Estrategia metodológica para la preparación de los entrenadores en la dirección del trabajo individualizado |
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Licenciado en Cultura Física Profesor Adjunto de la Facultad de Cultura Física de Camagüey Entrenador de Atletismo. Sectorial Provincial de Deportes de Camagüey Comisionado Provincial de Atletismo |
Lic. Roberto Ramos Montalvo (Cuba) |
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Resumen Este trabajo esta encaminado a individualizar el entrenamiento deportivo del atletismo a partir de la categoría escolara posibilitando que los atletas movilicen su intelecto y habilidades en la solución de las tareas, lo que contribuye al desarrollo de la independencia, este requiere de dos características la tarea orientada por el entrenador, con un tiempo razonable para ejecutarla, y la necesidad resultante de la tarea que tienen los atletas de buscar y seleccionar las mejores vías para su selección. La estrategia esta formada por tres etapas que tienen sus objetivos y acciones. Palabras clave: Estrategia. Trabajo individualizado. Entrenamiento.
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EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires - Año 16 - Nº 157 - Junio de 2011. http://www.efdeportes.com/ |
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Introducción
La elevación en la calidad del deporte en la actualidad constituye uno de los objetivos fundamentales de los sistemas de entrenamiento y en el cual desempeña un papel fundamental la preparación de los entrenadores, de tal manera que su profesionalización se valore como uno de los pilares fundamentales para lograr la formación de las nuevas generaciones de atletas en correspondencia con las exigencias de la nueva sociedad.
En la época contemporánea el entrenamiento deportivo es dinámico, evoluciona constantemente, se ofrecen mecanismos, para que los atletas aprendan a aprender por sí mismos, a que desarrollen las capacidades, las habilidades y los hábitos que le permitan una elevada formación deportiva, así como hábitos y conductas independientes de manera tal que al insertarse en el contexto, puedan establecer vínculos sólidos entre el desarrollo de la ciencia y el deporte.
Desde esta perspectiva, el perfeccionamiento de la formación de los entrenadores es visto como un proceso permanente de constantes aprendizajes que encierran los distintos componentes, ya no solo como referente teórico y práctico, sino como un quehacer, que permita conceptualizar el conocimiento pedagógico.
Atendiendo a lo anterior y para potenciar el aprendizaje de los jóvenes atletas en la preparación metodológica de los entrenadores se hace indispensable profundizar en el significado general del trabajo metodológico.
Para Carlos Álvarez de Zayas “El trabajo metodológico es imprescindible como vía de optimización del proceso docente-educativo que posibilita el intercambio de experiencias entre los docentes y canaliza el espíritu anulativo entre ellos, lo que no excluye la necesaria libertad de cátedra que tiene cada profesor durante el desarrollo de su clase, (Álvarez, 1998: 113).
El reglamento de trabajo metodológico para el curso 2009/2010 establece que la proyección metodológica se desarrolla en todos los niveles de aplicación y desarrollo de los procesos de formación y preparación deportiva, como complemento y soporte a la actuación pedagógica y a elevar sus resultados cualitativos y cuantitativos en correspondencia con las necesidad de la preparación y las características de la fuerza técnica, tomando como soporte legal la Resolución 44 del INDER
En un sentido amplio y abierto el trabajo metodológico se caracteriza como las orientaciones pedagógicas que se pretenden seguir en el proceso pedagógico que ejecuta el entrenador desde la preparación de la especialidad, por lo cual más que de métodos concretos, se habla de estilos, paradigmas, modos de actuación, procedimientos.
El éxito o el resultado deportivo dependen hoy de las necesidades que los entrenadores desarrollen, la independencia cognoscitiva de los atletas, la cual exige una estrecha relación del proceso pedagógico con la vida en muchas ocasiones, esta relación se realiza de forma muy limitada y no se aprovechan todas las potencialidades que brinda el sistema de conocimiento, habilidades, hábitos y valores, así como la propia experiencia de los atletas, ya que sus experiencias personales tienen una gran importancia como punto de partida, para la adquisición de nuevos conocimientos.
El trabajo personalizado constituye uno de los medios que mantienen el estado activo emocional y cognoscitivo del atleta y provoca por tanto, una actividad cognoscitiva adecuada. Es por eso que el trabajo personalizado debe convertirse en algo cotidiano para educandos y atletas, pero de una forma crítica, borrando todo esquematismo.
A pesar de las vías fundamentales dentro del proceso de aprendizaje en la formación de atletas en la actualidad los entrenadores adolecen de una suficiente preparación metodológica sobre los elementos técnicos del trabajo personalizado para dar un adecuado tratamiento a este en sus entrenamientos
Por lo que se hace necesario en este sentido pensar en el perfeccionamiento de la preparación de los entrenadores, desde la preparación del deporte, y buscar alternativas para que sean convenientemente aprovechados y se conviertan en una poderosa ayuda para el logro de la independencia dentro del entrenamiento.
Al analizar lo relacionado que tienen los entrenadores de la EIDE provincial, para la dirección del trabajo individualizado, se pudo constatar a partir de los instrumentos aplicados, ayudas metodológicas y de inspección que existen insuficiencias referidas a que:
El entrenador se convierte en el eje central del proceso pedagógico y de hecho la creatividad y la independencia del atleta no se desarrolla.
Es insuficiente el dominio de los entrenadores en relación al trabajo individualizado.
Desarrollo
El trabajo personalizado se desarrolla y cobra vida en el proceso de enseñanza-aprendizaje por lo que debe potenciar un aprendizaje desarrollador de modo que el sujeto que aprende tenga un papel activo, consciente, transformador estableciendo vínculos con los otros en el contexto de tareas conjuntas que propicien un ambiente colaborativo, de dialogo y reflexión entre todos los participantes del proceso.
El trabajo individualizado ha sido objeto de diversas interpretaciones, hay quienes lo consideran un método y otros una forma de organización, sin embargo muchos se inclinan a considerarlo un método de enseñanza-aprendizaje y se define “como la realización de tareas por parte de los atletas, bajo la dirección del profesor”
La dirección acertada del trabajo individualizado presupone que los atletas movilicen su intelecto y habilidades en la solución de las tareas, lo que contribuye al desarrollo de la independencia, este requiere de dos características:
Es una tarea orientada por el entrenador, con un tiempo razonable para ejecutarla.
Es la necesidad resultante de la tarea que tienen los atletas de buscar y seleccionar las mejores vías para su selección.
Para la formación de las tareas del trabajo personalizado, el docente debe plantearse los siguientes interrogantes.
¿Qué elementos del conocimiento, lo investigativo y lo deportivo, necesito revelar y que indicaciones y procedimientos, pueden conducir al atleta a una búsqueda activa y reflexiva?
¿Qué operaciones del pensamiento necesito estimular y como conjugo la variedad de tareas de forma que a la vez que facilite la búsqueda y utilización del conocimiento estimulen el desarrollo del intelecto y el ejercicio?
¿Cómo promover mediante las tareas de forma que tanto sus objetivos particulares, como su integración y sistematización conduzcan al resultado esperado en cada atleta de acuerdo a sus posibilidades?
¿Cómo organizar las tareas de forma tal que sus objetivos particulares, su integración y sistematización conduzcan al resultado esperado en cada atleta de acuerdo a sus posibilidades?
¿He concebido los ejercicios necesarios y suficientes que propicien la adquisición de los conocimientos objetos de enseñanza – aprendizaje teniendo en cuenta la atención diferenciada de los atletas?
Solo podemos hablar de trabajo individualizado cuando los atletas pueden relacionar correctamente la tarea y el método para resolverlo. Aplicar los conocimientos y habilidades que poseen para darle solución a la misma sin que el entrenador tenga que regular todos los detalles de ahí que al hablar de trabajo individualizado, se evidencie la relación entre autoactividad e independencia.
La orientación a la luz del trabajo personalizado es una parte indispensable, pues facilita una adecuada organización, ejecución y control del mismo. Informar las condiciones en que es necesario llevar a cabo la acción partiendo de que debe hacer, por qué y para qué, su valor fundamental reside en garantizar la comprensión de lo que se va a hacer antes de iniciar su ejecución, es decir se comienza a trabajar cuando se sabe qué hacer, cómo y con que hacerlo.
La ejecución comprende la realización de su sistema de acciones dirigidas a lograr la apropiación del objeto de enseñanza- aprendizaje mediante la transformación paulatina de ese objeto, es indispensable que el atleta siga los pasos orientados y los ejecute en el orden que se presenta.
Esto posibilita el desarrollo de habilidades en estrecha relación con los conceptos que se asimilan y enfrentan con facilidad nuevas situaciones durante esta etapa se advierten las posibles dificultades y cómo vencerlos.
Un lugar importante lo ocupa el control, el que debe realizarse desde la propia orientación y pueden utilizarse diversas formas, este incluye tanto el de asimilación de los conocimientos, desarrollo de habilidades y pasos orientados, lo que da la oportunidad de retroalimentarse y de influir en la motivación.
Teniendo en cuenta que la evaluación tiene un carácter formativo, sistemático, continuo, recurrente, criterial y cooperativo, podemos preguntar para qué, qué y cómo evaluar.
¿Para qué evaluar? se remite a la necesidad de tener en cuenta la personalidad como un todo en la relación armónica y dialéctica de lo cognoscitivo, instrumental, lo afectivo, motivacional, y lo comportamental. Se evalúan conocimientos, habilidades, hábitos, normas de convivencia, sentimientos, valores y actitudes.
¿Cómo evaluar? en este sentido hay que resaltar el carácter sistemático y continuo de la evaluación requerida, el empleo de diversos tipos y técnicas que permiten el acercamiento confiable al desarrollo del proceso evolutivo de su carácter eminentemente formativo y deportivo.
Las anteriores consideraciones sirven de base para la evaluación del trabajo personalizado y en dependencia al tipo y complejidad del mismo, el entrenador deberá realizar consultas e intercambiar, que orienten al atleta en el logro de los objetivos del trabajo.
En la actualidad persisten criterios que se utilizan como objeciones, para oponerse a la realización del trabajo personalizado.
El factor tiempo
El ritmo diferente del aprendizaje individual
En el primer caso es oportuno destacar que en el trabajo individualizado, correctamente diseñado y orientado ofrece las posibilidades de abordar, los componentes del programa de entrenamiento de un modo racional y por otra parte el tiempo empleado se compensa con la realización efectiva del aprendizaje alcanzado.
En el segundo caso, estas diferencias individuales se ponen de manifiesto en el proceso de enseñanza – aprendizaje bajo la aplicación de cualquier método, no es un problema específico de este en particular, precisamente por medio del trabajo personalizado, el profesor tiene más posibilidades de conocer con exactitud el nivel de conocimiento, habilidades, capacidades y destrezas del atleta, siempre que su planificación y orientación tengan como punto de partida el diagnóstico y favorezca habilidades que posibilite la cooperación, la ayuda de modo que se contemple la Zona de Desarrollo Próximo.
Es recomendable además poner en práctica a la hora de concebir el trabajo personalizado las interrogantes planteadas por Kilngoberg sobre dicho método y que están ampliadas en su libro “Introducción a la didáctica general”
¿Qué parte de la u/ entrenamiento?
¿De qué medios se debe disponer?
¿Cómo tiene lugar el planteamiento y la distribución de las tareas?
¿Qué dificultades se presumen que se presenten en el periodo de entrenamiento y de qué forma debe ser la ayuda que se preste a los atletas?
¿Cómo tiene lugar la evaluación y el análisis de los resultados obtenidos?
Resulta oportuno entonces tomar en cuenta algunos otros elementos desde el punto de vista metodológico para el diseño individualizado, estos son:
Concebirlo para los tres componentes del plan de entrenamiento con carácter sistémico, es decir, integrado no solo al componente deportivo como se acostumbra, sino también a los componentes académicos y de formación integral.
Para su diseño es indispensable contar con un diagnostico que proporcione la información del estado actual de los atletas y en consecuencia proyectar su montaje, el que estará sujeto a la retroalimentación.
Establecer una guía, en los casos que lo requiera, que contenga las indicaciones indispensables y sirva de orientación a la posterior ejecución.
En el transcurso del diagnóstico se traza una alternativa metodológica con las recomendaciones abordadas
Para concebir esta alternativa se pregunta qué pretendemos conseguir con ella, de hecho el objetivo es garantizar la aplicación adecuada del trabajo individualizado con un enfoque desarrollador, de aquí se transita al cómo conseguirlo y entonces se concretan las acciones o procedimientos que no son más que una secuencia de recomendaciones que constituyen un camino, una vía para alcanzar el objetivo propuesto, la misma puede convertirse en una herramienta de trabajo abierta a la flexibilidad y la reflexión.
Esta alternativa comprende la siguiente secuencia de acciones o procedimientos:
Determinación de los contenidos
Diagnostico de los atletas
Análisis interdisciplinario
Planificación del trabajo:
Formulación de objetivos.
Tiempo y medios de qué se dispone.
Determinación de la forma de organización.
Elaboración de las actividades que potencien y concreten el aprendizaje desarrollador, el enfoque interdisciplinario y los componentes de plan de entrenamiento.
Proyección de la evaluación
Orientación del trabajo personalizado
Ejecución del trabajo personalizado
Evaluación
Estrategia metodológica para la preparación de los entrenadores en la dirección del trabajo individualizado
Objetivo general
Contribuir a la preparación de los entrenadores en el orden teórico metodológico sobre la dirección del trabajo individualizado su forma de orientación y el desempeño metodológico para el establecimiento de la correcta dirección del trabajo individualizado.
Primera etapa: Diagnóstico – preparatoria
Dirección I: Diagnóstico del estado de preparación metodológica de los entrenadores en la dirección del trabajo independiente.
Objetivo:
Acciones
1. Elaboración y aplicación de los instrumentos: Entrevistas, encuestas, pruebas de entrada y salida, guía de observación de clases y actividades de preparación de la especialidad para la determinación del estado del dominio y preparación que poseen los entrenadores de las características fundamentales del trabajo individualizado, de las etapas y los requisitos metodológicos para establecer la correcta dirección del mismo.
Plazo de cumplimiento: Septiembre.
2. Revisión de documentos para contribuir al cumplimiento de lo que se estipula en ellos: Resolución Ministerial 119 de 2008, Indicaciones metodológicas y de organización para el desarrollo del trabajo en el Ministerio de Educación, textos de Pedagogía y Didáctica, revistas relacionadas con el tema, autores como Mirtha del Llano Meléndez, Elaine Navarro Leyva, Esperanza Sifones García, Ramón Florentino García y otros, en tesis de maestrías y doctorales relacionadas con el tema, Seminarios nacionales para educadores, Programas de entrenamientos y otros materiales.
Plazo de cumplimiento: Septiembre
3. Procesamiento y análisis de la información diagnóstica obtenida en la aplicación de los instrumentos.
Plazo de cumplimiento: Septiembre
Plazo de cumplimiento de las acciones de la dirección 1: Septiembre.
Participantes: Entrenadores.
Responsable: Jefe de departamento.
Forma de control: Muestreo de documentos, observación, análisis de los resultados del diagnóstico inicial.
- : Planificación de los elementos que integran la estrategia metodológica.
Dirección ll
- Planificar las acciones que se desarrollarán en las etapas de capacitación y evaluación de la estrategia metodológica.
Objetivo 1:
Acciones
1. Planeación de las acciones que se desarrollarán en la etapa de capacitación y evaluativa de la estrategia metodológica.
Plazo de cumplimiento: Septiembre
2. Determinación de los plazos de cumplimiento, participantes, responsables y forma de control de cada una de las acciones propuestas.
Plazo de cumplimiento: Septiembre
Plazo de cumplimiento de las acciones de la dirección 2: Septiembre
Participantes: Entrenadores.
Responsable: Jefe de departamento.
Forma de control: Muestreo del plan de acción a implementar en las etapas de capacitación y evaluación.
Objetivo 2:
Acciones
1. Reunión preparatoria para la introducción en la práctica de las acciones que se proponen en la etapa de capacitación y en la de evaluación con el fin de transformar los modos de actuación de los entrenadores para el logro de una correcta dirección del trabajo individualizado.
Plazo de cumplimiento: Septiembre.
Plazo de cumplimiento de las acciones de la dirección II: Septiembre.
Participantes: Entrenadores.
Responsable: Jefe de departamento
Forma de control: A través de la observación de los participantes en la implementación de la estrategia.
Segunda etapa: Capacitación
Dirección 3: Capacitación para la dirección del trabajo individualizado.
- Preparar teóricamente a los entrenadores en las características fundamentales del trabajo individualizado, así como en las etapas fundamentales y de los requisitos metodológicos para la realización del trabajo individualizado.
Objetivo 1:
Acciones
1. Seminario para ofrecer información sobre la estrategia, su importancia y utilidad para perfeccionar el proceso pedagógico.
Plazo de cumplimiento: Septiembre
2. Talleres de intercambio sobre:
Concepciones actuales del trabajo individualizado.
Plazo de cumplimiento: Octubre
Algunas consideraciones teóricas sobre el trabajo individualizado. su definición, historicidad e importancia.
Plazo de cumplimiento: Octubre
Las diferentes etapas de realización del trabajo individualizado y su importancia para el desarrollo del proceso pedagógico de la disciplina.
Plazo de cumplimiento: octubre.
Requisitos metodológicos para la realización del trabajo individualizado.
Plazo de cumplimiento: Octubre
Aspectos a tener en cuenta en la preparación de la especialidad.
Plazo de cumplimiento: Noviembre
3. Debate e intercambio sobre las principales formas y etapas de realización del trabajo individualizado.
Plazo de cumplimiento: Noviembre
Forma de control: A través de la observación de los participantes en la implementación de la estrategia, auto evaluación y evaluación de las acciones propuestas.
Objetivo 2
Preparar a los entrenadores, para su desempeño metodológico a partir de la preparación de la especialidad, en la dirección del trabajo individualizado.
Acciones
1. Análisis y debate de los documentos que norman el trabajo metodológico en el aspecto relacionado con sus formas de realización y en especial la preparación de la especialidad y su contenido.
Plazo de cumplimiento: Octubre-abril
2. Presentación de la propuesta de recomendaciones metodológicas dirigidas a favorecer el trabajo individualizado en los programa de preparación.
Plazo de cumplimiento: Octubre – abril
Caracterización de los programa de entrenamiento.
Objetivos generales de la especialidad en el evento que se corresponden con la unidad.
Demostrar una cultura política e ideológica, su posición para explicar y tomar decisiones ante hechos de la sociedad y la situación actual del mundo, así como su rechazo al imperialismo y su disposición para la defensa del país.
Evidenciar una visión global acerca de los ejercicios físicos del movimiento, el análisis energético y su relación con otras disciplinas, manifestando una actitud responsable y consciente con relación a enfrentar diferentes problemas.
Manifestar actitudes y valores en su conducta hacia los principales problemas abordados, sobre el análisis cinemática, dinámico y energético del movimiento mecánico y otros cambios físicos, que distinguen la actividad de los científicos: disciplina, tenacidad, espíritu crítico, disposición al trabajo individual y colectivo, honestidad, cuestionamiento constante y profundización más allá de la apariencia de las cosas, búsqueda de unidad y coherencia de los resultados, constancia, análisis crítico de la actividad realizada.
Resolver problemas cualitativos y cuantitativos de situaciones de interés.
La base orientadora constituye un aspecto fundamental para el desarrollo del trabajo individualizado de los atletas en la dirección de su aprendizaje. Es importante que el atleta esté bien orientado, la orientación es una etapa de la actividad humana que garantiza su comprensión, lo que va a hacer antes de su ejecución, que en el momento de trabajar seleccione correctamente el camino que debe recorrer, por dónde va a empezar, qué debe buscar y cómo debe hacerlo.
Bases para la orientación de las tareas
Condiciones a tener en cuenta por los entrenadores para la orientación adecuada de las tareas:
Disposición positiva de los atletas hacia las tareas, que despierten el interés hacia el conocimiento.
Clima psicológico adecuado, donde los atletas se sientan relajados, tranquilos, activos para recibir las tareas.
El conocimiento previo que poseen los atletas, las representaciones que posee el atleta a partir de su experiencia personal y años de trabajo.
La precisión de objetivos, acciones y operaciones a desarrollar.
Teniendo en cuenta lo antes expuesto se garantiza el interés del atleta por el conocimiento nuevo, el deseo y la necesidad de asimilar ese conocimiento.
De aquí la necesidad de plantear determinadas vías para que el entrenador pueda lograr una disposición positiva hacia las tareas.
Las vías para lograr la disposición positiva de las tareas:
Precisión y claridad de lo que se va a hacer.
Estimular la participación (ideas, opiniones de los atletas).
Importancia de la tarea para su formación.
Orientación individualizada de las tareas.
Tener en cuenta el carácter vivencial y experimental del proceso.
Utilización de los métodos y técnicas grupales participativos.
Medios de enseñanza que movilicen la atención y estimulen la reflexión.
Es importante para el desarrollo de la enseñanza enfrentar a los atletas a tareas de forma independiente, pero también es necesario trabajar en grupos, equipo y en dúos para potenciar las relaciones atleta – atleta y atleta - colectivo.
Si un atleta no encuentra un valor personal en las tareas, hará poco esfuerzo al realizarlas. Si cree que no puede ejecutar una tarea a causa de la falta de habilidad o recursos, sería difícil involucrarse en la solución de la tarea. Si un atleta no tiene clara la naturaleza de la tarea, sus esfuerzos serán inconstantes e ineficientes.
Teniendo en cuenta que la orientación generalmente se limita a la presentación de qué va a hacer el atleta, pero no de cómo hacer y con qué cuenta para hacerla, la autora Navarro, a partir de determinado esquema general dado por otros autores, consideró para el modelo propuesto determinados pasos, a través de los cuales se concreta y hace más viable la orientación de las tareas por el entrenador.
El autor del presente trabajo teniendo en cuenta las características de los entrenadores y los atletas, considera oportuno especificar en cada uno de ellos el accionar de los entrenadores para dar cumplimiento a los mismos a partir de los ejercicios que se ejemplifican como modos de actuación, para cada encuentro y que el entrenador debe seguir para la planificación, orientación, control y evaluación del trabajo individualizado desde el tratamiento metodológico en la preparación del entrenamiento.
Estos pasos no pueden considerarse como un esquema rígido, pueden sufrir cambios en dependencia de la maestría del entrenador, de ahí su carácter flexible.
Pasos a tener en cuenta por los entrenadores para la orientación de las tareas
1. Motivación hacia la tarea
En este paso se le recomienda a los entrenadores tener en cuenta se planteen problemas a resolver que sean del interés de los atletas de esta especialidad, que le posibiliten asimilar los conocimientos para poder solucionar el problema. Esto es esencial para lograr la atención de los atletas y que sientan que no se le imponen conocimientos, sino que se tienen en cuenta sus necesidades, motivos e intereses, además de sus potencialidades, así como despertar el interés por adquirir nuevos conocimientos. Un papel importante en este momento lo tiene la comunicación que se establece entre el entrenador y los atletas.
Esta motivación es importante mantenerla durante todo el proceso.
2. Precisión del objetivo
Los entrenadores deben tener presente en este paso que:
El objetivo expresa la habilidad esencial a lograr, los contenidos asociados al mismo y la forma en que se tratará de llevar esos contenidos a los atletas y el propósito por el cual trata el contenido.
El objetivo es el propósito, la aspiración de lo que él se propone alcanzar en el atleta, para que una vez transformado, satisfaga su necesidad y resuelva el problema, por lo que se debe ser claro y preciso en la orientación.
Se le debe informar al atleta para qué hacer el ejercicio, qué habilidad y conocimientos debe reforzar y va a adquirir en el desarrollo de la misma, el fin, es qué resultados deberá alcanzar el atleta al finalizar el proceso.
3. Las acciones y operaciones a realizar por el atleta
Los entrenadores deben informar a los atletas:
Qué van a hacer, es decir, qué acciones deben realizar para resolver la actividad que se plantee.
Cómo lo van a hacer, es decir, qué operaciones debe realizar para dar solución a la tarea planteada.
4. Condiciones para realizar la tarea
El técnico debe tener presente las condiciones en que se realizarán las mismas, si estas tareas se van a realizar de forma individual, por grupos, dúos o equipos, si serán ejecutadas en el entrenamiento.
5. Forma en que se realizará la evaluación de la tarea
El entrenador informará a los atletas la forma en que serán evaluados, que indicadores se tendrán en cuenta durante el proceso. Este momento es responsabilidad del profesor pero con la participación activa de los atletas.
La profesionalización de la orientación de las tareas implica, además de los pasos presentados como modo de actuación para los entrenadores, por el autor, la comprensión por el profesor de la necesidad de cambiar los estilos tradicionales y estar preparado para desempeñar con eficiencia el nuevo rol dentro del proceso pedagógico.
Conclusiones
Los fundamentos teóricos que sustentan al proceso investigativo son procedentes a partir de su actividad, profundidad y relación directa con el tema. Durante el proceso investigativo se pudo constatar que los entrenadores reflejan insuficiencias en los fundamentos teóricos del trabajo individualizado por lo que las acciones que se ejecutarán se caracterizan, por responder a las exigencias de las transformaciones en la dirección del trabajo individualizado, su accionar de la preparación metodológica integral de los entrenadores a partir de los resultados del diagnóstico.
El resultado obtenido posee cualidades significativas que lo hacen sostenible y valioso en la preparación de los entrenadores para el desarrollo con calidad y eficiencia de la dirección del trabajo individualizado, el lograr elevar los indicadores propuestos y el cumplimiento de su diseño en tres etapas: diagnostico – preparatorio y capacitación – evaluación que contienen diferentes direcciones y asume como elementos principales el diagnostico, el planteamiento del objetivo general, la planeación estratégica, donde se definen los objetivos específicos, las acciones, los participantes, responsables y los plazos para su cumplimiento, la instrumentación y la evaluación de los mismos.
Queda demostrada la pertinencia del resultado a partir de la introducción en la práctica educativa de la estrategia metodológica para la preparación de los entrenadores.
La importancia del resultado demostró la legitimidad en sus rasgos positivos que lo hacen aplicables y productivos, al ser introducida en la práctica, indicando su efectividad para la preparación, lo que fue corroborado por las diferencias obtenidas entre los resultados del diagnóstico inicial y final, de esta manera constituye un punto de partida para extender su aplicación a otros centros.
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