Deporte y mercado, los límites de una relación social | |||
Profesor de Educación Física (Argentina) |
Pablo Vallejo |
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Resumen En este artículo nos proponemos como primer paso entender al deporte como mercancía. Es decir, porque el deporte como tal y todos los elementos de su entorno, se compran y venden. Se compran remeras, entradas a espectáculos, técnicos y jugadores hasta llegar a las apuestas ilegales o a la ruleta financiera de las bolsas mundiales. Todo al servicio de la oferta y la demanda. Entender esta relación del deporte dentro de un sistema comercial y, por tanto, dentro de una relación social creada por los hombres a partir del modo en que producen nos ayudará a entender cuales son las características intrínsecas del fenómeno deportivo. Palabras clave: Deporte. Mercado. Mercancía |
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http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 14 - Nº 133 - Junio de 2009 |
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“Al médico, al jurisconsulto, al sacerdote,
al poeta, al sabio, los ha convertido
en sus servidores asalariados."
K. Marx y F. Engels, Manifiesto Comunista
Partiendo de la premisa de esbozar una teoría pedagógica al interior de la escuela, desde la clase de Educación Física, y que sirva como canal de desarrollo de la conciencia de los estudiantes en cuanto al contexto social en el que viven, continuamos con la elaboración de un contenido curricular para Educación Física en el nivel Secundario.1
Mencionábamos que el objetivo “era desmitificar al deporte en cuanto a su relación contradictoria con el mercado mundial”.2 Por ello comenzamos a ejemplificar algunos elementos que demuestran su vinculación y algunas de las consecuencias dentro del contexto de derrumbe económico.
Desde esta perspectiva nos interesa ahondar en un campo que vaya más allá de “(…) discursos3 (…) (que) se encargan de brindar estadísticas y datos aislados de los montos que mueven el fútbol profesional (pero) no se disponen de análisis que intenten situar el rol que el deporte ocupa como mercancía en el sistema capitalista”.4
En este artículo nos proponemos como primer paso entender al deporte como mercancía. Es decir, porque el deporte como tal y todos los elementos de su entorno, se compran y venden. Se compran remeras, entradas a espectáculos, técnicos y jugadores hasta llegar a las apuestas ilegales o a la ruleta financiera de las bolsas mundiales. Todo al servicio de la oferta y la demanda. Entender esta relación del deporte dentro de un sistema comercial y, por tanto, dentro de una relación social creada por los hombres a partir del modo en que producen nos ayudará a entender cuales son las características intrínsecas del fenómeno deportivo.
¿Qué es una mercancía?
“La mercancía es, en primer termino, un objeto externo, una cosa apta para satisfacer necesidades humanas, de cualquier clase que ellas sean.“5 En el caso que nos toca digamos que la “necesidad deportiva” es la vestimenta de un equipo, la pelota del deporte que sea o cualquier otro objeto deportivo deseado por los fans. Y como es algo deseado nadie sabe que se desea más. Y entonces se produce para satisfacer esa “necesidad”, que a su vez compite con otras necesidades, algunas más elementales que otras (una remera no se come y con la comida no se juega dice el dicho popular…)
Pero además una mercancía “es una forma, una forma social del producto del trabajo en determinadas relaciones particulares de producción”.6 Es necesaria esta aclaración porque las cosas, el deporte entre ellas, no son algo eterno o innato de la humanidad. No siempre las cosas se compraron y vendieron (no siempre fueron mercancías o valores de cambio en términos económicos) como así tampoco el deporte existió siempre en la humanidad. Por eso las cosas no valen por su utilidad sino por como los hombres se organizan para producir.7
Entonces en la sociedad capitalista el deporte se convierte en una mercancía más, es decir, es una mercancía el atleta; son mercancías todos los implementos deportivos como la ropa, el calzado, las instalaciones deportivas, etc.; y es una mercancía el espectáculo deportivo en sí mismo. Por tanto, si son mercancías tienen una utilidad (valores de uso) y además poseen valor (valor de cambio) y son susceptibles de ser cambiadas por otras mercancías, o sea, de ser comercializadas.
Aquí se encuentra la base social del deporte. Y como tal, este entra en crisis junto a las crisis más generales de la economía y de la organización social que la sostiene. El mundo no va para un lado y el deporte para otro. Los monopolios que son dueños de los implementos deportivos, los negocios de televisación, etc. son sostenidos por una estructura. La AFA8 es una asociación que está involucrada en todos los negocios del mundo del futbol e incluso los sindicatos de futbolistas, para poner el ejemplo más popular.9 Hacia fines del año pasado la Federación Inglesa de Fútbol, a través de su presidente Lord Triesman, “ha instado a los clubes británicos a revisar sus sistemas salariales sin olvidar que las entidades profesionales de este deporte en Gran Bretaña deben alrededor de 3.000 millones de dólares. Los sueldos en el país anglosajón han alcanzado un ritmo de crecimiento del 12% anual, todo un dilema para los clubes.10 Aquí se aplica la misma lógica que en cualquier otra empresa que el patrón esté endeudado y tenga que descargar la crisis. Alguien la tiene que pagar. En la empresa es el trabajador, en el deporte el atleta.
El final de este tipo de relación social entre el deporte y el mercado se abrirá de la mano de quienes son los verdaderos protagonistas del deporte: los jugadores, a través de la reorganización de la base social que hoy lo sostiene, un camino para proyectar las capacidades humanas en toda su potencialidad y para impulsar el deporte a gran escala.
Para el Brasileño Robinho, mientras tanto, no habrá consuelo acerca de sus quejas: “En el Real Madrid me trataron como mercancía”.11
Notas
Las primeras ideas fueron desarrolladas en el articulo “Deporte y crisis mundial, propuesta curricular para la educación física secundaria” en http://www.efdeportes.com/efd131/el-deporte-y-la-crisis-mundial.htm Nº 131.
Ídem.
El autor habla de discursos periodísticos específicamente. Creemos válido señalar aún más esta característica en el campo de la Educación Física que posee un campo de investigación mucho más limitado.
Gastón Julián Gil. Monopolio televisivo y “gerenciamiento” deportivo en http://www.efdeportes.com/efd26a/futbolm.htm Nº 26
Marx, Karl. El Capital. Ed. Fondo de la Cultura Económica. 1986
Rieznik, Pablo. Las formas del trabajo y la historia. Ed. Biblos 2003
Para remitirse al análisis económico de la mercancía y su forma de relación en el modo de producción capitalista sugerimos al lector no especializado el libro de Pablo Rieznik antes citado.
Asociación del Fútbol Argentino.
Un pequeño ejemplo se puede leer en “Por qué se fue Marcelo Bielsa” en Prensa Obrera Nº 869. 23/9/2004
En www.elpais.com 9/10/08
En www.lanacion.com.py 29/11/08
revista
digital · Año 14 · N° 133 | Buenos Aires,
Junio de 2009 |