Educación por el movimiento: juegos motores en educación infantil | |||
Orientador Escolar. Maestro de Educación Infantil por la UNED. Maestro de Educación Física por la Universidad de La Laguna, Tenerife Maestro de Audición y Lenguaje por la Universidad de Cádiz Licenciado en Psicología por la Universidad de Granada Licenciado en Psicopedagogía por la Universidad de Granada |
José Rodríguez Ruiz (España) |
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Resumen El juego y el movimiento constituyen dos rasgos inherentes al ser humano desde su nacimiento. El juego motor se perfila como una de las principales estrategias metodológicas de aprendizaje en la etapa de educación infantil, convirtiéndose en una fuente inagotable para el desarrollo de competencias, valores, actitudes y normas. La investigación-acción con nuestro alumnado puede convertirse en la mejor forma para el diseño, implementación y evaluación de juegos motores acordes con los objetivos y contenidos que nos proponemos en nuestros diseños curriculares de etapa. Los juegos pueden organizarse sistemáticamente en ficheros lúdicos en función de distintos parámetros. Palabras clave: Juego. Juego motor. Estrategia de aprendizaje. Proyectos curriculares de etapa. Investigación-acción. Reflexión |
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http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 14 - Nº 141 - Febrero de 2010 |
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1. Justificación
El juego constituye una pauta de comportamiento universal en todas las culturas. Sus raíces son tan profundas en el tiempo que, para su explicación, es preciso no perder de vista, incluso, el comportamiento animal también caracterizado por el juego. Así, corrientes educativas derivadas de la Ilustración, de la Institución Libre de Enseñanza y de la Escuela Nueva, junto a las últimas reformas educativas llevadas a cabo en España (LOGSE, LOCE y LOE), tuvieron y tienen en el juego uno de sus principales medios educativos.
A lo largo de la historia, la literatura educativa ha ofrecido numerosas explicaciones acerca de la necesidad de jugar que tenemos tanto los adultos como los niños y niñas, desde su consideración como conducta atávica o forma de recapitulación de la filogénesis (Stanley Hall) hasta su efecto catártico o liberador de tensiones (Sigmund Freud). Otros autores, como Jean Piaget, Lev Vygostky, Fiedrich Fröebel y Ovidio Decroly, han destacado su papel como forma de aprendizaje, autoformación y crecimiento armónico.
En cuanto a la conceptualización del juego, también nos encontramos con un variado abanico de posibilidades. Ahora bien, la mayoría de las definiciones suelen incluir algunas de las siguientes características:
El juego es placentero, divertido, etc.
No tiene finalidades extrínsecas, sus motivaciones son intrínsecas.
Es espontáneo y voluntario.
Implica la participación activa de los jugadores y jugadoras.
Indirectamente supone un aprendizaje y forma de experimentación con la realidad.
El juego motor intenta alejarse lo menos posible de esas características, para no perder su esencia como juego, pudiéndose definir por tres rasgos fundamentales:
Su intencionalidad educativa. Busca el desarrollo de competencias, objetivos y contenidos relacionados con el desarrollo motor, socio-afectivo y cognitivo de los niños y niñas.
Su componente motórico, de movimiento. No se trata de un juego estático o de mesa, sino de un juego que pone en marcha los aspectos motrices de las personas, además de los afectivos y cognitivos.
Su finalidad última debe ser siempre el goce, la alegría y la diversión de los participantes.
En definitiva, este método de trabajo pretende utilizar el juego motor en la educación infantil desde una perspectiva educativa y formativa, sin renunciar nunca a sus aspectos más placenteros y divertidos.
Siguiendo a Bernard Aucouturier, trataremos de llegar a una comprensión global del niño y de la niña en la que la motricidad, la afectividad y el desarrollo cognitivo forman un todo dinámico que el profesorado estimula para que el desarrollo de su alumnado sea global y armónico.
Especialmente en la etapa infantil, el juego adquiere una importancia vital como estrategia metodológica por excelencia. Sin menoscabar la importancia del juego libre y espontáneo, pretendemos crear un fichero de juegos motores que nos garantice el trabajo adecuado de todos los aspectos del desarrollo motor (esquema corporal, lateralidad, tonicidad, etc.), afectivo-social (relaciones, autoconcepto, etc.), y cognitivo (conceptos espaciales, temporales, lógico-matemáticos, etc.), además de los contenidos que los diseños curriculares proponen para esta etapa, incluyendo la educación en valores, los temas transversales y la multiculturalidad.
Desde un punto de vista pedagógico, el momento educativo de los juegos motores suele y debe constituir para los niños/as de estas edades (3 a 6 años) una fuente inagotable de refuerzo y entusiasmo, que ayuda a la realización y refuerzo de otras actividades más sistematizadas y regladas (iniciación lecto-escritura, iniciación al cálculo, adquisición de hábitos, etc.).
No olvidamos tampoco que la denominada, por Jean Le Boulch, educación por el movimiento permite un aprendizaje más fácil de las habilidades básicas que el alumnado adquiere en la escuela (lecto-escritura, cálculo, etc.), además de constituir un excelente medio de intervención en niños y niñas con necesidades educativas específicas (intelectuales, sensoriales, físicas, afectivo-emocionales y socio-culturales).
En síntesis, el juego motor surge con la intención de convertirse, dentro de una perspectiva de trabajo globalizado, en un recurso didáctico de primer orden que ayude al desarrollo y consecución de los objetivos, contenidos y competencias que marcan nuestros Proyectos Curriculares de Etapa. Además, puede contribuir positivamente a la intervención con alumnado con necesidades educativas específicas y al fomento de una educación en valores y multicultural.
2. Objetivos didácticos
Con la implementación de los juegos motores pretendemos alcanzar los siguientes objetivos:
2.1. Conocimiento de sí mismo y autonomía personal
Adquirir la coordinación y el control dinámico general del propio cuerpo.
Aplicar la coordinación visomanual necesaria para manejar y explorar los objetos del entorno.
Utilizar las propias posibilidades motrices, sensitivas y expresivas en las actividades lúdicas.
Identificar y valorar las posibilidades y limitaciones propias y ajenas en la ejecución de juegos motores.
Tener iniciativa para planificar y resolver situaciones lúdicas, y manifestar una actitud tendente a superar las dificultades que se planteen pidiendo la ayuda necesaria.
2.2. Conocimiento del entorno
Conocer y respetar las normas de comportamiento en el desarrollo de los juegos motores.
Conocer y participar en los juegos populares de su comunidad y de otras culturas.
Planificar y ordenar su acción en función de la información recibida constatando sus efectos en la realización práctica de los juegos motores.
Establecer relaciones entre la propia actuación y las consecuencias que de ella se derivan.
Orientarse y actuar autónomamente en los espacios y tiempos del juego motor.
Integrar social y afectivamente al alumnado con necesidades educativas específicas y al alumnado emigrante.
2.3. Lenguajes: comunicación y representación
Utilizar y asimilar las nociones espacio-temporales por medio de los juegos motores.
Utilizar los juegos motores para evocar situaciones, acciones, deseos y sentimientos tanto reales como imaginarios.
Descubrir e identificar los elementos básicos del lenguaje corporal por medio de los juegos motores.
Utilizar las técnicas y recursos básicos de las diferentes formas de expresión y representación corporal para aumentar sus posibilidades comunicativas.
Comprender y reproducir juegos motores de tradición popular autóctona y de otras culturas.
Desarrollar el lenguaje oral y escrito, en sus vertientes expresiva y comprensiva, mediante la ejecución de juegos motores.
Utilizar los juegos motores para el desarrollo de conceptos, procedimientos y actitudes relacionados con los diferentes centros de interés.
Valorar los juegos motores como instrumento de transmisión de información y disfrute.
3. Contenidos
Para no extendernos demasiado vamos a enumerar únicamente los contenidos conceptuales, distribuidos por bloques temáticos:
Tabla de Contenidos |
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Bloques temáticos |
Contenidos conceptuales |
Conocimiento de sí mismo y autonomía personal |
El cuerpo y el movimiento: conocimiento del cuerpo, expresión corporal, coordinación perceptivo-motriz, etc. Identidad e imagen personal: esquema corporal, lateralización, tonicidad, autoconcepto, etc. La vida social: cooperación, normas sociales, vínculos afectivos, etc. |
Conocimiento Del entorno |
· Los objetos: propiedades físicas, vestidos, utensilios, juguetes, etc. · Acercamiento a las Culturas: juegos tradicionales, fiestas, canciones, etc. |
Lenguajes: comunicación y representación |
· Expresión/comprensión oral: gesto y movimiento, juego simbólico y dramático. · Expresión musical: canciones tradicionales, canciones de corro y canciones motrices. · Lenguaje oral: dramatización, canciones y juegos motores. · Expresión plástica: materiales plásticos, confección de juguetes para los juegos motores. · Expresión lógico-matemática: cuantificadores, códigos simbólicos, medición, etc. |
Educación en Valores |
· Juegos de cooperación y oposición, dramatización, etc. |
Coeducación |
· El cuerpo, emociones y sentimientos, juego dramático, familia, profesiones, juguetes. |
Educación Salud |
· Alimentación, higiene personal, actividad. |
Educación Vial |
· Juegos motores y dramáticos, circuitos, señales, normas tráfico, etc. |
Interculturalidad |
· Juegos y vocabulario de otras culturas, etc. |
4. Método de trabajo
Como profesionales de la educación infantil, optamos por una metodología basada en la investigación-acción, intentando aprovechar el ingente recurso formativo que constituye nuestro contacto directo con los procesos de enseñanza-aprendizaje que se desarrollan en nuestras aulas. Se trata de un proceso de enriquecimiento de los modelos teóricos a partir de la práctica docente reflexiva, que nos sirve para perfeccionar nuestras estrategias y métodos de enseñanza-aprendizaje.
En definitiva, planificamos acciones educativas, en nuestro caso juegos motores, con una intencionalidad formativa, tendente a la consecución de objetivos, contenidos y competencias curriculares, para su posterior implementación en el aula. A continuación, la reflexión conjunta del profesorado con sus alumnos y alumnas intentará evaluar tanto el diseño como los resultados de dichas acciones, desde una perspectiva constructiva que permita rediseñar los juegos motores para mejorar su efectividad y adaptación al alumnado.
De forma más concreta, el método de trabajo sigue las siguientes pautas de acción:
Diagnóstico inicial o evaluación de los grupos de alumnos y alumnas con los que vamos a trabajar (niveles, ratios, detección de alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo, alumnado inmigrante, etc.).
Valoración de los recursos materiales y humanos de los que podemos disponer (sala de psicomotricidad, patios, padres, madres, maestros/as especialistas, etc.).
Selección de los objetivos y contenidos de los Proyectos Curriculares de Etapa que vamos a trabajar.
Diseño de la forma de registrar los juegos motores y la evaluación de su efectividad en la aplicación práctica (autorregistros, escalas de observación, listas de control, etc.).
Elaboración de juegos motores en función de los bloques temáticos seleccionados, del alumnado y de los materiales disponibles.
Aplicación de los juegos motores en el aula.
Evaluación de los juegos (consecución de objetivos, grado aceptación del alumnado, variantes, mejoras, etc.) por el maestro/a y sus alumnas y alumnos.
Valoración global, selección y archivo de todos los juegos aplicados en la etapa por los maestros y maestras implicados.
Reflexión crítica común de todos los procesos metodológicos desarrollados.
5. Evaluación
La evaluación de los juegos motores implementados en las aulas de infantil tiene un carácter formativo, continuo y global. Sirve de retroalimentación para mejorar, se realiza constantemente y afecta a todos los aspectos del juego. La evaluación constituye la antesala de una valoración final que determinará la selección y ubicación en un fichero lúdico.
Para mejorar la eficacia de la evaluación de los juegos, podemos utilizar unos parámetros de medida que sistematicen y organicen el hecho evaluativo. En este sentido, proponemos los siguientes criterios de evaluación:
Objetivos didácticos, contenidos y competencias que se trabajan con el juego.
Cantidad y calidad de las variantes del juego.
Conceptos, procedimientos y actitudes relacionados con los distintos centros de interés que se desarrollan en el juego.
Nivel de comprensión de la trama o desarrollo del juego por parte del alumnado.
Respuesta de los niños y niñas en la ejecución del juego (motivación, fatiga, etc.). Evaluada mediante:
Votación de los alumnos y alumnas de los juegos que más le gustan.
Grabación con video.
Escala de observación sistemática:
Escala de observación sistemática |
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Ítems de respuestas de los niños/as a los juegos |
Si |
No |
Participan todos y todas durante el juego motor. |
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Solicitan el juego cuando vamos a la sala de psicomotricidad |
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Necesitan que les marquen las directrices del juego constantemente |
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Muestran curiosidad en la primera explicación del juego |
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Se cansan rápidamente de jugar |
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Muestran actitudes cooperativas y colaboradoras |
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Se muestran agresivos y agresivas |
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Muestran respeto a las competencias motrices de los demás |
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Muestran actitudes diferenciadas en función del sexo |
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*Las casillas sombreadas se valoran con 1 punto, las demás cero puntos. Puntación máxima: 10 puntos.
Contenidos psicomotrices que se trabajan con el juego motor. Podemos utilizar la siguiente lista de control:
Contenidos psicomotores |
Si |
No |
Esquema corporal |
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Reconocimiento o utilización la cabeza, hombros, pecho, abdomen/barriga, cintura, brazos, codos, piernas, rodillas, pies. |
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Relajación corporal (tensión-distensión muscular) |
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Localización de los órganos de los sentidos |
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Reconocimiento y aceptación de las características corporales |
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Percepción |
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Percepción visual |
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Percepción auditiva |
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Percepción olfativa |
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Percepción táctil |
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Percepción gustativa |
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Percepción de los movimientos de expansión y relajación tórax /respiración |
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Percepción espacio-temporal |
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Percepción temporal |
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Percepción espacial |
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Coordinación |
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Coordinación dinámica global del cuerpo |
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Coordinación global grupal (parejas, tríos, etc.) |
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Coordinación segmentaria (brazos, piernas, etc.) |
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Coordinación visomanual |
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Lanzamientos/recepciones |
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Equilibrio estático y dinámico |
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Lateralización |
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Distinción a un lado y a otro |
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Diferenciación derecha-izquierda |
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Afianzamiento de la dominancias (ojo, pie y mano) |
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Expresión y comprensión |
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Expresión corporal |
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Comprensión de los mensajes corporales de otros |
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Dramatización |
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6. Fichero de juegos motores
Los juegos motores seleccionados, después de su implementación en el aula, se registran en un fichero lúdico organizado por niveles educativos (3, 4 y 5 años). Lo ideal es que el diseño, implementación, valoración y clasificación de los juegos motores sea un trabajo compartido y común de todos los tutores y tutoras que componen el segundo ciclo de la Educación Infantil en el centro.
La confección de las fichas de los juegos motores contemplará, al menos, las siguientes características:
Denominación.
Nivel: edad.
Tipología: motor, escenificación primaria o secundaria y dramatización.
Roles/personajes.
Trama o desarrollo.
Contenidos.
Materiales.
Variantes.
Valga de ejemplo, el siguiente juego cuya evaluación práctica ha resultado tremendamente positiva en el nivel de tres años:
NOMBRE EL GUSANO LOCO |
NIVEL 3 AÑOS |
TIPO Escenificación primaria |
ROLES/PERSONAJES Todos los niños y niñas son los anillos componentes del “gusano loco”. |
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TRAMA/DESARROLLO Los niños y niñas, sentados uno detrás de otro sobre un banco sueco, se mueven hacia delante ante la señal sonora del maestro/a (silbato). Cuando el primero tiene que salir del banco por el movimiento de los que vienen por detrás, corre al final del banco y se sienta nuevamente reincorporándose al gusano, y así sucesivamente. |
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CONTENIDOS Discriminación auditiva. Coordinación de movimientos. Carrera. Delante/detrás. Ordinales: primero y último. |
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MATERIALES Banco sueco, silbato. |
VARIANTES - Cuando están todos sentados se les indica con la mano adelante, atrás, a un lado a otro lado, y todos a la vez ejecutan esos movimientos. - Velocidad de ejecución rápida y lenta. |
Conclusiones
La hora de la rutina de los juegos motores, de la “salita” de psicomotricidad, del “espejito mágico” o de cualquier otra denominación que surja en el contexto del aula, constituye un momento de especial entusiasmo en las pequeñas y pequeños donde se vivencian y comparten multitud de experiencias, emociones y sentimientos.
Así, embargados en el halo de intensa emoción que provoca el movimiento lúdico libre o dirigido, consiguen desarrollar una ingente cantidad de competencias, conceptos, procedimientos y actitudes, tanto físicas como cognitivas y sociales. Los juegos motores, bien utilizados, también pueden representar un importante papel como contingencias de refuerzo positivo o sanción, esta última siempre en forma de tiempo fuera (time out).
Es preciso hacer referencia al momento de la presentación de los nuevos juegos motores. Especialmente en el primer nivel, tres años, las primeras veces cuesta mantener la atención de todo el grupo durante la explicación, por lo que hacen necesarias las explicaciones repetidas, las ejemplificaciones y las modificaciones en pleno juego. No obstante, si adecuamos las exigencias motrices y cognitivas del juego a los rasgos psicoevolutivos de cada nivel, esas pequeñas dificultades quedarán fácilmente subsanadas. Además, a veces nuestro diseño inicial, realizado desde una mentalidad adulta y centrada en los objetivos curriculares, es totalmente desbancado por el fluir de los acontecimientos y nuestro erróneo planteamiento lúdico inicial queda totalmente modificado y adaptado a las exigencias impuestas por nuestros pequeños alumnos y alumnas.
Por último, adelantar algunas posibilidades para enriquecer ese constante proceso de investigación-acción que realizamos con nuestras niñas y niños en el diseño, la implementación y la evaluación de los juegos motores. Por una parte, pueden ser viables y productivas las acciones dirigidas a la confección de ficheros de juegos motores interculturales, aportados por nuestro alumnado inmigrante o sus familias. Por otra parte, se pueden diseñar juegos motores musicales contando con la colaboración de los especialistas en música de los centros educativos.
Referencias
ARNÁIZ, P. (1988). Fundamentación de la práctica psicomotriz en B. Aucouturier. Madrid: Seco Olea.
BUCHER, H. (1976). Estudio de la personalidad del niño a través de la exploración psicomotriz. Barcelona: Toray-Masson.
GARVEY, C. (1985). El juego infantil. Madrid: Morata.
LE BOULCH, J. (1996). La educación por el movimiento en la edad escolar. Barcelona: Paidós.
SÁNCHEZ, F. (1986). Bases para una didáctica de la Educación Física y el Deporte. Madrid: Gymnos.
STAMBAK, M. (1973). Tono y Psicomotricidad. Madrid: Pablo del río.
TORO, S. y CORPAS, F. J. (1994). Educación Física en la enseñanza primaria. Málaga: Aljibe.
VAYER, P. (1974). El diálogo corporal. Barcelona: Científica-Médica.
revista
digital · Año 14 · N° 141 | Buenos Aires,
Febrero de 2010 |