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La educación en valores en la Nueva Universidad del Deporte |
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Departamento de Ciencias Biológicas UCCFD “Manuel Fajardo” (Cuba) |
MSc. Gisela Naranjo Milera MSc. Ana Carrera Spek MSc. Ana Gloria Guerra Malvárez |
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Resumen El desarrollo de los valores juega un papel esencial en el desenvolvimiento de la actividad deportiva y la cultura física y contribuye a la formación del futuro profesional desde las posiciones del humanismo que caracterizan al proyecto social cubano. Para desarrollar la educación en valores es necesario organizar el proceso educativo conscientemente y planificar las actividades con estudiada intencionalidad. Los docentes de la Universidad de Ciencias de la Cultura Física y el Deporte tienen una gran responsabilidad en el proceso de formación de valores en este ámbito. En el presente trabajo se exponen algunas consideraciones generales sobre el proceso de educación en valores en la Nueva Universidad del Deporte. Palabras clave: Valores. Nueva Universidad del Deporte.
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EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires - Año 18 - Nº 180 - Mayo de 2013. http://www.efdeportes.com/ |
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Introducción
El proceso de la educación en valores y de su formación en los sujetos, como producto de la interiorización de aquellos, está condicionado por el desarrollo y la experiencia histórico-social e individual de cada uno y en el influyen otros factores como el medio familiar, la ideología imperante a nivel de la sociedad, la situación económico-social, la preparación educacional y el entorno social donde interactúa el individuo.
Los graves problemas que afectan hoy, no solo la existencia humana sino la propia conservación de la vida, exigen una actitud responsable por parte de la humanidad. De ahí, la importancia que adquiere el desarrollo de la educación, como vía esencial de transmisión de cultura y cauce para la educación en valores. Cuando analizamos el mundo contemporáneo podemos apreciar la importancia y el significativo papel que desempeñan los valores en nuestros días ya que no hay una sola cuestión de la vida que se dé al margen de estos.
La necesidad de profundizar y fortalecer la educación en valores es una tarea fundamental hoy más que nunca y de ello depende salvar lo más preciado que ha existido en nuestro planeta: el ser humano.
En el presente trabajo se exponen algunas consideraciones sobre la educación en valores en la nueva universidad cubana.
Objetivo
Exponer algunos aspectos relacionados con la educación en valores en la universidad cubana.
Desarrollo
Es imprescindible antes de comenzar nuestro trabajo definir que se entiende por valores. Los mismos son determinaciones espirituales que designan la significación positiva de las cosas, hechos, fenómenos, relaciones y sujetos, para un individuo, un grupo o clase, o la sociedad en su conjunto.
Los valores se consideran el conjunto de cualidades o aptitudes que permiten elegir aquellos aspectos de la realidad que son o parecen más óptimos para dar sentido a la existencia. Regulan, guían y ordenan la vida de las personas.
Cuando hablamos de valores, nos estamos refiriendo al conjunto de normas morales, tradiciones, costumbres, hábitos de conducta y respeto, establecidos firmemente como conceptos, convicciones y principios humanistas, políticos e ideológicos acerca de lo bueno, lo malo, lo moral, lo honesto, lo perfecto, lo útil, lo bello, lo permisible, lo legal, lo humano, lo patriótico, los deberes y derechos propios y ajenos. etc., que, al ser interiorizados a través de todo el proceso educativo que recibe el individuo de parte de la familia, el ambiente social en que vive, la escuela, la sociedad en su conjunto, acorde a la época histórica concreta en que le tocó vivir, los asume voluntariamente, como parte íntegra de su formación educacional y de la vida misma, los cuales llegan a convertirse en sólidas convicciones profundamente arraigadas en lo más íntimo del mundo interior del sujeto, al punto de que llegan a autorregular y regir su conducta, como un estereotipo dinámico que se convierte en un sistemas de normas inviolables, las que el individuo se exige inconsciente e involuntariamente a sí mismo. (Fernández Retamar)
Los valores presentan las siguientes características:
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Universales. No dependen de la cultura, ni de la religión, ni de preferencias personales.
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Objetivos. Existen por sí mismos. No requiere consenso determinar si la belleza vale, si la bondad vale, o si la salud vale.
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Inmutables. No cambian. Siempre serán los mismos.
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Permanentes. Aunque la sociedad no los fomente, los valores no dependen de la época, siempre existirán.
Para su mejor estudio, el filósofo cubano, Dr. José R. Fabelo Corzo, en su
libro “Los valores y sus desafíos actuales”, divide los valores desde el
punto de vista teórico, en tres grandes dimensiones. Son éstas el Sistema
Objetivo de Valores, integrado por el conjunto de éstos que resultan
tradicionales y de hecho son inmanentes a la sociedad de que se trate. Integran
este sistema de valores, las normas morales, de conducta y respeto mutuo
tradicionalmente aceptados por todos desde siempre a partir de la costumbre, los
preceptos educativos y de solidaridad humana trasmitidos de generación en
generación; los principios ideológicos y jurídicos; los conceptos humanistas,
de solidaridad, justicia e igualdad sociales, etc. contenidos y practicados por
la sociedad en su conjunto y que rigen su actuar cotidiano, acorde a valores
universales que permiten y alimentan la vida en común de sus integrantes en
cuestión, los cuales llegan a formar parte de los valores internos de cada
sujeto, los que se retroalimentan espiritualmente de éstos a lo largo de sus
vidas. El Sistema Subjetivo de Valores, el cual no es otra cosa
que la manera en que esa significación objetiva de los valores contenidos en la
sociedad misma se refleja e influye decisivamente en el mundo interior del
sujeto, al que alimenta, y con el tiempo pasa a formar parte de su conciencia
para regir la conducta de éste, acorde a los valores de toda la sociedad; y por
último, el Sistema de Valores Instituidos, integrado por aquellos
que expresan la ideología oficial y los intereses del estado, los cuales
aparecen refrendados en leyes y están protegidos por el aparato jurídico y
coercitivo del estado, que hace cumplir la voluntad política de la clase
dominante erigida en ley.
La formación de los valores morales es un complejo
proceso de influencias y condicionamientos psicológicos, sociológicos,
pedagógicos, morales, educacionales, económicos y sociales en general que
comienza con la vida misma y se extiende a todo lo largo de ésta, en el cual se
vinculan íntimamente instituciones tan diversas como la familia, la comunidad,
la escuela, el centro laboral, la sociedad en su conjunto y el estado.
Desde que el niño nace, comienza a recibir la influencia de los valores o antivalores que priman en el seno de la familia en la que le tocó vivir, los que poco a poco se entrelazarán con los de los amigos de la casa, los de la comunidad, la escuela, y los valores instituidos por el estado, que le llegarán a través de los medios de difusión masivos y en el respeto a las normas sociales y jurídicas trasmitidas por parte de los mayores; así como de la escuela, y la misma comunidad en que vive.
Los valores morales son el resultado de un largo proceso educativo y de influencias de diversas índoles, que nos llegan a través del medio familiar, la comunidad, la escuela, los maestros, las normas jurídicas, los órganos de justicia, el estado como tal y sus espontánea y voluntariamente, una vez convertidas en profundas convicciones, de la conciencia del sujeto, por lo que, una vez logrado este alto grado de concientización, los valores lentamente adquiridos llegan a condicionar, sin siquiera pensarlo ni proponérselo el individuo, la actuación instituciones, así como de la sociedad en su conjunto, que llegan a formar parte, lenta, del mismo, hasta autorregularla, acorde a la escala de valores morales que, para entonces, rigen su actuación cotidiana desde su mundo interior.
La educación en valores es un proceso activo, complejo y contradictorio de transmisión y asunción de valores como parte de la educación de la personalidad, que se desarrolla en condiciones histórico-sociales determinadas y en las que intervienen factores socializadores, como la familia, la escuela, la comunidad, los medios de difusión, entre otros.
La educación en valores constituye un proceso complejo porque toca de cerca un componente esencial: la espiritualidad; contradictorio por un conjunto de contradicciones entre las que se encuentran lo ideal y lo real, lo social y lo individual, lo nuevo y lo viejo, lo universal y lo particular, la identidad y la diversidad.
La educación en valores es un proceso multifactorial ya que intervienen diversos factores como la familia, clave en tanto aporta formación inicial y decisiva para la vida, la escuela que tiene un encargo social, la comunidad, esencial en tanto que es portadora de la participación social, los medios de difusión, que forman y educan modelos, gustos, preferencias.
El problema de la educación en valores exige ante todo del análisis de las condiciones histórico- sociales en que se inserta dicho proceso. Es necesario destacar el papel que desempeña el sistema de dominación imperialista en el escenario internacional , caracterizado el mismo por el predominio del capital financiero, por la trasnacionalización del capital, por el desarrollo científico y tecnológico al servicio de los centros del poder y por la agresión ala esencia y existencia humana. Ese es el mundo de hoy, el de las naciones muy poderosas y países pobres, el de las profundas contradicciones, el mundo de la globalización neoliberal que conlleva a la renuncia de los valores humanos esenciales.
El enfoque del problema de la educación en valores en las complejas condiciones del desarrollo actual de la sociedad cubana nos advierte de que la tarea consiste en la contribución a la formación de niños y jóvenes. Ellos serán los protagonistas, como creadores, de la consolidación de la obra revolucionaria, fundada en los más altos valores alcanzados a lo largo de la historia.
El proceso revolucionario ha elevado a un primer plano lo relativo a la educación en valores, como componente, como esencia y como finalidad de la educación cubana. De igual forma la obra creadora de los intelectuales cubanos en estrecho nexo con la vanguardia política ha contribuido a la conformación de un sistema de valores que caracterizan a la Revolución Cubana. Desde la ideología de nuestra sociedad socialista, se pone de manifiesto la conformación de un código de valores humanistas que expresan ideas políticas, jurídicas, filosóficas, científicas, éticas, estéticas, patrióticas, etc., desde lo mejor de la tradición nacional y en estrecho vínculo con lo mejor del pensamiento universal.
La construcción de la sociedad socialista demanda de valores como:
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La dignidad
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El patriotismo
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El humanismo
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La solidaridad
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La responsabilidad
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La laboriosidad
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La honradez
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La honestidad
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La justicia
Los valores se jerarquizan en dependencia del desarrollo de la personalidad y del desarrollo social. Los valores que rigen en una sociedad están directamente relacionados con la realidad social. En la medida que esta última cambia se pueden producir cambios en la expresión y jerarquía de los valores.
La Educación en Valores en la Universidad
La Educación en Valores en la Universidad se dirige hacia la formación y el desarrollo de la personalidad del profesional y va dirigida a fomentar el amor a la actividad profesional, el sentido de respeto socio- profesional y un estilo de búsqueda profesional creativo- innovador.
Para llevar a cabo la labor de formación de profesionales con los valores que demanda nuestra sociedad socialista es importante que los docentes sean capaces de enseñar de forma dialéctica y contextualizada, sin ignorar el debate científico contemporáneo, sabiendo que el trabajo social es al mismo tiempo una práctica científica y una práctica social, que sean portadores de una ética profesional y de valores morales que de ella se derivan, pues si no somos depositarios de los valores morales tampoco podemos incidir en su formación y que logren crear un ambiente afectivo y un clima adecuado en el aula, donde los estudiantes puedan expresar sus preferencias y sentimientos.
La educación en valores en el ámbito estudiantil universitario requiere de la organización y planificación de las actividades con estudiada intencionalidad y debe tomar en consideración determinado aspectos:
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Estilo de comunicación que posibilite el dialogo abierto, sincero y argumentado.
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Tratar de forma diferenciada a cada estudiante, sobre la base del ejemplo y la persuasión.
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Ejercer de forma sistemática y cohesionada las influencias educativas.
Educación en valores desde la clase
La clase tiene una alta jerarquía en el sistema de vías y formas de educación en valores; la enseñanza de la Historia, de la Literatura y las Ciencias, así como la apreciación y difusión del arte deberán ser coherentes con nuestra concepción liberadora, descolonizadora y anticapitalista.
Al confeccionar o preparar una clase. En principio hay que saber que habilidades se quieren formar, posteriormente concebir una situación docente que incluya un determinado sistema de acciones y operaciones que facilitará la formación de habilidades y a su vez valores acordes a los principios de la Revolución.
El docente debe tener conocimiento del sistema de valores de la carrera y cómo trabajar con ellos y ser un agente activo en el diseño curricular, para que todas las materias contribuyan a la formación y desarrollo en los estudiantes, con la finalidad de promover el desarrollo individual y social. Además debe ser capaz de crear las metodologías adecuadas para que el grupo razone y se interrogue sobre las diferentes situaciones que puedan plantear en un conflicto y sobre las diferentes alternativas en la solución de un problema social desde posiciones éticas.
Una de las vías donde se puede aplicar la estrategia de atención individual a cada alumno es en la clase donde se deben aprovechar las potencialidades del contenido de las asignaturas, así como también los espacios que se creen para la reflexión y atención individual de cada uno de los alumnos, de acuerdo con las características de su aprendizaje y del comportamiento, apoyándose en las cualidades que sustentan las unidad del grupo.
El proceso de enseñanza- aprendizaje requiere de un enfoque multidisciplinario como relación aplicativa en la que varias disciplinas aportan algunas perspectivas de análisis, así como la interdisciplinariedad en la que se subraya la relación constitutiva, teniendo en cuenta el contenido sustancial de tales marcos disciplinarios.
Al confeccionar o preparar una clase, hay que saber que habilidades se quieren formar, posteriormente concebir una situación docente que incluya un determinado sistema de acciones y operaciones que facilitará la formación de habilidades y a su vez valores acordes a los principios de la Revolución.
Los profesionales de la esfera deportiva deben saber como actuar y proceder, como asumir una postura ética, contribuyendo de esa forma a potencializar la educación de los atletas y el fortalecimiento de los valores humanos y sociales en los mismos por lo que nosotros como docentes de la Universidad de Ciencias de la Cultura Física y el deporte tenemos una gran responsabilidad en proceso de formación de valores en este ámbito y el marco de la clase es una vía para lograrlo.
El docente desde el propio contenido de su asignatura deberá contribuir ala formación de una sólida ética profesional en sus alumnos para evitar las transgresiones y violaciones del comportamiento de atletas, entrenadores y todo el que tiene que ver con la preparación y el rendimiento de los deportistas ya que hoy en día, la esfera deportiva no está exenta de conductas poco éticas como el dopaje, el robo de talentos y la comercialización, que lesionan la moral y la imagen del deporte.
En nuestra disciplina Ciencias Biológicas trabajamos en la formación de valores éticos y morales desde la dimensión curricular y lo relacionamos con el tema del dopaje a partir de contenidos como los de sangre y orina que propician el debate de esta problemática.
Es una política del Estado Cubano, educar a nuestro pueblo y en particular a los jóvenes sobre los riesgos y efectos nocivos de las drogas y el dopaje. En correspondencia con dicha política, la Universidad de Ciencias de la Cultura Física y el Deporte (UCCFD “Manuel Fajardo”) y su red de centros ha elaborado y dado cumplimiento a una estrategia de trabajo en la que juega un papel importante la Disciplina Ciencias Biológicas y que a grandes rasgos consiste en lo siguiente:
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Labor educativa desde la dimensión curricular, la que se realiza en las asignaturas de Morfología, Bioquímica, Fisiología y Fundamentos Biológicos del Ejercicio Físico en temas que propician la orientación a estudiantes de los diferentes tipos de curso.
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Labor educativa desde los cursos de postgrados.
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Labor educativa desde la realización de los proyectos de investigación.
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Labor educativa desde los ciclo de conferencias destinados al Curso Regular para Atletas.
Conclusiones
La educación en valores es un proceso activo, complejo y contradictorio de transmisión y asunción de valores como parte de la educación de la personalidad, que se desarrolla en condiciones histórico-sociales determinadas y en las que intervienen factores socializadores, como la familia, la escuela, la comunidad, los medios de difusión, entre otros.
El proceso revolucionario ha elevado a un primer plano lo relativo a la educación en valores, como componente, como esencia y como finalidad de la educación cubana, teniendo una responsabilidad fundamental la nueva universidad cubana.
La aplicación de estrategias de educación en valores promovidas por la UCCFD y su Departamento de Ciencias Biológicas contribuye a la formación integral de nuestros estudiantes.
Bibliografía
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Baxter, Esther (2006). ”Diversidad de métodos para educar y evaluar lo logrado en la educación en valores”. Compendio de Pedagogía. Ed. Pueblo y Educación.
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Fabelo, J.R. (2001). Los valores y los desafíos actuales. Universidad Autónoma de Puebla, Instituto de Filosofía.
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Fernández Retamar, R. (2001). ¿Crisis de valores en Cuba? (material digital).
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Limia, Miguel (1994). La Ideología de la Revolución Cubana. Revista de Ciencias Sociales, Nº 28, La Habana.
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Tabloide VIII Seminario Nacional para Educadores, MINED, 2007-2008.
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