El tratamiento integrado, simultáneo y particularizado de las tareas  de la técnica y la táctica: una nueva concepción didáctica en la  preparación del balonmanista principiante
	Profesor de Juegos Deportivos en la Facultad de Cultura Física de Camagüey (Cuba)	Lic. Rubén Martínez Puig cienciaydeporte@fcf.camaguey.cu
	Resumen           La solución de los problemas didácticos de carácter práctico a corto y mediano plazo, pasa por la unidad en la formación de hábitos motrices y el desarrollo del pensamiento táctico, por cuanto son estas las tareas de la preparación técnico-táctica. La hipótesis que defendemos lleva implícito la sinergia que asume el tratamiento integrado, simultáneo y particularizado de las tareas de la técnica y la táctica dentro del contexto de clase en el proceso de preparación deportiva del balonmanista principiante. Lo planteado surge del análisis de diversas tendencias histórico-lógicas y de la experiencia práctica del autor en la dirección del proceso pedagógico deportivo, dado que para responder más coherentemente a las necesidades del balonmano, era necesaria una cualidad superior en el dominio de las acciones técnico-tácticas. El estudio condujo al planteamiento de una novedosa concepción didáctica en el tratamiento de las tareas de la técnica y la táctica en el complejo devenir de la práctica pedagógica: Integrado, orientación de las tareas hacia el dominio de una misma y determinada acción de juego; simultaneo, coincidencia en el tratamiento de ambas tareas; particularizado, planteamiento por separado de ambas tareas.           Palabras clave: Unidad de preparación técnico-táctica. Tareas de la técnica y táctica. Modelo representativo. Didáctica. Balonmano.
	EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 16, Nº 161, Octubre de 2011. http://www.efdeportes.com/

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Introducción

    El balonmano es un deporte que se estructura en diferentes fases. Los dos equipos que participan en un partido, y por consiguientes sus jugadores, van pasando alternativamente por ellas, con la aplicación de la técnica y la táctica que distingue el comportamiento motriz en dicho juego deportivo.

    Cualquier deporte utiliza un vocabulario específico para definir sus contenidos; es decir. Su terminología. Dentro del balonmano la técnica y la táctica son bien definidas por Oliver y Sosa (1996) al conceptualizar la técnica como el conjunto de elementos técnicos (gestos) eficaces destinados al alcance de unos objetivos motrices, que determinan la motricidad específica y especializada del jugador de balonmano, que puede ser ofensiva y defensiva.Mientras que la táctica, de manera individual, resulta la aplicación inteligente de la técnica en situaciones concretas, mediante principios de actuación,tanto ofensivos como defensivos; en tanto que en lo colectivo, se entiende la forma de relación entre dos o más jugadores para coordinar entre ellos lo técnico-táctico individual utilizando procedimientos tácticos ofensivos o defensivos, de acuerdo a la fase de juego en la cual se protagoniza la actuación del jugador.

Desarrollo. Las tareas de la técnica y de la táctica en la preparación del balonmanista principiante

    Según Forteza y Ranzola (1988) los medios que propician la predisposición necesaria para la obtención de un óptimo rendimiento deportivo lo conforman la preparación física, técnica, táctica, la psicológica y la teórica; comprendidas como las tareas que permiten “darle cumplimiento a los objetivos anteriormente planteados, en el proceso de entrenamiento” (Ruiz, 1986)

    Señalan Forteza y Ranzola (1988) que mientras la preparación física se enmarca en el desarrollo de las condiciones motrices básicas (fuerza, velocidad, resistencia, flexibilidad) que corresponden a las necesidades de la actividad deportiva; la psicológica por su parte tiene como objetivo la creación de un estado de predisposición psíquica en el atleta dentro de la actividad deportiva; se trata como tarea para ello la transformación de las particularidades del deportista relacionadas con su rendimiento, mediante la preparación ideológica, moral y volitiva, la modelación del entrenamiento adaptando las condiciones difíciles de competencia y la regulación de los estados psíquicos precompetitivos, competitivos y postcompetitivos; en determinadas situaciones que son de necesaria activación emocional para movilizar la fuerza y cumplir una tarea determinada. En tanto que la teórica es reconocida por Ruiz et al (1985), como aquella que proporciona un conjunto de conocimientos que le son necesarios al deportista para obtener mayores resultados y elevar su capacidad intelectual, tales como teoría y metodología del entrenamiento deportivo, higiene e historia del deporte, etc.

    Respecto a las preparaciones técnica y táctica afirman Forteza y Ranzola (1988) que, aún cuando la práctica deportiva exige que se presenten como una unidad de preparación (entiéndase por su estrecha relación y correspondencia), es necesario comprender las tareas de cada una de ellas, que en los primeros años del proceso tienden a un tratamiento particularizado. Mientras la preparación técnica se orienta hacia el desarrollo, estabilidad y perfeccionamiento variable de los hábitos deportivos en correspondencia con las leyes mecánicas, biológicas y también con las reglas del juego; la otra asegura el buen empleo de los mismos, su forma más efectiva, que desarrolla para ellos la solución de las situaciones del enfrentamiento deportivo, así como la capacidad de escoger la solución óptima o su adecuación al nivel determinado de exigencia. Por eso es reconocido “por un proceso de formación de hábitos motrices y de desarrollo del pensamiento táctico” (Navelo, 2004)

    A partir de las direcciones del entrenamiento deportivo como nuevo enfoque del entrenamiento, determinado por Forteza (2001), los contenidos de la preparación antes referidos se enmarcan dentro de las direcciones técnicas y tácticas, donde se encuentran las siguientes:

• Técnica: Los entrenamientos están dirigidos tanto a la enseñanza como al perfeccionamiento de las acciones técnicas objeto de la especialidad.

• Técnica efectiva: Son entrenamientos para los deportes técnicos fundamentales. La carga que recibe el deportista es considerable pues la efectividad generalmente está basada en la manifestación de las capacidades coordinativas, la rapidez de ejecución y la concentración.

• Técnica-táctica: Esta dirección se emplea fundamentalmente en los deportes de conjunto y de combate, los entrenamientos persiguen perfeccionar al máximo las acciones de competencia.

• Competiciones: La mayor carga que recibe el deportista es la propia competición, ésta es planificada en el entrenamiento como parte de la preparación, aunque puede relacionarse con otras direcciones.

    Es de destacar, que en el planteamiento de la dirección técnica-táctica, se aprecia la integración de las tareas de ambos componentes de la preparación deportiva, y su implicación directa en balonmano por constituir un juego deportivo de equipo.

El tratamiento de las tareas de la técnica y la táctica y los modelos de enseñanza en la iniciación al balonmano

    Respecto a los modelos de iniciación en los juegos deportivos, Díaz (2003) considera que en la presentación de un primer modelo conceptual de una enseñanza para la comprensión en los juegos deportivos, el trabajo de Read ofrece una especial clarividencia a lo que se ha comprendido hasta ahora. Señala Díaz (2003) que esta autora muestra dos modelos relativos a la enseñanza de los juegos deportivos. El primero representa la aproximación dominante orientada al desarrollo de la competencia técnica y le llama modelo aislado, mientras que el segundo representa la alternativa al modelo anterior y le llama modelo integrado.

    La estructuración del proceso de enseñanza-aprendizaje en la iniciación deportiva se ha venido desarrollando históricamente de acuerdo con los fines que dicho proceso perseguía, por lo que desde el punto de vista didáctico conviene conocer las grandes líneas por las que han ido evolucionando los modelos dominantes y a qué objetivos responden; así pueden ser distinguidos el modelo técnico o tradicional y los modelos alternativos en la iniciación deportiva.

    El modelo de enseñanza por objetivos, basado en una concepción tecnológica de la enseñanza, o el auge de la psicología conductista, no son más que fieles reflejos de la luz que enfoca la iniciación deportiva desde la consideración del practicante, como un sujeto pasivo que registra mecánicamente las informaciones y aprendizajes que le son suministrados, consideraciones propias de los modelos tradicionales o técnicos, que presenta un distanciamiento en el tratamiento particularizado de las tareas de la técnica y de la táctica.

    Los modelos alternativos de la enseñanza de los juegos deportivos, están basados en la focalización de dicha enseñanza en la integración de la técnica y la táctica, en lugar que del aislamiento de estas que había sido el elemento central del modelo tradicional.

    Referente a la distinción de modelos alternativos en la enseñanza de la iniciación deportiva, Díaz (2003) diferencia dos criterios fundamentales en su análisis, por una parte el relativo a la orientación deportiva dirigida a uno o varios deportes; por otra, la relevancia de los principios tácticos normalmente centrados en el juego. Sobre la base de los mencionados criterios se pueden distinguir dos modelos distintos; el vertical y el horizontal. García (2009), muestra puntos coincidentes con dichos criterios a partir de esos tipos de modelos claramente diferenciados.

    En el modelo vertical la enseñanza gira desde un principio alrededor de un sólo deporte elegido, y además se parte de la presunción de que existen transferencias de los juegos, utilizados como recurso metodológico, al deporte que se quiere que el alumno aprenda. En cuanto a la metodología, el proceso de enseñanza-aprendizaje comienza con una progresión de juegos reales simplificados o reducidos, a partir de los cuales el jugador aprende a desenvolverse, se aprende así de manera implicada los aspectos tácticos y técnicos-básicos del deporte, para lo cual resulta fundamental una cuidada progresión de los juegos.

    En el modelo horizontal, a diferencia del anterior, la iniciación es común a varios deportes, dadas sus similitudes estructurales y tácticas. Asimismo, se presume la existencia de transferencias de los juegos al deporte. El modelo se basa en una metodología para la cual el alumno participa en situaciones que precisen elección e iniciativa en su resolución, a la vez que se alejan de otras de carácter cerrado que fomentan automatismo, a partir de una unidad de preparación técnico-táctica. No obstante, el modelo estructural a pesar de centrarse en el juego y atender aspectos contextuales, no presenta orientaciones claras que faciliten la comprensión táctica, relegándola a la instrucción y capacidad individual de cada practicante. Especial consideración requiere el modelo compresivo que se puede enmarcar dentro de los denominados horizontales, el cual merece un análisis detallado.

    Ciertamente, el modelo comprensivo posee señas de identidad propias que orienta la enseñanza a través del camino que va de la táctica a la técnica, lo que supone priorizar los aspectos cognitivos de la enseñanza, buscando esencialmente la comprensión de los principios que subyacen a las similitudes tácticas de los diversos deportes para lo cual utiliza como recurso los juegos modificados.

    Este modelo se apoya en un planteamiento constructivista del proceso enseñanza-aprendizaje, dado el papel activo que los alumnos juegan en la construcción de sus propios aprendizajes, la significatividad de los mismos, así como la necesidad de promover situaciones de aprendizaje apoyadas sobre el andamiaje de sus propios conocimientos previos y la relación entre los mismos.

    Los juegos modificados constituyen el instrumento del modelo comprensivo, se trata de juegos globales donde a través de la modificación de las reglas se exageran los aspectos tácticos y se reducen las exigencias técnicas, Devís (1998) los visualiza como una abstracción global simplificada de la naturaleza problémica y contextual de un juego deportivo, que exagera los principios tácticos y reduce las exigencias o demandas técnicas de los grandes juegos deportivos. Se sitúa en la frontera entre el juego libre y el deporte, dado que sus reglas pueden cambiarse o modificarse incluso durante el desarrollo del juego en función de la finalidad coyuntural que se persigue.

    Una variante atenuada de los modelos alternativos lo constituye el modelo representativo para la enseñanza integrada técnico-táctica, propuesto por Castejón y López Ros (Castejón, 2003). En dicho modelo se presenta una interactividad entre esos dos componentes, que presenta una unidad de preparación técnico-táctica y un tratamiento particularizado de sus tareas, por un lado la enseñanza de la técnica con implicación de pocos elementos tácticos, y por el otro, la enseñanza de la táctica con implicación de pocos elementos técnicos, finalizando con la presentación de situaciones de juego similares al deporte definitivo con la aplicación de los elementos técnicos y tácticos aprendidos, es decir, juegos modificados para la comprensión (Ver Figura 1).

Figura 1

    Este modelo permite una mayor riqueza de posibilidades técnicas y evolución de la táctica individual donde el planteamiento global y modificado del juego, permite su más rápida comprensión y participación en la competición.

    Para el presente estudio resulta imprescindible mencionar la variante de modelo de iniciación deportiva tratada, evitando su desconocimiento, ya que se asume el modelo representativo para la enseñanza integrada técnico táctica, que se pretende concretar en la práctica pedagógica deportiva.

    De acuerdo con todo lo argumentado se asume que un modelo de enseñanza del balonmano desde una óptica constructivista, debe partir de la idea central de que cada elemento de juego sólo adquiere significado en relación al conjunto o totalidad del mismo. Por tanto, es a partir de tal globalidad como se debe abordar esta enseñanza. Asimismo, el juego como punto de partida exige que sea comprendido en sus aspectos más generales y comunes a varios de ellos, a fin de provocar transferencias de aprendizajes a situaciones similares.

    Las fuentes bibliográficas consultadas referentes al proceso enseñanza-aprendizaje del balonmano en la preparación del jugador principiante, permiten observar cómo reconocidos autores, de forma general, enfocan la enseñanza a partir de los modelos alternativos de iniciación a los juegos deportivos. Se trata de construir una idea, un planteamiento didáctico global del balonmano, desde una óptica más cognitiva que conductual donde se vislumbra la intención a la comprensión del juego de balonmano fundamentado en el análisis de la actividad, formando al mismo tiempo elementos esenciales del juego, y dejando a un lado formulaciones técnicas precisas. Se le da, simultáneamente, un enfoque sobre el desarrollo de la motricidad que desemboca en una valoración técnica no entendida como un modelo perfecto de ejecución.

    De ese modo lo muestra el francés Bayer (1987) con su Pedagogía de intenciones, pretende que el principiante pase de un juego instintivo y simplificado a un juego intencional y organizado; Román (1990) en su Filosofía de actuación de una manera pensada, considera que el jugador debe acostumbrarse, desde la iniciación deportiva, a proceder de una forma pensada, observando y analizando la situación previamente y no de una forma mecánica, mediante una rica gama de vivencia y ejercicios; Antón (1990) en el proyecto de escuela española en una aproximación teórico-práctica a la enseñanza del balonmano con un enfoque conductual-constructivita.

    De igual forma se aprecia la concepción de enseñanza del balonmano análoga al juego, del alemán Müller (1996), que tiene sus fundamentos metodológicos en el juego de competición; mientras que Lasierra (1996) concibe su programa marco de actuación, en un planteamiento que orienta el proceso hacia una aproximación progresiva al conocimiento de los juegos de equipos; en tanto que Almaguer (2000, 2004) con su planteamiento de situaciones simplificadas del juego, propone una condición metodológica para la iniciación al balonmano sustentada en una aproximación progresiva al conocimiento de dicho juego que parte de una enseñanza fraccionada.

    A partir de lo tratado se infiere que la forma de enseñar o entrenar el juego de balonmano reducido a un conjunto de tareas o habilidades motrices aisladas, orientadas a la adquisición competente de las técnicas deportivas y vinculadas al rendimiento motriz, que exige los patrones dominantes del deporte competitivo de élite, se ha visto superada por un planteamiento didáctico que promueve la naturaleza del conocimiento que se emplea en esta actividad adquirida dentro del contexto y la práctica real del juego.

    Tanto una concepción como otra poseen un gran valor en el marco del objeto que reflejan, en tanto aportan fundamentos teóricos metodológicos importantes para la enseñanza técnico-táctica en la formación del balonmanista principiante, pero no conciben un tratamiento integrado, simultáneo y particularizado de las tareas de la técnica y de la táctica.

    En sentido general, aquellas concepciones que se adscriben al modelo vertical como son los casos de Antón (1990) y Müller (1996), además de expresar una integración entre ambas tareas (por la implicación de una en la otra) manifiestan un tratamiento particularizado en cada caso. Por su parte en los modelos horizontales, como se muestra en Bayer (1987), Román (1990), Lasierra (1996) y Almaguer (2000, 2004) se distingue, además de su integración, la simultaneidad el tratamiento de ambas tareas.

    De acuerdo con ello, el autor de la tesis aboga por una enseñanza para la comprensión centrada en una interactividad entre la técnica y la táctica que presenta un tratamiento integrado, simultáneo y particularizado de las tareas de cada una de ellas. Se trata de un aprendizaje más cognitivo que conductual, que provoca en el niño la necesidad de aprender y utilizar los elementos técnicos y comportamientos tácticos; de hay la importancia de concretar en la preparación del balonmanista principiante el modelo representativo para la enseñanza integrada técnico-táctica.

El tratamiento integrado, simultáneo y particularizado de las tareas de la técnica y la táctica, su ejemplificación en el contexto de clase

    El tratamiento metodológico de los contenidos se establece a partir del modelo representativo para la enseñanza técnico-táctica integrada en la iniciación a los juegos deportivos revelado por Castejón y López Ros (2003)

    En dicho desarrollo se revela el tratamiento integrado, simultáneo y particularizado de las tareas de la técnica y la táctica (formación de hábitos motrices y desarrollo del pensamiento táctico); donde lo integrado se manifiesta en su orientación hacia el dominio de una misma y determinada acción de juego, además de la implicación de uno en el otro y viceversa a partir de concebir su tratamiento dentro del contexto de juego (modelo alternativo); lo simultáneo se muestra al coincidir el tratamiento de ambas tareas en una misma unidad de entrenamiento (clase); mientras que lo particularizado se patentiza en el planteamiento por separado de cada tarea. Ahora bien, la esencia del tratamiento radica en la sinergia que imprime la triada de categorías referidas, de modo que su resultante sea una cualidad dada en la aprehensión lógico-metodológica de las acciones técnico-tácticas; que es mayor que la suma de efectos que producirían estas actuando independientemente.

    Lo antes planteado se concreta, a partir de la consecución del siguiente orden de tareas didácticas:

1. Enseñanza de la técnica con poca implicación de la táctica:

2. Para la formación de hábitos motrices.

3. Enseñanza de la táctica con poca implicación de la técnica:

4. En la asimilación de comportamientos tácticos.

5. Aplicación de conocimientos de la técnica y de la táctica en una situación similar al juego real.

6. Hacia el desarrollo de la comprensión del juego.

Ejemplificación del tratamiento integrado, simultáneo y particularizado de las tareas de la técnica y la táctica

    La enseñanza del balonmano como en otras disciplinas deportivas es un proyecto para cambiar las conductas motrices de los alumnos en función de finalidades y objetivos definidos. Lo que supone enseñar para que en el futuro los practicantes sean capaces de adaptarse y responder mejor a los requerimientos de su entorno. Ello se concreta en la clase o sesión de entrenamiento, como se le denomina en el proceso pedagógico deportivo.

    Machado (2007), han señalado que las más diversas consideraciones acerca del concepto de clase desde la perspectiva del proceso de dirección y organización del proceso de enseñanza-aprendizaje, ubican su significado en términos espaciales (aula) o bien como la lección que ofrece el maestro, lo cual, según estos autores, restringe su significado.

    A partir de las consideraciones expuestas acerca de la clase como factor esencial del proceso de enseñanza-aprendizaje, en el entorno que ocupa, esta resulta de la participación en una actividad motriz que tiene lugar en el área deportiva, prácticas que ofrece el entrenador a sus atletas.

    A continuación se pretende ejemplificar la concepción didáctica, donde se toma como referencia una clase de entrenamiento deportivo para la preparación del balonmanista principiante.

Objetivo de la clase

    Atrapar el balón desde apoyo con desplazamiento previo.

Habilidad

• Atrapar el balón desde apoyo.

Conocimientos asociados

Hábitos motrices elementales u operacionales de elementos técnicos

• Arranque, parada en desplazamientos asociadas a carreras, salto y caída.

Comportamientos tácticos básicos

• Ocupación espacial colectiva.

• Relación de desplazamientos con anticipación y esquiva, y ocupación de espacios libres.

Desarrollo de la actividad cognitiva

• Tarea motriz: Formación de hábitos motrices.

Juego predeportivo: “El cambio anticipado”

• Tarea motriz: asimilación de comportamientos tácticos.

Forma jugada: “Ocupación de aros.”

• Tarea motriz: Desarrollo de la comprensión del juego.

Juego modificado: “Balón poste”.

Conclusiones

1. A partir de la concreción de tendencias en la iniciación a los juegos deportivos (modelos alternativos) en la preparación del balonmanista principiantes, el tratamiento de las tareas de la técnica y de la táctica se caracteriza por ser integrado y particularizado o integrado y simultáneo.

2. La concreción del modelo representativo para la enseñanza técnico-táctica integrada en la preparación del balonmanista principiantes posibilita el tratamiento integrado, simultáneo y particularizado de las tareas de la técnica y de la táctica.

Bibliografía

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