Tratamiento del esguince lumbar crónico con masoterapia
	Filial de Ciencias Medicas Baracoa, Guantánamo (Cuba)	Freddy Durán Montero Rafael Caballero Calderin fredd.gtm@infomed.sld.cu
	Resumen           Se realizó un ensayo clínico terapéutico fase II temprana para determinar la eficacia del tratamiento con masoterapia en dependencia del diagnóstico tradicional en pacientes con esguince lumbar crónico; se indica tratamiento con masoterapia. Se realizó un seguimiento a los pacientes en la consulta, los cuales evolucionaron de forma satisfactoria, mejorando su estado general; evolutivamente el paciente responde de forma favorable a esta terapéutica con alivio de la crisis de falta de aire; además los periodos de crisis de asma disminuyen en frecuencia, permitiendo que el paciente disminuya el consumo de esteroides.           Palabras clave: Esguince. Tratamiento. Masoterapia.
	EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires - Año 18 - Nº 182 - Julio de 2013. http://www.efdeportes.com/

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Introducción

    En rehabilitación, como en la mayoría de las disciplinas médicas, el elemento capital y determinante en la evaluación del paciente es la presencia y las características del dolor. Se sabe que es la causa más frecuente de consulta médica después del resfriado común. Alrededor de 30 a 45% de los casos de consultas de rehabilitación, lo constituyen los dolores de espalda. Para Carey y cols., el dolor paravertebral crónico es una condición debilitante con un gran costo médico y social, elemento corroborado por otros autores. (1)

    Cuba no queda fuera de este contexto internacional, por lo que en las consultas de rehabilitación ocurre una situación similar. Son numerosos los pacientes aquejados de algias vertebrales, tanto lumbares como dorsales y cervicales presentan síntomas en diferentes estadios evolutivos, que requieren una intervención médica.

    Por lo tanto, el trabajo integrador del elemento pasivo como del activo, y ambos bajo control de un tercer nivel, el elemento neural, será el indicado para el correcto manejo del paciente con dolor vertebral crónico. De esta manera, el alivio del dolor como objetivo final de tratamiento pasa a un segundo plano a favor de la mejoría funcional. Bajo la premisa de que el movimiento influencia fuertemente los sistemas de control inhibitorio central, parece lógico que la terapia dirigida a recuperar la función, restaurará el flujo neural, normalizando el procesamiento central y, por lo tanto, la función del paciente, permitiendo de esta manera la verdadera rehabilitación; vale decir, restablecer la función, reducir la conducta de enfermedad, y conducta dolorosa, y promover un rápido retorno al trabajo. (2, 3, 4)

    La postura erecta que distingue al hombre de los animales es el producto de quizás de 30 millones de años de evolución. Estas transformaciones también han afectado la columna vertebral, la que se ha deformado e incursado, sin que se haya producido, sin embargo, adaptaciones significativas a las demandas de la posición erecta.

    Al tratar de mantener la posición vertical, el hombre se ha expuesto seriamente a sufrir dolores de espalda, el peso del cuerpo en la articulación lumbosacra se convierte en una fuerza de deslizamiento, tratando de sostener en sitio toda la columna sobre la pelvis, cuyo resultado es un esfuerzo para que las estructuras de soporte puedan mantener la postura erecta. Es esta insuficiente adaptación biomecánica lo que hace de la columna del hombre actual una estructura muy vulnerable, asiento frecuente de cuadros dolorosos y que lo han llevado desde los comienzos de su historia misma a preocuparse de su tratamiento.

    La columna en su totalidad es considerada una estructura dinámica. Como estructura dinámica sus tejidos deben poseer ciertas características, como elasticidad y resistencia. (4, 5, 6)

    Son muchas las tareas de la vida diaria que constituyen agresiones directas para la columna. La tensión muscular, las malas posturas de pie y sentado, las malas posturas durante el uso de las computadoras, el sobreesfuerzo, la sobrecarga de peso, el sedentarismo y las cargas emocionales, se fijan en la espalda desajustando el alineamiento vertebral y produciendo molestias de muy diversas graduación, que pueden ir desde los ligeros pero persistentes dolores de espalda, hasta la inmovilización típica de una lumbalgia ó una dolorosa tortícolis, sin contar con una gran cantidad de patologías que no se relacionan con el desajuste vertebral y que, en realidad, tienen su origen en este. (6, 7, 8, 9)

    El masaje es uno de los medios más fáciles a nuestro alcance para conseguir una buena salud y para mantenerla una vez conseguida.

    Es un método terapéutico que consiste en friccionar, amasar o percutir el cuerpo o una parte del mismo para aliviar dolor y otros síntomas de enfermedades y lesiones.

Clasificación del masaje

• Terapéutico

• Deportivo

• Higiénico

• Estético

    Nosotros por tratar en centros de salud donde acude el paciente con dolor y otros síntomas de enfermedades, utilizamos el terapéutico, con el objetivo de mejorar la dolencia combinándolo con otras técnicas de fisioterapia.

    Un instrumento tan simple como nuestras manos basta para aliviar jaquecas, dolores, molestias, el insomnio, la tensión y el estrés.

    La base del masaje es el sentido del tacto. El contacto físico es algo tan normal, que a falta de él, las personas se deprimen y tornan irritables. Según ciertos estudios, los niños criados en ambientes familiares en que padres e hijos se prodigan habitualmente ese contacto hace que crezcan más sanas y resisten mejor el dolor y la enfermedad, que los niños desprovistos de él. Duermen mejor, son más sociables y en general son más felices. La necesidad de contacto físico no es exclusiva de la infancia, también la sentimos los adultos.

    El papel del masaje nos hace tener mayor contacto físico entre las personas, ya que está libre de cualquier connotación agresiva o sexual. Por eso nacía la forma más simple de masaje puede resultar altamente beneficiosa.

    Dar un masaje es algo semejante a una meditación activa. Para hacerlo bien, has de estar tranquilo y completamente concentrado en lo que estas haciendo. Si te concentras en el ritmo del masaje, no tardas en relajarte también plenamente y esta sensación tuya se transmite a la persona a la que estas dándoselo. (10, 11)

    De esta forma no solo se trabaja mejor, sino que al final sientes lleno de energía.

Indicaciones

1. Cualquier afección para eliminar dolor.

2. Reducción de la tumefacción o movilización de tejidos contracturados.

3. Fracturas, dislocaciones, lesiones articulares benefician en ciertos esguinces estadios de su recuperación, contusiones, lesiones tendinosas y nerviosas.

4. Afecciones paralíticas: Hemiplejía, Paraplejía, Cuadriplejía, etc.

5. Artritis - Periartritis - EAP - Sacrolumbalgia.

6. Psiconeuróticos, psicoticos. (11, 12)

Objetivo

• Demostrar la efectividad del masaje en el tratamiento del Esguince Lumbar Crónico.

Técnica de aplicación

    Consejos previos para dar masaje: Para sacar el máximo provecho del masaje, imparta el lugar elegido para darle el aval debe ser una habitación cálida, tranquila, iluminada tenuemente, donde ambos se encuentran a gusto y que sólo quede al descubierto la zona del cuerpo que recibe el masaje. El que recibe el masaje debe de estar acostado en una superficie firme, pero acolchada. Por lo general se emplean mesas de kinesiología que miden como 2 metros de largo por 60 cm. De ancho y una altura de una mesa normal. El practicante debe de estar relajado y en posición cómoda para aplicarlo; pero con la técnica requerida: mantener recta su espalda y emplear todo el peso del cuerpo para dar ritmo y profundidad a sus acciones, separe bastante los pies y flexione levemente las rodillas para apoyarse bien cuando haga fuerza con las manos.

    Es recomendable ponerse ropas holgadas y lavables con facilidad; así como las manos.

    Las manos del masajista son las herramientas de trabajo por lo que vale la pena ejercitarlas para aumentar su sensibilidad y hacerlas más flexibles. Por ejemplo:

• Tome en la mano una pelota pequeña de goma y ejercitarse en apretar y relajar sus dedos alrededor de ella.

• Haga girar y estire en todas direcciones todos y cada uno de los dedos de ambas manos.

• Ponga las manos juntas y después alce los codos de manera que las palmas se vayan separando cada vez más. Presione las puntas de los dedos y mantenga la postura unos seis segundos.

    Para diseñar una sesión de masaje puede utilizar una misma técnica la cual puede ser estimulante y relajante, dependiendo del modo de aplicarla. La gracia del masaje está en experimentar, no tiene Ud. que repetir dos veces un mismo programa.

Requisitos para dar un buen masaje

1. El elemento más importante del masaje es el ritmo. El ritmo de los movimientos origina ondas de relajación que se propaga por todo el cuerpo.

2. Todo masaje debe ser agradable.

3. Adapte sus manos al contorno del cuerpo.

4. Mantenga siempre una mano en contacto con él.

5. Variar la fuerza, desde lo más delicado a lo más fuerte: suave en zonas óseas; fuerte en la musculatura.

6. El masaje nunca es cuestión de fuerza. La presión se consigue con el peso del propio cuerpo.

7. Concentración en lo que se está haciendo. No hablar demasiado.

8. No se preocupe sí al principio los movimientos le parecen torpes. El simple hecho de tocar es beneficioso y con la práctica irá adquiriendo mayor facilidad y confianza.

9. Resultará más fácil aprender con un amigo, un familiar o su pareja.

10. Para dar un masaje hay que estar totalmente relajado. Si en un momento no sabe como seguir, continúe con lo que estaba haciendo mientras sus movimientos sean rítmicos, el masaje será bueno y relajante.

Acciones del masaje sobre el estado funcional del organismo

1. Acción Tonificante: Las técnicas de amasamiento, percusión y sacudimiento con sus diferentes manipulaciones y variantes, incrementan la excitabilidad del SNC, produciéndose el mecanismo reflejo, lo cual influye sobre la hipotonía, aumentando la actividad funcional.

2. Acción Sedante: El estímulo rítmico, monótono y prolongado (fricción) ejerce una acción sedante, pues causa agradable placer, disminuyendo la excitabilidad del sistema nervioso (SN). Es importante en la preparación del paciente, disminución del dolor y la excitabilidad posterior a competiciones deportivos.

3. Acción Trófica: Se relaciona con el mejoramiento de la circulación, mejoramiento de la nutrición y por tanto el trofismo del tejido. Esto permite la recuperación de la capacidad de trabajo de los músculos.

4. Acción energótrofica: Se presenta en variaciones funcionales, que incrementan la capacidad de trabajo del aparato neuromuscular Ej.: Actividad bioenergética del músculo, mejoramiento del metabolismo muscular, formación de histamina que dilata los vasos sanguíneos de los músculos y aumenta la temperatura de los tejidos, lo que incrementa la contractibilidad y activa los procesos de fermentación.

5. Acción de la normalización de las funciones: Es uno de los efectivos más importantes del masaje. Normaliza la dinámica de procesos nerviosos (importante en fatigas):

   • Normaliza las funciones de diferentes órganos

   • Regenera tejidos

   • Elimina atrofias.

Orden a seguir en un masaje

Técnicas básicas

    Lo más maravilloso del masaje es que es muy fácil. Una vez dominados unos pocos movimientos básicos ya se está en condiciones de dar un masaje corporal completo o por segmentos.

    Fricción: Pequeños movimientos acompañados de presión que movilizan unos planos sobre otros, usa la cara palmar en los últimos 4 dedos, yema del índice y la eminencia tenar, siempre los movimientos circulares.

1. Fricción en abanico.

2. Fricción circular.

3. Paso de gato.

4. Fricción con los pulgares.

5. Fricción alterna.

6. Fricción lateral.

    Roce: Puede ser superficial o profundo, con la palma de la mano, en sentido centrípeto, favorece el vaciado venoso-linfático.

    Amasamiento: Consiste en presiones con más intensidad y profundidad. Su acción llega a los músculos. Es un movimiento muy útil para zonas como hombros y en partes del cuerpo muy carnosas como las caderas y muslos. Distiende y relaja los músculos tensos.

    Presiones: Una presión directa y profunda resulta eficaz para relajar la tensión de los músculos situados por ejemplo: ambos lados de la columna vertebral y alrededor de los hombros.

1. Presión Estática.

2. Presión Circular.

3. Peinado.

    Percusión: Somete a los tejidos a una serie de golpes manuales con fuerza y frecuencia. Puede realizarse con el borde cubital, la palma, yema de los dedos y el puño cerrado.

1. Martilleo.

2. Golpes de hacha. (12 13 14)

Desarrollo

    Valoramos en la consulta de MTN un paciente masculino, de 48 años de edad, que después de un esfuerzo físico estibando sacos de cemento, comenzó con dolor lumbar sin irradiación a miembros inferiores, fue evaluado por el Ortopedista por crisis de lumbalgia en varias ocasiones realizando labores de poco esfuerzo físico; en la consulta reciente se realizó valoración clínico y complementario:

Examen Físico

    Contractura muscular paravertebral lumbar, dolorosa a la palpación. Maniobra de Goldthwait, dolorosa al movilizar la articulación lumbo sacra.

    Rx: Rectificación de la columna lumbar, se detectan la existencia de anomalía facetaria de orientación en L5 y S1.

    Con los elementos clínicos y radiológicos encontrados en consulta se diagnosticó como un Esguince Lumbar Crónico en crisis de agudización. En la consulta de MTN se decide aplicar Masoterapia en el caquis, se aplicaron un total de 15 sesiones, con lo que el paciente logra un alivio del dolor y de la contractura muscular refleja, el tratamiento se aplica diario.

    La Masoterapia tiene efectos fisiológicos favorables para la salud como:

1. Aumenta el aporte sanguíneo a la región tratada.

2. Aumenta la circulación venosa y linfática.

3. Acelera el drenaje de la región que rodea a una articulación afectada, disminuyendo así la inflamación periarticular.

4. Produce relajación muscular y sedación.

5. Evita la formación de fibrosis y bridas.

6. Disminuye la tendencia a la atrofia muscular.

7. Ayuda al reconocimiento de la zona a tratar.

8. Adaptación al paciente para otras maniobras.

9. Ligera hiperemia.

10. Alivia el dolor.

11. Mejora la capacidad de la función muscular.

    El masaje no sustituye al ejercicio, no aumenta fuerza muscular, pero mejora física y espiritualmente al cuerpo. (13, 14)

Bibliografía

1. Carey, TS, Garrett, JM, Jackman, AM. Beyond the good prognosis. Examination inception cohort of patients with chronic low back pain. Spine2000, Jan; 25 (1): 115-120.

2. Peña, SJL; Umbría, MA. Nuevos conceptos sobre las lumbalgias y guía práctica. Rev Esp Reumatolog. 2002; 29 (10): 489-493.

3. Rehabilitación. Lumbalgia Mecánica. Disponible en: http://www.naturmedicapro.com. Acceso 25 de Enero 2001.

4. Sarno, JE. Ejercicios terapéuticos para el dolor de espalda, En: Basmajian JV. Terapéutica por el ejercicio, 3ª edición. Buenos Aires; Panamericana; 1982, p. 324-339.

5. Cabot J. R. Col. Cirugía del dolor lumbosacro, ponencia oficial del XI Congreso Hispano – Portugués de Cirugía Ortopédica y Traumatología, Valladolid, España, 1977; 1-2.

6. Nachemson, A, Work For All For Those with lowback pain as well. Clin Orthop, 179: 77, 1983.

7. Sprengler, R M. Chronic low back pain: The team approach. Clin orthop, 179: 77, 1983.

8. Llanro Guen, J; Laso Guzmán, F. J. Clave razonadas del Diagnóstico Médico. Barcelona. Edit. Espays, 1985: 107-1126.

9. Smith, G. Dolor Agudo. La Habana. Editorial Ciencias Medicas, 1987: 23-39.

10. Maxwell Hudson, Clare. Como dar un masaje. En el libro completo del masaje. Editorial Evergráficas, SA. 4ta edición 1995. pp. 22-80.

11. Cailliet, R. Localización y Mecanismos Tisulares del Dolor en el Cinturón Escapular. En Síndromes dolorosos. Hombro. El Manual Moderno SA. De CV. 3ra Edición 1994. pp. 53-95.

12. Birikov, A.A. El masaje en la Rehabilitación de Traumatismos y enfermedades. Editorial Paidotribo 1ra Edición 1992. pp. 33-36, 42-71, 85-93.

13. Schutt, K. Salud y Relajación Gracias al Masaje, Métodos, Técnicas, Indicaciones. Editorial Paidotribo. 1ª edición 1994. pp. 25-29, 127-141, 159-169, 171-189.

14. Elisabeth, A. Masaje y Tratamiento Muscular. Editorial Hispano SA. Barcelona, España. 1992.

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