Control médico pedagógico en atletas sordos e hipoacúsicos. Una visión profiláctica en judokas provinciales |
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Comisión Provincial Judo INDER Villa Clara (Cuba) |
Lic. Jesús Ricardo Chávez Ramírez |
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Resumen El movimiento paralímpico en la provincia de Villa Clara cobra cada día mayor importancia, en el se exhiben resultados importantes a nivel mundial en atletismo y judo entre otros. Las necesidades en torno a este movimiento están pautadas por lo que se ha logrado en el campo de la investigación científica en el deporte convencional, en la preparación de los deportistas y los métodos de control empleados. En particular, en control médico pedagógico por estar íntimamente ligado a los aspectos de salud de los discapacitados exige de adecuaciones con respecto a los atletas de judo convencionales, sin embargo, ha sido una temática pobremente tratada, en que las experiencias prácticas han demostrado la necesidad de sistematizar los resultados que se han obtenido en el alto rendimiento y en la actividad pedagógica con estas personas que le sirvan a los entrenadores, a los atletas y a los médicos deportivos. En este sentido, el trabajo propone reordenar los componentes del control médico adecuado a los practicantes sordos e hipoacúsicos de judo de la Provincia de Villa Clara. Palabras clave: Control médico. Atletas sordos e hipoacúsicos. Judokas.
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EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 16, Nº 155, Abril de 2011. http://www.efdeportes.com/ |
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Introducción
Desde su origen, el judo como arte marcial ha tenido un marcado matiz educacional, que si bien en la actualidad se distingue por los rasgos competitivos, la actividad deportiva en su conjunto es considerada por las posibilidades educacionales que brinda.
EL entrenamiento deportivo en el atleta de judo está dirigido a elevar las condiciones físicas, adquirir habilidades deportivas específicas, armonizadas con el proceso formativo imbricado en la educación integral del judoka.
El fin educacional que brinda el judo como deporte, es comprensible abordar los beneficios que aporta en el deporte adaptado para discapacitados. Las características del judo de por si fundamentan el valor educacional de sus prácticas para cualquier persona con limitaciones sensoriales y psíquicas. Las cuales Kolychkine (1988) las resume de la manera siguiente: desarrolla la coordinación del cuerpo como arte marcial con definición y firmeza, expresada en las ejecuciones, de gran amplitud técnica y táctica entre los deportes de combate, caracterizada por la variedad de situaciones y problemas que se generan en los entrenamientos y competencias, así como los recursos que brindan las formas metódicas empleadas.
EL judo con sus resultados obtenidos en el movimiento paralímpico nacional e internacional en sordos e hipoacúsicos demuestran la importancia que ha recobrado en las últimas décadas. Cada día aumenta la expectativa de este deporte en los discapacitados sensoriales, que ha incentivado la incorporación en nuestra provincia, Villa Clara, de jóvenes con estas discapacidades.
Desde el punto de vista motor el judo para discapacitados auditivos reporta los beneficios propios del proceso de corrección y/o compensación de las dificultades que con frecuencia aparecen en estas personas. Desarrolla y perfecciona la sensopercepción logrando gran nitidez, el equilibrio y la postura del individuo, la orientación temporo-espacial, incremento del tono muscular, perfecciona la coordinación a un nivel superior, logrando independencia total motora los practicantes.
Desde el punto de vista psíquico brinda seguridad, independencia psicosocial, confianza en sí mismo, disposición a conocer ambientes y situaciones desconocidas.
Las prácticas de judo para los sordos e hipoacúsicos reportan desde el punto de vista motor el desarrollo y perfeccionamiento de la estabilidad corporal, los procesos sensoperceptuales que conducen a una mejor comprensión del lenguaje, y la capacidad de coordinación, cobrando gran significado el mejoramiento de la respiración fonatoria.
En el área psíquica los beneficios son de gran importancia; incrementa la atención y concentración, desarrolla la comunicación, los procesos cognoscitivos, pensamiento, la abstracción y la inteligencia que proporciona las vivencias emocionales deportivas. De forma general el deporte es un medio eficaz para mejorar el estado de salud de los discapacitados y lograr la integración plena de estas personas a la sociedad.
La estructura básica de la preparación deportiva para el atleta de judo sordo e hipoacúsico no difiere en la utilizada para el judo convencional. Se elabora en función de determinados número de factores relacionados con los aspectos de la preparación del deportista.
Matveiev (1966) define la preparación del deportista. “Es el aprovechamiento de todo el conjunto de medios que aseguran el logro y la elevación de la predisposición para alcanzar resultados deportivos”. El conjunto de medios que refiere se relaciona con el contenido de la preparación; físico, técnico, táctico, psicológico y teórico que garantizan la forma deportiva.
La optimización del proceso de preparación del deportista y de la actividad competitiva se logra sobre la base del control, que permite establecer la valoración de los diferentes contenidos de la preparación y las posibilidades funcionales de los sistemas del organismo.
El control médico deportivo está dirigido a valorar las posibilidades funcionales del organismo. Autores como Alonso, R. (2001) lo comprometen en vigilar la salud y el desarrollo físico de las personas que practican deporte, otras perspectivas como la del Instituto de Medicina Deportiva y los Centros Provinciales plantean que garantiza la salud del deportista, contribuye al logro de elevados resultados deportivos y ayuda a la formación integral del hombre, aspectos estos que lo ubica en un proceso con tendencias pedagógicas (Centro Provincial de Medicina del Deporte, 1989).
Autores como Sazigain (1996) y Willitong (2000) coinciden en enfocar la labor del control médico en el deporte con una visión pedagógica, debido al carácter formativo y sistémico del mismo, en que se establecen las relaciones médico-atleta-entrenador.
Las tendencias modernas de la Medicina Deportiva están dirigidas a la profilaxis, que garantiza establecer condiciones de vida saludable al atleta de alimentación, higiénicas, régimen de vida racional, cumplimiento de las actividades preventivas educativas, investigativas del desarrollo morfológico y funcional.
En las personas con necesidades educativas especiales vistas tanto en el ámbito de la educación física como el deportivo para discapacitados, el control comprometido en el diagnóstico presenta características particulares de estricto cumplimiento por el entrenador o el profesor.
Desde esta perspectiva Sazigain (2006) plantea que las características que asume el control en personas con desviaciones en el desarrollo deben estar sustentadas por la sistematicidad, continuidad y dinamismo en las formas de aplicación, la individualidad dirigida a la búsqueda de las particularidades del individuo y con una connotación previsora de como promover el desarrollo.
Fox, citado por Sazigain (1996) destaca en el control fisiológico del entrenamiento deportivo la importancia de llegar a la comprensión individual de la naturaleza de la respuesta funcional a las cargas físicas. Lo cual converge con lo planteado anteriormente para el deporte para discapacitados.
El control médico pedagógico en atletas con discapacidad auditiva reviste una connotación especial. Se trata de garantizar durante las prácticas la salud del deportista que de hecho presenta limitaciones senso-perceptuales y consecuentemente motoras que se deben corregir y compensar con el estricto cumplimiento de las condiciones adecuadas de entrenamiento y competición.
En los sordos e hipoacúsicos las prácticas deportivas elevan considerablemente la precisión de las percepciones, amplia la capacidad de trabajo, perfeccionan la orientación espacial y aparejado a ello desaparecen los trastorno de inseguridad provocado por deficiente comunicación, los cuales pueden lograr la perfección. Desde el punto de vista físico alcanzar un buen tono muscular acorde con las características del deporte.
En la experiencia de trabajo acumulada en la preparación de equipos de judo con deficiencia auditiva se ha observado las irregularidades del control y muy en particular del control médico pedagógico con fines preventivos. No se organiza adecuadamente durante la planificación perdiendo la sistematicidad requerida y el efecto profiláctico que debe prevalecer en relación al terapéutico.
Desde esa perspectiva los médicos y entrenadores tratan cada año de llevar a la práctica sus mejores experiencias para perfeccionar este proceso, sin embargo aun no está establecido el modelo más adecuado para el control en atletas discapacitados, que se corresponda a sus necesidades físicas, motoras y de comunicación.
La pobre sistematización de las prácticas medico pedagógicas en el deporte de alto rendimiento adaptado para sordos e hipoacúsicos exige de estudios que aporten elementos de la planificación y organización del proceso.
Los aportes teóricos fundamentales en el orden de evaluación y diagnóstico relacionados con el control pertenecen a la educación física en las necesidades educativas especiales y no al deporte adaptado en el alto rendimiento. Esto ha hecho que en las prácticas del control de entrenadores, médicos y atletas se apoyan en el deporte convencional para atletas sin desviaciones en el desarrollo.
La escasez de referente bibliográfico en el ámbito deportivo para el control médico pedagógico en las necesidades de atletas sordos e hipoacúsicos constituye una problemática actual en el movimiento paralímpico nacional e internacional.
Lo anteriormente planteado dirige la investigación hacia el logro del siguiente objetivo:
Proponer los componentes del control médico pedagógico adecuado a atletas sordos e hipoacúsicos con fines profilácticos.
Desarrollo
La presencia de discapacidades, como la sordera e hipoacusia, provoca que en muchos casos, se desestime la práctica del deporte, viendo ésta como un peligro para la salud, y no como una forma de desarrollar su capacidad física.
Pero si nos proponemos que los discapacitados tengan un desarrollo integral, no podemos dejar de incluir el deporte, la recreación al aire libre, y el ejercicio físico sistemáticos como elementos imprescindibles para el logro de una buena calidad de vida y de una plena integración social.
Por otro lado, según las últimas investigaciones encontradas en la literatura sobre la práctica deportiva en las clases de educación física (Zabala, Viciana y Lozano, 2002; Robles, 2003; Aparecida y Ferreira, 2004), las modalidades deportivas más realizadas son los deportes tradicionales; entre ellos destacan el fútbol, baloncesto, voleibol y balonmano. Los deportes adaptados dentro de las clases de educación física serán un contenido novedoso para nuestros alumnos/as, con el que pretendemos fundamentalmente dotar al alumno/ a del mayor número de vivencias motoras, además de que tomen contacto con nuevas especialidades deportivas.
Por todo lo expuesto anteriormente, se considera que cualquier tipo de actividad deportiva adaptada tiene cabida dentro del currículum de educación física, independientemente de que nos encontremos en el aula con alumnos/ as con algún tipo de discapacidad o no.
Por ello, el judo para sordos e hipoacúsicos constituye una modalidad deportiva fuera de lo tradicional y que por tanto tiene características especiales, como señala Robles Rodríguez (2006): “Las personas con deficiencias auditivas son sujetos que, debido a su discapacidad, tienden a asumir una actitud hiperactiva y curiosa siendo esta dos características fundamentales en su comportamiento, puesto que el hemisferio dañado en el celebro es el de las respuestas rápidas, por esta razón en ocasiones cuando no logran comunicarse o algo les sale mal se sienten impotentes y actúan con genio y violentos por causa de lo ante expuesto (al no lograr una comunicación adecuada).”
El Judo es un deporte que por sus características intrínsecas posibilita que los deficientes auditivos puedan practicarlo sin necesidad de adaptación de materiales u otro tipo de ayudas específicas motivadas por su deficiencia (Arolas, 2002; González, 2002). Las únicas diferencias con respecto al judo convencional las encontramos en algunos aspectos del reglamento. Estas diferencias tienen como fin adoptar ciertas medidas de seguridad que citaremos más adelante.
La práctica del judo por parte de los deportistas sordos e hipoacúsicos está en constante evolución. Tal es así que cada día hay más practicantes en nuestra provincia. Villa Clara en los últimos 6 años es campeón nacional, cuenta con cuatro campeones nacionales y dos subcampeones.
El reglamento de dicha modalidad deportiva se basa en ciertas adaptaciones de las reglas de la IFJ (Federación Internacional de Judo). Las diferencias con el judo convencional son:
Los deportistas sordos deben seguir con la vista toda la acción del árbitro atento a las señales e identificar las mismas.
EL árbitro tocara con sus manos a los competidores sordos para detener el combate.
El árbitro deberá asegurar que los contendientes reaccionen y obedezcan la orden mediante el contacto o toque con las manos y estén al alcance para intervenir de inmediato si es necesario.
Afirmar que la sordera es un impedimento para la práctica del judo es un
error. De hecho, un judoka nunca oye a su adversario durante el combate, porque
se concentra en buscar la fuerza y ganar la posición ventajosa para atacar o
para defenderse del ataque.
Los sordos e hipoacúsicos no tienen ninguna dificultad en apreciar estas
sensaciones corporales. Es la percepción de la fuerza y de las acciones del
adversario lo que permite escoger entre un movimiento válido y otro que no lo
es. Mediante el continuo ejercicio físico de ataques y defensas, se puede
alcanzar el perfeccionamiento del cuerpo y del espíritu.
Importancia del control médico pedagógico a atletas de judo sordos e hipoacúsicos con fines profilácticos
La medicina deportiva es principalmente preventiva, de donde se desprende la necesidad de evaluar la aptitud de los posibles deportistas para la práctica de la actividad competitiva, que al mismo tiempo reporte beneficios psíquicos y físicos; dicha necesidad es aún más evidente en el caso de deportistas discapacitados, más que en el caso de los deportistas normales.
Sin duda, la concesión a las personas discapacitadas de la aptitud para la práctica deportiva competitiva, es el resultado legislativo más importante de los últimos años.
Con el fin de proteger su salud, aquellas personas que tengan una discapacidad física y/o psíquica y/o neurosensorial, que practican alguna actividad deportiva competitiva, deberán someterse previamente a un control específico de su aptitud para el deporte que practican o que desean practicar. Dicho control debe repetirse con periodicidad anual o inferior cuando así lo consideren necesario los médicos.
Lo anteriormente expuesto, y las necesidades planteadas anteriormente, aseveran la importancia de establecer un buen control medico en los atletas discapacitados, sobre la base de las necesidades clínico-médicas, motoras, físico-funcionales, pedagógicas, de comunicación, del lenguaje e higiénica preventivas. A continuación se describen de acuerdo a las dimensiones declaradas con anterioridad.
Realizar una revisión médica periódica específica para personas sordas e hipoacúsicas, de forma previa y durante las distintas etapas de la preparación, así como posterior a la competencia, que incluya las siguientes consideraciones:
Corroborar la clasificación auditiva, ya que cada una de ellas tiene un modo particular y distinto.
Tener en cuenta que a menudo las personas con dificultad auditiva tienen las mismas o mayores dificultades que los sordos en la escucha.
Dominar las bases fisiológicas de la deficiencia auditiva, las cuales deben determinarse por: la agudeza y capacidad auditiva, a través de la audiometría.
Al atleta discapacitado que se incorpora o inicia en este deporte se recomienda aplicar este tipo de control con mayor énfasis, para conocer si esta apto física y mentalmente al enfrentar esta actividad física.
Examen médico del deportista
Examen clínico
Anamnesia.
Inspección visual.
Palpación.
Percusión.
Auscultación.
Pruebas de laboratorio clínico y radiografías
Análisis de laboratorio (sangre, orina, heces fecales, etc.)
Rayos X.
ECG.
Ecocardiograma.
Electroencefalograma, etc.
Audiometría*
Examen del desarrollo físico y constitucional.
Somatoscopía.
Movilidad de las articulaciones.
Antropometría y evaluación de sus resultados.
Examen funcional del deportista
Cardiovascular.
Respiratorio.
Neuromuscular.
Observaciones medico- pedagógicas durante el entrenamiento y las competencias.
Investigaciones científicas en relación con la actividad física deportiva.
Test psicológicos con un estricto seguimiento y evaluación*
Debe destacarse que la realización periódica, en las distintas etapas de la preparación, de la prueba de audiometría permite alertar al entrenador de posibles daños ocasionados por las cargas de entrenamiento. Esto permitirá evaluar y dosificar dichas cargas, o detener la preparación, si el daño es irreversible.
Por otra parte, los test psicológicos deben ser realizados para observar la evolución y desenvolvimiento de estos atletas, tanto en el entrenamiento como en la competencia, es decir, con un estricto seguimiento y evaluación del psicólogo. Con esto se puede lograr trabajar por una mejor coordinación y seguridad, en el atleta, para asumir una actitud positiva respecto a las barreras de la comunicación ocasionadas por su discapacidad.
Tanto los exámenes médicos como los funcionales, se pueden realizar en las distintas etapas o períodos del entrenamiento.
Exámenes previos a la práctica del deporte (clínico y físico).
Exámenes periódicos.
Exámenes complementarios.
Conclusiones
Los componentes del control médico pedagógico desde perspectivas profilácticas, que se aplican a los sordos e hipoacúsicos, se pueden enmarcar en dos dimensiones: examen médico y funcional del deportista, los cuales no son debidamente tratados, tanto en su periodicidad como en las especificidades adaptativas que necesariamente requiere el judo adaptado a estos atletas discapacitados .
La propuesta de control médico pedagógico para judokas sordos e hipoacúsicos se caracteriza por incluir en los exámenes médicos de los deportistas la audiometría, así como en los exámenes funcionales, la aplicación de test psicológicos con un estricto seguimiento y evaluación
La propuesta de inclusión de la realización de pruebas de audiometría y test psicológicos en el control médico pedagógico a aplicar a los judokas sordos e hipoacúsicos, desde perspectivas profilácticas en las distintas etapas de la preparación, permite alertar al entrenador de posibles daños ocasionados por las cargas de entrenamiento, así como trabajar por una mejor coordinación y seguridad en los atletas, contribuyendo a que asuman una actitud positiva respecto a las barreras de la comunicación ocasionadas por su discapacidad.
Nota
* Propuestas del autor, específicas para el control médico de atletas sordos e hipoacúsicos.
Bibliografía
Alba, A. (1989) Micro med. Software. ISCF Manuel Fajardo.
Alonso López, Ramón F. Folleto Digital de Medicina Deportiva. ISCF Manuel Fajardo: C. Habana.
Arma, Luís. El control en el entrenamiento deportivo. Conferencia ISCF Manuel fajardo Facultad Villa Clara. Material para la docencia.
Bermúdez, Israel y al. Consideraciones generales del judo adaptado a ciegos y débiles visuales del alto rendimiento en Cuba.
Brown, Paisan (2005) Consideraciones generales sobre la Educación Física en la Educación Especial. Folleto digital. EIEF.
Berrendees, J. (1970) Barcelona. Tratado de Otorrinolaringología.
Centro Provincial de Medicina Deportiva (1989) Curso de Postgrado Control Medico del Entrenamiento Deportivo. Material impreso. ISCF Facultad Villa Clara. Centro de información Científico Técnica.
Corteza Luís; Pereira, Lázaro (2000) Capacidad condicional. Resistencia.2000. Material Digital para la docencia. ISCF Manuel Fajardo C. Habana.
Colectivo de Judo (2004) La iniciación deportiva y la selección de talentos en Judo. Material impreso y soporte magnético, ISCF. Manuel Fajardo.
Coppenolle, H. Currículo Europeo de Actividad Física adaptada. http://www.jutadeandalucia.es/averroes/recursos/discapacidad-aten.php3 Consultado 17 nov. 2007.
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