Los orígenes del tenis moderno y su evolución hasta la actualidad | |||
*Doctor Europeo en CC. de la Actividad Física y del Deporte Licenciado como número 1 de la promoción en CC. de la Actividad Física y del Deporte Licenciado en CC. Empresariales. Licenciado en Derecho. Diplomado en Fisioterapia Profesor de la Universidad Autónoma de Madrid **Doctora con Mención Europea en CC. de la Actividad Física y del Deporte Máster en CC. de la Actividad Física y del Deporte Profesora de la Universidad de Alcalá y de la Universidad Complutense de Madrid Campeona de España de baloncesto |
Antonio Monroy Antón* Gema Sáez Rodríguez** (España) |
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Resumen El tenis es una actividad deportiva cuyos orígenes más remotos se pueden remontar a las civilizaciones griega, romana y egipcia. Sin embargo, la historia del tenis moderno, tal y como lo entendemos en la actualidad, es mucho más reciente y se puede decir que comienza en el siglo XIII. En este artículo se hará un repaso de la historia del tenis moderno, desde el “jeu de paume” de la Edad Media hasta los comienzos del siglo XX, donde las diferencias ya son mínimas respecto de lo que es en la actualidad. Palabras clave: Tenis. Jeu de paume. Royal tennis. Wimbledon.
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EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 15, Nº 153, Febrero de 2011. http://www.efdeportes.com/ |
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El origen de los juegos de pelota, entre los que se encuentran la pelota vasca y el tenis, se remonta a las civilizaciones griega, romana y egipcia. Asimismo, durante la Edad Media, fueron practicados en las ciudades italianas del siglo XI.
El juego más usual en los comienzos de esta actividad consistía en golpear una pelota con la palma de la mano. Era el denominado “jeu de paume”, introducido en Francia entre los siglos XIII y XIV. Debido al espacio reducido del terreno para practicarlo, la duración del punto era mayor, por lo que resultaba mucho más entretenido para los practicantes y los espectadores. Este juego se llevaba a cabo tanto al aire libre, conociéndose como “longue paume” (palma larga), como en espacios cerrados, denominado “courte paume” (palma corta).
Jeu de Paume
De manera paralela, en Inglaterra también existía una práctica de este juego al que denominaban “Royal o Real Tennis”, una especie de tenis Indoor cuyo nombre deriva del nombre de sus practicantes, reyes y aristócratas.
Durante los siglos XVI y XVII, auténtica Edad de Oro del tenis, o de la Paume, otros países europeos, aunque en menor medida que en Francia e Inglaterra, contribuyeron al desarrollo del juego. Así, fue el italiano Antonio Scaino, en 1555, quien escribió el primer tratado sobre el tenis, el Trattato del Giuoco de la palla di Messer, gracias al que ha llegado hasta nosotros la descripción de los juegos de pelota, sus reglas y normas sobre el atuendo en el siglo XVI.
Trattato del giuoco Della palla di Messer, de Antonio Scaino (1555)
Raquetas e instrumentos utilizados en el Jeu de Paume
También durante este siglo, y en los siglos XVII y XVIII, diversos juegos de pelota, más parecidos al frontón actual, gozaron de gran popularidad en la Europa occidental.
En estas primeras etapas de difusión del tenis todavía predominaba en Europa el sistema sexagesimal. El número 60 era el equivalente al 100 de ahora; por ello al dividir 60 entre los cuatro puntos que había que ganar para hacer un juego se obtenía algo parecido a la actual forma de contar el tanteo: 15, 30, 45. Es evidente que el actual 40 es simplemente una versión abreviada del 45, puesta en práctica cuando se contaba en latín y “quadraginta quinque” se quedaba en “cuadra”, según dice Corderii en 1536 en su obra De corrupti sermones emendatione, & Latine loquendi ratione libervnus.1
En cuanto a contar los puntos de 15 en 15, existen varias teorías al respecto, algunas de ellas relacionando el tanteo con el importe de las apuestas, o con las propias líneas que marcaban las pistas. La más probable es la que se refiere a la importancia del número 60 en la Edad Media.
El declive del tenis comienza en el siglo XVIII. Gran cantidad de pistas desaparecen y otras son destinadas a usos públicos distintos del deporte. Su atención no se centraba ya tanto en la aristocracia y la corte, sino en los militares y estudiantes. A estos últimos se les había prohibido la entrada a las pistas en horario de clases en 1708, mientras que a los militares solo se les permitió hasta 1731.
Poco a poco, la falta de practicantes fue reduciendo el número de pistas y se acabó prohibiendo en 1771 por decreto el empleo de aprendices.
Durante el desastroso reinado del monarca francés Luis XVI se reunió la Asamblea Nacional en el edificio de “Jeu de Paume”, que juró no disolverse hasta que la Constitución del Reino se estableciera sobre bases más firmes.
En el siglo XVIII los reyes prefirieron otras actividades al tenis, y ya en 1789 se produce la Revolución Francesa, a raíz de la cual se prohíben las apuestas y el “Jeu de Paume” y el “Real Tennis” languidecen.
En el caso de Inglaterra el declive del tenis vino de manos del tronco de los Hannover. Joseph Fenn, en 1772, escribió un manifiesto resaltando el abandono del tenis por parte de las clases acomodadas. Sin embargo, este país pudo volver a disfrutar del tenis con la reactivación durante el gobierno de la reina Victoria, gracias a la afición de su marido, el príncipe Alberto.
No ocurrió lo mismo en Francia, donde después la Revolución el tenis no se recuperó. Napoleón lo practicaba de manera muy ocasional, aunque mandó que se mantuvieran las pistas de la Casa Real en buenas condiciones.
En España su práctica se daba sobre todo a nivel popular. Cada región adoptó diferentes formas y reglas. Lo más parecido al tenis fue el trinquete o pelota valenciana, que ha llegado hasta nuestros días con una gran afición.
Ya en la época moderna se consiguen ciertos avances importantes para el tenis. En 1839 se consigue vulcanizar la goma, gran mejora para la calidad de las pelotas. Además, la máquina cortacésped constituyó un adelanto considerable, permitiendo que se pudiera practicar el tenis al aire libre. A este tipo de tenis se le denominó “Lawn Tennis”.
Podemos apreciar, por lo tanto, un paso del “Real Tennis”, practicado únicamente por la realeza y las capas altas, a otros tipos de tenis para un grupo mayor y más heterogéneo de practicantes denominado “Lawn Tennis”.
A un gran número de personas se les ocurrió jugar a la Paume en sus jardines en distintos puntos de Gran Bretaña, pero solamente un militar retirado vio la posibilidad de comercializar este juego y patentarlo. Esto ocurrió en 1873, cuando el mayor Walter Clopton Wingfield redactó las primeras reglas del tenis. Fue un par de años antes cuando Wingfield se reunió con dos amigos para presentarles el juego que decía haber inventado él. Lo denominó “spahairistike”, del griego “sphaire”, pelota. Todo el material necesario venía en una caja. La forma de la pista era similar a la de un reloj de arena. La red medía 1,50 m. a la altura de los postes y 1,40 m. en el centro. En 1875 se introdujo la línea de saque y se rebajó la altura de la red. Dos años más tarde se cambió a una pista rectangular ya con las medidas actuales (23,77 m. de longitud, por 8,23 m. de anchura). Se volvió a bajar la red a la altura de 1 m., y se marcó la línea de saque a una distancia de la red de 7,92 m. La pelota era de goma y el tanteo lo tomó prestado del juego de “raquets” (un set de 11 juegos). En 1878 se estableció el sistema de puntación moderno.
Walter Clopton Wingfield, redactor de las primeras reglas del tenis moderno
En cuanto al nombre, resultó demasiado rebuscado. Fueron sus dos amigos, a los que invitó a conocer su juego, Walter Long y Arthur Balfour, los que sugirieron llamarlo “Lawn Tennis”. De esta manera esta modalidad, con un reglamento más moderno, fue el que pasó a sustituir -como ya se ha mencionado anteriormente- al “Royal Tennis”.
Al hacer referencia a la aparición de los primeros torneos de tenis no se puede olvidar al croquet.
Tras la Revolución Industrial, una gran cantidad de gente pasó a vivir en las afueras de las ciudades, en casas con jardines que tenían espacio suficiente para jugar a este deporte tradicional inglés. El éxito del juego fue tal que los jardines empezaron a deteriorarse, por lo que se tuvo la idea de reunirse para jugar en un lugar concreto destinado únicamente a esta práctica, preservando así los cultivos. En junio de 1870, los practicantes encontraron un terreno en Worple Road, en Wimbledon, naciendo el England Croquet Club. Debido al interés creciente por el tenis, se pintó una pista en uno de los terrenos reservados para la práctica del croquet, en 1875.
Dos años después, debido a la necesidad de comprar una apisonadora, se organizó un torneo para recaudar fondos. Es así como nace el torneo más antiguo de los que se siguen disputando en la actualidad, el de Wimbledon. A este le siguieron el resto de torneos Gran Slam: Campeonatos franceses en 1891, el de Australia en 1905, la Copa Davis en 1900 y la Copa Wightman en 1923.
Con los torneos surgen las primeras figuras de este deporte. El primer campeón de Wimbledon fue Spencer Gore, en 1877, en una final que presenciaron unas 200 personas. Los primeros campeones realmente famosos fueron los hermanos Renshaw, en especial William, considerado el inventor del remate y que venció en 7 ocasiones en la final individual, 6 de ellas consecutivas, alcanzando un total de 14 títulos en diversas categorías. Los gemelos Renshaw dominaron en Wimbledon durante una década y fueron realmente las estrellas del tenis de la época.
Willian y Ernest Renshaw, dos de las primeras figuras del tenis moderno
Fue una mujer, Mary Outerbrige, la que introdujo y desarrolló el tenis en Estados Unidos. Los Outerbrige y los Bwight fueron los promotores del tenis en este país.
El tenis formó parte del programa de los primeros Juegos Olímpicos de la era moderna en 1896 en Atenas. En los Juegos de París de 1900 se introdujo la competición femenina y en Estocolmo, en 1912, se incorporó la modalidad de dobles mixtos por países. Durante esta época el domino correspondió a los representantes británicos que acumularon diez títulos olímpicos hasta 1920.
El tenis continuó siendo deporte olímpico hasta los Juegos Olímpicos de París en 1924. Durante los años que duraron las dos guerras mundiales se interrumpieron los principales torneos, a excepción del de Estados Unidos. Así se alcanza la época actual del tenis, sin apenas cambios de importancia.
Nota
Existe una habitual confusión en esta referencia, que muchos estudiosos del tema sitúan en 1580, cosa imposible puesto que el autor, Mathurin Corderii (traducido por Cordier al inglés) murió en 1564.
Bibliografía
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WIMBLEDON OFFICIAL WEB SITE: http://www.wimbledon.org, fecha de consulta 15 de diciembre de 2011.
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