    Estos resultados permiten que el entrenador certifique el nivel técnico-táctico en Tashi-Waza de los atletas de Judo de la categoría 14-15 años.

Conclusiones

    En la revisión de los presupuestos teóricos que respaldan la conducción de la evaluación técnico-táctica del Judo en Tashi-Waza se evidenció la falta de elementos claves del proceso como son las acciones defensivas y contraataques y, del mismo modo, no se indican acciones evaluativas para el conocimiento del desarrollo integral del atleta desde el punto de vista técnico-táctico.

    Los datos aportados en cada una de las evaluaciones permiten a los entrenadores reformular de manera más acertada los objetivos y direcciones del entrenamiento, cumpliendo con el carácter individual y personalizado del mismo.

    La aplicación de una alternativa metodológica sustentada en los componentes técnico-tácticos del Tashi-Waza permite evaluar de forma integral al judoka, del mismo modo que facilita recibir una información oportuna del comportamiento integral y de cada uno de los componentes técnico-tácticos asimilados. Reafirmando la hipótesis de la investigación.

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