Valoración de las capacidades físicas intrínsecas al judo en secundaria |
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Maestro en Educación Física Máster Oficial en Innovación y Docencia en Ciencias de la Actividad Física y la Salud Entrenador de Judo |
Víctor Serrano Huete (España) |
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Resumen Se pretende en el presente estudio de investigación valorar la relación de dependencia o no entre el Índice de Masa Corporal y las capacidades físicas de fuerza y flexibilidad de un grupo de judokas. Para ello, y de acuerdo con los datos y referencias obtenidas en la revisión bibliográfica, se midieron las capacidades físicas (fuerza y flexibilidad) en 29 sujetos. De esta forma, se obtuvieron como resultados valores del 1 al 10 para cada capacidad, así como el IM. Posteriormente, se relacionaron entre sí los valores y porcentajes de 0dichas capacidades físicas, para comprobar su desarrollo y homogeneidad, de lo que se extrajo que, aun teniendo distintos valores medios, tienen un desarrollo equitativo puesto que mantienen intervalos muy similares. Por último, tampoco hubo relación significativa entre el IMC y las variables de fuerza y flexibilidad. Palabras clave: Judo. IMC. Fuerza. Flexibilidad.
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EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 15, Nº 147, Agosto de 2010 |
1 / 1
1. Marco conceptual
1.1. El judo. Origen y conceptos básicos
A finales del siglo XIX, un estudiante de literatura de la Universidad de Tokio y practicante de ju–jitsu (literalmente “arte de la suavidad”), Jigoro Kano, se propuso depurar las antiguas formas de lucha para crear un método de enseñanza principalmente basado en la educación física. Ello evolucionó en el judo: ju (camino, vía) + do (suavidad) = judo (camino de la suavidad).
Kano creó en 1882 el primer centro que impartió Judo. Lo llamó Kodokan (casa que enseña el camino). Fue tal el auge del Kodokan que en menos de 7 años contaba con 1500 judokas y en 1898 se contabilizaban 3783 (Taira, 2009).
La expansión del judo a nivel internacional comienza en 1902. Yoshitsugu Yamashita (alumno de Kano), fue invitado por el presidente de EE. UU. Theodore Roosevelt para realizar una demostración de judo en Washington. Fue tal el éxito de la misma que Yamashita fue contratado como profesor de judo en la Academia del Ejército de la Marina de dicho país.
Se completó dicha expansión mundial con la inclusión del judo al movimiento olímpico. Hizo su aparición por primera vez en Tokio ´64 cuando formó parte como deporte de exhibición. Fue en las exitosas olimpiadas de Barcelona ´92 cuando entró en la categoría de deportes olímpicos.
1.2. Características del judo
El judo es un deporte de contacto con oposición directa que tiene por objetivo poner la espalda del compañero en el suelo (con seguridad) y/o mantenérsela durante un tiempo determinado. A partir de aquí, entran en juego un entramado de gestos técnicos, tareas con incertidumbre, situaciones – problema [Serrano, 2005], resolución de las mismas, grupos musculares y capacidades físicas (básicas y coordinativas), así como los elementos de lógica interna de este deporte: puntuaciones, tiempo, espacio, adversario y desarrollo del combate.
En la realización de los gestos técnicos y acciones específicas de este deporte intervienen todos los grandes grupos musculares. A su vez, para que esta intervención sea exitosa, se ponen en juego gran parte de las CFB y CC. De ellas, nos serán relevantes para el presente estudio las capacidades físicas intrínsecas al judo.
1.3. Las capacidades físicas intrínsecas al judo
Como componentes de la condición física, las capacidades físicas básicas vienen definidas por Pacheco (2003) como factores que determinan la condición física de un individuo y que le orientan o clasifican para la realización de una determinada actividad física y posibilitan, mediante un trabajo regulado, que un sujeto desarrolle al máximo su potencial físico. López (2000) incluye dentro de otro componente de la condición física, las CC: el equilibrio y la coordinación.
Como vimos anteriormente, el judo tiene características particulares que lo diferencian de otros deportes. Por ello, se seleccionaron las capacidades físicas básicas y coordinativas que forman las capacidades físicas intrínsecas al judo. Estas son: fuerza (Bonitch, 2007), velocidad de reacción [Almansa, Franchini, Sterkovicz, Inamuna, Calmet y Ahmaidi, 2008; Grosser, 1992), resistencia (Grosser, 1992), flexibilidad (Martínez, 2002), coordinación (Carratalá, Pablos, Carques y Carratalá, 2005), agilidad y equilibrio (Hernández, 1985). En el presente estudio nos centraremos en las capacidades de fuerza y flexibilidad.
1.3.1. Flexibilidad
En contra de lo que se podía pensar a su traducción, (camino de la suavidad-flexibilidad) el judo no es un deporte que precise de manera importante esta cualidad física. Bien es cierto que existen grandes diferencias con relación al requerimiento de flexibilidad en este deporte. La gran variedad de gestos técnicos no puede concretar una afirmación sobre la importancia que tiene para una u otra, de forma específica.
La manifestación de la flexibilidad en la gran mayoría de las técnicas de judo está en relación con la flexibilidad dinámica o activa. En tan solo algunas situaciones técnicas puntuales, la flexibilidad se manifiesta de forma pasiva. Estas situaciones son siempre realizadas durante el trabajo de judo – suelo (ne waza).
1.3.1.1. Concepto
Álvarez del Villar (1983) define la flexibilidad como la capacidad de realizar movimientos amplios. Por su parte, García (2002) añade que la ejecución de estos movimientos de gran amplitud articular pueden realizarse por sí mismo o bajo la influencia de fuerzas externas. López (2004) incide en que estas amplitudes articulares van acompañadas de elongaciones musculares y ligamentosas correspondientes.
1.3.1.2. Clasificación
Fundamentalmente hay dos tipos de flexibilidad: la flexibilidad estática, que se refiere a la amplitud de movimientos respecto a una articulación sin poner énfasis en la velocidad, y la dinámica, que corresponde a la capacidad de utilizar una amplitud de movimiento de la articulación en la ejecución de una actividad física, tanto a velocidad normal como acelerada (Mora, 1995).
De la misma manera, según el tipo de movimiento a realizar, se puede hablar de tres tipos de flexibilidad (Matveyev, 1983):
Flexibilidad absoluta: referida a la capacidad máxima de elongación de las estructuras músculo – ligamentosas. Este es el tipo de flexibilidad que mediremos en los sujetos de la investigación.
Flexibilidad de trabajo: grado de elongación que es necesario alcanzar durante el trascurso de la ejecución motriz específica de un deporte dado.
Flexibilidad residual: nivel de elongación, siempre superior al del trabajo, que el deportista debe desarrollar para evitar rigideces que puedan afectar a la coordinación dinámica general del movimiento o a su expresividad.
1.3.2. Fuerza
Desde el punto de vista físico, y según la Ley de Newton, la fuerza es igual a la multiplicación de la masa por la aceleración y su unidad fundamental es el Newton.
Pero es sin duda una cualidad fundamental de la que dependen las demás cualidades condicionales. Es la cualidad que más puede desarrollarse por entrenamiento, pudiendo llegar a triplicarse en poco tiempo con un entrenamiento adecuado y prolongarse durante toda la vida con un óptimo tratamiento. Supone un punto de referencia importante en los programas de salud, con independencia de la edad en la que se aplique, en la prevención, educación motriz y rehabilitación de patologías (Párraga, 2000).
1.3.2.1. Concepto
El concepto de fuerza se entiende desde una perspectiva mecánica, basada en las leyes de Newton, teniendo en cuenta la acción que ejerce un cuerpo sobre otro. Se definiría como la capacidad de vencer a una resistencia externa o reaccionar frente a ella mediante tensión muscular. En este sentido habría que determinar, entre otros, el tipo de resistencias a vencer, la velocidad necesaria para vencer la resistencia y el tipo y grado de tensión muscular necesaria. La otra perspectiva, objeto de estudio, sería la biológica – fisiológica y se fundamenta en el grado de tensión muscular. Se definiría como la capacidad de vencer o reaccionar ante una resistencia mediante la tensión muscular (Párraga, 2000).
Esta definición la enriquece González y Gorostiaga (1995) aportando que la fuerza es la capacidad de la musculatura para producir la aceleración o deformación de un cuerpo, mantenerlo inmóvil o frenar su desplazamiento.
1.3.2.2. Clasificación
Tomando las consideraciones de varios autores (Kuznetsov, 1984; Manno; 1999; Párraga, 2000), se establecen tres tipos de fuerza:
Fuerza máxima: es la mayor tensión que puede desarrollar el sistema neuromuscular, o la capacidad de vencer una resistencia máxima, situada entre el 95 y 100%, mediante una contracción muscular voluntaria.
Fuerza explosiva: capacidad neuromuscular de vencer una resistencia con la mayor velocidad de contracción posible. La aplicación de la fuerza se haría en el menor espacio de tiempo posible y con resistencias moderadas (30 – 70%).
Fuerza – resistencia: corresponde a la capacidad del organismo de resistir a la fatiga en los esfuerzos de fuerza de larga duración.
1.4. Planteamiento del problema
El judo se lo considera como uno de los deportes que más capacidades físicas y coordinativas engloba, por lo que se hace necesaria una evaluación de dichas capacidades en un grupo de judokas en edad secundaria (13 – 16 años) para valorar el estado de las mismas y posibles actuaciones futuras para mejorar alguna o varias de estas capacidades.
En cuanto la fuerza, ha sido multitud la bibliografía referida a su estudio (Adams, 1992; Bonitch, 2007, Garcia, 2002, Hernández, 1985 y Martínez, 2002), por lo que seria interesante compararla con el resto de capacidades que influyen en judo.
1.5. Hipótesis
Los datos de IMC (índice de masa corporal) no influyen directamente, o de manera significativa en los valores de las capacidades de fuerza y flexibilidad.
2. Método
2.1. Sujetos
Un total de 29 judokas pertenecientes a la etapa de educación secundaria formaron parte de la muestra del presente estudio. Ellos siguieron los siguientes criterios de inclusión y exclusión:
Inclusión |
Exclusión |
|
|
Se considera representativa la muestra de 29 sujetos siguiendo los estudios de Bonitch (2007), Carratalá, Pablos, Carques y Carratalá, (2005), Ruiz (2005) y Almansa, Franchini, Sterkovicz, Inamuna, Calmet y Ahmaidi (2008). Los sujetos siguen la fórmula de selección de muestra intencional (Tójar y Matas, 2009).
Todos los sujetos participaron voluntariamente, previa autorización paterna (al ser menores de edad) en la presente investigación.
2.2. Materiales e instrumentos
Datos antropológicos |
Cinta métrica estandarizada. Báscula de uso para personas EKS 8832. Precisión 0,1 kg. Peso máximo 150 kg. |
Flexibilidad |
Sistema sit and reach. Medidas: 35x45x32. Medida máx. 200 cm. Unidad mínima de medida: 1mm. |
Fuerza |
Baseline Hydraulic Hand Dinamometer: este modelo mide los valores máximos de fuerza de flexión estática de la mano. El rango de medida es de 2kg. a 90,00kg, siendo su unidad mínima de medida de 2kg. |
2.3. Variables
2.3.1. Variable dependiente
VD: valores de las capacidades físicas fuerza y flexibilidad.
2.3.2. Variables independientes
VI3: peso.
VI4: talla.
VI5: IMC.
2.3.3. Variables de confusión o extrañas
VC1: Asistir a judo con poca asiduidad (menos de 4 horas a la semana).
VC2: Practicar otros deportes de manera continuada en el tiempo y con cierta asiduidad (más de 4 horas en semana y más de 2 años de experiencia en dicho deporte o deportes).
2.4. Diseño
En la presente investigación se llevó a cabo un diseño observacional de casos referencia, apoyándose en las tablas de referencia de Martínez (2006). Su guión es:
Medidas de peso y talla.
Calentamiento general. Ejercicios de movilidad articular y de flexibilidad de los principales grupos musculares.
Salto horizontal.
Dinamometria.
Sit and reach.
Lanzamiento de balón medicinal
2.5. Procedimiento
El presente estudio de investigación trata la evaluación de las capacidades físicas de alumnos en educación secundaria que practican judo con cierta asiduidad, según las características descritas anteriormente.
Dicho proceso de evaluación comprende un total de 5 pruebas, a un total de 29 alumnos. Estas se desarrollaron en una sesión de tarde, durante el mes de Mayo de 2010 en las instalaciones del Club Deportivo Athenas Jaén.
Peso / talla |
Se pesó y midió a los sujetos una vez, descalzos y sólo con camiseta ligera y pantalón de la misma forma, antes de realizar los ejercicios de calentamiento y flexibilidad. |
Índice de masa corporal (%) |
Dicho índice se calcula relacionando el peso y la talla con la siguiente fórmula: IMC = peso (kg) / altura2 (m) |
Salto horizontal |
Se anotará el nº de cm. avanzados, considerándose el mejor de dos intentos y midiendo desde la parte más atrasada de los pies que toque el suelo. No se permite apoyar las manos ni rebotar con los pies. |
Prueba de sit and reach |
Sentado con el tronco recto y apoyando los pies sobre el cajón, el sujeto extiende los brazos y flexiona el tronco hasta su posición máxima sin flexionar las rodillas ni despegarse del suelo, sin rebote. Se anotará el mejor de dos intentos con descanso previo. |
Prueba de lanzamiento de balón medicinal |
De pie, con los pies separados a la anchura de los hombros y el balón agarrado de forma simétrica con ambas manos. A la señal, el sujeto lanzará el balón por encima de la cabeza, sin despegar los pies del suelo (se permite levantar los talones). Se ejecutan dos lanzamientos, anotándose el mejor de ellos. |
2.6. Análisis estadístico
Se utilizó el paquete estadístico Pasw Statistics 18.0 for Wondows ®. Con ello, se realizó en primer lugar un análisis descriptivo de medias y frecuencias, así como la desviación y porcentaje de error estándar. Además, se aplicó un análisis de comparación entre medias para una misma muestra, siendo el intervalo de confianza del 95%. Para ello se categorizaron las variables de IMC, fuerza, y flexibilidad en 1 (nivel bajo), 2 (nivel medio) y 3 (nivel alto). Se aplicaron, mas tarde, tablas de contingencia para relacionar distintas variables entre sí, con su respectivo coeficiente de correlación de Pearson.
3. Resultados
3.1. Valores de la variable experiencia IMC
La siguiente tabla muestra los resultados descriptivos de los sujetos (valores mínimos y máximos, media y desviación típica) para las variables peso, talla e IMC:
Descriptive Statistics |
|||||
|
N |
Mínimum |
Máximum |
Mean |
Std. Deviation |
Peso |
29 |
39,9 |
84,9 |
62,707 |
11,9425 |
Talla |
29 |
150 |
178 |
165,03 |
7,576 |
IMC |
29 |
16,5 |
30,0 |
23,331 |
3,6335 |
Valid N (listwise) |
29 |
|
|
|
|
3.2. Valores de las capacidades físicas fuerza y flexibilidad
Los valores medios del grupo en cuanto a las capacidades físicas fuerza y flexibilidad se representan del 0 al 10 y se basan en las tablas de referencia, según los resultados obtenidos para cada prueba, de Martínez (2001 y 2006) así como en las tablas elaboradas según las plantillas y el soporte informático del mismo autor y la respectiva significación entre ambas:
One Sample Test |
||||||
|
Test Value = 0 |
|||||
t |
Df |
Sig. (2-tailed) |
Mean Difference |
95% Confidence Interval of the Difference |
||
Lower |
Upper |
|||||
Flexibilidad |
11,943 |
28 |
,000 |
6,88724 |
5,7060 |
8,0685 |
Fuerza |
17,963 |
28 |
,000 |
5,99597 |
5,3122 |
6,6797 |
3.3. Relación del IMC con las variables de fuerza y flexibilidad
3.3.1. Relación del IMC y la variable fuerza
En la presente investigación se pretende relacionar la variable IMC con la de fuerza. Dicha relación, y su significación, se muestra en las tablas que acompañan a continuación, mostrando en primer lugar, la correspondiente a las variables fuerza e IMC. Las categorías 1, 2 y 3 hacen referencia respectivamente a valores bajos, medios y altos. Esto sirve para todas las variables estudiadas que han sido categorizadas para el análisis de resultados:
Crosstab |
||||||
|
Fuerza |
Total |
||||
1 |
2 |
3 |
||||
IMC |
1 |
Count |
1 |
6 |
1 |
8 |
% within IMC |
12,5% |
75,0% |
12,5% |
100,0% |
||
% within fuerza |
16,7% |
37,5% |
14,3% |
27,6% |
||
% of Total |
3,4% |
20,7% |
3,4% |
27,6% |
||
2 |
Count |
1 |
8 |
4 |
13 |
|
% within IMC |
7,7% |
61,5% |
30,8% |
100,0% |
||
% within fuerza |
16,7% |
50,0% |
57,1% |
44,8% |
||
% of Total |
3,4% |
27,6% |
13,8% |
44,8% |
||
3 |
Count |
4 |
2 |
2 |
8 |
|
% within IMC |
50,0% |
25,0% |
25,0% |
100,0% |
||
% within fuerza |
66,7% |
12,5% |
28,6% |
27,6% |
||
% of Total |
13,8% |
6,9% |
6,9% |
27,6% |
||
Total |
Count |
6 |
16 |
7 |
29 |
|
% within IMC |
20,7% |
55,2% |
24,1% |
100,0% |
||
% within fuerza |
100,0% |
100,0% |
100,0% |
100,0% |
||
% of Total |
20,7% |
55,2% |
24,1% |
100,0% |
3.3.2. Relación del IMC con la variable flexibilidad
De igual manera que con la fuerza, se pretende relacionar en la siguiente tabla el IMC con la variable flexibilidad, con la misma división de categorías que en el anterior apartado (1: nivel bajo, 2: nivel medio, 3: nivel alto):
Crosstab |
||||||
|
Flexibilidad |
Total |
||||
1 |
2 |
3 |
||||
IMC |
1 |
Count |
3 |
0 |
5 |
8 |
% within IMC |
37,5% |
,0% |
62,5% |
100,0% |
||
% within flexibilidad |
37,5% |
,0% |
33,3% |
27,6% |
||
% of Total |
10,3% |
,0% |
17,2% |
27,6% |
||
2 |
Count |
2 |
4 |
7 |
13 |
|
% within IMC |
15,4% |
30,8% |
53,8% |
100,0% |
||
% within flexibilidad |
25,0% |
66,7% |
46,7% |
44,8% |
||
% of Total |
6,9% |
13,8% |
24,1% |
44,8% |
||
3 |
Count |
3 |
2 |
3 |
8 |
|
% within IMC |
37,5% |
25,0% |
37,5% |
100,0% |
||
% within flexibilidad |
37,5% |
33,3% |
20,0% |
27,6% |
||
% of Total |
10,3% |
6,9% |
10,3% |
27,6% |
||
Total |
Count |
8 |
6 |
15 |
29 |
|
% within IMC |
27,6% |
20,7% |
51,7% |
100,0% |
||
% within flexibilidad |
100,0% |
100,0% |
100,0% |
100,0% |
||
% of Total |
27,6% |
20,7% |
51,7% |
100,0% |
4. Discusión
4.1. Valores de las variables peso, talla e IMC
Los valores de estas variables han sido elaborados mediante un análisis de frecuencias, a través del cual se obtuvieron las siguientes características generales de los sujetos:
En cuanto al peso, se obtuvo un peso medio de 62,70 kg (±11,94), siendo la talla media de 165 cm (±7,57).
El porcentaje medio de IMC de los sujetos fue de 23,33 kg/m2 (±3,63).
4.2. Relación del índice de masa corporal (IMC) con las variables de fuerza y flexibilidad
4.2.1. Relación del IMC con la variable fuerza
Como se expresa en el apartado de resultados, se categorizaron para esta relación las variables en tres niveles, según los valores obtenidos tras las diversas pruebas: 1 (nivel bajo), 2 (nivel medio) y 3 (nivel alto).
Respecto a la relación entre el IMC y la fuerza, no se obtienen diferencias significativas (0,38 de coeficiente de correlación de Pearson, Chi – cuadrado). Esto se debe a que no necesariamente los alumnos con mayor IMC obtienen valores más altos de fuerza, y/o viceversa, ya que, como se muestra en la figura 10, la mayoría de los alumnos con niveles medios y altos de fuerza, tienen un nivel de IMC medio. De la misma manera, y en contra de lo que se podría presuponer en un principio, la mayoría de los alumnos que poseen un nivel bajo de fuerza, poseen un IMC de nivel alto.
4.2.2. Relación del IMC con la variable flexibilidad
Con la misma categorización que la relación descrita en el anterior punto, tampoco se encontraron diferencias significativas de la relación entre el IMC y la flexibilidad (0,38). Al igual que con la fuerza, no necesariamente el IMC incide en los valores de flexibilidad de los sujetos. Así, la mayoría de los sujetos con menor nivel de flexibilidad, tienen a su vez nivel bajo o alto de IMC, siendo los sujetos con nivel de IMC medio los que presentan, en general, mejores niveles de flexibilidad (mayoría de niveles altos y medios).
De esta forma, se puede afirmar que no existe relación significativa entre las cualidades físicas fuerza y flexibilidad con el IMC. Así, se puede llegar a la conclusión de que ello se puede deber a que los niveles de IMC obtenidos no son muy extremos, según la cinta métrica utilizada para tal efecto (pág. 22).
5. Conclusiones
Una vez que se han mostrado y analizado los resultados, se puede concluir que:
No influyen directamente los valores del IMC sobre los de las capacidades físicas fuerza y flexibilidad, puesto que según los datos obtenidos, no se puede establecer que los sujetos con mayor IMC tienen más fuerza o más flexibilidad, o que por el contrario, los sujetos con menor IMC tienen niveles de fuerza y flexibilidad bajos.
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