Importancia de la preparación del líbero en el voleibol teniendo en cuenta los periodos sensitivos y la edad óptima, partiendo de las capacidades físicas fundamentales para su desempeño |
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Facultad de Cultura Física, Camagüey (Cuba) |
María Esther Michel Torres Katherine Odalis Álvarez Traba |
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Resumen En la presente investigación se abordará la importancia de la preparación y empleo del jugador líbero en el voleibol.La esencia del trabajo investigativo se origina a partir de lo que representa este jugador en el voleibol cubano, teniendo en cuenta las deficiencias existente en las acciones defensivas, sin las cuales el accionar técnico táctico de nuestros equipos sería mejor, partiendo de que los resultados satisfactorios obtenidos han sido basados fundamentalmente por las condiciones físicas y técnicas que nos caracterizan y garantizan el éxito las acciones ofensivas, no obstante no debemos conformarnos debemos mejorar nuestras actuaciones y brindar mejor espectáculo. Se pretende fundamentar desde el punto de vista físico basándose en la capacidades fundamentales para el desempeño de este jugador y las edades optimas para su desarrollo o mantención, la necesidad de empezar en la categoría donde ya loa atletas ejercen funciones determinadas en el sistemas de juego 4-2. El trabajo se realiza sobre la base de la Revisión Documental y entrevista a algunos entrenadores de resultados en el deporte en la provincia de Camagüey que permitieran llegar al resultado final y arribar a conclusiones importantes. Palabras clave: Voleibol. Líbero. Períodos sensitivos. Edad óptima. Cualidades físicas.
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EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires - Año 18 - Nº 180 - Mayo de 2013. http://www.efdeportes.com/ |
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Desarrollo
Desde el comienzo de la existencia del Voleibol de alta competición, uno de los objetivos más reiterativamente perseguidos por la FIVB ha sido la de buscar un mayor equilibrio entre el potencial de las acciones ofensivas y la capacidad del equipo contrario para su defensa; todo ello, lógicamente, en aras de conseguir una mayor continuidad de las acciones de juego, con el consiguiente incremento de la duración del las jugadas, mejorando, en definitiva, la espectacularidad del propio deporte.
La medida más audaz y rompedora de toda la filosofía tradicional del voleibol, acometida por la FIVB en este sentido, lo constituye la creación e introducción de una figura de jugador especializado en defensa y recepción denominado “líbero”
El Líbero
La primera mención que se hace en el Reglamento referente al líbero está recogida en la Regla 7 de la siguiente manera:
Regla 7. Estructura del juego.
a. El líbero está restringido para actuar como un jugador de segunda línea y no se le permite completar un golpe de ataque desde ninguna posición (incluyendo el área de juego y la zona libre), si en el momento del contacto con el balón éste está por encima del borde superior de la red.
b. El líbero no puede sacar, bloquear o participar en un intento de bloqueo.
c. Un balón proveniente de un pase de dedos del líbero en la zona de ataque o su prolongación, no podrá ser atacado por encima del borde superior de la red. Si el líbero efectúa la misma acción detrás de la zona de ataque, el balón podrá ser atacado libremente.
El Líbero debe brindar seguridad, equilibrio emocional, conocimiento del juego, autoridad, que le permita desde “atrás” orientar, indicar dónde y cómo debe formarse el bloqueo y establecer la zona de la cual él está dispuesto a cubrir y por la que se responsabiliza. Esto exige ser brevemente comunicativo, se le exige experiencia deportiva, nivel técnico, específicamente en el recibo, defensa y pase II. ¡No puede ser espectáculo! Aunque se le exija frecuentemente espectacularidad en sus acciones. Su preparación psicológica es altamente exigente, donde no solo el valor, sino la atención, la experiencia, la motivación e identificación con su función está consolidada, la concentración y su estabilidad emocional ofrezca un pedestal de apoyo constante.
Su entrenamiento físico debe poseer un desarrollo amplio de habilidades acrobáticas, con capacidad para “dispararse” detrás del balón en todas las direcciones y como técnicamente le exija la colocación del balón. Dominar el juego de espalda a la red.
Un ejemplo práctico en el nivel superior que debe poseer este jugador está dado por la velocidad del balón (para la cual debe estar preparado el Líbero como los demás jugadores) lo podemos tomar de la Copa América del 2000, cuando el cubano Osvaldo Hernández le fue registrado por radar, un saque cuya velocidad fue de 110 Km/h, sobre 16 metros de distancia, que representó 0.52.
Importancia del jugador líbero para el voleibol cubano
En el voleibol actual, tiene la fase de K-I tiene gran importancia en el rendimiento final de los equipos, la cual comienza con la acción defensiva de recepción del servicio. El cual con la utilización del saque en suspensión ha alcanzado niveles alto de velocidad y fuerza lo que requiere de la mayor participación del jugador líbero en la acción de la recepción con la intención lograr mayor posibilidades en la táctica del pase y de esa formar garantizar el éxito en la construcción de la acción ofensiva máxima responsable de la cuantía de los puntos en un partido.
Estadísticamente es fácil detectar que en el voleibol cubano a diferentes niveles los equipos aportan tantos al contrario en mayor proporción por dificultades en las acciones defensivas que por errores en las acciones de ataques, entonces debemos encaminar nuestro trabajo en fortalecer desde todos los aspectos de la preparación del deportista al logro de un jugador líbero que nos permita obtener las ventajas que a nuestros equipos proporciona su inclusión en el juego moderno.
Nuestra federación establece dentro de los programa competitivos la utilización del líbero en las categorías juveniles, lo que no permite a este jugador contar con la máxima experiencia necesaria para su desempeño, ni prepararlo teniendo en cuenta su disposición morfo funcional y psíquica en relación a las necesidades físicas para así poder determinar los aspectos claves para alcanzar el máximo rendimiento.
Resultado de las entrevistas realizadas a 5 entrenadores con más de 10 años de trabajo en el alto rendimiento en voleibol en la provincia de Camagüey, la cual tenía como propósito:
Opinión acerca de:
Las capacidades físicas mas influyentes en el desempeño de líbero.
La preparación del líbero en las categorías escolares y la temprana especialización.
Todos coincidieron en que las capacidades mas influyentes en el trabajo especifico de los líberos son la rapidez tanto de traslación como de reacción y las capacidades coordinativas (dos opinaron de los ejercicios de acrobacia ocupan un mayor porciento), todos coincidieron en la flexibilidad, dos incluyeron la fuerza y la resistencia.
Las autoras coincidimos en que todas son necesarias, teniendo en cuenta incluso la que lagunas son básicas, pero desde el punto de vista del desempeño técnico táctico, pensamos que es evidente y coincidimos con las opiniones de laos especialistas en que resultan la rapidez, la coordinación, la flexibilidad. Sin restar importancia a la fuerza y la resistencia.
Con respecto a la inclusión del líbero en las categorías escolares 4 de ellos opinaron que puede incluirse partiendo de que en esta categoría ya comienzan a desempeñarse en sus funciones como atacadores y pasadores según sus características y necesidad de los equipos, uno de los encuestados expresa su criterio relacionado con que con la inclusión en esta categoría los entrenadores dedicaran menos tiempos a la preparación del resto de los jugadores ( atacadores y pasadores) en las acciones defensivas.
Algunas reflexiones acerca de las capacidades fundamentales en la preparación del líbero
Capacidades físicas
El término de capacidades físicas significa “aquellas condiciones orgánicas básicas para el aprendizaje y perfeccionamiento de acciones motrices físico deportivas” (Colectivo de Autores, Gimnasia Básica, p. 2).
En Cuba se conoce la terminología de capacidades físicas con el nombre de cualidades físicas motoras. Sin embargo muchos son los criterios al respecto a ambos términos. La palabra capacidad no significa lo mismo que cualidad, por ello, el Pequeño Larousse Ilustrado expone los siguientes conceptos:
Capacidad: Contenido: La capacidad de un vaso. Espacio de un sitio o local, teatro de mucha capacidad (Sinón. V. Cabida y espacio.) Fig. Inteligencia, talento: persona de gran capacidad. Aptitud o suficiencia. Aptitud legal para gozar de un derecho.
Las capacidades físicas motoras están condicionadas en la propia estructura biológica del organismo, las cuales dependen considerablemente de determinados factores genéticos y hereditarios, su desarrollo en el tiempo transcurre de forma natural pero a niveles determinados, sin embargo, para alcanzar niveles superiores de desarrollo, tenemos necesariamente que aprovechar los períodos sensitivos de cada una de las capacidades físicas, cumpliendo para ello con un numeroso grupo de aspectos biometodolólogicos.
No podemos concebir un rendimiento deportivo sin el desarrollo multifacético de las capacidades físicas. Los resultados deportivos en la actualidad dependen fundamentalmente entre otras cosas, del desarrollo físico general y específico que exige la modalidad deportiva practicada. El desarrollo de las capacidades físicas, tales como la resistencia, la fuerza, la rapidez, la flexibilidad y las capacidades coordinativas constituyen la base fundamental para cualquier preparación deportiva, cuando un atleta alcanza un desarrollo adecuado de estas (entiéndase por ello, un nivel acorde con las exigencias competitivas para el cual se prepara), entonces, mayor serán las posibilidades de asimilar las cargas técnico tácticas, psicológicas, teóricas, aspectos estos que sin dudas permiten alcanzar formas superiores de rendimiento deportivo.
La rapidez: Como capacidad física reclama en su accionar práctico de las propiedades del sistema neuromuscular para contraerse y la de relajarse constantemente a una máxima velocidad de ejecución, esta capacidad es esencial en la mayoría de los deportes.
Para Ariel Ruiz (1985) es la capacidad condicional indispensable para realizar bajo condiciones dadas, acciones motrices en el menor tiempo posible.
Según Alberto Collazo (2002) es la capacidad que posee el sistema neuromuscular del organismo humano de reaccionar ante un estimulo externo y trasladar un segmento muscular o el cuerpo de un lugar a otro en el menor tiempo posible.
Rapidez de reacción
Desde el punto de vista práctico, el desarrollo de la rapidez depende inicialmente de la capacidad con que el sujeto es capaz de reaccionar ante el estímulo externo, que se expresa en el lapso de tiempo en que se siente o percibe el estímulo, es captado por el sujeto y el comienzo de la respuesta motora por parte del atleta.
Flexibilidad: Para Cotta (1978) tanto la edad como el sexo constituyen aspectos determinantes en el desarrollo de esta capacidad. Con la edad, los tendones y ligamentos y las vainas musculares pierden progresivamente células, agua y buena parte de elasticidad. Se plantea en múltiples investigaciones realizadas que entre los 11 y 14 años es el periodo sensitivo óptimo para su trabajo.
La movilidad: Es la capacidad que posee un organismo de realizar grandes amplitudes de movimientos articulares, sin el desarrollo de esta se limitan considerablemente la buena coordinación intramuscular, cuando un individuo posee buena movilidad, entonces condiciona mejor su sistema neuromuscular para asimilar todas las demás cargas de entrenamiento, incluso evita lesiones de toda índole.
Movilidad articular: Su tiempo de duración es relativo, pues puede trabajarse siempre y cuando el atleta considere oportuno desarrollarla.
Su objetivo fisiológico está en desarrollar la capacidad del organismo para realizar grandes amplitudes de movimientos articulares.
En cada repetición del ejercicio que se ejecute debe mantenerse la posición más de 5 segundos.
No producen concentraciones de lactato en la sangre.
Es una capacidad que condiciona el desarrollo de las demás capacidades físicas.
Las capacidades coordinativas: Están condicionadas precisamente por el desarrollo de las condicionales y por el nivel de percepción, representación, memoria, imaginación creadora e inteligencia de un sujeto dado, su desarrollo depende de múltiples factores.
Es una capacidad que requiere que el sistema nervioso central esté lo menos agotado posible, por lo que es recomendable desarrollar esta capacidad al inicio de la sesión o clase de entrenamiento.
Tanto la capacidad de regulación del movimiento como la capacidad de adaptación y cambios motrices constituyen elementos indispensables en el desarrollo y perfeccionamiento de todos aquellos movimientos que el hombre realiza, especialmente aquellos relacionados con la práctica deportiva. Ambos constituyen capacidades rectoras en los ejercicios motrices deportivos, pues todas las demás capacidades coordinativas se caracterizan por el control y regulación del movimiento, así como las posibilidades de adaptación y cambios motrices.
Para Hirtz (1981) la capacidad de coordinación (sinónimo: destreza) está determinada ante todo por los procesos de control y regulación del movimiento.
Frey (1977) asume que es la capacidad que permite al deportista dominar las acciones motoras con precisión y economía, en situaciones determinadas, que pueden ser previstas (estereotipos), o imprevistas (adaptación), y aprender de modo relativamente más rápido los gestos deportivos.
Martin (1982) denomina como capacidades básicas relacionadas estrechamente con la coordinación la capacidad de dirección, de ritmo, de diferenciación y de equilibrio.
García Manso y col. (1996) entienden que las capacidades coordinativas se identifican con el concepto de destreza, entendida como la capacidad para resolver rápida y adecuadamente las tareas motoras.
Según Adalberto Collazo (2002) es la capacidad del sistema neuromuscular para controlar, regular y dirigir los movimientos espacio corporales y temporales en las actividades físico deportivas, que se expresa en las coordinación motriz
Capacidad de orientación: Capacidad del organismo para la ubicación espacio temporal de las acciones motrices que realiza con relación a los diferentes objetos que lo rodean.
Esta capacidad está determinada por un alto grado de desarrollo de la percepción espacio temporal. Entiéndase por perfección espacio temporal la capacidad de percibir vertical, horizontal y en profundidad el tamaño y configuración de los objetos que nos rodean, así como determinar la velocidad en que se desplazan los mismos en el espacio.
Se considera a la orientación como una capacidad innata que se desarrolla sobre la base de la ejercitación propia de las actividades físico deportivo y que está muy estrechamente vinculada con los siguientes aspectos:
calidad de la visión del individuo
nivel de representación del entorno
calidad de la memoria
capacidad de autodeterminación motriz
Agilidad: Su objetivo fisiológico está en desarrollar la capacidad del organismo para trasladarse de un lugar a otro en el menor tiempo posible entre, sobre y con obstáculos.
No producen concentraciones de lactato.
Para su desarrollo generalmente se utilizan ejercicios que comprenden rapidez de reacción, de traslación, coordinación intramuscular e intermuscular.
Capacidad de equilibrio: El equilibrio depende de múltiples factores entre los cuales podemos señalar:
El tamaño del área que sustenta el cuerpo
La capacidad de los receptores acústico, óptico y vestibular
La capacidad de distribución de los diferentes planos musculares durante los movimientos complejos que exigen rápidos desplazamientos del centro de gravedad del cuerpo (modificación del tono muscular).
Capacidad de ritmo: Entendemos por ritmo, aquella capacidad humana para distribuir de forma ordenada todos sus segmentos musculares en el espacio, utilizando para ello, una unidad de tiempo precisa en dependencia de las exigencias del movimiento realizado, permitiendo la auto corrección del ejecutante y la posterior influencia de este en el perfeccionamiento y la fluidez del efectuado.
La capacidad de ritmo depende entre otros de los siguientes factores:
Plasticidad muscular del individuo.
Movilidad de la columna vertebral y demás articulaciones.
Capacidad de regulación y control muscular.
Relación entre la capacidad acústica del individuo y la capacidad de transformar dicha señal en movimiento.
Capacidad de anticipación: Es la capacidad que posee un individuo de prever la acción de un contrario o la de representar en su memoria un movimiento técnico deportivo.
Para desarrollar esta capacidad el entrenador deberá orientarle al atleta que memorice antes de ejecutar la técnica deportiva a realizar y posteriormente efectuar la ejecución del movimiento en los deportes individuales, mientras que en los deportes colectivos sería prever la posible solución motriz del contrario en situaciones dentro del deporte practicado.
Capacidad de diferenciación: Ruiz Aguilera y col. (1985), plantean que cuando un alumno observa un movimiento lo percibe en forma general, es decir, aprecia las nociones en cuanto a tiempo y a espacio, así como las tensiones musculares que requiere un ejercicio para su realización en su conjunto, pero ya cuando pasa a la fase de realización debe saber diferenciar las partes esenciales de cada ejercicio sobre la base de sus conocimientos y de la respuesta motriz que tiene que dar.
De acuerdo con lo planteado anteriormente, comprendemos que esta capacidad desempeña un papel muy importante en el deporte de alto rendimiento.
En nuestra consideración la esencia de esta capacidad se ve implícita en las demás capacidades coordinativas (la regulación del movimiento, acoplamiento, ritmo, etc.)
Capacidad de precisión: Muchos entrenadores en la práctica utilizan constantemente el término precisión cuando tratan de corregir en sus atletas alguna técnica deportiva o buscan perfeccionar determinada fase de un movimiento.
En los deportes con pelota y algunos de combate requieren del desarrollo de esta capacidad. Entiéndase por precisión como la capacidad que posee un sujeto para culminar una acción motriz deportiva de forma exitosa, generalmente dado por el lanzamiento de una pelota, objeto o parte del cuerpo hacia un objetivo deseado.
El éxito de esta capacidad se encuentra en la propia capacidad del individuo para regular todos sus movimientos, controlarlos y dirigirlos hacia el objetivo deseado, en estrecha relación con las capacidades intelectuales.
Capacidad de aprendizaje motor o ritmo de aprendizaje: Es la capacidad que posee un individuo para asimilar de forma rápida y con cierta perfección los movimientos técnicos de cualquier habilidad.
A nuestro juicio esta capacidad es innata en los hombres, viene condicionada por factores genéticos y hereditarios. Tener en cuenta su desarrollo en cada individuo garantiza el perfeccionamiento en mayor grado del proceso de enseñanza aprendizaje, de ahí que podamos complejizar los contenidos de enseñanza en dependencia con los niveles de asimilación mostrada en cada sujeto.
Esto significa en la práctica, pues a pesar de constituir para nosotros una capacidad innata en los hombres, que podamos desarrollarla mediante las actividades físicas deportivas, siempre y cuando se seleccionen contenidos asequibles, cambiando la variabilidad y complejidad de los mismos una vez transcurra la adaptación y la asimilación por parte de los discípulos.
Agilidad
Para Bernstein (1947) la agilidad es la capacidad de seleccionar y ejecutar los movimientos (acciones) necesarios de forma rápida, correcta e ingeniosa.
Ozolin (1970) considera que la agilidad es la capacidad de solucionar con rapidez y perfección las tareas motoras, en particular los que surgen inesperadamente, viene a ser como el nivel máximo de la capacidad del deportista para coordinar los movimientos.
Por tal razón entender que la agilidad es la capacidad que posee el individuo para trasladar su cuerpo de un lugar a otro en el menor tiempo posible, siempre y cuando dicho recorrido transcurra entre, sobre, por encima o por debajo de determinados obstáculos y la de realizar con exhaustiva coordinación neuromuscular rápidos movimientos espacio corporales.
Alberto Collazo García, plantea que el periodo sensitivo optimo (edades) para el desarrollo de la rapidez oscila entre los 6 y 8 años, para las acciones coordinativas entre los 6 y 8 años y para el trabajo y mantención de la flexibilidad y movilidad en re los 9 y 11 años, otros autores establecen otros rangos de edades pero coinciden en que mas se alejen del periodo sensitivo menos posibilidades de lograr el rendimiento optimo.
Las autoras luego de analizar los resultados del instrumento aplicado y realizar una revisión documental que permitió profundizar en el estudio realizado concluyen que:
La rapidez, las capacidades coordinativas y la flexibilidad, constituyes elementos fundamentales en la preparación física del líbero.
El periodo sensitivo (edades) para las capacidades fundamentales en el desempeño del jugador líbero oscila entre los 6 y 11 años.
Partiendo de los cambios en las reglas del voleibol moderno que permite la flexibilidad en la ejecución de las acciones defensivas, la preparación física ocupa un lugar importante en la preparación del líbero.
Teniendo en cuenta que las edades óptimas son muy tempranas para la especialización en el deporte y que ya en las categorías escolares se establecen sistemas de juego (4-2), pudiera valorarse la inclusión aquí de la utilización del líbero.
Bibliografía
Forteza, A. y Ranzola, A. Bases Metodológicas del Entrenamiento deportivos. Editorial Ciencia y Técnica. La Habana. 1993.
García Manso y Cols. Bases Teóricas del Entrenamiento Deportivo. Editorial Gymnos. Madrid, 1996.
Grosser M. Y otros. Principios del Entrenamiento Deportivo. Editorial Martínez Roca. 1990.
Harre D. Teoría del Entrenamiento Deportivo. Editorial Científico-Técnica. Habana. 1988.
Navelo, Caballero, Rafael de M. y Santana Lugones J. L. Programa de Preparación del Deportista Voleibol. Federación Cubana de Voleibol, Comisión Nacional de Voleibol, Ciudad de la Habana. 2012.
Pila Teleña, A. Didáctica de la Educación Física y Deportes. Editorial Olimpia: San José. Costa Rica. 1987.
Verjoshanski, L. Entrenamiento Deportivo. Planificación y Programación. Editorial Martínez Roca. México DF. 1988.
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