Propuesta de juegos prácticos para desarrollar la competencia matemática a través de la Educación Física |
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*Máster en Actividad Física en la Comunidad Título otorgado por la Universidad las Ciencias de la Cultura Física y Deportes “Manuel Fajardo” UCCFD. La Habana. Profesor Asistente de la Educación Superior **Licenciada en Ciencias de la Computación Profesora asistente de la Educación Superior, Título otorgado por la Universidad de las Ciencias Informáticas UCI |
Yordan Portela Pozo* Elizabeth Rodríguez Stiven** (Cuba) |
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Resumen La Educación Física y la matemática basada en competencias aseguran un efecto positivo en el desarrollo de los estudiantes en la Universidad de las Ciencias Informáticas. Para ello, es necesario especificar y definir estos aspectos en el trabajo. El artículo finaliza con una propuesta de juegos prácticos y competitivos que relaciona la Matemática con la Educación Física. Palabras clave: Educación Física. Matemática. Competencia. Juegos.
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EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 16, Nº 164, Enero de 2012. http://www.efdeportes.com/ |
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Introducción
Se desarrolla la matemática de forma transversal, a través de la intervención de las diferentes asignaturas presentes en la enseñanza del ciclo básico (Programación, la Física, la Ingeniería, los Idiomas, la Preparación Política y, por supuesto la Educación Física) en la Universidad de las Ciencias Informáticas UCI. También se puede desarrollar, de forma interdisciplinar, a partir de la contribución de las materias citadas. Todas ellas, deben favorecer al estudiante el desarrollo de capacidades que les permitan alcanzar la meta final que es ser ingeniero. Desarrollar la matemática básica e iniciarse en la resolución de problemas que requieran la realización de operaciones elementales de cálculo, conocimientos geométricos y estimaciones, así como ser capaces de aplicarlos en situaciones complejas de su vida cotidiana.
La competencia se identifica con el desempeño efectivo y eficiente de funciones o roles (profesionales, académicos, vitales, etc.) donde el proceso evaluativo será diferente de otro en que la competencia se conciba como la posesión de unos determinados conocimientos, el dominio de una serie de habilidades y destrezas y la orientación hacia ciertos valores y actitudes. Pese a esta exigencia, y a la preocupación general por el problema, la actual literatura sobre competencias carece de una base conceptual y analítica y no existe un reconocimiento explícito de la necesidad de programas de investigación tendientes a promover una mejor comprensión de la naturaleza de la competencia, cómo desarrollarla en los estudiantes, como puede ser evaluada y cuál puede ser el impacto que tendría tanto en los estudiantes como en las organizaciones educativas y en la sociedad en general.
Ciertamente, un conocimiento no es una competencia, como tampoco lo son una capacidad, una aptitud, una destreza o una habilidad. Sin embargo, no es pensable una competencia sin ellos. Tomando el sentido etimológico señalado al analizar el término competencia, estas categorías del saber cómo (conocimiento, habilidad, destreza, etc.), requeridas para un funcionamiento exitoso en la posición o papel desempeñado, pueden representar aquello que permite el desempeño que conduce a ese algo, cuyo logro constituye la esencia de la competencia.
Desde la Educación Física queremos recordar al resto de los profesores que, en justa reciprocidad, todas las asignaturas básicas de la carrera tienen prescrito como objetivo interdisciplinar entre si. Valorar y utilizar la Educación Física y el deporte como medios para favorecer el desarrollo personal y social mediante el juego es el objetivo de este trabajo.
Fundamentación
Del mismo modo, que el profesor de inglés, física, o programación debe conocer los elementos básicos de la Educación Física para contribuir a su desarrollo de forma interdisciplinar, el profesor de Educación Física debe conocer algunas de las características de las matemáticas para desarrollar la competencia matemática de forma transversal. Así antes de realizar propuestas de intervención didáctica, o sugerir actividades de enseñanza-aprendizaje para desarrollar esta competencia, debemos cumplir un requisito previo: conocer el corpus curricular de las matemáticas: su definición, sus objetivos, y sus contenidos. ¿Qué son las matemáticas?
Haciendo una lectura sociológica vemos que las matemáticas son una de las áreas de conocimiento con más tradición y peso en la escuela. Y también con un índice elevado de fracaso escolar (junto con el aprendizaje de idiomas); como reflejan numerosos estudios. (Ver el informe Pisa de 2006, en el la valoración del Ministerio de Cultura y Educación, Secretaria General de Educación en http://www.mec.es/multimedia/00005713.pdf).
Algún estudiante, con fino humor dijo que las matemáticas: "son una ciencia exacta: siempre sabes que las vas a suspender". Nuestra visión es más positiva. Creemos que las matemáticas son un conjunto de conocimientos de gran interés formativo y notable aplicación práctica. En este sentido asumimos la matemática como: un conjunto de conocimientos asociados a los números y las formas, que se van progresivamente completando hasta constituir un modo valioso de analizar situaciones variadas. Permiten estructurar el conocimiento que se obtiene de la realidad, analizarla y lograr una información nueva para conocerla mejor, valorarla y tomar decisiones.
Uno de los objetivos generales de la Educación Física en la UCI es que guarda una estrecha relación con el área de enseñanza de las matemáticas como son:
Utilizar el conocimiento matemático para comprender, valorar y producir informaciones y mensajes sobre hechos y situaciones de la vida cotidiana y reconocer su carácter instrumental para el conocimiento de la actividad física.
Elaborar y utilizar instrumentos y estrategias personales de cálculo mental y medida, así como procedimientos de orientación espacial, en contextos de resolución de problemas, decidiendo, en cada caso, las ventajas de su uso y valorando la coherencia de los resultados.
Identificar formas geométricas del entorno natural y cultural, utilizando el conocimiento de sus elementos y propiedades para describir la realidad y desarrollar nuevas posibilidades de acción.
Resolver y plantear problemas matemáticos usando un lenguaje correcto y los procedimientos adecuados de cálculo, medida, estimación y comprobación de resultados.
El cálculo de la frecuencia cardiaca, zona de trabajo saludable, uso de porcentajes, el trabajo de las escalas dentro del contenido de orientación, el cálculo de calorías, son ejemplos de algunos de los aspectos en los que se puede formar de forma conjunta, aunque sólo sea en momentos puntuales y sin necesidad de enfocarlo como un unidad didáctica completa.
Contribución de la Educación Física a la matemática
Para orientar el desarrollo de la competencia matemática desde la Educación Física, es oportuno hacer alguna consideración. Por una parte, destacamos la inexplicable omisión que se hace de la contribución de la Educación Física al desarrollo de la competencia matemática. Por otra, es conveniente hacer un análisis crítico sobre cómo se enseñan las matemáticas en la actualidad para después hacer propuestas de mejora.
En efecto, revisando los estudios sobre desarrollo de competencias, se puede concluir que los conceptos de competencia y de educación basada en competencias, aparecen aún difusos y requieren una definición clarificadora. A este respecto, Mulder (2004) consideraba prudente no partir de una definición cerrada sino, preferentemente, de una definición provisional que sirva de referente de la idea de competencia para iniciar el trabajo y proceder a la búsqueda de una más completa delimitación conceptual. Consecuentemente, Mulder identifica la competencia, en sentido lato con “la capacidad de una persona para alcanzar logros específicos.” La idea provisional de Mulder sobre la competencia, citada antes, parece suponer que la educación basada en competencias (EBC) apunta como finalidad a preparar a las nuevas generaciones para el desempeño exitoso de funciones y roles académico, técnico, profesional o en general, lo que sugiere una clara connotación de capacidad y aptitud para hacer algo. En esta perspectiva, la EBC acentúa el saber cómo, situándose más en la línea del entrenamiento, mientras que la educación general tradicional se sitúa claramente en la línea del saber qué. Esta situación plantea la necesidad de una definición precisa, válida y operativa del concepto de competencia.
Por tanto, un individuo es competente cuando reúne los requisitos suficientes para hacer algo, y lo hace; para llegar a alguna parte, y llega; en fin, para lograr algo. Ribes (2011) con mayor precisión considera que ser competente siempre se refiere a una forma de intervención o hacer específico en un dominio específico. Ser competente, al contrario que ser apto para algo, no antecede a la acción adecuada y efectiva, es equivalente a ella. Toda competencia está acotada por un campo de acción y los logros correspondientes.
En educación, la idea de competencia como objetivo surgió, en parte, como reacción frente a la posición preeminente del conocimiento en este campo, especialmente del conocimiento propositivo, saber qué. Por tanto, esta reacción pretende acentuar la acción, es decir, el saber vinculado a las habilidades y destrezas como manifestaciones del conocimiento procedimental, o saber cómo; pero cada uno de estos términos tiene un sentido especial y, como afirma Ribes (2011), mal-suponer su inter-variabilidad puede llevar a la confusión. Ribes (2011) insiste en que ser competente es ejercitar el conocimiento previamente aprendido. Se aprende a ser competente en la medida en que se aprenden desempeños y criterios de ejercicio del conocimiento. Jugadores “igualmente” hábiles en apariencia, pueden ser o no competentes en el cumplimiento de los criterios que se establecen para ser eficaces en un juego. Ser competente es más que ser hábil o experto. Implica ajustar las habilidades, a criterios funcionales de diverso nivel.
En consecuencia, la competencia no se identifica con la posesión de conocimientos, capacidades, destrezas o habilidades sino con el desempeño eficaz y eficiente de un papel o de una función en un ámbito determinado o en la vida en general que implica, obviamente, la posesión, de los requerimientos de éxito, y el uso experto, integrado, de los mismos (De la Orden, 2011).
En resumen, hemos identificado dos formas generales de concebir y definir las competencias como objetivos de educación y, por tanto, como objeto de evaluación, que podemos caracterizar así:
La competencia es el desempeño efectivo y eficiente de una función, de un papel o de una posición.
La competencia es la combinación y uso integrado de conjuntos de conocimientos, destrezas, habilidades y actitudes para realizar una determinada tarea.
En coherencia con el principio de la necesaria adaptación de la evaluación a las características de su objeto, cada una de estas concepciones de competencia exige diferentes formas, planes, metodologías, instrumentos de recolección de información y modos de expresar la valoración de los resultados de la intervención educativa.
Como afirma Ribes (2011) el aprendizaje basado en competencias, así concebidas, no requiere de procedimientos de evaluación extrínseca a la propia situación de enseñanza-aprendizaje. La competencia tiene lugar, o no tiene lugar, en términos de actividades y logros en una situación determinada.
La concepción de competencia que ahora consideramos se identifica con el desempeño con éxito de un rol o función (tareas), parece razonable que la evaluación de la misma se incluya en la modalidad o categoría de Performance Assessment, aunque ciertamente esta denominación se aplica con más precisión a la evaluación de destrezas y habilidades.
Resulta llamativo que los diferentes niveles de planificación y diseño curricular vigentes, omitan el desarrollo de la competencia matemática desde la Educación Física. Aunque dichos currículos sí proponen estrategias y orientaciones didácticas para su desarrollo, no dicen ni una sola palabra de cómo desarrollar la competencia matemática a través de la EF.
Esta injustificable ausencia es la que nos anima a realizar este artículo, cuya modesta intención es demostrar que la Educación Física puede ser un espacio natural e idóneo para el desarrollo de todas las asignaturas en la UCI.
Steven Zemelman (1998) mantienen que para contribuir a la mejora de su enseñanza es importante que dejemos de primar las práctica mecánicas, la memorización constante, las respuestas y los métodos únicos, la repetición por excelencia, el producto como protagonista en definitiva; evitar las prácticas rutinarias que todos hemos vivido.
Lo que necesitamos son “mejores prácticas”. Los profesores universitarios debemos desarrollar la competencia matemática respetando los principios de intervención educativa constructivistas (paradigma de enseñanza-aprendizaje propuesto hace más de 25 años. Debemos fomentar metodologías activas, y comprensivas, animar al trabajo cooperativo, y utilizar una valiosa herramienta de intervención didáctica: el juego. En este sentido el currículo vigente nos propone como orientación: “Mostrar el aspecto lúdico de las matemáticas es una faceta a veces olvidada pero que habrá que tener en cuenta, ya que a través del juego podemos introducir al estudiantado en la resolución de problemas, enigmas, acertijos y juegos, de forma más motivadora y gratificante”. Aunque como plantea Recamán: “que las matemáticas sean divertidas no quiere decir que se aprendan sin esfuerzo. Significa que no deberían aburrir a nadie.”
El área de Educación Física tiene características diferenciales y específicas respecto a las otras materias. Los profesores podemos aprovechar ese potencial pedagógico y lúdico que tiene nuestra asignatura para desarrollar la competencia matemática. Lo podemos hacer aumentando el uso de materiales manipulables, con trabajos cooperativos, resolviendo problemas de manera práctica, con estilos de enseñanza cognitivos. Debemos utilizar el juego y la actividad motriz. Aprovechar el clima distendido y amable de nuestras clases, y cultivar su gran potencial socializador.
Estos medios sin duda favorecen aprendizajes significativos porque implican acción, experimentación, y descubrimiento. Cuando algunos colegas desinformados cuestionan la aportación intelectual de la Educación Física a la formación básica, autores como Cajigal, resaltan el gran componente intelectual de nuestra materia. Mientras que las matemáticas plantean a los estudiantes problemas de lógica matemática que requieren de una solución mental, la Educación Física plantea problemas ludo motrices, que amén de exigir una solución mental, requieren una la solución motriz.
Juego. La importancia en el marco de la educación
El juego es un camino natural y universal para que la persona se desarrolle y pueda integrarse en la sociedad. En concreto el desarrollo infantil está directa y plenamente vinculado con el juego ya que; además de ser una actividad natural y espontánea a la que el ser humano le dedica todo el tiempo posible, a través de él, el hombre desarrolla su personalidad y habilidades sociales, estimula el desarrollo de sus capacidades intelectuales y psicomotoras y, en general, proporciona experiencias que le enseñan a vivir en sociedad, a conocer sus posibilidades y limitaciones, a crecer y madurar.
Si nos referimos en concreto al desarrollo cognitivo, se puede comprobar que muchos de los estudios e investigaciones actuales sobre la actividad lúdica en la formación de los procesos psíquicos convierten al juego en una de las bases del desarrollo cognitivo del hombre, ya que éste construye el conocimiento por sí mismo mediante la propia experiencia, experiencia que esencialmente es actividad, y ésta fundamentalmente juego en las edades más tempranas. El juego se convierte así en la situación ideal para aprender, en la pieza clave del desarrollo intelectual.
Cualquier capacidad del ser humano se desarrolla más eficazmente en el juego que fuera de él. No hay diferencia entre jugar y aprender, porque cualquier juego que presente nuevas exigencias al hombre se ha de considerar como una oportunidad de aprendizaje; es más, en el juego aprende con una facilidad notable porque están especialmente predispuestos para recibir lo que les ofrece la actividad lúdica a la cual se dedican con placer. Además, la atención, la memoria y el ingenio se agudizan en el juego, y todos estos aprendizajes, que el hombre realiza cuando juega, serán transferidos posteriormente a las situaciones no lúdicas.
Numerosos investigadores de la educación han llegado a la conclusión de que el aprendizaje más valioso es el que se produce a través del juego:
El juego es la actividad principal en la vida del niño; a través del juego aprende las destrezas que le permiten sobrevivir y descubre algunos modelos en el confuso mundo en el que ha nacido (Lee, 1977)
El juego es el principal medio de aprendizaje en la primera infancia, los seres humanos desarrollan gradualmente conceptos de relaciones causales, aprenden a discriminar, a establecer juicios, a analizar y sintetizar, a imaginar y formular mediante el juego.
Propuestas actividades y juegos para el desarrollo de la competencia matemática
Para que sea más clara la contribución de la Educación Física al desarrollo de la competencia matemática, exponemos varias actividades que se desarrollan en las distintas facultades de la UCI. Las hemos clasificado, de forma orientativa, según los contenidos y conceptos matemáticos que desarrollan.
Estos juegos tienen diferentes niveles de dificultad y complejidad y por tanto son apropiados para distintos años dentro de la carrera. Se pueden proponer como actividades en diferentes momentos: en el aula, en los alrededores de cada docente, en el calentamiento, en la parte principal, o en la vuelta a la calma. También son idóneos para días de lluvia, o como actividades de ampliación o refuerzo interdisciplinar.
Actividades matemáticas que pueden desarrollarse desde la Educación Física
Maratón de las matemáticas en la facultad
Serán cuatro equipos de 4 integrantes cada uno en dependencia de la cantidad de estudiantes y el tipo de actividad que se quiera realizar.
Serán cuatro tramos, el circuito es en el mismo docente.
Las preguntas son de matemática recreativa, que puedan ser respondidas en tres minutos, cada tarjeta contendrán como máximo 3 preguntas.
Primer tramo: Parte del lobby, la primera mesa de preguntas está en el aula 102, el primer miembro debe llegar con una pelota entre los pies hasta la mesa y responde las preguntas en 3min. Ahí se hace el intercambio.
Segundo tramos: La segunda mesa está en el laboratoria 104 el estudiante debe salir de la primera mesa luego del intercambio guiando la pelota con los pies hasta la segunda mesa responde las preguntas en 3min y hace el intercambio.
Tercer tramo: La tercera mesa estará en el aula 105 el estudiante debe llegar a ella driblando el balón hasta la tercera mesa responde las preguntas en tres minutos y realiza el intercambio.
Cuarto tramo: La cuarta mesa está en el lobby el estudiante debe llegar a ella voleando el balón, responde las preguntas en 3 minutos, el primero que termine es el equipo ganador.
Juegos tradicionales dentro de la clase de EF y Matemáticas como “El pañuelo” donde se repasan los números naturales: ordenación (mayor, menor que, igual, anterior, posterior)
Juegos de velocidad de reacción con estímulo numérico, utilizando el Orden numérico. Números ordinales.
Juegos de agrupamientos y dispersión, utilizando Operaciones con números naturales: adición y sustracción.
Juegos de cálculos de porcentajes de una cantidad de Frecuencia cardiaca, de capacidades físicas, eficacia en resultados, etc.
Juegos de comparación de objetos según longitud, capacidad o peso como la entrega y recogida de material o implemento deportivo. Trabajo de Habilidades Básicas: Lanzamientos, recepciones y transportes.
Juegos donde se utilización de las unidades de medida: el metro, el cm, el litro y el kilogramo. Medición de las Habilidades Motrices o Capacidades Básicas: Saltos de altura, longitud, Lanzamientos de peso, jabalina.
Juegos donde se utilización de las unidades de medida del tiempo: minuto, hora, día, semana, mes y año como la medición y aprovechamiento saludable del tiempo, la confección de una agenda y horario semanal de actividad física. Cronometrar el tiempo en juegos deportivos, las pulsaciones.
Juegos de percepción temporal en juegos deportivos.
Juegos de ritmo: Percusiones con cadencias sencillas y combinadas percusión con acciones motrices
Juegos de expresión corporal como relojes humanos.
Calcular tiempos de relajación (vuelta a la calma).
Estimación de precios de artículos y materiales cotidianos de EF del alumno.
Juegos de orientación espacial como el trabajo de esquema corporal: lateralidad, nociones topológicas corporales (arriba, delante, detrás…)
Juegos motores, localización de objetos en el espacio: dentro-fuera, derecha-izquierda.
Juegos donde se aplica la geometría como, imitar recorridos de orientación, realizar un recorrido dibujado en un plano gráfico, transcribir a un plano gráfico el recorrido realizado por otro estudiante.
Juegos de apreciación de distancias e intervalos, desplazamientos, saltos de altura, saltos de longitud, noción de la agrupación y dispersión en el terreno.
Juegos de ejecución de giros y volteretas.
Juegos de apreciación de trayectorias en lanzamientos, recepciones y golpeos.
Juegos de ubicación y colocación en el terreno de juego.
Juegos donde se dice el ángulo que se forman en las distintas posiciones que orienta el profesor para tomar conciencia de los movimientos de cada articulación y de las simetrías y asimetrías corporales.
Juegos de persecución.
Juegos de cooperación y oposición
Juegos de azar para la composición de los grupos o elección de material.
La propuesta tiene dos finalidades educativas. Por una parte contribuyen al desarrollo de los objetivos propios de la Educación Física como la mejora de las habilidades y capacidades físicas básicas, los aspectos socio-afectivos, y los intelectuales. Por otra desarrollan la competencia matemática de forma transversal.
Conclusiones
Las matemáticas y la Educación Física en todos los niveles de enseñanza forman parte de un conjunto de conocimientos, habilidades, actitudes y valores fundamentales que los estudiantes deben adquirir durante todo este proceso:
La competencia matemática se puede desarrollar de múltiples formas a través del área de la Educación Física.
La Educación Física por sus características diferenciales y su singular potencial pedagógico en la UCI, es un espacio idóneo para el desarrollo de todas las asignaturas.
El carácter lúdico, las prácticas activas y participativas, el clima amable y diferente que se encuentran en los terrenos y su gran componente socializador, hacen de la Educación Física una poderosa herramienta para educar la competencia matemática.
Los profesores de Educación Física proponemos, el movimiento, el juego, la utilización de materiales manipulables, los trabajos cooperativos y la solución activa y creativa de problemas como elementos a partir de los cuales desarrollar esta competencia.
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