Introducción
El balonmano es clasificado como un juego deportivo eminentemente táctico por
las características del juego. Donde existe una interacción constante entre
los compañeros de un mismo equipo y entre estos y sus adversarios, en aras de
lograr la posesión del balón para poder desarrollar un juego ofensivo que
permita anotar el gol.
Este continuo proceso de interacción en un espacio compartido (terreno de
juego) hace necesario que los jugadores estén constantemente enfrentando la
incertidumbre que provocan las disimiles situaciones que se presentan en cada
segundo, a las cuales deben dar solución empleando los diferentes elementos que
componen la técnica de este deporte. Ahora bien este empleo se realiza en
función de la situación de juego que se le presenta, es por ello que se
considera que existe una relación dialéctica entre la técnica y la táctica
viendo estas como la unidad técnico-táctica.
Los recursos tácticos permiten a los jugadores utilizar los elementos técnicos
de forma efectiva durante la lucha deportiva, es por ello que su estudio permite
valorar el nivel de asimilación de los jugadores que se encuentran en
formación.
Por táctica se entiende a todas aquellas acciones motrices inteligentes
realizadas en el juego con adecuación espacio temporal, resultado de la
observación de situaciones previas de compañeros y adversarios, y de sus
modificaciones espaciales o posturales. (Antón García, 1996)
El juego de balonmano tiene tres fases fundamentales, el ataque, la defensa y la
transición. Este artículo se dirige al estudio del juego ofensivo, visto como
aquella fase del juego de balonmano donde el jugador debe utilizar todos los
recursos técnicos-tácticos que le posibiliten ocupar los espacios libres de
mejor ubicación con respecto a la portería contraria para realizar el
lanzamiento a la misma, en aras de anotar el gol, cuando su equipo se encuentra
en posesión del balón. El logro del objetivo supremo (gol) en el juego depende
en gran medida del dominio técnico-táctico de los medios ofensivos que posean
los jugadores.
El dominio técnico-táctico de los medios ofensivos, se sustentan en premisas
que debe dominar y atender el jugador, como es, realizar las acciones
manteniendo la seguridad del balón, la forma en que debe colocarse en función
de las características del defensor, el espacio que tiene para realizar la
acción, la carrera con el balón o sin este, la distancia que lo separa entre
el defensor y la portería, entre otros.
Partiendo de esta premisa es que se hace necesario estudiar constantemente el
accionar técnico-táctico de los jugadores de balonmano que se encuentran en
formación. Ya que para alcanzar la maestría deportiva, es necesario realizar
un perfeccionamiento continúo en el proceso de preparación del deportista, y
especialmente en los componentes técnicos-tácticos.
La comunidad científica del balonmano, ha realizado una constante labor en el
perfeccionamiento del proceso de preparación del deportista, aplicando los
adelantos científicos-tecnológicos y estudiando con profundidad al jugador de
campo desde el punto de vista teórico y práctico, no obstante las
investigaciones relacionadas con el accionar táctico de los jugadores de
balonmano que se encuentran en formación será siempre bien recibidas por la
comunidad científica de este deporte, por ser un eslabón esencial en el
proceso de formación de los jugadores de balonmano. Es por ello que se
desarrolló la investigación con el objetivo de analizar la utilización
del dribling en el ataque posicional de los jugadores de la primera línea de
ataque del equipo de la provincia Camagüey en los Juegos Nacionales Escolares
del año 2010.
Materiales
y métodos
La investigación que se muestra en el presente artículo fue desarrollada
durante los Juegos Nacionales Escolares del curso 2009-2010, mes de julio, se
observó al equipo de balonmano de la categoría 15-16 años, género masculino.
Se seleccionó para la investigación a los jugadores que se desempeñaron en la
primera línea de ataque en la referida competencia, mediante el muestreo
intencional. La intencionalidad estuvo dada por el aporte en el accionar
ofensivo que deben tener los jugadores de esta línea de ataque (central y
laterales o interiores) en el juego posicional, en la tabla uno, se muestra la
distribución de la muestra estudiada según la posición.
Tabla
1. Distribución de la muestra estudiada en cuento a la cantidad de
jugadores controlados.
En el desarrollo de la
investigación se emplearon los métodos científicos del nivel teórico que
constituyen procesos lógicos del pensamiento, además de los métodos
empíricos y dentro de estos la observación como método fundamental. Para la
aplicación de dicho método de confecciono un protocolo a partir de las
variables tácticas ofensivas objeto de estudio, este se describe a
continuación.
Protocolo
de observación utilizado
Aspectos
generales
Aspectos
técnico-tácticos a evaluar en el ataque posicional
Criterios
de evaluación
Ataque después del dribling:
-
Positivo:
cuando realiza el ataque y logra desmarcarse, lanzar a portería o darle
continuidad al juego ofensivo.
-
Negativo:
cuando pierde el balón por cualquier vía (violación del reglamento,
interceptación, quitan el balón) o no logra desmarcarse del adversario.
Ataque
sin dribling
-
Positivo:
cuando realiza el ataque y logra desmarcarse, lanzar a portería o darle
continuidad al juego ofensivo.
-
Negativo:
cuando pierde el balón por cualquier vía (violación del reglamento,
interceptación, quitan el balón) o no logra desmarcarse del adversario.
Se realiza el control de cada una de las acciones del juego posicional donde los
jugadores realizan ataque a la portería.
El protocolo fue sometido a un proceso de validación por criterio de expertos
arrojando una alta concordancia y confiabilidad para el objetivo que se persigue
en este estudio.
Las observaciones se llevaron a cabo por el autor del presente, al participar en
la competencia referida como representante de la comisión técnica de la
provincia a dicho evento, con el objetivo de evaluar el comportamiento técnico
– táctico de los jugadores. Se observó al 100% de los jugadores de la
primera línea de ataque (5) durante los siete partidos efectuados por dicho
equipo. Los datos primarios del registro de las acciones objeto de estudio se
realizó por el método más-menos, es decir las positivas (+), las negativas
(-), para su posterior procesamiento, determinando la cantidad de acciones
positivas y negativas así como la estadística descriptiva mediante la
distribución empírica de frecuencias, mediante el porcentaje que representan
en cada caso, con respecto al total, todo lo cual permitió llegar a los
resultados que se muestran a continuación.
Resultados
y discusión
El análisis y discusión de los resultados obtenidos en la investigación se
realizará juego a juego. Estos resultados se recogen en los gráficos que se
confeccionaron para tales efectos.
Como se aprecia en el gráfico 1, que recoge los resultados en cuanto a la
realización del ataque posicional de los jugadores de la primera línea de
ataque, en el primer juego, efectuado contra el equipo de Santiago de Cuba, se
realizaron un total de 49 acciones en ataques. Valorando lo sucedido al
respecto, se observa que los jugadores de la primera línea, realizaron en 36
ocasiones el ataque a portería sin emplear el dribling, como recurso para
lograr desestabilizar a la defensa rival. Observase que en solo una ocasión, no
se logró su objetivo (desmarcarse o darle continuidad al juego ofensivo), lo
que representa el 2.77%; es significativo resaltar que en el 97.22%, el ataque
sin realizar dribling, logro alcanzar el objetivo.
Durante este juego solo se utilizó el ataque después de dribling en 13
oportunidades y de ellas solo en cinco situaciones los jugadores lograron
desmarcarse, lanzar a portería, dar continuidad al juego ofensivo, lo que
representa el 38.4%. Como se aprecia a los jugadores de la primera línea de
ataque no les fue bien atacando después del dribling, ya que obtuvieron un
61.5% negativo, lo que denota que existen insuficiencias en este sentido.
Los jugadores que se desempeñan en la primera línea de ataque, desarrollaron
un juego ofensivo que sustenta sus incursiones en el aprovechamiento de las
bondades del reglamento, al permitir que se puedan dar tres pasos antes del
dribling. Además es conocido que los jugadores utilizan el dribling como
recurso de ataque posicional, cuando por alguna razón reciben el balón de
forma estática o muy distante del área de golpe franco, siempre que la defensa
no sea en profundidad. Esto demuestra que los jugadores de la primera línea de
ataque en este partido aplicaron las concepciones tácticas ofensivas del
balonmano moderno, es decir, no recibir estático y no emplear el dribling
innecesariamente. Este juego fue ganado por el equipo Camagüey.
Gráfico
2. Resultados del ataque posicional de los jugadores de la primera línea de
ataque. Segundo juego
En el segundo juego efectuado, se ejecutaron 40 acciones de ataque posicional
por los jugadores de la primera línea, de ellos 20 fueron ataques sin dribling,
obteniendo 10 acciones logrando desmarcarse, lanzar a portería o darle
continuidad al juego; mientras que los otros 20 ataques posicionales los
efectuaron después de realizar dribling, obteniendo 12 acciones positivas y
ocho negativas.
Es significativo señalar que los jugadores logran realizar mayor cantidad de
acciones positivas cuando atacan después de dribling, también es después del
dribling que cometen menos errores con un total de ocho, mientras que al atacar
antes del dribling cometen 10 errores.
No obstante, se considera que el empleo de este medio técnico dificulta en este
caso la profundidad del ataque ya que al botar el balón antes de avanzar
mediante los pasos reglamentarios está auto limitando sus posibilidades de
superar a su defensor mediante una acción individual, pues solo le quedarían
por dar tres pasos cuando detenga el dribling; mientras que si avanza empleando
los pasos reglamentarios y luego realiza el dribling podrá efectuar otros tres
pasos, lo cual constituye a juicio del autor una mejor situación táctica para
su equipo.
Además el empleo del dribling como primera opción para realizar el ataque
facilita la acción del defensor y aumenta las posibilidades de cometer
violaciones del reglamento (doble dribling). Se infiere que en este partido se
emplea con mayor efectividad el ataque después del dribling por las
características del rival al cual enfrentaron quien permitida muchas libertades
defensivas. Este encuentro se perdio.
Gráfico
3. Resultados del ataque posicional de los jugadores de la primera línea de
ataque. Tercer juego
En el tercer encuentro efectuado por la selección de Camagüey en los Juegos
Nacionales Escolares, los jugadores de la primera línea de ataque (central y
laterales), realizaron un total de 34 ataques posicionales, siendo 12 después
del dribling y de ellos lograron su objetivo siete, representando un 58.3%;
mientras que cinco fueron evaluados como negativos al no lograr su objetivo pues
no se desmarcaron del adversario, no lanzaron a portería o dieron continuidad
al ataque, esto representa un 41.6%. Las acciones efectuadas sin realizar
dribling totalizan 22 y de ellas se ejecutaron logrando su objetivo 13 ataques
para un 59.09%; mientras que nueve no cumplieron su objetivo.
Se aprecia con claridad que en este encuentro los jugadores de primera línea
desarrollaron un juego donde existió un equilibrio entre el empleo de las
acciones después de dribling y sin emplear este, lo que trajo al traste con el
resultado del encuentro el cual se perdió frente al equipo de Ciudad de la
Habana. A juicio del autor esto apunta a la no existencia de una concepción
táctica sólida en cuento al empleo de este elemento técnico. Se perdió este
encuentro.
Gráfico
4. Resultados del ataque posicional de los jugadores de la primera línea de
ataque. Cuarto juego
El cuarto juego efectuado por la selección objeto de estudio, se desarrolló
bajo un accionar táctico ofensivo en el juego posicional sin precedentes hasta
este momento en esta justa deportiva, realizaron 37 acciones de ataque
posicional pero solo 4 ataques a la portería se ejecutaron después del
dribling. La mayoría de las acciones realizadas fueron sin dribling 33 en total
y de estas lograron su objetivo 17 acciones para un 51.5%; mientras que se
evaluaron de negativas 16, lo que representa el 48.48% de las acciones
realizadas sin emplear el dribling. Obsérvese que existe un equilibrio relativo
entre las acciones que lograron su objetivo y las que no. Es significativo
destacar que en este encuentro solo se emplean cuatro ataques después de
dribling, por lo que se infiere que los jugadores de primera línea
desarrollaron un juego táctico posicional basado en la movilidad desde su
puesto, recibo en movimiento, entre otros elementos tácticos que posibilitan
atacar a la portería sin necesidad de emplear el dribling como recurso. Este
encuentro deportivo lo gano el equipo analizado.
Gráfico
5. Resultados del ataque posicional de los jugadores de la primera línea de
ataque. Quinto juego
En el quinto encuentro efectuado, el ataque posicional, se caracterizó por un
ataque donde se realizan mayor cantidad de acciones sin dribling, lo cual se
corrobora al observar la gráfica indicativa de los resultados de ese juego
donde se registran 42 acciones realizadas 29 fueron ataques sin utilizar el
dribling, obteniendo 23 ataque positivos que lograron el objetivo para el cual
se realizó. Aunque se necesario destacar que este encuentro se perdió.
Gráfico
6. Resultados del ataque posicional de los jugadores de la primera línea de
ataque. Sexto juego
El sexto juego al igual que en el anterior tuvo como característica un accionar
basado en el ataque sin dribling pues de las 36 acciones de ataque posicionales,
32 fueron sin dribling, obteniendo 26 positivos lo que demuestra el dominio
táctico que mostro en este partido. Este encuentro fue ganado por un amplio
marcador.
Gráfico
7. Resultados del ataque posicional de los jugadores de la primera línea de
ataque. Septimo juego
En el séptimo y último juego ocurre algo similar a lo sucedido en los dos
anteriores de las 39 acciones de ataque posicional realizadas por los jugadores
de la primera línea de ataque solo dos fueron después de dribling. De las
acciones realizadas sin dribling 22 lograron su objetivo. Se perdió este
encuentro.
Gráfico
8. Resumen del ataque posicional de los jugadores de la primera línea de
ataque en los Juegos Escolares Nacional
Como se observa en el gráfico que resumen, el accionar ofensivo posicional de
los jugadores que se desempeñan en la primera línea de ataque del equipo
estudiado, llevaron a cabo un juego donde predomino al ataque sin dribling con
un total de 219 acciones y de ellas el 66,67% fueron ejecutadas con éxito;
mientras que solo realizaron 68 ataques después del dribling. Los resultados
mostrados indican a nuestro juicio que los jugadores de la primera línea de
ataque poseen una concepción táctica acorde a los principios del balonmano
moderno, lo cual es muy positivo en su formación como atletas de alto
rendimiento.
Conclusiones
-
Los jugadores de la primera línea de ataque desarrollaron un accionar
ofensivo posicional donde predomino el ataque a la portería sin realizar
dribling, aunque en ocasiones se realiza un empleo inadecuado del ataque
mediante el dribling.
-
Los mejores resultados porcentuales en el juego posicional se obtienen en el
ataque a portería sin realizar dribling.
-
Los resultados muestran que el equipo logra las victorias en aquellos casos
donde existe un marcado empleo de los ataques posicionales sin realizar
dribling para atacar a la portería.
-
Los resultados mostrados indican a nuestro juicio que los jugadores de la
primera línea de ataque poseen una concepción táctica acorde a los
principios del balonmano moderno, lo cual es muy positivo en su formación
como atletas de alto rendimiento.
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