Adaptaciones curriculares en la clase de Educación Física con niños con necesidades educativas especiales |
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Docente de Educación Física Primaria Esc. N° 18 D.E. 15. Media E.M.E.M. N°2 D.E.16 E.M.E.M. N°5 D.E.15. Escuelas Técnicas Raggio Secretaría de Educación, GCBA |
Lylia Cassarino Badessich (Argentina) |
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Resumen Los profesores de Educación Física debemos manejarnos de diversas formas con un niño con necesidades educativas especiales, integrando al niño en lo que podamos; lo cual no significa la totalidad de la clase. Eso no implica discriminación, sino una adaptación acorde a cada uno de los alumnos, no sólo al de necesidades especiales. Hay muchas formas de clases prácticas para lo mismo. Debemos saber que contamos con la ayuda de celadores que estarán presentes durante toda la clase, ayudando al niño en lo que sea necesario. Además, es muy útil pedir ayuda al grupo para adaptar actividades y juegos a las posibilidades de todos. Palabras clave: Necesidades educativas especiales. Educación Física. Inclusión. Adaptaciones curriculares 2º
Foro de Educación Física Escolar favorecer
la inclusión, el desarrollo social y la igualdad de oportunidades" |
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http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 14 - Nº 140 - Enero de 2010 |
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Fundamentación teórica
Tener un hijo es una maravilla. Tener un hijo discapacitado es una desilusión ya que no es el soñado. Es diferente.
1. Cómo lo vive la familia
Cada familia tendrá un “duelo” diferente. Éste no se elabora de una vez y para siempre sino que se renueva periódicamente según las etapas de la vida de ese hijo: cuando ingresa o egresa de una institución, ante el embarazo de otros hijos, con la entrada en la adolescencia, ante una ocupación laboral.
La familia atraviesa una situación de crisis y no hay crisis sin situaciones que duelen. Necesita ser elaborada. Esto significa enfrentar los sentimientos, expresarlos, compartirlos con otras personas. Con esto se logra un necesario alivio.
Cada familia en el camino de la vida irá sorteando obstáculos ante lo que le ocurre implementando soluciones creativas.
2. Discapacidad
Al pensar en un discapacitado pensamos en tolerarlo, no perturbarlo más, tenerle consideración, sobreprotegerlo o por el contrario rechazarlo.
Pensamos en un principio normativo que nos indica que no debemos discriminar.
Según la Organización Mundial para la Salud (OMS), la discapacidad se define como una restricción o ausencia de la capacidad para realizar una actividad en la forma en que se considera normal para un ser humano.
Hablar de un discapacitado es estar pensando en un individuo y su limitación biológica lo que no puede llegar a hacer. Su límite, que puede ser transitoria o permanente.
Es por eso que el concepto de discapacidad, que se entiende como tener dificultades en el ajuste al medio, lo reemplazamos por el de “necesidades educativas especiales” para no trabajar desde la limitación sino desde las posibilidades.
3. Diferencia entre los discapacitados y los que no lo son
Según el Dr. Jaime Citrinovitz, se considera que en ciertos casos la diferencia entre unos y otros comienza a borrarse. Aquí entran todos los casos en que la capacidad de realizar algo no depende tanto del individuo sino de las condiciones que el medio social le facilite, o por lo menos lo que le nieguen. Un ejemplo son las barreras arquitectónicas de las ciudades que dificultan el desplazamiento de muchas personas.
4. Necesidades educativas especiales
El considerar las necesidades educativas especiales nos permite trabajar el tema de la diversidad.
Al hablar de necesidades educativas especiales nos preguntamos: ¿qué requiere el sujeto que tiene un problema? ¿No llega a construir lo enseñado? ¿Hay incomunicación con el medio? ¿Tiene problemas para construir los aprendizajes? ¿Qué se le puede brindar para no anularlo? ¿Tiene problemas de Infraestructura?
La integración de los diversos nos conduce al principio de normalización. Es un principio evaluativo, miramos que necesita y que podemos brindarle para no anularlo.
El concepto de normalización significa aceptar al otro, aceptar la diversidad de personas distintas a mi y con ello modificar la actitud del medio social.
En la diversidad están inmersos niños y jóvenes con dificultades de tipo motor, sensorial, emocional, intelectual.
5. No discriminar vs. integración
No discriminar tiene que ver con lo normativo, con el no deber, con la libertad de oportunidades y que debe ser bien tratado por sus semejantes.
La integración es valorativa, tiende a normalizar el medio, no trato de tolerar al otro lo que implica un esfuerzo por mi parte, sino que es fraternal, hay reciprocidad, se reconoce al otro y se lo necesita.
6. ¿Qué busca la integración?
Busca eliminar barreras sociales y barreras arquitectónicas. Estrechando contacto físico. Teniendo un contacto espontáneo y natural con el medio. La integración social es lo que posibilita el aprendizaje.
7. ¿Quiénes son los niños con necesidades educativas especiales?
Comprende a niños con problemas sensoriales, visuales, auditivos, motores, emocionales, intelectuales y con trastornos del lenguaje.
8. Desde el niño a integrar
Un niño con discapacidad no busca que le tengan consideración ni privilegios, eso lo pensamos los adultos. Él desde una silla de ruedas puede jugar a las cartas, figuritas, hacer trampa, sonreír, contar chistes.
La integración busca que la persona forme parte de un grupo, una comunidad o una sociedad, a la que él mismo puede brindarse y de la que forma parte activa.
Integrar a un niño con necesidades educativas especiales implica un compromiso por parte de todo el cuerpo docente, auxiliar y cooperadores. Lo debe llevar a una interacción dignificante reduciendo distancias sociales, tales como el temor al contagio, distanciamientos afectivos y físicos, carencias de sistemas educativos y barreras arquitectónicas.
Debo reconocer al otro como un ser individual respetando sus posibilidades y limitaciones a fin de evitar exigencias que lo frustren o ridiculicen
Aceptar al otro implica comprender que tiene algo para darme.
9. Desde la escuela
La escuela comprende el proceso de aprendizaje respetando la diversidad. A este tipo de escuela la llamamos “Escuela inclusiva”. A partir de los años ’90 la Escuela Común trabaja para ser integradora respetando la diversidad. Para ello como docentes debemos adaptarnos y reorganizar nuestro trabajo.
No se trata que los niños con necesidades educativas especiales sean tantos que no se pueden ubicar en establecimientos para tal fin. Sino que teniendo en cuenta cada caso tratamos de insertarlo en la sociedad.
10. Desde la Dirección
Debe recibir a los padres de un niño con necesidades educativas especiales brindando su cordialidad y buscando integrar al pequeño. Solicitará información al médico tratante además de comprobantes. Pedirá un celador y una maestra integradora, quienes colaborarán con la tarea en la escuela.
Coordinará el trabajo de los docentes del grado, maestra integradora, celador, con gabinete psicopedagógico.
Reunirá a los padres con situaciones similares.
Si para llegar al grado del niño se debe subir escaleras, la Dirección mediará para cambiar con un grado que se encuentre en planta baja; a fin de eliminar barreras arquitectónicas. También conversará con los cooperadores la posibilidad de construir rampas de acceso a la escuela (fijas o móviles) en los lugares que sean necesarios.
Propondrá a la cooperadora la comunicación con infraestructura de la Ciudad de Buenos Aires para que construyan rampas de acceso en las esquinas desde la casa del niño hasta la Escuela.
Ya que el programa de acción mundial para las personas con discapacidad dice que se deben reconocer los mismos derechos y brindar iguales oportunidades que a todos los demás seres humanos.
11. Desde los docentes
En los docentes el tema genera una confusión. Por una parte se habla de normalización, o sea, que la persona con discapacidad actúe de la forma más cercana a la que no tiene discapacidad. Por otra parte decimos que hay que respetar las diferencias. Esta ambivalencia resulta perjudicial. Por ello siempre que sea posible debemos preguntarles a ellos mismos y a sus padres la mejor forma de tratarlos.
Los docentes buscamos la igualdad de oportunidades y de posibilidades en los educandos. Debemos acompañarlo, orientarlo y no sobreprotegerlo ni anularlo.
Con esto el medio social se torna más amplio y menos restrictivo.
El docente del grado tendrá en cuenta que el niño deberá faltar para asistir a su médico, que podrá tener horario reducido o que no podrá subir escaleras. El maestro celador podrá copiarle lo que le falta para que complete en la casa o sino puede escribirle. Será necesario ubicarlo en la primera fila si tiene inconvenientes de tipo sensoriales, tanto visuales como auditivos.
El docente deberá adaptar la currícula que le permite la normalización del medio escolar.
Cuando los problemas de discapacidad son tan severos que impiden la convivencia en el ámbito escolar, estas personas estarán mucho mejor en pequeños grupos, donde recibirán trato personalizado acordes a las necesidades especiales y particulares de cada individuo.
12. Logros en la integración de un niño con necesidades especiales
Relacionarse con otros niños y tener un lugar en el grupo escolar y social donde escucha y es escuchado.
Desarrolla y aumenta su autoestima.
Reconoce sus posibilidades y limitaciones.
Conoce las vivencias de los demás por medio de la comunicación y contacto.
Integrarse disminuirá el rechazo, aislamiento y segregación.
Asume la responsabilidad de su propia vida.
13. Desde el profesor de Educación Física
El profesor de Educación Física deberá contar con un informe del médico tratante, ya que debe estar atento a la diversidad de cada una de las discapacidades, detallando las actividades que el niño puede realizar con él y las que no puede llevar a cabo. A partir de allí trataremos de organizar las actividades contando con el apoyo del celador en todo momento que así lo requiera. De ser necesario, hará la clase con él.
Un profesor de Educación Física, por su condición de tal, deseará que todos sus alumnos trabajen durante su clase. Pero en este caso un niño con necesidades educativas especiales no siempre lo podrá hacer. Tal vez pueda realizar un juego, otras ayudará o no podrá realizar ninguna actividad. Muchas veces deberemos preguntarle a él silo puede hacer o no, o si necesita ayuda.
Debemos tener en cuenta que la mayoría de los niños con necesidades especiales tienen un plan kinesiológico. Por ello cuando no puede acompañar al resto en una actividad puede realizar su plan de ejercicios.
Tampoco debemos adaptar “todas las clases y todo el tiempo”.
Conocí a una profesora que, en su afán de no discriminar, realizaba todos los ejercicios de lanzamiento a la altura del niño cuya discapacidad consistía en ser extremadamente bajo. O sea, que todas las actividades no deben estar supeditadas a las limitaciones del niño, porque así no adaptamos, sólo privamos a los que sí pueden.
Un niño en silla de ruedas, con una pierna o mano ortopédica es una situación especial en el gimnasio. Después de saber las limitaciones del niño, no nos pongamos limitaciones nosotros. El niño realizará todo lo que él pueda, en algunos momentos será bueno preguntarle si podrá realizar esa actividad o juego.
Cuando no, será nuestro asistente por ejemplo sosteniendo la soga que saltarán los otros. Por su puesto que él sabe que es más agradable saltar que sostener, pero también sabe que en ese momento, su limitación se lo impide.
En otras podremos adaptar la currícula normalizando el medio escolar. Cuando la imaginación se nos acabe, es bueno solicitar al mismo grupo cómo podríamos adaptar el trabajo para no darle ventajas a él o desventajas al grupo.
Implementar recorridos es una adaptación curricular que colabora en la adaptación ya que nos permite dedicarnos un poco más al niño que lo necesite, mientras los otros tienen actividades.
Otra forma es que en una “mancha venenosa”, por ejemplo, cuando le toca ser al niño con necesidades educativas especiales todos caminemos en lugar de correr; hasta que él atrape a otro y continuemos corriendo.
Es interesante dejar comenzar el juego y si es necesario adaptarlo; ya que muchas veces el grupo lo deja pasar sin tocarlo o el mismo chico trata de desarrollar su propia adaptación pasando tan lentamente que sus compañeros no lo tocan. Lo presencié en una “mancha pulpo”: la finalidad se cumple, todos los niños trabajan, participan y se divierten.
Si el grupo escolar debe asistir al plan de natación, no tendremos mayores inconvenientes ya que en el agua no hay diferencias porque es un medio que los contiene.
Se citará al padre como a todos los que conforman el grupo a una reunión donde se le informará el viaje hasta la pileta, quiénes lo acompañarán, indumentaria, revisación médica y cómo funciona el plan. Los padres tomarán sus recaudos con su hijo, como los demás padres.
Un niño participó del plan de natación, asistiendo con su silla de ruedas y celador. Algunos que no pueden caminar, en el agua son pececitos. Muchas veces forma parte de la misma rehabilitación del niño.
La realidad muestra que algunos niños sin necesidades educativas especiales pierden el plan porque los padres no los llevan a la revisación previa.
Sabemos que un niño en silla de ruedas con espina bífida no volverá a caminar, entonces podremos implementar una forma para que el grupo de pares no se ponga en el lugar del otro. ¿Cómo? Proponiendo una salida al lugar donde el niño se rehabilita, como por ejemplo el Instituto Nacional de Rehabilitación del Lisiado. Allí podremos concertar un día con su kinesiólogo para conocer el lugar y realizar allí una clase pero todos sentados en silla de ruedas que allí nos prestarán.
Es emocionante sentarse en una silla de ruedas e intentar jugar una mancha, una carrera o sólo desplazarse por el lugar hacia delante o atrás.
Otra forma que tenemos para que el grupo se ponga en el lugar del otro es con papel de diario y cinta de embalar. Invitando a los niños que lo deseen a vendarse un brazo, piernas (como silla de ruedas), ojos u oídos.
Adaptación curricular de la clase de Educación Física con un niño con necesidades educativas especiales
I. Niño de Sala de 5 años (pre-escolar)
Lucas es un niño con hipoxia en el nacimiento lo que le produjo una hemiplejia y leve retraso mental. Su andar es diferente a los otros chicos cuando camina, y cuando corre parece que se va a caer. Pero no es así, ya que esto es normal en él. Tiene dificultades para expresarse: habla lento y a veces no se le entiende. Cuenta con apoyo psicopedagógico que envía todos los informes necesarios y una familia que lo contiene.
Objetivos
Que el alumno:
Afiance sus posibilidades de movimiento en forma global;
Integre nuevas destrezas a su acervo motor general: rol adelante;
Coordine sus habilidades motrices básicas para sortear y trasponer obstáculos.
Contenidos
Desplazamientos hacia delante sobre banco zueco;
Saltos hacia delante con piernas juntas y separadas;
Desplazamientos sobre colchoneta rodando y rolando hacia delante.
Metodología
Entrada en calor por medio de una macha congelada. La adaptación será poner cuatro congeladores, entre ellos Lucas, y un solo sol.
Recorrido con cuatro estaciones, tres le resultarán conocidas y una no, la del rol adelante será la de la dificultad. Si la cantidad de niños es impar, el grupo de Lucas tendrá menos niños.
Estación 1: caminar sobre banco zueco
Estación 2: rodar (palito de amasar) sobre colchoneta
Estación 3: rayuela construida con aros. Desplazarse por medio de saltos hacia delante, separando y juntando pies; siguiendo el camino marcado con los aros.
Estación 4: rol adelante sobre plano inclinado realizado con una colchoneta doblada y otra encima. El profesor se ubicará en esta estación colaborando con cada uno de los niños, y sobre todo con Lucas, a quien le podrá dedicar más tiempo.
Recursos auxiliares
Banco zueco;
Diez aros;
Tres colchonetas.
Evaluación
Realización del rol adelante
Observaciones
El niño con dificultades motoras y neurológicas manifestó tantos deseos por realizar bien las actividades que intentó una y otra vez hasta lograr el objetivo.
II. Niño de 5° grado
Federico padece desde hace cuatro años artritis reumatoidea juvenil sistémica, como es una enfermedad poco difundida, comentaré sobre ello.
La artritis no es una enfermedad exclusiva de la vejez, aproximadamente uno de cada 1000 niños tendrá artitis, generalmente antes de cumplir los 5 años. Todavía no hay vacuna o cura, pero sí un tratamiento efectivo.
El término “artritis” significa inflamación de las articulaciones. Los chicos con artritis tienen un sistema inmunológico o de defensa del cuerpo que parece estar alterado y causa inflamación sin razón. Esto puede corregirse con el desarrollo del niño y así detener la enfermedad.
Algunos chicos tienen fiebre, se brotan y sienten mucho dolor y rigidez matinal. No es una enfermedad contagiosa. No se conoce su causa, pero sí se sabe que es genética.
La artritis en los niños dura a veces unos pocos meses o un año, y después desaparece para siempre. Pero la mayoría de los niños tienen un curso “alternante” durante tres a diez años, o más dependiendo del tipo de artritis. Las exacerbaciones (brotes) son los momentos en los que la enfermedad está peor. Las remisiones son los momentos cuando parece que la artritis se fue. Con el tiempo, los brotes son menos severos y duran menos.
Formas de artritis
Forma Pauciarticular,
Forma Poliarticular,
Forma sistémica,
Espondilitis Anquilosante Juvenil,
Psoriática.
Clase de Educación Física
Federico estuvo mucho tiempo internado en un hospital o recostado en su cama, el volver a la escuela es una gran alegría.
Durante algunas clases de Educación Física participa en algún juego, otras no puede realizar ninguna actividad. Depende de los dolores que tenga. De todas maneras puede realizar el plan de ejercicios propuesto por su kinesiólogo acompañado por su celador. El celador cumple funciones muy importantes, ya que lo acompaña si se cae. Puesto que estuvo mucho tiempo entre algodones, si se cae llorará como si se hubiera fracturado. Lo acompaña si no puede realizar ninguna actividad o lo ayuda llevándole la silla para colaborar en su desplazamiento.
Concurre al gimnasio con su silla de ruedas; en otros momentos puede desplazarse.
Objetivos
Que el alumno:
Logre dirección de la pelota.
Reconozca su orientación y situación en el espacio.
Incorpore nociones de tiempo con la pelota en un pre-deportivo de handball.
Se divierta con el juego
Contenidos
Formas básicas de movimiento
Lanzamiento sobre hombro
Recepción
Puntería.
Metodología
Entrada en calor: “mancha cadena”, la adaptación consiste en que cuando lo tocan a Federico, no forma parte de la cadena general. Él se desplaza con su silla de ruedas y toca a sus compañeros que se integran a la cadena.
En parejas, lanzamiento sobre hombro con dirección al compañero describiendo parábolas y en línea recta. Recepción con dos manos. Dibujo de la trayectoria con tiza en el piso.
Lanzamiento con puntería a botellas de plástico, al aro que sostiene el compañero (vertical u horizontal) y a la mano o pie del compañero.
Juego “delegado rápido”, no se puede tener la pelota más de tres segundos en la mano, de lo contrario, pasa al otro equipo. La adaptación consiste en que para tocar a Federico, lo deben hacer a su cuerpo y no a la silla.
Recursos auxiliares
Pelotas,
Botellas de plástico,
Aros.
Evaluación
Lanzar y recibir la pelota,
dar en el blanco al realizar puntería.
Observaciones
Es de destacar la alegría de Federico en formar parte de un grupo, y cómo desarrolla sus estrategias para que no lo toquen en el delegado. Por ejemplo, pone la silla de espaldas y se oculta.
Es importante consultar al grupo cómo adaptar un juego, y entre todos, proponer diferentes opciones que se someterán a votación.
III. Niño de 7° grado
Parálisis en sus piernas. Juan usa silla de ruedas para desplazarse, y es llevado durante toda la clase de Educación Física por su maestro celador.
Objetivos
Que el alumno:
Conozca y aplique las reglas de handball,
aumente su coordinación motora,
coopere y respete a sus compañeros,
disfrute y se divierta realizando la actividad.
Contenidos
Mini-handball juego reglamento.
Metodología
Entrada en calor: lanzamiento y recepción al trote por todo el gimnasio en parejas, luego a pie firme.
Juego de mini-handball por equipos nociones de reglamento en momentos de equivocación. Juan contará con el apoyo de su maestro celador, quien lo llevará durante todo el partido. Juan pide la pelota a sus compañeros, levantando la mano y la lanza formando parte del equipo. Otras veces, jugará como arquero.
Recursos auxiliares
Pelotas
Evaluación
Situación de juego.
Pase y recepción a los compañeros.
Nociones de reglamento aplicado en el juego.
Observaciones
Juan cuenta con su celador, quien le proporciona la ayuda necesaria, ya que de la cintura para arriba no tiene problemas.
El grupo valora su esfuerzo y se ganó un lugar en el mismo.
Consideraciones finales
Los niños con necesidades especiales son un reto para el profesor de Educación Física, quien en primera instancia debe, por todos los medios, agotar las posibilidades para explotar las capacidades de cada alumno.
La disminución de capacidades físicas no es causa alguna para separar alumnos de las clases ni aconsejar su pase al sistema de escuelas domiciliarias. Esto no significa que tengamos que elaborar todas las pautas de las clases en pos de estos niños, solamente debemos adaptar los aspectos indispensables, facilitando así su integración, y forzándolo a explotar sus capacidades.
El trabajo a desarrollar debe ser integral, desde todos los ámbitos de la educación, incluyendo a su familia y a todo el personal que esté en contacto con ellos.
La integración es la piedra angular del trabajo con los chicos con necesidades especiales, y a eso debe apuntar el sistema educativo en su conjunto, porque una vez integrado, desplegará al máximo todo su potencial.
(Leo Buscaglia: “Los discapacitados y sus padres”)“Durante ese tiempo que trabajé con discapacitados, aprendí mucho sobre ellos y sus problemas reales y únicos. Descubrí que eran en su mayoría, personas fuertes, constantes, sensibles e inteligentes. Aprendí a respetarlos. Ellos me enseñaron mucho sobre la fortaleza y la dignidad humana”.
Bibliografía consultada
ASAMBLEA GENERAL DE LAS NACIONES UNIDAS, “Programa de acción mundial para las personas con discapacidad”, Resolución 37/52, New York, EE.UU., 1982.
BUSCAGLIA, L. “Los discapacitados y sus padres”, Buenos Aires EMECE, 1990.
HOSPITAL DE PEDIATRÍA DR. JUAN P. GARRAHAN – FUNDACIÓN REUMATOLÓGICA ARGENTINA DR. OSVALDO GARCÍA MORTERO, “Artritis Reumatoidea Juvenil, Cartilla para padres y docentes”.
NÚÑEZ, B. “Nuestro hijo discapacitado”, Ed. Coquena. Grupo Editor SRL., Argentina, 1994.
VIDAL y MOJÓN, “Adaptaciones curriculares. Guía para su elaboración”, capítulos III y IV.
revista
digital · Año 14 · N° 140 | Buenos Aires,
Enero de 2010 |