Importancia de la preparación psicológica en el rendimiento futbolístico |
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Formación: Facultad de Ciencias, Universidad Central de Venezuela Colegio Nacional de Entrenadores (Federación Venezolana de Fútbol) Entrenador de Universidad Central de Venezuela (Monitor de Fútbol Base) 1989-93 Colegio Jefferson (Entrenador adjunto) 1998-2003 Centro Italiano Venezolano A.C. (Entrenador) 2000, actual |
Lic. Pedro Alonso García (Venezuela) |
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Resumen Hoy en día las competiciones deportivas exigen que no solo la preparación física, las condiciones técnicas y el componente táctico sean suficientes para obtener resultados deportivos aceptables de envergadura. Por lo que se hace indispensable la necesidad de un cuarto tipo de preparación: la Psicológica. Esta forma de preparación busca lograr el estado de disposición mental y psíquica aceptable en los jugadores para afrontar las competiciones. En el Fútbol actual muchos autores insisten en que tanto entrenadores como instructores o preparadores deberían replantear los objetivos de los deportistas de forma que les motiven y resulten más realistas y alcanzables acorde a sus posibilidades y esfuerzo personal. Igualmente revisaremos conceptos importantes como el estado de motivación y autoestima. Palabras clave: Preparación psicológica. Fútbol. Rendimiento.
Ponencia presentada en el Congreso de Ciencias Aplicadas al Fútbol UPEL-IPC en las instalaciones de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador-Instituto Pedagógico de Caracas, Venezuela del 4-8 de abril de 2006. |
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http://www.efdeportes.com/ Revista Digital - Buenos Aires - Año 13 - Nº 130 - Marzo de 2009 |
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Introducción
La preparación psicológica implica principalmente el manejo de habilidades y herramientas durante los entrenamientos y competiciones con el objetivo de ayudar al jugador a mejorar su capacidad de rendimiento, a disfrutar de la participación en el deporte y realizar actividades que vayan más allá de éste ayudándolos a desarrollarse mejor.
Los factores y capacidades psicológicas forman parte integrante de las variables que determinan el rendimiento deportivo: por tanto, deben someterse a una programación planificada, en interdependencia con los otros componentes como son los factores físicos, ambientales y sociales.
Hay numerosos autores que plantean que tanto entrenadores como instructores deberían darle prioridad a los objetivos del jugador de forma que éstos le motiven y resulten más realistas y alcanzables acorde con sus posibilidades y esfuerzo personal, y analizar también conjuntamente con el mismo, su motivación y estado de autoestima. Igualmente otros destacan la importancia del desarrollo del entrenamiento mental condicionado por diferentes variables con respecto a sus cualidades/aptitudes que hacen que el deportista asuma distintos roles durante el entrenamiento o competencia donde esté interviniendo.
Objetivos de la preparación psicológica
Optimizar el nivel de motivación
Personalidad del atleta (Extroversión vs. Introversión).
Entorno social.
Canalizar las emociones
Falta de agresividad (justifica bajo rendimiento).
Dominio de la agresividad
Agresividad dentro de los parámetros del reglamento.
Preparación individual (garantiza agresividad controlada).
Agresividad como propuesta a la frustración.
Otros autores interpretan las capacidades psicológicas como la forma de influencia en cuanto a las reacciones para controlar todas las variables que integran los componentes de la personalidad condicionada por su comportamiento, temperamento, concentración y destreza durante las diferentes fases de la competencia.
La preparación psicológica continua
Se considera que hay tres objetivos fundamentales que deben ser objeto de un verdadero trabajo básico. Constituyen la base de una formación psicológica para el futbolista:
Optimizar el nivel de motivación y autoestima.
Canalizar las emociones.
Dominar la agresividad.
Captación de la motivación
La motivación es un proceso dinámico susceptible de ser modificado por una estrategia de refuerzo. Es por consiguiente, un principio activo que organiza conductas y justifica los esfuerzos, puede clasificarse en:
Motivación intrínseca: la necesidad de realización personal buscada por el deportista (ser competente e independiente)
Motivación extrínseca: conjunto de causas externas que convalidan socialmente su competencia y le otorgan un reconocimiento como deportista (recompensas que alteran el nivel de motivación intrínseca)
Estrategias pedagógicas
Evitar desequilibrios entre los dos componentes de la motivación mediante refuerzos de la motivación intrínseca.
Implicar al máximo a los futbolistas considerándolos como “centros de desiciones activas.”
Proporcionarles oportunidad para expresar sus opiniones y asociarlos a la toma de decisiones, con el fin de aumentar su sentimiento de independencia.
Se trata de que el jugador llegue a ser consciente de la importancia de su contribución en el deporte.
Lograr que cada uno este claro de su función, de su puesto y de su aporte al rendimiento colectivo.
Todas estas formas de retracción reafirman a los jugadores acerca de su competencia personal, y son adecuadas para realzar el nivel de motivación intrínseca.
Autoestima
Debe evitarse deteriorar la autoestima y reforzar activamente el sentimiento de competencia del futbolista.
Sabemos que la autoestima funge como la creencia interna de que uno es capaz de hacer algo, basándose en la idoneidad de las propias capacidades para lograrlo con éxito, “Es el centro de su universo personal”.
Recomendaciones
Un punto importante consiste en ayudar al jugador a fijarse objetivos personales y las diferentes fases que permiten alcanzarlos. Al incitarles a referirse a sus objetivos personales y a su programación, los atletas se mostrarán más motivados para conseguir los objetivos fijados y la mejor forma de hacerlo es evaluando su trayectoria deportiva en cuanto a mejoras en el aprendizaje y no en cuanto a obtención de logros.
De forma que el este vea que mejora, sin estar obsesionado por tener buenos resultados. Las motivaciones del equipo no pueden situarse en el mismo plano que las motivaciones individuales, pues un grupo de jugadores es un conjunto cuyas propiedades son diferentes a la suma de las partes. Podemos concluir en que el deseo de éxito del grupo y el deseo de evitarle el fracaso representan las motivaciones esenciales.
Conclusiones
Podemos resumir diciendo que el entrenamiento psicológico debe buscar el respeto de las consignas, la exigencia en el trabajo durante el mismo, la claridad de las correcciones, el afianzamiento de la confianza y la consecución del éxito.
Es importante recordar que el entrenamiento y la integración del componente psicológico se conciben de modo diferente en función de la competición y de la edad los jugadores. Por ejemplo, renovar las motivaciones en los jóvenes se traduce en un desarrollo de la confianza, mientras que para los adultos, este desarrollo pasa por una responsabilidad directa.
Es aquí donde cobra importancia relevante el fortalecimiento de los principios psicológicos que ayuden a los futbolistas a mejorar su capacidad de rendimiento y a disfrutar de la participación en el deporte.
Bibliografía
Ammazzalorso, A. (Ita) (2002) La preparazione psicologica del calciatore. Tesi di fine Studio del Corso Master 2001-02. www.alleniamo.com, Italia.
Righetti, U. (Ita) (2004) La Motivazione: le componente de base condizionanti la prestazione sportiva individuali e colletiva. www.alleniamo.com, Italia.
Roffé, M. (2000) El componente psicológico en la práctica de los deportes y las actividades físicas. EFDeportes.com, Revista Digital – Buenos Aires, Nº 23. http://www.efdeportes.com/efd23b/dsalud.htm
Roffé, M. (2002) Pautas psicológicas para entrenadores técnicos, tácticos y físicos de fútbol. EFDeportes.com, Revista Digital – Buenos Aires, Nº 50. http://www.efdeportes.com/efd50/pautas.htm
revista
digital · Año 13 · N° 130 | Buenos Aires,
Marzo de 2009 |