efdeportes.com
Actividad física y menopausia

 

Núcleo de Pesquisa em Cineantropometria

e Desempenho Humano NUCIDH (UFSC)

(Brasil)

Josefina Bértoli

Patricia Noemi Batista

Mariana Paola Buchinger

Graciela Gisel Hut

turybertoli@hotmail.com

 

 

 

 

Resumen

          La menopausia es el nombre dado a la última menstruación espontánea de la mujer, después de que se agotan los folículos que constituyen el patrimonio genético de cada mujer. El objetivo de este trabajo, fue estudiar los efectos de La actividad física en mujeres que se encuentran en la menopausia, quienes practican ejercicios de forma regular y conocer un poco más acerca de esta etapa a través de profesionales de la salud relacionados con dicha área de actuación. Los métodos utilizados fueron entrevista a una Profesora de Educación Física y a un Médico Ginecólogo, y aplicación de cuestionario a un población (n= 20) mujeres entre 40 y 60 años que se encontraban transitando o transitaron por esta etapa, quienes practican actividad física. Los resultados mostraron que el 75% de la población estudiada practica ejercicio de forma continua, mientras que el 25% lo hace de forma esporádica, sin embargo todas mencionan efectos positivos luego de realizar actividad física. Los profesionales de la salud, también enfatizan que ello produce efectos beneficiosos sobre la mujer, haciendo hincapié en una dieta rica en calcio. A partir de los datos obtenidos concluimos que el ejercicio físico ameniza estos síntomas, además de prevenir la osteopenia y osteoporosis; siempre y cuando los ejercicios sean orientados y supervisados por un profesor de educación física capacitado.

          Palabras clave: Actividad física. Menopausia. Cambios fisiológicos.

 

Abstract

          Menopause is the name given to the last spontaneous menstruation of women, after being depleted follicles that constitute the genetic heritage of each woman. The aim of this work we studied the effects of physical activity in women who are in menopause, those who practice exercise regularly and learn more about this stage through health professionals related to this area acting. The methods used were interviews a physical education teacher and a gynecologist, and administering the questionnaire to a population (n = 20) women between 40 and 60 who were transiting through this stage, those who practice physical activity. The results showed that 75% of the population studied exercise practiced continuously, while 25% do so sporadically, but all positive effects mentioned after physical activity. Health professionals, they also emphasize that this beneficial effect on women, focusing on a diet rich in calcium. From the data we conclude that physical exercise enlivened these symptoms, and prevent osteopenia and osteoporosis, as long as the exercises are guided and supervised by a trained physical education teacher.

          Keywords: Physical activity. Menopause. Physiological changes.

 

 
EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 17, Nº 172, Septiembre de 2012. http://www.efdeportes.com/

1 / 1

Introducción

    La menopausia es el nombre dado a la última menstruación espontánea de la mujer, después de que se agotan los folículos que constituyen el patrimonio genético de cada mujer. Se dice que una mujer está en la menopausia cuando no tiene el ciclo menstrual durante un año. La reducción de los niveles de la hormona es un hecho que le sucede a todas las mujeres y se inicia alrededor de los 40 años, se llama la etapa del climaterio, en la cual se produce la transición de la falla reproductiva o fértil debido a la disminución de las hormonas sexuales producidas por los ovarios. Cuando se presenta en mujeres menores de 40 años se denomina menopausia prematura. La disminución o falta de las hormonas sexuales femeninas pueden afectar diversas partes del cuerpo y determinar los signos y síntomas conocidos con el nombre de climaterio o la menopausia. Estos síntomas afectan a los aspectos físicos y psicológicos de las mujeres, ya que para muchos representa el inicio del proceso de envejecimiento. Algunos ejemplos son: sofocos, sudoración, cambios urogenitales causados por la deficiencia de estrógenos, cambios de humor. Los síntomas emocionales como la ansiedad, depresión, fatiga, irritabilidad, pérdida de memoria, insomnio debido a las mudanzas hormonales que afectan la química del cerebro (Oliveira, Navarro, 2011). Como los ovarios se vuelven inactivos y se producen cantidades mínimas o nula de los estrógenos, coincidiendo con la reducción del la absorción de calcio por el intestino y la baja producción de calcitonina, la inhibición de la desmineralización ósea (Wibelinger, Tonial, 2009), dando como resultado gran predisposición a la aparición de osteopenia y en otros casos osteoporosis. Estas dos últimas enfermedades, producidas por la disminución de la cantidad de masa ósea, hacen que los huesos se vuelvan más frágiles, volviéndolos más propensos a fracturas, especialmente a nivel de la columna vertebral, fémur, cadera y muñeca. Aunque algunas mujeres pueden no tener síntomas, una manifestación silenciosa de la deficiencia de la hormona puede estar ocurriendo, como por ejemplo la pérdida de densidad ósea, en consecuencia, conduce a la osteoporosis (Oliveira, Navarro, 2011) Cerca del 50% de las pacientes con fractura de pelvis pierden la habilidad para vivir independientemente y hasta 20% mueren en seis meses (Guerrera, Prado 2010). Según Wibelinger, Tonial y Oliveira et al, afirman que es una enfermedad de origen sistémica, cuyos resultados son: pérdida de masa ósea y deterioro de la microarquitectura de dicho tejido, dando lugar a la pérdida de fuerza muscular, con la consiguiente predisposición a las fracturas; pudiendo afectar a todos especialmente a la mujer post-menopáusica (Wibelinger, Tonial, 2009).

    Por otra parte, existen varios factores considerados de riesgo para la osteoporosis: sexo femenino, etnia blanca o asiática, historia familiar, menopausia precoz, función reducida de los ovarios antes de la menopausia (amenorrea de atleta, hiperprolactinemia, anorexia nerviosa, etc.), dieta inadecuada (alto consumo de cafeína, baja ingestión de calcio), estilo de vida inadecuado (sedentarismo, abuso de alcohol) y fracturas (Guerrera, Prado 2010).

    Por otro lado un factor que agrava lo descrito anteriormente, es el proceso natural de envejecimiento, el cual se caracteriza por el declive de diversas funciones fisiológicas, exponiendo a ancianos a mayor fragilidad y pérdida de autonomía. En particular, el sistema muscular sufre alteraciones como reducción de fuerza y masa (proceso llamado sarcopenia), el cual ha sido observado tanto en hombres como en mujeres y puede estar asociado a pérdida de autonomía, riesgos de caídas, complicaciones metabólicas, reducción de la densidad mineral ósea y declive de la capacidad ósea (Limal, Bottaro, Carregaro, de Oliveira, Bezerra, 2012).

    Hoy en día es posible detectar si la paciente padece o no de osteopenia u osteoporosis, utilizando una técnica llamada densitometría que se realiza por absorción de rayos X con doble energía (DEXA), que da como resultados valores reproductibles en áreas importantes de fracturas asociadas a osteoporosis; es un examen que refleja La situación momentánea de la paciente, siendo una medida estática, que no indica pérdida o ganancia de masa ósea (Guerrera, Prado, 2010). En 1994, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha definido los criterios actualmente utilizados en los informes de densitometría ósea de todo el mundo y se basan en la desviación estándar en relación con los adultos jóvenes.

    Los criterios son los siguientes:

  • Normal: la desviación estándar de hasta -1,00;

  • Osteopenia: desviación estándar que van -1,00 a -2,50;

  • La osteoporosis: desviación estándar igual o inferior a -2,50

Clasificación de Osteoporosis según la OMS

    A partir de lo investigado en la literatura, surge como interés, estudiar los efectos de La actividad física en mujeres que se encuentran en la menopausia, quienes practican ejercicios de forma regular y conocer un poco más acerca de esta etapa a través de profesionales de la salud relacionados con dicha área de actuación.

Métodos

    El diseño de esta investigación fue no experimental transversal. La muestra fue no probabilística, por cuotas. En un primer momento se realizaron entrevistas a profesionales de la salud, a una Profesora de Educación Física y a un Médico Ginecólogo de la ciudad de Posadas, Misiones, Argentina. En segundo lugar fue aplicado un cuestionario a un población (n= 20) mujeres entre 40 y 60 años que se encontraban transitando o transitaron por esta etapa (menopausia), y quienes actualmente practican gimnasia localizada, Pilates, spinning entre otras modalidades, de un gimnasio de la misma localidad.

    Las entrevistas fueron agendadas previamente tanto con los profesionales de la salud así como también con la población seleccionada para la aplicación de cuestionarios, los mismos fueron realizados en forma de entrevista, con explicación previa de cada pregunta, posibilitando de esta forma resolver dudas que pudiesen surgir a lo largo de la misma.

Resultados

    En la siguiente tabla, se observan los datos recolectados durante las entrevistas a profesionales de la salud.

Referencias:

*Médico Ginecólogo

-Profesora de Educación Física

    En segundo lugar, los resultados obtenidos en las encuestas realizadas sujetos de sexo femenino que se encuentran transitando por el período de Climaterio, cuyo promedio de edad de las mujeres que participaron de este estudio fue de 49,8 (±8,1 años) años, con un desvío medio de 5,4.

  • 75% de los individuos encuestados respondieron que los cambios provocados en esta etapa afectaban significativamente su vida.

  • 75% realizaban actividad física regularmente, mientras que el 25% no lo hace con continuidad.

  • 85% de las mujeres sienten que con la práctica regular de ejercicio se transcurre de mejor manera durante este período.

  • Frecuencia con que la población estudiada realiza actividad física.

  • 5%: trabaja mejor el organismo, las molestias disminuyen, regula el sistema nervioso, regula el insomnio, elimina gorduras, ayuda a la oxigenación, mejora la flexibilidad, activa la circulación, elimina tensiones, mejora la calidad de vida, mayor agilidad, disminuye la hipertensión.

  • 10%: mejora el carácter, calma la ansiedad, atenúa los trastornos de esta etapa y ayuda en el bien estar general.

  • 15%: Mejora los estados de ánimo y elimina tensiones.

Tipo de actividad física realizada

  • 5%: natación, spinning y bicicleta.

  • 10%: gimnasia aeróbica, Pilates, gimnasia localizada, gimnasia acuática, musculación.

  • 30%: Caminata.

Discusión

    Diversos estudios han demostrado que la actividad física beneficia al organismo en diversos aspectos: orgánicos y psicológicos

    En cuanto a los datos obtenidos en los cuestionarios vemos que:

    Tanto el 75% de los individuos encuestados respondieron que los cambios provocados en esta etapa afectaban significativamente su vida, el mismo resultado arrojó si realizaban actividad física regularmente. Por otra parte, 85% de las mujeres sienten que con la práctica regular de ejercicio se transcurre de mejor manera durante este período. En cuanto, a la frecuencia con que la población estudiada realiza actividad física, arrojó los siguientes valores: 20% realiza dos veces por semana, 30% tres veces por semana y 50% cinco veces por semana. Con respecto a las mejoras que perciben con la práctica de ejercicio físico: 5% afirmó que trabaja mejor el organismo, las molestias disminuyen, regula el sistema nervioso, regula el insomnio, elimina gorduras, ayuda a la oxigenación, mejora la flexibilidad, activa la circulación, elimina tensiones, mejora la calidad de vida, mayor agilidad, disminuye la hipertensión; 10% asegura que mejora el carácter, calma la ansiedad, atenúa los trastornos de esta etapa y ayuda en el bien estar general y 15% que mejora los estados de ánimo y elimina tensiones. Por último, el tipo de actividad física realizado indicó lo siguiente: 5% practica natación, spinning y bicicleta, 10% gimnasia aeróbica, Pilates, gimnasia localizada, gimnasia acuática, musculación y el 30% realiza Caminata.

    En otro estudio realizado en de base poblacional, también de corte transversal, que incluyó una muestra estratificada de 370 mujeres de edad medio entre 40 a 65 años, reclutadas a partir de un universo de 20.801 mujeres atendidas en el período de un año en las redes básicas de salud, del sistema de salud de la ciudad de Natal, Río Grande do Norte, Brasil, donde la el promedio de edad de las mujeres que participaron fue de 49,8 (±8,1 años) de las cuales 28.4% eran menores de 55 años. Predominantemente blancos (72,7%), casados ​​(61,6%), los no fumadores (93,5%) completan la escuela superior con (47,8%) y el ingreso de dos salarios mínimos (70,8%). En cuanto a la clasificación de los niveles de actividad física, se encontró que 132 (35,7%) estaban activos, 129 (34,8%) eran moderadamente activos y 109 (29,4%) eran sedentarios.

    Encontró que las mujeres que hacen más actividad física son menos propensos a manifestar los síntomas de la menopausia en sus respectivos ámbitos de MRS: psicológico (p <0,01), somático-vegetativo (p <0,01) y urogenital (p <0,01) (Gonçalves, Canário, Cabral, Silva, Spyrides, Giraldo, Eleutério, 2011).

    Por último en una investigación, de tipo experimental, la muestra estuvo conformada por 20 mujeres de la comunidad de Pelotas, Río Grande do Sul, Brasil; con diagnóstico de osteopenia y osteoporosis en la condición clínica después de la menopausia. Fueron inscriptas en un programa de entrenamiento físico consistió en 12 meses de ejercicio de resistencia con tres sesiones semanales de una duración de 1 hora cada uno, con 5 minutos de entrada en calor y estiramiento, 50 minutos de ejercicios de resistencia en las máquinas y 5 minutos de estiramiento y relajación muscular; cargas de entre 60 y 85% de 1RM. Como resultados, se observó un aumento del 25% en la columna de densidad mineral ósea entre el pre y post-tratamiento fue estadísticamente significativa (t = 5,888, p = 0,000) y el 77% de aumento en la densidad mineral ósea del fémur entre pre-y post-tratamiento que fue estadísticamente significativa (t = 8,163, p = 0,000). Se concluyó que hubo mejoras significativas en la densidad mineral ósea de mujeres post-menopáusicas en el estado de osteopenia y osteoporosis, así como el aumento de los componentes de la aptitud física centradas en la salud, tales como la flexibilidad, porcentaje de grasa corporal y la fuerza que aumentar la autonomía en las actividades de la vida diaria (AVD (Meireles, Nunes 2012).

    El presente estudio, reafirma que lo investigado en la literatura conjuntamente con las respuestas obtenidas en las entrevistas a los profesionales de la salud y los datos obtenidos durante las encuestas tienen relación significativa. Las encuestas mostraron de forma cualitativa como la actividad física ayuda a transcurrir mejor los cambios producidos por la menopausia, tanto físicos como psicológicos, concordando y reafirmando con la teoría investigada. Sin embargo, el grupo que encuestó a la población, al no contar con los recursos necesarios para medir la ganancia (si las hubiera) de densidad ósea, lo que se tradujo como limitación.

Conclusión

    A partir de los resultados obtenidos tanto en las entrevistas como en las encuestas podemos observar la gran importancia que tiene la actividad física sobre los cambios producidos durante el climaterio, el cual afecta a la mujer en sus diversas aspectos: psicológicos, emocionales y fisiológicos. El ejercicio físico ameniza estos síntomas, además de prevenir la osteopenia y osteoporosis; siempre y cuando los ejercicios sean orientados y supervisados por un profesor de educación física capacitado para prescribir la actividad física adecuada Además de ser acompañada por una alimentación balanceada, rica en calcio.

Bibliografía

  • Fett de Oliveira R.A.P., Navarro A.C. Os benefícios do treinamento de força no aumento da densidade mineral óssea em mulheres menopausadas associada à dieta rica em cálcio. Revista Brasileira de Nutrição Esportiva, São Paulo. v. 5. n. 25. p. 25-34. Janeiro/Fevereiro. 2011. ISSN 1981-9927.

  • Gabriela dos Santos Meireles GS, Nunes VGS. Treinamento físico resistido para mulheres na pós-menopausa com osteopenia e osteoporose. Revista Saúde e Pesquisa, v. 5, n. 1, p. 67-74, jan./abr. 2012 - ISSN 1983-1870

  • Gonçalves AKS, Canário ACG, Uchoa Leitão P, Cabral PUL, Silva RAH, Spyrides MHC, Giraldo PC, Eleutéri Jr J. Impacto da atividade física na qualidade de vida de mulheres de meia idade: estudo de base populacional. Impact of physical activity on quality of life in middle-aged women: a population based study. Rev Bras Ginecol Obstet. 2011; 33(12):408-13.

  • Martins Guerra MTP, Gérson Luís Medina Prado GLM. Osteoporose em mulheres na pós-menopausa: perfil epidemiológico e fatores de risco. Osteoporosis in postmenopausal women: epidemiological profile and risk factors. Rev Bras Clin Med. São Paulo, 2010 set-out; 8(5):386-91.

  • Ricardo Moreno Lima RM, Bottaro M., Carregaro R., Oliveira JF., Bezerra LMA., Ricardo Jacó de Oliveira R. Efeitos do treinamento resistido sobre a força muscular de idosas: uma comparação entre métodos. Effects of resistance training on muscle strength of older women: a comparison between methods. Rev Bras Cineantropom Desempenho Hum 2012, 14(4):409-418.

  • Wibelinger LM, Tonial A, Oliveira G. Torque muscular de flexores e extensores de joelho de mulheres idosas com osteoporose. RBCEH, Passo Fundo, v. 6, n. 3, p. 353-361, set./dez. 2009.

Otros artículos sobre Género y Mujer

  www.efdeportes.com/
Búsqueda personalizada

EFDeportes.com, Revista Digital · Año 17 · N° 172 | Buenos Aires, Septiembre de 2012
© 1997-2012 Derechos reservados