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Introducción

    El conocimiento de la Historia de Cuba constituye una prioridad para nuestro pueblo, esto permite comprender mejor la necesidad de prepararse para luchar por defender sus conquistas y por construir un porvenir mejor. Nuestro Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, continuador de la obra del maestro y líder indiscutible de la Revolución, llevó a la práctica las ideas más justas, equitativas, democráticas y antiimperialistas, plasmada en su autodefensa conocida como la Historia me Absolverá, uno de los documentos más importante de nuestra Historia, ya que recoge las mejores tradiciones de lucha de nuestro pueblo.

    El documento constituye un material de consulta para estudiantes y profesores que busquen indagar en el tema. Prioriza la función social del conocimiento para la formación fidelista de los futuros profesionales de la Cultura Física y el Deporte, pues contribuye a la formación de valores y la preparación política e ideológica de los mismos, desde un enfoque interdisciplinario y un aprendizaje desarrollador, potenciando la toma de decisiones, la auto confianza y la autovaloración.

    El mundo actual impone al ciudadano cubano y dentro de este a los estudiantes y profesionales del deporte profundizar en el proceso histórico cubano, el dominio de nuestras raíces, de nuestras tradiciones y valores legados por nuestros héroes, pues le permitirá valorar la justa dimensión de la Revolución Cubana.

    Ante la crisis económica de mercado, de empleo y los restantes problemas globales se impactan las culturas nacionales y con este el modo de actuación de los hombres. América Latina es un ejemplo vivo del impacto generado por las políticas neoliberales y globalizadoras que han marcado el deterioro de los pueblos en el modo de pensar y de actuar del latinoamericano, a partir del discurso político que se introducen por las nuevas tendencias y políticas integracionistas.

    Cuba como país subdesarrollado y bloqueado ha tenido que elevar la preparación política e ideológica de nuestro pueblo, haciendo énfasis en el conocimiento de la historia, en el Sistema Educacional se introducen diferentes vías para su materialización. La tarea exige y promueve el rescate de valores y de la memoria de lo mejor del pensamiento de Fidel a través de su obra La Historia me Absolverá, documento de incalculable valor.

Desarrollo

    El pueblo cubano portador de una ideología sustentada en tradiciones de luchas y en el pensamiento de los clásicos del marxismo, José Martí y Fidel Castro tiene hoy una tarea vital, la defensa y consolidación de sus sagradas conquistas para lo cual el conocimiento de la Historia y dentro de ella los documentos históricos, como La Historia me Absolverá, se convierten en vía esencial para la victoria.

    La historia me absolverá, alegato de autodefensa del joven abogado Fidel Castro en el juicio seguido por las acciones del 26 de julio de 1953, es uno de los documentos trascendentales de la historia de Cuba. En su intervención en el juicio, a puertas cerradas, en una pequeña sala de la Escuela de Enfermeras del hospital “Saturnino Lora”, el día 16 de octubre de ese año, Fidel mostró su inteligencia, sus altos valores éticos y morales, su firmeza de principios, de patriotismo, de responsabilidad ante la patria.

    Con argumentos irrefutables demuestra el carácter ilegal, inmoral, reaccionario y artero del cuartelazo del 10 de marzo, la validez jurídica y moral del camino escogido para enfrentarlo, al expresar “la dictadura que oprime a la nación no es un poder constitucional, sino inconstitucional, se engendró contra la constitución, por encima de la constitución, violando la Constitución legítima de la República”.

    Desenmascaró la esencia represiva y brutal de la tiranía cuando expresa “El Cuartel Moncada se convirtió en un taller de torturas y de muerte”, se plantean y analizan los 6 grandes problemas del país:

• Tierra: Existía una grave situación muy apegada a la condición de los campesinos explotados por los terratenientes nativos y compañías extranjeras en complot con la tiranía. Se refiere cuando habla de que alrededor de 5 000 obreros del campo no tienen una pulgada de tierra para sembrar y cuya existencia deberá mover más a compasión si no hubieran tantos corazones de piedra. Más de la mitad de las mejores tierras de producción cultivadas, está en manos extranjeras. Hay 200 mil familias campesinas que no tienen una vara de tierra donde sembrar.

• Industrialización: Salvo unas cuantas industrias alimentarías y textiles, Cuba sigue siendo una factoría de materias primas. Era necesaria diversificar la producción en sectores primordiales como la metalurgia, la química, cultivos más productivos, etc.

• Desempleo: Se refiere a esto cuando se habla de los 600 000 cubanos que están sin trabajo, deseando ganarse el pan honradamente sin tener que emigrar de su patria en busca de sustento.

• Educación: En Cuba no pasaban de 6 escuelas técnicas y de arte industrial, terminando los alumnos con sus títulos sin tener donde emplearse. Muy cercano a este problema se encontraba la precaria situación existente, que provocaba que a las escuelas en el campo asistan la mitad de los niños descalzos.

    Que poco o nada podían saber los niños, adolescentes y jóvenes cubanos de aprender a leer, escribir, interpretar, así como nos expresa en el año 1960 el Ministro de Educación Armando Hart Dávalos, tomado de Fidel, “(…) el 31% de la población de Cuba es analfabeta. Mas de 800 mil niños de 5 a 15 años había sin escuela cuando el Gobierno Revolucionario nos llevó a asumir la responsabilidad en el Ministerio de Educación. Mas de 800 mil niños sin escuela, mas de dos millones de personas mayores de quince años; analfabetas; lo cual hacía un total de mas de dos millones ochocientos mil cubanos que no sabían escribir la palabra Martí ni América, ni la palabra Cuba (…) el 41% de la población cubana que no había recibido los beneficios de la Escuela Pública”. (4) (Discurso del señor Ministro de Educación. En Mensaje educacional al pueblo de Cuba. La Habana, 1960, Año de la Reforma Agraria. Centro de Estudios Martianos. La Habana, 2008. En Cuba no se seguía una política educacional, que respondiera a una política racional, con una estructura racional, las escuelas privadas y religiosas tenían sus programas y objetivos, y en las escuelas publicas se nombraban maestros y profesores según los intereses políticos de los gobernantes de turno, solo el 15 % de cada cien niños que ingresaban llegaban al cuarto grado y solo 6 al sexto grado, y en secundaria básica de 600.000 jóvenes con edad solo 90 000 ingresaban y la familia no tenía fe, ni entusiasmo y sobre todo en los campos ya le exigían a los hijos trabajar para ayudar.

• Vivienda: se refiere a este sector cuando expresa que en Cuba existen 200 000 bohíos y chozas, 400.000 familias del campo y la ciudad viven en barracones, cuarterías y solares sin las más elementales condiciones de higiene y salud, 2 millones 200 mil personas de la población urbana pagan alquileres que absorben entre un quinto y un tercio de sus ingresos, y 2 millones 800 mil de la población rural y suburbana carecen de luz eléctrica.

• Salud: El 90 % de los niños en el campo eran devorados por parásitos, andaban descalzos y el acceso a los hospitales solo era posible mediante recomendación o el casi imposible dinero. Crecerán raquíticos, a los 30 años no tendrán una pieza sana en la boca habrán oído 10 millones de discursos y morirán al fin de miseria y decepción.

    A manera general expresó: “He ahí concretados los 6 puntos a cuya solución se hubieran encaminado resueltamente nuestros esfuerzos, junto con la conquista de las libertades públicas y la democracia política”.

    Dio a conocer medidas que demostraban el carácter democrático – popular del movimiento, plasmadas en su programa político:

    La 1ª Ley revolucionaria devolvía al pueblo la soberanía y proclamaba la constitución de 1940 como la verdadera Ley de Reforma del Estado.

    La 2ª Ley revolucionaria concedía la propiedad intransferible de la tierra de todos los colonos, subcolonos, arrendatarios, aparceros y precaristas que ocupasen parcelas de 5 o menos caballerías de tierra mediante indemnización por el Estado a sus propietarios.

    Otorgaba a los obreros y empleados el derecho de participar del 30 % de las utilidades en todas las grandes empresas industriales, mercantiles y mineras, incluyendo centrales azucareros.

    Concedía a todos los colonos el derecho a participar del 55 % del rendimiento de la caña y cuota mínima de 40 000 arrobas a todos los pequeños colonos que llevasen 3 años o más de establecidos.

    Ordenaba la confiscación de los bienes a todos los malversadores de todos los gobiernos y herederos en cuantos a bienes percibidos por testamento o de procedencia mal habida.

    La mitad de los bienes recuperados pasarían a los fondos de las cajas de los retiros obreros y el resto a los hospitales, asilos y casas de beneficencia. Una vez terminada la contienda sería proclamada otra serie de leyes y medidas como la Reforma Agraria, la Reforma Integral de la Enseñanza y Nacionalización del Trust Eléctrico y el Trust Telefónico.

    Fidel precisa la necesidad de la lucha revolucionaria del pueblo y para el pueblo y expresa: Cuando hablemos de pueblo no entendemos por tal todos los sectores y conservadores de la nación, a los que viene bien cualquier régimen de opresión (...) Entendemos por pueblo cuando hablamos de lucha la gran masa irredenta, a la que todos ofrecen y a la que todos engañan y traicionan (...) la que ansía grandes y sabias transformaciones en todos los órdenes y está dispuesta a dar para lograrlo (...) hasta la última cuota de sangre.

    Demuestra su profunda admiración por José Martí, pues como expresa Ramonet en su obra, Fidel cita a Martí, mucho más que a ningún otro personaje de la historia, constituye su máxima inspiración, lo lee y lo relee. Además llevo a la práctica sus sueños.

    Declara “traigo en el corazón las doctrinas del Maestro y en el pensamiento las nobles ideas de todos los hombres que han defendido la libertad de los pueblos”.

    Se proclama la creación de una república nueva: “Parecía que el Apóstol iba a morir en el año de su centenario... pero vive, no ha muerto, su pueblo es rebelde, su pueblo es digno, su pueblo es fiel a su recuerdo... hay jóvenes que en el magnífico desagravio vinieron a morir junto a su tumba, a darles su sangre y su vida para que él siga viviendo en el alma de la Patria. ¡Cuba qué sería de ti si hubieras dejado morir a tu Apóstol!”

    Además reconoce a Martí como el autor intelectual del asalto al cuartel Moncada.

    A los me llamen por esto soñador, les digo como Martí “el verdadero hombre no mira de qué lodo se vive mejor, so no de que lado está el deber, y ése es el único hombre práctico cuyo sueño de hoy será la ley de mañana”.

    Este documento tiene una onda latinoamericanista y en él se declara que la política cubana en América sería la estrecha solidaridad con los pueblos democráticos del continente, evidenciándose un mismo ideal independentista y una república democrática. Existe una misma labor con el objetivo de lograr la unidad, y ambos elaboran un programa revolucionario. Dotan a la lucha de un mando político de dirección de todas fuerzas revolucionarias.

    Demuestra el sentido de la historia que posee, profundamente anclado en él al referirse “Céspedes, Agramonte, Gómez y Martí fueron los primeros nombres que se grabaron en nuestro cerebro, se nos enseñó que el Titán había dicho que la libertad no se mendiga sino que se conquista con el filo del machete, que el 10 de Octubre y el 24 de Febrero son efemérides gloriosas…”

    “Pero hay una razón que nos asiste más poderosa que todas las demás, somos cubanos, y ser cubano implica un deber, no cumplirlo es crimen y es traición. Vivimos orgullosos de la historia de nuestra patria”.

    Las frases finales de Fidel fueron emocionantes “En cuanto a mí, sé que la cárcel será dura como no lo ha sido nunca para nadie (…) pero no la temo, como no temo la furia del tirano miserable que arrancó la vida a setenta hermanos míos. Condenadme, no importa, la historia me absolverá”.

    En Un Grano de Maíz expresa qué significado tiene esta frase que empleó. “Eso es expresión de confianza en el futuro, de confianza en las ideas que uno está defendiendo como las más justas, de la causa que está defendiendo como la más honrosa. Quiere decir, el futuro lo reconocerá, porque en el futuro estas ideas serán realidades, en el futuro se sabrá todo lo que ha ocurrido, qué hicimos nosotros, y qué hicieron nuestros adversarios, qué objetivos perseguíamos nosotros qué objetivos perseguían nuestros adversarios, quién tenía la razón, nosotros o los jueces que nos estaban juzgando, que habían prevaricado, que habían abandonado todo su juramento de lealtad a la constitución y estaban sirviendo a un régimen tirano. Era un emplazamiento que yo les hacía, con una convicción absoluta de que las ideas que estamos defendiendo algún día triunfarían en nuestra patria, convicción que todavía sostengo de las causas justas del hombre siempre marcharán adelante, siempre triunfarán, no importa cuánto tarden”.

Conclusiones

1. El presente trabajo constituye un material de consulta de significativa importancia que puede ser utilizado en la preparación y formación de nuevos profesionales de la Cultura Física y el Deporte.

2. Permite a estudiantes y profesores conocer parte de nuestra Historia Patria y que en ese periodo histórico el capitalismo no resolvió los problemas que tenía Cuba.

3. Es una necesidad que las nuevas generaciones se acerquen cada vez más a las enseñanzas de Fidel Castro como líder indiscutible de la Revolución Cubana.

Bibliografía

• Castro Ruz Fidel, La historia me absolverá. Editorial Políticas, La Habana, 1967.

• Castro Ruz Fidel, Un grano de maíz, Conversación con Tomás Borge, Oficina de publicaciones del Consejo de Estado, La Habana, 1992.

• Cien Horas con Fidel, Conversación con Ignacio Ramonet Oficina de publicaciones del Consejo de Estado, La Habana, 2006.

• Discurso del señor Ministro de Educación. En Mensaje educacional al pueblo de Cuba. La Habana, 1960, Año de la Reforma Agraria. Centro de Estudios Martianos. La Habana, 2008.

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EFDeportes.com, Revista Digital · Año 16 · N° 156 | Buenos Aires, Mayo de 2011   © 1997-2011 Derechos reservados