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Introducción

    El comportamiento de los deportistas en las circunstancias especiales de las competencias es fruto de la singular combinación de diversos e innumerables factores. Esta ineludible verdad resalta la necesidad de considerar el mayor número de elementos posibles, ignorar algunas variables que pueden controlarse casi siempre pone en riesgo los resultados deportivos que de los atletas se espera. Es por ello que “Casi siempre en las acciones de dos contrarios se manifiesta la lucha de grupos de especialistas muy representativos y es imposible alcanzar la victoria sin la utilización del rico arsenal de todos los medios de la lucha deportiva recomendados por ellos” (1).

    Entre los elementos que los psicólogos, como especialistas del deporte, suelen tener en cuenta con mayor reparo, la respuesta emocional figura como uno de los primarios. Por lo general las manifestaciones emocionales entorpecen el rendimiento, aunque “concebir el hecho competitivo como una situación de estrés tiene a veces sus ventajas” (2).

    Otro aspecto sustancial es el análisis pormenorizado de las características de la personalidad de los atletas. Pues estas mediatizan las reacciones emocionales que se emiten. Pero baste con saber que “…las condiciones físicas y psíquicas relativamente estables que un hombre puede emplear cumpliendo una tarea determinada… deben contribuir a un aumento de la eficiencia para lograr los objetivos de la actividad”¨ (3). Las propiedades del sistema nervioso como bases fisiológicas del temperamento son algunas de estas condiciones.

    Un agente determinante de la respuesta de estrés que emiten los deportistas es el nivel de excitación al que se encuentren expuestos. Tales niveles se relacionan fundamentalmente con la complejidad de la tarea y el sentido personal que para el atleta tenga la misma. En estas condiciones las características del temperamento tiene gran significación, pues aseguran la respuesta inhibitoria protectora del sistema nervioso (SN) ante estos estímulos fuertes y sostenidos, contribuye en la racionalización de la energía psíquica, así como ayuda a superar los estados afectivos negativos fruto de los fracasos parciales en la actividad.

    Este trabajo se orienta a la exploración de estas características, considerándose además el nivel de influencia o la posible relación que presentan con las respuestas de estrés predominante que emiten los atletas. Variables estas que determinan el éxito en las competencias deportivas.

Material y método

    La muestra está compuesta por 12 atletas varones, de los Equipos Nacionales de Mayores de Lucha Libre y Lucha Grecorromana, tomándose 2 atletas de las divisiones 55Kg, 60Kg, 66Kg, 74Kg, 84Kg y 96Kg respectivamente. La edad deportiva de estos fluctúa entre los 10 y 15 años.

    Se emplearon los instrumentos: Test de Temperamento (4). Es un test objetivo, que consta de 56 ítems, basado en las teorizaciones de Eysenck y Tieplov sobre los temperamentos. Utiliza una distribución porcentual para describir las tendencias temperamentales, apoyado en los presupuestos de la combinación de estas tendencias; y Escala Autovalorativa de Reacciones Frente a las Competencias elaborada por González, con el objetivo de medir, a través de un reporte subjetivo del propio atleta, la magnitud en que tienden a desarrollar las reacciones de eutress y distress en las competencias deportivas. El sujeto se enfrenta a situaciones reales descritas breve y compresiblemente, las cuales deberá juzgar en una escala de 1 a 5 como característica de su tendencia comportamental.

    Previamente los atletas respondieron a una entrevista semi-estructurada que se les realizó. Con ella se perseguía, primero establecer rapport (lograr un ambiente de confianza y familiaridad con los sujetos), lo que prepararía el terreno para obtener información fiel sobre sus características. Profundizar en los diferentes temas e integrar la información que se obtuviera con los resultados de las pruebas aplicadas. Por último se considera el valor de la entrevista como elemento activo que le imprime autenticidad y coherencia a todo el proceso de diagnóstico psicológico de la personalidad, correlacionando el dato cuantitativo con los elementos de carácter cualitativo del proceso de análisis.

    El procedimiento de análisis estadístico se llevó a cabo mediante el uso del programa: Paquete Estadístico Windows. En su variante Estadística Descriptiva, evaluamos la Media y la Desviación Standard, para determinar valores promedios de las variables. En el caso de la Matriz de Correlación de datos de Spearman relacionamos 2 ó más variables.

Resultados

    Los resultados obtenidos con relación a la tendencia temperamental de estos atletas ofrece las siguientes distribuciones: La tendencia temperamental predominante es la Sanguínea (.82), seguida por la Flemática (.66), la Colérica (.51) y por último la Melancólica (.48). Ver (tabla 1).

Tabla 1. Estadística descriptiva. Tendencia temperamental y respuesta de estrés

Variable	N	Media	Mínimo	Máximo	Desv. Stand.
Sanguíneo	12	.824167	.670000	.970000	.076212
Colérico	12	.511667	.280000	.640000	.093111
Flemático	12	.665833	.510000	.750000	.076332
Melancólico	12	.485833	.300000	.700000	.102643
Eutress	12	.795833	.660000	.930000	.079938
Distress	12	.355000	.200000	.530000	.108586

    Por otra parte, la respuesta de estrés que mayormente manifiestan estos deportistas es la de Eutress. Contrariamente la respuesta de Distress tiene una presencia mucho menor en la muestra estudiada.

    La relación entre la tendencia temperamental de estos atletas y la respuesta de estrés que los caracteriza durante las competencias, aparece reflejada en la (Tabla 2). La sanguinidad temperamental se asoció de manera significativa al predominio de la respuesta de eutress. Así mismo, son los melancólicos los deportistas que sufren distress con mayor frecuencia e intensidad.

Tabla 2. Correlación entre tendencia temperamental y respuesta de estrés

Temperamento/ Estrés	Eutress	Distress
Sanguíneo	.61(*)	.18
Colérico	.24	.45
Flemático	.25	.29
Melancólico	-.55	.62(*)

    La información obtenida como resultado de las entrevistas a los atletas fue consonante con la suministrada por las respectivas pruebas que se les aplicaron. Esto proporcionó mayor credibilidad y coherencia al dato cuantitativo, así como niveles de profundidad al posterior análisis y discusión de estos resultados.

Discusión

    Esta distribución coincide con la obtenida por otros autores (4) y revela la adecuación del temperamento sanguíneo a las demandas de la actividad deportiva. Esta exige una óptima velocidad de reacción y acción para asumir iniciativas ofensivas y defensivas sensibles de reorganización inmediata según las circunstancias. Suponiendo características típicas de un sistema nervioso fuerte, equilibrado y móvil.

    En términos de conveniencia seguiría el flemático, también fuerte y equilibrado, distinguiéndose del sanguíneo en la movilidad de los procesos nerviosos. A diferencia de este último, el flemático puede ser más inerte, y resultarle más difícil romper un estereotipo para imponer otro durante la actividad. Sin embargo, puede soportar grandes cargas de trabajo y conservar su equilibrio en situaciones muy difíciles, cualidades que resultan importantes para el luchador deportivo.

    Por ese mismo orden encontramos el colérico, propenso a manifestar desbalances a favor de la excitación o la inhibición, lo cual rebasaría las posibilidades del sistema nervioso para manejar los grandes potenciales generados desde la propia actividad. Gozando sin embargo de gran movilidad y fortaleza de los procesos de excitación e inhibición, algo necesario para que el luchador logre sustituir un proyecto táctico por otro, y hacerlo en condiciones de déficit de tiempo.

    Sin embargo el melancólico seria el menos idóneo para esta actividad deportiva. Los inmensos niveles de carga física y psíquica a la que se exponen los luchadores durante entrenamientos y competencias, demandan de una fortaleza de estos procesos, cualidad de la que carece en esencia esta tendencia temperamental.

    Las relaciones significativamente positivas entre la sanguinidad temperamental y la respuesta de eutress se sustenta en que los sujetos extrovertidos (clásicos sanguíneos) en condiciones de alta estimulación (propias de la Lucha) se implican más y funcionan mejor. Coincidiendo esta descripción con la típica respuesta de eutress, en la cual el deportista goza de un elevado control de la tarea y predominan a nivel subjetivo el optimismo, el placer por en la actividad y la seguridad en sus propias fuerzas, mientras que desde el punto de vista fisiológico prevalece la producción de catecolaminas y las respuestas simpáticas. Estos resultados son congruentes con los obtenidos por Eysenck y Tieplov (5). Por su parte los atletas melancólicos (introvertidos de elevado neuroticismo) sufren distress con mayor frecuencia experimentando sensaciones de angustia, inseguridad e incertidumbre, mientras a nivel fisiológico predomina la producción de cortisol, precipitando el agotamiento y resultando nocivo para la salud cuando aparece con reiterada frecuencia. (2, 6 y 7)

    Se concluye que la tendencia temperamental predominante que presentan los deportistas estudiados es la sanguínea, como también la respuesta de estrés que manifiestan mayormente en las competencias es el eutress. Podemos decir que las distintas respuestas de estrés que en las competencias tienden a expresar estos atletas, suelen estar asociadas considerablemente a sus respectivas tendencias temperamentales.

    Para posteriores investigaciones en el tema seria recomendable realizar pruebas de terreno que plasmen los resultados en tiempo real, donde los atletas se encuentren en presencia de competencias relevantes, considerando la importancia del dato empírico con relación al tema emocional, así como incrementar la muestra de estudio, para darle un mayor nivel de confiabilidad y validez a los datos suministrados, tomando en cuenta la representatividad que debe exigir una investigación de este tipo

Referencias bibliográficas

1. Rodionov, A. V. “Psicología del enfrentamiento deportivo” Editorial Orbe Ciudad de la Habana (1981).

2. González, L. G. “La respuesta emocional del deportista, Una visión científica del comportamiento ante el reto competitivo”. Editorial Deporte. Ciudad de la Habana (2004)

3. García Ucha, F. Psicología del deporte en el Alto Rendimiento. Instituto de Medicina Deportiva, Cuba (2003)

4. Fuentes, M. y Cazadezus, J. “Informe sobres los resultados del Servicio Científico Técnico”. TEMTEMAG al equipo Cuba de Lucha Libre. ICPV, Victoria de Girón. (2003).

5. González, L. G. Condiciones internas y actividad deportiva. Variables de indispensable consideración en la preparación psicológica. EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 7, N° 43, Diciembre de 2001. http://www.efdeportes.com/efd43/stress.htm

6. Álvarez, M. A. Stress. Un enfoque psiconeuroendocrino. Tesis para optar por el grado de Doctor en Ciencias Psicológicas. Univ. de La Habana, 1987.

7. González, L. G. Enfrentamiento al stress competitivo en atletas de alto rendimiento. EFDeportes.com, Revista Digital. Buenos Aires, Año 6, N° 32, Marzo de 2001. http://www.efdeportes.com/efd32/stress.htm

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revista digital · Año 15 · N° 144 | Buenos Aires, Mayo de 2010   © 1997-2010 Derechos reservados