Reflexiones
metodológicas acerca del |
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Doctor en Ciencias de la Cultura Física (Cuba) |
Jesús Font Landa |
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Resumen El artículo recoge una síntesis de resultados de un profundo análisis realizado al modelo titulado Evolución del Volumen y la Intensidad en el Ciclo Grande de Entrenamiento, conocido internacionalmente como “Altas Cargas de Entrenamiento de Voroviev”, para su análisis el autor este artículo adopto como puntos de referencia los mecanismos estructurales y operativos de las fases perceptibles en el modelo, las caracterización de las cargas en el ciclo grande de entrenamiento y la necesidad de la utilización del modelo como base estructural de la planificación del proceso de entrenamiento en la práctica deportiva de alto rendimiento competitivo. Los estudios previos realizados se sustentaron en la aplicación de diversos métodos y técnicas de la investigación científica, resaltando por su productividad, la observación de documentos normativos y planes de entrenamiento de atletas de primerísimo nivel competitivo, así como las técnicas de encuesta y entrevistas, herramientas estas que unidas a métodos del nivel teórico tales como el histórico lógico y el análisis y síntesis propiciaron los datos necesarios para la escritura de esta obra científica, la que ni remotamente representa una crítica al engendro científico de Voroviev, más bien tiene por finalidad resaltar las potenciales del modelo y a la vez contribuir al logro de una mejor utilización por parte de entrenadores y otros especialistas del alto rendimiento competitivo. Palabras clave: Entrenamiento. Modelo metodológico. Altas cargas de Voroviev.
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EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 17, Nº 173, Octubre de 2012. http://www.efdeportes.com/ |
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Introducción
Los resultados logrados en los últimos años, reflejan como cada vez más se hace prácticamente imprescindible la utilización de aportes novedosos de la ciencia y la tecnología moderna, no sólo en el alto rendimiento competitivo, sino también en las categorías y grupos de edades intermedias, siendo esta una condición derivada de la implantación de nuevos sistemas competitivos, que en muchos de los casos tienen como fundamento primario el logro y mantención de estados de disposición competitiva de atletas y equipos a lo largo de todo en el año, a pesar de ello un número considerable de entrenadores continúan utilizando como base de la planificación del proceso de entrenamiento de atletas escolares y juveniles el “Modelo de la Periodización Anual”, el que para muchos representa un freno al desarrollo del deportista moderno, si se tiene en cuenta precisamente las características y exigencias de los modelos competitivos actuales.
Con el presente no se pretende en términos categóricos condicionar la aplicación del modelo referido, más bien se pretende proporcionarle premisas al entrenador deportivo, que le posibilite hacer valoraciones que lleven al camino correcto y de esa forma puedan lograr los resultados que demanda este nuevo milenio, en el que resultados como los obtenidos por Usain Bolt en el año 2004, el que superó la plusmarca mundial junior de 200 metros, con un tiempo de 19,93 segundos. Estimado lector ¿El resultado ante expuesto puede lograrse mediante la utilización de métodos tradicionales?
Lógicamente, no, ese resultado al igual que los que obtiene en la actualidad representa un producto innegable de la utilización de modernas formas de planificación, programación, control, evaluación y análisis del proceso de entrenamiento. Siendo precisamente por ello que dejamos a su consideración este artículo el que tiene por finalidad facilitar la comprensión y la aplicación de tan interesante forma de sustentar la planificación del proceso de entrenamiento.
Desarrollo
La época actual se caracteriza por un elevado desarrollo de la ciencia y la tecnología, donde las más disimiles esferas del saber humano de manera integrada a diario buscan nuevas vías para la consecución de rendimientos impensables hasta hace muy pocos años atrás. Representando la globalización como proceso económico, tecnológico, social y cultural a gran escala, la encargada de irradiar al técnico deportivo, de aquellos adelantos que de una forma u otra contribuirán a compulsar su nivel científico y metodológico y de esta manera a alcanzar los resultados demandados por la propia sociedad, la que además solicita una creciente comunicación e interdependencia entre los distintos países del mundo unificando sus mercados, sociedades y culturas, a través de una serie de transformaciones sociales, económicas y políticas que les dan un carácter global.
Mecanismo estructural y operativo de las fases perceptibles en el modelo
El estudio detallado del modelo fundamentado por Voroviev permitió llegar a la conclusión que dicho resultado científico sustenta su accionar operativo en cuatro fases que de acuerdo a las demandas del sistema competitivo programado y las posibilidades adaptativas del deportista pueden repetirse en el contexto del ciclo grande de entrenamiento.
Fases identificadas en el modelo “Altas cargas de Voroviev”
Fase Introductoria (I)
Fase Competitiva (FC)
Fase de Alivio (FA)
Fase Preparatoria (FP)
La fase introductoria tiene por finalidad la creación de premisas que le posibilite a los deportistas adentrarse en un nuevo ciclo de preparación, caracterizado por el aumento del nivel de exigencia para todos los componentes de la preparación deportiva, en tal sentido en la fase es aconsejable la restructuración de estereotipos dinámicos motores dados como deficientes. Además debe ser tratada como una fase de acondicionamiento tanto físico como mental del deportista. La duración de la fase en atletas de primerísima calidad no debe sobrepasar las dos semanas.
En la fase competitiva número uno, como se observa en la representación gráfica se manifiesta una disminución de la dinámica del volumen (componente cuantitativo del estímulo) y un aumento de la intensidad (componente cualitativo), condición que le posibilita al deportista el logro de elevados rendimientos en el sector competitivo; en la fase se manifiestan grandes gastos energéticos, provocados por los grandes niveles de intensidad que genera la actividad competitiva, esta fase puede extenderse por varias semanas.
En el contexto de la fase preparatoria número uno, en primera instancia es recomendable una disminución de los niveles cualitativos de la carga de entrenamiento, el autor de este artículo denomina ese momento como alivio integrado, para luego dar paso a una elevación tanto del nivel cualitativo como del nivel cuantitativo, representando un momento de preparación, el que culmina, según indica la curva de la intensidad con un momento competitivo de corta duración, que da lugar a la primer fase de alivio del ciclo de entrenamiento y competición.
Nótese que en la fase de alivio uno se manifiesta un descenso de los dos componentes básicos de la carga de entrenamiento (componente cualitativo y componente cuantitativo). La fase cumple dos funciones fundamentales, la recuperación física y mental del atleta y la restructuración en aquellos deportes que como el fútbol, el baloncesto y el balonmano entre otros, demandas grandes gestos estratégicos para el logro de los resultados programados.
Fase preparatoria número dos, en ella a diferencia de la fase de igual tipo anterior el trabajo es predominantemente específico, pues tiene por finalidad preparar al deportista de forma directa para la participación en competencias y torneos según deporte, del más alto nivel.
Se hace imprescindible señalar que en todos los casos cuando es referido tanto el aumento como la disminución de la dinámica del volumen y la intensidad, se tiene en cuenta de forma predominante la actividad específica del atleta; y se hace esta importante aclaración, teniendo en cuenta que las teorías tradicionales plantean que en la medida que transcurre el ciclo de entrenamiento, existe un aumento de la intensidad y una disminución del volumen, en tal sentido los estudios realizados llevan al convencimiento que en el proceso de entrenamiento enmarcado en un macro ciclo, aumenta tanto la intensidad como el volumen de los ejercicios y otras tareas de carácter específico, disminuyendo los valores de ambos componentes en todos los elementos clasificados como de menor incidencia específica en el deportista, consideración que representa uno de los pilares del rendimiento logrado por atletas de primerísimo nivel y de otras calificaciones intermedias en la actualidad.
La segunda fase competitiva, manifiesta un aumento significativo, según resultados del procesamiento matemático y estadístico realizado al respecto, de la potencia de realización de las tareas programadas y una disminución de la cantidad sumaria de trabajo específico, condición que cimienta desde el punto de vista metodológico, resultados de alto nivel relativo a las posibilidades del atleta para ese momento.
En la fase preparatoria número tres al igual que en la número dos aparece un momento de alivio integrado, que tiene por finalidad compensar al deportista de las tensiones lógicas de la fase competitiva, el trabajo en ese momento tiene un enfoque mental, con una dirección física bien marcada, adoptando como premisa más importante el rendimiento alcanzado por el deportista en la fase competitiva transitada, en el momento de alivio señalado nótese una disminución de la potencia de los ejercicios programado y paralelamente un aumento de la cantidad de trabajo, concluido el intervalo de tiempo antes señalado ambos componentes de la carga de entrenamiento aumentan, dando lugar a una fase competitiva de corta duración, donde el practicante está preparado para alcanzar elevados rendimientos competitivos.
La fase de alivio número tres se caracteriza por una disminución tanto de la cantidad de trabajo específico como de la potencia de su realización, es importante destacar que en el desarrollo de la fase se continúa trabajando sobre las bases de la actividad específica. Para muchos de los entrenadores entrevistados la fase puede verse además como un intervalo de tiempo donde desde el punto de vista metodológico se consolida la estrategia a seguir en la última fase competitiva.
La fase competitiva número tres es la encargada de posibilitarle al atleta rendir un magnifico rendimiento, si se tiene en cuenta que en esta se integra la preparación realizada en el transcurso del todo el ciclo, así como la participación en un número considerable de competiciones de altísimo nivel, el entrenador en la fase debe tener en cuenta tanto el carácter acumulativo de las cargas de entrenamiento así como su efecto residual en el órganos y funciones del organismo del deportista.
La duración de la fase independiente de estar sujeta a las demandas del calendario competitivo programado, es la que más tiempo puede durar, no me gustaría aseverar que es donde el atleta obtiene su mejor rendimiento, pues el rendimiento del deportista es programable, pudiendo aparecer el de mayor nivel en el momento que crea oportuno el entrenador o director técnico de un atleta o equipo dado. Por ejemplo, recientemente los mejores atletas del mundo participaron en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y muchos de ellos, la mayoría continuarán participando en torneos y competencias programadas por las más disimiles instituciones deportivas, acaso alguien duda que ganar la gloria olímpica es la mayor aspiración de atletas, entrenadores y otros especialistas.
Pienso que luego de la participación en el Juego Olímpico, los atletas que continúen enfrascados en ligas, copas y otros torneos de primer nivel competitivo, deben transitar por una fase de alivio, que garantice una correcta continuidad de la temporada, consideración que avala lo antes planteado.
La fase de alivio número tres se caracteriza por una disminución del nivel de todos los componentes de la preparación deportiva, por ser una fase de restablecimiento, una fase regenerativa, de gran alcance biofuncional y psicológico en el deportista.
En la fase el trabajo en condiciones aerobias desempeña un papel tan importante como las actividades recreativas programadas, las que estarán dirigidas a restablecer al deportista de las tensiones vividas en el desarrollo de las competiciones y los efectos de la correspondiente preparación.
Este momento del ciclo grande de entrenamiento demanda por parte de entrenadores, médicos, psicólogos, fisioterapeutas y metodólogos entre otras personalidades que desde diferentes puntos de vistas tributan al alto rendimiento competitivo, realizar valoraciones, que conlleven, no sólo a tratar los éxitos obtenidos y las deficiencias detectadas, sino además que propicien diagnósticos fiables, que garanticen la programación de un mejor trabajo científico y metodológico y como lógico resultado una mejor actuación del atleta tanto en el contexto de la preparación como en el competitivo propiamente dicho.
La fase de preparación número cuatro es una fase que puede prolongarse cerca de ocho a diez semanas, en ella se trata de proporcionarle al practicante la preparación aerobia y mixta que le garantice enfrentar un nuevo ciclo de entrenamiento, es oportuno resaltar que dentro de la etapa se debe cumplir el siguiente orden, en la contribución al desarrollo de las cualidades físicas, a partir de la utilización de las diferentes fuentes energéticas.
Para un número significativo de entrenadores y otros especialistas entrevistados en esta fase es donde realmente el deportista se prepara para enfrentar todo un ciclo donde se vinculan momentos de preparación, de alivio y competitivos en aras de alcanzar altos rendimientos competitivos, esta fase bien pudiera ser comparada con el período preparatorio del modelo de la Periodización Anual, fundamentado por Matvéev.
Caracterización de las cargas en el ciclo grande de entrenamiento
La carga de entrenamiento es la actividad muscular que realiza el deportista, como resultado de la aplicación de estímulos físicos y/o mentales de entrenamiento, que provocan huellas en órganos y sistemas del organismo, encargadas de condicionar cambios adaptativos, modificadores de las cualidades y capacidades físicas, básicas, especiales y específicas que determinan el rendimiento deportivo, tanto en el contexto del proceso de entrenamiento, como en la actividad propiamente competitiva.
El modelo analizado demanda la utilización combinada de cargas concentradas y cargas diluidas, al manifestarse una alternancia entre componentes de diferentes direcciones funcionales, lo que hace de las estructuras pequeñas (microciclos), la base más importante en todo el proceso de planificación del entrenamiento; esta permite al deportista mantener en niveles variables el estado optimo de disposición competitiva a lo largo de todo el año.
Pienso que en el modelo diseñado por Voroviev las cargas se concentran en intervalos relativamente cortos, al responder a las demandas de las diferentes fases que conforman el esquema. La aseveración antes expresada se sustenta el siguiente ejemplo.
En la fase introductoria las cargas, según análisis realizado aparecen combinadas, no sucediendo así en las diferentes fases competitivas, donde en especialidades tales como las carreras de velocidad, los saltos y los lanzamientos del deporte Atletismo aparece de forma concentrada la resistencia a la velocidad, la velocidad y la fuerza explosiva; por ser estas las cualidades que básicamente determinan el resultado deportivo.
Estudios experimentales realizados por el autor de este artículo científico revelan y permiten afirmar que en la fase preparatoria número cuatro es recomendable concentrar en el primer momento el trabajo direccionalmente aerobio de corta dirección, caracterizado por un gran volumen de trabajo con potencia baja, siguiéndole la concentración de cargas mixtas, que tienen por finalidad consolidar el nivel de desarrollo aerobio alcanzado y crear premisas para la aplicación de la actividad en condiciones anaerobias, programación que le permite al deportista comenzar el nuevo ciclo de competencias, combinándose como ya se expresó fases de preparación con fases de alivio y fases competitivas.
En la actualidad existen modelos. que aparecen bien definidos momentos aerobios, mixtos y anaerobios en sus diferentes manifestaciones, que integran cualidades y direcciones de entrenamiento, ejemplo en la dosificación del trabajo físico de integrantes del equipo Camagüey participante en el torneo de primera división, donde ocupó el segundo lugar, el Dr.C Font y un colectivo de entrenadores elaboraron el esquema que aparece a continuación.
Como se aprecia en el ATR antes señalado tanto las zonas, como las direcciones energéticas predominantes en el proceso de entrenamiento aparecen concentradas, esta forma de trabajo es válida para aquellos equipos que juegan un torneo relativamente corto en el año. Es importante significar que al igual que la afectación energética en el contexto del ATR, también aparecen concentradas las cualidades físicas fundamentales de la preparación del futbolista, apareciendo de manera diluida, componentes tales como la técnica, la táctica y cualidad osteomioarticular entre
En el contexto de las tendencias actuales de planificar el proceso de entrenamiento deportivo la dosificación de los estímulos de entrenamiento desempeña un papel muy importante, si, se tiene en cuenta que esta es la encargada de garantizar una óptima estimulación a los aparatos y órganos sensitivos del organismo, en tal sentido el volumen visto como el componente integrador de la carga de entrenamiento, merece ser tratado en el presente artículo, pues su magnitud sumaria es la encargada de provocar cambios en el organismo del practicante, que tienen su manifestación en los procesos de desarrollo y estabilización relativa de los componentes de la preparación del deportista.
Componentes de la magnitud del estímulo de entrenamiento
La magnitud es una de las propiedades que caracteriza al estímulo de entrenamiento, elemento este, que desde la didáctica, permite el estudio de la naturaleza y juicios valorativos, referentes a la cantidad y efecto sumario de la carga en el deportista, pudiéndose definir además la magnitud como el componente cuantitativo de la carga de entrenamiento, la cantidad de trabajo que realiza el deportista, la que se expresa en diferentes unidades de medidas. Intensidad del estimulo de entrenamiento
El estímulo es el componente externo de la carga de entrenamiento, que provoca la actividad muscular e incide sobre los aparatos y órganos sensitivos (Fuente entrenable del organismo).
Por su parte el volumen es la magnitud sumaria de la integración de todos los componentes la carga de entrenamiento, tanto cualitativos como cuantitativos. Definiéndose además como la cantidad de trabajo global que realiza el deportista.
Efecto total de la carga de entrenamiento en el organismo del atleta entrenado.
Estímulos de entrenamiento aplicados, tanto cuantitativos como cualitativos. El nivel de este componente (volumen), es el encargado de provocar la magnitud del efecto de la carga de entrenamiento. Para posibilitar una mejor interpretación de lo que representa el volumen dejamos a su sabia consideración estimado lector la clasificación de los componentes del volumen como magnitud del estimulo de entrenamiento.
Necesidad de la aplicación del modelo en la práctica deportiva de alto rendimiento competitivo
Como fue señalado en los últimos años la práctica deportiva de alto rendimiento competitivo a sufrido cambios conceptuales, estructurales y operativos en sus modelos competitivos, fenómeno que ha provocado modificaciones en los sistemas de preparación deportiva, modificaciones que a su vez han condicionado cambios en la dirección científica del entrenador y otros especialistas lo que demanda renovación constante de la base tecnológica del proceso de entrenamiento deportivo.
Todo lo anteriormente planteado ha provocado la aparición de sistemas de entrenamiento que pueden caracterizarse a partir de siguientes regularidades:
Fase preparatoria de corta duración y fases competitivas prolongadas.
Elevación de los niveles de preparación y entrenamiento en las propias fases competitivas.
Concentración de cargas de entrenamiento en períodos cortos de tiempo, atendiendo a efectos biológicos programados.
Utilización de los elementos del gesto competitivo como medio de preparación.
Acentuado carácter individual en la aplicación de los estímulos de entrenamiento.
Enfatizado enfoque de sistema en la programación de los contenidos.
Tendencia a un desarrollo consecutivo de capacidades y cualidades físicas, atendiendo al efecto residual y carácter acumulativo de las cargas de entrenamiento.
Tratamiento a la planificación deportiva como un sistema de acciones tributantes entre sí.
Las particularidades expuestas demandan un vínculo operativo entre los entrenadores, médicos, psicólogos, sociólogos, fisioterapeutas y farmacéuticos, para la elaboración de estrategias encargadas de sustentar la planificación, el control, la evaluación y el análisis del rendimiento deportivo, así como la variación de los sistemas de competencias creados para atletas en fase de formación y la Implementación de las nuevas tecnologías y conceptos metodológicos, en aras de elevar el rendimiento del físico, técnico, táctico y estratégico del practicante.
La obtención de múltiples fases de disposición competitiva en el transcurso del año demanda la necesidad de utilizar sistemas de entrenamiento que le posibiliten al entrenador alternar pequeñas fases de preparación y de alivio con grandes fases competitivas.
Los estudios exploratorios, descriptivos y experimentales realizados como preámbulo a la escritura de esta obra, reflejan la necesidad de los entrenadores no sólo de mantener en el contexto competitivo los niveles de entrenamiento y preparación adquiridos, sino además de aumentarlo, mediante la utilización de fases preparatorias alternadas como de alivio, representando el modelo objeto de valoración, una herramienta metodológica eficaz que aunque aún no se explotan al máximo sus potenciales un número considerables de atletas han obtenido resultados y estados óptimos competitivos en fases prolongadas.
Todo lo cual condiciona la necesidad de la utilización del modelo como base estructural de la planificación del proceso de entrenamiento en la práctica deportiva de alto rendimiento competitivo.
Conclusiones
El análisis del modelo objeto de estudios posibilitó arribar a las conclusiones que aparecen a continuación.
En el modelo se identifican cuatro fases operativas, las que pueden repetirse en el contexto de ciclo grande de entrenamiento, cuantas veces sea necesario, atendiendo a las demandas del sistema de competencias programado y las particularidades adaptativas del deportista.
La obtención de múltiples fases de disposición competitiva en el transcurso del año demanda la necesidad de utilizar sistemas de entrenamiento que le posibiliten al entrenador alternar pequeñas fases de preparación y de alivio con grandes fases competitivas.
Las particularidades del modelo demandan la programación de un rígido sistema de control pedagógico, médico, psicológico y social del deportista que originen diagnósticos que le posibiliten al entrenador planificar y si fuera necesario reajusta el proceso de entrenamiento en una fase dada.
El modelo aunque fue creado en la década de los 80 del ciclo anterior representa una genuina revolución científica en el contexto de la práctica deportiva moderna.
Bibliografía
Font Landa, Jesús. Bases metodológicas de la Teoría y Metodología del Entrenamiento Deportivo. Material de Apoyo a la docencia. Universidad de Ciencias de la Cultura Física y el Deporte. Cuba. 2011.
Font, Landa, Jesús. Tendencias modernas de planificación, control, evaluación, procesamiento y análisis del rendimiento deportivo en atletas de primerísima calidad. Material de Apoyo a la docencia. Universidad de Ciencias de la Cultura Física y el Deporte. Cuba. 2011.
García Manso, J.M. et. al. Planificación del entrenamiento deportivo. Barcelona. Ediciones Martínez Roca, 1998.
Volkov, y Menshikov, V.V. Bioquímica. Moscú. Editorial Vneshtorqizdad, 1990.
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