El
envejecimiento, la nutrición y el ejercicio físico: un reto |
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*Profesor Instructor **Profesor Asistente ***Profesor Auxiliar Instituto de Ciencias Básicas y Preclínicas Victoria de Girón (ICBP) La Habana (Cuba) |
MSc. Iyemai Rodríguez Hernández** MSc. Mario Ramírez Alfonso*** Lic. Aurora Fajardo Villarroel** MSc. Grisel Guerra Ramírez* Lic. Yadira Zayas Ravelo* Lic. Fausto Cabrera Martínez*** |
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Resumen El siglo XXI desde sus inicios enfrenta un mundo con una población que aumenta su expectativa de vida, en nuestro país la esperanza de vida se ha elevado hasta cerca de los 80 años por lo que se ha acrecentado considerablemente la población de la tercera edad, este crecimiento hace necesario buscar formas de conservar y mejorar las habilidades funcionales de las personas al envejecer, ayudarles a manejarse independientemente en la comunidad y mejorar la calidad de sus vidas. El objetivo de nuestro trabajo es promover el autocuidado de la salud en el adulto mayor mediante el fomento de comportamientos y estilos de vida saludables. Se realizó un estudio prospectivo donde se caracterizó el estado nutricional y el grado de actividad física de 100 ancianos aparentemente sanos, seleccionados aleatoriamente. Conclusiones: La práctica sistemática de ejercicios físicos, así como la educación de los abuelos en el cumplimiento de la dieta saludable, inciden directa y positivamente en la calidad de vida de la población envejecida. Palabras clave: Ancianos. Evaluación nutricional. Autocuidado. Educación. Actividad física.
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EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 17, Nº 176, Enero de 2013. http://www.efdeportes.com/ |
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Introducción
El envejecimiento de la población cubana es una preocupación que atañe a los profesionales de la salud, Cuba, con más de 11,2 millones de habitantes, puede llegar en dos o tres décadas a ser el país latinoamericano con la población más envejecida, por la extensión de la esperanza de vida, alrededor de 78 años, y a una disminución de la natalidad, para el 2030 se calculan tres millones y medio de adultos mayores. Las consecuencias de este hecho se manifiestan en todos los sectores de la sociedad, pero es particularmente impactante en lo que se refiere al aumento de las necesidades socio sanitarias y de atención médica del segmento más envejecido de la población, situación para la que no están preparados los servicios de salud. La vejez no es una enfermedad y se envejece según se ha vivido, lo que significa que los cambios asociados al proceso de envejecimiento se encuentran en estrecha vinculación con varios factores de riesgo potencialmente modificables como: dieta, tabaco, alcohol, grado de actividad física, consumo de medicamentos y estrés emocional. De cualquier forma, estos cambios tienen sus consecuencias morfológicas y fisiológicas en los seres humanos, haciéndolos, a medida que aumentan sus años, distintos en la configuración del cuerpo y en el funcionamiento de los órganos y sistemas de órganos. La malnutrición es un estado patológico que constituye un factor de riesgo en la tercera edad. En esta etapa del ciclo de la vida el componente nutricional tiene particular vulnerabilidad para el individuo, asociado a factores de riesgo para la malnutrición que pueden ser fisiológicos, psicológicos y socioculturales.1
Existen muchas causas que inciden negativamente en la nutrición de las personas ancianas, entre ellas podemos mencionar: Nivel bajo económico, aislamiento, institucionalización, depresión, soledad, problemas personales, familiares o sociales, el estrés, limitación o restricciones que lo incapacitan para hacer compras y preparar los alimentos. Con el paso de los años ocurre una disminución del gusto y el olfato, además la presencia de enfermedades, puede aumentar las necesidades nutricionales o disminuir la absorción de los nutrientes y su disponibilidad. El consumo de algunos medicamentos por sus efectos adversos, causan trastornos digestivos. Las enfermedades dentales y el uso de dentadura postiza contribuyen a la pérdida sensorial. También influyen negativamente la disminución en la producción de saliva que provoca una mayor dificultad para percibir los sabores y deglutir los alimentos, se lentifica el vaciamiento del esofágico causando indigestión, el vaciamiento gástrico es más lento, se reduce la producción de lipasas afectando la absorción de lípidos, la bilis tiende a ser más espesa y la vesicular biliar se vacía lentamente, de este modo la digestión se convierte en un proceso más lento.
A los ancianos con carencias proteicas y de nutrientes se le daña el bienestar físico y psíquico, la integridad del sistema óseo, la funcionabilidad del sistema inmunológico y la resistencia a las enfermedad infecciosas, por lo que comienzan a imponerse en esta etapa las enfermedades crónico degenerativas. Para hacer una correcta apreciación del estado nutricional en un paciente geriátrico se deben observar cuatro aspectos fundamentales que son: La información dietética, la evaluación clínica, la evaluación bioquímica y de laboratorio y las mediciones antropométricas. Estas últimas son de gran valor para evaluar la composición corporal y nos proporcionan información muy útil que se puede obtener de manera sencilla y sin costos.
Por otra parte el estilo de vida físicamente activo, mejora las sensaciones de bienestar general y la salud, siendo el sedentarismo uno de los factores de riesgo modificables de mayor prevalencia en la población. Podemos decir que cada vez son más las personas mayores que realizan algún tipo de actividad física y/o deportiva 2. La práctica sistemática de ejercicios físicos es reconocida como una actividad útil y con sentido para sus vidas. Estudios realizados constatan que el 70% de las personas mayores suelen dar paseos y acudir al parque, una proporción similar realizan compras y más de un 20% mantiene una actividad física limitada, aunque menos del 10% manifiesta realizar algún deporte.
Hoy en día, lo más importante no es continuar aumentando la longevidad de las poblaciones, sino mejorar cualitativamente la salud y el bienestar de éstas. La actividad física constituye una terapia muy efectiva contra muchas problemáticas relacionadas con la salud y la calidad de vida. La realización de ejercicios físicos de forma regular es una necesidad de todo ser humano ya que su influencia es una vía segura para evitar el deterioro orgánico, lograr una vida sana, retrasar los síntomas del envejecimiento y evitar enfermedades, numerosos estudios científicos han puesto en evidencia los riesgos que acarrea la vida sedentaria.
Realizamos una investigación donde se caracterizó el estado nutricional de los ancianos, el grado de actividad física, se relacionó este, con la morbilidad y con otros factores de riesgo que favorecían la aparición de enfermedades crónicas, con el objetivo de promover el autocuidado de la salud en el adulto mayor mediante la promoción de comportamientos y estilos de vida saludables. 2-4
Metodología
Se realizó un estudio prospectivo de corte longitudinal en el período comprendido de enero 2011 a enero del 2012. La muestra fue conformada de forma aleatoria y estuvo integrada por 100 sujetos aparentemente sanos, de ambos sexos, con autosuficiencia física así como adecuada higiene personal y del hogar, que representa el 100% del universo. Se caracterizó el estado nutricional de estos ancianos, y el grado de actividad física que realizaban, se obtuvieron datos antropométricos y de otros indicadores relacionados con el estado de salud y condiciones socioeconómicas del individuo, así como el grado de autosuficiencia de cada uno de estos ancianos, para esto se utilizó el instrumento The Mini Nutritional Assessment (Guioz, et al., 1994). Además se aplicó una encuesta sobre calidad de vida.
Instrumento “The Mini Nutritional Assessment”, para obtener datos antropométricos, indicadores relacionados con el estado de salud y condiciones socioeconómicas, así como el grado de autosuficiencia de cada uno de estos ancianos
Al realizar la evaluación nutricional en el anciano se deben incluir:
Mediciones antropométricas
Evaluación clínica
Evaluación bioquímica y de laboratorio
Información dietética
También puede obtenerse datos útiles indirectos
En nuestro estudio se utilizaron las mediciones antropométricas Peso, estatura longitud hombro-codo, altura de la rodilla, pliegues cutáneos, circunferencia del brazo, cintura y cadera y se calculó el índice de masa corporal (IMC), ya que estas constituyen un arma de gran valor para evaluar la composición corporal, además proporciona información simple y barata del estado nutricional.
Resultados
De los 100 sujetos de estudio 60 pertenecían al sexo femenino. En la Tabla 1 se reflejan las características de la muestra.
Tabla 1. Edad de la muestra seleccionada
El 75% de los sujetos vivían en compañía su pareja y tenían como principal ingreso económico su retiro o pensión.
Alrededor del 70% consideraba que su situación económica se mantenía igual o había empeorado con el paso de los años.
El valor medio del IMC se considero aceptable para los hombres y en la categoría de Sobrepeso Grado I para las mujeres.
Tabla 2. Relación índice cintura – cadera (ICC)
Se evidenció una disminución del peso corporal con la edad, y esto se debe a varios factores relacionados con el envejecimiento, entre ellos la reducción del agua corporal, y a la disminución de la masa muscular y la masa celular en general.
La evaluación del estado nutricional por medidas antropométricas se realizó inicialmente con el IMC mostrándose en la Tabla 3, aunque la mayoría de los adultos mayores de la muestra se clasificaron como normales, el 14.5% de los hombres y el 9.4 % de las mujeres fueron ubicados en las diferentes categorías de deficiencias energética crónica coincidiendo con esta clasificación de malnutrición por defecto.
Tabla 3. Evaluación del estado nutricional según el Índice de masa corporal (IMC)
En la distribución de los valores del IMC de los ancianos del estudio se observa la mayor parte de ellos en la categoría de Aceptable.
Se aplicó una encuesta a los 100 integrantes de la muestra para conocer aspectos relacionados con su calidad de vida.
Encuesta sobre calidad de vida. Con ella pretendemos comprobar cómo incide nuestro sistema de ejercicios en su calidad de vida. Por favor sea lo más sincero posible. Gracias por su cooperación.
Sexo M___ F___ Edad___ Nivel Escolar Universitario___ Preuniversitario___ Secundario___ Primario___
- ¿Qué Importancia crees que tenga la actividad física para la salud? Muy importante___ Importante ___1
Poco importante___
2-¿Cómo crees que es la influencia de la actividad física en el estado de ánimo? Muy buena____ Buena ____ Mala____
3- ¿Realiza ejercicios físicos sistemáticamente? Si___ No___ A Veces___ Si la respuesta es Si responda la 4 si es No responda la 5.
4-¿Por qué práctica ejercicios físicos? Puede escoger más de una opción. Mantener o mejorar la salud___ Por diversión____ Por relacionarme____ Porque me gusta____ Para verme mejor____ Para competir____
5- ¿Por qué no practica ejercicios físicos? Puede escoger más de una opción. No me gusta____ Por la edad____ Por motivos de salud___ Nunca lo he hecho ___ No le veo utilidad___ No tengo tiempo____ Falta de instalaciones deportivas___ No sé qué debo hacer___ Falta de personal para dirigir la actividad___ Por cansancio físico___ Por pereza, desgano___ Otras___
6- Considera importante para su vida, la realización de actividades físicas. Si___ No___
7- Es Ud. feliz la mayor parte de su tiempo Si____ No____ A veces____
8- Se siente a veces inútil Si____ No____ A veces____
9- Desea irse de su casa. Si____ No____ A veces____
10-Se siente solo Si____ No____ A veces____
11- Ve a sus amigos y familiares tan frecuentemente como quiere. Si____ No____ A veces____
12-Se siente capacitado para realizar las tareas diarias. Si____ No____ A veces____
13-¿Cómo califica su estado de ánimo? Bueno____ Regular____ Malo____
14- Encuentra la vida amena y agradable. Si____ No____ A veces____
15- Con su vida se encuentra Satisfecho____ Insatisfecho____
16- ¿Cómo califica su situación económica? Buena____ Regular____ Mala____
17- ¿Cómo califica su salud actualmente? Buena____ Regular____ Mala____
18- ¿Cómo le afectan su salud en su vida diaria? Nada___ Algo___ Mucho___
19- Padece alguna enfermedad Si____ No____ ¿Cuál?____________________________________________
20- Actualmente hace alguna dieta. Si____ No____
21- ¿Cuántas comidas hace al día? Cinco____ Cuatro____ Tres____ Dos____ Una____
22- ¿Cuánto días a la semana consume los siguientes alimentos? Escoja el número 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7. Frutas___ Legumbres___ Verduras y Vegetales.___ Carnes___ Pescado___ Pastas___ Fritos___ Lácteos___
23- ¿A qué dedica el tiempo libre? Puede escoger más de una opción. Estar con la familia y amigos___ Hace ejercicios o deportes___ Ir a bailar, cine, teatro___ Leer___ Ver Tv, Oír radio, Oír música___ Trabajos manuales___ Ir de compras___ Tocar algún instrumento___ Pasear, viajar___ Otras___
24- Fuma actualmente. Si____ No____ 25- Si fuma a qué edad empezó. Antes 14 años____ 14.-18____ 19-25____ Después 25____
26- Si ya no fuma pero fumó alguna vez diga cuanto tiempo fumo. Menos de un año____ De 1 a 5 años____ De 5 a 10 años____ Más de 10 años____
27-¿Cuántos cigarrillos fuma o fumaba al día? 1-5____ 6-10____ 11-20____ Más de 20____
28- ¿Consume bebidas alcohólicas? Frecuentemente___ Algunas veces___ Casi nunca___ Nunca ___
29- Si bebe, diga, ¿A qué edad empezó a beber? Antes 14 años___ 14.-18___ 19-25___ Después 25___
30- Si bebe diga ¿Qué cantidad de bebida consume? Cervezas 1 ó 2___ 3 ó 4___ 7 ó 8___ 9 ó 10__ más de 10___. Ron ó Vino 1 ó 2 tragos___ 3 ó 4___ 7 ó 8___ 9 ó 10___ Más de 10 ___
31- Después de ingerir bebidas alcohólicas, como se siente Ud. la mayoría de las veces. Muy bien ___ Bien ___ Regular___ Mal___
32- ¿Cuántas horas duerme aproximadamente? 5 o menos___ 5 – 6___ 7 – 8___ 9- 10___ Más de 10___
33- ¿Se levantaba descansado? Si____ No____ A veces____
34- ¿Se despierta con frecuencia por las noches? Si____ No____ A veces____
35- ¿Ha padecido insomnio alguna vez? Si____ No____
36- Si la respuesta es sí, por cuanto tiempo. Días___ Meses ___ 1-3 años___ Más de 3 años____
37- Toma medicamentos para dormir. Si____ No____
38-
Indique qué problema, relacionado con su calidad de vida, le preocupa más en
estos momentos.
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39-¿Qué haría o necesitaría usted en estos momentos para sentirse bien o para ser más feliz?
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Gracias por su colaboración.
El 92% de los encuestados valoró como muy importante la realización de actividades físicas para la salud y el 8 % restante lo catalogó como importante. Solo el 30% de los hombres realiza ejercicios físicos y en las mujeres se reduce hasta el 25%. El 100% de los que practican ejercicios físicos de forma regular manifiestan que la principal motivación es mantener o mejorar la salud. Entre las causas para no realizar ejercicios físicos que aludieron los 28 hombres que no practican ejercicios podemos mencionar, falta de instalaciones deportivas 75 %, por la edad 71.42%, falta de personal para dirigir la actividad 50 %, no sé qué debo hacer 42.85 %, por pereza, desgano 35.71%. En el caso de las 45 féminas que no realizan actividades físicas, las principales causas que alegan son, por la edad 84,44%, no sé qué debo hacer 71,11 %, falta de personal para dirigir la actividad 60%, falta de instalaciones deportivas 46.66 %, no me gusta 42.22 % y nunca lo he hecho 35.55%. En la pregunta de a que dedican el tiempo libre, al 86% de la muestra manifestó que a ver TV, escuchar radio, escuchar música, el 57% a estar con la familia y amigos, el 44 % a leer.
Basado en los resultados obtenidos en la encuesta se programó un plan de actividades recreativas y físicas para satisfacer los gustos y necesidades de los encuestados.
Plan de actividades recreativas y físicas para satisfacer los gustos y necesidades de los encuestados
Discusión
La evaluación antropométrica del estado nutricional se realizó inicialmente, con el IMCest, empleando los puntos de corte de la FAO. Según se recoge en la literatura, datos de países industrializados demuestran que después de los 70 años existe un detrimento en las cifras promedio IMC en los 2 sexos. Por otra parte, el IMC del adulto mayor incluye el efecto de la declinación de la estatura por el proceso involutivo, así como por el detrimento de la cantidad y proporción de masa muscular y tejido adiposo, además de su redistribución 5-7
Se encontró una proporción considerable en la clasificación de sobrepeso y un porcentaje discreto en la clasificación de Deficiencia energética, no coincidiendo totalmente con estudios revisados en la literatura donde la desnutrición energética proteica es más frecuente en el anciano que la obesidad, sin embargo no se diagnostican con regularidad.8
Los niveles de sobrepeso encontrados son potenciadores del desarrollo de enfermedades crónicas, según documentación de la literatura internacional,9 sin embargo, la baja disponibilidad de micronutrientes en la dieta de adultos mayores también sería capaz de potenciar el desarrollo de algunas enfermedades crónicas.
Con la jubilación, los ancianos disponen de más horas de tiempo libre por lo que aumenta el reposo y el descanso, después de un determinado periodo de disfrute del tiempo liberado del trabajo, todas estas horas pueden convertirse en interminables, sobre todo, cuando predomina el aburrimiento por encima del sentimiento gratificante del no tener que hacer nada. Por ello, surge la necesidad de estar ocupados, es decir, las personas mayores precisan llevar a cabo algunas actividades útiles bien sea para ellos, para la familia o para la sociedad. En este sentido, estamos asistiendo a la aparición de una nueva edad, la que le sigue al final de las constricciones productivas y que antecede a la decadencia física, psíquica y social. 10
Se hace necesario la sistematización y la práctica de estrategias de intervención comunitarias para lograr el en autocuidado de la salud, que no es más que una estrategia frecuente, permanente y continua que utilizan las personas para responder a una situación de salud o enfermedad; por eso el autocuidado es la base de la pirámide de la atención primaria. Con el proceso de envejecimiento de la población a nivel mundial y el aumento de la prevalencia de las enfermedades crónicas, se hace cada vez más urgente la incorporación del autocuidado como una estrategia explícita y permanente en los modelos de atención en salud a nivel comunitario.
De este modo y como profesionales autónomos, pero con un importante rol multidisciplinario debemos exponer nuestros instrumentos desde intervención comunitaria para reconocer esta problemática educativas y aportar elementos enriquecedores para garantizar una calidad de vida en pacientes ancianos, en la medida en que resulta imposible evitar esta etapa de la vida, es vital lograr que las personas asuman nuevos patrones de conducta que les permitan sobrellevar de la mejor forma los avatares propios de la misma.11-13
Se debe educar al adulto mayor en su autocuidado para lograr una nutrición adecuada, debe enseñársele a elaborar un menú apropiado a sus necesidades calóricas, así como incentivar la práctica sistemática de actividades físicas.
Se sugiere modificar los hábitos dañinos y promover cambios en el estilo de vida que repercutan favorablemente en la calidad de vida de los adultos mayores.
La realización consecuente y adecuadamente dosificada de ejercicios físicos ayuda a:
Incrementar la capacidad para el trabajo físico y mental.
Brinda más energías para las actividades diarias.
Ayuda a combatir la ansiedad, la depresión y disminuye el estrés mental.
Mejora la capacidad para conciliar el sueño.
Tonifica los músculos e incrementa su fuerza, mejorando la función de las articulaciones.
Contribuye a la pérdida de peso cuando esto es necesario.
Favorece a la hora de dejar el hábito de fumar.
Disminuye el grado de agresividad, ira, ansiedad, angustia y depresión.
Previene el deterioro muscular producido por los años, retarda la aparición de osteoporosis, por lo que facilita los movimientos de la vida diaria, contribuyendo a la mayor independencia de las personas mayores.
Podemos concluir que la evaluación del estado nutricional, tanto en hombres como en mujeres, indicó que un gran número de sujetos tuvo algún grado de sobrepeso, y la deficiencia energética tuvo cierta representatividad. Una gran mayoría presentaron niveles aceptables de autosuficiencia física y funcionabilidad, atención psíquica e higiene personal y del hogar adecuada, vivían acompañados y su situación económica general se correspondía con la media del país. Se evidenció además la necesidad de buscar alternativas que propicien cambios en la vida de los adultos mayores para garantizarle una mayor calidad de vida. Se comprobó que la ocupación del tiempo libre no es la adecuada por lo que el conjunto de actividades que se proponen pretenden modificar su etilo de vida, motivarlos, brindarle una serie de actividades que los mantenga activos y así aprovechar los innumerables beneficios que acarrea la realización de actividades físicas. La educación en el adulto mayor constituye en nuestros días un proceso de gran importancia, con ella pueden lograrse un mejor estilo de vida en el anciano donde exista un adecuado autocuidado, esperanzas, conocimiento real de sus potencialidades, de sus valores. La calidad de vida de la población envejecida puede modificarse favorablemente aplicando un sistema de prevención sencillo y económico.
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