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Acciones metodológicas para la participación de las personas de la tercera edad en las actividades físico-recreativas |
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Universidad de Matanzas (Cuba) |
Lic. Ania Celeste Ramos Duany MSc. Onix Edelma Pestana Mercader |
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Resumen La presente investigación tiene como objetivo: Elaborar acciones para la participación de las personas de la tercera edad en actividades físico-recreativas. En una población de 247 personas de la tercera edad, fueron seleccionadas 200 de ambos sexos. Para la misma fueron empleados métodos teóricos, empíricos, matemáticos y estadísticos. En a elaboración de la propuesta se tomó en consideración el criterio de 6 profesores de Cultura Física, 12 especialistas en la materia y en especial el de los protagonistas de la pesquisa. Como resultados se puede afirmar que la participación de los implicados se incrementó en porcentajes notables, favoreciendo su salud física y mental. Palabras clave: Tercera Edad. Actividades físico-recreativas. Salud.
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EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 16, Nº 159, Agosto de 2011. http://www.efdeportes.com |
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Introducción
La baja o casi nula participación de la población de la tercera edad en las actividades del programa para el adulto mayor es una característica generalizada en el municipio Varadero en Cuba. Resulta significativo que aunque se tienen los grupos debidamente creados, la asistencia es muy baja a las actividades que se programan y les son ofertadas. De 1199 personas en esta localidad, comprendidas en esa condición etárea, asisten como promedio cada día 5 ó 6 adultos mayores, lo que sería en el año una asistencia muy por debajo de las expectativas que se propone este programa.
Derivado de lo anterior se plantea el siguiente problema científico: ¿Cómo propiciar una mayor participación de las personas de la tercera edad en las actividades físico-recreativas de las circunscripciones uno, dos y tres del poblado de Varadero?
Atendiendo a lo antes expresado se propone como objetivo general: Elaborar acciones metodológicas para la participación de las personas de la tercera edad en actividades físico-recreativas.
Fundamentos teóricos relacionados con la tercera edad.
Sánchez Acosta y González García son del criterio que “El adulto mayor, la adultez tardía, la tercera edad o la vejez, comprende aproximadamente el período que media entre los sesenta y ochenta años; ya que después de los ochenta se habla hoy en día de la cuarta edad”.
Drobnic y Pujol afirman que "Hablar de tercera edad es hablar de una época muy amplia de la vida que engloba aquellas edades situadas más allá de los 60-65 años, cuyo límite superior es el propio límite de la vida”.
En sentido general los rasgos de la personalidad del adulto mayor se caracterizan por una tendencia disminuida de la autoestima, las capacidades físicas, mentales, estéticas y de rol social. Desde el X Congreso de Psicología en Bom, Fritz Giese, citado por Sánchez Acosta y González García planteó tres tipologías de adulto mayor:
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El negativista: que no acepta poseer cualquier rasgo de vejez.
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El extrovertido: quien reconoce la llegada de la ancianidad, por observación de la realidad circundarte.
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El introvertido: que experimenta la edad por ciertas vivencias intelectuales y emocionales relacionadas con nuevos intereses, poca movilidad y aspiración a la tranquilidad entre otros rasgos.
La atención al anciano en Cuba es un derecho constitucional y un deber del Estado, caracterizándose por ser progresiva, continuada, gratuita y asequible a todos, dedicando anualmente millones de pesos en pensiones y asistencia sociales estas personas.
La necesidad de desarrollar una la política de atención al anciano hizo que se concentraran los esfuerzos para que Cuba cumpliera con los principios y recomendaciones sobre el envejecimiento de la Asamblea de las Naciones Unidas, de la Ciudad de Nueva York en 1992 y así brindar una calidad de vida óptima a los ancianos.
Características biológicas del envejecimiento
El envejecimiento es un proceso esencialmente biológico. Los estudios realizados en este campo se encuentran muy intensamente vinculados a unas u otras teorías que tratan de explicar sus causas. Los procesos de la involución del hombre como proceso natural se deben, primero a la disminución de la carga funcional de los órganos y sistemas a causa de la hipoquinesia, sedentarismo y a la limitación de movimientos a que es sometido el organismo por el estilo de vida inadecuado y segundo por la involución y la atrofia con el transcurso de los años.
Según Paglilla existen varios criterios para decir que una persona es “longeva” y ellos son:
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Criterio Cronológico: edad en años; relacionado con el retiro o jubilación obligatoria.
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Criterio Físico: Se toman en cuenta los cambios físicos producidos en la persona, como cambios en la postura, forma de caminar, facciones, color del pelo, piel, capacidad visual y auditiva, falta de memoria, sueño alterado, etc. Todo esto relacionado a la alteración en forma notable de las actividades cotidianas.
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Criterio Social: según el papel o rol que desempeñan en la sociedad. Todos estos criterios son relativos, pues dependen de muchos factores y principalmente del espíritu de cada persona.
Vega García afirma que ²(…) los procesos del envejecimiento conducen a la dificultad para adaptarse al medio ambiente, y por último a la muerte (…).”
Mediante la reproducción celular la vida no se detiene, la extensión de la duración de las células individuales se mide en días, semanas, meses y como máximo en décadas, la cuesta del tiempo es el envejecimiento.
Se ha demostrado que la disminución en la fuerza muscular, resistencia y velocidad observada en el proceso del envejecimiento se debe a una reducción correspondiente en el tamaño y el número de fibras musculares especialmente las denominadas del tipo b, fibras rápidas a una disminución de la actividad enzimática muscular y también a trastornos de la unión neuromuscular.
El envejecimiento según señala Rocabruno es un proceso esencialmente benigno, pero un 45% de las personas mayores de 65 años tienen limitación en las actividades diarias y un 80% de los mayores de 85 años.
Existen diversas tendencias relacionadas el envejecimiento celular en el aspecto biológico, tales como las que son citadas por Rocabruno el cual las agrupa en teorías del envejecimiento programado y no programado.
La edad implica también ventajas especiales en la actividad de los abuelos y abuelas. En las personas de la tercera edad, concurren mayor experiencia, conocimientos, confiabilidad y exactitud, lo cual les hace particularmente apropiados para determinadas actividades.
Paglilla estima que entre los factores que aceleran el envejecimiento están: La alimentación excesiva, el stress, la hipertensión arteria, el tabaquismo, alcoholismo, obesidad, soledad, poca participación socio laboral, sedentarismo, poca actividad física, entre los factores que retardan el envejecimiento están: el sueño tranquilo, buena nutrición, participación socio laboral, ejercicio corporal continúo entre otros.
Características de las actividades físico-recreativas en la tercera edad
El rendimiento físico varia a lo largo de los años, siendo el momento óptimo durante la juventud y presentando un descenso continuo a partir de los 35 años, para hacerse más acentuado desde los 55-60 en adelante, como consecuencia de los cambios fisiológicos propios del proceso de envejecimiento.
Las actividades físicas son de gran importancia; ya que mejoran la actividad cardiaca, la capacidad respiratoria, la postura, entre otras. Hay que tener en cuenta que las personas de avanzada edad llegan a rangos aeróbicos con mayor facilidad; por lo que la intensidad de una clase para personas mayores deberá ser menor que para otros grupos; es necesario considerar la toma de frecuencia cardiaca para controlar la intensidad del ejercicio. Debido a la mayor fragilidad ósea por la osteoporosis y a la propensión a las lesiones de ligamentos y tendones, no se deben recargar las articulaciones con sobrecargas importantes. Debido a la falta de coordinación, se deben ejecutar ejercicios que puedan efectuar en forma apropiada para evitar que se produzcan frustraciones.
Un buen trabajo muscular localizado será de gran beneficio para las personas longevas; ya que permitirá tonificar los músculos, mejorando su fuerza y movilidad; pero hay que extremar los cuidados de prevención de lesiones en cuanto a las posturas riesgosas, también hay que implementar períodos más largos de relajación durante los estímulos, por ejemplo entre un ejercicio y otro dentro de una misma clase, incluyendo la elongación de los paravertebrales cervicales y lumbares; ya que es frecuente la contractura de dichos músculos por la posibilidad aumentada de artrosis.
El envejecimiento opera de la misma manera que la inactividad. Los efectos que produce el paso del tiempo son similares a los que el sedentarismo ocasiona. Hagberg (1985) Conoine et al (1991) Parkattif et al (1998) son del criterio que la edad trae consigo un aumento en la potencialidad de sufrir ciertas enfermedades. Si a esto se le suma el hecho de no realizar ninguna actividad física el riesgo será mayor.
Beneficios de las actividades físicas para las personas de la tercera edad
Cuando una persona mayor de sesenta años se incorpora a la práctica de ejercicios físicos, se da cuenta de los beneficios que esta les aporta. Su cuerpo va cambiando, se sienten más ágiles, se van descubriendo sensaciones y formas de movimiento totalmente desconocidas, se sienten a gusto con su cuerpo y lo aceptan tal y como es, mejoran sus relaciones con el entorno, la actividad física los ayuda a superar la soledad y otros.
Todos estos aspectos repercuten en su bienestar y de esta manera, no son tan necesarios los medicamentos que deban tomar para el insomnio, cansancio, depresión, etc.
Otro aspecto importante que hay que tener en cuenta en estas personas, es la utilización adecuada del tiempo libre con actividades beneficiosas y saludables. Si bien en la tercera edad no se dispone del tiempo necesario para realizar actividades físicas, si es recomendable que llegada la jubilación se reestructure este tiempo y se ocupen las horas con diversas actividades, entre ellas las físicas.
Los denominados Círculos de Abuelos y los grupos de salud son un ejemplo de la atención al esfuerzo geriátrico que se le brinda al adulto mayor en Cuba, así como la introducción de actividades recreativas y culturales. Esta ha sido una experiencia para la población cubana y para todo el que se inicia en esta actividad, en la cual se ha introducido la práctica de ejercicios físicos y actividades culturales recreativas, con vista al incremento del régimen motor y la capacidad de trabajo físico e intelectual de las personas de estas edades, coordinándose este con las instituciones pertinentes.
Descripción de la propuesta
Teniendo en cuenta que resulta imprescindible crear todas las condiciones que permitan mejorar la calidad de vida de la población de la tercera edad, se propone para su mejor desempeño la estructura siguiente: Misión, visión, objetivos y etapas de la propuesta: (Diagnóstico, Familiarización, Ejecución y Evaluación). En función del diagnóstico realizado y los fundamentos teóricos formulados, se precisaron en la misión y visión lo siguiente:
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Misión:
Visión:
Es responsabilidad de los profesores de Cultura Física dirigir las actividades para la elaboración de la propuesta; por lo cual este debe estar presente en todo el sistema de trabajo de la dirección del combinado o escuela comunitaria.
Objetivos
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Elevar el nivel de participación de la población de la tercera edad en las actividades fisco- recreativas.
Asesoramientos metodológicos mensuales
Talleres: Relacionados con los métodos, contenidos, procedimientos organizativos, planificación, la motivación dentro de las actividades con el adulto mayor.
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Clase práctica: “La Clase práctica con el adulto mayor.”
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Seminario “Los procedimientos organizativos en las clases con las personas longevas”.
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Conferencias: “La evaluación”, “El trabajo diferenciado en la clase con el adulto mayor” y “Propuesta de plan de actividades físico-recreativas para personas de la tercera edad”.
Conclusiones
Se finaliza enfatizando que: Se deben realizar programas de ejercicios menos exigentes, establecer períodos de descanso apropiados y no exigir esfuerzos continuos o prolongados que lleven al agotamiento, tener cuidado con las temperaturas extremas, es necesario un chequeo medico periódico para prevenir alguna enfermedad, la posibilidad de osteoporosis obliga a ciertos cuidados; un estilo de vida que incluya ejercicios físicos moderados en intensidad, previene la desmineralización del hueso, una actividad física regulada, continua y adecuada retrasará los perjuicios que presentan las personas por el proceso de envejecimiento fisiológico y mantendrán por mayor tiempo la vigencia de las personas de la llamada “tercera edad”.
Bibliografía
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Chirosa L., Chirosa I., Radial P. (2000) La actividad física en la Tercera Edad. Lecturas: Educación Física y Deportes, Revista Digital. Buenos Aires, Año 5 - Nº 18. http://www.efdeportes.com/efd18b/3aedad.htm
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Definición de envejecimiento y síndrome de fragilidad, características epidemiológicas del envejecimiento en México. Rev Edocrinol Nutr 2007; 15 (1): 27-31.
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Paglilla, D.R. (2001) La tercera edad y la actividad física. Lecturas: Educación Física y Deportes, Revista Digital. Buenos Aires, Año 7 - N° 36. http://www.efdeportes.com/efd36/3aedad.htm
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