La formación del valor responsabilidad en los familiares  de los niños y niñas con parálisis cerebral espástica de  la comunidad de Calixto, en el Municipio Majibacoa
	Facultad de Cultura Física Universidad de Las Tunas (Cuba)	Lic. Aleyda Guerra Girbau Lic. Omar Fernández Salazar aleydagg@ult.edu.cu
	Resumen           El presente artículo tiene por objeto analizar el proceso de enseñanza-aprendizaje en los familiares de niños y niñas con parálisis cerebral espástica de la comunidad de Calixto, del municipio Majibacoa. Para contribuir a la formación del valor responsabilidad en los familiares de los mencionados niños y niñas.           Palabras clave: Parálisis cerebral. Niños y niñas. Responsabilidad. Valores. Familiares.
	EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires - Año 16 - Nº 156 - Mayo de 2011. http://www.efdeportes.com/

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    La escuela cubana debe ser el centro de toda acción educativa, de iniciativas de todos los factores, un escenario donde se integren de forma coherente actividades dirigidas a formar hombres más honrados, solidarios, responsables, laboriosos, patriotas, cultos y sensibles. La institución educativa en su estrategia de intervención comunitaria, profundiza en la superación del personal para que ellos se multipliquen en la comunidad y en las familias los valores y entre ellos la responsabilidad y la estimulación, de manera que el impacto que se logre incida de forma favorable en una proyección capaz de transformar todo el contexto humano poniendo énfasis en los familiares de niños y niñas y sus valores.

    El profesor de Educación Física terapéutica tiene la responsabilidad de formar valores en sus activistas, esta misión será cumplida por todos los profesionales de nuestro país guiado por las palabras de nuestro Comandante en Jefe cuando señaló: “Para nosotros es decisiva la educación, no solo la instrucción general, inculcar conocimientos cada vez más profundos y amplios a nuestro pueblo, sino la creación y formación de los valores en la conciencia de los niños y de los jóvenes desde las edades más tempranas hasta las adultas y eso hoy es más necesarios que nunca” (Fidel Castro, 1997: 4).

    Estas palabras dejan bien claro el rol que le corresponde a cada familiar, la tarea de nosotros crece en importancia, se multiplica su inmensa trascendencia en esa batalla por educar los valores de la Revolución y del Socialismo a las nuevas generaciones, es el arma fundamental para contrarrestar los efectos negativos a fin de que en nuestro país no se introduzcan los valores negativos que puedan destruir nuestras conquistas.

• Valores: Son cualidades que cuantifican a determinadas personas, acciones, situaciones, sistema, sociedades y casos, son reales y nos permiten condicionar el mundo. Hacerlo positivo o negativo. (En un mundo de valores, 1996).

• Responsabilidad: Es el cumplimiento del compromiso contraído ante sí mismo, la familia, el colectivo y la sociedad.

• Familia: Célula fundamental de la sociedad, principal e inicial fuente para la formación y desarrollo de sus miembros.

• Comunidad: Sirve para asignar un conjunto de personas que habitan en un espacio geográfico delimitado, operan en comunicación y comparten equipos, servicios y desarrollan un sentido de pertenencia con un símbolo local.

Formación de valores en Cuba

    En Cuba desde el triunfo de la Revolución, las transformaciones revolucionarias ocurridas desencadenaron un proceso de sustitución de los viejos valores, heredados del capitalismo, por otros derivados del carácter socialista de la nueva sociedad que se construye, se ha garantizado plenamente el acceso de todos los ciudadanos a la educación, la salud, la cultura, al deporte y al cultivo de los valores más altos del ser humano.

    El país ha trabajado por diversas vías en la formación de valores morales, que se enfrentan a comportamientos emocionantes en condiciones excepcionales difíciles de la titánica tarea de construir una nueva sociedad. En ello ha incidido el subdesarrollo, la reproducción de ciertos patrones negativos heredados, los cambios socios estructurales ocurridos, la guerra económica, comercial y financiera impuesta por el imperialismo yanqui, así como nuestros propios errores y tendencias negativas en la construcción del Socialismo.

    El trabajo político ideológico es el vehículo para la formación de los valores, esta formación del conjunto de valores éticos y morales que se correspondan con el modelo del hombre que se aspira a formar en lo social; tarea importante que el Partido y el Estado han encomendado a la comunidad.

    El trabajo comunitario en nuestro país ha hecho historia; desde el triunfo Revolucionario cubano. En la actualidad se aboga en el trabajo comunitario por la descentralización del poder, que si bien no es concebida en forma absoluta, debido a que toda comunidad se debe regir por un gobierno a instancia superior, de forma menos determinante desde el punto de vista económico, administrativo y social, investigando con un mayor acierto en las decisiones y perspectivas comunitarias, buscando la comprensión y participación necesaria por parte de los protagonistas (miembros de la comunidad)

    El modo más eficaz de avanzar en el desarrollo del trabajo comunitario en la formación de los valores, es a partir de la transformación local. Para la dirección política cubana se ha determinado con claridad su génesis en la incorporación de toda la sociedad a la toma de decisiones, el intercambio de los temas de interés público desde el nivel central hasta lo local, contribuyendo a la unidad que defendemos y al desarrollo comunitario.

    La formación de los valores constituye una problemática esencial en Cuba, definida desde el Primer Congreso del Partido Comunista de Cuba expresadas en las Tesis y Resoluciones sobre Política Educacional y reafirmada en los Congresos; donde queda declarado como fin de la Cultura Física terapéutica, tiene como finalidad contribuir al perfeccionamiento de nuestros pacientes a través de las actividades físicas, terapéuticas, deportivas y recreativas, de esta manera coadyuvar a la formación y educación de un joven capaz de conducirse activa y consciente al servicio de construcción de la sociedad socialista sana.

    Desarrollando en ellos sentimientos de pertenencia, cuidado y conservación de los bienes del Estado, identificándose con los valores que caracterizan el pueblo cubano, para que sean capaces de ser responsable.

    Las transformaciones que se desean obtener, deben ser dirigidas para lograr la formación del valor responsabilidad en los individuos, el respeto hacia la Patria, la comunidad, la familia, la escuela y la realización de sus obligaciones.

    El acto educativo es en sí, eminente creador de valores, todo lo que se le enseñe al escolar tiene que ser perdurable para formar verdaderas cualidades positivas en la personalidad.

    El profesor de Cultura Física terapéutica debe conocer de forma sutil las características de cada uno, a partir de un certero diagnóstico clínico, social y psicopedagógico, que le permita diseñar y aplicar una estrategia pedagógica que tenga como punto de partida sus carencias y sus potencialidades, para alcanzar las transformaciones que nos hemos propuesto y que se cumpla la principal misión del familiar: educar.

    Tanto Varela como De la Luz y Caballero (1944) abogaron por la necesidad imperiosa de propiciar el desarrollo intelectual aparejado a una sólida formación moral, ética y estética, situación que a nuestro juicio perseguía determinados motivos, e intereses ideológicos, la crítica, el combate por la impugnación y el enfrentamiento a la política colonial y la corrupción escolástica. Ellos nos enseñaron a como pensar, comprender y reflexionar a través de su ejemplo personal.

    En la ciencia pedagógica varios autores de libros, artículos, folletos, tesis de maestría y documentos que aportan sus experiencias puestas en prácticas sobre el proceso en la formación de los valores en el escolar los estudios más significativos han resultado ser: Martí (1875); Báxter (1989, 1994, 2002, 2003, 2007); Fabelo (1989, 1995, 1996, 1999, 2003); González (1993, 1995, 1997, 1998); Castro (1993, 1997, 1998, 2001, 2003); Díaz (1994, 2000, 2002); Chacón (1996, 1999, 2000, 2002); Cortina (1996); Blanco (1997, 2001); Mendoza (2000); Silvestre (2002); Díaz, (2003); Acebo (2005); Best (2005); Zayas (2008); (M. González (2008) en las Tesis y Resoluciones, Plataforma Programática del PCC, el MINED, la Revolución Cubana.

    Dentro de los valores que deben estar presentes en cada individuo, la responsabilidad se ha convertido en un principio de nuestra política tanto en el orden externo como en el interno.

    La formación del valor responsabilidad, es algo consustancial y exclusivo del ser humano debe hacerse en cada momento lo que corresponde, con satisfacción, ese valor ha sido investigado por autores como: Egea (2007) y Báxter (2007)

    El análisis del valor responsabilidad no se concibe si los familiares, no son ejemplo ante sus escolares es necesario reflexionar en unión de ellos a la hora de asumir el valor responsabilidad por ejemplo.

• Asumir la crítica y la autocrítica como poderoso instrumento de autorregulación moral.

• Cumplimiento con las tareas de todos los días.

• Disposición para cumplir con los deberes familiares y comunitarios.

• Cuando luchan por obtener cada vez mejores resultados.

• Cuando se preocupan por los demás.

• Cuando participan en actividades terapéuticas-deportivas-recreativas.

    Los profesores de Cultura Física terapéutica deben utilizar a plenitud las acciones que se realizan en las actividades para formar verdaderos pacientes responsables, donde desarrollen cualidades sociales como: la realización de diferentes tareas terapéuticas, cuidado de su equipamientos, asistir a las terapias, a las actividades recreativas que se efectúan en la comunidad, la ayuda mutua, la cooperación, la disposición, el intercambio y la formación de juicios.

    La labor formativa exige proporcionar información creíble, donde se establezca una relación directa entre lo que se aprende o conoce con lo que se siente y se aspira, es preparar a cada uno de los familiares en el saber hacer y en el saber ser. Lo que implica desarrollar las herramientas necesarias para poder interactuar con el momento histórico en el que le toca vivir y sentir satisfacción como sujeto protagónico y transformador del escenario histórico en que desarrolla su vida.

    Durante esta investigación se hizo un profundo análisis, teniendo en cuenta datos recopilados en los diferentes actividades donde se llegó a constatar que aún existen insuficiencias en la práctica del familiar en cuanto formación del valor responsabilidad, el cual fueron evidenciadas en:

• Pobre participación en actividades sistemáticas de carácter terapéutico.

• Bajo por ciento de asistencia y puntualidad a diferentes actividades recreativas, educativas de carácter comunitario.

• Insuficiente utilización del vestuario apropiado para esos niños y niñas.

• Escasa confección y conservación de los materiales para estimular el desarrollo psicomotriz en esos pacientes.

    Todas estas insuficiencias llevaron a la autora a plantear el siguiente problema científico:

    ¿Cómo contribuir la formación del valor responsabilidad en los familiares de niños y niñas con parálisis cerebral espástica de la comunidad de Calixto, del municipio Majibacoa?

Objeto de investigación

    Proceso de enseñanza-aprendizaje en los familiares de niños y niñas con parálisis cerebral espástica de la comunidad de Calixto, del municipio Majibacoa.

Objetivo

    Ofrecer una propuesta de actividades dirigidas a la formación del valor responsabilidad en los familiares de niños y niñas con parálisis cerebral Espástica de la comunidad de Calixto, del municipio Majibacoa tomándose como referencia los valores legados por relevantes personalidades del deporte en Cuba.

Campo de acción

    Formación del valor responsabilidad los familiares de niños y niñas con parálisis cerebral espástica de la comunidad de Calixto, del municipio Majibacoa.

    Se trabajó con un grupo de 4 niños de la comunidad de Calixto.

    Después de profundas investigaciones realizadas por varios autores ya mencionados, Tesis, Resoluciones, bibliografías, entre otras, aún no se resuelven los problemas sobre la formación del valor responsabilidad, lo cual lleva a la autora a plantear la siguiente idea a defender:

• Se puede contribuir a la formación del valor moral responsabilidad en lo los familiares de niños y niñas con parálisis cerebral espástica de la comunidad de Calixto, del municipio Majibacoa, a partir del desarrollo de actividades coherentes y sencillas que promuevan formar en ellos la responsabilidad ante sus deberes y modos de actuación, tomándose como referencia los valores legados por relevantes personalidades del deporte en Cuba.

    Para dar cumplimiento al objetivo propuesto y corroborar el problema científico en el presente trabajo se determinan las siguientes tareas científicas:

• Sistematización de los fundamentos teóricos que sustentan la formación de los valores entre ellos la responsabilidad y sus antecedentes históricos.

• Caracterización del estado actual de la formación del valor responsabilidad en los familiares de niños y niñas con parálisis cerebral espástica de la comunidad de Calixto, del municipio Majibacoa.

• Elaboración de actividades que contribuyan a la formación del valor responsabilidad en los familiares de niños y niñas con parálisis cerebral espástica de la comunidad de Calixto, del municipio Majibacoa.

• Validación de la factibilidad de las actividades propuestas para la formación del valor responsabilidad.

    La investigación se sustenta en el método universal materialista dialéctico que se utilizó para encontrar las contradicciones, evaluación y desarrollo de la responsabilidad.

El valor responsabilidad en la Cultura Física terapéutica de la comunidad

    La formación de hábitos sólidos, con el objetivo que cada familia incorpore a su vida diaria como una necesidad y un deseo de la práctica de los ejercicios físicos. La cultura física es un medio idóneo para el desarrollo político y la organización de la población.

    La Cultura Física terapéutica es un proceso dirigido al mejoramiento del desarrollo físico y propicia el alcance en un nivel adecuado de la preparación física, ofrece conocimientos específicos sobre los contenidos que abarca; en su desarrollo se cumplen las múltiples y complejas tareas de la Cultura Física terapéutica. Se realiza en la comunidad para darle cumplimiento a un programa determinado, es considerada como una tarea más en ese contexto.

    El desarrollo físico es un proceso cualitativo natural que abarca el mejoramiento de las formas y funciones del organismo, se produce como resultado de la influencia de la herencia y el medio ambiente.

    La preparación física está dada por el grado de preparación posible para alcanzar como resultado de la práctica sistemática y científica dosificada de los ejercicios físicos de una actividad determinada, sobre el nivel de preparación física del individuo influyen variados factores pero los medios de la terapéutica son los más eficaces.

    El Estado da vital importancia a la realización de este hecho de completar la base técnica material y la preparación de los familiares necesario para el desarrollo de las actividades, nuestro sistema se sustenta en el principio de su Integralidad, de manera que pueda coadyuvar de cumplir con el encargo que la sociedad ha trazado con lo referente a la formación de la niñez y la juventud. Esa tarea es integral en su concepción y contenidos.

    La acción pedagógica, como caso especial de los efectos sociales, se insertan de forma específica en su desarrollo. Corresponde a la familia y la sociedad el máximo esfuerzo para ejercer esa acción y dar respuesta apropiada a la exigencia social en la formación de las futuras generaciones, objetivo esencial de la labor hogar-comunidad.

    En el hogar, la Cultura Física se desarrolla mediante actividades físico-deportivas recreativas-terapéuticas que se practican de forma sistemática, dentro y fuera del hogar, donde la actividad constituye la forma fundamental de organización del proceso de rehabilitación. Lo que permite desarrollar en los pacientes, mediante una labor sistemática para formar las capacidades perceptivo-motrices, físico-motrices, cognoscitivo-motrices, así como formar actitudes, normas y valores.

    Uno de los máximos impulsores de la Cultura Física y la rehabilitación ha sido nuestro Comandante en Jefe; el compañero Fidel Castro Ruz, lo cual se refleja en las palabra expresadas por él en distintos momentos que han ido señalando la idea a seguir y reflejando los logros y resultados actuales.

    Tomando en cuenta la esencia de la formación de la responsabilidad y los indicadores establecidos para medir la eficiencia del funcionamiento del mismo en los familiares, se tomaron como criterios esenciales para el diagnóstico los siguientes indicadores:

• Comportamiento en las actividades sistemáticas, en cuanto a la formación del valor responsabilidad.

• Participación en las actividades comunitaria.

• Utilización del vestuario adecuado.

• Cuidado de los materiales y medios rehabilitadores.

    Para mantener la vigencia de la formación moral es necesario el desarrollo de una conciencia, en la que los valores adquieran una singular categoría. De ahí su profética frase “la sociedad en su conjunto debe convertirse en una gigantesca escuela”. Hoy se entiende mejor que nunca la vigencia y el alcance de estos planteamientos. Para nosotros el Che es ejemplo de valores pues él con su actuar demostró la importancia de la educación y la familia.

    Partiendo del concepto dado por el Dr.C. Del Pino Calderón al definir que Actividad son aquellos procesos mediante el cual el individuo, respondiendo a sus necesidades se relaciona con la realidad, adoptando determinadas aptitudes hacia lo mismo. Es un proceso en el que ocurren transiciones entre los polos: sujeto-objeto en función de las necesidades del primero.

    Las actividades que despliega el individuo están encaminadas a satisfacer determinadas necesidades que se concretan en los objetos potencial capaz de satisfacerlas. Por ello el objeto de la actividad constituye su motivo que puede ser también como ideal y subjetiva del objeto.

    Para que estas actividades resulten efectivas es preciso realizar una preparación previa, lo incluye la motivación de los familiares, la selección de los contenidos, todo lo que contribuye al logro de los objetivos para la formación de los valores.

    Cada actividad tiene su practicante, cada niño y niña o familia no tiene que ser igual a otro. Lo importante es adecuar la manera de hacer llegar el mensaje a cada uno, que conduzca a la formación de valiosas cualidades necesarias para el desarrollo de la personalidad, como orientación hacia el objetivo disponibilidad y movilidad del pensamiento y estímulo a la formación de diversos intereses cognoscitivo. (Tuner, 199: 17)

    La actividad debe ser constante y renovada. Surge sobre todo cuando se sitúan tareas interesantes a los infantes y familiares, cuando resultan estimulados por contenidos atractivos por el planteamiento de problemas e inducidos a la búsqueda de soluciones.