¿Qué adaptaciones generales necesitaríamos para adecuar el  juego popular de ‘Las cuatro esquinas’ para los distintos  tipos de discapacidad (física, sensorial y psíquica)?
	Diplomado en Educación Física por la Universidad de Huelva (España)	Luis Julián Muñiz Adame instantaneo2007@hotmail.com
	Resumen           A diario nos encontramos a la hora de realizar nuestra práctica física con numerosas problemáticas (niños/as sin la adecuada ropa, climatología adversa, esa individualización personal de la actividad y si tenemos algún alumno/a con necesidad específica de apoyo educativa…) pues no es más difícil llegar a conseguir nuestro objetivo como docente. He aquí unas adaptaciones a un juego en concreto pero que pueden servir de comodín a otros juegos de las mismas características.           Palabras clave: Adaptaciones. Juego. Discapacidad.
	EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 15, Nº 151, Diciembre de 2010. http://www.efdeportes.com/

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    Como premisa puedo establecer que las adaptaciones deben responder a un proceso de normalizaciones realizadas en un juego ya conocido, aunque adaptado según las características del grupo, del contexto y de la discapacidad de que se trate.

    Como profesional debo de estar dispuesto a realizar cuantas adaptaciones sean necesarias para facilitar la intervención de alumnos/as en cualquier tipo de necesidad educativa. Debo adecuarme a las diferencias y peculiaridades de los alumnos/as.

• Nombre del juego: “Las Cuatro Esquinas”.

• Objetivos

  • Participar con agrado en cualquier actividad física independientemente de su capacidad.

  • Apreciar las distancias, el sentido y la velocidad en los desplazamientos.

  • Conocer las estrategias básicas de un juego.

• Terreno y material: Delimitado. Conos o señalizadores para delimitar el terreno de cada grupo.

• Nº de participantes: Grupos de cinco jugadores.

• Situación inicial: Se señalizaran tantos cuadrados como grupos tengamos. En cada esquina se sitúa un jugador/a, más uno/a que se colocará en el centro. La distancia entre los vértices será proporcional a la edad de los jugadores.

• Desarrollo y normativa: el jugador/a situado/a en el centro gritará ¡“4 esquinas”!. En ese momento todos los jugadores / as deberán ocupar otra esquina, incluido el jugador central. De esta manera, siempre quedará un jugador/a sin esquina que a su vez se situará en el centro y seguirá el juego.

Adaptaciones

a.     Alumnos con discapacidad física

• Reducir el espacio para el alumno/a con discapacidad (vértices más cercanos al mismo).

• Modificar el desplazamiento de los compañeros / as para igualar la desventaja (en cuclillas, de rodillas, en cuadrupedia...).

• Acciones intermedias durante el desplazamiento por los compañeros/as para reducir la desventaja (saltos, giros...).

• En el caso de alumnos/as en silla de rueda deberá prestarse especial atención a los posibles choques y se aumentará el espacio entre los vértices.

b.     Alumnos con discapacidad sensorial

• Alumnos con ceguera total

  • Juegan de la mano de un compañero/a (orden de rotación entre todos los compañeros).

  • Se colocan cuatro colchonetas o cuatro trozos de moqueta en el suelo de cada esquina de 2 cms. De grosor, para conocer la situación de las esquinas, acompañado de algún estímulo sonoro (silbato, campanilla, tambor, llamamiento del profesor...).

  • Cintas de policía par a delimitar el espacio y el alumno/a corre tocando la cinta, mientras va corriendo.

  • Reglas modificadas: no dirigirse a la esquina que vaya el alumno/a ciego.

  • El profesor se situará en un lugar adecuado para evitar choques y próximo al jugador/a con la discapacidad.

• Alumnos con sordera

• Dependiendo del grado, se utilizará un gesto visual conocido por todos para los cambios.

c.     Alumnos con discapacidad psíquica

• Para alumnos/as con discapacidad leve y moderada no serán necesarias adaptaciones concretas; no obstante, presento las siguientes recomendaciones: materiales llamativos y motivantes como esquinas (grandes, colores llamativos, pañuelos...) y facilitar la comprensión del juego (canal de comunicación verbal –explicación- y visual –demostración-) con la atención individualizada por parte del profesor/a.

• Para alumnos con discapacidad severa y profunda tendrán muchos problemas para comprender el juego y será muy difícil su participación.

    Como conclusión, decir que de cualquier forma siempre será necesaria una sensibilización del grupo para conseguir que las adaptaciones sean aceptadas de una manera natural por parte de todos / as. Debemos reconocer que no todos los juegos serán susceptibles de integración para todas y algunas discapacidades: la adaptación de los juegos debe pasar por un correcto análisis de las características de los alumnos/as para los que se adapta.

Bibliografía

• GUIAS PARA LA ATENCIÓN EDUCATIVA DE ALUMNOS CON NECESIDADES EDUCATIVAS ESPECIALES (2001). Junta de Andalucía.

• VV.AA. (2001). El juego y los alumnos con discapacidad. Paidotribo. Barcelona.

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